Durara! (NL)

Volumen 1

Capítulo 8: La Heroína Doble: El Volumen Sonohara

Parte 2

Porque en la mano izquierda de Izaya, la que se acababa de esconder detrás de la espalda, había un pequeño cuchillo afilado. El problema era que, a pesar de que el chico había estado observando cada movimiento, no pudo ver de dónde éste había sacado el cuchillo, y ni siquiera había visto el instante en que el hombre había cortado la correa.

Hábilmente, con la mano izquierda fuera de vista, Orihara guardó la hoja de la navaja y rápidamente la ocultó en la manga de su chaqueta. Una maniobra como esta, con una sola mano, era como un acto de magia ante los ojos del adolescente.

Izaya seguía sonriendo y sacó un teléfono celular de la mochila.

Entonces será mi nuevo pasatiempo ‘pisotear móviles de chicas’.

Así como las palabras le salieron de la boca, tiró el móvil de una de las muchachas hacia arriba. El celular, que estaba cubierto con calcomanías, cuando golpeó contra el suelo hizo un sonido crujiente.

¡Ugrrh! Idiota…

La chica rápidamente extendió la mano para recogerlo.

Y vio al pie de Izaya adelantársele, rozar sus uñas y pisotear el celular una y otra vez.

Hubo un chirrido que sonó como alguien comiendo una galleta, y pedazos de plástico roto se dispersaron debajo de la bota. El tipo ignoró sus gritos:

¡Aaaaaah-! —Gritó la chica cada vez que el pie derecho caía sobre el teléfono móvil, una y otra vez. Los movimientos eran precisos, como el de una máquina. Pisaba siempre en el mismo lugar. Su risa también era mecánica y se repetía:

JA JA JA JA JA JA JA JA JA JA JA JA JA

¿Este tipo está desquiciado? ¡Creo que realmente se ha vuelto loco! ¡Qué asco! ¡Vayámonos!

La chica, cuyo teléfono estaba siendo pisoteado, sólo atinó a mirarlo atontadamente, y finalmente tuvo que ser arrastrada por las otras dos.

Cuando Orihara vio que habían dejado completamente el lugar, sus carcajadas falsas y movimientos desenfrenados se detuvieron de repente. Como si no hubiera pasado nada, se volvió hacia Mikado.Anri aún no se había ido y estaba allí de pie, nerviosa, observándolos.

Estoy aburrido. Pisotear celulares dejó de ser mi pasatiempo.

Le sonrió suavemente al adolescente.

Eres muy valiente. Querías ayudar a una chica a la que estaban acosando. No muchos pueden hacer eso.

¿Eh?

Al escuchar el cumplido, Sonohara miró alarmada en dirección de Ryuugamine.Al final, la idea del joven resultó bastante inútil, y había sido Izaya quién realmente la había ayudado. Esto avergonzó bastante al chico.

Pero el hombre ignoró su desconfianza y empezó a hablar.

Ryuugamine Mikado-kun, no es una coincidencia que nos encontremos aquí. Es porque te he estado buscando.

¿Eh?

Justo cuando el adolescente le iba a preguntar qué había querido decir con eso, el tacho de basura de una tienda voló desde el callejón, y se estrelló directamente contra el informante.

El bote golpeó contra el suelo con un ruido impresionante y finalmente, rodó hasta detenerse.

¡Urgh!

Orihara gimió, y perdió el equilibrio, cayendo de rodillas. Lo había golpeado directamente estaba hecho de metal. Por suerte lo había alcanzado con la parte plana, sin filo, así que mientras el impacto resultó bastante ruidoso, no le hizo mucho daño.

Izaya lentamente se puso de pie, y miró en la dirección desde la que había volado el objeto:

¿Shi…Shizu-chan? Iza-ya- kun

Al oír estas sílabas deliberadamente estiradas, Mikado y Anri giraron lentamente en la misma dirección.

Parado allí, estaba un joven usando gafas de sol. Llevaba un traje de camarero, moño incluido. Así y todo, estaba vestido como un proxeneta de hotel o club nocturno del siglo XX.

No era tan alto como Simón, pero aún podía ser considerado bastante alto. Aunque mirando su cuerpo flacucho, no parecía ser alguien que pudiera arrojar un cubo de basura.

¿No te había dicho que no volvieras a mostrar tu cara por Ikebukuro? Iza-ya- kun.

El rostro de Izaya demostró que recordaba esa conversación.Y por primera vez, Ryuugamine vio que la sonrisa había vacilado:

¿Shizu-chan, no estabas trabajando en la entrada oeste?

¡Me despidieron hace siglos! Además ¿no te dije que no me llamaras así? ¿Cuántas veces te he llamado Iza- ya-?Tengo nombre y es: -Heiwajima Shizuo-

Mientras el recién llegado advertía en voz baja, una vena le latió en la sien. No se veía nada particularmente especial en él y si recién no hubiese hecho algo inusual, fácilmente podría pasar por un camarero normal. Sin embargo, parecía estar irradiando ira.

En los ojos de Mikado se materializó una expresión de ‘terror’ pura, que superaba ampliamente al ‘miedo’.

“Le late la vena de la frente…Es la primera vez que veo que alguien hace eso de verdad…”

Tales pensamientos inocentes seguían emergiendo en la mente del chico, pero en el momento siguiente, todo lo que quedó era un cuerpo adolescente que había sido tomado completamente por un temor primitivo indescriptible.

Heiwajima Shizuo era el hombre que Masaomi había dicho que nunca debería enemistar. Cuando Kida lo había mencionado, también le había dicho que: ‘entre las ‘Color Gangs’ y los ‘Bosozoku’, este tipo todavía podía ser considerado un miembro normal de la sociedad’.

Pero Mikado estaba seguro. Si alguien utilizara la ‘violencia’ para comunicarse, sería este sujeto.

No era difícil de entender. Cualquiera que viviera en Japón, y viera a una persona como esta, le gustaría estar lo más lejos posible. Sobre todo si la persona parecía temible y peligrosa. Pero si lucía como este hombre, cuya apariencia no era particularmente notable sería, en efecto, aún más difícil de decidir cómo interactuar con él.

Realmente eres problemático, Shizu-chan. ¿Sigues enojado porque te eché la culpa de ese crimen?

No, no lo estoy. Solo quiero molerte a golpes. Ah, ahora estoy ocupado… así que, déjame ir.

AunqueOrihara estaba pidiendo que lo dejara, se sacó el cuchillo de la manga:

Frente a la violencia de Shizu-chan…eres difícil de tratar, ya que no escuchas razones ni lógica.

Eh…

Anri, que había dejado de prestar atención, dejó escapar un grito ahogado al ver el brillo plateado de la hoja del cuchillo. Ryuugamine, percibiendo lo asustada que estaba, comenzó a gesticularle vehementemente, haciendo todo lo posible para transmitirle el mensaje de ‘vamos a salir de aquí’.

La chica presionó la espalda contra la pared y asintió desesperadamente. Abrazando su bolso, se echó a correr y el chico la siguió hasta que llegaron a la carretera principal. Luego se dieron vuelta para mirar lo que había pasado.

Sólo podían escuchar los gritos frenéticos de Shizuo, provenientes del callejón del que acababan de huir, y vieron a una multitud reunida allí, atraídos por la conmoción.

Entonces, un hombre enorme, de más de dos metros de altura -Simón-, extendió una mano para partir la muchedumbre expectante en dos y entró en el callejón. Después de eso, Ryuugamine ya no tuvo ganas de seguir mirando.

Ahora, un miedo se le arremolinó alrededor del pecho. En este nuevo lugar, donde lo ordinario y lo extraordinario se enfrentaban, ¿Cómo se podría clasificar este incidente reciente? Pero al menos tenía bien claro que eso era algo en lo que definitivamente no debería involucrarse.

Al mismo tiempo, había experimentado en carne propia lo que se entendía por ‘alguien que nunca deberías enemistar’.

“Una persona como él ya da miedo. Entonces, ¿Cómo serán los miembros de la tríada y los de la mafia china?”

Todas esas cosas violentas que había visto en internet… siempre pensó que eran exageraciones. Pero después de experimentarlo personalmente, se dio cuenta de que realmente era aterrador.

Mientras reflexionaba sobre eso, el joven pensó que probablemente había corrido lo suficientemente lejos y le gritó aAnri:

Hey, espera… espera…… no puedo… respirar…

Había hecho lo imposible, pero lo más triste es que no había sido capaz de correr más rápido que ella.

Y este hecho se había impuesto en la realidad del joven Ryuugamine Mikado.

***

¿Te encuentras bien?

Mikado había llevado a su amiga a un café cercano, con la esperanza de que esto la ayudara a calmarse un poco.

Después de sentarse, el joven pidió dos bochas de helado, pero entonces se dio cuenta de que parecía bastante infantil y se arrepintió.

Em…gracias…por salvarme.

Ah, no fue nada, de verdad.Además, la persona que te salvó realmente fue ese tipo Izaya. Pero…

“Argh ¿Qué se supone que tengo que decir?Si Masaomi estuviera aquí…”

A pesar de que estaba muy nervioso, iba a ser bastante extraño que no dijera nada. Entonces abrió la boca para empezar una conversación:

¿Esas chicas eran de tu escuela?

Anri asintió como respuesta.

Ya veo… así que siempre te estaban molestando en la primaria, y había una chica increíble llamada Mika que siempre te defendía, pero ahora que ella se ha ido, ¿han vuelto para acosarte de nuevo?

Después de escuchar la conjetura, la chica se paralizó momentáneamente:

¿Cómo…cómo supiste todo eso?!

Ah… no te preocupes, acabo de adivinarlo basándome en lo que ustedes estuvieron hablando recién… pero eso no importa. ¿Esta persona, -Mika- es la ‘Mika Harima’ de nuestra clase?

Al escuchar la pregunta, la niña recuperó la compostura y comenzó a explicarle:

Uh…si, es esa Harima Mika. Harima-san ha estado ausente estos días ¿no? Bueno, eso es porque no ha estado en casa desde el día antes de la ceremonia de entrada.

…¿Por qué?

“¿No es algo que la policía tendría que estar investigando?” Mikado pensó. Se le agrandaron los ojos por la sorpresa. Anri pareció saber lo que él estaba pensando y negó con la cabeza suavemente:

— No está desaparecida exactamente. Porque Harima-san sí dejó un mensaje para mí y para su familia. Dijo algo así como: ‘Me he ido en un viaje para aliviar mi corazón roto, no te preocupes por mí.’O tal vez había dicho algo acerca de qué tren había tomado y en dónde…

¿Un corazón roto? ¿Acaso le pasó algo? Eso…

Por alguna razón, Sonohara trató de evadir la pregunta, y agachó la cabeza.

No te preocupes. No le voy a decir a nadie. La única persona a la que le podría decir, se encuentra actualmente muy ocupada teniendo una aventura con una mujer que tiene hijos.

El chico recién había dicho que lo mantendría en secreto, pero luego dio a entender que quizás accidentalmente hablaría de ello. Pero Anri no vio nada contradictorio en sus dichos, pensó por un momento y le advirtió:

Pero ¿me puedes prometer que no te vas a escandalizar demasiado cuando te lo diga? Después de todo lo que vi, no creo que haya algo que me sorprenda.

Para acallar sus miedos, Ryuugamine le dio una gran sonrisa. Al ser amigo de Masaomi desde la primaria, había desarrollado el talento de saber consolar a las personas.

Tal vez porque ese gesto la había ayudado a calmarse, ella le dijo la verdad de un tirón:

Harima-san—es una acechadora.

*Pfft!*

La sonrisa constante de Mikado se mantuvo firme, pero había escupido el helado.

Después de escuchar toda la historia, el joven trató de recuperar la compostura y de reorganizar sus pensamientos.

Ya veo… así que Harima-san estaba acechando… uh, lo siento, quise decir ‘cortejando’ al jefe del Comité de bienestar,Yagiri-kun, y él la rechazó, ¿así que ella se fue de viaje para aliviar su corazón roto?

Por lo que había dicho Anri, Harima Mika parecía haber estado haciendo cosas raras desde que empezó la secundaria. Después de enamorarse a primera vista, era sabido que ella forzaba la cerradura de la puerta de la casa del objeto de su afecto. O sabía a dónde iba a estar él cuando salía, y se invitaba, sin ser bienvenida. Incluso le decía a él ‘Gracias por haberme invitado a salir’. Obviamente había alterado la realidad en su mente.

Aunque actuara así, tenía buenas notas y provenía de una familia acaudalada. Después de inscribirse en la Academia Raira, había alquilado un departamento para ella sola. La renta era de más de cien mil yenes. Aunque la escuela había construido una residencia de estudiantes cerca, el complejo todavía estaba a una buena distancia de la institución, por lo que la mayoría de los estudiantes vivían en sus propios hogares. Algunos decidían vivir solos, a pesar de ser tan jóvenes. Mikado era un buen ejemplo de esto al igual que Sonohara que también había alquilado un apartamento barato a cierta distancia del colegio.

“Harima-san sí que causa problemas.”

Luego de conocer a Seiji, la perturbada chica había decidido que él era su alma gemela. Se aparecía en la casa del adolescente todos los días. Pero el día de la ceremonia de entrada, ella estuvo ausente. Según Seiji, él había rechazado con firmeza sus avances un día antes del acto, y la había amenazado incluso con llamar a la policía. Después de eso, Mika había dejado de ir a verlo.

Mientras Ryuugamine escuchaba el relato de Anri, empezó a sentir un sudor frío. Por lo que ella había dicho, Mika se había sentado entre él y Seiji durante el examen de ingreso. El chico pensó que, por algún extraño giro de los acontecimientos, esa ‘huésped no invitada’ lo podría haber tenido como blanco a él; y se alegró en secreto de no haberla salvado. Pero, incluso si lo hubiera querido hacer, no hubiera podido.

El joven discretamente organizó estos pensamientos, que nunca nadie hubiese adivinado que los tenía y al mismo tiempo, encarecidamente le sugirió aAnri:

Creo que deberías llamarla.

Nunca me pude comunicar…creo que apagó el celular después de enviar ese mensaje…y cuando le mandé un texto preguntándole por qué no prendía el teléfono, me dijo que si escuchaba una voz conocida, se iba a querer volver a casa…

Ya veo…uh…creo que sería mejor que analizáramos primero la situación …no, creo que para estar seguros, deberíamos mandarle un mensaje e insinuar que si no prende el móvil, llamaremos a la policía o algo así. ¿Qué te parece?

A Mikado se le empezaron a ocurrir un montón de ideas, pero todas sonaban bastante bobas y realmente no eran viables.Y las horas volaron, así nomás.

¿Entonces, eras la mejor amiga de Harima-san?

Creo que sí, pero no lo sé con seguridad…pero siempre estábamos juntas. No hay muchas cosas que pueda hacer bien, y no soy buena hablando con la gente, pero Harima-san me ayudaba y siempre estaba conmigo…

Después de escuchar el relato de su amiga, Ryuugamine sintió que la relación entre ellas no podía haber sido tan simple. Había visto este tipo de situaciones antes, navegando por la red. Y hablando de la oscuridad escondida tras esas situaciones, había un número sorprendente de descripciones detalladas en internet.

Y aunque las notas de Harima-san podrían haberla admitido en una academia mejor, ella eligió la misma escuela que yo…me siento muy mal…

“Probablemente sólo porque no quería perder los beneficios de tener a una lacaya conveniente como tú a su lado…”

El muchacho se tuvo que tragar esas palabras que le habían trepado por la garganta. En el fondo, se alegró de que Masaomi no estuviese con él en ese momento. Si estuvieran en un chat, se lo hubiese dicho sin tapujos.

“Pero, quizás sería mejor si se lo dijera.”

Mientras pensaba en eso, comenzó a luchar contra su conciencia. Viendo como el chico inconscientemente la evitaba con la mirada, la boca deAnri se curvó en una sonrisa:

Está bien, lo sé.

Al quedar lo que pensaba expuesto, Mikado frenéticamente preguntó.

¿S-Sabes qué?

Sé que solo me estaba usando para que ella quedara bien.Yo también la estaba usando. Pensaba que la vida sería más fácil si la tenía cerca. Que yo no podría vivir sin depender de ella. La única razón por la que me ofrecí para ser representante de la clase era porque Harima-san hubiese querido serlo, y me decidí a hacerlo antes de que ella regresara.

Las palabras de Sonohara despejaron todas las dudas del joven. Entonces, esa vez en clase, cuando se volvió hacia él, en verdad no estaba mirando a nadie sino a la mesa vacía de Mika. Masaomi había estado sentado allí.

Mientras Mikado comenzaba entender un poco,Anri continuó:

Pero, fue principalmente por mi propia satisfacción. Pensé que tal vez si me convirtiese en representante de clase, podría superarla…soy horrible ¿no?

El chico no esperó a que terminara y le dijo fríamente:

En mi opinión, pienso que lo que es horrible es decirle a la gente todo eso. …

Parece como si estuvieras tratando de que alguien te perdonara. Creo que es bueno que quieras sobrepasar a Harima-san, por lo tanto deberías mantener tu cabeza en alto y tener más confianza en ti misma.

Después de derramar todo lo que había estado considerando, el muchacho empezó a arrepentirse mucho. Sintió que había dicho demasiado. Quizás fue debido a que habían congeniado, y que se había puesto más nervioso a medida que hablaban. Aun así no fue capaz de contenerse y expresó todos los pensamientos que normalmente se guardaría para sí.

Tenía miedo de que ella se hubiera enojado, entonces agachó la cabeza con nerviosismo y la miró. Pero ella no se veía enojada ni molesta.

Tienes razón…gracias.

Al ver su sonrisa algo desconcertada, el chico pensó en ello seriamente. No podía dejar de preguntarse:

“Para reducir a alguien como ella al papel de un lacayo… ¿Qué tan hermosa es esta persona ‘Harima’?”

Mu…Muchas gracias por lo de hoy.

Al partir, Sonohara inclinó la cabeza un par de veces y le agradeció. Mikado había ofrecido pagar la cuenta de los dos, pero ella se había negado. Entonces cada uno pagó por su propia comida. Un manto de sombras oscuras provenientes de la calle ’60-Storey’, teñían el cielo de azul oscuro y envolvían todo por encima de ellas.

No hay problema, no te preocupes. Aunque hoy es la primera vez que hablamos, vamos a ser representantes de clase, así que espero que trabajemos bien juntos.

Cuando terminó de hablar, una sonrisa amable cruzó el rostro deAnri y ella asintió:

En realidad yo ya sabía de ti desde hacía mucho tiempo, Ryuugamine-kun.

¿Eh?

Cuando estaba entregando mi formulario de matriculación, había una lista en el escritorio de la recepcionista. Vi tu nombre y pensé que era muy genial…y luego alguien vino y lo marcó…

¿Qué era este extraño giro de los acontecimientos? Un presentimiento incómodo apareció dentro del pecho del joven, que respondió con un casual-

¿En serio?

Y…hoy, esa persona me salvó…

“Un momento…espera un minuto”

El muchacho vaciló. ¿No era esto muy parecido a lo que pasó entre Harima Mika yYagiri Seiji? La chica frente a él tenía una sonrisa indescifrable en el rostro.

“¿Eh? ¡No puede ser! ¡Qué mal!…no quiero a una acechadora…pero creo que estaría bien, porque ella es muy linda. No, un momento ¿esto no puede ser así? ¿Qué pasa si me apuñala con un cuchillo? ¡Podría incendiar mi casa, o tomar como rehenes a mis padres! … pero, como ella tiene una buena personalidad, está bien ¿no? Espera, espera, no, los acechadores no tienen una buena personalidad…pero tampoco están tan mal.”

Incluso después de pensarlo una y otra vez durante unos segundos, Mikado todavía no sabía qué decirle a su compañera.

Al ver la expresión tensa del chico, ella sonrió:

¡Estaba bromeando! Eh…

No te preocupes, no soy una acechadora. Solo causaría problemas si alguien como yo te estuviera siguiendo por ahí.

Cuando se dio cuenta de que Sonohara se había estado burlando de él, Ryuugamine se sintió muy avergonzado por haber demostrado lo asustado que estaba.

Lo siento.

¿Eh? ¡Ah, Está bien!Yo era la que te estaba jugando una broma ¡No necesitas disculparte!

Anri no pensaba que Mikado de repente se iba a disculpar con ella, y se vio bastante alarmada detrás de las gafas.

Como no sabía muy bien cómo proceder a continuación, el adolescente sólo pudo decir algo forzado:

Entonces te veré mañana ¿no?

Em… espero que trabajemos bien juntos.

“Sonohara-san puede ser bastante mentirosa algunas veces…pero es una buena persona.”

Mikado pensó camino a casa:

“No era tan misteriosa como la creía.Solo no es muy buena para tratar con las personas.

Masaomi y yo podríamos volvernos así si no tengo cuidado. La debo mucho ya que pude venir a este mundo nuevo con su ayuda.”

Sacudió la cabeza vigorosamente, y se dijo que no debería pensar de esa manera.

Entonces, pensó en Harima-san que había sido rechazada por la persona que le gustaba y luego había desaparecido.

“Parece que la dejaron de una forma cruel. Pero si se dio por vencida tan fácilmente, quizás una acechadora tan loca no era…”

Pero, basándose en los dichos de Anri, había forzado la cerradura de la casa de un chico que simplemente le gustaba, y lo había hecho en los primeros años de la secundaria. ¿Alguien así realmente dejaría a su ‘alma gemela’ solo porque la amenazaron con llamar a la policía del vecindario?

Cuando cayó en la cuenta de que se estaba preocupando seriamente de una acechadora a la que nunca había conocido en persona, alzó la cabeza y respiro profundamente.

“Uhhhhh. Aunque esperaba con ansias algo fuera de lo habitual, no me quiero involucrar en algo así.”

Ryuugamine, que ahora había caído en un pozo depresivo, decidió encontrar la manera de levantarse el ánimo, así que fue a la tienda de ‘Cien yenes’ antes de volver a casa.

Y entonces oyó un sonido que poco tenía que ver con la lógica y con la realidad.

Fue el grave rugido del motor que sonaba tan parecido al maullido de un animal, y que hoy sonaba especialmente entusiasmado.

¡Es la motocicleta negra!

No pensó que sería capaz de oír al motor, incluso al lado de esta pequeña estación. Mikado no pudo contener su curiosidad y sin pensarlo, corrió en la dirección del ruido.

Basándose en el volumen, sólo necesitaba doblar en la próxima intersección y sería capaz de verla. Sin poder reprimir sus emociones, giró violentamente en un callejón-

Y luego, vivió una escena que parecía salida de un viejo manga.

***

Whoa Whoa, me estás diciendo que la hermosa joven que chocaste en la esquina estaba siendo perseguida por el tipo malo que anda en moto. Que la salvaste, y que ella ha perdido la memoria ¿y ahora esperas que me crea este sueño tuyo que no es para nada de ensueño?

¡Pero es verdad!

Pero hay algo raro… ¿Por qué la niña te chocó a ti y no a mí?

En la habitación que era de apenas 3m², Masaomi y Mikado estaban discutiendo seriamente.

El apartamento pertenecía a éste último. Los únicos aparatos eléctricos en la sala eran una computadora personal con televisión incorporada y sintonizador de radio y una arrocera eléctrica.

El cuarto que había alquilado dentro del edificio era relativamente barato. El más económico de todos era el apartamento de al lado, que sólo medía 1½ m². Como el departamento más accesible ya estaba ocupado, el chico no tuvo opción más que alquilar éste, levemente más caro. Su vecino era fotógrafo, como siempre estaba corriendo para asistir a entrevistas desde la mañana hasta la noche, la mayor parte del tiempo no estaba en casa.

El joven había pensado en un principio que como el profesional no estaba en casa en todo el día, le debería haber dejado la habitación a él. Pero se había dado cuenta de que una habitación de un poco más de dos metros cuadrados ya era bastante pequeña. Gracias a Dios no había conseguido la de 1½ m².

Y se alivió especialmente por eso, sobre todo después de encontrarse en una situación como esta.

Kida le dijo con calma y sin problemas a su amigo, quien era un manojo de nervios debido a la ‘situación’ actual:

Sería genial si mañana esto te hiciera llegar tarde a la escuela.Y sería ‘maravilloso’ si ella fuese una estudiante de intercambio. ¡Y si fuera la princesa de un país, además de ser tu amor de la infancia entonces sería ‘perfecto’!

Mikado no tenía idea de lo que estaba diciendo, entonces se sostuvo la barbilla y se perdió en sus pensamientos.

“Es verdad que me gustan las cosas extraordinarias, pero cuando se llega a una situación como esta, me parece irreal.”

O más que nada, deseaba que todo esto no fuera más que un sueño.

Masaomi continuó diciendo insensateces:

¿Te diste cuenta que las cosas que acabo de decir recién eran todas muy cliché? Creo que es peor si me lo tienes que señalar.

Mientras Ryuugamine pensaba en las palabras que recordaba haber dicho algún tiempo atrás, miró a la chica acostada entre ellos. Aunque no estaba seguro de su edad, el chico supuso que ella probablemente sería un poco más grande que él.

La muchacha estaba durmiendo plácidamente. Llevaba puesto un camisón común, y parecía como si se hubiese escapado de un hospital o algo así. En el momento en que el adolescente había chocado contra ella, la había escuchado pronunciar las palabras ‘¡Ayuda!’.

Mikado entre la desorientación y la confusión, vio a una motocicleta negra ir directamente hacia ellos.

En cuanto a lo que pasó después, el muchacho no estaba muy seguro. Tenía el recuerdo borroso de haber agarrado la mano de la chica y de comenzar una carrera desesperada hacia la estación. Habían corrido hasta el paso subterráneo, y como la moto parecía haber dejado de perseguirlos, salieron por una salida diferente y corrieron hasta el apartamento de él. Pero—

No solo ha perdido la memoria, sino que también se rehúsa a dejarme llamar a la policía…realmente no sé qué hacer.

Bueno…vamos a hacer lo que podamos — dijo Kida que miró a la chica durmiendo y dijo—Hey, de verdad es muy hermosa. No parece japonesa, aunque… ¿será de Japón? Bueno, habló en japonés…

Basándose en lo que la niña había dicho, los dos decidieron esperar hasta mañana para ver lo que podían hacer. Lo correcto hubiera sido llamar a la policía, a pesar de que estaba en contra de la voluntad del huésped, pero Ryuugamine no quería hacer eso.

Era un poco anticuado, pero estos hechos encajarían muy bien en un manga o en una película. Mikado creía que esto era ese ‘algo’ extraordinario que había deseado.

Lo único que le preocupaba era la probabilidad de que el motociclista negro lo reconociera. Había estado tan preocupado por correr hacia su casa, que ni siquiera había pensado por qué el motorista estaba tan empeñado en perseguir a la chica. ¿Qué pasaría si tuviera que vivir el resto de su vida siendo el enemigo de una leyenda urbana muy real -La Motocicleta Negra-?

El muchacho estaba cansado de la normalidad mundana, deseoso de cambio. Esta era probablemente la razón por la que dio refugio a una chica cuyos orígenes todavía eran un misterio.

Pero, si quería abandonar la ‘normalidad’, entonces tendría que ponerse en un peligro considerable.

“El peligro al cual me enfrento ¿es la Motocicleta Negra?” Siguió temblando por pensamientos como ese luego de haberlo acompañado a Kida a la puerta.

Además había algo que todavía no le había dicho a su amigo.

La chica tenía un vendaje alrededor del cuello. Al principio no le pareció que fuera nada, pero después de mirar debajo de la gasa, pensó que la marca resultó ser muy visible. Entonces lo re-envolvió con la venda antes de que Masaomi llegara.

Debajo de la venda, había una cicatriz de una vieja herida suturada que rodeaba totalmente su cuello.

Era como si, luego de que la garganta fuera aserrada, otra cabeza hubiera sido forzosamente pegada en su lugar.