Tearmoon Teikoku Monogatari (NL)

Una hora antes de que comenzara el baile, Mia estaba sola en los baños comunales. ¿Era esta la seguridad de la realeza? ¿La confianza de la élite? ¿La laxitud (relajación) de actitud ofrecida solo a aquellos que creían que llegar tarde era fascinante? No, no fue. De hecho, Mia estaba cerca de las lágrimas.

—Hnnngh, esto es lo peor… ¡Esto es lo peor!

Los vestidos extravagantes, que requerían envolverse en capas sobre capas de tela, estaban de moda entre las señoritas de la nobleza. Combinado con la amplia aplicación de maquillaje, fue fácil ver cómo la preparación de una pelota podría llevar varias horas.

Entonces, ¿Por qué estaba Mia sentada en un baño, sola, sin siquiera Anne a la vista? La respuesta yacía en su cabello, que estaba cubierto de una especie de sustancia pegajosa y mucosa. Actualmente, ella estaba enjabonando frenéticamente su cabello en un intento de limpiarlo…

Explicar esta situación requeriría reproducir los eventos que llevaron a este momento.

Mia se levantó temprano ese día y después del almuerzo comenzó a cambiarse su vestido, quedando mucho tiempo hasta la fiesta. Su padre excesivamente cariñoso, el Emperador, le había enviado un vestido de la mejor calidad que no se podía encontrar en ningún otro reino. Aunque fue especialmente lento de poner, también fue incomparablemente hermoso. Para cuando terminó de ponerse el elaborado vestido y se había aplicado el maquillaje perfecto para complementarlo, todavía quedaban dos horas para la fiesta. Ese margen de maniobra de dos horas y la comodidad que ofrecía demostrarían ser su perdición.

—Como todavía hay algo de tiempo, tal vez debería echar un vistazo a la academia…

Mientras paseaba por los terrenos de la escuela, se encontró con una nueva vista. El club ecuestre paseaba sus caballos.

«Esta es la primera vez que los veo así de cerca»

Mientras miraba distraídamente los caballos, uno de ellos bajó la nariz hacia ella. Mia no era reacia a los animales. Suponiendo que la criatura solo quería acariciar, extendió la mano, con la intención de darle una palmadita.

¡Ker-choo!

El caballo estornudó sobre ella.

—¡Hyaaaaaah!

Fue un estornudo poderoso, acompañado de una gran carga útil. Después de que pasó la ráfaga de aire, Mia se encontró cubierta de mocos de caballo.

—Ughhh… Por qué… por qué sucedió esto… — dijo una Mia, sollozando al borde de las lágrimas

Fue realmente un evento desafortunado. Por supuesto, también era cierto que, en su emoción, se había rociado una tonelada de su perfume favorito sobre sí misma, y el olor podría haber sido un poco fuerte. Sin embargo, como la víctima innegable en esta situación, definitivamente merecía un poco de simpatía.

Anne estuvo a punto de desmayarse cuando vio a su maestra abatida caminando hacia atrás. Rápidamente corrió a consolar a Mia, pero sabía muy bien que el vestido estaba arruinado. Aunque le había ordenado a Mia que se limpiara en el baño, había poco más que pudiera hacer. O eso pensó ella…

—… Bueno, no hay nada para eso. Supongo que tendré que arreglármelas. Anne, ¿Podrías ayudarme a ponerme un poco de maquillaje básico para no hacer el ridículo? Y en cuanto al vestido, solo elige uno viejo…

La voz desanimada de su maestro encendió un fuego en el alma de Anne. ¡Ella era una doncella, maldita sea, y como doncella, no iba a dejar que esto la detuviera!

«¡Esto no va a hacer! ¡No permitiré que la princesa se avergüence!»

El fuego creció y creció. ¡Rabiaba y rugía, infundiéndola una pasión ardiente que despertó su verdadero espíritu de doncella !

«¡La princesa Mia es una belleza natural, por lo que ni siquiera necesita mucho maquillaje para lucir deslumbrante!»

Con ese pensamiento en mente, ella solo aplicó un delineador. Los ojos de Mia normalmente emitían una vibra un poco dura, por lo que suavizó un poco las esquinas. El resto del tiempo se dedicó al atuendo de Mia. Era demasiado tarde para ponerla en un vestido formal, tendría que ir con una semi formal; en cuyo caso, era mejor evitar algo demasiado llamativo. Al final, se decidió por un vestido completamente blanco. Mostraba un poco de hombro, y la falda estaba en el lado más corto, por lo que era perfecta para bailar. Como toque final antes de que se agotara el tiempo, se aplicó un poco de perfume (uno con un aroma mucho más débil) que el que Mia había usado antes.

Cuando Mia llegó a la fiesta, llamó la atención de todos los chicos allí. Entre un mar de chicas, todas con vestidos extremadamente elaborados, Mia sola irradiaba un aura de salud. La razón era simple: casi todas las otras chicas llevaban corsés bien atados, lo que tenía el efecto de agregar un brillo de color a su piel que se describe mejor como “blanco asfixiante”. Con sus rostros pálidos más pálidos que bonitos, algunos de ellos parecían desmayarse en cualquier momento. En comparación, Mia llevaba un vestido sencillo sin corsé. También acababa de tomar un baño agradable y tibio que hacía que su sangre fluyera, así que sus mejillas estaban sonrosadas y su piel brillaba. Además, como resultado de cambiar un vestido llamativo elaborado por uno más simple, el enfoque de todo su atuendo había cambiado. El atractivo ya no era el vestido, sino su contenido. Lo que se suponía que era un atuendo carente de extravagancia se convirtió en la prenda perfecta para mostrar los frutos de los meticulosos esfuerzos de Anne… la piel impecable de Mia.

Todos estos factores se unieron para impulsar el consenso público de Mia de “pasablemente bonita” a “bastante bonita”. No se volvió “exquisitamente bonita” ni nada. De repente no se convirtió en leyenda. Sin embargo, su belleza definitivamente fue suficiente para llamar la atención de todos los chicos de la fiesta. Y cuando la bella Mia decidió dejar escapar un suspiro triste, un par de ellos probablemente sufrieron un latigazo cervical y se volvieron para mirarla tan rápido.

«Como pensaba… Al estar tan ligeramente vestida, me destaco como un pulgar dolorido.» pensó Mia.

Ninguno de los chicos de la fiesta podría haber imaginado que Mia llegó con un vestido sencillo porque había sufrido una terrible desgracia en la nariz de un caballo. Todo lo que sabían era que la princesa había robado inmediatamente muchos de sus corazones.