Monogatari (NL)

Volumen 7

Capitulo Ocioso: Jiangshi Mayoi

Parte 9

 

 

Esa noche, esperábamos acampar en la escuela de preparación en ruinas, como Oshino, pero el plan se descarriló.

Debería haber sido obvio.





Aquí, once años en el pasado—la escuela de preparación en ruinas no era una escuela de preparación en ruinas. De hecho, creo que se conocía formalmente como Escuela de Preparación Eikow, era un lugar que aún no existía.

Cuando llegamos al lugar donde debía estar, todo lo que había era una arboleda.

¡Una arboleda!

“Caray… Si dormimos entre estos árboles, nos comerán vivos los bichos… Si no tenemos cuidado, incluso podrían atacarnos perros salvajes o algo así.”

“Si el edificio no está aquí, abandonemos por completo el plan de quedarnos aquí.”

Publicidad G-M3



¿Por qué sólo sois testarudo en este tipo de cosas? Bromeó Shinobu.

Una ocurrencia sensata.

“Pero se siente un poco extraño.” Dije. “Doy por sentada la presencia de ese edificio abandonado, y esto va a sonar extraño, pero también le había tomado cariño. Una cosa sería que volviera a ser nuevo, pero no haber sido construido aún…”

En otras palabras, no sabía cuándo, pero en algún momento más tarde, ese edificio de cuatro pisos iba a ser construido; quién sabe cuántos jóvenes pasarían por sus aulas; eventualmente, cerraría después de sufrir dificultades financieras—todo ese futuro estaba por delante.

Aunque era imposible predecir ese futuro viendo la arboleda.

Murmuré: “¿Así que el lugar que se va a hundir ya está entretejido en el tejido del destino? Un hecho increíble…”

“Todas las cosas y todas las personas tienen un pasado, un ayer. Por eso tienen un presente, que continúa en el futuro. ¿No es así? No es diferente para vos, ni para mí.”


“Bien, en ese caso, ¿qué hacemos? Soy tan delicado que no puedo dormir en un lugar desconocido donde no me sienta cómodo. Soy de los que no puede dormir ni con una almohada nueva.”

“En principio ni siquiera tenemos almohadas.” “Bueno, esperaba usar tu regazo como mi almohada.” “Si ese es vuestro deseo, no os lo negaré…” Niégamelo, por favor.

Bromear con esta niña fue bastante complicado.

“Pero, ¿por qué pensar en dormir en una arboleda si sois un tipo tan delicado?”

“Tienes un buen punto.”

“Sois menos delicado que un bloque de acero.” “Vaya, eso dolió.”

En fin.

Este lugar ya no era el que conocía—o mejor dicho. Todavía no era el lugar que conocía.

Por así decirlo.

“Bueno, no importa.” Declaré. “En el peor de los casos, podemos quedarnos despiertos toda la noche. A decir verdad, no tengo mucho sueño.”

Mi constitución vampírica.

En este momento, mi biorritmo estaba en modo normal, o más bien en modo fácil, por lo que mi naturaleza vampírica estaba en horas bajas. Se podría decir que, físicamente, era como un humano normal. Aun así, mis parámetros de recuperación y curación mantenían niveles decentes.

Por lo tanto, no necesitaba dormir para “descansar”—mis progresos en el estudio de los exámenes se debían, por supuesto, en primer lugar, a la orientación de Hanekawa y Senjougahara, pero también, simplemente, me encontraba en la envidiable situación de poder utilizar parte de mi tiempo de sueño como tiempo de estudio.

Cuando lo pensé así, me sentí un poco culpable hacia los otros examinados, casi como si me estuviera dopando, pero—había riesgos concomitantes, así que dejémoslo estar.

“Pensaba ir mañana temprano.” Le dije a Shinobu. “Pero por qué no vamos a ver el lugar esta noche.”

“¿La residencia Hachikuji?” “¿Cuál otro?”

“Pensé que tal vez era la ubicación del Mister Donut la que querías confirmar.”

“Vaya delirio de autocomplacencia acabáis de tener…” Espera.

En esta época en la que ni siquiera la escuela de preparación era todavía un brillo en el ojo del arquitecto, ¿estaba el Mister Donut local en funcionamiento?

“Por cierto, Shinobu, ¿no tienes sueño?” “La noche es mi momento.”

“Ciertamente lo es. Pero, ¿significa eso que estarás cansada durante el día de mañana?”

“Una pregunta interesante. No, para mí, el sueño tiene un fuerte elemento recreativo. Puedo permanecer despierta si lo intento.”

“Ya veo…”

Si lo intentaba era cuando las cosas se ponían feas.

Shinobu, más caprichosa que nadie, podría ni siquiera intentarlo. Si se quedara despierta, sin duda me ayudaría—

“Se me ha concedido dormir en vuestra sombra, esta noche puedo descansar allí y así mañana poder realizar grandes hazañas.”

“…”

De alguna manera parecía entusiasmada.

No es que haya podido entender mucho sus sentimientos.

“¿Qué? No tengo sentimientos.” Y ante eso, Shinobu sonrió.

Eso demuestra por qué parecía tan depravada cuando sonreía.

“Es que me siento algo drogada, estar a solas con vos de esta manera de alguna forma me hace pensar en las vacaciones de primavera.”

“Ya veo…” Bueno, sí.

Como Shinobu necesitaba esconderse a mi sombra, parecía que pasábamos mucho tiempo juntos, pero estar solos—la sensación de estar solos juntos, también me resultaba nostálgica.

Por supuesto, me relacionaba con Hanekawa y Senjougahara, y con otros estudiantes de la escuela, y cuando llegaba a casa estaban mis hermanas pequeñas y mis padres.

Por muy poco sociable que pueda llegar a ser—nunca me encontré realmente solo, al menos en un sentido físico.

Así que nunca fuimos sólo nosotros dos. Huh.

Vacaciones de primavera.

Utilicé repetidamente el “infierno” como metáfora para describir esas dos semanas, pero—pero ese infierno no era necesariamente todo malo.

Sí.

La experiencia fue tal que no puedo recordar esas vacaciones sin amargura y abundante arrepentimiento—así que el epíteto infernal era más que una metáfora.

Aun así—había recuerdos felices. Mezclados en la experiencia.

La infelicidad no puede transformarse en felicidad. Pero además de la infelicidad—también había felicidad.

No como dos caras de la misma moneda—sino como cosas por separado.

“Shinobu.” “Ajá.”

“¿Quieres un beso?”

“¡¿Por qué?! ¡¿Y de dónde viene vuestra invitación de chica de escuela media?!”

Shinobu abrió mucho los ojos. Sus ojos dorados.

“¿Por qué no? Antes tú eras la que me invitaba.”

“¡Era una broma! ¡Si lo hiciéramos y saliera a la luz, Tsundere-chan o alguien me masacraría! ¡¿Acaso habéis olvidado que en la actualidad soy en esencia una niña pequeña?!”

“Sí, pero, puedes vencer a Black Hanekawa.” “Fue porque mi oponente era una excentricidad.” “Hunh.”

Me resultaba difícil entender ese equilibrio de poder.

¿Más débil que un humano, pero más fuerte que una excentricidad?

¿Como piedra, papel o tijera?

Bueno, supongo que era lo mismo entre los humanos.

“Huh, así que no nos besaremos.” “No lo haremos.”

Si lo hiciéramos, sería dentro de cien años, anotó Shinobu. Va a hacer falta mucha paciencia.

Esa sería una espera infernal.

“Realmente no entiendo tu criterio… ¿No es bueno si hay sentimientos de por medio? En ese caso, deberías saber qué hace un momento me refería a una forma americanizada, no a una forma erótica.”

“Callaos. Un beso no tiene nada de erótico.” Respondió Shinobu con sorprendente inocencia.

Hmmmm. Probablemente una finta.

“De todos modos, pongámonos en marcha. Será mejor encontrar un lugar cerca de la casa de los Hachikuji para dormir.”

“En efecto.”

“En el peor de los casos, negociaremos con los Hachikuji y les preguntaremos si podemos quedarnos a dormir.”

“Incluso yo sé que esa idea es absurda.”

Así que nos dirigimos a la residencia Hachikuji.

Confiando en el mapa que nos dibujó la mujer policía, no nos perdimos.

A diferencia de aquel Día de la Madre once años después, no nos perdimos.

Publicidad M-M2

El Día de la Madre—ese día en el que conocí a Hachikuji. Si mi intento tuviera éxito, ese día nunca llegaría.

No tenía ni idea de cómo se corregiría eso, de cómo se harían coincidir los extremos… pero mi encuentro con Hachikuji, y nuestra amistad, nunca habrían ocurrido.

Eso estuvo bien. Eso fue bueno.

Porque las excentricidades eran lo que “nunca existió” para empezar—y lo raro era que alguna vez existieran.

“Hey, Shinobu. ¿Puedo asegurarme de algo? Algo de lo que hablábamos antes. Si tengo éxito en salvar a Hachikuji, ¿me olvidaré completamente de ella después?”

“No lo sé.”

“¿No lo sabes? Qué irresponsable eres.”

“No tengo ninguna responsabilidad en esto.” Afirmó Shinobu. La niña tenía mucho valor. “Deja de interrogarme constantemente. Este también es mi primer deslizamiento temporal.”

“Deslizamiento temporal…” Una nueva y extraña expresión.

O mejor dicho, estaba muy desfasada.

“A fin de cuentas, no sería natural retener los recuerdos de una chica que ni siquiera conocisteis.”

“Sí, me dijiste que una paradoja temporal no ocurriría en absoluto, pero ¿qué pasa con eso? Si me olvido de Hachikuji, entonces no me decidiré a salvarla—¿lo que significa que no puedo salvarla?” Un bucle teórico seguía dando vueltas en mi cabeza, pero eso era lo que me parecía—y si era así, ¿no sería todo lo que iba a hacer un esfuerzo inútil?

“Si no puede producirse una paradoja temporal pase lo que pase, entonces no importa los esfuerzos que hagáis, desperdiciados o adecuados, tal vez no podáis salvar a la muchacha perdida.” Dijo Shinobu, aferrándose a mi nuca (como un koala, aunque no lo mencioné antes. Parecía que le estaba gustando la posición). “He permanecido en silencio para no apagar vuestro ardor, pero si las ruedas del destino ya están en marcha, así será—porque la muchacha perdida de este tiempo es una humana, no una excentricidad. Por muy valiente que sea vuestro intento de salvarla, incluso si intentáis escoltarla hasta la puerta de su madre, surgirá algún tipo de obstáculo que frustrará vuestro objetivo. O eso me parece a mí.”

“Entiendo.” “¿Mm? ¿Qué?”

“Nada, sólo he tomado una decisión, eso es todo—quiero decir, si tiene que ser así.” Dije. “Tendremos que provocar una paradoja temporal.”

Si nada ni nadie existe eso no cambia. Entonces le tocaba cambiar al destino.

***

 

 

La residencia Hachikuji era una casa unifamiliar prefabricada, sin ninguna característica particular que la distinguiera como el objetivo de nuestra búsqueda—pero Hachikuji no es precisamente un apellido común, por lo que parecía poco probable que fuera la casa de otra familia con el mismo apellido.

Cuando llegamos allí ya era de noche (por toda mi palabrería, acabé perdiéndome por el camino), y el barrio residencial ya se había sumido en un manto de silencio.

Prácticamente no se veían luces en las ventanas. Sólo las luces de la calle ardían con fuerza.

“Esperaba ver a la propia Hachikuji esta noche, pero creo que es demasiado tarde para eso.”

“Por las lámparas oscurecidas, me atrevería a decir que tanto la muchacha perdida como su padre se han acostado. Es decir, ¿es seguro asumir que son sólo dos?”

“Sí. No creo que tenga hermanos ni hermanas, y nunca oí hablar de que su padre se volviera a casar… Quizá no me enteré, pero si lo hubiera hecho, creo que lo sabría.” No encajaría. También existía, por supuesto, la posibilidad de que sus abuelos vivieran con ellos—pero si era el caso, no sería para tanto. “Estoy bastante seguro de que son sólo ellos dos. Y aunque, en el peor de los casos, su padre se hubiese vuelto a casar y su nueva cónyuge tuviera un hijo propio, y aunque ese hijo fuera una niña y tuviera más o menos la misma edad que Hachikuji— no hay forma de que yo confunda a nadie más con ella.”

“¿Incluso si pareciesen gemelas?” “Bueno…”

“Es probable que lo esté pensando demasiado. Sin embargo, en el peor de los casos, o incluso en el peor de los casos, no perdemos nada por estar atentos a todas las posibilidades.”

Porque no sabemos qué impedimentos pueden surgir para obstaculizarnos, advirtió Shinobu.

Probablemente ella misma no creía que tuviéramos que enhebrar la aguja de esa manera, pero no pudo evitar dar su consejo.

Ella que, como el enhebrado de una aguja. Incluso milagrosamente.

Terminó en su estado actual.

Publicidad M-M1

“De acuerdo.” Dije. “Vamos a pasar la noche considerando las posibilidades, y luego—las volcaremos en nuestras mentes para abordar cada contingencia. ¿Qué hora es, Shinobu?”

“Dejadme ver.” Shinobu miró el reloj de su muñeca derecha. Era un reloj de hombre y no se ajustaba en absoluto a su delgada muñeca. Parecía más bien una pulsera. “Son las 11 PM.”

“Hmm.”

“La hora en que los 7-Elevens de esta época cierran sus puertas,

¿no es así?”

“No hemos ido tan atrás.”

“Por cierto, mi amo. La mayoría de la gente cree que, como acabo de insinuar, 7-Eleven abría originalmente sus puertas a las siete de la mañana y las cerraba a las once de la noche, de ahí el nombre. Pero,

¿sabíais que en realidad fue un añadido posterior?” “¿Eh?”

“En realidad, el nombre derivó de un equipo de fútbol formado por los fundadores de la tienda. Y por eso el ‘siete’ se escribió de forma diferente durante los cinco años siguientes a su creación.”

“Vaya, ¿en serio?”

¡No tenía ni idea!

¡No me digas, de su equipo de fútbol! Entonces, entonces, ¿cuál era la otra ortografía? “Bueno, es una mentira.”

“¡¿Por qué decir semejante mentira?!” “Me preguntaba si podría engañaros.”

“¡No me engañes sólo como un experimento!” De todos modos, aparentemente eran las once.

¡¿Por qué demonios se necesitó una página entera sólo para saber la hora?! Es gracias a este tipo de cosas que Hanekawa está amenazando mi posición como narrador.

Tratemos de pasar por esto sin incidentes.

“… ‘Sin incidentes’ suena como si debiera significar ‘a propósito’? Comentó Shinobu. “Y a fin de cuentas ‘incidentalmente’ puede tener el significado de ‘por casualidad’.”

“Deja de reaccionar a cada palabra ya. A este paso, nunca terminaremos esta conversación, no importa cuántas páginas llenemos. Vamos a ver, no podemos quedarnos aquí toda la noche.”

Había un poste de teléfono.

Un poste telefónico muy adecuado.

Un poste telefónico tan ideal que me pregunté si podría ser un dios (el chiste es que el contador de dioses es un poste, dos postes, y así sucesivamente. Se me ocurrió probar un nuevo material, pero además de ser difícil de captar, es una especie de fiasco, y tal vez incluso desaconsejable).

Pero de ninguna manera íbamos a acampar aquí toda la noche.

Dados los alrededores, pasar la noche aquí no parecía ser un problema, pero este barrio residencial, tranquilo y en plena oscuridad, no parecía muy adecuado para una vigilancia—lo sentía en mis huesos.

Si tan sólo tuviera un aire más abigarrado.

Sí, una sensación más abigarrada—del tipo que podría atraer a los yokai.

“Bien.” Dije. “Tratemos de encontrar un lugar para dormir como habíamos planeado.”

Decidí volver a comprobar la placa del nombre de la casa, sólo para asegurarme—aproximarme a la puerta, asegurarme de que pone Hachikuji, y luego alejarme de allí.

Mientras seguía cargando a Shinobu.

Espera, si todo este tiempo la he estado cargando, ¿no debería estar pesándome?

“Sin embargo.” Murmuré. “La sensación de esas costillas rozando mi pecho alivia la carga…”

“¿Sois consciente de que vuestros sentimientos más íntimos, más allá de la humanidad, fluyen sin trabas?”

“Con las niñas, todo es cuestión de clavícula y caja torácica. Ups, vaya desliz. Definitivamente, esa no es una frase que se pueda expresar hoy en día.”

“Tampoco en el período Edo.”

“¿Pero no era esa época tolerante con las loli? La edad para casarse era increíblemente baja, e incluso eran tolerantes con los shota, ¿no? ‘Niños paje’ o lo que sea.”

“Bueno, a decir verdad…” Shinobu asintió mansamente. “Cada época tiene sus propias costumbres.”

“Lo mejor sería que encontráramos un parque grande y bonito como ese de nombre impronunciable—para poder pasar la noche sin incomodar a nadie, o mejor dicho, incomodando a alguien.”

“Mmm. Sostengo que dormir en una zanja al lado de la carretera sería lo más parecido a un ataúd de vampiro. Sin embargo, ¿queréis decir que sería una pena molestar al repartidor de periódicos o a cualquiera que se encuentre con nosotros por la mañana?”

“… Sí, algo así.”

Shinobu, personalmente estoy encantado de que por fin muestres cierta comprensión de las sutilezas de la sociedad humana, pero dormir en una zanja al lado de la carretera no es nada humano…

Es, literalmente, una idea de nicho.

Por desgracia, no había ningún parque cerca de la residencia Hachikuji, o si lo había, no conocíamos el terreno lo suficientemente bien como para encontrarlo (si lo hubiera previsto le habría preguntado a la policía). Cuando finalmente descubrimos un parque que se ajustaba a nuestras necesidades, ya había pasado la medianoche.

En otras palabras, ya era el gran día. Día de la Madre.

“Ahora es el momento del Rincón de Trivialidades de Shinobu.

¿Sabíais que el Día del Padre es anterior al Día de la Madre?” “Eso es mentira.”

“Maldición, ¿era tan obvio?”

Bueno, puede que todo el proceso se haya alargado más de lo necesario gracias a este tipo de idas y venidas (El Falso Rincón de Trivialidades de Shinobu), pero puede que en realidad no hayamos estado tan lejos de la residencia Hachikuji.

Si pudiera utilizar la función GPS de mi teléfono móvil, podría confirmar nuestra ubicación actual… Hablamos de lo mucho mejor que eran las cosas en el pasado, pero en realidad, habiendo viajado once años atrás, muchas cosas eran mucho más incómodas.

El pasado no fue tan bueno. Sí.

Al mismo tiempo, no fue del todo malo.

Es decir, el parque (que tenía un nombre fácil de leer, a diferencia del otro) tenía una tonelada de juegos infantiles—lo que me trajo recuerdos, ya que en el presente la mayoría de ellos han sido retirados en todo el país.

¡Vaya, están hasta los que giran!

En realidad, ahora que lo menciono, parece bastante peligroso… “¡Genial! Estoy muy emocionado. Shinobu, veamos quién puede

arrojar los zapatos más lejos al columpiarnos.”

“¿No es gracias a dichas payasadas que estas instalaciones han sido eliminadas de toda la tierra?”

Un estudiante de último año de secundaria retozando en un patio de recreo, amonestado por, a todas luces, una niña de ocho años.

Bueno, lo más probable es que me denuncien por jugar en el parque en mitad de la noche, así que aunque a Shinobu le haya gustado, probablemente sea mejor dejarlo.

“Ah, pero vamos.” Me quejé. “Quiero hacer volteretas hacia atrás y esas cosas. No las he hecho desde la escuela primaria. Me pregunto si la barra horizontal todavía sabe a sangre si la lames.”

“¿Sabor a sangre?” Los ojos de Shinobu se iluminaron. Parecía que mis palabras habían tocado su fibra sensible vampírica; nunca se sabía lo que llamaba su atención. “Ya veo, sangre, por su contenido en hierro… Si es así, en tiempos de vacas flacas podría masticar algo de hierro para sobrevivir.”

“Qué paliativo más sombrío…”

Si vamos por contenido en hierro el agua corriente debería bastarle. Probablemente.

De todos modos, no fuimos tan tontos como para perdernos en el juego, por supuesto—pero el hecho de que tuviera todo ese equipo de juego resultó ser nuestra gracia salvadora.

Pudimos pasar la noche tumbados en una de esas estructuras modeladas sobre un tubo de desagüe, que al menos nos proporcionó techo y paredes.


“Aunque es muy estrecho. Parecemos sardinas en una lata. No puedo discernir si voy a ser vuestro futón, o al revés.”

“Ninguna de las dos cosas, en realidad. Si es demasiado estrecho,

¿por qué no vuelves a mi sombra?”

“No seáis tan despiadado. Permitidme sentir vuestra caja torácica a cambio.”

“…”

No sé.

Bueno, desde la perspectiva de 600 años de Shinobu, a los dieciocho años debo estar todavía bien dentro del territorio shota.

Mi clavícula y mi caja torácica estaban en peligro.

¡Alguien me persigue! Etc.

Puse la alarma del teléfono para la mañana (como el reloj estaba ajustado al presente, tuve que tenerlo en cuenta en mis cálculos) y me fui a dormir.

Me sentí mal al poner patas arriba el estilo de vida de vampiro nocturno de Shinobu, pero también quería su compañía durante el día que se avecinaba.

***

 

 

“¡Cómo voy a dormir!”

Con ese grito repentino, abrí los ojos.

Faltaban treinta minutos para que sonara mi alarma.

El cuerpo de Shinobu se levantó a la par que el mío, es decir, por sorpresa.

“¿Qué, mi amo… qué ha ocurrido?” “Nada, lo siento.”

Me dolía tanto la espalda que había bromeado en voz alta al despertarme.

Había sido inimaginablemente sentimental por mi parte alegrarme tanto de que aún no se hubieran retirado las instalaciones de recreo del parque. No me habían dolido tanto las articulaciones ni siquiera cuando había dormido todo amontonado con Sengoku y Kanbaru en las ruinas de la escuela de preparación abandonada.

Durante las vacaciones de primavera fui un auténtico vampiro y no le di importancia, pero… en serio, Oshino era bastante impresionante. Por otra parte, llevar un estilo de vida vagabundo durante el tiempo suficiente, probablemente te acostumbraría a una cama así de dura.

Sin embargo, elegir un tubo de desagüe como cama había sido un gran error. Claro, estaba el hecho de que era duro, pero más que eso, más que nada, la maldita superficie era curva.

Supongo que me enamoré de los tubos de desagüe en primer lugar porque aparecen mucho en Doraemon, en cuyo caso todo esto fue culpa de Doraemon de una manera indirecta.

Maldita sea, Doraemon.

“¿Estás bien, Nobu-chan?” Pregunté.

“Aunque Nobu-chan sea probablemente una variación de Nobuemon, es como un nombre de niño japonés normal. Y su entonación es bastante parecida a Nobi-chan.”

“Entonces, ¿estás bien o no?”

Sí, estoy bien, respondió Shinobu.

Incluso habiendo perdido la mayor parte de su naturaleza vampírica, seguía siéndolo en el fondo, y supongo que podría hacer frente a este duro entorno y algo más.

“No es así. No he podido pegar ojo.”

“¿Eh? ¿Por qué? ¿No pudiste invertir tu ciclo de sueño?”

“No es eso. Os aferrasteis a mí como si vuestro sueño fuera problemático, así que yo a su vez no pude dormir.”

“…”

¿Realmente la había usado como una almohada para el cuerpo? ¿O como un futón?

“Mientras estabais dormido tocabais mis costillas como un güiro y gritabais: Hanekawaaa, Hanekawaaa, Loli Hanekawaaa.

“¡Mentirosa!” ¡Por favor, no como un güiro!

“Pensé que tal vez venir a este pasado podría haberos desamparado, así que opté por contenerme y complaceros.”

“¡Mentirosaaaaaa!”

¡Si es verdad, nunca podría enfrentarme a ti, ni a Hanekawa, ni a Senjougahara de nuevo!

Sería el peor personaje, ¡necesitaría morir mañana!


“Je, pero al menos por hoy, tengo que vivir.” Me exhorté a mí mismo. “Porque en este Día de la Madre, debo salvar a Hachikuji.”

“Intentabais hacer pasar esto por una broma con vuestras palabras en apariencia geniales. Pero no es cosa de risa, la huella de vuestra mano sigue siendo claramente visible en mis costillas. Echad un vistazo, comprobadlo por vuestra cuenta.”

“Qué pena, es una novela, así que no puedo.” “Eso se soluciona añadiendo una ilustración.”

“¿Qué, de una niña levantando su vestido para mostrar lo que hay debajo?”

“Al estilo de la versión para iPad de Alicia en el País de las Maravillas.

“¿Te refieres a la interactividad?”

“El lector podrá levantar mi vestido con sólo un toque.”

“Vaya… Bueno, cambiando de marcha, ¿nos dirigimos a la residencia Hachikuji? Podemos saltarnos el desayuno. Si estás dispuesta a soportarlo, te invitaré a Mister Donut cuando volvamos al presente.”

“No, no podéis cambiar de marcha a vuestro antojo. ¿Creéis que la mera mención del Mister Donut os permite pasar por alto cualquier cosa? Ya os habéis comprometido a invitarme a un festín en recompensa por el viaje en el tiempo.”

“Urk.”

“Si queréis hacer desaparecer esta huella, debéis invitarme al Café Andonand.”

“¿Por qué sabes de la franquicia de lujo de Mister Donut…”

¿Quién se lo dijo?

En mi ciudad no hay nada de eso, ni lo hubo nunca, ni lo habrá.

“Esa huella de mano se desvanecerá en un santiamén, no probará nada.” Me burlé.

“Entonces tendré que demostrarlo tomándome un selfie con vuestro teléfono.”

“Olvídate de demostrar nada, si una foto así acaba en mi teléfono, Hanekawa cortará todos los lazos conmigo y Senjougahara romperá conmigo.”

“Y seréis apresado por esa mujer policía.”

“Me pregunto si todavía está en la fuerza en el presente…” Si es así, entonces podríamos encontrarnos de nuevo en el otro lado. Después de todo, los lazos que unen son inescrutables. “De todos modos, debes ser el único vampiro que va por ahí usando palabras como selfie.”

“Y las costillas de esa vampiro—”

Publicidad G-M2



“Me disculpo, me disculpo sinceramente, ¡así que por favor deja de sacar el tema!”

No recordaba en absoluto el incidente, pero teniendo en cuenta lo difícil que era dormir en aquella sección de tubería, me parecía verosímil que reaccionara así ante mis pesadillas. Y así, desconfiado de mí mismo, acabé pidiendo perdón de todo corazón.

“Bueno, no tengo intención de vengarme de vos, dada vuestra promesa de invitarme a hordas de rosquillas, cada día y todos los días.”

Shinobu parecía ciertamente satisfecha de sí misma.

Lo que me dio la sensación de que me habían tendido una trampa. Incluso podría haber hecho la huella de la mano ella misma.

“Bien.” Asentí. “Me contentaré con la persistente posibilidad de haber disfrutado al máximo de tus costillas.”

“Vaya, veo que sois un chico positivo…” Nos arrastramos fuera de la tubería.

El tiempo estaba despejado, igual que ayer.

Y por ayer, me refiero al ayer de hace once años.

Tenía la esperanza de que lloviera, ya que eso facilitaría el seguimiento de Hachikuji (la lluvia oculta tanto los sonidos como las figuras, y los paraguas hacen que te descuides), pero las cosas no salieron como yo quería.

De todos modos, Hachikuji no había dicho nada de qué lloviera ese día.

Shinobu y yo hicimos unos ligeros estiramientos en el parque para aflojar nuestros tensos músculos (no sé si realmente necesitaba estirar, pero de todos modos lo hizo conmigo), y nos dirigimos a la casa de los Hachikuji.

Eran las 8 AM, hora local. Parecía un buen momento.

No es que no haya pensado en ello antes de irme a dormir, pero al ejecutar nuestra misión de escondernos detrás de un poste telefónico y vigilar la residencia de los Hachikuji, la verdadera cuestión era hasta qué punto íbamos a parecer sospechosos.

Por muy indulgente que sea la época, cuanto más se prolongue nuestra vigilancia, mayor será la probabilidad de que un buen vecino nos diga algo.

Dado que era domingo, nuestro objetivo probablemente saldría de casa en algún momento de la mañana, pero como se trataba de Hachikuji, no podíamos estar seguros de nada.

Por lo que sabemos bien podría salir a las cinco de la tarde.

Había dicho que su mochila contenía todo lo necesario para pasar la noche, y si era así, era perfectamente plausible que su itinerario planeado implicara ir allí tarde y volver temprano.

La muchacha era propensa a dejar volar su imaginación y podría estar inexplicablemente preocupada por sobrepasar su tiempo de estancia o algo así.

“Qué fastidio.” Me quejé. “Puede perderse.”

“¿No es eso precisamente lo que tratamos de evitar?”

Nuestras bromas habituales continuaron, pero en ese punto preparé una estricta contramedida.

Una contramedida para no ser abordado por nadie del vecindario, es decir, aunque la vigilancia se prolongue durante diez horas— consistía en dar sangre a Shinobu.

En dejar que bebiese mi sangre.

¿Por qué iba a hacer esto, que en cierto modo era una costumbre consagrada entre nosotros, aunque no nos estuviéramos preparando para la batalla? Porque al dejarla beber mi sangre, podría elevar el nivel de sus poderes vampíricos y permitirle modificar su apariencia externa.

Que se transformara o no dependía de sus intenciones y dependía completamente de ella—pero por esa misma razón, esperaba que cambiara de su forma de niña.

Si actualmente fuera una estudiante de primaria de ocho años destacaríamos.

Entonces, al tener la apariencia de una chica de trece años de escuela media eso se solucionaría un poco.

En realidad, convertirse en una adulta completa sería lo más adecuado para nuestros objetivos, pero si se acercase demasiado a su “forma original”, ambos nos volveríamos susceptibles a los rayos del sol.

Nuestros cuerpos se reducirían a cenizas. O, al menos, terminarían muy quemados.

Tenía que conservar un rastro de humanidad. La parte que prospera bajo el sol.

“¿Y qué sentido tiene que me convierta en una chica de escuela media?” Preguntó Shinobu. “Os haré saber ahora mismo que, en opinión del mundo, confraternizar con una chica en escuela media es suficiente, más que suficiente, para constituir un Complejo de Lolita.”

“Esa no es la cuestión.”

Claro, un estudiante de tercer año de secundaria que sale con una estudiante de primer año de escuela media probablemente sería tratado como un paria, y en ese sentido, Shinobu tenía toda la razón—pero nah, ni siquiera estoy hablando de eso, ¿de acuerdo?

No me entretengo con las muchas edades de Shinobu ni nada.

Le pregunté: “¿Te acuerdas de las chicas de escuela media de ayer?”

“Las he olvidado.” “¡Bueno, recuérdalas!”

“¿Oh, ellas? Ya veo, entiendo vuestra pretensión de artificio.” “Ho ho, muy perspicaz, Shinobu.”

Seguro de que no entendía nada, la incité a deletrearlo. Los dos nos estábamos metiendo demasiado en el asunto.

“A través de vuestra conversación con ellas, habéis descubierto vuestra fascinación por las chicas de escuela media.”

“¡No, te digo que no es eso en absoluto!”

“Cuando volvamos al presente, ¿la primera parada será la vivienda de Flequillo-chan? No, eso es innecesario, porque en vuestra propia casa ya hay dos kits con carácter de hermanita en escuela media.”

“No involucres a mis hermanas en esto.”

Es decir, Sengoku era una cosa, pero que el objeto de tu fascinación fueran hermanas menores era otra cosa.

“Entonces, no descartáis a Sengoku, ¿estoy en lo cierto?”

“¿Mm? Ah, bueno, está en su segundo año de escuela media. Y últimamente parece extrañamente crecida, ¿sabes?”

“Entonces las acciones de esa persona han comenzado a dar frutos, que inesperado…”

“¿A quién te refieres con ‘esa persona’? Suena como un jefe final…

¿Kaiki?”

“No, no me hagáis caso. No quiero hablar de ello. Ahora bien, si lo que decís es cierto, ¿qué sentido tiene que adopte la apariencia de una chica en edad de escuela media? ¿En hacer que recuerde a esa pandilla de chicas?”

“Porque, obviamente, es mucho más probable que alguien dijese algo si voy acompañado de una niña de ocho años. Por supuesto, te quiero conmigo en esta vigilancia. Por eso, el ingenioso y joven Koyomi-san tuvo esta idea: si te alimentaba con suficiente sangre para que crezcas hasta convertirte en una chica en edad de estar en escuela media, adoptarías una apariencia realmente bonita y exudarías una nobleza inabordable. Esa aura sobre ti que hará que cualquiera se lo piense dos veces antes de dirigirse a ti, una belleza hechizante que podría robar el corazón de cualquiera.”

“…”

¿Eh?

Sólo estaba diciendo lo obvio, así que ¿por qué Shinobu, con su apariencia de chica en escuela media, se sonrojó?

¿Qué pasa, no te sientes bien?

Parece que con el regreso de tu naturaleza vampírica, el sol se convierte realmente en tu enemigo.

Publicidad M-M5

Pensé   que   no   habría   problema   con   cinco   o   más   años   de crecimiento…

“¿Estás bien?”

“¿Mm? ¿Mmm? O-Oh, sí, todo está bien. B-Bueno, entonces, sigue con lo que estabais diciendo. Podéis alabarme más, más, más.”

“¿Eh? No te estaba alabando, pero… Verás, lo que digo es que si eres una niña pequeña y estamos juntos, es más probable que alguien nos moleste, pero si eres una chica de escuela media y estamos juntos, mantendrán las distancias. Seguiremos levantando sospechas, pero creo que será más difícil que alguien se nos acerque, eso es todo.”

“¿Más difícil que alguien se nos acerque? ¿Por qué, por qué?” “Bueno, porque eres demasiado bonita…”

“¿P-Podríais ser más específico sobre qué parte de mí es bonita?”

“¿Hm? No es nada en concreto, es todo. Desde tu cabello dorado y flexible hasta tu piel suave, la forma de tus ojos, tus labios y, por supuesto, tu figura, perfecta incluso con sus rastros de inmadurez, por no mencionar las proporciones inmaculadas de tus brazos y piernas. No hay duda de que si Leonardo da Vinci viviera hoy, pintaría tu retrato en lugar de la Mona Lisa.”

“¡C-Callaos!”

Me dio una patada.

Me pateó con su poder de vampiro.

Yo también me había convertido en vampiro, así que debería haberse equilibrado y no doler mucho—eso se podría pensar, pero en realidad sufrí el suficiente daño como para acabar de espaldas mirando al cielo.

No se guardó nada con esa patada.

¿Qué demonios, estaba molesta o algo así?

“Um, ¿he dicho algo malo?”

“No lo hicisteis, no lo hicisteis. Ni una sola cosa. Bien, bien, si vos lo decís, no me detendré en cooperar con vos para aumentar vuestro poderío.”

Cuando se levantó, vi que la ropa de Shinobu con apariencia de asistir a la escuela media había cambiado de su modelo estándar—al recuperar tanto poder, podía manipular la realidad a su antojo, al menos en el plano de la ropa.

Admiré su nuevo traje.

Claramente el uniforme de las alumnas de escuela media que nos encontramos ayer.

Un vestido, como el de Sengoku, es decir, el uniforme de la escuela media a la que había asistido.

¡Vaya, una tarjeta súper rara!

Shinobu en uniforme…

“Así será menos probable que nos aborden.” Explicó. “Y además, un uniforme es suficiente para avalar el carácter de una persona en este país.”

“S-Sí. Por supuesto.”

No es que no se me haya ocurrido.

Pero nunca me imaginé que Shinobu, tan exigente con el estilo como la superpopular representante de clase, llevara algo parecido a un uniforme escolar, que tantas otras personas también llevaban, así que el plan se había quedado en el tintero.

Para que Shinobu llegue tan lejos mostrando una actitud cooperativa por sí sola… Ni siquiera la había tentado con Mister Donut, así que ¿qué demonios podría haberla puesto de tan buen humor?

No tenía ni idea.

Era un rompecabezas, un misterio.

Si   pudiera   descubrirlo—sería   masivamente   ventajoso   en   mis futuras interacciones con ella.

“Si lo deseáis, también puedo preparar un uniforme para vos.” “De acuerdo, sí, tal vez deberías.”

Decidí presumir de su buena voluntad.

Aunque me incomoda un poco pensar que hace once años, también, el simple hecho de llevar un uniforme te hacía menos sospechoso en este país.

Shinobu creó un uniforme del instituto Naoetsu (masculino) para mí, y yo volví a entrar en la sección de tubería para cambiarme en ella—completando así nuestra transformación en un estudiante de secundaria y una estudiante de intercambio de escuela media que para nada eran sospechosos estando juntos.

Por cierto, mientras me cambiaba, Shinobu modificó aún más su estilo para que tuviera gafas y trenzas, por alguna razón basándose en el antiguo aspecto de Hanekawa. Tal vez porque ésa era la imagen de Shinobu de una estudiante diligente.

La verdad es que no se me ocurría ninguna buena razón para que una estudiante de escuela media y otro de secundaria estuvieran juntos, pero por si acaso alguien nos decía algo, pensé que podríamos pasar de largo si les decíamos que ella estaba haciendo una estancia en casa de mi familia—y mientras inventábamos esa excusa tan rebuscada, llegamos de nuevo a la residencia Hachikuji.

No es que hayamos elaborado las indicaciones del escenario ni nada por el estilo, pero nos situamos cerca del poste telefónico y empezamos a vigilar.

Había tomado el libro que Loli Hanekawa me había tirado y luego abandonado el día anterior, así que mientras hacía que Shinobu lo leyera (y que pareciera una chica extrañamente aficionada a leer)—al mismo tiempo yo fingía tontear con mi teléfono (su tipo aún no existía, pero en virtud de eso, debía de parecer un estudiante de secundaria jugando a un videojuego).

Publicidad M-AB

Esperamos a que Hachikuji saliese de su casa.

Hachikuji Mayoi—con su enorme mochila, de camino a casa de su madre, con el corazón seguramente lleno de ansiedad y expectación.

Supuse que, efectivamente, se iría mientras aún era de día—por lo que nuestra vigilancia no duraría tanto.

Es probable que ni siquiera tenga que esperar media hora— Para verla.

A la Hachikuji Mayoi que está viva, y que respira.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios