Monster Musume No Oisha-san (NL)

Volumen 4

Capitulo 4: La Golem Con Carne Dispareja

Parte 2

“¿Qué? ¿Es raro?”.

“Es demasiado pesado. Incluso si tuviera que coserlo, el hilo no sería capaz de sostenerlo y los puntos desgarrarían tu piel”.

“Humph… Pensé que sería bueno”.

Glen continuó. “Incluso si tuviéramos que unirlo con un cable, el equilibrio sería un problema. Tu centro de gravedad estaría torcido. Te resultaría difícil ponerte de pie’’.

“Bueno, tiene razón. Lo entiendo. Buscaré un brazo más pequeño”.

Kunai solo parecía preocupada de si el brazo sería bueno en una pelea. ¿Qué hay de su vida cotidiana? Si Glenn no hubiera estado allí para intervenir, Kunai habría combinado todas las partes de los monstruos más fuertes que pudiera encontrar. Glenn podía verlo: tendría el brazo derecho de un gigante, el brazo izquierdo de una bestia, la parte inferior del cuerpo de un centauro, las escamas de un reptil, las alas de una arpía, etc.

Trató de imaginar cómo podría haber sido la forma final de Kunai. Habría sido demasiado llamativa para servir como guardaespaldas de Skadi, y el cuerpo disparejo probablemente también se habría interpuesto en el camino de sus actividades diarias.

Sí, si no interviniera, Kunai solo buscaría extremidades extravagantes. Parte del trabajo de Glenn era frenarla.

“¡Dr. Glenn! ¿Qué tal este?”, Kunai ya le estaba trayendo otro brazo. Debe haber sido emocionante para ella unir nueva carne a su cuerpo.

“Ahh, un brazo humano. Eso estaría mejor”.

“¿Verdad? Y mira el codo”.

Shiiing.

El brazo hizo un sonido metálico que nunca podría haber venido solo de la carne muerta. El codo se dobló de una manera antinatural para una articulación humana, y sobresalía algo parecido a la hoja de una espada.

“¡¿Es eso una espada oculta?!”.

“Sí. Escuché que durante la guerra hubo un ejército de humanos que alteraron sus cuerpos. ¡Tal vez esto pertenecía a uno de ellos! Esta es una tecnología asombrosa. Si el taller pudiera darle mantenimiento, este brazo sería increíblemente práctico”.

“Esa historia…”, Glenn estuvo a punto de decir que nunca había oído hablar de tal cosa, pero luego se detuvo. Recordó que Kunai Zenow había sido creada con el propósito de levantar un ejército de muertos vivientes.

Si alguien estaba investigando eso a fondo, experimentar con alteraciones humanas no debería ser tan difícil de creer.

En comparación con crear vida a partir de piel muerta, sería mucho más sencillo incrustar armas en piel viva… ¿no?

“Es francamente pecaminoso. Pero sería útil para mí”. Kunai parecía que se estaba divirtiendo.

Alguien tan hábil en la lucha como Kunai podría usar este brazo de espada oculta en todo su potencial. Pero había un problema.

“Hmm…”.

“¿No funcionará?”.

“Me preocupa el peso”, dijo Glenn mientras le quitaba el brazo. A pesar de que no era tan pesado como el brazo de un ogro, el metal oculto aún pesaba sobre el brazo. “Si realmente quieres usarlo, sería mejor instalar metal en el resto de tu cuerpo también… pero para hacer eso, creo que tendrías que preguntar en un taller, no a un médico”.

“Ugh. Realmente no quisiera arruinar mi cuerpo”.

“Entiendo”.

“Aparte, ya ordené una armadura de exoesqueleto del taller. Cuando la vista seré incluso más eficaz y poderosa que los gigantes. No podría pedir nada más’’.

“¿Qué quieres decir…?”.

“Aquí tengo los planos. ¿Quieres verlos?”.

¿Por qué lleva algo así por ahí?

La piel de oveja que sacó Kunai tenía planos para una armadura de exoesqueleto. Fueron dibujados a mano, pero por lo que Glenn pudo ver, era un enorme traje de acero que envolvía al usuario. El tamaño total rivalizaba con el de un gigante.

“¿Esto… se mueve?”.

“Dijeron que funciona a vapor. La persona que viaja en él se siente como si estuviera en un baño de vapor debido al escape, pero eso no es un problema para mí”.

“Supongo que no”.

“Pero dijeron que tomará diez años completarla”.

“Me gustaría que encontraras un armamento más realista”.

Kunai claramente hablaba muy en serio sobre esto, pero los cíclopes encargados del trabajo debían estar locos. Glenn deseó haber podido ver la mirada en las caras de Memé y del jefe cuando vieron estos planos.

“Lo siento, sé que la habilidad de lucha es importante para ti, pero… elige un brazo que también te cuide a ti. Si el tamaño y el peso no son adecuados para tu cuerpo, ni siquiera podré sujetarlo en primer lugar”.

“Humph. Justo cuando acababa de encontrar un brazo allí con una pistola en el dedo meñique”.

“No, señorita Kunai. Piénsalo. Esto se convertirá en una parte de ti.

Tiene que ser algo como lo que tenías antes… un ajuste perfecto”.

“Humph. Humph. Humph…”, Kunai gimió por un momento. Sostuvo su cabeza entre sus manos y la sacudió de un lado a otro. Excepto que cuando Kunai hacía eso, parecía que su cabeza se saldría y rodaría.

Finalmente, se acercó de nuevo a la montaña de carne y empezó a dudar y vacilar acerca de los brazos. Parecía que solo estaba seleccionando brazos humanos, o brazos que se parecían a los de un humano. Pero cuando Glenn se acercó, se dio cuenta de que estaba murmurando algo. Aguzó las orejas.

“Tú… humph. Entonces, moriste en una guerra. ¿Qué, no quieres ser parte del cuerpo de una mujer? No creo que estés en posición de quejarte. ¿Qué tal tú por allá? ¿Quieres volver a tu antiguo cuerpo? Bien, entonces quédate ahí. ¿Qué tal el joven de allí? Mmm hmm. Ya veo, quieres volver a tu casa…”.

Ella estaba teniendo una conversación.

Si bien Glenn estaba seguro de que era imposible conversar con carne muerta, era difícil negarlo cuando podía ver a Kunai hablándole con sus propios ojos. Pero no podía oír las voces de la carne muerta. Se preguntaba qué hacía a Kunai para poder entender la conciencia de las partes individuales.

Todo lo que Glenn había visto desde que llegó hoy a Deadlich Graveyard City lo había sorprendido. Los cadáveres podían moverse, los espíritus deambulaban y justo frente a él alguien estaba conversando con carne muerta. Y ese alguien era un cadáver en sí mismo. El lugar estaba lleno de muerte. Pero no era como si los vivos estuvieran prohibidos en este lugar. La ciudad cementerio realmente existía, y no era el cielo ni el inframundo. Esto también era parte de Lindworm, lo que significaba que allí había trabajo para él.

Pero…

Tuvo la sensación de que no debería estar escuchando las conversaciones de Kunai con la carne muerta. Este era un problema privado entre ella y cualquier miembro que pronto se convertiría en parte de ella. Por eso estaba murmurando en voz tan baja.

Glenn se alejó de Kunai. Un punto de luz ardía frente a la iglesia. Era un fuego fatuo, destacándose entre el ambiente oscuro de la ciudad cementerio.

“Eh”.

Los fuegos fatuos eran creados por fantasmas. Glenn no podía ver espíritus con sus propios ojos, pero podía ver los fenómenos que creaban, como esta luz. Se sintió incómodo. El fuego fatuo se acercaba poco a poco.

“Esto…”.

Tengo que huir.

Eso era lo que estaba pensando, pero no podía moverse. Estaba encerrado. El fantasma que había hecho ese fuego fatuo claramente tenía los ojos puestos en Glenn. Los efectos secundarios de estar poseído por un fantasma incluían escalofríos, náuseas, dolores de cabeza, alucinaciones, etc. La víctima perdería el conocimiento y el fantasma robaría su fuerza vital.

Maldición. No debí alejarme tanto de Kunai, pensó Glenn.

Pensar era todo lo que podía hacer. El fuego fatuo lo había congelado en seco.

“¿…?”.

¿Qué?

La voluta había dejado de moverse, como si tuviera miedo de algo.

Glenn recordó el amuleto de Skadi en su bolsillo y lo sacó.

“Lo siento mucho… No tengo tiempo para ser poseído”.

Cuando levantó el amuleto, pareció tener un efecto inmediato en la voluntad del fuego fatuo. Se alejó corriendo y desapareció en la oscuridad, en lo profundo del corazón de la ciudad cementerio. Parecía que no se podía jugar con los poderes de Draconess.

“Parece que este lugar realmente no es seguro”.

Ahora estaba claro por qué se habían tomado la molestia de poner este lugar en las afueras de la ciudad. El hecho de que nunca había oído hablar de ningún problema en la ciudad cementerio reflejaba la competencia del gerente anterior. Debe haber sido asombroso.

“Dr. Glenn, ¿pasó algo?”. Escuchó la voz de Kunai desde el patio trasero.

“No, estoy bien”. Aunque Glenn había podido alejar a ese fantasma, decidió volver al lado de Kunai, por si acaso.

Detrás de la iglesia, Kunai finalmente había encontrado un buen brazo. Parecía complacida consigo misma.

***

“¿Qué opinas?”, preguntó Glenn, después de haber terminado de coser el brazo.

Después de repetidas conversaciones con la carne muerta, Kunai finalmente encontró un brazo derecho adecuado. Era un poco más delgado que el brazo que había estado usando antes, pero estaba tonificado y musculoso. Probablemente era el brazo de un soldado que había muerto en batalla. No tenía el tipo obvio de fuerza de lucha que tenía el brazo del ogro, pero el brazo delgado parecía encajar bien con el cuerpo de Kunai.

Después de preparar la apertura del brazo derecho con su bisturí, Glenn lo cosió con aguja e hilo. Pudo adjuntarlo como si siempre hubiera sido parte de ella. Pero había una cosa que Glenn no sabía: las partes de carne muerta ya habían aceptado que estarían conectadas entre sí. El resultado fue que Glenn, que había cosido partes a Kunai innumerables veces, cosió su nuevo brazo tan bien que parecía que había nacido con él.

“¿Hmm?”.

“De hecho, creo que hice un buen trabajo con las costuras, pero…”.

“Tienes razón… Para un brazo nuevo, ya me da una sensación de unidad… Es casi aterrador. Gracias, Dr. Glenn”. Aunque lo estaba elogiando, su expresión era demasiado sombría. Abrió y cerró repetidamente su puño, golpeando el aire. “Pero… Oooh. Algo se siente raro’’.

“¿Qué quieres decir con ‘algo’?”,

“Es ligero. El brazo es demasiado ligero.” Kunai golpeó el aire mientras caminaba ágilmente y daba una patada circular.

Para Glenn, los ejercicios de artes marciales se veían hermosos, pero Kunai estaba ladeando la cabeza hacia un lado, aún no convencida.

“¡Ugh! ¡¿Por qué no puedo encontrar mi equilibrio?!”. Kunai estaba rechinando los dientes, repitiendo sus movimientos una y otra vez, tratando de acostumbrarse a su brazo derecho.

El trabajo de costura fue perfecto. Incluso con sus movimientos violentos, el brazo funcionaba sin problemas. Según todos los informes, el brazo ya se había convertido en parte de Kunai. Pero a Glenn le preocupaba que ella lo llamara “ligero”. El nuevo brazo era más delgado que el que había tenido antes, pero era el brazo de un hombre. Era un poco menos musculoso, pero no parecía que hubiera una diferencia significativa en el peso.

“¿Estás hablando de tu centro de gravedad? Señorita Kunai, ¿puedes intentar ponerte de pie con la espalda recta? Sí, así… Ahora, estira ambos brazos hacia abajo, cerca de los muslos. Ahí, perfecto”.

Kunai siguió las instrucciones de Glenn y se cuadró. Como guardia, su postura era hermosa. Pero Glenn notó de inmediato de dónde venía la incomodidad.

Ella se estaba inclinando.

“Estás torcida”.

“¿Eh?”.

“Tu columna vertebral está inclinada un poco hacia la izquierda. El hueso está torcido, por lo que te hace sentir desequilibrada”.

“¡D-de ninguna manera! Nunca me sentí así antes”.

“Está bien. No parecía haber ningún problema… antes”.

Una espalda torcida.

Era algo que ocurría tanto en humanos como en monstruos. Si mantenías la misma postura durante muchas horas o hacías ejercicios forzados, los músculos se ponían rígidos y los huesos se torcían.

Debería haberlo notado antes.

Kunai era un cadáver. Todos sus músculos eran tratados con conservantes y exhibían rigor mortis. En otras palabras, carecían de fuerza y flexibilidad. La carne de Kunai estaba sostenida por nada más que huesos y poderes mágicos. Además, a veces se cuadraba como en guardia y otras veces luchaba. El estrés que ponía sobre sus huesos era demasiado.

El resultado era su columna vertebral torcida.

“Tu viejo brazo derecho era grande y pesado, por lo que tu columna vertebral inconscientemente se inclinó hacia la izquierda para equilibrarte. Si fueras humana, una espalda torcida haría que te dolieran los músculos y sentirías dolor. Pero como no tienes receptores de dolor, no te diste cuenta”, explicó Glenn.

“Humph…”.

“Por supuesto, es porque eres un golem de carne que no has tenido ningún problema hasta ahora, pero…”.

En los seres humanos, una columna torcida afectaba a varias partes del cuerpo: la columna cervical, la columna lumbar y, en casos graves, se producían síntomas subjetivos en los hombros y las extremidades inferiores. Por supuesto, esto no se limitaba a los humanos. También se aplicaba a los monstruos con vértebras, y podía prevenirse con ejercicios y estiramientos apropiados, pero…

¿Qué tal un golem de carne hecho de cadáveres? Los músculos están en rigor mortis, así que, claramente, no tiene sentido estirarlos. Por otro lado, la columna vertebral torcida no causa ningún dolor, por lo que es un alivio.

El único problema que le estaba causando a Kunai era la inestabilidad de su centro de gravedad.

“Entonces, ¿quieres decir que, dado que mi nuevo brazo es más liviano, no puedo equilibrarme como solía hacerlo y mi centro de equilibrio se movió hacia la izquierda? ¿Es por eso que me siento extraña?’’.

“Sí, eso es correcto”.

“Me he vuelto débil… ¿Cómo puedo servir como guardia…?”, Kunai se detuvo, perpleja, mientras continuaba golpeando el aire con su puño.

Desde la perspectiva de Glenn, se veía igual que siempre, como si pudiera poner patas arriba a los bandidos en un segundo. Pero Kunai sentía una sensación de insatisfacción que nadie más podía entender.

“Todo estará bien, señorita Kunai. Puedo tratarte”.

“¿Qué? ¿En serio?”.

“Por supuesto. Hay una manera”.

No estaba seguro de que, con los músculos en rigor mortis de Kunai, hubiera alguna forma de que la columna sanara de forma natural. Pero si simplemente la dejaba desatendida, había una gran posibilidad de que se torciera aún más.

“¿Cuál es el tratamiento?”.

Glenn miró a Kunai a los ojos. “Quiropráctica, por supuesto”.

***

Glenn llevó a Kunai al interior de la iglesia.

El exterior se veía bien cuidado, pero el interior estaba impecable. Incluso los bancos habían sido limpiados arduamente. En todos los sentidos, parecía una iglesia que estaba actualmente en uso.

“El gerente vivía aquí en la iglesia. Por eso se ve así”.

“Oh”.

“Bueno, entonces, ¿debería acostarme boca abajo?”.

“Sí, por favor. Voy a empezar”.

Kunai se acostó en un banco de oración. Glenn la cubrió con un paño de algodón limpio que había preparado con anticipación. En esta posición, no podía ver su rostro.

“Pensé que estarías incómoda en esta posición así que… toma”.

Glenn le entregó a Kunai un cojín que había encontrado en la habitación.

“Ah. Mmm”. Kunai lo sostuvo y relajó todo su cuerpo. La parte superior de su cuerpo se curvó ligeramente.

Cuando Glenn miró más de cerca, pudo ver que su cuerpo estaba tenso, como era de esperarse. Kunai Zenow estaba formada por muchas partes diferentes que se habían unido como una sola: una verdadera obra de arte. No quería empatizar con el médico que había hecho a Kunai, pero, con toda honestidad, tenía que admirar la habilidad que se utilizó para amoldar su cuerpo de esta forma.

“Sería mejor hacer esto en una cama, pero veamos qué podemos hacer”.

“No necesitas hablar. Solo hazlo”.

“Bien, entonces. Empezaré”. Glenn colocó sus manos en la espalda de Kunai. La carne muerta del cuerpo de Kunai mantenía el frío de un cadáver.

Comenzó frotando los músculos a cada lado de las vértebras. Cuando los tocó directamente, la forma de los músculos y los huesos torcidos era evidente. La columna vertebral de Kunai se curvaba hacia la izquierda.

“Mmm…”.

“¿Cómo se ve?”.

“Curvada, como pensé. Es una… curva bastante obstinada…”. No sería fácil enderezar los huesos solo con este tratamiento.

Normalmente, pasaría mucho tiempo masajeando los músculos, haciendo estiramientos repetidos y enderezándolos lentamente. Pero era diferente con los golems de carne.

Lo único que sintió Kunai fue un extraño cambio en su centro de gravedad. Incluso si sus huesos estuvieran torcidos, el dolor de los nervios pellizcados no era un problema para los golems de carne. Sus cuerpos se movían por fuerza mágica, por lo que incluso un hueso roto no sería doloroso.

Entonces eso significa…

“Kunai, ¿te importa si te masajeo fuerte?”.

“¿Mmm? Oh, está bien”.

“Bien entonces”.

“¡¿Mmmmm?!”.

Glenn montó lentamente a Kunai a horcajadas en una posición que hacía que pareciera que estaba cabalgando sobre su región glútea. Kunai abrió mucho los ojos y miró a Glenn, nerviosa.

“¿P-por qué estás encima de mí?”.

“Esta es la mejor posición para asegurarme de que tengo palanca para un masaje más fuerte. Lo siento mucho. ¿Soy demasiado pesado?’’.

“N-no, no eres pesado…”, Kunai sonaba confundida, pero no lo rechazó.

Glenn comenzó a frotar los músculos a ambos lados de su columna. En poco tiempo, estaba aplicando suficiente fuerza para mover el hueso de nuevo a su forma correcta.

“Mmm”. Kunai dejó escapar un gemido.

Glenn lo ignoró y continuó. No era muy fuerte, pero, como médico, sabía dónde aplicar su fuerza y cuánto necesitaba para ser efectivo.

“Lo haré un poco más fuerte”.

“Mmm—¡¿argh?!”. La voz de Kunai era aguda. No era característico de ella. Ella siempre tenía una mirada severa en su rostro.

“¡Oh! ¡¿Dolió?!”.

“N-no… Es una sensación extraña… pero no es dolor”. Incluso Kunai se había sorprendido de su voz. “No estoy segura. Fue como si tu dedo entrara dentro de mí…”.

“Parece que está funcionando. Continuaré”.

“No, espera un—aaaaghh”. El cuerpo de Kunai crujió.

Dado que sus músculos estaban rígidos, Glenn pensó que sus huesos tampoco podrían moverse, pero parecía que sus habilidades quiroprácticas eran bastante efectivas. Glenn continuó frotando los músculos desde alrededor del omóplato hasta la columna vertebral y usó su peso para colocar el hueso en el lugar justo.

Masajear, apretar.

“¡¿Heeeee?!”. El cuerpo de Kunai tembló y ella gritó.

“¿Cómo te sientes?”, preguntó Glenn.

“Y-yo… ¿Cómo me siento? ¡M-mi voz! Dr. Glenn, ¡¿qué tipo de artes marciales son estas?!”.

“Esto es solo quiropráctica”.

“D-d-de ninguna manera… E-esto es… ¡Mphaaaaa!”.

Presionar, masajear, apretar.

“¡Arrghhh!”.

No había pensado que sería tan efectivo.

Glenn supo por la sensación en la palma de su mano que el hueso se estaba moviendo, y mejor de lo que esperaba. De hecho, el hueso se movía tan bien que costaba creer que los músculos estuvieran en rigor mortis. Lentamente volvía a la posición correcta; sentía como si estuviera moviendo el huevo directamente.

“D-Dr. Glenn… ¿No dijiste que no tenías conocimientos acerca de la magia?”.

“¿Mmm? Ahh, eso es correcto”.

“¡Ughh! P-pero tal vez estás interfiriendo con la magia que sostiene mi cuerpo…”, Kunai comenzó a explicar a través de su respiración dificultosa.

“¿P-por qué dices eso?”.

“¡Mmm! ¡¿Cómo podría saberlo?! ¡Se siente raro, como si estuvieras tocando los lugares más profundos de mi cuerpo!”.

“Mmm…”.

Los masajes tenían efectos relajantes. Aprovechaban la vitalidad que todos los seres vivos poseían. Las aguas termales, la acupuntura y la moxibustión también tenían efectos similares. La idea de despertar y trabajar la energía vital era un tratamiento médico desarrollado

principalmente en el oriente, y Glenn no era un experto, pero…

“Vitalidad…”.

El cuerpo de Kunai ya estaba muerto. Sin embargo, su cuerpo tenía voluntad y estaba activo. Eso se debía a la magia… pero, tal vez, en realidad era una forma de vida.

“Ese podría ser su propio poder, señorita Kunai”.

“¿Qué?”.

“Tu vitalidad está siendo estimulada por el masaje. Tu propia voluntad de vivir está afectando la magia, y eso puede ser lo que está moviendo tu hueso a la posición correcta…”.

“¿Y-yo? ¡¿Yo misma?!”.

El hueso curvo de Kunai estaba siendo reparado, desencadenado por el tratamiento quiropráctico de Glenn. Si no fuera la fuerza de Glenn, si eso fuera simplemente el catalizador para que los propios huesos de Kunai se movieran de nuevo a la posición correcta, bueno, sería un fenómeno realmente interesante.

“E-espera. Si eso es cierto, entonces, ¿qué es este entumecimiento…?’’.

“Creo que tal vez es el efecto de interferir con el campo mágico del hechizo…”. No era su intención, pero Glenn estaba afectando el núcleo mágico de Kunai. Era natural que ella también se sintiera estimulada. Glenn aplicó más y más fuerza desde su posición.

“¡Heee! ¡Oof! ¡¿A-aghh, aún no has terminado?!”.

“Por supuesto que no. Me he dado cuenta de que el tratamiento quiropráctico es aún más efectivo contigo de lo que imaginaba. Es posible que esto no solo arregle tus huesos torcidos, sino que conserve tu cuerpo por más tiempo. Parece que el masaje es efectivo en golems de carne. Si hubiera más datos, podría escribir una tesis sobre el tema”.