Taimadou Gakuen 35 Shiken Shoutai (NL)

Volumen 12

Capitulo 5: Y Los Sentimientos Fueron Destrozados

Parte 3

“Al antiguo yo…… le gustabas. Le gustabas como una chica. No hay duda alguna de que tú… fuiste mi primer amor,

Kiseki.” Primer amor.

Incluso para Kiseki, Takeru era su primer amor. Cuando Takeru era un niño no entendía esas cosas.

Pero Takeru creció consciente del hecho de que Kiseki era su primer amor.

Esa sensación le hacía feliz a Kiseki desde el fondo de su corazón.

Takeru extendió su mano hacia Kiseki y le tocó sus húmedas mejillas.

Las manos de Takeru eran cálidas, eran suaves.

“Antes… cuando supiste era tu hermano, ¿te pusiste feliz de saber que eras mi hermana menor?”

“……… uunn”

“Yo estaba feliz. Pero también estaba triste. Estaba feliz de que tú y yo estuviéramos enlazador por sangre, pero a la vez estaba muy triste por lo mismo.”

Kiseki notó que los sentimientos de Takeru eran de dolor.

Cuando se le dijo a Takeru que ellos eran hermanos, Kiseki solo sintió dolor. La tristeza que compartieron, cada vez las eran más las lágrimas que se derramaban de los ojos de Kiseki.

“Perdón por haber sido lento en darme cuenta.” “……………. ”

“… tal vez es demasiado tarde… pero soy tu ‘Onii-chan’, sabes…”

“…………”

“Ahora, como tu hermano—te quiero.”

Las lágrimas de Takeru se desbordaban sin parar.

Estos eran, los sentimientos que Takeru le entregó a Kiseki. Te quiero como hermana.

Pero el amor no conoce de esas cosas, los sentimientos que le entregó a Kiseki, no podían significar otra cosa.

Pero aunque hable de amor, el tiempo que pasaron juntos fue demasiado corto. No se necesita tiempo para amar, eso es una mentira. El amor de padres a hijos, de hermano y hermana, todo eso se basa por el tiempo que pasan juntos.

Pero—

—Quería proteger esos sentimientos. Takeru no conocía otra manera de expresar amor.

“Perdón Kiseki… lo que Nii-chan dijo sobre la disputa era una mentira. Aunque lo hagamos… no podría matarte…”

“… uu…”

“No sabría odiarte. Aunque destrozaras el mundo, mataras a una compañera, la única persona de mi familia no podría volverse alguien a quien odiar.”

Takeru acariciaba la mejilla de Kiseki mientras su rostro se arrugaba con las lágrimas.

“Así que te lo pido Kiseki…… detente hermanita.” Takeru le dio sus sentimientos, exhaló hacia Kiseki.

“No mueras por mí…… no asesines por mí…… no vayas a ninguna parte por mí……”

Los sentimientos no podían esperar, todo golpeó a Kiseki.

“—Siempre quédate a mi lado…… si tú no estás yo no me siento vivo.”

Eso era todo.

Hasta qué punto era tan egoísta el deseo de Takeru.

Takeru presionó su voluntad contra Kiseki hasta el último de los momentos.

Aún tras ser rechazado muchas veces, no ha dejado de desear lo mismo.

El cambio depende de Kiseki, fue lo que Mari dijo. Por lo tanto Takeru continuó con la esperanza. Solo continuó presionando.

Este es el estilo de pelea de Takeru.

Aunque sea golpeado, aunque sea odiado, aunque sea rechazado, seguirá presionando. Simplemente seguirá presionando.

Kiseki es el pasado de su propio deseo, Takeru quería a Kiseki como su ‘hermana menor’.

Esperaba que fuera su hermana. Esperaba que viviera.

No podía dejar esto pasar—debido a que ella es su preciada familia.

No había razón para que no lo hiciera. Y su deseo—

“Oni…. ii…”

Su deseo finalmente… “Onii-chan.”

Finalmente—Kiseki lo reconoció. “Onii-chaaan…nhh…”

En lugar de ‘Takeru-kun’, fue aceptado como hermano. Para recuperar la relación que alguna vez creyó perdida.

El cuerpo de Kiseki se abalanzó a su pecho, estirando sus brazos y abrazando a Takeru.

Mientras que su deseo por fin fue concebido, Kiseki rompió en lágrimas.

Pero en ese momento, Takeru y las demás escucharon la voz de la perdición.

No estaba ahí, su voz era como si le susurrara al oído.

—Vamos, que comience la cacería, Innocentius.

Lejos en el cielo, encima de las hojas demoniacas del gran árbol, estaba una sombra blanca, estaba de pie con un arma blanca.

Lo que se emitió del cañón del mosquete blanco fue una bala imperceptible para el ojo.

La incautación del alma, una bala asesina.

Al mismo tiempo Takeru atrapó a Kiseki en sus brazos y trató de protegerla de la bala.

La bala invisible para los ojos se deslizó a través del cuerpo de Takeru.

“… Ha… ¡aah!”

Perforó el pecho de Kiseki. “¡Kiseki!”

Dejando caer la mitad superior de su cuerpo, Kiseki se agachó abrazándose el pecho.

Takeru abrazó el cuerpo de Kiseki desde atrás. “…… ¡nh!”

Por encima de su cabeza, apareció sorpresivamente un hombre blanco, Takeru cayó lentamente mientras abrazaba el cuerpo de Kiseki.

Su cuerpo se sentía frío.

Casi parecía ser agua.

“¡Kiseki! ¡Abre los ojos…! ¡Kiseki!”

No había reacción alguna al mover su cuerpo. Parecía una cáscara.

“¡Es mentira…!”

Sosteniendo a Kiseki, Takeru estaba aturdido.

El hecho de que Kiseki no estaba respirando, hizo que el pensamiento de Takeru se detuviera.

***

En lugar del desconcertado Takeru, Ouka comenzó a moverse.

“—¡Saionji y Suginami protéjanlos! ¡Nikaido!” “… ¡entendido!”

Ouka extendió sus alas y Mari hizo aparecer las ruedas mágicas en sus pies para volar.

Esa sombra blanca—era Ootori Sougetsu.

La mente maestra tenía un rostro refrescante.

Con su Relic Eater Inoccentius en el hombro, observaba el mundo.

Mientras que el viento meneaba su cabello blanco, se puso una mano en la barbilla.

“Hmm, aunque mi pequeño plan parecía una locura, parece que todo salió a tiempo. Pero, ya no volveré a ausentarme por tanto. Kusanagi-kun no matará a Kiseki-chan, ni siquiera se volvió el Cazador de Dioses.”

Golpeando el cañón contra su hombro, Sougetsu frunció el ceño y sonrió como el gato Cheshire.

“—Esto es inútil. Me tienen en problemas, chicos.” En ese momento Sougetsu, vio a Ouka y a Mari venir.

En el codo derecho de Ouka aparecieron unos pistones acumulando magia.

Mari acumuló magia en ambos brazos mientras que liberaba la magia de su cuerpo.

“¡«Recuento de Colmillos»!” “¡«Aurora Cannon»!”

Las dos atacaron con su magia.

Sougetsu ni siquiera trató de esquivar sus ataques, solo se quedó ahí de pie con frialdad.

La magia de ambas estaba a punto de golpearlo. La explosión y la onda de impacto mandaron a Sougetsu a volar de gran árbol demoniaco, los escombros se esparcieron por toda la zona.

Ouka y Mari se quedaron mirando la zona del ataque, esperando a que se aclarara.

La respuesta—no la sabían.

Ambas conocían la identidad de Ootori Sougetsu, sabían que no lo habían derrotado.

Como era de esperarse, Sougetsu estaba tranquilamente entre el humo flotando.

No tenía ni un solo rasguño.

“Ah-ha, impresionante. A pesar de saber mi identidad vienen por mí con toda su fuerza. ¿Qué harán si yo muero?”

Sougetsu puso una sonrisa irónica y se encogió de hombros.

Mientras Ouka y Mari ponían una posición de combate, encararon a Sougetsu.

Frente a sus ojos, no había sentido de la realidad. Siempre había sido así. Aunque había una presencia, aunque sabían que estaba ahí, se sentía como una mentira.

Esa presencia parecía manchada de mentiras.

Ootori Sougetsu ha dado esa impresión desde hace mucho tiempo.

“Quédense tranquilas. No mataré la magia de este mundo. Quiero decir físicamente. En otras palabras ustedes no serán asesinadas.”

““Uuh””

“Me gustaría felicitarles por su lucha… por cierto Ouka, ¿qué pasó con Vlad?”

Sougetsu le preguntó mientras la miraba.

Ouka no sabía la respuesta, simplemente inyectó la magia.

Movió sus puños hacia arriba y activó el Recuento de Colmillos. Luego se formó una increíble ráfaga bombardeando por todos lados.

No le daría tiempo de recuperarse, realizó un ataque con la intención de llenarlo de agujeros, pero Sougetsu no tenía ni un rasguño aún incluso después de recibir el ataque.

Mejor dicho—ni siquiera se vio afectado por el ataque.

“Oh, ya entiendo. Has utilizado el alma de Vlad como combustible.”

“—¡nhhh!”

Ouka distorsionó su rostro por la ira y aumentó la velocidad. Pero era inútil. Nada le haría daño.

De pronto Ouka le dirigió un puñetazo a Sougetsu.

Pero la detuvo, los movimientos de Ouka se detuvieron.

“No, no está mal. Mejor dicho estuvo bien. Esto fue  creado por mi poder, pero…… esto es debido a que no es un Patrimonio Mágico de este mundo. Recibió tal cosa como el

alma debido a la interacción con el contratista. Cuando utilicé mi poder para crear este mundo, comenzó a moverse libremente bajo influencia de otros… eso es una Relic Eater.”

Cuando Ouka retiró el puño, Sougetsu cerró los ojos.

“Todas ellas eran originalmente parte de mi poder. Los alquimistas solo concibieron una parte de ese poder dentro de las armas. Por lo tanto, todas las Relic Eater son esenciales para mí. Excepto por Mistilteinn.”

“¡Maldito……!”

“Así que me cansé albergar esa cosa llamada alma. Pero el alma de Vlad fue la más difícil. Ouka, me has salvado. Papá está muy feliz.”

“—¡Cállate! ¡No hables así de mi socio!”

Ouka le dio una patada en la cabeza a Sougetsu con la pierna derecha, él solo se defendió con su brazo.

Con los ojos entrecerrados, Sougetsu se burló de Ouka.

“Socio… parece que profundizaron sus lazos. Realmente pareces estar conectada por sangre con Mineshiro.”

“¡Tú los mataste! ¡A mi padre y a Vlad!” “Heyhey, ¿acaso yo asesiné a Vlad?”

“¡Es lo mismo!”

La causa de toda esta tragedia, es este hombre.

Este hombre destruyó el mundo sin una razón en particular, sin interés alguno.

Pero se han dado cuenta de que no pueden matarlo.

Pero fueron capaces de entender esta lucha. Y lo que ahora aprendieron es que las Relic Eaters son parte del poder de este hombre.

El prototipo de Relic Eater Innocentius no ha mostrado su habilidad.

Debe de tener un método para salvar a Kiseki. “¡—Nikaido! ¡Cambia de objetivo!”

No podían matar a esta persona, pero las Relic Eaters no son existencias inmortales. Mientras Ouka atacaba, Mari se dedicó a concentrar poder mágico en las yemas de sus dedos.

“¡«Flecha de Aurora»!”

Los cañones mágicos se concentraron en un solo punto. Incluso el rango de ataque era estrecho.

La flecha emitida desde la luz se dirigió directamente hacia la Relic Eater de Sougetsu.

Pero su objetivo había desaparecido, Sougetsu debería haber estado ahí y su Relic Eater también, desapareció en un abrir y cerrar de ojos.

“¿¡Desapareció!?”

“¡—Por atrás!”

Junto al grito de Ouka, Mari miró hacia atrás.

Lo que estaba detrás, era la cara de Sougetsu riéndose como el gato Cheshire.

“¡——!”

“Innocentius no es inmortal. Fue una buena táctica, pero…… están malinterpretando mi presencia.”

Mari intentó perseguirlo acumulando su magia inmediatamente.

Sin embargo,

“Yo ya no tengo lugar en este mundo, estoy en todas partes. Tal y como un Dios.”

“¡Ha—ah!”

“¿Qué pasa?”

Puso el cañón de Innocentius en el pecho de Mari. Entonces, el cañón del mosquete hizo chispas y la bala invisible penetró el cuerpo de Mari.

Mari sintió una corriente recorrer su cuerpo y cayó. “¡Nikaido—nhh!”

Ouka voló hacia donde estaba Mari a toda velocidad.

Pero—al momento siguiente, Sougetsu apareció en el aire como si al estuviera esperando.

Frenó repentinamente y se hizo hacia atrás.

No está en ninguna parte, pero está en todas partes.

Mientras esté en este mundo, no hay lugar al que no pueda ir, no hay a dónde escapar.

“No están muertas. Ni Kiseki-chan ni Mari-kun lo están.” “…… ¡maldito…!”

“La habilidad intrínseca de Innocentius es—que le da órdenes al alma. Ante esa orden, ningún alma humana puede escapar.”

Inclinando su cintura miró el rostro de Ouka. “No di órdenes de suicidio. Quédate tranquila.” “… uuu.”

“La orden venció sus almas—”

Frente a Ouka, Sougetsu desapareció.

Al otro lado de donde Sougetsu de desapareció, vio el débil cuerpo de Mari.

Al no ver ningún movimiento en su cuerpo, Ouka intentó abalanzarse hacia Mari.

Pero escuchó a Sougetsu susurrar. “—Mátala.”

Desde atrás de Mari, Sougetsu desapareció inmediatamente.

El cuerpo de Mari que estaba tendido en el suelo miró hacia Ouka.

Mari carecía de expresión. Como si trajera una máscara, Ouka solo podía observar.

“…… Nikaido…”

Se sintió aliviada de que estuviera bien.

Pero ante la orden que le había dado, no podía hacer nada. Mari comenzó a moverse.

Hizo aparecer las ruedas mágicas en sus pies y se dirigió hacia Ouka a una alta velocidad.

“¡—!”

Ouka cruzó sus brazos a toda prisa para defenderse.

Encantamiento             Auroral

«Subvención de la Aurora»”

Mari cubrió su puño con magia y golpeó la guardia de Ouka.

Cabe señalar que la habilidad defensiva de Vlad es notable, ahora Ouka tiene la fuerza vital y física equivalente a la de un vampiro. No le fue difícil defender su ataque.

El puño de Mari se vio aplastado entre los brazos de Ouka, ella solo liberó poder mágico con los brazos cruzados.

Mari, en cuyo caso su habilidad física es nula no pudo hacerle frente a la de Ouka. Sin embargo, debido a la fuerza de la magia de subvención, la magia de Mari era peligrosa.

Mari inmediatamente se distanció de Ouka y comenzó a reunir poder mágico en ambas manos.

“¡Détente Nikaido! ¡Recobra la cordura!”

Su voz no la alcanzaba. No sabía que orden le había dado a su alma, pero su voz nunca la alcanzaría.

Mientras se dirigía a Ouka con un rostro como si fuera una máscara, la magia de la aurora convergió en su pechó.

“Aurora Cannon.”

Con indiferencia dijo el nombre de la magia, Mari liberó su magia a quemarropa en el abdomen de Ouka.

Su magia se difundió por el cuerpo de Ouka—

…… ¡Vlad… nh…!

Se dio cuenta de que sería genial que Vlad estuviera aquí. La magia de Ouka se enfoca en penetrar, pero es necesario conocer el procedimiento operativo de la magia del rival.

El procedimiento operativo de la magia de Aurora es complicado, pero ya ha entrado al cuerpo de Ouka.

Sin embargo, la parte más importante es invertir el procedimiento operativo en su cabeza. Invertirlo siempre era el trabajo de Vlad.

Ouka trató de reconstruir el procedimiento operativo a una alta velocidad, e incluso trató de revertirlo.

Ouka le disparó a la magia de Mari con su escuadra.

Al último momento, la magia de Mari se desvaneció. También es posible detener la magia si se le golpea directamente en el punto donde está concentrada antes de invocarse.

Pero a pesar de que lo hizo al último minuto, la velocidad de construcción de procedimientos operativos de Mari es abrumadoramente mayor a la de cualquiera.

“«Espada del Eclipse» «Espada de la Noche Blanca»”

El procedimiento operativo de esta magia—Ouka no lo conocía.

Solo la conocía por la literatura. Esa magia era como un

cuento de hadas, esos eran las propiedades de “Luna” y “Sol”.

Mari levantó sus manos y balanceó una espada hecha de su propia magia.

Ouka liberó magia de los pilares en sus codos y recibió la espada de Mari.

“—nhh, kuhh… uuuu….”

El tremendo poder empujó a Ouka.

No podía atravesar esa antigua magia que no pertenecía a la magia de Aurora. Aunque tuviera suficiente poder mágico, la calidad de la magia de Mari es abrumadoramente mayor.

Además no podría hacerle frente con el Recuento de Colmillos.

Las estacas se verían obligadas a desmoronarse. “uuh, ¡perdóname!”

Como último recurso, Ouka golpeó el abdomen de Mari. Aunque contuvo su energía para no matarla, le rompió varias costillas.

Mari se apartó de Ouka y se llevó una mano a su abdomen.

Pero aunque debió haber gritado de dolor, Mari permaneció inexpresiva.

¿¡Qué hago……!? No puedo escapar de Nikaido… hasta que se muera, ¡ella tratará de matarme…!

Solo podría destruir la Relic Eater de Sougetsu, pero primero tiene que encontrar el paradero de ese hombre.

También estaba preocupada por Takeru y Kiseki que estaban en el suelo… sin embargo, su prioridad era hacerle frente a Mari.

Ouka cerró sus ojos fuertemente de nuevo, luego los abrió por completo cuando agarró resolución.

Y de nuevo cruzo sus brazos para utilizar los pistones en sus codos.

El tiempo de la magia no debería ser infinito… ¡no puede permanecer así siempre aunque le haya dado una ordena su alma……!

Ouka—retomó la determinación y luchó contra Mari.

“De ser posible no me gustaría pelear de esta manera……” Con el ceño fruncido, Ouka se preparó para el combate.

Mari hizo aparecer un círculo mágico y tomó una postura de combate también.

“Absolutamente—¡No me matarás!”

Para proteger a Mari quien cree que la magia no es para matar gente, Ouka decidió enfrentarse a Mari.

***

Después de darle la orden a Mari, Sougetsu se sentó en las ramas del gran árbol demoniaco observando desde arriba a Takeru y las demás.

Acariciando suavemente a Innocentius, Sougetsu puso una sonrisa irónica.

“Aunque fue una buena destrucción…… Kusanagi-kun tuvo éxito en persuadir a Kiseki-chan.”

Es un chico con mucha voluntad, Sougetsu escupió.

“Quería observarlos un poco más, pero este juego pronto terminará.”

Para Sougetsu, la guerra es un hobby.

… esa es la razón por la que se tiene que eliminar a Dios. Mitad hombre, mitad dios, un dios viviente.

Loki.

Se le ha llamado con un sinfín de nombres, antes de que reconstruyera este mundo, cazar dioses era su razón de ser.

La destrucción se volvió su razón de ser únicamente porque la mitad de su cuerpo era la de un Dios. Pero si el Dios pereciera, las personas también lo harían.

Esas emociones no les permitían concluir las cosas.

Esas eran todas las cosas que componen la existencia de Ootori Sougetsu.

Si se asesina al dios de este mundo, los seres humanos perecerán.

A consecuencia de que el mundo de los dioses y el de los humanos chocaron, nació este mundo.

Vivir o perecer, la visión del mundo de los dioses y los humanos se mezcló.

Sougetsu por primera vez en su vida sentía alegría de ver el mundo.

Además, es posible destruirlo. “Hmm, fue muy divertido.”

Sougetsu continuó mirando al mundo desde las ramas del gran árbol.

El rojo que teñía al mundo se reflejaba muy bien en sus ojos. Sougetsu finalmente había traído la destrucción.

Estaba disfrutando la destrucción.

Al mismo tiempo que el mundo de los dioses colisionó, el poder de Sougetsu se esparció por todo el mundo.

—Esa es la magia de este mundo.

Sin embargo el poder difundido de Sougetsu no es omnipotente. Se volvió una presencia que una simple bruja no podría matar. Las Relic Eaters son los residuos del poder de Dios de Sougetsu.

Por eso es que no pudo darle una orden directa al alma de Takeru. Debido a que su alma no es humana. Su poder como Dios se vio considerablemente afectado.

Por lo tanto quien podría salvar al mundo de la destrucción era Kusanagi Takeru, no los humanos.

Sougetsu era el hombre que le quería quitar lo más precioso que tenía de las manos, Kusanagi Takeru dirigió su instinto asesino hacia Sougetsu.

Quería estar con sus compañeras a como diera lugar.

Sin embargo, si Takeru no se vuelve un Cazador de Dioses para asesinarlo, Kiseki destruirá al mundo por la orden que le dio con Innocentius.

Pero si matara a una de sus compañeras, la historia sería diferente.

El hecho de que los humanos son criaturas simples, Sougetsu lo sabía.

Lo sabía porque era mitad humano.

“No hay drama eh…… los humanos no se mueven. De ser posible no quisiera terminar de esta manera tan poco elegante.”

Ejercer su poder como Dios tiene sus efectos secundarios, este fue el magnífico juego de Souguetsu para guiar el mundo hacia la destrucción.

Souguetsu disfrutaba de este mundo hecho por sus propias reglas.

Si por él fuera habría continuado, pero no podía.

“Si disfrutas de la destrucción, no tiene ningún sentido para que perezca.”

La destrucción del mundo, el caos, hizo probar todo en su máxima expresión.

Después de hacerlo pedazos, Sougetsu se había divertido.

“Bien, es hora de ver si la segunda generación del Cazador de Dioses-kun puede matarme sin vacilar—y que entregue su alma por completo.”

Como de costumbre, Sougetsu sonrió como un gato, y una vez más apretó el gatillo de innocentius.

Sougetsu le ordenó al alma de Kiseki—que devorara el mundo.

***

Después de que puso el frío cuerpo de Kiseki en el suelo, Takeru puso su oreja contra el corazón de Kiseki.

No había sonido. Tampoco respiración.

Mientras que su tonalidad iba desapareciendo, Takeru trató de reanimar el corazón de Kiseki.

Ikaruga fue corriendo y agarró el hombro de Takeru.

Takeru levantó su aturdido rostro e Ikaruga le dio una bofetada.

“Resístelo. Mira a tu alrededor. El Hyakki Yakou no ha desaparecido. Significa que esta niña sigue viva. Ella revivirá aunque muera.”

“… uu, pero, ¡no la escucho respirar…!”

“Fue a causa de la Relic Eater. Lo que debes hacer, es destruir la Relic Eater de ese tipo.”

Como si el regaño de Ikaruga lo tranquilizara, Takeru recuperó la compostura.

“No conozco su fuerza, pero sé que al destruir la Relic Eater volverá a la normalidad. No pierdas el tiempo. Ve a hacer lo que tengas que hacer.”

Envolviendo el rostro de Takeru con sus dos manos, Ikaruga presionó su frente contra la de él.

“No sé qué decirte sobre ese bastardo como oponente…… pero, solo has lo que has estado haciendo hasta ahora. ¿Está bien?”

Ante la mirada fija de Ikaruga, Takeru apretó sus labios que estaban temblando.

“¡Por favor déjanos a Kiseki-san a nosotras! ¡Kusanagi debe ir al lugar dónde están Ootori y Nikaido—!”

Mientras que Usagi abrazaba un rifle en su pecho, se acercó a Takeru.

Cierto… todavía no he hecho nada…

Takeru asintió fuertemente hacia las dos personas. “—¡Lapis!”

“Aquí.”

Respondiendo a su llamado, Lapis apareció casualmente a su lado.

“¿Conoces algo sobre la Relic Eater de ese bastardo?”

“Lo siento. No conozco la habilidad ni la personalidad de Innocentius.”

“¿Dónde están Ouka y Mari?”

“… al parecer Nikaido Mari-sama está bajo la influencia de Innocentius, Ouka-sama parece estar luchando contra ella.”

Takeru fuertemente miró el cielo.

Ciertamente una luz roja y unos colores arcoíris se veían mezclados en el cielo.

Lapis conectó a Ouka y a Takeru mediante una comunicación mágica.

«¡Ouka!»

«¡Kusanagi…! ¡Nikaido está bajo el control de Innocentius…!

¡Ahora misma estamos peleando!»

«¿¡Qué pasó…!?»

«Es la habilidad de Innocentius, ¡le da órdenes directas al alma…! ¡Le ordenó al alma de Nikaido asesinarme…!»

Al escucharla, Takeru trató de dirigirse inmediatamente a rescatar a Ouka.

«¡Déjame a Nikaido! ¡Ve por la Relic Eater de Ootori Sougetsu…!»

Junto con una explosión de color arcoíris en el cielo, se interrumpió la comunicación.

“…….. uu—”

Takeru sintió el impulso de ir en este preciso momento tras Ouka. Pero Ouka le dijo que se lo dejara a ella. Que se enfocara en destruir la Relic Eater.

¡Debo hacer lo que tenga que hacer! ¡Parece que todas así lo han decidido!

“¡Lapis! ¡Vamos!”

Con un poco de vacilación, Takeru llamó a Lapis.

Sin embargo,

“¡—Kusanagi! ¡K-Kiseki-san ha…!”

Takeru miró hacia atrás ante el llamado de Usagi.

Ahí—Kiseki estaba flotando, desafiando la gravedad, luego abrió sus ojos lentamente.

Había recibido una orden directa a su alma, tal y como Ouka había dicho.

Es decir, Kiseki, “Todas huyan———”

Más rápido que el grito de Takeru, el ensordecedor grito de Kiseki resonó.

En ese momento, el Hyakki Yakou se desbordó por todo el cuerpo de Kiseki.

Takeru vio, vio la figura de Ikaruga protegiendo a Usagi, luego vio la figura de Lapis dirigirse hacia él.

¡—Huésped!

Al mismo tiempo que escuchó la voz de Lapis, fue devorada por el Hyaaki Yakou. Takeru también había sido devorado por las olas de demonios.