Otonari No Tenshi (NL)

Volumen 5.5

Capitulo 6: La Inseguridad De Pequeña, Y La Seguridad De Ahora

 

 

Últimamente, Mahiru incluso se la pasaba los fines de semana en el departamento de Amane, estaba preocupada por que terminara teniendo una vida nada saludable… había puesto un motivo como ese, pero no estaría con una persona si no le agradara, solo estaba actuando como quería.

Por supuesto, entendía que no podría monopolizar el importante tiempo de Amane para sí misma, por lo que no era como si pudiera presionarlo sin más, ¿No le gusta? ¿Le pareceré molesta? Mahiru se encontraba teniendo mucha atención a sus reacciones procurando darse cuenta de ello mientras estaba a su lado.

Publicidad M-AR-1

Afortunadamente, a Amane no parecía importarle que Mahiru se encontrara en la casa, la recibió como si fuera de lo más normal, al contrario, sonrió con alegría, sin pensarlo terminaba teniendo malos entendidos. Era algo tan simple como habérselo preguntado, al darse cuenta de ello comenzó a formar una sonrisa.

Después de golpearse ligeramente las mejillas, Mahiru tomó las llaves de la casa de Amane y se dirigió hacia allá.

Entró en el departamento, pero dentro no había nadie. Mahiru pensó que podría encontrarse durmiendo, pero al ver que los tenis que solía usar habían desaparecido, se dio cuenta un poco tarde de que había salido, si tuviera que decir algo Amane era el tipo de persona que prefería hacer las cosas bajo techo, por lo que era un poco extraño que no estuviera tan temprano, estaba sorprendida., pero a la vez que comenzaba a preguntarse qué debería hacer.

(… ¿Está bien que esté aquí cuando el dueño de la casa no se encuentra?)

Le había dado la llave del departamento diciéndole que podría usarla cuando quisiera, pero a pesar de que Amane no estuviera… no sabía qué hacer.


— La verdad no importa, puedes entrar cuando quieras, no es como si fueras a hacer algo malo.

— No lo haré pero, no sé si sería bueno entrar por mi cuenta en un lugar que es privado.

— ¿Querías entrar en mi dormitorio?

— No, no es eso pero… ¿no estás preocupado de que entre o vea algunas cosas?

— Solo de entrar no hay nada, no me preocuparía por eso, bueno, después de todo no entrarías, en cuanto a la sala de estar puedes ver todo lo que quieras.

A pesar de que era todo lo que habían platicado al respecto, después de todo dudó un poco por estar sola en la casa de otra persona. Cuando mucho se ponían en contacto cuando alguno iba a llegar tarde a casa, lo habían decidido así, y al ver que no se había puesto en contacto, pensó que no tardaría en regresar.

¿La perdonaría si la esperaba un poco?

Con un poco de sentimiento de culpa e inmoralidad se quitó los zapatos temerosamente entrando en la sala de estar, después de todo era silencioso al no haber nadie. Sintió la tranquilidad del aroma acostumbrado de la casa de Amane, pero aun así lo sentía frio, como si algo faltara, de seguro seria porque la persona que le gusta no se encontraba.

Se recostó en el sofá apoyando su espalda. Eran muchas las ocasiones que cuando se sentada en ese lugar Amane estaba a su lado, cuando necesitaban algo o querían ver algo, se sentaban en el sofá y pasaban un tiempo tranquilo hablando de ello. Pero ahora Amane no se encontraba, el calor corporal más alto que el de Mahiru, el aroma tranquilizador, la voz fácilmente entendible sin ser demasiado baja, ese cuerpo bien cuidado sin estar demasiado delgado, en esta ocasión no se encontraba a su lado.

En cuanto se dio cuenta de todo ello, no podía evitar sentirse sola.

Publicidad M-M3

—…. ¿Podrías regresar pronto?

Sin pensarlo dejó salir esas palabras al igual que una sonrisa viendo que aun siendo ella era muy solitaria. A pesar de que había entrado en el departamento por su cuenta, y había decidido esperarlo por su cuenta, que lo apresurara, que su corazón resistiera tan poco a pesar de que estuviera acostumbrada a estar sola, la hico sentir tonta y patética.

— Haa…

Dejó salir un suspiro, y dejó el peso de su cuerpo en el sofá. Estaba acostumbrada a hacer algo como esperar, su vida había sido corta teniendo apenas 16 años, pero la mayor parte de ese tiempo se la había pasado esperando, Ya se había rendido a tener que seguir esperando por años.

No era como si no pudiera esperar a que regresara a casa. Pensó en ello, cuando de pronto recuerdos de un pasado distante encerrados en lo profundo de su corazón comenzaron a dolerle.

(… Al estar así me hace recordar hace mucho, cuando esperaba a mis padres)

Eran malos recuerdos, por lo que los había encerrado en su interior, pero ahora estaban emergiendo, aquellos tiempos cuando tenía que esperar a sus padres sola, sin saber cuándo regresarían.

Cuando era pequeña, Mahiru se encontraba sola en casa. Habían rentado un piso completo de un edificio departamental, una casa demasiado grande para que viviera una familia normal, era una casa con los muebles y cosas indispensables haciendo que no fuera ningún problema vivir allí.

Pero Mahiru vivía sola en esa casa.

Diciéndolo de manera más correcta, su familia nunca estaba, estaba la ama de llaves y maestra de labores del hogar Koyuki, pero no había nadie más que tuviera su sangre donde se supone deberían de estarlo. Sus padres estaban demasiado ocupados con sus trabajos que prácticamente no regresaban a casa, no veían a Mahiru al grado de casi poder decir que se habían olvidado de su existencia.

Pero si no hicieran nada no podrían continuar demasiado abandonándola en estas épocas, por ello es que le habían dado cosas elegantes, dinero, la ama de llaves Koyuki que a la vez era su maestra de las labores del hogar, era como si dijeran que ya habían cumplido con lo mínimo, dejando de lado a Mahiru.

Era algo normal darse cuenta que la habían dejado de lado, Koyuki podía entenderlo desde un tercer punto de vista al ver pasar los años, no fue hasta después que se enteró que ambos tenían amantes. Pero una inocente niña solo quiera que sus padres la amaran más que a cualquier otra persona.

— Mamá.

Cierto día cuando ya había pasado algo de tiempo desde iniciada la primaria, Mahiru estaba puramente alegre cuando un día su madre de casualidad regresó a casa. Estaba realmente feliz de ver a uno de sus padres que normalmente no veía y fue con ella corriendo con una sonrisa, pero ella no reaccionó, era como si no existiera, no solo no la veía, siquiera cambió su dirección mientras tenia documentos en las manos. ¿Habría regresado debido a algo relacionado con el trabajo? Pensó Mahiru, sintió que era malo que la interrumpiera, pero había pasado tanto tiempo desde la última vez que la había visto que estaba bastante feliz y se la pasaba observándola, hasta que finalmente se llenó de valor y le habló.

— ¡Mamá! Me esforcé mucho cuando no estabas, tengo buenas calificaciones con los exámenes y también soy buena con los deportes, ¡obtuve bastantes primeros lugares!

Durante el tiempo en que no se encontraban, se había esforzado mucho con los estudios y deportes, planeaba decir eso, le jaló la manga de la camisa con una sonrisa… allí fue cuando por fin su madre se dio la vuelta.

Así fue como se vieron directamente por primera vez.

Hasta ahora solo había podido ver su espalda a lo lejos, era la primera vez que estaba tan cerca de su madre, y sentía su mirada tan claramente. Volteó a ver a su madre hacia arriba, Koyuki le había dicho que su rostro no se parecía demasiado al de Mahiru, y era cierto, era hermosa, pero parecía fuerte cual si rechazara todos a su alrededor. Si tuviera que decirse algo de Mahiru, era que se le parecía más al de su padre, cual si fuera un pequeño pajarito, mientras que su madre por el lado contrario, tenía una mirada afilada dando una impresión intensa.

Y no solo su rostro, también sus acciones.

Su madre, reflejándose en los ojos de Mahiru recibió la mirada de su hija, para después quitarse su agarre viéndola hacia abajo, al tratarse de una niña no había sido demasiado violenta, pero era un claro rechazo, y Mahiru terminó cayendo sobre su trasero. A pesar de que volteó a verla hacia arriba atónita, en la mirada de su madre no había ninguna pizca de calidez. Cuando por fin creía que se había acordado de su existencia, era como si la creyeran una piedra en medio del camino, allí fue cuando Mahiru lo entendió… no…

…. La hicieron entender.

… “Mi existencia no es deseada”

Su corazón comenzó a hacer un desagradable sonido a la vez que comenzaban a subir las náuseas, pero en ese instante decidió dejar de pensar en ello, pero una vez habiendo pensado en eso, no podía evitar darse cuenta de que todas las acciones de su madre lo indicaban.

¿Por qué su presencia era tan tenue?

Publicidad G-M1



¿Por qué a pesar de que por fin había regresado a casa la rechazaba?

(Yo…. no soy amada… nunca me desearon)

Era como si la mirada de su madre se alineara con su respuesta, cual si le estuviera respondiendo.

(…. Para mamá… no soy necesaria…)

Otonari No Tenshi Volumen 5.5 Capitulo 6 Novela Ligera

 

 

De vez en cuando ponía en problemas a Koyuki preguntándole repetidamente de sus padres, al verla lo entendió rápidamente el porqué de sus reacciones en esos momentos.

Debido a que no era necesaria, debido a que la veían como una molestia, debido a que no la amaban que no estaban a su alcance, desechada desde el nacimiento dejando de lado sus deberes como padres. Por eso es que sus padres casi no se mostraban, incluso aunque Mahiru le extendiera la mano su madre la rechazaba.

Esa realidad era demasiado cruel para Mahiru que se quedó atónita, y durante ese tiempo su madre se fue, Mahiru no pudo hacer nada más que quedarse sobre su trasero viendo su espalda alejarse. A pesar de que extendió su mano un poco más tarde, su mano no sostenía más que aire, nunca había habido nada allí desde un principio.

De sus ojos cayó una lagrima… ¿fue una lagrima? ¿Era un grito de su pequeño corazón por la tristeza? Por más que se esforzara, si desde un inicio nunca la amaron entonces nunca voltearían a verla, no tenía sentido.

— ¿Por qué?

Al mismo tiempo en que llevaba a las palabras su pregunta, los sentimientos que parecían romper su corazón comenzaron a desbordar, comenzó a llorar con fuerza en una casa donde no había nadie.

Cuando Koyuki regresó a la casa dejó de llorar, pero aun así, a pesar de que su querida Koyuki estuviera frente a ella no podía mostrarle una sonrisa, un sentimiento de haberse rendido se apoderaba de su cuerpo.

(Si no hubiera sido rechazada…)

Publicidad G-M1



Si no se hubiera enterado de nada, de seguro solo hubiera sollozado con Koyuki, pero al saber la verdad de que sus padres no la amaban, Mahiru comenzó a temer, y si la existencia de Koyuki que tanto apreciaba estaba allí… era gracias a sus padres… ella solo estaba haciendo su trabajo.

Si sus verdaderos padres no la amaban, no había manera de que Koyuki o incluso ella misma se amara. Si fuera con Koyuki de seguro la escucharía, diría que la amaba pero…

(A pesar de que eso no es posible)

Sus padres no la amaban… tenía miedo de ser rechazada por Koyuki, que le respondiera que solo era una fuente de ingresos, tenía tanto miedo de confirmarlo, que solo le regresó una sonrisa ambigua a la preocupada Koyuki, escondiendo su tristeza dolor y llanto dentro de su corazón.

Mahiru había sido lastimada por el rechazo de su madre, pero aun así no se había rendido con el mismo amor. Si hubiera la más ínfima posibilidad, si se mostrara como una chica aún mejor….

Mahiru comenzó a esforzase para que voltearan a verla más de lo que hacía ahora, solo una palabra, “te esforzaste” bastaba con esa palabra para hacerse creer que la aceptaban, de seguro eso sería suficiente para recompensarla por los esfuerzos. Pero al final, no es como si le hubieran pedido que fuera buena con los deportes o el estudio, a pesar de que obtuviera la simpatía de muchas personas, a pesar de que fuera una estudiante ejemplar en la escuela, aunque fuera hermosa para que se enorgullecieran, sus padres nunca voltearon a verla ni una sola vez.

Cuando mucho su padre intercambió unas dos o tres palabras incomodas con ella, pero solo eso, no veía a Mahiru, tomaba una actitud de culpabilidad desviando la mirada de ella y dándole la espalda, se habían casado por algún motivo político, de seguro para él Mahiru solo era algo que nació de una noche juntos.

(Si en verdad no les gustaba entonces no debieron haberme dado a luz)

(Nunca desee haber nacido)

¿Qué tan bueno hubiera sido poder decir eso? Pero, Mahiru no podía decir nada cuando se la pasaba el tiempo matando sus sentimientos, y así comenzaba a esconderlo en lo profundo de su corazón, a pesar de que se supone que ya se había desecho de eso, en su corazón solo quedaba un vacío, pero ese vacío era frio, triste y doloroso.

Mahiru no sabía cómo rellenar ese vacío dentro de su pecho. No, aunque lo supiera, estaba consciente de que era algo que no podría obtener, “Amor” era solo una palabra, pero por más que Mahiru se esforzara, por más que extendiera las manos, solo alcanzaba a agarrar aire. A pesar de que fuera una buena chica, no podía obtener el amor que veía que otros niños obtenían de sus padres.

Para bien o para mal, Mahiru tenía una apariencia en la que decían que había obtenido lo bueno de los genes de sus padres, sintió que valdría la pena el esfuerzo y aumentó las cosas que podía hacer, creciendo siendo hermosa. Haciendo que desde que salió de la primaria, los chicos comenzaran a acercársele con muestras de afecto. ¿Pero cómo debería de recibir el cariño de las personas?

Sin subordinarse al miedo, siendo tranquila y amable, tratando a todos de manera cordial y amable, todos comenzaron a pensar de ella como la mujer ideal y así fue como se formó a sí misma.

Así que como “Tenshi-sama” nació. Una existencia creada.

Como resultado había terminado creciendo como una chica que todos envidiaban. A pesar de que no sabía nada del amor, era querida por muchas personas, se había convertido en una existencia vacía como esa. Pero a pesar de que la misma Mahiru sentía su existencia vacía, no podía dejar de pulirse a sí misma, ¿si era querida por todos llenaría el vacío que había en su pecho? ¿Sus padres voltearían a verla?

— No hay manera de que es sea posible.

No le respondió a nadie, era la respuesta que tenía para sí misma.

— Por más que me esfuerce, mamá y papá no voltearan a verme. Escuchó como su risa amarga solo creaba eco.

— Dejemos de lado la premisa de que todos me quieren, solo quieren a la falsa yo, no es como si me amaran de verdad, los que todos quieren es solo la máscara que me pongo, solo apretándome el cuello, no es como si alguien me estuviera viendo.

Mahiru hizo una sonrisa torcida ante la respuesta a la que había llegado.

Mahiru se dio cuenta de la calidez que había a su lado y empezó a abrir lentamente los ojos, había un aroma conocido, un aroma tranquilizador justo a su lado, su vista era nublada, pero volteó a ver en dirección a esa calidez, y allí había una persona que no estaba antes. Además de la sensación de calidez cómoda en su mejilla, era una sensación de tranquilidad… y escuchó una pequeña voz sonriente.

— Buenos días.

Esa voz suave era lo que Mahiru deseaba. Se trataba de Amane quien la veía con una expresión suave y mirada gentil. Un poco tarde se dio cuenta de que Amane ya había regresado a casa y se apresuró a levantarse ¿En qué momento había llegado? No se dio cuenta para nada, se había quedado dormida por completo y no lo recordaba.

—… No… No me digas que me quedé dormida…

Preguntó temerosamente, Y Amane asintió fácilmente.

— Veamos, creo que regresé hace como una hora y te vi dormida, intenté no despertarte sentándome a tu lado y terminaste recostándote en mi así que te dejé dormir.

— Lo, ¡Lo siento! a pesar de que me metí en la casa por mi cuenta me quedé dormida…

— La verdad no me importa si entras, pero vaya que duermes mucho en mi departamento.

— Uu….


Parecía que se había dado cuenta de que la casa de Amane era bastante cómoda, al no poder responderle solo terminó dejando salir un pequeño gemido. No podía argumentar nada contra eso. La primera vez en verdad que fue un descuido cuando estaba Shihoko, pero después de eso terminaba descuidándose por tenerle confianza a Amane. No había manera de que se permitiera dormir al lado de nadie, pero Amane era especial, podía tenerle la confianza de que a pesar de que estuviera así a su lado, él no pensaría nada extraño, estar a su lado era reconfortante, de seguro seria por la distancia y el ambiente que emanaba. Respetaba a Mahiru, la trataba con aprecio, la protegía, justo porque sabía eso que Mahiru podía bajar la guardia y sentirse segura.

— Dejemos de lado que creo que es un lugar en el que puedes sentirte tranquila…

pero… parece que esta vez no pudiste dormir bien.

— ¿He?

— Hablaste mientras dormías ¿Tuviste un mal sueño verdad?

De seguro debió haber sido por recordar acerca de su pasado, parece que por eso había dejado salir algunas palabras. Amane estaba viéndola preocupado, y Mahiru al no saber cómo responderle, dejó salir una sonrisa ambigua…

—… Si… si tengo que decir si fue un mal sueño, entonces si fue un mal sueño.

Publicidad M-M2

— Ya veo… ¿sería mejor si no pregunto?

— La verdad no es como si me importara… pero no creo que sea divertido como para preguntar, mejor dicho, creo que te pondrás de mal humor.

Amane no parecía tener buenos sentimientos acerca de los padres de Mahiru por lo ocurrido, no era un episodio que recordar con buenos sentimientos. No había nada que hacerle porque a Amane le desagradaran sabiendo las circunstancias, además visto desde un tercer punto de vista no servía de nada que a Mahiru los recordara ahora.

(… Pero aun así, era una niña al pensar desear el amor de mis padres)

Un amor sin pedir nada a cambio, cuando menos algo como eso no existía en sus padres. Mahiru también, a pesar de que intentara extender las manos nunca lo alcanzaría.

Amane se dio a una idea de que se trataba su sueño al no decirle nada, y le dio la sensación de que era un ambiente extraño por lo que le sonrió con amabilidad a Mahiru siendo considerado.

— No es la gran cosa, solo soñé cuando era pequeña y siempre me sentía sola, no regresaban a casa, no me veían, era un sueño solo de eso.

Por más que esperara, sus padres nunca regresaban además de que al tenerla en frente no la veían, era un sueño como ese de cuando era pequeña.

—…. Aunque me esforzaba… al final solo era para mí conveniencia, pensaba que

si era una chica buena volearían a veme, pero a estas alturas veo que algo como eso siempre fue innecesario.

Desde que la rechazó su madre, cada vez era una mejor chica, pero puede que tuviera el efecto contrario, si hubiera actuado diferente, si les hubiera causado molestias, como resultado podría que sus padres voltearan a verla, pero no habría ni pizca de amor en ello.

Todo era pensado a esas alturas, a esta edad Mahiru ya no deseaba el amor de sus padres, tampoco pensaba en querer hacer algo con ello, si piensa acerca de aquello, si acaso era con un “y si…”

Pensar en cosas sin sentido como esas solo era para decirse eso a si misma, cuando de pronto la gran y confiable mano de Amane, cayó sobre la cabeza de Mahiru. Volteó a verlo como preguntándose “¿Qué pasa tan de pronto?” levanto las cejas como si le fuera un problema, y allí estaba la mirada de Amane temblando como si se sintiera triste.

—… Siento dejar que te sintieras sola.

— ¿Por qué Amane-kun tendría que disculparse? Fui yo la que entró por su cuenta, y fui yo quien esperó sola, también el hecho de que tuviera ese sueño fui yo sola.

— Fue gracias a que no me puse en contacto que había la posibilidad de que llegara en cualquier momento, ¿esperaste tanto hasta el punto de quedarte dormida verdad?

Tras decir eso, Amane desvió la mirada ligeramente y después se le quedo viendo directamente a los ojos.

—… Te estoy viendo cómo se debe y siempre regresaré a tu lado.

Sus ojos no eran muy grandes, pero tenían más fuerza que nunca antes mientras le hablaba con sinceridad, era una mirada sin nada de falsedad, y Mahiru sintió como si quisiera llorar, pero lo contuvo de alguna manera sonriendo ligeramente.

(…. De seguro por eso me gusta esta persona)

No era del todo sincero, pero veía a la verdadera Mahiru de manera directa, su verdadera expresión, sus debilidades, todo de ella lo había aceptado y tratado con aprecio. Incluso llegó a decirse “¿Cómo no podrías gustarme asi?”

—… Es como si me estuvieras proponiendo matrimonio.

— ¡…! ¡No pretendía eso!

Le dijo eso en un intento de disimular las ganas que tenia de llorar y Amane pareció darse cuenta que eso bien podría interpretarse como una propuesta de matrimonio, en ese instante comenzó a ponerse completamente rojo como si el agua en una olla de presión comenzara a hervir. Que lo negara hasta ese punto hacia que le doliera ligeramente el corazón a Mahiru, pero sabía claramente que no lo había dicho con esa intención, haciendo que el dolor cesara de inmediato.

— Lo sé, es una broma… pero es cierto, te has convertido también en el lugar al cual regresar.

—… Incluso ya siento que es natural que te encuentres en mi casa.

¿Pensó que se estaba burlando de él? Lo dijo un poco malhumorado, pero le siguió de una linda sonrisa, haciendo que se ruborizara un poco, es cierto, el departamento de Amane prácticamente era el lugar en el que ambos vivían. En el momento en que estaba sola en su propio departamento comenzaba a sentirse triste. Pensó que estaba acostumbrada, pero habrá sido por culpa de Amane ya que comenzó a sentirse así desde que lo conoció ¿o debería decir gracias a Amane?

Si tuviera que decir algo, de seguro sería la segunda. Desde que conoció a Amane, Mahiru había comenzado a sentirse completa por primera vez. Aprendió lo divertido que es hablar con otra persona estando en las mismas condiciones, conoció la calidez de una persona a su lado, conoció la comodidad que daba pasar el tiempo con otra persona, conoció lo que en verdad era amar a otra persona. El vacío que sentía in su interior, en algún momento se había llenado mientras pasaba el tiempo con Amane.

Publicidad M-M4

— Es cierto, Ahora creo que conozco el departamento de Amane-kun más que el mío.

— Me da la sensación de que incluso más que yo.

— Se te olvidan donde dejas las cosas después de todo.

— Cállate.

Lo dijo intentando esconder su vergüenza volteando a otro lado.

“Olvidar” aunque dijera eso era debido a que movía las cosas para Mahiru, había movido las cosas de sus lugares habituales para dejarlas al alcance de Mahiru y pudiera usarlas con facilidad. Las cosas del día a día solían estar en lugares altos, pero debido a que Mahiru era un poco pequeña, terminó cambiándolos de lugar, después de eso las cosas personales de Mahiru en el departamento comenzaron a aumentar cada vez más, delantal, cepillo de dientes, vajillas, útiles escolares… Desde que se conocieron las cosas del departamento comenzaron a cambiar de lugar poco a poco, era como si le estuviera diciendo “puedes estar aquí, este también es tu lugar”

—…. aquí.

— ¿Aquí?

—… No es nada.

“Si me dejas quedarme aquí…” no había manera de que pudiera decirle algo como eso, aun no tenían esa clase de relación, y si se lo dijera, de seguro sería un problema para Amane, pensaría que es una mujer pesada, pero solo con eso sentía que el amor y la confianza que sentía por Amane aumentaban. ¿Qué tan feliz podría ser viviendo en un lugar tan cálido y placentero juntos?

—… También soy un poco codiciosa.

— No sé qué estás usando como punto de comparación, pero entonces me da la sensación de que me quedo corta la palabra codicioso.

— No bromees, Amane-kun, prácticamente no deseas nada de las demás personas, eres bueno siendo considerado con los demás.

— Claro que no, ahora deseo tanto algo de ti que es un problema.

— Fu fu, ¿qué cosa?

Si se lo pedía dejándola estar en un ambiente tan tranquilo como este, podría esforzarse por cumplir sus deseos, eso pensó, si tenía algo que podría cumplir, entonces lo haría. Al quedársele viendo a Amane, él comenzó a vagar con la mirada como si fuera un poco difícil de decir, para después llenarse de determinación y voltear a verla.

— Si tienes algún problema, me gustaría que contaras conmigo.

A pesar de que se suponía que era un deseo, no era como si le estuviera pidiendo algo, solo eran palabras cual si le diera una sugerencia, pero entendía que era lo que estaba diciendo aunque era ella la que ganaría sonrió con ello, no era una sonrisa hermosa, era una sonrisa real.

—… ¿Y si te digo que entonces también si quiero ser consentida?

— A… adelante… si es algo que pueda hacer.

Tras decir eso puso una expresión sorprendente, Mahiru pensó un poco… y después de decirle “con permiso” puso su cabeza sobre las piernas de Amane quien estaba a su lado.

Al voltear a ver hacia el techo, vio a Amane más tenso de lo que había imaginado, haciendo que la vergüenza que sentía se fuera a alguna parte mientras sonreía.

—… ¿Mahiru-san?

— ¿Es como te hice la vez anterior verdad? Pensé que quería experimentar algo como esto alguna vez.

— ¿También a las mujeres se les hace?

— Bueno, no es demasiado cómodo para dormir.

— Lo siento.

— Pero sigue siendo cómodo.

Publicidad M-M1

—… Ya veo.

Después de todo los músculos de las piernas de un hombre eran duros, pero sentía con fuerza la presencia de Amane, además de su calidez y aroma lo que la hacía dejar de estar nerviosa. Si pensaba en querer ser consentida de esta manera, lo era solo con Amane.

—… ¿Está bien si estoy así un poco más?

— Como lo desee, princesa.

Podría ser algo imprudente de su parte, y volteó hacia arriba a verlo insegura, y Amane estaba ligeramente ruborizado, no parecía que le fuera desagradable, él comenzó a acariciar su cabeza cuidadosamente. Esas manos la tomaban cuando parecía querer huir, la abrazaban cuando quería llorar e incluso la acariciaba cuando quería ser consentida, al sentir esa mano terminó sonriendo, sus dedos duros la tocaban con gentileza haciéndola sentir cómoda.

Publicidad G-AB



—… Amane-kun.

— ¿Nn?

—… Muchas gracias.

— ¿De qué hablas?

Volteó hacia otro lado cual si en verdad no quisiera admitir que estaba siendo considerado, Mahiru había fingido no ver que estaba ruborizado, y le dio la espalda intentando que no se diera cuenta que también se había ruborizado, regresando a dormir un poco más.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

1 Comentario
Mas Votados
Mas Recientes Mas Antiguos
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios