Monster Musume No Oisha-san (NL)

Volumen 2

Prologo 2: La Ceremonia De Conmemoración en Waterways

Por fin, cuando Sapphee se recuperó del resfriado, la primavera llegó a Lindworm.

La primavera era la temporada de festivales. En Waterways, los tritones celebraron carnavales de varios días, y en la arena, hubo pruebas anuales de promoción. Tanto los monstruos como los humanos se impacientaron por la temporada de jolgorio que se avecinaba en el horizonte.

Con la llegada de la primavera, Sapphee lanzó cada vez más miradas sugestivas hacia Glenn. Incluso él podía suponer que ella quería hacer turismo por los Canales. Imaginó que su objetivo era comprar alguna mercancía de temporada solo disponible en ese momento.

Pero justo cuando Glenn había decidido hacer tiempo e ir con ella, una sola carta cayó del cielo, casi como si hubiera elegido ese momento exacto para llegar.

***

–¡Hola!

La ventana de la clínica se abrió a la fuerza con un golpe. El intruso repentino irrumpió en la clínica, ajeno a los pacientes que esperaban para ser examinados. Tanto Glenn como Sapphee miraron la escena con exasperación.

–Illy. ¿Cuántas veces tenemos que decirte que entres por la puerta? Dijo Sapphee, sus cejas temblando de ira.

–¡Es una entrega urgente a la clínica! ¡Mira, mira, es del Ayuntamiento Central! Respondió Illy.

–¡Escucha a las personas cuando están hablando! ordenó Sapphee.

La costumbre de la joven de entrar por las ventanas de la clínica ya estaba establecida. Una arpía con alas de colores brillantes, su nombre era Illy. Tenía una conexión profunda con Glenn, quien la salvó de un oviducto bloqueado y diagnosticó la muda de sus plumas durante su fase de crecimiento.

–Entonces, ¿cómo es, Illy? preguntó Glenn. Me refiero a tu trabajo en Scythia Transportation.

–¡Es divertido! ¡Puedo volar tanto como quiera! ¡La señorita T siempre me felicita y yo también me destaco! Respondió Illy.

–Eso es bueno, dijo Glenn.

Illy vivía en el pueblo de las arpías, pero se había convertido oficialmente en empleada de Scythia Company a principios de la primavera. Ahora trabajaba como repartidora de correo aéreo. Había aprendido los nombres y rostros de la gente de Lindworm, y no le tomó mucho tiempo acostumbrarse a la ciudad. Para alguien a quien le gustaba volar más que cualquier otra cosa, se podría decir que había encontrado su vocación en la vida. Sin embargo, pensó Glenn, definitivamente quería que ella corrigiera su mal hábito de irrumpir despreocupadamente en la clínica a través de la ventana.

–¡Está bien, aquí! ¡Tienes una entrega! Proclamó Illy.

–Mmm. Del consejo… Entonces, ¿de la señorita Skadi? Preguntó Glenn.

–Sí, sí. ¡Ella fue la que me lo dio! Muy bien, ¡todavía me quedan muchas entregas! Illy declaró, y rápidamente voló por la ventana, tan rápido como había llegado.

–Ella está segura de que tiene prisa, ¿no es así…? Reflexionó Glenn.

–Bueno, aun así, eso es perfecto para una chica como ella, respondió Sapphee.

Ante las palabras de Sapphee, Glenn sonrió forzadamente. Pensó que era precisamente por lo enérgica que era Illy que podía disfrutar de estar tan ocupada. Estaba claro por su expresión animada que estaba viviendo una vida plena como empleada de Scythia Company.

Glenn inmediatamente revisó la carta que Illy le había entregado. El sello de cera estaba estampado con una cresta de dragón, y Glenn se dio cuenta de que era una carta escrita a mano directamente del representante del consejo de la ciudad, Skadi Dragenfelt. Estaba seguro de que el contenido de la carta debía ser de bastante importancia.

–¿Una invitación a la Ceremonia de Conmemoración de Merrow Waterways…? Glenn leyó. –Ya veo. La reconstrucción ha terminado. Es una ceremonia de inauguración.

Los Merrow Waterways tenían una estructura compleja. Era una ciudad cómoda para que vivieran tritones y muchos otros monstruos acuáticos, pero debido a que los canales habían sido creados al remodelar el paisaje urbano existente, todavía había ruinas sin usar que sobresalían del agua. Estas ruinas sin usar incluso habían sido utilizadas como escondite por los traficantes de esclavos. El primer encuentro de Glenn con Illy, cuando ella sufría de su oviducto impactado, de hecho, había sido en ese escondite.

Glenn había oído que el proyecto de remodelación había avanzado durante el invierno, bajo la dirección del asistente personal de Skadi, Kunai Zenow. Que esos mismos traficantes de esclavos fueran todos entrenados por Kunai y que participaran en la remodelación fue realmente un extraño giro del destino a los ojos de Glenn.

En cualquier caso, pensó Glenn, parecía que la reconstrucción había terminado sin incidentes. Los Canales ya no serían el hogar de extrañas bandas de personas. Estaba seguro de que Lulala también debía sentirse más segura, ya que llamaba a Waterways su hogar.

–Dice que aquí hay una fiesta para conmemorar la remodelación de Waterways. Parece que habrá muchos eventos llamativos, desfiles, coros, lo que sea. Oh, aquí dice que Lulala también aparecerá como cantante, leyó Glenn de la carta.

–Oh, definitivamente quiero asegurarme de ver eso. Tal vez, en la invitación… Sapphee se detuvo.

–Por supuesto que también estás invitada, Sapphee. Respondió Glenn. El nombre de Sapphee también estaba claramente escrito en la invitación. Skadi podría tener bastante tacto.

En el sobre se incluía un documento que contenía los detalles de la ceremonia, a Glenn le pareció que iba a ser un gran evento. Naturalmente, dado que estaban reabriendo Merrow Waterways, estaba seguro de que también habría una cantidad considerable de puestos callejeros y casetas en el evento.

Más que nada, Glenn quería escuchar las canciones de su amiga tritón Lulala. Como el médico que cuidaba de su recuperación continua, también tenía curiosidad por saber cómo estaba su garganta.

–Tenemos mucho que esperar, ¿no es así, doctor? Dijo Sapphee.

–Sapphee, ¿te has recuperado de tu resfriado? Preguntó Glenn.

–Qué malo, Doctor. ¿De cuánto tiempo estás hablando? Estoy bastante bien ahora, dijo Sapphee, luciendo muy animada mientras agitaba la cola blanca en la parte inferior de su cuerpo de un lado a otro. Le encantaban los artículos que se vendían en los puestos de Waterways, por lo que Glenn imaginó que estaba muy feliz.

–Juntos. Iremos juntos a todas las tiendas, dijo Sapphee. Ahora que Glenn lo pensaba, había pasado un tiempo desde que ambos se dirigieron a Waterways. Durante los meses de invierno, estaban tan abrumados de trabajo que ni siquiera habían podido salir de la clínica para ir de compras.

–Lo sé, lo sé. Pero en este momento, tenemos trabajo que hacer, respondió Glenn.

–Pero por supuesto. Gracias por su paciencia. Siguiente paciente, por favor. Sapphee llamó. Habían estado parloteando descaradamente en la sala de espera, pero los pacientes habituales no parecían molestos por eso. En todo caso, parecía que la vista del médico y la farmacóloga conversando de un lado a otro era agradable y conmovedora.

El ambiente amistoso se debía precisamente a que se trataba de una clínica de ciudad tan pequeña. No existía tal atmósfera en el Hospital Central Lindworm, una enorme instalación situada en la avenida principal de la ciudad, que trabajaba día y noche para luchar contra la enfermedad.

La primavera finalmente había llegado. Después de haber luchado contra la epidemia hasta que el flujo de pacientes disminuyó, Glenn supuso que podría ser el momento perfecto para que la Clínica Litbeit se relajara un poco.

Grabando en su mente la fecha de la carta para la semana siguiente, Glenn una vez más volvió al trabajo.

***

El día de la ceremonia no había ni una sola nube en el cielo. Glenn y Sapphee ingresaron a Waterways a pie. Anteriormente, había sido extremadamente inconveniente atravesar los canales por tierra, pero ahora se habían construido nuevos puentes y caminos sobre ellos. Glenn estaba seguro de que también era más accesible en barco.

–Ahora incluso puedes llegar tan lejos a pie, eh. Realmente agregaron muchos puentes, ¿no es así…? Dijo Glenn.

–Se instalaron para uso turístico. Con esto, será fácil venir y hacer algunas compras, respondió Sapphee.

Los dos hablaron mientras miraban los Canales, maravillándose de cómo se había convertido aún más en un destino turístico. Había puestos callejeros a ambos lados de los puentes. Los comerciantes no necesariamente parecían ser residentes de Waterways, y ya fueran humanos o monstruos, las personas más emprendedoras ya se habían instalado. Ahora también había puestos de comida, algo bastante difícil de operar desde un bote.

–Es maravilloso, ¿no es así, Dr. Glenn? Me pregunto si podremos ver todas las tiendas… Reflexionó Sapphee.

–N-no vas a tratar de mirarlas a todos, ¿verdad? Glenn tartamudeó.

–Bueno, todos ellos pueden ser un poco… Oh, pero me gustaría ir a ese puesto allí. Y ese puesto de allí también. Respondió Sapphee. Los dos tenían un límite de tiempo hoy. Sapphee inmediatamente comenzó a idear qué tiendas debería visitar.

Glenn había disfrutado deslizándose lentamente por los Canales en góndola, pero no podía negar la comodidad de poder caminar con sus propios pies. Echó un vistazo debajo del puente y vio góndolas que subían y bajaban incesantemente por el canal. Glenn dudaba que hubiera menos turistas usando un bote para hacer uso de los canales. Estaba seguro de que, en el futuro, las góndolas seguirían siendo esenciales para el turismo.

–Primero está el puente principal, le dijo Glenn a Sapphee, quien parecía a punto de ser atraída hipnóticamente hacia un puesto.

–Lo sé, respondió ella.

Los dos se dirigían hacia el corazón de Merrow Waterways. El canal más grande y naturalmente más ancho de Waterways tenía un puente recién construido a través de él, conocido simplemente como el puente principal. Glenn había oído que había un desfile todos los días en la base del puente. Había asientos especiales para aquellos que querían ver el desfile de cerca, pero, naturalmente, siempre había una multitud de personas que se arremolinaban para tratar de tomar asiento.

Hoy, sin embargo, no había tal multitud. De hecho, no se podía encontrar ni un solo turista normal. Estaba lujosamente decorado con una pancarta para el evento de inauguración y banderas con el símbolo del ayuntamiento, pero las únicas personas de pie en el puente eran miembros de la fuerza de seguridad personal del ayuntamiento.

Glenn siguió adelante sin dudarlo. Los guardias de seguridad no intentaron detenerlo, sugiriendo que estaban al tanto de su invitación. Vio la forma de la persona que estaba buscando en uno de los caminos laterales de los Canales. Al pie del puente, había una escalera que subía al canal principal. Cuando Glenn y Sapphee descendieron con cuidado las escaleras, la mujer que estaba buscando estaba de pie junto a la orilla del agua.

–Buenos días, señorita Skadi, señorita Kunai, dijo Glenn, saludando a la pareja.

–Dr. Glenn, ¿viniste? Respondió Kunai.

–Muchas gracias por su generosa invitación, dijo Glenn. Tanto él como Sapphee inclinaron la cabeza en señal de agradecimiento. Su invitador, Skadi Dragenfelt, permaneció en silencio y asintió suavemente. Como de costumbre, su rostro estaba cubierto por su velo y había un aura misteriosa rodeándola. Si bien era tanto la representante del consejo de la ciudad como la figura más influyente y poderosa de la ciudad, su apariencia era la de una niña. Su voz también era bastante suave, y sin su asistente Kunai para hablar por ella, Glenn no tenía idea de lo que estaba diciendo.

Parecía que Skadi acababa de llegar a la ceremonia y pronto daría una dirección desde lo alto del puente principal. Esto explicaba por qué el área alrededor del puente principal solo estaba poblada por personas del ayuntamiento, en contraste con el ajetreo y el bullicio a lo largo de Waterways.

Habiendo sido invitado personalmente, Glenn imaginó que tendrían un buen asiento para escuchar su discurso; la pregunta en su mente era simplemente cuántas de sus palabras realmente podría escuchar.

De cualquier manera, pensó, estaba seguro de que Kunai levantaría la voz y daría la dirección en su lugar. Siendo su leal servidora, Glenn estaba seguro de que ni una sola palabra de su amo se le pasó por alto. Como golem de carne, las orejas y los tímpanos de Kunai estaban cosidos con carne muerta, pero en lo que respecta a Skadi, Glenn pensó que sus oídos podrían ser más poderosos que los de los vivos.

–A Lady Draconess le preocupaba que estuvieras demasiado ocupado para venir. ¿La clínica está bien contigo aquí? Preguntó Kunai.

–Sí, bueno, solo estamos cerrados por la mañana. Respondió Glenn.

–Ya veo. Es un descanso bien merecido, así que asegúrate de tomarte tu tiempo y disfrutar de la ceremonia, dijo Kunai. Tenía un brazalete en el hombro derecho que indicaba que era parte del equipo de seguridad. Como se esperaba de la asistente de Skadi, ella también estaba ayudando a mantener la ceremonia segura y protegida. Glenn no tuvo ningún problema con eso, pero su brazalete parecía estar sujeto a la parte superior de su brazo con el alfiler clavado directamente en su carne. Kunai tenía una tendencia a tratar su propio cuerpo con rudeza, pensando que no importaba ya que ella era un cadáver. Glenn estaba considerando si darle una palabra de advertencia al respecto cuando—

–¡Oh! ¡Doctor Glenn! ¡Usted vino!

–Ahora, ahora, no te muevas. Quédate quieto.

–Está bien.

Glenn escuchó un par de voces familiares. En el canal, pudo ver muchas góndolas y tritones en el agua. Al ver lo extravagantemente decoradas que estaban las góndolas, supuso que se estaban preparando para el desfile. Todos se movían a toda prisa tanto por encima como por debajo de la superficie del agua. Glenn se sobresaltó cuando vio dos rostros que reconoció.

Una era Lulala Heine, que tenía la mitad inferior de su cuerpo sumergida en el agua. Era una cantante de sirenas que vivía en Waterways. Glenn supuso que estaba cantando en el desfile. Tenía un vestido elegante envuelto alrededor de ella que le recordó a Glenn muchas especies llamativas de peces tropicales. El vestido flotaba en el agua y se extendía como una falda acampanada.

Y había otro rostro que reconoció.

–Arahnia… Glenn suspiró. Era la arachne diseñadora de vestidos, Arahnia Taranterra Arachnida.

No se podía negar que Lulala era paciente suya: él le había dado tratamiento médico y periódicamente la visitaba para ver cómo estaba. Arahnia, sin embargo, era diferente. Había fingido estar enferma para engañar a Glenn y había intentado violarlo, todo como parte de su propia agenda.

Sin embargo, como si la propia Arahnia se hubiera olvidado de todo eso, estaba arreglando la ropa de Lulala y tarareando para sí misma mientras cambiaba las decoraciones y adornos del atuendo. Arahnia colgaba boca abajo del pilar del puente por su seda, pero parecía estar consumida por su trabajo. Parecía una araña de verdad mientras colgaba a centímetros del agua y se enfrentaba a Lulala.

–¿Por qué está ella aquí…? Incluso su amiga cercana, Sapphee, se sorprendió al ver a Arahnia presente.

–Madame Arahnia está a cargo de diseñar los disfraces para todos los tritones que cantarán en la ceremonia de hoy, respondió Kunai. –No solo los diseños, todo lo hizo a mano, desde tomar medidas y coser hasta terminar cada atuendo. En este momento, ella está en medio de sus controles finales. Sin duda es una gran tarea, pero su ética de trabajo es de primera categoría.

–Oh, ¿Arahnia? Respondió Sapphee.

–Sí. De todos modos, con el cuidado con el que terminó todo, incluso los tritones han estado felicitando su trabajo. Loose Silk Sewing tiene un empleado joven bastante hábil en sus manos.

–¿Es eso así? Y pensar que sería elogiada tanto… Dijo Sapphee.

Glenn pensó que por lo grande que parecía Lindworm, en realidad era bastante pequeño. Su círculo de conocidos interactuaba de formas que ni siquiera él conocía. Dadas las personalidades de Lulala y Arahnia, no parecía que tuvieran la oportunidad de conocerse, pero cuando consideró sus roles como cantante y diseñadora de vestuario, se dio cuenta de que parecía haber una conexión entre los dos.

Solo esperaba que Arahnia no tuviera ningún efecto adverso en la inocente y de corazón puro Lulala.

–La Lady Draconess está más que complacida de que un número tan grande de personas, incluidos los arachnes y los tritones, hayan cooperado para hacer de hoy lo que es. A partir de esta primavera, los canales estarán aún más animados que nunca, dijo Kunai.

–Sí, sí. ¡Habrá muchas más compras que hacer, ¿no es así!? Dijo Sapphee, su amor por las compras brillando a través de su sonrisa. No era demasiado exagerado imaginar que ya tenía un plan de las tiendas que quería visitar.

–…………

–¿Sí? Respondió Glenn. Skadi Dragenfelt había hablado. Glenn describiría su voz como incluso más tranquila que el sonido de un mosquito volando por el aire. Realmente era raro que él entendiera lo que ella estaba diciendo.

–Me alegro de que hayas podido venir. Por favor, diviértanse, es lo que dijo mi ama, le transmitió el guardaespaldas no muerto a Glenn, hablando en nombre de Skadi.

–¿E-Es eso así? Glenn tartamudeó.

–Ya lo he dicho muchas veces, pero Lady Draconess está realmente encantada de que tanta gente se haya reunido para la ceremonia de hoy. Lindworm se ha vuelto realmente espléndido. Es una prueba de que los humanos y los monstruos viven juntos con buena salud… Por supuesto, ella también está muy satisfecha con sus esfuerzos, Dr. Glenn, por mantener saludables a los residentes de la ciudad.

–Ya veo, dijo Glenn. Nunca había visto la cara real de Skadi. Estaba seguro de que sus opiniones eran tal como las describió Kunai, pero sin poder ver su rostro, en realidad no podía sentir que ella estaba encantada, incluso cuando se lo dijo.

Además, lo que tenía curioso a Glenn era la cola de Skadi. Sobresaliendo de la parte inferior de su túnica, había una cola de dragón gruesa y resistente. Cubierto de escamas que brillaban con el color de la arena amarilla, se inclinaba como si la estuvieran arrastrando por el pavimento de piedra del Canal. Cuando Glenn lo había visto antes, estaba de pie en la base y estaba seguro de que la punta se balanceaba de un lado a otro.

–Bueno, ha llegado el momento. Empezaremos pronto. Se han preparado los asientos, así que solo muestre su invitación a los guardias de seguridad. Muy bien, entonces, Lady Draconess, vámonos, dijo Kunai.

–………… Skadi asintió con la cabeza. Subiendo las escaleras, se dirigió hacia

el puente principal. Glenn supuso que daría algún tipo de dirección para la ceremonia de apertura. Desde el principio, el poder y la influencia de Skadi habían jugado muchos papeles diferentes para convertir los Canales en lo que eran ahora. Tal como había dicho Kunai, Skadi seguramente estaba feliz de ver que los Canales se volvían aún más animados.

Esa era precisamente la razón por la que Glenn sentía curiosidad por su cola colgando débilmente en el suelo.

–Bueno, entonces, vayamos a nuestros asientos también. Parece que también están ofreciendo bebidas allí… Dijo Sapphee.

–Sí… Respondió Glenn.

–¿Doctor?… ¡Doctor!

–¿Eh? ¿Oh… qué?

–¿Por qué estás parado allí y distraído? dijo Sapphee, haciendo un puchero.

He estado tratando de llamar tu atención.

–… ¿Lo descubriste?

–Por supuesto, respondió Sapphee, como si la respuesta fuera obvia. Glenn no creía que se le notara en la cara con tanta claridad. Era evidente que no podía engañar a una amiga de la infancia que había estado con él tanto tiempo como ella. –Ahora, me pregunto por qué demonios podrías estar tan preocupado. ¿Arahnia? ¿Señorita Lulala? ¿Señorita Kunai o señorita Skadi? Hmm, ¿qué mujer podría ser, doctor?

–S-si me lo vas a sacar a la fuerza, es la señorita Skadi, pero espera un segundo, Sapphee, estás muy cerca, respondió Glenn.

–Aunque estás aquí conmigo, y aunque vamos a ir de compras juntos después de esto, ¡estás mirando al vacío pensando en otra mujer! ¡Hmph!

–Eso no es cierto.

–Hmph.

Glenn esperaba que ella se enrollara alrededor de él a este ritmo y empujó suavemente a Sapphee lejos de su rostro.

–Hay algo que me tiene curioso… Pero ya sabes, estoy seguro de que es solo mi imaginación desbocada…, Dijo Glenn.

–¿Oh? Sapphee respondió con una mirada en blanco en su rostro, como si no tuviera idea de lo que estaba hablando Glenn.

Glenn no sabía lo suficiente sobre los dragones para hacer un diagnóstico de Skadi solo por el aspecto indispuesto de su cola. Como médico, se suponía que estaba bien versado en todo tipo de monstruos, pero los dragones eran diferentes. Pensó que sería bueno si pudiera obtener su permiso para examinarla un poco, pero eso era algo que podría dejarse para otro día. Se preguntó si un ser tan poderoso como un dragón se sentiría enfermo o mal para empezar. Estaba seguro de que nada le pasaría a Skadi solo por dar un pequeño discurso, de todos modos. Se preguntó por qué estaba tan preocupado.

–Entiendo que, debido a tu trabajo, incluso las cosas más pequeñas pueden preocuparte, pero… asegúrate de tenerme en tus pensamientos también, dijo Sapphee.

–… Okey.

Que Sapphee le hablara así hizo que Glenn quisiera regañarse a sí mismo por perderse en sus propios pensamientos. No pudo contener una sonrisa forzada mientras miraba la expresión inocente y avergonzada de Sapphee. Preocuparse por las cosas más pequeñas era un mal hábito suyo.

Glenn decidió que, dado que estaban en un festival de celebración, debería intentar disfrutarlo con Sapphee tanto como pudiera.

***

La ceremonia había comenzado. Glenn tenía razón: Skadi se paró en un escenario construido en el puente principal e iba a dar un discurso. Parecía digna mientras subía a la plataforma precariamente construida en la barandilla del puente. Todos estaban ansiosos por escuchar lo que tenía que decir.

–Desde que comenzó el año pasado, el gran proyecto de reconstrucción de Waterways ha contado con el apoyo de todos y cada uno de los ciudadanos de Lindworm y ha podido terminar de manera segura para esta fecha de inauguración. Junto con mi gratitud a las muchas personas involucradas en este proyecto, yo, Skadi Dragenfelt, ofrezco una pequeña bendición de dragón de fuego al recién renacido Merrow Waterways…

Mientras que Skadi era la persona que estaba de pie en el escenario, Kunai era quien transmitía su mensaje. Glenn sabía que, dado el volumen de la voz de Skadi, sus palabras no llegarían a los oídos de todos los reunidos aquí. Esta no era la primera vez que Kunai hablaba por Skadi, pero había opositores políticos de Skadi que sintieron que era muy sospechoso que la representante del consejo de la ciudad no hablara con sus propias palabras.

Glenn también sintió curiosidad: ¿por qué la voz de Skadi era tan baja?

–Han invitado a muchas personas además de nosotros, ¿no es así? Sapphee susurró al oído de Glenn. Estaban sentados en asientos que habían sido especialmente dispuestos para aquellos con invitaciones personales. El área en la que estaban sentados parecía un café en la acera y tenía una buena vista del puente principal donde se encontraba Skadi. Un gran número de los otros invitados los rodearon.

–¿En serio? Preguntó Glenn.

–Sí. Ese de allá es el representante de la Scythia Company… El padre de la señorita Tisalia. También está Aluloona de Aluloona Plantation. Incluso el jefe del Taller Kuklo. Ese asiento libre… Oh, ese debe ser el asiento de la Dra. Cthulhy. Faltando de nuevo, ya veo.

–La Dra. Cthulhy está muy ocupada, es por eso, intervino Glenn.

–Parece que allí está la jefa de la rama Lindworm de Loose Silk Sewing. Ah, y Arahnia también está con ella, continuó Sapphee. Parecía que todos los representantes de las principales empresas y organizaciones de Lindworm habían sido invitados. Arahnia era la diseñadora de Loose Silk Sewing y debía haber asistido junto con su jefe.

De repente, Glenn se sintió nervioso. Le preocupaba que un simple doctor de pueblo como él estuviera fuera de lugar en tal ceremonia. Sin darse cuenta de la inquietud de Glenn, Sapphee bebió tranquilamente el té que les habían servido. Ella no era del tipo que se ponía nerviosa cuando estaba rodeada de personas importantes de gran estatura.

–Siete sirenas han aceptado amablemente mi solicitud de estar aquí para la ceremonia de hoy. Mientras disfrutan de las hermosas voces de estos tritones, les pido que disfruten del Waterways recién construido al contenido de sus corazones. Las palabras de Skadi resonaron a través de los Canales a través de la voz de Kunai.

Todo el puente estaba en movimiento. Silbidos y aplausos colmaron a Skadi de elogios. Como representante del consejo de la ciudad, ciertamente tenía bastantes rivales políticos, pero también era muy popular entre los ciudadanos de Lindworm. Glenn pensó que tal vez se debía a sus frecuentes viajes a la ciudad, donde caminaba con Kunai a cuestas.

–Finalmente… Esto es algo extremadamente, extremadamente personal, pero también es algo que definitivamente les pediría a los reunidos que escuchen, dijo Kunai. Continuando con el discurso, Skadi extendió su mano hacia el pasamano del puente.

–Hace diez años le di a esta antigua ciudad fortificada el nombre de Lindworm. El nombre Lindworm significa “dragón del cielo”. Son una especie de dragón que vuela por el aire. ¿Por qué le puse un nombre así? Los chismosos dirán que, como yo, Skadi Dragenfelt, soy un dragón de fuego, le di el nombre de dragón porque tengo la intención de gobernar esta ciudad. Sin embargo, ese no es el caso en absoluto.

Incluso entre los dragones, había varias especies diferentes. Dragones del cielo. Dragones de fuego. Dragones venenosos. En la casa de Glenn en el extremo este del territorio humano, se creía que había dragones completamente diferentes a los que se encuentran en el territorio occidental de los monstruos. Eran criaturas misteriosas que tenían una cabeza de cocodrilo, un cuerpo de serpiente y podían volar por el aire sin alas.

Glenn se preguntó por qué había tantas especies diferentes de dragones. Una explicación fue que los dragones eran originalmente seres que existían cerca de los dioses. Cuando los dragones se separaron de los dioses y vivieron demasiado tiempo en el suelo, la tierra los corrompió y sus cuerpos se deterioraron mucho. Era una explicación satisfactoria, pero Glenn aún se preguntaba.

Hasta cierto punto, los dragones seguían siendo criaturas misteriosas. Había mucho sobre ellos que era imposible de entender con su conocimiento de biología.

–Esta ciudad es… Un lugar para que vivan humanos y monstruos. Puede haber problemas. Puede haber disputas. Puede haber desastres. Estoy segura de que puede haber gente de otros lugares que diga todo tipo de cosas sobre la forma de vida de nuestra ciudad. Sin embargo, creía que al darle a la ciudad el nombre de dragón, sin importar lo que pasara, el dragón protegería esta ciudad. Y por dragón, no me refiero a mí misma. Creo en la protección divina del fundador de nuestra especie, allá arriba en los cielos.

Skadi no era el gobernante de Lindworm, a pesar de que a menudo se la confunde como tal. La administración de Lindworm fue decidida por un grupo de miembros influyentes de la ciudad, incluida Skadi, que consultaron juntos sobre los problemas. Skadi era su representante, pero eso no significaba que tuviera autoridad para decidir las cosas por su cuenta. Naturalmente, había una diferencia entre la influencia que tenía su voz en comparación con las otras voces en el consejo de la ciudad, pero eso se debía completamente a su propia competencia y habilidad. No había nadie que creyera que estaba tratando de apoderarse de la ciudad por sí misma.

–En consecuencia, yo… Yo pronto…

Todos esperaron las siguientes palabras de Skadi. Todos imaginaron que estaba a punto de decir algo importante.

Sin embargo, no llegaron. Glenn se preguntó si no estaba segura de qué decir, pero era extraño que el discurso que había fluido tan suavemente hasta ese momento se hubiera detenido de repente.

Kunai también miró a Skadi. El hecho de que su voz por proxy, Kunai, fuera sospechosa significaba que las palabras de Skadi habían fallado. La audiencia esperó con gran expectación las siguientes palabras de Skadi.

Al momento siguiente sucedió. Skadi parecía como si estuviera haciendo una reverencia.

–¡Señorita Kunai! Glenn gritó reflexivamente y se puso de pie. El puente estaba lejos, pero estaba seguro de que su voz lo había alcanzado. Abriéndose paso entre la audiencia, Glenn comenzó a correr.

Lo que parecía un arco había sido Skadi cayendo hacia adelante. Con el equilibrio tambaleándose, Skadi fue sostenida por Kunai junto a ella. El grito de angustia de Kunai alcanzó a Glenn mientras corría hacia el puente. Glenn se preguntó: ¿se habría desmayado? ¿Fue algún tipo de espasmo? ¿Fue sólo un ligero ataque de mareo?

No, pensó, no era eso. No importa cuántas veces Kunai llamó a Skadi, no hubo respuesta.

Skadi había perdido completamente el conocimiento. Era imperativo que le diera primeros auxilios.

Sin embargo, el problema era que había mucha gente. Para empeorar las cosas, ambos extremos del puente estaban repletos de miembros de la audiencia que intentaban escuchar el discurso de Skadi. Había un límite en la cantidad de personas que podía apartar con sus delgados brazos. No solo eso, no había nadie en la multitud que supiera lo que estaba pasando, y se encontró en medio de un caos masivo.

Glenn estaba desesperado por pasar, pero a este ritmo, pensó que podría llegar demasiado tarde al lado de Skadi. Un retraso en la respuesta inicial a menudo era fatal cuando se trataba de un tratamiento médico de emergencia.

–Hngh… ¡Señorita Skadi! Glenn gritó mientras se retorcía entre la multitud, tratando de avanzar, cuando—

–Doctor, por aquí. Dijo Sapphee, tomando a Glenn de la mano. Sapphee se abrió paso a través de los huecos en la multitud de una manera que Glenn pensó que tal vez se esperaba de una lamia como ella. Incluso cuando parecía que no podrían pasar a primera vista, usando su cuerpo de lamia, pudo pasar a la fuerza. Momentos como estos hicieron que Glenn se diera cuenta de lo confiable que era.

–Por favor, date prisa, dijo Sapphee.

–Lo sé, respondió Glenn.

Bajo la guía de la lamia, Glenn pudo deslizarse entre la multitud. Después de atravesar la masa de personas, vio la figura colapsada de Skadi frente a él. A su lado, Kunai sostuvo los brazos de Skadi y la llamó desesperadamente. Con su maestro en un estado crítico, la tez ya clara de Kunai se volvió aún más pálida.

–Por favor, no la muevas. ¡Alguien! ¡Consígame una camilla! dijo Glenn, dando instrucciones.

–¡Oh! ¡Usted vino! Gracias a Dios… Respondió Kunai, una mirada de alivio se extendió por su rostro. –De repente cayó hacia adelante. Ella no responde cuando trato de llamarla…

–Podría ser un problema con su corazón o cerebro. ¿La señorita Skadi sufre alguna enfermedad crónica?

–Bueno… Kunai miró a su alrededor, preocupada. A Glenn le pareció que ella sabía de alguna enfermedad crónica, pero no era propio de Kunai quedarse sin respuesta. Glenn pensó que vio su mirada hacia la multitud y se dio cuenta de que podría ser algo de lo que ella no podía hablar en un lugar tan público.

–Entiendo. En cualquier caso, voy a comenzar con los primeros auxilios de emergencia, dijo Glenn, acercando su rostro al velo de Skadi. Ella estaba respirando. Inmediatamente fue a tomarle el pulso. Como tenía escamas alrededor de la muñeca, Glenn metió la mano por el costado de su bata y le tomó el pulso en el cuello.

Fue entonces cuando Glenn se dio cuenta de que Skadi no llevaba nada más debajo de su bata. Estaba sorprendido, pero sabía que ahora no era el momento de comentarlo.

Su pulso era débil, pero aún estaba allí.

–He confirmado que está respirando y que todavía tiene pulso. Transportémosla inmediatamente. El médico de cabecera de la señorita Skadi es… La Dra. Cthulhy, ¿correcto? Preguntó Glenn.

–S-sí, respondió Kunai.

Glenn pudo confirmar que ella estaba respirando y que su sangre fluía correctamente, en cuyo caso, no había mucho más que pudiera hacer en el puente. Determinó que tenían que dirigirse al Hospital Central Lindworm y tratar a Skadi allí, junto con Cthulhy. Estaba seguro de que incluso ella se sorprendería de las circunstancias de su tan esperado reencuentro.

Ya había pasado la hora de la ceremonia. Al igual que Kunai, muchas de las personas reunidas allí observaron atentamente mientras Glenn examinaba a Skadi.

***

El rumor pronto corrió por todo Lindworm. Rápidamente tomó vida propia. Se agregaron adornos y exageraciones a la historia hasta que se convirtió en un monstruo, quedando poco de la verdad.

Se transformó en un rumor completamente infundado de que alguien había planeado un intento de asesinato en Skadi. ¿Fue el agricultor Aluloona, reconocido como el siguiente en la línea para convertirse en representante del ayuntamiento? ¿O fue el gerente de la sucursal de Loose Silk Sewing, a quien siempre le gustaba intrigar y tramar una cosa u otra? No, tal vez fue la directora del hospital Cthulhy quien la envenenó. Estos y otros rumores irresponsables similares corrieron desenfrenados. Ignorando que solo se había derrumbado, algunos incluso llegaron a la conclusión de que Skadi ya estaba muerta, y lograron aglomerarse en el salón de actos central y causar una escena.

Ese día, lo único de lo que se hablaba en el pueblo era de Skadi. Pero la perturbación, para mirar el lado positivo, demostró claramente cuánto la amaban y cuán importante era para la ciudad.

Y así llegó un trato sin precedentes, uno que sacudiría toda la ciudad del dragón hasta la médula. Una cirugía mayor de dragón estaba a punto de comenzar.