Accel World (NL)

Volumen 18

Capitulo 2: No Se Puede

El tiempo pasa muy lentamente.

Apenas Mihaya Kakei pensó en eso, en la pequeña sala resonó una gran voz.

—… ¡Ah, ah, yo ya no puedo esperaar…!

La voz pertenecía a una chica con el pelo rojo llameante atado en dos colas. Ella se dejó caer en el sofá, de mal humor tirando de sus piernas, y de repente saltó de manera impulsiva.

— Escucha, Pard, ¡podemos colarnos en Shibuya! ¡Si nos escondemos en la esquina del territorio, nadie se dará cuenta probablemente!

— No se puede. — dijo Mihaya brevemente, mirando el viejo reloj analógico en la pared.

14 horas y 45 minutos. Exactamente a las tres de la tarde comenzaría la reunión entre Nega Nebulous y Great Wall. De principio a fin, tomará sólo un segundo y ocho décimas, y sin duda, se informará inmediatamente de los resultados, pero los quince minutos restantes hasta ese punto parecían una eternidad. Mihaya no podía presumir de un exceso de paciencia, o mejor dicho, algunos amigos pensaban que era un extraterrestre de otro planeta debido a esto, pero para llegar a un acuerdo con la propuesta, ella sabía que era necesario mostrar firmeza.

— Si nos colamos en el sitio de la conferencia, y se dan cuenta los de verde, todo se caerá a pedazos. Además, no tenemos tiempo para llegar allí, incluso en mi motocicleta.

— Oh, tú… ¡Sí, lo sé! Lo acabas de decir… — inclinándose sobre el respaldo del sofá, la chica pelirroja suspiró.

Un ejemplo de cómo este formidable guerrero del mundo acelerado por una vez se comportaba adecuadamente para su edad de once años, Mihaya despertó involuntariamente una ligera sonrisa. Para ocultarlo, ella tomó de la mesa una taza de té de manzana sin azúcar y bebió.

Estaban en una habitación privada de Mihaya, en un anexo en el patio trasero de la cafetería «Strawberry Palace» en el distrito de Nerima. No tenía ventanas, y las paredes estaban cubiertas con un material que bloqueaba las ondas electromagnéticas, por lo que para conectarse a la red global necesitarían conectar su Neuro Linker sobre la mesa de fresado.

Mihaya, chef de repostería, no entendía por qué la habitación no funcionaba sin cables. El hecho es que, de hecho, esta pequeña habitación era el cuartel general de la Legión Roja, «Prominence».

—… Por cierto, Pard, ¿qué elegiste como bonificación por subir al octavo nivel? — Preguntó una niña llamada Kozuki Yuniko, comandante de Prominence, la segunda Reina Roja, Scarlet Rain, apodada la «Fortaleza Inmóvil».

— Todavía no elegí nada. — ella negó con la cabeza.

— Vaya, ¿incluso Pard sufre con el bono de octavo nivel? Sin embargo, para el séptimo elegiste sin dudar poder trepar por las paredes. — Niko dijo con una sonrisa.

Dichas palabras causaron que Pard hiciera una expresión como de puchero infantil, a pesar de ser cinco años mayor.

— Tú, también has pensado por mucho tiempo sobre la bonificación de octavo nivel, Niko.

— Bueno, ni siquiera pensé mucho en ello, ¡debía optar entre un arma de gran calibre y un láser! Primero debemos entender el hecho de lo que cada uno es capaz…

— Eso es lo que acabo de entender. — replicó Mihaya, que hace unos días elevó su nivel del sexto al octavo inmediatamente, y tomó otro sorbo.

No quería mostrar debilidad ante Niko, pero la presión psicológica asociada con el octavo nivel, era mucho más fuerte de lo que esperaba. Ella se unió a las filas de los Burst Linkers de más alto nivel, con la excepción de los siete reyes; la actitud hacia ella era completamente diferente, y la pérdida de puntos en la derrota en la batalla con los avatares niveles medios era mucho más sensible. Como el jefe de «Triplex», el cuerpo de oficiales de Prominence, trataba de luchar duro, pero en algún lugar de su corazón todavía recordaba con cariño el sexto nivel.

El rival eterno y la estrella guía de Mihaya, la directora de Nega Nebulous, Sky Raker, durante mucho tiempo luchó bajo la misma presión. Su confianza y sangre fría no fallaría incluso en la cara de los luchadores más fuertes de Great Wall.

Aunque Mihaya y Niko dijeron que no pueden participar en la reunión, apenas consiguió reprimir el deseo ardiente de asistir. La Sociedad de Investigación sobre la Aceleración capturó su amada jefa, la encadenaron a una cruz y secuestraron cuatro partes del armamento mejorado «Invincible». Aunque el reloj de la bruja de Nega Nebulous, Lime Bell, utilizó su increíble, quizás terrible, capacidad de deshacer los cambios y el estado fue capaz de recuperar tres de las partes, los motores de los cohetes seguían estando en posesión del enemigo.

Niko hizo como que no se preocupaba en absoluto, pero en realidad ella podía sentir la incertidumbre. La deuda de Mihaya, su oficial, era desafiar a la Sociedad y devolver lo que faltaba.

Se las arreglaron para dar un importante paso hacia adelante, descubrir que la misteriosa Sociedad de Investigación sobre la Aceleración en realidad se encuentra dentro de la Legión Blanca, pero al mismo tiempo, el descubrimiento mostraba lo difícil que será luchar contra ellos.

La Legión Negra se ofreció para atacar al enemigo con honestidad desde Minato 3, el territorio de la Legión Blanca. La reunión de hoy era el primer paso hacia la implementación de este plan, y Mihaya entendía que otras variaciones no había. Sin embargo, incluso si las negociaciones con la Legión Verde tenían éxito, y logran limitar con el área en cuestión, Mihaya todavía no era capaz de luchar con la Legión Blanca. El derecho a luchar por el territorio sólo lo tendrían los miembros de Nega Nebulous, por lo que Mihaya, siendo de Prominence, no podía participar en el ataque.

Cuando la Legión Negro irrumpiera en la Sociedad, y comenzara la operación conjunta de las seis grandes legiones, Mihaya se precipitaría en la vanguardia de la batalla. Pero el hecho que sólo tenía que esperar hasta que esto suceda, le causaba un prurito intolerable. Los principios de Bloody Catty, Blood Leopard, dicen que tan pronto como se produce un problema, es necesario para luchar inmediatamente. Estaba hipnotizada mirando moverse lentamente las manecillas del reloj en la pared y se preguntó al oír la voz de Niko.

— Escucha… Pard.

— ¿Qué?

— Estoy hablando de lo mismo… sería necesario en un futuro próximo hablar con Cassie y Porcu. ¿Qué opinas?…

— Hmm…

Incluso Mihaya, que trataba de tomar decisiones de inmediato, yo no podía responder a esta pregunta.

Cassie era «Cassis Mouse» y Porcu era «Thistle Porcupine», el segundo y tercero, respectivamente, Triplex. Ellos mostraron su mejor cara durante el caos que estalló después de la muerte del primer Rey Rojo, y trabajaron diligentemente para el beneficio de revivir Prominence, manteniendo la forma más abierta. Para la legión, fueron atados aún más que Mihaya.

El tema de conversación que sacó Niko probablemente les sorprendería. Si no lo explican todo con calma y sin prisas, la legión puede desintegrarse.

— Tal vez, antes de la primera reunión conjunta debemos hablar con Cassis por separado.

— sugirió tentativamente Mihaya y Niko se limitó a asentir con incertidumbre.

— Tal vez… Siento que Porcu estallará cuando se entere de todo esto, así que Cassie tal vez ayude para mantener la calma. Aunque Cassie en sí es muy terco…

— Porcu es algo goloso, por lo que seguramente será más amable si lo alimentas con un pastel.

— ¡Oh, es una buena idea! Bueno, entonces, te encargaré hacer una.

— Lo haré.

Ambas sonrieron brevemente, y luego miraron el reloj. Para las quince horas sólo faltaban dos minutos.

—… Ya es tiempo. — Niko murmuró.

Una vez más tomaron una mirada seria, ella metió el cable en el router de la mesa, y luego lo conectó a su Neuro Linker. Mihaya hizo lo mismo, y apareció un ícono de conexión a la red global delante de sus ojos.

Seguramente los siete legionarios de Nega Nebulous también en cuestión de segundos estarían en algún lugar de Shibuya. Niko y Mihaya sólo podían rezar desde Nerima para las negociaciones, el primer paso en el camino hacia la batalla final con la Sociedad de Investigación sobre la Aceleración.

—… Cuando regresen, vamos a ir a ellos con golosinas. — dijo Mihaya.

Inicialmente, Niko se sorprendió un poco, pero luego sus grandes y brillantes ojos a la luz de varios tonos verdes se iluminaron.

— Es verdad… Pero tal vez diez golosinas se queden en la motocicleta.

— NP. — dijo Mihaya y empezó la cuenta atrás.

Cuando la reunión haya terminado, Kuroyukihime debería informarles sobre los resultados, un icono de llamada de voz sin duda aparecerá después de cinco segundos pasadas las quince horas.

Las flechas del reloj analógico continuaron girando lentamente.

14 horas 59 minutos 57 segundos. 58 segundos. 59 segundos.

15 horas.

15 horas, 1 segundo. 2 segundos. 3 segundos. 4 segundos. 5 segundos.

6 segundos. 7 segundos. 8 segundos…