Tensei Shitara Ken Deshita (NL)

Volumen 3

Capitulo 1: Donde Van Los Gatos, Pronto Vendran Problemas

Parte 2

Me pregunto si alguien se daría cuenta si lo dejáramos en paz…

Regresamos a la ciudad, después de habernos saciado de la playa. Aún necesitábamos una habitación para pasar la noche.

¿El palacio de arena de Fran? Lo dejamos ahí. Fran parecía que estaba a punto de llorar cuando comencé a destruirlo. Sin embargo, logramos volver a llenar el agujero de Urushi con algo de magia.

El sol ya se estaba poniendo; habíamos pasado más tiempo en la playa de lo que esperaba. Nos dimos por vencidos en las posadas que bordean la carretera principal y decidimos buscar en los callejones una oportunidad de alojamiento.

Estábamos vagando por los callejones cuando Fran notó algo.

Maestro.

Lo sé.

O mejor dicho, a alguien.

Oímos el sonido de pasos detrás de nosotros. Sonaba como si nos estuvieran siguiendo cuando entramos en uno de los callejones.

Los pasos pertenecían a dos hombres que se encontraban a una distancia razonable de nosotros. No se molestaron en ocultar su presencia, revelando su ineptitud. Miré hacia atrás y vi que ni siquiera se escondían en las sombras. Identificarlos confirmó sus bajas estadísticas. Eran un poco más fuertes que un goblin promedio, en el mejor de los casos.

¿Debería matarlos?

Puedo ver por qué… pero espera. Puede que no sean hostiles.

Existía la posibilidad de que fueran parte de una pandilla local y simplemente hubiéramos entrado en su territorio. Quería asegurarme antes de que hiciéramos algo decisivo.

Vayamos a un lugar tranquilo. Mmm.

Aún tomaríamos represalias si trataran de hacer algo gracioso.

Urushi, quédate en las sombras. Pero prepárate.

“Arff”.

Fran dio un giro hacia un conveniente callejón sin salida. Los dos hombres bestia Gatos Azules se revelaron, justo en el momento justo. No tenían idea de que estaban siendo atraídos directamente a una trampa.

“¿Estás perdida, niña?”

“Te llevaremos de regreso con tus padres”.

Su invitación fue casual y amable; estaban acostumbrados a esto. Usaron palabras dulces para adormecer a sus víctimas con una falsa sensación de seguridad.

“Estoy bien”.

“Vamos, no hay necesidad de ser tímida”. Identifiqué a los dos hombres de nuevo. Definitivamente débiles.

Sus habilidades y estadísticas no eran rival para Fran. A pesar de ser un Luchador y un Comerciante, tenían Robar, Capturar, Asesinar y Torturar en sus listas de habilidades. Con habilidades como esa, no había forma de que los dos hombres bestia llevaran vidas respetables.

“Es fácil perderse en esta parte de la ciudad”. “Apártate”.

“Ya, ya…”

Percibir peligro se activó. No había posibilidad de que fueran buenos samaritanos malhumorados. “Acércate más y te cortaré”.

“¿Qué?”

“No será bonito. Esta es su última oportunidad de irse”.

Fue justo después de la advertencia de Fran que los dos hombres abandonaron todas sus pretensiones y se echaron a reír.

“¡Gyahahaha! ¡Oh, estoy tan asustado!” “¡Cállate y ven aquí!”

“Oye, tómalo con calma. No quieres dañar la mercancía”. “¡Sé lo que estoy haciendo!”

Todos los hombres bestia Gatos Azules que hemos conocido hasta ahora habían sido unánimemente de la variedad escoria. Hasta ahora, muy típico.

Fran me desenvainó sin decir una palabra. “¿Qué? ¿Quieres pelear?”

“¡Deja de actuar duro, mocosa!”

Los dos hombres se burlaron de ella. También podrían disfrutarlo mientras pudieran. Sus burlas pronto se convertirían en súplicas por sus vidas. Estaba listo para dar rienda suelta a estos cabrones que planeaban vender a Fran como esclava.

“Se los advertí”.

Empecé a lanzar mis hechizos con la señal de Fran. Los dos hechizos se manifestaron al mismo tiempo gracias a Mente Doble.

Muro de piedra.

Silencio.

Bloqueé su ruta de escape con un muro de magia de tierra. Los dos hombres no podrían huir ahora.

También insonoricé nuestra área circundante con magia de viento. Nadie sería capaz de escuchar nada.

Ni siquiera sus gritos de ayuda.

Los dos hombres se sorprendieron por el repentino lanzamiento de magia. “¿E-Eh?” “¿Q-Qué está pasando?”

Ninguno de ellos estaba preparado para el combate. Eran debiluchos lamentables después de todo, que solo estaban acostumbrados a atormentar a objetivos que eran más débiles que ellos.

No los mates.

¿Por qué no?

Fran ya estaba furiosa ante la perspectiva de la esclavitud, por lo que parecía decepcionada de que le estuviera pidiendo que los perdonara.

Tengo algunas preguntas para nuestros amigos esclavistas. Bien.

Al momento siguiente, Fran se lanzó hacia adelante. “Hmph”.

“¡Gah!”

“Ja”. “¿Bwuh…?”

Y… ese es el final de ese encuentro.

Los hombres bestia cayeron al suelo, inconscientes. “¿Ahora qué?”

Empezaremos atándolos.

Hice una cuerda usando Crear Hilo de Maná y los até con ello. Los hilos de maná individuales no eran fuertes por sí mismos, pero eran tan resistentes como una cuerda una vez que los hilabas juntos. Les até los tobillos y luego les puse los brazos al frente y les até las muñecas.

Estaba interesado en los antecedentes de los hombres bestia. Pensamos que eran Gatos Azules cuando mencionaron sus planes de vender a Fran. Eran esclavistas que vendían víctimas como esclavas en contra de su voluntad, al igual que los bastardos que tenían a Fran cuando la encontré.

Dars también era una ciudad portuaria. No era demasiado exagerado pensar que los traficantes de esclavos de todo Granzell se reunían aquí para obtener presas fáciles; después de todo, tenían acceso inmediato a los barcos. Fran también había mencionado que la subieron a un barco de esclavos.

Los esclavistas Gatos Azules eran los archienemigos de Fran. También estaban en mi lista negra, por supuesto. Podríamos terminar enfrentándonos a ellos en cualquier momento, así que quería tener en mis manos cualquier información que estuviera disponible. Ahora era un buen momento para hacerlo.

Y ahí lo tienes.

“Ya veo”.

Estuve a punto de sugerir hacer un clon de mí mismo para poder interrogar a los dos hombres mientras Fran vigilaba… pero Fran tenía otros planes. Empezó a patear a los dos hombres para despertarlos.

“Despierten”.

“Urgh… ¿Q-Qué está pasando?” “¿Qué demonios…?”

Los hombres recobraron el sentido después de una buena cantidad de patadas. Todavía no sabían lo que les había pasado. ¿Quién podría culparlos? Fran los derribó en menos de un segundo.

“¡Qué—oye! ¡¿Qué significa esto?!” “¡Pequeña perra! ¡¿Qué nos hiciste?!”

Tuve que reconocérselo a estos dos. Tuvieron cojones para empezar a gritarle a Fran a pesar de sus circunstancias. Tal vez su ignorancia les permitió hacer precisamente eso.

Fran ignoró sus gritos y llamó a Urushi. “Sal, Urushi”.

“Woof”.

“¡Eek!”

“¡Woof!”

Sería difícil mantener los nervios cuando un lobo gigante de tres metros de altura aparece justo en frente de ti. Su ira ahora fue reemplazada por miedo mientras intentaban escapar desesperadamente. Sin embargo, apenas podían ponerse de pie con las extremidades atadas.

“Tengo algunas preguntas para ustedes”.

A uno de los hombres no le gustó que le dieran órdenes y recuperó los nervios, aunque solo fuera por un segundo.

“¡Perra! ¡Tú no eres mi jefe!”

Realmente debe ser un esbirro humilde si no podía notar que su vida estaba en peligro. “¡No esperes dejar la ciudad en una pieza después de hacer esto con—hurk!”

Vaya, Fran había pateado al comerciante que protestaba justo en la cara. La sangre brotaba de su nariz como un grifo roto. Nunca antes había visto a nadie sangrar de esa manera.

“Cierra tu maldito hocico. Yo estoy haciendo las preguntas aquí”.

Los hombres cedieron al ver lo despiadada que era Fran. Estaba hirviendo de furia silenciosa, lo cual era bastante justo, ya que tenían más asuntos pendientes con los traficantes de esclavos Gatos Azules que yo. Decir que los odiaba no sería una exageración.

Miró a los hombres bestia con ojos fríos y volvió a preguntar. “¿Son esclavistas?”

“H-Heh, no sé de lo que estás hablando”. “S-Somos comerciantes honestos”.

Sí claro. No necesitaba Esencia de Falsedad para ver a través de su descarada mentira.

Son esclavistas, Fran. No hay duda de eso.

“¿Dónde tienen a sus esclavos capturados en esta ciudad?” “Dije que no sé de qué estás hablando”.

Está mintiendo otra vez.

Realmente no sabían cuándo rendirse.

“Mmm. ¿Están confabulados con otros traficantes de esclavos en la ciudad?” “¡Te lo digo, no sé de lo que estás hablando!”

Sigue mintiendo.

Los esclavistas se las arreglaban para mentir a pesar de la intimidación de Fran. Impresionante. Dicho esto, su persistencia garantizaba que no saldrían de aquí de una pieza.

Fran frunció el ceño. Ella no estaba contenta. “Si me dicen lo que quiero saber, no les pasará nada malo. Probablemente”.

“Si tan solo supiéramos lo que quieres saber”.

“Él tiene razón. Dejaremos que te alejes y trataremos esto como un gran malentendido si nos dejas ir ahora”.

“… Urushi”. “¡Grrrr!”

“¡Aiee!”

Ahora que las gigantescas mandíbulas de Urushi estaban justo en frente de los rostros de los criminales, Fran continuó desapasionadamente.

“Mi lobo ama comer idiotas. En especial, le encanta comerse las tripas mientras aún están vivos”. “¡Grrrr!” Urushi siguió el juego, gruñendo bajo en su garganta y lamiendo la cara del luchador. Era

casi como si estuviera diciendo: ‘Tus tripas se ven deliciosas’. El hombre debe haberlo tomado de esa

manera, porque su rostro se puso pálido y comenzó a temblar. “Si no quieres que te coman vivo, empieza a hablar”. “¡No sé lo que—gyaa!”

Fran apuñaló al Luchador en el muslo. Lentamente me retorció para causar el máximo dolor. “¡Gyaaaa!”

“Oye, ¿estás bien? ¡Pequeña perr—aaargh!”

“¿Tienen una discapacidad de aprendizaje?” “Aieee…”

Volvió a patear la cara del Comerciante. Su nariz ahora estaba doblada en un ángulo extraño. “Sanación mayor”.

“¿Qué?”

“¿Un hechizo de curación avanzado…?”

Ella me sacó de la pierna del Luchador y la curó; la herida abierta se cerró en un instante.

El hombre comenzó a mirar esperanzado. Esta niña no quería matarlos. No había forma de que ella se atreviera a hacerlo. Dadas las circunstancias, no podía culparlos por querer creer en este conveniente engaño.

Lo que Fran dijo a continuación convirtió su esperanza en desesperación. “Agradable, ¿no es así? No morirás fácilmente ahora”.

“¿Qué?”

“Ni siquiera si hago esto. Flecha de fuego”.

“¡Guaaaah!” El Luchador bramó de dolor después de recibir el hechizo de fuego de Fran a quemarropa. “Sanación mayor”.

Su siguiente hechizo recuperó las manos del Luchador, que se habían convertido en cenizas. Ella terminó quemando la cuerda que ataba sus manos juntas, pero estaba seguro de que estos dos no irían a ninguna parte.

“No podrán morir a menos que yo lo permita”. “No”.

“Eek”.

Un chillido de angustia escapó de sus labios. No podían huir de esta chica. Y mientras tuviera maná para lanzar sus hechizos curativos, tampoco podrían morir. Les esperaba una eternidad de tormento.

La realización debe haber caído en ellos en un terrible instante. “¡H-Hagamos un trato! ¡Tenemos dinero! ¡Solo dime tu precio!” “No necesito dinero”.

“Entonces, ¿por qué haces—?”

“¿De verdad eres tan tonto? Solo dime lo que quiero saber”. “Hee hon no—¡oogfh!”

Esa fue la tercera patada en la cara del Comerciante. Sus dientes frontales estaban aplastados ahora.

“Responde mis preguntas”.

Finalmente entendieron su situación y comenzaron a responder las preguntas de Fran.

Al parecer, este pueblo albergaba una operación esclavista oculta. Los traficantes de esclavos enviaban a sus víctimas a Dars para que fueran enviadas a otros países. Anteriormente tenían su base en Bulbola, pero una operación encubierta hace cinco años los había expulsado de la ciudad.

“Las autoridades nos atraparían rápidamente si los vendiéramos en Granzell… y-y esos de Raydoss pagan buen dinero por los esclavos”.

“H-Hut nhaw—”

El Comerciante no era tan elocuente con la cara rota, pero pudimos entender la esencia de lo que estaba tratando decir.

Aunque Raydoss era el destino final de los esclavos, era difícil llevarlos allí directamente desde Granzell, ya que los dos países estaban en guerra entre sí. Tenían que hacer una parada en Seedrun, donde luego serían enviados a Raydoss.

“Seedrun… Nunca he oído hablar de eso”.

“E-Es una pequeña nación insular. Hay un vacío de poder porque el rey acaba de dimitir, sumiendo al país en el caos. Hace que sea fácil para la gente como nosotros moverse”.

Ya veo. Eso es lo que suele suceder en los países que están pasando por un cambio de gobernantes.

Para evitar las naves patrulleras de Granzell, en el pasado tuvieron que adentrarse en aguas abiertas. Eso tenía su propio conjunto de problemas, ya que generalmente se encontraban con monstruos marinos gigantes que podían destruir barcos pequeños. Los traficantes de esclavos tampoco podían usar embarcaciones más grandes, ya que eso llamaría la atención de las autoridades.

Supuse que Fran fue capturada en un país diferente y enviada a Bulbola en barco. Cuando ocurrió la redada en la base de Bulbola, los traficantes de esclavos se trasladaron a Granzell. Iban de camino a Dars cuando se topó conmigo.

Podrían haber estado planeando venderla en Alessa, pero lo dudaba. En los últimos diez años, la mayoría de ellos fueron enviados a Dars para ser enviados a Raydoss. Los esclavos se vendían a buen precio allí. Era muy probable que la caravana de Fran estuviera tomando la misma ruta.

Los hombres nos dijeron la ubicación de la base oculta, la cantidad de cómplices y la cantidad de esclavos que se mantenían allí. Tenían alrededor de diez huérfanos secuestrados de la ciudad.

“T-Te dijimos todo. Nos dejarás ir ahora, ¿verdad?” “¡Cambiemos nuestros métodos!”

Lo cual fue un buen pensamiento, pero…

Cuchilla de Viento.

Les corté la cabeza con una cuchilla de viento.

Si los dejamos ir ahora, advertirán a sus amigos esclavistas de la llegada de Fran. Preferiría no tener un sindicato de esclavistas apuntándonos a dondequiera que fuéramos. Eran cabrones que vendían niños. El mundo sería un lugar mejor sin ellos.

Guardé los cadáveres en la Dimensión de Bolsillo; mi inventario se estaba volviendo más desordenado con cada día que pasaba.

“Gracias, Maestro”.

No fue nada. Ni lo menciones.

“¿Ahora qué?”

Bueno, ¿qué quieres hacer, Fran?

“Limpiar las calles, por supuesto”.

Sí. Por supuesto que ella querría hacer eso.

Quería que Fran esperara en algún lugar mientras Urushi y yo nos ocupábamos del problema… pero ya había usado mi clon para cocinar en la playa hoy. Lo había mantenido durante bastante tiempo, por lo que solo podía usarlo nuevamente pasado mañana.

Además, Fran nunca dejaría pasar la oportunidad de matar a unos asquerosos esclavistas.

Sin embargo, tendrás que esperar hasta la noche.

“De acuerdo”.

Realmente espero que podamos encontrar un lugar para quedarnos para entonces.

Afortunadamente, poco después encontramos una habitación en una posada barata, donde esperamos a que cayera la noche para hacer nuestra redada.

Eran las últimas horas de la noche. Los residentes de la ciudad estaban dormidos y los borrachos se dirigían a casa arrastrando los pies.

Vamos.

“Mmm”.

Estábamos cerca de la base de operaciones de la que nos habían hablado los traficantes de esclavos. Combinamos la magia oscura de Urushi con nuestras habilidades de sigilo, por lo que había poco riesgo de que alguien nos viera, pero hice que Fran usara una máscara en caso de que se revelara nuestra fachada. Estábamos listos.

El escondite era un edificio que daba al distrito del puerto, su primer piso era un almacén y su segundo piso un apartamento. El edificio en sí parecía discreto.

Sin embargo, sentí varias presencias desde el interior de la casa. Inspeccionando la casa más de cerca, encontré a dos guardias a cargo de la entrada. Uno era un torturador sádico y el otro un asesino sádico. Esa era más información de la que necesitaba.

Nos notarán si tardamos demasiado.

“Entonces tendremos que ir rápido”. “Woof”.

Sí, primero nos ocuparemos de los guardias.

“¡Mmm!”

Fran hizo su movimiento. Silencié sus pasos con Silencio para que pudiera correr a toda velocidad. Cortó a los dos guardias para deshacerse de ellos. Lo último que vieron fue la sombra de Fran. Inmediatamente almacené sus cadáveres. No pudimos hacer nada con la sangre en el suelo, pero estaba oscuro, por lo que nadie se daría cuenta.

Ahora teníamos que pensar en la mejor manera de investigar el edificio.

Comencemos con el último piso.

“De acuerdo”.

Cargar de cabeza a través de la puerta principal sería una tontería de nuestra parte.

Fran saltó con Caminata Aérea y aterrizó en el techo sin hacer ruido. Durante nuestra pelea con el Lich, P.A. usó Caminata Aérea combinado con algunas otras habilidades para crear Manipulación de Viento. Sonaba complicado, pero era lo suficientemente fácil de usar una vez que lo probamos. No creo que Fran sintiera mucha diferencia cuando lo usó.

La contra era que costaba más maná de usar. La combinación de varias habilidades en una habilidad avanzada tenía el costo de que fuera más difícil de usar. Solo tendríamos que acostumbrarnos.

Fran aterrizó a cuatro patas y rodó hacia adelante, usando su cuerpo como resorte para disipar la fuerza del impacto. También hizo un aterrizaje silencioso. Ella realmente tenía la gracia de un gato.

Comencemos con esta habitación. Está bien.

Entramos en el ático a través de una ventana. Usé Silencio para cancelar el sonido de cristales rotos.

Había una figura en la cama, dormida, que no se había percatado de nuestra llegada. Una identificación rápida reveló que era uno de los esclavistas. Intimidar y Estafar figuraban bajo sus habilidades, y tenía títulos como Fraude y Comerciante de esclavos. Definitivamente no es una buena persona.

Hostil.

Mmm.

Fran me apuñaló sin contemplaciones en el corazón del esclavista dormido.

“¡Hrk!” El dolor repentino lo despertó, pero sus gritos fueron silenciados gracias a mi hechizo. Tomó su último aliento con mi espada alojada en su pecho.

Lo guardé antes de que pudiera empezar a derramar sangre, para no dejar ninguna evidencia. Me sentí como un asesino profesional.

Creo que los esclavos están en el sótano, pero…

“Tendremos que limpiar este piso antes de ir allí”.

Eso facilitaría nuestra operación de rescate.

¡Nada como un antiséptico para limpiar una infección! Continuamos nuestra carrera sigilosa, deshaciéndonos silenciosamente de todos los esclavistas que pudimos encontrar. No tuvimos ningún problema ya que todos estaban dormidos.

Ahora éramos mucho más fuertes gracias a nuestra incursión en la mazmorra de los no-muertos. No habríamos tenido ningún problema incluso si hubiéramos ido con un asalto frontal. Aun así, no queríamos dar la alarma. Nuestros enemigos seguían siendo un dolor de cabeza si se coordinaban entre sí, y algunos de ellos podrían terminar huyendo de la escena. Peor aún, podrían incluso tomar a cualquiera de los niños que intentábamos salvar como rehenes.

Este es el último.

Nos acercamos a la última habitación en el segundo piso después de acabar con ocho esclavistas. Nos había llevado cinco minutos.

Sin embargo, había algo extraño en esta habitación. Podía ver la luz saliendo de ella. Solo había una presencia dentro de la habitación, pero debía estar despierta. Incluso si nos escabullíamos usando Silencio, aún existía la posibilidad de que nos notara.

Urushi, ¿puedes encargarte?

“¡Woof!”

En silencio, ¿de acuerdo?

“Awoo—”

Poco tiempo después, Urushi regresó. Eso fue rápido. ¿Ya terminaste? “¡Arf!”

No habíamos oído ningún sonido mientras esperábamos a Urushi. Ser un lobo que vivía en las sombras tenía sus ventajas.

Entramos en una habitación que parecía una especie de estudio. Nos acercamos al escritorio y encontramos al hombre bestia Gato Azul muerto. Urushi había usado su Magia de Sombras para matar al hombre sin hacer ni un sonido.

Su atuendo era más apropiado que el del resto de los esclavistas de los que nos habíamos deshecho.

Debe haber sido un empleado o algo así.

Muy bien, veamos qué había guardado en su escritorio. Quizá podamos encontrar algo de suciedad.

Rebuscamos y encontramos algunos expedientes y libros de contabilidad. Contenían registros de los esclavos que habían sido enviados a Raydoss. Creo que también había alguna información sobre los tratos que tenían en Seedrun. Junto a los nombres de Suarez y Julius estaban los números diez y veinte millones, respectivamente. ¿Eran estos sus precios de venta? Eso era mucho dinero para esclavos ordinarios. Pueden ser figuras importantes.

Creo que acabamos de encontrar algunas pruebas condenatorias. Debería entregarlas a las autoridades, pero ¿a quién…?

Los almacené por el momento.

Aparte de eso, encontramos siete rollos de papel pergamino que fueron sellados con magia. Los había visto antes—eran contratos de esclavos. Ya tenían nombres escritos en ellos. En algún lugar de este edificio había siete personas que habían sido obligadas a renunciar a sus vidas. Definitivamente deberíamos llevar esto con nosotros.

También encontramos una pequeña caja fuerte de metal escondida en un rincón de la habitación. Puede haber pruebas valiosas allí, entre otras cosas. Un rápido chequeo del cadáver del hombre reveló una llave.

No sentí ningún maná proveniente de la caja fuerte. Tampoco parecía estar equipada con trampas. “¿Es esta la llave?”

Probablemente, la abriré. Un paso atrás.

Aunque la caja fuerte no estaba manipulada, no podíamos ser demasiado cuidadosos. Fran dio un paso atrás y manipulé la llave con Telequinesis para abrir la caja fuerte.

La caja fuerte era… segura. Abrirla no desencadenó ninguna trampa.

Ooh.

“Dinero”, murmuró Fran rotundamente. No estaba interesada en el tesoro, aunque conocía su valor.

Había 100.000G en efectivo junto con joyas de aspecto costoso. Dinero, de hecho.

Estoy seguro de que estos son bienes robados. Estamos en un escondite de ladrones, después de todo.

Es justo que nos llevemos esto con nosotros. ¿Cierto? “Meh”.

¡Por supuesto!

Rápidamente guardé todo en la caja fuerte. Fran no parecía interesada, así que tuve que compensar su falta de entusiasmo. Este definitivamente no era un caso en el que yo me dejara influenciar por piedras preciosas y dinero.

Parece que no queda nadie en este piso.

“Sí”.

Era hora de pasar al primer piso. Sentí que varias personas se movían, por lo que el lugar debe estar fuertemente vigilado.

Es posible que no tengamos muchos lugares para escondernos en el primer piso ya que era un espacio de almacenamiento. Lo peor que podría pasar sería que los esclavistas escaparan después de ver a Fran. Quería evitar que descubrieran que su atacante era una niña si era posible.

Ninguna simple niña era capaz derribar un escondite de esclavistas por su cuenta. Si Fran permanecía en Dars durante algún tiempo, el sindicato de esclavistas pronto descubriría que ella era la responsable del ataque.

Nuestro mejor curso de acción era derribar la base lo más rápido posible sin que nos vieran.

Hmm, ¿cómo deberíamos hacer esto?

Sabíamos que tenían esclavos aquí, por lo que el exterminio total estaba fuera de discusión. Tampoco pudimos armar mucho alboroto, ya que podrían tener túneles subterráneos que podrían usar para escapar. Usé Radar Omnidireccional y Percibir Ser para encontrar la mayor cantidad de información posible sobre el sótano.

Mmm…

Las Habilidades Compuestas que P.A. habían fusionado eran difíciles de usar. Estaba recibiendo una avalancha de información y no podía elegir lo que era relevante. En pocas palabras, cuando traté de escuchar las firmas de sonido, obtuve un aluvión de sonidos provenientes de todas las direcciones, que al final se convirtieron en solo ruido.

Necesitaba subir de nivel mi habilidad de pensamiento dividido para poder procesar todos estos datos.

Me tomó algo de tiempo, pero logré averiguar dónde estaban ubicados todos los hostiles en el primer piso. Había una habitación grande, probablemente el espacio de almacenamiento, y tres habitaciones más pequeñas que probablemente albergaban a los supervisores.

Había cinco personas en la sala grande. Iban a ser un problema, así que decidí que nos ocuparíamos de ellos al final. Había una persona estacionada en dos de las habitaciones más pequeñas y una persona en la restante.

Entremos desde afuera.

“Entiendo”.

Salimos y dimos la vuelta a una de las habitaciones del primer piso. Había un hombre solitario. Usé Silencio para que Fran pudiera atravesar la ventana sin ser notada. Justo cuando el hombre se dio la vuelta para gritar, Urushi le apretó la garganta. La boca del hombre se abrió y se cerró en un grito silencioso.

El resto de las habitaciones pequeñas las asaltamos de la misma manera.

Bien, ocupémonos del resto de una vez.

Quedaban cinco guardias en el primer piso. No sabíamos cuántos había en el sótano.

Usaré Silencio. Urushi, usa Velo Negro.

“Woof”.

Velo Negro era un hechizo de magia oscura que arrojaba una cúpula de oscuridad sobre un área. Una vez que estuvieran ciegos, nos desharíamos rápidamente de ellos antes de que tuvieran la oportunidad de escapar.

Lo único que sentí en la oscuridad silenciosa fue la confusión de los hombres. Dejé que Fran y Urushi anduvieran sueltos en la oscuridad. No tuvieron problemas para ver ya que Fran tenía Percibir Presencia y Urushi tenía Percibir Vida. Los hombres no sabían qué los golpeó.

Y eso era todo para el primer piso.

“Todo lo que queda ahora es el sótano”.

Según la información que obtuvimos, se supone que hay 24 esclavistas en total. Los cuatro restantes podrían estar ahí abajo, así que ten cuidado.

“Está bien”.

Bajamos en silencio las escaleras hasta el sótano, que en realidad era más como un calabozo.

Había dos hombres montando guardia en la puerta, pero los eliminamos en un instante. No estaban realmente en guardia y estaban en medio de un juego de cartas cuando llegamos a ellos.

Ahora solo quedan dos. No los vi, ni sentí su presencia. Deben estar lejos del escondite.

Ahora solo falta salvar a los niños que están encerrados.

Nuestra información era precisa: había 7 niños en cautiverio, con collares de esclavo alrededor de sus cuellos. Me recordaron a Fran cuando la conocí por primera vez, y eso despertó mi ira hacia los esclavistas.

¡Vamos a salvarlos!

“Por supuesto”.

Fran caminó hacia las celdas de la prisión.

“¿Quién está ahí?” Un niño nos llamó con miedo aparente en su voz. Parecía ser el mayor de los siete.

Deben haberse sorprendido por esta repentina aparición de una niña desde el exterior. Parecía bastante bien vestido. ¿Era un noble? La chica que estaba protegiendo detrás de él se veía exactamente como él. Eran gemelos.