Monster Musume No Oisha-san (NL)

Volumen 4

Capitulo 3: La Scylla Examinadora (O, El Día Libre)

Parte 1

Glenn Litbeit dejó escapar un suspiro. Se preguntaba cómo había llegado a esto.

Como médico de monstruos, Glenn había examinado y tratado a muchos de ellos. Sin embargo, solo tenía diecisiete años y se estaba volviendo muy consciente de los límites de sus capacidades.

Por ejemplo, ahora mismo.

La enfermera cercana estaba riendo. Que se rieran de él no ayudaba en lo absoluto.

Tal vez era por culpa de la arrogancia. Podía trabajar muchas horas debido a su juventud. Era alguien muy capaz. Aparentaba afabilidad y sosiego, pero había sobreestimado sus propias habilidades en algún punto. Todos los seres vivos mueren, tarde o temprano, aunque les guste pensar lo contrario. Esto era similar. Glenn diagnosticaba las enfermedades de sus pacientes monstruos, pero ahora él era quien estaba encamado.

“Bueno, no tienes fiebre. Jeje. Parece que te desmayaste por trabajar demasiado”. La enfermera sacó el termómetro de debajo del brazo de Glenn con una sonrisa maliciosa en su rostro. Ella era parte de la especie slime, e incluso su sonrisa era flácida.

“No estoy sobrecargado de trabajo. Estaba un poco privado de sueño, así que decidí tomar una siesta. Después, Sapphee dijo que me estaba forzando demasiado y me obligó a ingresar en el hospital”.

“Pero la Dra. Cthulhy también te diagnosticó exceso de trabajo, ¿no es así?”.

“Todo el mundo está haciendo un gran alboroto por nada”.

“¡Ajá! ¡Se supone que eres médico! ¿Vas a menospreciar el diagnóstico de otro médico?”.

“Er…”. Glenn no tuvo respuesta para eso.

La enfermera slime se rió tontamente.

Había una gran población de slimes en Lindworm. Eran seres vivos hechos enteramente de una sustancia semitransparente, similar a un gel, que usaban para imitar formas humanas. Glenn conocía a la enfermera slime desde su época en la academia y, al igual que Sapphee, había entrado antes que él. Su personalidad pícara no había cambiado.

“En este momento eres un paciente. Descansarás, ¿entendido?’’.

“Sí…”.

Glenn fue llevado al Hospital Central esa mañana. Sapphee determinó que fue un desmayo por exceso de trabajo y lo hizo ingresar. Cthulhy lo examinó de inmediato y llegó a la misma conclusión que Sapphee. Sus órdenes fueron que descansara durante tres días, en otras palabras, no trabajar, solo dormir.

Es cierto, había estado ocupado últimamente. Había estado realizando examen tras examen sin comer adecuadamente. Sabía que no podía seguir así para siempre…

Pero tres días era demasiado tiempo.

“Glenn, ¿realmente estabas trabajando tanto?”.

“No, no tanto. Últimamente ha habido mucho alboroto con los doppelgängers. Muchos dijeron que se sintieron mal después de ver uno, pero eso es todo”.

“Entonces, ¿tuvo más pacientes de lo habitual?”.

“Dejando de lado la cuestión de si los doppelgängers son reales o no, la mayoría de los pacientes simplemente presentaban malestar porque creer que habían visto uno. Eso no es una enfermedad, así que no cuenta como trabajo”.

Esta vez, fue la enfermera de baba la que suspiró en voz alta.

Tal vez era por su condición de monstruo amorfo que cada uno de sus movimientos se veía exagerado. No importaba que replicara a la perfección la anatomía humana, sus brazos gelatinosos se sacudían con repugnancia.

“Esto también le causa problemas a la Dra. Cthulhy. Será mejor que te quedes en la cama. Si te levantas y comienzas a examinar a otros pacientes, no tendremos piedad contigo”.

“Entonces es por eso que me tienen en una habitación aislada…”.

“¡Exactamente! Órdenes directas de la Dra. Cthulhy’’.

En otras palabras, no confiaban en él.

Glenn estaba seguro de que no podría relajarse aquí. Los pacientes del Hospital Central Lindworm eran todos monstruos. Estaba ansioso comenzar a trabajar y ayudarlos.

“Pero… por alguna razón, tengo la sensación de que el hospital está lleno”.

“Oh, ¿lo notaste?”.

La única persona que entraba y salía de la habitación privada de Glenn era la enfermera slime. No había visto a ningún otro empleado, pero podía escuchar a la gente corriendo fuera de su habitación. No estaba del todo seguro, pero algo raro ocurría en el hospital.

“Es una oportunidad perfecta, así que al menos me gustaría saludar a los médicos principales”.

“No, todos están ocupados”.

“Estás ocultando algo, ¿verdad?”.

“No, nada de eso”.

Glenn la miró en silencio.

“Ah, bueno, supongo que podría decírtelo”. La enfermera slime rezumaba de vuelta hacia el doctor. Acercó su rostro al de Glenn para poder contarle el secreto. Los slimes no tenían ojos reales, pero formaban globos oculares únicos que se asemejaban a la obsidiana. Los usó para mirar a Glenn a los ojos. Olía ligeramente a cítricos.

“La verdad es que… como sabes, Skadi tuvo una cirugía de corazón el otro día”.

“Sí”. No solo lo sabía; él mismo practicó la cirugía. Con Cthulhy como asistente, Glenn retiró el corazón de Skadi.

“Bueno, el corazón extraído se estaba guardando como muestra…

pero desapareció”.

“¿Qué? ¿Se perdió?”.

“¡Sí! ¡El frasco donde se conservaba está vacío!’’.

“Eso no puede ser cierto…”. Se suponía que era un espécimen extremadamente importante para el Hospital Central.

¿Qué había pasado con su almacenamiento y gestión? Cuando Glenn estudió en la academia, Cthulhy le explicó detalladamente cómo manejar los materiales de investigación. Los empleados del Hospital Central fueron todos alumnos de ella. Era difícil creer que cometieran un error de novato.

“Bueno, por eso hay tanta conmoción en el hospital. Es un desastre. Para ser honesta, ¡no tengo tiempo de cuidar a un doctor adicto al trabajo! Necesitas dormir durante tres días, ¿entendido? No hagas mi labor más difícil”.

“Sí… comprendo”. Estaba advertido. No confiaban en él.

***

Más tarde, Glenn se sentó en su cama de hospital, estudiando detenidamente un libro de medicina que trajo de casa. Le dijeron que descansara, pero no tenía sueño. Todo lo que podía hacer era leer.

Al principio, nadie venía a su habitación privada, pero al poco tiempo comenzó a recibir visitas, una tras otra. La mayoría eran sus alumnos o tutores de la academia, quienes escucharon que se había desmayado por exceso de trabajo. Algunos de ellos vinieron solo para burlarse de él. No tuvo más remedio que dar una sonrisa a medias a través de conversaciones sobre sus días en la academia. Glenn leyó su libro y soportó las burlas. Estaba esperando para hablar con Cthulhy.

“Vaya, vaya, todavía pareces cansado”. Esa fue la conclusión de Cthulhy cuando finalmente llegó a su habitación.

Lo dijo tan pronto como vio su rostro, acostándose a su lado. Glenn había descansado durante un día entero y había recuperado su fuerza, por lo que no debía verse tan cansado. Se sentía lo suficientemente bien como para regresar a la clínica y resumir sus labores.

Cthulhy Squele era la maestra de Glenn y directora médica del Hospital Central. Era una doctora tan increíble que, en la cirugía draconiana del otro día, sacrificó su propio tentáculo para salvar a la paciente. Ese tentáculo ya había vuelto a crecer y ella pasaba sus días como siempre, haciendo rondas para monitorear a los pacientes hospitalizados.

“No, me siento mucho mejor. Dormí todo el día, así que debería volver pronto a la clínica”.

“Te quedarás en cama durante tres días. ¿Lime no te lo dijo?’’.

Lime era la enfermera de baba que estaba a cargo de cuidar a Glenn. Recibió el apodo por el ligero olor a lima que emitía.

“Tres días es demasiado”.

“Respuesta incorrecta. Piensa en por qué Sapphee se preocuparía tanto como para llamar al Hospital Central. Así de exhausto estabas”.

“No, yo también soy médico. Conozco mi propio cuerpo”.

Si se había desmayado por el exceso de trabajo, entonces el reposo en cama era un tratamiento sensato. Habría recetado al menos tres días, tal vez incluso semanas, dependiendo de la situación. Pero Glenn no se sentía agotado. Estaba dispuesto a admitir que había descuidado su salud al no comer ni dormir de manera adecuada, pero un día de descanso era suficiente. No podía dejar a Sapphee sola en la clínica por tanto tiempo.

“Si realmente estás tan aburrido, ¿por qué no hacemos unos ejercicios cerebrales?”.

“Preferiría simplemente ser dado de alta”.

“Si puedes responder a este problema correctamente, te consideraré curado y aprobaré tu alta”.

“Ah…”.

Cthulhy se rió. Como médica, nunca se arriesgaría a hacer una apuesta así con un paciente realmente crítico. Lo que significaba que Glenn estaba lo suficientemente bien como para ser dado de alta en cualquier momento. Si ese era el caso, entonces no quería molestarse con preguntas. Deseaba que ella simplemente lo dejara ir.

Le recordaba cuando estaba en la academia, y Cthulhy ponía a prueba sus conocimientos y habilidades en cada oportunidad que tenía. Algunas cosas nunca cambiaban, incluso aunque ya tuviese su propia clínica.

“De hecho, escuché esto de Skadi. Dijo que últimamente todo el mundo hablaba de doppelgängers y me pidió que llegara al fondo del asunto”.

“Oh…”. Justo el otro día, Glenn había escuchado un rumor sobre el doppelgänger de Sapphee.

“Los doppelgängers no son más que un fenómeno imaginario. Es cuando crees que ves a alguien que conoces en un lugar donde nunca estaría. No hay especies doppelgänger entre los monstruos”, expresó Cthulhy.

“Sí, eso es verdad”.

“Entonces, si ese es el caso, ¿quién está causando este fenómeno? Dudo que un humano pueda hacer algo así, por ende, tal vez sea un monstruo con la capacidad de imitar otras formas.

“¿Y Skadi te pidió que averiguaras lo que estaba pasando por ser una experta en monstruos?”.

“Sí. Tiende a pasarme las tareas engorrosas a mí”, dijo la Dra. Cthulhy, ignorando el hecho de que ahora le estaba haciendo lo mismo a Glenn.

Glenn pensó por un momento. Existían monstruos que podían cambiar libremente de forma, ¿eso significaba que una de esas razas estaba causando el fenómeno doppelgänger?

“¿Podría ser algún tipo de disfraz? No, eso no tiene sentido”.

“Correcto. Si solo cambiara una cara y algunas características, entonces los humanos podrían lograrlo usando las mismas técnicas que los agentes secretos. Pero no es tan fácil imitar los cuerpos de los monstruos. A veces aparecen como una lamia, a veces como un centauro. Eso está bastante alejado de sus capacidades para disfrazarse”.

“Entonces, debe ser una habilidad especial de una raza de monstruos”. Existían varias razas que tenían capacidades de transformación avanzadas. “Por ejemplo, ilusiones creadas por razas espirituales como fantasmas o espíritus”.

“Aprecio lo rápido que formulas hipótesis. Sí, sería posible que los espíritus estuvieran usando ilusiones o apariciones para hacernos creer en algo que no existe. Pero tales conjuros están fuera de nuestra disciplina como médicos”.

“Sí, tienes razón”.

Las especialidades de Glenn solo incluían tratamiento médico con base científica. Sabía que existían otras habilidades, como la hechicería, la magia y la conjuración; también había profesiones e instalaciones de investigación que trabajaban en esas especialidades. Sin embargo, la objetividad y la reproducibilidad de esas habilidades eran extremadamente bajas. El principio básico de la ciencia que estudió Glenn fue: “Si el procedimiento es idéntico, se obtendrán los mismos resultados sin importar quién lo ejecute”. Ese no era el caso en la magia y la prestidigitación. Había escuchado que Skadi incursionaba en la magia, pero incluso si él y Cthulhy aprendieran de ella, no había garantía de que pudieran manejarla de la misma manera. La magia era una habilidad incierta.

Si la verdadera identidad de los doppelgängers involucraba magia, se tendría que llamar a un experto para resolver el problema.

“¿Cuáles son las otras posibilidades?”.

“La especie limo”. Glenn respondió la pregunta de su mentora de inmediato. Estaba pensando en la enfermera que lo había estado cuidando desde el día anterior. “Los seres amorfos, como el slime, podrían imitar otras formas”.

“Así es. Hasta donde yo sé, las especies más básicas que pueden imitar formas son los slimes. Sus cuerpos son viscosos y poco definidos, por lo que pueden copiar la anatomía de otras especies. Sin embargo, su mimetismo no es perfecto”. Parecía que Cthulhy ya había considerado esta posibilidad.

Glenn se preguntaba cómo podría considerarse esto un ejercicio mental. Hasta ahora, solo habían repasado las estimaciones de Cthulhy. La verdadera prueba estaba a punto de comenzar. ¿Qué tan plausible sería un doppelgänger real? Si se equivocaba, fallaría la prueba. Al igual que ocurría con los exámenes en la academia.

“¿Mímica perfecta? Eso significaría…”.

“Antes de eso, analicemos el material. Estos son relatos de testigos de los doppelgängers recogidos por el Ayuntamiento. Será más rápido usar estos documentos para determinar si la verdadera forma de los doppelgängers es la de un slime o no”. Cthulhy sacó una pila de papeles mientras hablaba.

El hecho de que los hubiera preparado con anticipación significaba que había planeado presentarle esta pregunta a Glenn desde el principio. No estaba completamente convencido, pero, con expresión seria, esperó a que ella continuara.

“Te los leeré en orden entonces”.

“De acuerdo”.

“Cuenta del testigo número uno. ‘¡E-en la ciudad, vi a una sirena que conocía, así que reuní el coraje para hablar con ella, pero se escapó! Soy alguien tan aterradora que incluso las personas que conozco huyen después de mirarme. Apesto…’. Es largo, así que me saltaré el resto. Este fue el testimonio de un aprendiz en el Taller Kuklo”.

“Doctora, sus imitaciones son impecables.” La información era anónima, pero podía averiguar fácilmente de quién era el testimonio. Probablemente se trataba de la tímida cíclope que conocía.

“Continuaré. El segundo relato es de una niña alraune. ‘Vi a la representante del Concejo Municipal en la plantación. Pensé que tal vez había venido a hacer una revisión personalmente. Me pareció extraño, así que fui a saludarla, pero salió corriendo sin siquiera responder. Ahora que lo pienso, no parecía ella en lo absoluto’”.

“¿Esta era Aluloona?”.

Aluloona era influyente en el concejo. Glenn no la conocía en persona, pero si el avistamiento fue en una plantación, debía ser ella. Y tal parecía que el doppelgänger también podía imitar dragones.

“Bueno, bueno, suficientes adivinanzas. Esta es información anónima”. A pesar de decir eso, sus imitaciones eran excelentes, por lo que el anonimato no tenía sentido.

“La plantación de Aluloona está fuera de la ciudad, ¿verdad? ¿El rango de los doppelgänger llega tan lejos?”.

“Sí, eso parece”.

“Hmm…”.

“Y el último. ‘Vi a mi amiga cerca de Waterways, así que la invité a tomar una copa, pero se escapó. Normalmente le encanta beber… Pensé que era extraño, así que la seguí, pero al llegar a los Canales, la perdí de vista’”.

Ésta parecía ser la declaración de una arachne que Glenn conocía personalmente. Estaba realmente impresionado con la mimesis de Cthulhy. Se decía que algunos pulpos podían imitar con gran precisión a serpientes marinas o anémonas, así que tal vez su talento derivaba de eso. La especie Scylla es buena en el mimetismo…

“Imitaciones, ¿eh?”.

Había tres relatos de testigos presenciales. Lo extraño era que todos creían haber visto a un amigo. La primera seguramente era Lulala. La segunda, Skadi. En el tercer caso, probablemente se trataba de Sapphee. En todos los testimonios el sospechoso huía al ser abordado por una persona.

Tal parece que el doppelgänger había ido mucho más allá de un mero disfraz.

“Hmm”.

Tal vez deberían referirse a ello como mimetismo de ahora en adelante. Recordando el incidente del otro día en la arena, Lorna seguramente había visto a un doppelgänger. Ella, que era las más allegada a Tisalia, había dicho que el intruso se parecía mucho a su señora. No cabía duda que el mimetismo del sospechoso era excelente.

“Este tipo de monstruo…”.

“¿Encontraste la respuesta, Glenn?”.

“No. Todavía no estoy seguro. Pero quiero preguntarte una cosa…”.

“¿Sí?”.

“Si yo soy capaz de obtener la respuesta correcta a esta prueba, eso significa que ya conoces la solución ¿verdad?”.

“Heh…”. Cthulhy ajustó sus lentes mientras se reía profundamente.

Los maestros no hacen exámenes de cuyas respuestas no conocen. En momentos como este, los ojos de Cthulhy se tornaban de colores sospechosos. No sabías lo que estaba planeando. Aquellos pertenecientes a la especie Scylla eran considerados como los filósofos de las profundidades marinas. Su vasto conocimiento era incuantificable; un completo misterio.

“Bueno, supongo que pronto lo descubrirás”, expresó la doctora.

Glenn volvió a guardar silencio.

“Ahora, discutamos el tema del ‘mimetismo perfecto’. Debo encargarme de algo antes. No te importa, ¿verdad?”.

Y así Cthulhy evadió audazmente la pregunta de Glenn. Aunque estaba a punto de proporcionarle más pistas.

Cthulhy lo llenaba de preguntas y problemas con tal de mantenerlo más tiempo en cama. Aunque fuera un cuestionamiento simple, el resultado sería el mismo: Glenn permanecería en reposo. Si quería ser dado de alta, su única opción era darse prisa y resolver el dilema, formulando una solución que Cthulhy encontrara suficientemente satisfactoria.

“Tomemos un breve descanso entonces”.

¿Era esto una prueba o una conferencia? Glenn dejó escapar un profundo suspiro. Parecía estar de vuelta en la academia, con sus dificultades y todo. Naturalmente la carrera que estudió no era fácil. Su objetivo era convertirse en un médico de monstruos independiente y absorber todo el conocimiento posible de Cthulhy. Después de superar la oposición de sus padres e inscribirse en la academia, convertirse en médico se había apoderado de toda su existencia.

Nunca habría imaginado que la joven que lo inspiró a convertirse en médico, Saphentite, también estaría inscrita en la academia. Pero, debido a su dedicación por el estudio, no consideraba a ninguno de sus compañeros de la academia como amigos. Por supuesto, había momentos en los que hablaba con Sapphee, sobre todo cuando tenían proyectos juntos. Ahora que lo pienso, rara vez hablé con estudiantes de último año… Glenn no los había evitado intencionalmente. Pero, debido a que era el estudiante más joven y prometedor, seguramente los de grados superiores estaban celosos de él.

Glenn tenía solo catorce años cuando ingresó en la academia. Cthulhy lo tomó bajo su ala y se aseguró de que recibiera una educación completa. Entrar en la escuela de medicina significó soportar y sobrevivir el comportamiento y los caprichos irracionales de Cthulhy. Los superaron juntos, Sapphee y él. Tal vez debería haber hecho más amigos…

La enfermera slime, por ejemplo. A pesar de que había sido una estudiante de grado superior, nunca habló con ella. No la conocía en absoluto.

Una vez que Cthulhy anunció el descanso, salió de la habitación del hospital y, al poco tiempo, volvió acompañada de Lime.

La especie slime se destacaba por imitar la forma de otras razas. Si bien eran seres naturalmente parecidos a las amebas, había individuos que preferían adoptar una anatomía humana, como Lime. Se sabía que eran muy inteligentes y tenían una gran capacidad de aprendizaje. Sin duda, eran perfectos candidatos para ser los doppelgängers.

“¿Qué pasa? ¿Por qué me mira así? ¡Deténgase!”.

“Resulta que me encontré un sujeto de prueba afuera ¿qué te parece?”.

“¿Sujeto de prueba? ¿Qué me va a hacer? ¿No voy a recibir un aumento?”.

“¿Tienes el valor para decir eso a pesar de ser tan descuidada con tus deberes? Se suponía que eras la encargada de cuidar el espécimen que se perdió… ¿No crees que te mereces un recorte salarial?”.

“¡Pero!”. Lime gritó.

Si mirabas de cerca su tejido verde claro, era translúcido. Tenía la silueta de un ser humano, pero como no tenía huesos, tanto sus brazos como sus piernas estaban curvados. Los slimes eran un tipo peculiar de monstruo cuyos cuerpos enteros estaban hechos de una sustancia amorfa similar a un gel. Olía levemente a lima, que era su comida favorita. Probablemente las comía muy a menudo. De hecho, había un trozo del cítrico siendo digerido dentro de ella, cerca de su cuello.

Al menos debería digerirlo en un lugar un poco más oculto…

Lime no sabía por qué estaba secuestrada en la habitación de Glenn.

“Quería dar un curso sobre la fisiología slime. Serás nuestro libro de texto”.

“Agh, ¿va a examinar cada centímetro de mí? ¡Eso es demasiado vergonzoso!”.

Lime se retorcía. Todo su cuerpo se movía dinámicamente y se tambaleaba.

“Bien, entonces… ¿Dónde nos quedamos?”.

“Acabábamos de leer las declaraciones de los testigos presenciales. Los doppelgängers imitaron a personas cercanas a los testigos tan bien, que todos fueron engañados”.

“Así es. Y todos sabemos que los slimes son imitadores”.

Glenn volvió a mirar a Lime.

Parecía como si la hubieran vertido en un molde humano. Sólo su contorno era una forma humana perfecta. Pero su carne seguía siendo una sustancia semitransparente similar a un gel.

“Como se aprecia, los slimes son capaces de imitar un contorno, pero no pueden transformarse lo suficiente como para engañar a alguien. Solo están ajustando sus cuerpos flexibles”, analizó Cthulhy.

Glenn asintió. Él ya entendía todo eso. “Lime, lo siento, pero ¿podrías intentar imitar a Sapphee?”.

“¿Qué? Glenn, ¿te gustan ese tipo de juegos?”.

“¿De qué estás hablando?”.

“Realmente no lo sé, pero seguro”.

Ella se movió y retorció y giró todo su cuerpo. Se convirtió en una masa indefinida. El uniforme de enfermera que había estado usando, e incluso la lima parcialmente digerida, se juntaron dentro de su carne verde semitransparente. No tenía ojos ni nariz ni boca. No parecía algo que pudiera comunicarse con otros seres, pero esta forma de ameba estaba hablando normalmente.

Luego…

“Transformación… ¡completa! ¿Qué opinas?”.

Apareció Sapphee.

No, más precisamente, apareció un slime que parecía ser un contorno de Sapphee. El uniforme de enfermería que llevaba puesto era el de Lime, por lo que daba una impresión diferente a la de Sapphee. Sin embargo, no había duda de que la silueta era la de Sapphee. Había replicado a la perfección el característico torso largo de una lamia.

Pero…

“Nunca confundirías esto con Sapphee, ¿verdad?”.

“Por supuesto que no”.

La slime se rió con la cara de Sapphee.

Su carne todavía era un slime semitransparente que se movía cuando se tocaba. Ella también había replicado algo que se parecía al cabello largo de Sapphee, pero no había mechones definidos. Quizás no era posible hacer cosas puntiagudas con ese tipo de tejido, porque las puntas de su cabello tenían una forma redondeada. Si Glenn la viera en la calle, estaría claro que ella era una baba transformada. Era como si alguien hubiera vertido gelatina verde en un molde de Sapphee por puro capricho.

“Y bien, Dr. Glenn. ¿Te gustaría que tuviéramos un tiempo para nosotros?”.

La Lime/Sapphee trató de actuar coqueta. Desafortunadamente, la voz seguía siendo la de Lime, muy diferente a la de Sapphee. Cthulhy era mucho mejor imitando voces.

“Como vemos, los slimes pueden copiar la forma de otras personas, pero no lo suficiente como para confundirlos con sus amigos o familiares. Y aunque mimeticen, la carne sigue siendo transparente”.

“Bueno, al menos puedo crear cuerdas vocales en mi garganta y hablar”.

“Necesitas trabajar más en ello, la lengua continental común sueña extraña cuando tienes esa apariencia”.

En su forma original, los slimes eran seres sin estructura y no tenían boca ni orejas. Podían ingerir comida desde cualquier parte de su cuerpo y digerirla donde quisieran. La única manera de conversar para ellos era copiar la estructura humana con cuerdas vocales, tímpano y todo.

“Entonces, ¿qué conclusión podemos sacar de esto?”.

“Los doppelgängers no son obra de slimes”.

“¿Entonces eso significa?”.

“Todavía existe la posibilidad de que sea un truco de magia. Pero si ese no es el caso…” Glenn vaciló, sin saber si debía decirlo, pero finalmente lo hizo. “Existe la posibilidad de que alguna especie desconocida haya venido a la ciudad”.

Lime dejó escapar un grito desenfrenado.

No todos los monstruos eran sedentarios. Algunas especies se reproducían con los suyos, construían aldeas y negociaban entre sí. Otras vivían como nómadas o incluso como mercenarios. Los humanos que habitaban en el reino humano estaban gobernados por los aristócratas del este, pero en el continente al oeste de Lindworm, los monstruos no tenían una autoridad suprema que rigiera sobre todos ellos. Las diversas facciones se habían unido en la guerra más reciente para evitar que los humanos invadieran, pero tan pronto terminó el conflicto, esas alianzas se disolvieron.

Dicho de otra forma, no está fuera de cuestión que una especie desconocida viva recluida en algún lugar del reino de los monstruos.

“Hmm, no está mal… Setenta puntos”.

“Hmph”. Glenn gimió.

No le desanimaba la puntuación; sabía que su hipótesis estaba incompleta. Decir que se trataba de una especie desconocida era algo muy básico. Con la información que tenía, pudo haber conjeturado algo mejor. De no obtener la misma conclusión que Cthulhy, su calificación se quedaría igual

“¡¿Una especie desconocida?! ¡Que interesante!”, exclamó Lime mientras volvía a su forma original.

“Eh…”.

No era un slime. Tenía la capacidad de transformarse, apareció en todas partes de la ciudad, pero se esfumó sin realmente hacer nada.

¿Qué quería Cthulhy de él? ¿Qué le estaba pidiendo que averiguara? ¿La raza de los doppelgängers? ¿Su propósito? ¿Su verdadera forma? O…

Glenn pensó un poco más. ¿Cuándo fue que los doppelgängers se convirtieron por primera vez en un tema de conversación en la ciudad? Comenzó a escuchar sobre ellos el mes pasado. Así es, precisamente durante el período en que Skadi había alcanzado la primera etapa de recuperación después de su cirugía.

Su cirugía…

“Lime”.

“¿Sí?”.

“¿Podrías por favor darnos un momento?”.

“¡Oh no! Glenn, ¿me estás alejando otra vez? ¡Y eso que me convertí en Sapphee para ti!”.

Su cuerpo gelatinoso se sacudió mientras protestaba.

“Lime, comenzaré a descontarlo de tu salario”. Las palabras de Cthulhy no perdonaron.

“¡Ya me estaba yendo!”. La enfermera de baba se movió rápidamente y salió de la habitación.

Glenn consideró que su conclusión no debía ser compartida con cualquiera. Cthulhy entendió la situación y mandó a Lime lejos.

“¿Lo averiguaste? Adelante”. Acarició la mejilla de Glenn con un tentáculo viscoso. “Es hora de tu evaluación”.

“Voy a repasar las características de un doppelgänger”.

Cthulhy escuchó a Glenn hablar con una sonrisa en su rostro.

“Primero, la capacidad de transformarse. Según los testigos, la semejanza es tan precisa que incluso los amigos cercanos de la persona imitada no pueden notar la diferencia. Esta asombrosa habilidad es lo que lo diferencia de la raza slime, que es famosa por transformarse. Por ello asumí que un monstruo desconocido había llegado a Lindworm”.

“Hmm, continúa”.

“Luego, los doppelgängers no están tomando acción alguna, a

excepción de transformarse. Su propósito no está claro. Todos los testigos tienen un reclamo común: vieron un doppelgänger, y cuando se acercaron, salió corriendo. Parece que los doppelgängers no son amistosos, pero tampoco causan daño a la gente del pueblo. Al menos por ahora.

“Wow, ya has llegado tan lejos”, se rio Cthulhy. Siempre disfrutó mucho del progreso de sus alumnos. Por eso los evaluaba. Ponerlos a prueba constantemente era como un pasatiempo para ella.