Otonari No Tenshi (NL)

Volumen 2

Capitulo 10: La Metamorfosis Del Ángel

Mahiru también estaba actuando extraño al día siguiente.

Para ser más precisos, no parecía tan abatida como el día anterior, ni se veía especialmente triste. Pero estaba muy rígida y parecía cautelosa de una manera que era difícil de describir.

A pesar de que estaba sentado junto a Mahiru en el sofá de la sala, Amane se sintió rodeada por un aire de tensión crepitante. Cuando intentó siquiera mirarla, ella prácticamente saltó, apretando su cojín favorito con fuerza. Sin embargo, Amane también podía decir al mirar el reflejo en la pantalla de su teléfono inteligente que cada vez que él apartaba la mirada de ella, ella lo miraba directamente.

Se preguntó por qué estaba actuando de esa manera, y pronto llegó a la conclusión de que debía ser por lo que había sucedido el día anterior.

• Ella todavía debe sentirse bastante incómoda.

Ayer, los dos se habían abrazado, y aunque lo había estado haciendo para consolarla, le preocupaba que eso pudiera causar problemas en su relación. Aferrarse a él pudo haber sido un impulso momentáneo, y existía la posibilidad de que se arrepintiera ahora que había vuelto a sus sentidos.

Recientemente, habían tenido mucho contacto físico cercano, pero esta fue la primera vez que ella se presionó contra él con tanta valentía. Era inevitable que se sintiera un poco nerviosa después.

Aunque no parece que me odie por eso ni nada.

Si lo hiciera, razonó, no estaría aquí, en su apartamento, sentada a su lado.

Pero cada vez que se acercaba a ella, ella se apartaba de él. “… ¿Debería darte un poco de espacio?” “N-No, no es eso”.

Había pensado que sería mejor mantener la distancia por un tiempo hasta que ella se calmara, y lo había sugerido, pero Mahiru rápidamente negó con la cabeza.

“E-Esto es, bueno… estoy avergonzada porque me viste en un estado tan patético. Lloré tan fuerte…”

“Ah, ya veo…”

Aparentemente, ella estaba avergonzada por todas las lágrimas. Recordó que después de que sus sollozos se calmaron la otra noche, había enfriado el área alrededor de los ojos con hielo para que no se hinchara. Pero nada de lo que hizo pudo cambiar el hecho de que Amane la había visto en ese estado vulnerable, que parecía realmente molestarla.

“Bueno, realmente no me molestó, así que…”

“Pero me molesta. Fue el mayor error de mi vida dejar que me vieras así”.

“Eso va un poco lejos… Mira, si reprimes todas esas cosas, es obvio que eventualmente vas a explotar, tonta”.

Parecía que Mahiru estaba a punto de realizar una de sus características demostraciones de coraje, por lo que Amane suspiró y, antes de que pudiera detenerlo, extendió la mano y le pellizcó la mejilla. Su piel era suave y flexible entre sus dedos.

Mahiru parecía confundida y nerviosa. Ella miró fijamente a Amane. “¿Hey qué estás haciendo?”

“Si no dejas salir tus sentimientos, vas a quebrarte en algún momento. Está bien dejar que otras personas te apoyen, de verdad. Si soy aceptable, entonces puedes confiar en mí. Si quieres llorar, te cubriré en cualquier momento y fingiré que no puedo verte. Tienes que aprender a dejar que otras personas te cuiden un poco”.

Ayer, había dejado que algo de lo que había reprimido saliera a la luz, pero parecía que había mucho más de donde venía eso. Criticando a Mahiru por su desgano, le pellizcó la mejilla con fuerza como amonestación.

Si ella dijera que Amane no era de fiar y que no podía depender de él, él se resignaría a esa evaluación y aceptaría su despido. Pero mientras ese no fuera el caso, quería que ella confiara más en él y le diera la oportunidad de cuidarla a veces. Quería estar allí para ella, especialmente cuando no tenía a nadie más.

“Ayer, asentiste con la cabeza como si hubieras entendido, entonces, ¿por qué estás retrocediendo en eso ahora? Puedes depender de mí. Tú no estás solo.”

“… No solo…” Mahiru asintió mientras consideraba sus palabras. Parecía absolutamente estupefacta ante la idea de que no tenía que soportar todo ella sola.

Amane le revolvió el pelo. “Siempre estoy de tu lado. Si los llamas, Chitose e Itsuki también aparecerán, al igual que mis padres. Esa es la cantidad de personas que se preocupan por ti, por la verdadera Mahiru”.

Mahiru había lamentado el hecho de que nadie la quisiera. Pero eso fue en el pasado. Ahora las cosas eran diferentes. Había tantas personas que querían a Mahiru y querían ayudarla. Tenía que saber cuánto significaba para todos.

Mahiru se quedó en silencio por un momento mientras consideraba lo que había dicho Amane. Luego, tímidamente, lo miró con ojos que buscaban consuelo.

“… ¿Y tú?”

“¿Mmm?”

“¿También te preocupas por mí…?”

La respiración de Amane se atascó en su garganta por un momento, luego se rascó la mejilla. “Quiero decir… si estamos sentados aquí juntos así, eso debe significar que me preocupo mucho por ti”.

Amane sabía que podía ser bastante distante. Simplemente no estaba interesado en gastar mucha energía en una relación con alguien a menos que fuera realmente importante para él. Pero cuando se preocupaba por alguien, siempre estaba dispuesto a hacer todo lo necesario para ayudarlos.

Y se había preocupado por Mahiru durante mucho tiempo.

Quería quitarse algo de la dolorosa carga de sus delicados hombros. Quería que ella sonriera pacíficamente. Quería que ella fuera feliz, quería hacerla feliz.

“… ¿En serio…?”

Mahiru murmuró, enterrando su rostro en el cojín. Amane pensó que debía ser bastante vergonzoso escuchar todo eso en voz alta. Por otro lado, él era el que había tenido que decir todo eso en voz alta, así que si alguien se iba a sentir avergonzado, era él.

… Aunque estoy seguro de que Mahiru no se lo tomará a mal.

Estaba realmente preocupado de que ella pudiera pensar que estaba tratando de aprovechar su vulnerabilidad. Obviamente, si eso es lo que pensaba, su tiempo juntos terminaría rápidamente.

Afortunadamente, Mahiru no parecía haber notado la ansiedad de Amane.

Lentamente levantó la cara del cojín y lo miró.

“… ¿Amane?”

“¿Qué pasa?”

“¿P-Podrías, eh, darte la vuelta y mirar hacia el otro lado?”

“¿Eh? ¿Por qué?”

“N-No te preocupes por qué…”

Estaba confundido sobre por qué de repente ella le estaba pidiendo que se diera la vuelta, pero obedientemente le dio la espalda a Mahiru.

Estaba esperando ansiosamente, sentado con las piernas cruzadas en el sofá, cuando sintió algo suave y cálido presionar contra su espalda. Eso fue suficiente sorpresa para hacer que Amane se pusiera completamente rígida, y cuando sus delgados brazos se envolvieron alrededor de su pecho, él estaba prácticamente petrificado.

Mahiru obviamente lo estaba abrazando por detrás. Por el momento, Amane estaba agradecida de que no lo estuviera haciendo desde el frente.

“… Eh, ¿Ma-Mahiru…?” Amane tartamudeó, sintiendo su corazón latiendo en su pecho.

Ella se movió levemente, todavía aferrada a su espalda. “… Así que lo de ayer… muchas gracias. Quería volver a decirte lo agradecida que estoy”.

Tal vez por eso se aferraba a él de esta manera. Era más fácil para ella agradecerle si él no la miraba directamente.

“O-Okay…”

“… Me has dado tanto, tanto, Amane”.

“P-Pero realmente no hice nada especial…”

“Puedes pensar que no es importante, pero es muy importante para mí. Así que de nuevo, gracias”.

“…Seguro.”

“Estoy tan contento de tenerte a mi lado. No estoy segura de qué tan bien podría lidiar con todo si tuviera que enfrentarlo sola”.

“… ¿Oh?”

Esta era probablemente la forma en que Mahiru le mostraba que le importaba.

Amane estaba feliz de que Mahiru sintiera que podía apoyarse en él. Él puso sus manos sobre las de ella, queriendo hacerle saber que no tenía ninguna intención de dejarla sola. Cuando lo hizo, todo su cuerpo se estremeció de repente.

Al darse cuenta de que probablemente se había dejado llevar demasiado de nuevo, Amane retiró su mano presa del pánico, pero Mahiru explicó con una voz que estaba ahogada porque su rostro estaba ligeramente enterrado en su espalda. “E-Está bien; Me sorprendió…” Una de sus manos vagó alrededor, tratando de encontrar la de Amane de nuevo.

Sintiéndose aliviado, Amane tomó la mano de Mahiru, y esta vez ella le devolvió el apretón. Amane se estremeció de sorpresa, y cuando lo hizo, sintió la cabeza de Mahiru presionando contra su espalda.

“… ¿No ibas a ser tú quien me sujetaba?”

“S-Si estás de acuerdo con eso…”

“Eres la única persona con la que haría algo como esto, Amane”, dijo dulcemente. “El único.”

Amane se puso rígido de nuevo. Sintió a Mahiru tratando de enterrar su rostro en su espalda. Debe haber estado bastante avergonzada después de su repentina confesión. Aun así, Mahiru no lo dejó ir, y sintió que ella debía confiar mucho en él, y eso lo hizo tan cohibido que quería arrancarse el corazón. De hecho, Amane estaba seguro de que estaba aún más avergonzado que Mahiru.

Finalmente, Mahiru pareció calmarse y una vez más apretó la mano de Amane con fuerza.

“… D-De todos modos, como prometiste… por favor, mírame por lo que realmente soy. Nunca me quites los ojos de encima”.

“S-Seguro. Pero yo… eh… realmente no puedo verte ahora mismo…”

“Bueno, si me miras ahora, me enojaría”.

“O-Oh, por supuesto… Bueno, definitivamente no puedo verte cuando nos sentamos así, así que… supongo que puedes relajarte”.

Sabía que probablemente estaba tratando de ocultar su vergüenza, así que siguió obedientemente sus instrucciones. Más importante aún, tratar de echar un vistazo solo la molestaría.

Además, pensó Amane, cubriéndose la cara con la mano libre, es mejor que tampoco me vea ahora mismo. Dejó escapar un suspiro silencioso.

… En este punto, sería más extraño si no me enamorara de ella.

“El nuevo semestre comenzará pronto, ¿eh?”

Fue varios días después de la llorosa revelación de Mahiru. Parecía haber vuelto por completo a la normalidad, no actuaba tensa ni le lanzaba miradas incómodas ni nada por el estilo. Y cuando levantó la vista del libro de texto que estaba leyendo y le murmuró a Amane, fue como si acabara de recordar qué día era.

Desde su charla, los dos se habían acercado aún más. Tal vez fue porque estaban leyendo del mismo libro, pero probablemente en la actualidad solo había dos o tres manos de espacio abierto entre ellos. Estaban lo suficientemente cerca como para que Amane pudiera sentir el calor de Mahiru y oler el dulce aroma que emanaba de ella. De vez en cuando, algo suave chocaba contra él.

Amane apenas estaba aguantando.

“S-Supongo que sí, sí. Una vez que termine este fin de semana, será un semestre completamente nuevo. Es un poco deprimente que haya un cambio de clase”.

“¿En qué manera…?”

“No soy bueno haciendo amigos, así que una vez que Itsuki se haya ido, no tendré a nadie con quien pasar el rato”.

Mahiru pareció sorprendida. “¿Cómo puedes estar tan seguro de eso…?”

“No me malinterpretes, puedo mantener una conversación normal tan bien como cualquier otro. Pero nunca dejo de ser conocidos, eso es todo”.

Amane sabía muy bien cómo hablar con la gente, pero eso no era lo mismo que hacer amigos. Simplemente sentía que su personalidad no tenía mucho que ofrecer, y ciertamente no era particularmente encantador, por lo que generalmente tenía problemas para hacer amigos. De todos modos, siempre había sido más un personaje de fondo.

Pero él era el tipo de persona que estaba bien por su cuenta, y si estaba separado de Itsuki, así era como iban las cosas y no podía ser ayudado. Simplemente pasaría el año solo.

“… Nunca das el primer paso hacia adelante, ¿verdad, Amane?”

“Uh—”

“Tú eres una buena persona. Creo que es una pena que no conozcas a nadie fuera de Itsuki y Chitose. A la gente le gustarías si te conocieran un poco, así que deberías reducir todo ese acto distante e indiferente. No hay razón para mantener a todos a distancia todo el tiempo. Es una pérdida de potencial”. Ella se acercó y le apartó el flequillo de los ojos.

Amane se sintió intensamente avergonzada y trató de mirar a cualquier otro lugar en lugar de a Mahiru.

“… Realmente no quiero conocer a mucha gente, es la cosa. Creo que soy bueno estando cerca de un número muy limitado de personas”.

“¿Porque te sientes así?”

“¿Por qué…?”

Eso le pareció obvio.

—Tengo miedo de que me traicionen. Como estaba en el pasado.

Amane pensó que era mejor acercarse solo a personas en las que estaba absolutamente seguro de poder confiar. Así fue como había llegado a su posición social actual.

“… Bueno, realmente no necesito a nadie más. Mientras te tenga, estaré bien”.

“… ¿Eh?”

“¡E-Espera, eso no es lo que quise decir! Estaba pensando más bien, soy feliz siempre que tenga a mis amigos cercanos, incluidos Itsuki y Chitose, también. No quiero mucha emoción en mi vida”, explicó Amane a la velocidad de la luz. No quería que ella tuviera una impresión equivocada… incluso si esa impresión hubiera sido más precisa de lo que quería admitir.

Mahiru lo miraba con una expresión de alivio y desconcierto absoluto. Sus mejillas se estaban poniendo rojas. Aparentemente, después de todo, había tenido una impresión equivocada.

“… ¿Así que también dependes de mí, Amane?”

“Eres, como, la única que me detiene, en más de un sentido”.

“Cuando lo dices de esa manera, parece que soy bastante importante en tu vida, ¿sabes?”

Lo dijo como si lo estuviera criticando, pero su tono de voz era suave. Ella lo miró con una mirada que decía Qué tipo desesperado.

Amane estaba lidiando con algunos sentimientos muy complicados, así que se rascó la mejilla y trató de cambiar de tema. “Bueno, de todos modos, ¿cómo te sientes con las nuevas clases? ¿Estás esperando el cambio?”

Mahiru parpadeó varias veces, luego se relajó y sonrió. “Estoy deseando que lleguen los cambios de clase”.

“Bueno, supongo que sobrevivirás sin importar en qué clase termines, ¿eh?”

“Eso es cierto, pero prefiero hacer más que sobrevivir. ¿No es así?”

“Supongo que estas en lo correcto.”

Llevarse bien con la gente en un nivel superficial no significaba que Mahiru fuera realmente feliz. Pero ella era el tipo de persona que tenía que mantener una fachada perfecta sin importar lo agotador que pudiera ser.

Por otro lado, existía la posibilidad de que Mahiru y Chitose estuvieran en la misma clase. Eso le daría a Mahiru la oportunidad de pasar más tiempo con un amigo que había visto su verdadera naturaleza. Parecía el mejor resultado.

“Amane, ¿sabes por qué estoy deseando que lleguen los cambios de clase?”

Amane se sorprendió al ver a Mahiru con una sonrisa un poco traviesa, y se llevó una mano a la boca mientras reflexionaba sobre la pregunta.

“… ¿Porque existe la posibilidad de que estés en la misma clase que Chitose?”

“Okay, bueno, también está eso… pero no es la respuesta correcta, tonto”, bromeó.

Amane sabía que ella no estaba tratando de insultarlo, pero él podía escuchar un tono ligeramente irritable en sus palabras, así que decidió que sería mejor que la complaciera por el momento. Acarició su cabello, con cuidado de no estropearlo. “Ese soy yo, un gran tonto”, dijo con pesar.

“… Eres terriblemente astuto, Amane.”

“¿Q-Qué quieres decir?”

“Está bien; no tienes que entender. Solo… por favor, no te olvides de mí una vez que comience el nuevo semestre, ¿de acuerdo?”

De repente, Mahiru se movió, apoyándose contra él con todo su peso.

Luchó por evitar que su corazón saltara de su pecho hacia ella.

… ¿Qué estás tratando de hacer, Mahiru?

Parecía casi como si Mahiru estuviera planeando algo. De repente, Amane tuvo un mal presentimiento sobre la ceremonia de apertura de la próxima semana. Esperaba que el próximo semestre fuera pacífico.