Ichiban Ushiro No Daimaou (NL)

Volumen 13

Capitulo 5: Encarnación

Parte 2

Sin embargo, no era tan infeliz como aparentaba. Probablemente se casaría en algún momento y luego viviría una vida relativamente feliz. O lo haría si este mundo fuera eterno.

Al final, ella también había sido salvada por las historias. Las historias ―ligeras‖ le dieron su diversión diaria y las historias ―pesadas‖ solo la afectaban lo suficiente como para seguirlas inconscientemente.

Se me ocurrió entonces que había sido ―domada‖ por las historias.

Pero cuando lo ponía en palabras, también era abrumado por una sensación de falta de confianza. ¿Y si este mundo era en verdad la realidad y mis pensamientos no eran más que ilusiones? La idea de que las historias eran un virus y que darse cuenta de eso protegía el lado de este mundo no serían más que una locura arrogante.

Solo podía confiar en que esta investigación aclarara si estaba equivocado o no. Decidí contactar a la producción editorial que Yoshie me había presentado. Solo tenía que ver si la amiga de Yoshie estaba allí, así que una sola llamada sería suficiente una vez que tuve el número.

La respuesta llegó con bastante facilidad.

Esa empleada trabajaba aquí, pero renunció el año pasado.

El presidente me respondió directamente y le pregunté su nombre.

Um…○○…no, Soga.

El primer nombre que dijo parecía ser un seudónimo. Para mi sorpresa, era el mismo que el nombre que había oído de Junko. Me sorprendió aún más que el nombre real fuera Soga.

Suprimí desesperadamente la voz que amenazó con saltar de mi garganta, le pedí cortésmente que me contactara si tenía un trabajo para mí, y colgué.

Sonaba más realista que una sola persona había interferido con nuestras vidas aquí y que fue la Ley de la Identidad. Le había preguntado al presidente su dirección, así que solo tenía que ir allí.

La dirección era un apartamento entre la Estación de Yokohama y la antigua Estación de Takashimachou.

El área contenía terreno con azulejos y sin usar que había quedado sin desarrollar y no era suelo residencial o de negocios. Habían sido plantados árboles para ocultar la tierra vacía bajo los pasos elevados. Había viajado solo unos minutos de la animada Yokohama, pero este espacio extraño parecía completamente vacío.

El edificio de apartamentos era relativamente nuevo y lujoso, pero olía extrañamente como un área pobre. Sentí la penumbra única de una zona insegura de la ciudad y la falta de gente parecía siniestra.

Revisé la placa en la dirección correcta y contenía un nombre distinto a Soga.

Sabía que podría no llevar a nada, pero decidí que valía la pena revisar. Incluso si alguien más vivía allí, podrían saber la dirección de reenvío para el correo si la mudanza era reciente.

Toqué el timbre y dije por el intercomunicador que estaba buscando a una ―Soga-san‖. La puerta se abrió y una antigua conocida salió.

– ¡Finalmente estás aquí!

Era Fujiko. Por supuesto, ella tenía un nombre diferente en este mundo.

Ella era una belleza con largo pelo negro, pero ese era el único aspecto ficticio de ella. Ya estaba casada y no era mi tipo, pero seguía nervioso frente a ella. Sobresalía lo suficiente para reunir miradas curiosas cuando los dos estábamos juntos, pero por lo demás era completamente normal y tenía una personalidad sociable. Escribía horóscopos que no se vendían y estaba casada con un empleado de gobierno. De vez en cuando nos contactábamos debido a nuestro trabajo.

¿Tú vives aquí? – respondí con una confusión frenética.

Se trata de Soga-san, ¿no? Adelante.

Se puso sus sandalias y abrió totalmente la puerta.

Dentro, vi una mesa de madera, un armario, papel tapiz blanco, y nada que sobresaliera. Sin embargo, no parecía estar viviendo con su marido. Por la cantidad de vajilla y zapatillas, parecía estar viviendo sola.

– Hay muchas cosas que quiero preguntarte al respecto.

– dije.

Ella mostró una amplia sonrisa y me señaló.

Tus recuerdos volvieron, ¿no? ¿¡Increíble, verdad!?

¿Te refieres a los recuerdos de la Academia de Magia Constante? – pregunté vacilante.

¡Sí! ¡Realmente me sorprendió! Es como una fantasía.

Estaba tan emocionada que olvidó ofrecerme un asiento. Yo no podía creer que había dado con el premio mayor así. Fue suficiente para que me sintiera mareado.

Creo que este es un problema más serio que ese. – dije reservadamente.

Su entusiasmo disminuyó un poco, pero parecía querer hablar de muchas cosas diferentes porque nadie más en este mundo lo recordaba. Yo quería dar claridad a mis propios recuerdos y confirmar que no estaba equivocado, así que discutimos esos recuerdos por un buen tiempo.

Nuestros recuerdos realmente coincidieron. Muy extrañamente, ambos mantuvimos nuestras personalidades de este mundo y los eventos de esos recuerdos se sentían como un sueño. Nuestras personalidades aquí no eran tan diferentes de aquellas en los recuerdos. Yo no había perdido mi parte que era un autor y Fujiko todavía era una adivina sociable aunque ya no era dominante ni intentaba dominar el mundo.

Es extraño pensar que era yo. – dijo Fujiko.

Pero no hay otra manera para que nuestros recuerdos coincidan así.

Nunca leo tus novelas, pero tal vez ahora lo haga.

¿Nunca las lees?

Mis hombros cayeron.

Si lo hubiera hecho, sin duda habría dudado de estos recuerdos.

Supongo que tienes razón. Al principio, estaba haciéndolo parcialmente de forma inconsciente.

Ahora, sobre Soga-san. – dijo ella.

Ella vivía aquí, ¿verdad?

Sí.

Ella bajó la voz y asintió.

¿Qué pasa con esa mirada?

Oh, ella dijo que era un secreto.

¿Un secreto?

Bueno… Mis recuerdos volvieron un poco antes que los tuyos. Estaba haciendo un horóscopo de vidas pasadas y llegó a mí.

¿Cómo conduce eso a Soga-san?

Empecé dudando de mis recuerdos antes de 1990.

Sí, esos fueron implantados en nosotros, ¿verdad?

Busqué mi primer recuerdo al llegar aquí y estaba relacionado con Soga-san.

Ya veo. Así que el método que elegí no estaba mal. Tanto Junko como Yoshie fueron conducidas hacia sus empleos por Soga-san.

Pero ella dijo que solo tú eres especial.

¿Yo?

Sí. Ella dijo que solo te había enviado una carta.

¿Una carta?

Sí. Dijo que no podía reunirse directamente contigo sin importar qué.

¿Por qué no?

Ella me lo explicó, pero no lo entendí realmente. Creo que tenía que ver con Akuto viendo el mundo a través de ti y por eso no podías reunirte con la Ley de la Identidad.

Fujiko se oía como arrepentida mientras se esforzaba por explicar y me inquieté.

Pero aún puedo contactarla, ¿verdad?

Parece que puedes hablar con ella a través de internet.

Fujiko sacó un bloc de papel colocado frente al armario. Tenía algunos caracteres ingleses que parecían ser una dirección de teléfono por internet.

– Esto parece muy frío.

Parecía demasiado ligero para lo que había estado buscando. Por otra parte, la ―ligereza‖ era exactamente lo que buscaba, así que puede haber sido apropiado para el final de la búsqueda.

No tienes que apurarte, ¿verdad? – preguntó Fujiko. Parecía querer hablar más.

– le respondí.

Ella disfrutó hablando de esos recuerdos, incluso si esos días habían sido muy ―pesados‖ para mí.

No volví a casa hasta tarde por la noche, pero encendí mi PC e inicié el software de teléfono por internet. Si podía hablar con ella, quería hacerlo lo más pronto posible.

Hice la llamada y fue respondida de inmediato.

He estado esperando. – dijo una voz tranquila. No había ningún video.

¿Soga-san?

Ese nombre no está mal.

Según mis recuerdos, esta manera de hablar no pertenecía a Soga Keena. Pertenecía a la Ley de la Identidad.

La carta que recibí no fue de una ―Soga‖.

Recordé la carta que Fujiko había mencionado.

Esa carta me había llevado a convertirme en un autor y había venido de un amigo de la infancia. Por supuesto, ahora sabía que eso se basaba en recuerdos falsos. En ese tiempo, había sido extrañamente conmovido. Incluso si era un recuerdo falso, no quería creer que lo era.

Me disculpo por engañarte, pero esa carta vino de mí.

Si dices eso, en realidad se siente como que me salvaste. O tal vez no. ¿Hay registros de ti viviendo en este mundo?

Sí. Como has aprendido, llegué a conocer a los demás, me casé con alguien que no conoces, y tengo una familia.

Se sentía como si se burlara de mí.

Yo por supuesto no tenía ningún recuerdo de reunirme con mi amigo de la infancia desde entonces, pero, por supuesto, había apreciado a la chica que valoró mi talento en la secundaria y me envió en secreto una carta.

Este es un terrible final para la búsqueda. ¿Ni siquiera puedes dejarme ver tu cara?

Ante ti, yo también no soy más que una historia. – dijo la Ley de la Identidad.

Eso era, sin duda cierto. Solo estaba hablando por internet. Si fuera a dudar eso, podría dudar cualquier cosa en mi situación. Fujiko y Junko eran conocidas, por lo que ella probablemente habría sabido que le había dicho algunas cosas extrañas a Junko. Y si hubiera leído mis novelas, podría fingir tener los mismos recuerdos que yo. Fingir ser la Ley de la Identidad no sería difícil.

Así que aunque seas falsa, ¿tu valor sigue siendo el mismo?

Aunque todo sea una mentira, convencerlo a él es lo que importa.

¿Te refieres al rey demonio? Pero pensé que mi objetivo era convencerte a ti, la Ley de la Identidad. ¿No salvarás a todos?

Bueno, supongo que podrías decir que son ambos. Tú has registrado la historia del rey demonio. Eso significa que has reconocido correctamente este mundo y que convencerte a ti es lo mismo que convencerlo a él. Por supuesto, también debes convencerme a mí.

La voz de la Ley de la Identidad era plana como si fuera alterada mecánicamente.

¿Quieres decir que debemos convencernos entre nosotros de que la historia ha terminado?

Sí. Así que muéstrame los registros que has hecho.

Al insistir, transmití el archivo final; es decir, el volumen final de mis novelas; por el teléfono por internet.

Ella confirmó que lo había recibido y luego esperé.

No pude decir nada hasta que ella lo hizo.

Como registro, el significado no podía encontrarse allí.

Simplemente tendría una influencia forzada en la historia.

Por el momento, la ―pesadez‖ era más fuerte.

¿Crees que el virus ha infectado la mente o el cuerpo? Eso fue lo que la Ley de la Identidad dijo primero.

Me sentí obligado a responder incluso si no entendía.

¿No es ambos? Creo que el cuerpo es infectado primero, pero es la mente la que es controlada.

Después de un breve silencio, ella hizo otra pregunta.

La verdad que él necesita aprender es que la historia ha terminado y que aprender esa verdad salvará a la gente. ¿Correcto?

Fue una pregunta extraña. No estaba seguro de lo que intentaba confirmar.

No puedo decirlo con certeza, pero eso es lo que pienso. Él trató de salvar al mundo. No, ya que existen el más allá y la Ley de la Identidad, creo que debe haber creído que podía salvarse de alguna manera.

Como eres consciente de eso, ahora te daré esas palabras finales.

Está bien.

Esperé, pero solo recibí silencio como si ella vacilara.

– ¿Qué pasa?

Nada, te daré esas palabras ahora. – dijo. – Tú estás encarnado y encarcelado aquí. Ese es el papel del héroe. El mundo se salvará. Los que viven allí y los que pueden encomendarse a la ligereza de la historia eventualmente vendrán a mí.

No dijo nada más.

– ¡Espera! ¡Espera!

Grité pero no recibí respuesta.

De hecho, la cuenta a la que estaba conectado desapareció.

Pude haber sido engañado. Pude haberme vuelto realmente loco.

Solo palabras sin esperanza resonaron en mi mente.

Parecía que algo había terminado.

No, algo había terminado.

De eso podía darme cuenta.

No había duda de ello.

Pero no sabía qué era lo que había terminado.

Tenía la sensación de que sin duda enfrentaría el mañana. El sol se levantaría por la mañana y yo tenía un manuscrito acercándose a su fecha límite.

Pero su historia había terminado.

La salvación de la gente que Sai Akuto quería había terminado.

Me quedé despierto hasta el amanecer y luego salí.

El habitual paisaje de la ciudad me rodeó.

Entré en una cafetería y pedí un perro caliente y café. El empleado definitivamente existía.

Cuando se acercó el mediodía, contacté a Fujiko.

Ella no recordaba lo que había sucedido el día anterior, pero habló con gran alegría. Sonaba tan feliz como cuando habíamos discutido del otro mundo.

Junko me invitó a unirme a un juego de rol de mesa. Ella afirmó haber tenido de repente una urgencia de jugar porque no lo había hecho en un tiempo.

Decidí no contactar a Yoshie.

Ellas tres ya no eran Fujiko, Junko, y Yoshie. Sería mejor llamarlas por sus nombres en este mundo y tratarlas así.

Empecé a caminar a mi lugar de trabajo y me pareció oír un ruido metálico de mis pies.

Había grilletes allí. O más bien, me invadió la sensación de tener cadenas pesadas alrededor de mis pies.