Durara! (NL)

Volumen 6

Epílogo: Epílogo Y Próximo Prólogo

Parte 2

AL MISMO TIEMPO, EN UNA FÁBRICA ABANDONADA DE TOKIO

La fábrica se volvía más espeluznante mientras la noche se acercaba.

Por alguna razón, el suministro eléctrico aun funcionaba. Las bombillas desnudas apenas iluminaban el interior oxidado de la fábrica.

— ¿Cuál es el problema, Mikado-sempai? ¿Tienes algo que decirme en un lugar como este?

Kuronuma Aoba le hablaba a Ryuugamine Mikado, que estaba parado ahí con su ropa de siempre.

Estaba dando vueltas un bolígrafo en su mano derecha, tocando el tambor de acero junto a él de vez en cuando.

Aoba aún estaba rodeado por los miembros de los ‘Blue Square’, al igual que como lo había estado durante el día—y ya fuera por coincidencia o no, en la misma formación.

Solo que esta vez, era Mikado quien les había solicitado reunirse aquí.

— Ah, en serio discúlpenme por haberlos llamado cuando ya han tenido demasiadas cosas por hoy.

— No te preocupes por eso, en primer lugar fue mi culpa arrastrar a Sempai aquí en un momento inadecuado.

Aoba sonrió inofensivamente. Mikado también respondió con la misma sonrisa que siempre había usado en la escuela.

Esto sorprendió a Aoba.

“¿?”

“Él no puede estar planeando que la motocicleta negra nos haga una emboscada, ¿puede?…”

Tomando las precauciones adecuadas, Aoba siguió hablando con forzada calma.

— Así que, ¿Se puede saber qué es lo que Sempai quiere hablar conmigo?

— Si… yo, ehh, pensé en las cosas a mi manera…

La tristeza impregnó la expresión de Mikado mientras golpeaba el tambor de acero con la punta de su bolígrafo.

— Tenías razón. La dirección que están tomando los ‘Dollars’ en este momento está simplemente… mal. Definitivamente los ‘Dollars’ no son lo que esperaba. Aunque todavía hay idealistas entre nosotros como Kadota-san y su grupo… la inmensa mayoría de las personas no son así.

— Exactamente mis pensamientos.

— Pero no es como si tuvieran alguna regla para empezar, y hacer cualquier regla ahora podría hacer que los ‘Dollars’ ya no fueras más los ‘Dollars’… En un mundo sin reglas… la única cosa en la que puedes confiar para alcanzar tus sueños es el poder.

Mikado afirmó en silencio como si fuera para sí mismo, y golpeó el tambor de acero para hacerlo resonar una vez más.

— Y Shizuo-san acaba de dejar los ‘Dollars’ hoy.

— Oh… ¿lo hizo en realidad?

Aoba estaba realmente sorprendido al escuchar sobre Shizuo.

Mikado volvió a afirmar en silencio.

— Yo… yo estoy pensando que si ustedes están dispuestos a prestarme su poder, y usarme para sus propios fines, al mismo tiempo… es un acuerdo que puedo aceptar.

— ¿En serio?

La inofensiva sonrisa de Aoba se amplió.

“Todo va de acuerdo al plan.”

En su corazón, reprimió una sonrisa malvada.

“Eres demasiado ingenuo, Mikado-sempai.”

“Esto va mucho más suave de lo que pensé que sería.”

No había esperado que todo resultara de la forma en que lo había hecho el día de hoy.

Todo lo que hizo fue enfrentar a los ‘Dollars’ contra las pandillas del bousouzoku esperando empujar la realidad hacia el rostro de Mikado. Pero el resultado termino siendo simplemente delicioso—

“Bueno, probablemente Orihara Izaya también hizo algo desde las sombras.”

Aunque podía sentir la presencia de su enemigo en todo este asunto, Aoba decidió contentarse a sí mismo con el hecho de que había sido capaz de hacer que Mikado siguiera su plan.

“Hasta este punto las cosas deberían haber ido según ambos planes, el de Izaya y el mío”

“A partir de ahora es solo cuestión de cuál de los dos lados obtenga la ventaja.”

Aoba contempló esto mientras rápidamente repasaba los acontecimientos de hoy en su mente.

“He localizado lo que podría ser el domicilio privado de la motocicleta negra. Iré a visitar ese apartamento mañana.”

“Y también me estoy interesando un poco en Anri-sempai…”

“Probablemente Izaya ya consiguió la información que necesita sobre eso… Pero es poco probable que la motocicleta negra sea uno de sus peones. Si puedo sacar lo mejor de eso…”

Aoba hizo malabares con esos pensamientos en su mente mientras su expresión se mantenía igual de dócil que la cara de kouhai que siempre usaba al hablar con Mikado.

Mikado le habló lentamente a Aoba.

— Entonces, ¿Te importaría venir un momento? Me gustaría que firmaras un acuerdo.

— ¿ Un acuerdo?

— Si. Un acuerdo es necesario si vamos a hacer este trato justo, ¿no?

“…”

“Bueno, realmente no se puede decir que es inesperado viniendo de Mikado-sempai.”

“Si está planeando hacer algo con mi firma, voy a tomar las precauciones necesarias.”

En realidad nadie firma acuerdos para tratos como estos, pero era Mikado con el que ellos estaban negociando y simplemente no estaba acostumbrado a todo lo relacionado con el mundo clandestino.

Aoba pensó mientras caminaba hacia Mikado.

— Entonces ¿Qué te gustaría que escribiera?

— Ah bien, sobre este acuerdo…

Mikado señalo una hoja de papel que estaba en la parte superior del tambor de acero.

¿Qué podría haber escrito allí?

¿Creó todo tipo de trampas entre líneas, él, el fundador de los ‘Dollars’? ¿O simplemente escribió condiciones sencillas para sellar el trato?

Justo cuando tomó el papel mientras pensaba en que podría estar escrito allí, Aoba se sobresaltó.

“¿¡Una hoja en blanco!?”

Al siguiente segundo— un dolor ardiente estaba llegando desde la parte trasera de su mano extendida, la cual estaba cernida sobre la hoja de papel.

— ¡Argh…!

El dolor provenía de la parte sin hueso entre el pulgar y el dedo índice, que acababa de ser perforada.

Demasiado sorprendido aun, para darse cuenta de lo que acababa de suceder, Aoba miró su propia mano.

Y—

La sangre salía a borbotones por el agujero dejado hace un segundo por el bolígrafo de Mikado…

el cual había sido pinchado sin vacilar en su mano—dejando sinuosos patrones escarlatas en la hoja.

Aoba no pudo dejar de mirar a Mikado—

—Y al instante se quedo inmóvil ante lo que vio.

No era que él se hubiera puesto repentinamente maquillaje, ni nada parecido. Tampoco cambiaron las características de su rostro.

Sin embargo, por una fracción de segundo, Aoba comenzó a pensar seriamente, que la persona que estaba viendo no podía ser Mikado.

Eso solo era por cuan implacablemente fríos eran sus ojos, mirando como si abrazara desprecio por todo lo que veía en este mundo—

— O-Oye, ¿¡Aoba!?

— ¿¡Qué demonios estás haciendo!?

Girando su rostro hacia sus inquietos compañeros de los ‘Blue Square’, Aoba hizo un gesto de

‘ustedes esperen allí’ con su mano sana.

— Mikado…Sempai… ¿Qué es esto?

— No importa lo que hiciste… involucraste a Sonohara-san en todo este asunto… Esta es mi reacción ante esto. También es mi primera orden para ti.

“…”

— Digiere toda la ira de mi enojo.

Aoba trató desesperadamente de soportar el dolor mientras hablaba con el totalmente frio Mikado.

— Esa fue una línea impresionante, Sempai.

— Si no quieres cumplir, solo atraviesa mi mano o mi garganta con el bolígrafo. … O repórtame en la escuela o con la policía.

— …

— Después de lo que acabo de hacerte, tienes derecho.

La tristeza diluyo la frialdad en su rostro.

Aoba, mirando a Mikado, escogió sonreírle…

— No, está bien. Eso servirá como… nuestro acuerdo, escrito con mi sangre.

Aoba levantó el ensangrentado trozo de papel en el aire mientras lo anunciaba con una sonrisa sin miedo alguno.

— A partir de ahora, Mikado-sempai… serás nuestro líder… Sempai, siéntete libre de usarnos, a los ‘Blue Square’ como parte de tus ‘Dollars’ para lo que quieras.

— OK…

Aoba, seguía luchando para no mostrar el dolor en su rostro, giró para asegurarse que Mikado hubiera afirmado—

—Y sintió congelarse.

El aire de frialdad que había emanado desde el chico en frente de él, se había ido en apenas tres segundos. Ya estaba sonriendo como lo hacia todos los días.

— Eso es simplemente increíble… quiero decir, ¡estoy muy contento de que accedieras a hacerlo! Estoy tan avergonzado por lo de tu mano. Ah, de hecho traje desinfectante y vendajes. Te los aplicare, así que—solo alza tu mano por encima de tu corazón.

Mikado preparó los vendajes con tanta pericia que uno lo podría considerar el representante de la clase de salud de su escuela.

Había vuelto a ser el Mikado que Aoba siempre había conocido— de hecho, incluso más de lo que lo había conocido siempre.

Sin embargo, Aoba fue capturado por una extraña sensación, una cercana a lo que llamarían miedo.

Los miembros de los ‘Blue Square’ debían haber compartido el sentimiento hasta cierto punto, por como habían renunciado a sus charlas de siempre y miraban a Aoba y Mikado dedicarse a sus asuntos en silencio.

Aoba, sintiendo su espalda prácticamente mojada por el sudor frio, susurró en su corazón.

“Orihara Izaya, ¿te has dado cuenta de esto?”

“Yo y tu… nosotros probablemente hemos subestimado a Mikado-sempai.”

“Incluso con lo que ya sabíamos de él… podría resultar que sempai…”

“Ha estado muy lejos de mostrarnos su verdadera personalidad.”

“¿Te percataste de eso… Orihara Izaya…?”

***

OFICINA DEL ‘AWAKUSU-KAI’

— Orihara Izaya…

Shiki murmuró el nombre para sí mismo mientras miraba el número en su teléfono celular.

Lo había intentado y fracasado varias veces, contactar por su cuenta a Orihara Izaya, el agente de información.

Originalmente, los agentes de información de trataban de vendedores, matones y empleados de las tiendas de pachinko que recogían información en determinados lugares y hacían un poco de dinero con ella. Los agentes de información profesionales que habían hecho de este negocio su principal fuente de ingresos eran pocos.

Orihara Izaya era uno de ellos. Él recopilaba información de numerosas ‘fuentes’ que tenía en la ciudad y la utilizaba para desenterrar aún más información en un área más grande.

‘Awakusu-kai’ había usado sus servicios algunas veces. Pero por alguna razón, simplemente no podía ser localizado el día de hoy.

“Hablando de eso, ¿por qué Heiwajima Shizuo fue a esa oficina en primer lugar…?”

“Parece que la señorita Akane tampoco le ha dicho a Mikiya-san sobre los detalles…”

“Si Heiwajima Shizuo fue acusado de algo que no hizo, el único que tendría algo que ganar con eso sería… Orihara Izaya, su enemigo desde hace mucho tiempo.”

“No me sorprendería si Izaya sabe cómo controlar a esos rusos.”

Aunque ellos permanecían sin verificarlo aun, Shiki había empezado a tener dudas sobre Orihara Izaya.

“Bueno, en realidad no tengo nada que hacer con él en estos momentos.”

“En fin… el aún es un niño. Lo he conocido y hablado con él un par de veces, pero sin duda es un niño.”

“Cuando los niños se dejan llevar, nunca se sabe hasta dónde van a correr riesgos.”

Suspirando, Shiki salió de la habitación. Y cerrando la puerta, murmuró algunas palabras un poco más peligrosas.

— Si nos mete en problemas… solo tendré que terminar con él.

***

EN ALGÚN LUGAR DE JAPÓN, EN UNA CONCURRIDA CALLE CERCA DE LA ESTACION DE TRENES

— SI…, va a estar bien.

— [—————————-]

— Incluso si los del ‘Awakusu-kai’ se dan cuenta que deberían estar tras de mí, no estaré en Ikebukuro de todas formas.

— [———————–]

— Si… Si. Entiendo. Adiós entonces, y gracias por el apoyo.

— [———————–]

— Ah, no, no… Solo estoy convencido de que el ‘Grupo Asuki’ es más apto para gobernar Ikebukuro.

Después de colgar, Izaya siguió caminando por la calle nocturna.

Una metrópolis regional al noroeste de Japón.

Había viajado hasta aquí desde Ikebukuro, llevando con él solo su teléfono celular y su billetera.

Mezclándose con la multitud que pululaba en busca de bares nocturnos y discotecas, Izaya comenzó a contemplar todo el asunto tranquilamente para sí mismo.

Su expresión era una diluida mezcla de irritación y alegría.

“Todo fue llevado a cabo en tan solo… un día, eh.”

”Parece que Mikado-kun aceptará la oferta de ‘Blue Square’, que es algo bueno.”

“’Vamos a usarnos para nuestros propios propósitos, eso es probablemente lo que dirá.”

“Bueno, a partir de ahora es solo cuestión de qué lado va a tener más peones a su disposición entre él y ‘Blue Square’.”

Izaya, aun sin conocer el cambio en Ryuugamine Mikado, torció sus pensamientos hacia otro lado.

“La única persona que aun no se comporta como espero es Shizuo-chan.”

“¿Por qué no ataca de vuelta? ¿Por qué no le dio una paliza a la gente de ‘Awakusu-kai’ cuando lo acorralaron? ¿Por qué no ahuyentarlos?”

“¿No le arrojo una máquina expendedora a un coche de policía cuando ellos trataron de arrestarlo en aquel entonces?”

“¿No me digas que en realidad aprendió de esa experiencia? ¡Imposible!”

“ De todos modos, me vuelve loco.”

“Nunca pensé que Shizuo-chan era capaz de madurar como persona.”

“En cualquier caso, ya es hora de organizar el siguiente movimiento…”

Mientras los pensamientos de Izaya se centraban, su teléfono comenzó a sonar.

“¿De nuevo Shiki de ‘Awakusu-kai’?”

Eso fue lo que pensó mientras miraba el teléfono—pero el número que aparecía en la pantalla no le resultó familiar.

— …

A pesar de que tenía la sensación de que no era la mejor idea, Izaya contestó el teléfono.

Una voz que nunca había escuchado en su vida llegó desde el otro lado de la línea.

— Ahh, ¡hola, hola! ¿Orihara Izaya-san, supongo?

Era una voz, aparentemente de buenos modales, de un hombre de mediana edad.

Aunque sorprendido, Izaya respondió de todos modos.

— Si, ese soy yo.

— Ahh, me siento honrado. En realidad, resulta que tengo algunas humildes opiniones sobre ti que me gustaría traspasarte.

— ¿Opiniones?

— Pues bueno, estaba muy molesto. Hiciste estallar mi plan involucrando a ese monstruo de Heiwajima Shizuo en todo este asunto con ‘Awakusu-kai’. En serio, si Awakusu Akane nunca hubiera conocido a Heiwajima Shizuo, habría sido capaz de llevar a cabo mi plan mucho más fácilmente. Su ‘rencor’ contra Heiwajima Shizuo resultó en cierta monstruosa perdida de mi parte.

— ¿Quién eres?

— Ahh, ¡lo siento mucho por eso! ¡Nunca tuve la intención de hacer que sonara como si estuviera llamando simplemente para criticarlo! En realidad no hay nada para lo que necesites saber mi nombre, pero ahora que lo mencionas, si me dejas acercarme a ti en persona y darte mi humilde opinión… o si me perdonas por ser tan insolente, déjame hacerte otra pregunta…

— No, solo dime tu nombre.

Izaya siguió adelante mientras continuaba caminando con la multitud.

Pero la persona en el otro lado de la línea, no parecía tener intenciones de revelar su nombre.

— En realidad, no es tanto una humilde opinión… como si es un humilde consejo… eres demasiado guapo para tu propio bien.

— ¿Eh?… ¿Se supone que eso fue un cumplido?

— Ah, lo que trataba de decir era, en realidad que es fácil notarte entre una multitud. Tu refinado sentido de la moda también ayuda—eso solo te hace destacar en comparación con todos los demás. Y lo dije como un cumplido. Discúlpame; sobre todo lo digo porque yo solía reclutar talentos para ganarme la vida, por lo que mis ojos están especialmente entrenados para ver estos atributos en una persona. Por lo tanto, dado que hablas de eso, no creo que tratar de ocultarte, mezclándote con la multitud sea una buena idea.

— …

Algo estaba mal. Izaya sintió una extraña alarma que sonaba en su cerebro.

— Y ahora, sobre lo que te voy a pedir…

El hombre al otro lado de la línea se detuvo por un segundo—

— No tiene por qué ser largo, pero ¿serias tan amable de dormir por mí un momento? ¿En el hospital?

Esa frase se escuchó al mismo tiempo por ambos oídos, el izquierdo y el derecho.

Lo siguiente que Izaya supo, fue que algo estaba siendo impactado contra su cuerpo.

— Realmente…has estado husmeado por mi información, ¿no? ¿Usando esa pareja de adolescentes? Me avergüenzo fácilmente, ¿así que podrías dejarlo?

Por un nanosegundo, la voz se escuchó tanto en su oído izquierdo como en el derecho—ahora solo provenía del teléfono como antes.

— Honestamente, necesitas detenerte. Un niño tiene que aprender a jugar solo en su pequeño jardín… en Ikebukuro. Porque si sale fuera, nunca se sabe cuándo podría salir herido.

Izaya se detuvo lentamente en esta frase.

— De todos modos, no gire el cuchillo, así que no espero que tu vida esté en peligro.

Mientras Izaya bajaba la mirada, se encontró con manchas de color rojo.

— Si alguna vez vas por el borde de nuevo, esto debería servir como una primera advertencia.

En el momento en que se dio cuenta de que era sangre saliendo de su costado, Izaya murmuró en voz baja.

— Maldición… lo subestime.

Habiendo dicho esto, con una leve sonrisa en el rostro, Izaya se desplomó en el suelo.

Los transeúntes gritaban al ver la manchas sangre que había goteado sobre la acera detrás de él.

Mientras perdía el conocimiento, Izaya escucho la voz masculina proveniente del teléfono.

— Ah, se me olvidaba. Aunque esperaba ya lo supieras… mi nombre es Yadogiri Jinnai.

Espero que sigamos aprendiendo los unos de otros a partir de ahora…

La llamada termino ahí. Ahora todo lo que Izaya escuchaba eran las voces apagadas de los transeúntes.

***

“Esto esta… muy mal”

“Tengo… que contactar a Namie de alguna forma…”

Izaya trató de agarrar el teléfono… pero sintió que la herida se abría de nuevo. Izaya cayó inconsciente—en una calle lejos, muy lejos de Ikebukuro—y termino siendo llevado a un hospital.

Tampoco podía haber sabido que su nombre iba a estar al aire en todo el país al día siguiente…

***

UN EDIFICIO DE APARTAMENTOS EN KAWAGOE HIGHWAY

— [Hablando de eso, ¿El nombre Yadogiri Jinnai tiene algo que ver con ‘Awakusu-kai’?]

— ¿Hm? ¿El gerente perdido de esa compañía de entretenimiento? Bueno, algo así…, pero no realmente… ¿por qué lo preguntas?

— [Porque Shiki-san me dijo que lo contactara si alguna vez veía a ese hombre.]

— Shiki-san conoce a mucha gente. Ah. ¿Podría ser debido a Hijiribe Ruri-chan?

El médico clandestino y la jinete sin cabeza charlaron inútilmente mientras veían la película de media noche de King Television, ‘Vampire Ninja Carmilla Saizou’.

Para el mundo, este dúo era probablemente lo más extraño. Sin embargo ellos estaban disfrutando de unas vidas muy ordinarias en el sofá del salón.

Antes, Shiki los había contactado diciendo, ‘El asunto está resuelto. Gracias por ser el guardaespaldas de la señorita’.

Ya que ella había ayudado a salvar a Akane de los secuestradores. Celty fue compensada con una suma aun más grande de dinero a la que habían acordado originalmente. Ella estaba disfrutando de la noche con Shinra en un buen estado de ánimo.

“Parece que las lesiones de Mikado-kun no son graves. Anri-chan está bien.”

“Un montón de cosas pasaron, pero todo acabo bien.”

“Por lo que Shiki-san me dijo, parece que han capturado a los secuestradores. Ahora puedo salir a las calles en paz.”

“Ah, cierto…”

A medida que la película llegaba a su fin, también lo hizo su charla. Celty planteó un nuevo tema.

— [Hey, Shinra]

— ¿Qué sucede?

— [Um… Gracias]

Shinra pareció sorprendido. Celty comenzó a escribir un poco avergonzada.

— [Cuando alguien lanzó la granada aturdidora ese día… trataste de protegerme de la explosión, ¿no?]

— No me acuerdo…

— [No es nada de lo que tengas que avergonzarte]

Celty no reveló lo avergonzada que se sentía mientras le sugería a Shinra:

— [¿Deberíamos ir a algún lugar mañana?]

— ¿Qué?

— [Convertí a Shooter en un carruaje hoy… hace mucho tiempo que no lo hacía. Creo que Shinra y yo no tendríamos problemas en estar en un carruaje. Entonces ¿te gustaría la idea de un carruaje conducido por el borde de un lago donde no haya nadie más alrededor? Aunque un carruaje hace un sonido raro…]

— ¡Celty…!

Celty empujó lejos a Shinra mientras él hacia un movimiento para abrazarla con los ojos llenos de lágrimas. Ella accedió a hacer el viaje con una condición.

— [Pero tienes que usar otra cosa que no sea tu bata blanca cuando estemos en el viaje. Este es un acontecimiento.]

— ¿Qué? ¿Por qué…? Mi bata blanca sirve como la contraparte de Celty…

Celty cubrió la boca de Shinra con sombras antes de que pudiera decir otra cosa y escribió algo más en su PDA.

— [A cambio, también voy a hacer una excepción.]

Celty siguió escribiendo con una ligera vacilación.

— [Al igual que lo que escribiste en el diario Shinra… usare cualquier ropa que quieras.]

La euforia de Shinra fue tan abrumadora que esa noche casi se cayó por el balcón, pero eso sería otra historia.

***

Al igual que Celty, un ser ‘extraño’, que estaba planeando una escapada romántica de su vida diaria—

—El chico humano le dijo adiós a su vida diaria en una forma completamente diferente.

Después de que el grupo de Aoba se había ido, Mikado miró al cielo nocturno y murmuró.

— No, no hay vuelta atrás.

Mikado sintió el calor desde el interior de su cuerpo mientras dejaba que sus pensamientos fluyeran en la fábrica abandonada.

“Pero, sorprendentemente, no siento remordimientos.“

“Voy a recuperarlo… los ‘Dollars’ en esa noche… un año atrás.”

“Los verdaderos ‘Dollars’…”

“Usando mi poder, haré de ellos lo que deberían ser.”

“De esa manera voy a ser capaz de… mirar a Sonohara-san y a Masaomi sin sentirme avergonzado de mí mismo.”

Pero el chico se había dado cuenta.

Sabía que solo lo estaba usando como una excusa.

No tenía nada que ver con Masaomi o Anri. Él había apuñalado la mano de su kouhai por su propio ego escondido en el interior de su pecho.

Ahora que lo pensaba con cabeza fría, le daba náuseas.

“Lo siento Masaomi.”

“Evite hacer cualquier cosa como miembro de los ‘Dollars’… No puedo escuchar más tus consejos.”

Era un consejo que había limitado el rango de acciones de Mikado el día de hoy.

Sin darse cuenta de que en realidad había venido de Izaya, el que se había hecho pasar por su amigo—Mikado continuó disculpándose con Masaomi en su corazón.

En repetidas ocasiones, pidió perdón por su amigo desaparecido. Pero había cosas que Mikado no sabía.

No sabía lo que el nombre ‘Blue Square’ representaba.

Todo lo que él sabía era que la pandilla de Masaomi una vez había estado en guerra con los ‘Blue Square’.

A pesar de que él ahora era el nuevo líder de esta organización, todavía no tenía idea de lo que esta pandilla le había hecho a Masaomi y a su amor en el pasado—

Tal y como esperaba, Ryuugamine Mikado estaba cayendo hacia el fondo del infierno.

Como un insecto, como una bestia.

Sin siquiera saber a dónde se dirigía.

En este momento, la juventud del muchacho estaba silenciosamente comenzando a moverse de su estupor.

-FIN DEL VOLUMEN 6-