Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 19

Capitulo 4: Desempeño Del Grupo I: El Incidente De La Ciudad Del Castillo

Parte 2

 

 

Y, sin embargo, no pudieron obtener ninguna información útil en ese frente. Después de todo, el acto violento no había ocurrido tarde en la noche, sino en la mañana. En ese momento, los guardias de patrulla habían regresado a la mansión y no habían notado nada inusual.

Sin embargo, se habían enviado miembros de la milicia para registrar el interior de la mansión. Tal como había declarado Kamyua Yoshu, enviaron un informe que indicaba que probablemente sería imposible colarse en la mansión escalando esa pared por la mañana.

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Aunque alguien se hubiera escapado de la patrulla nocturna, Mateela había sido asesinada poco antes de las dos de la mañana. Si el culpable hubiera escalado la cerca y escapado por el frente, obviamente la gente se habría dado cuenta. Y así, la conclusión del investigador principal fue que tenía sentido pensar que, para empezar, no había habido ningún intruso.

“Hmm. A este ritmo, parece que la conclusión a la que se llegará es que el sirviente que vigilaba en la antecámara fue el culpable”, comentó Polarth.

“Eso es cierto. Aun así, no habría podido salir de la antecámara. ¿Realmente podría haber no solo cortado la mano derecha de la dama sin mancharse, sino también haberla escondido en algún lugar?” dijo Kamyua.

“Ah, ya veo. No es como si él pudiera haber vagado por la mansión en la mañana todo cubierto de sangre… Pero entonces, ¿dónde nos deja eso exactamente?” preguntó Polarth, inclinando la cabeza, solo para que uno de los guardias que investigaban el jardín trasero se acercara corriendo.

“¡Señor Polarth! ¡Hemos descubierto lo que creemos que es la mano derecha de la dama!”

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“¡¿Eh?! ¡¿Realmente?!”

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El grupo se apresuró al jardín trasero, donde encontraron a otro guardia de pie más allá de los arbustos cuidadosamente recortados. El suelo había sido excavado a sus pies, donde un objeto increíblemente perturbador estaba sentado encima de una tela. Polarth se detuvo a cierta distancia, pero Kamyua Yoshu y Leito se acercaron rápidamente.

“Sí, parece que no hay error…” Era una mano ensangrentada, que se había vuelto tan pálida como la cera. Y un anillo con una brillante gema de apatita amarilla estaba fuertemente pegado en el dedo anular. “¿Así que fue enterrado? Pero no parece tener mucha suciedad”.

“Cierto. Fue enterrado envuelto en la tela debajo de él. En cuanto a la tela en sí, parece ser una pieza de tela finamente tejida…”

“Eso es cierto. ¿Pertenecía a la dama?”

Con el permiso de los guardias, Kamyua Yoshu envolvió la mano una vez más en la tela.

Era semitransparente, probablemente hecho de seda de Sym. A pesar de su fino borde dorado, estaba empapado en sangre y cubierto de suciedad.

“Lord Polarth, ¿reconoce esta tela?”

“¡Por favor no! ¡Solo mirar la sangre de alguien es suficiente para hacerme sentir débil!”

“¿Pero no te gustaba la maldita carne de karon, Lord Polarth?”

“¡Es precisamente por eso! Ugh, ahora probablemente no podré comer karon por algún tiempo…” A pesar de sus protestas, Polarth tímidamente miró el paquete que Kamyua Yoshu sostenía entre sus dedos. “Sí… Ese parece ser el chal que Mateela usaba con frecuencia. Creo que lo tenía puesto durante la cena de anoche.”

“Gracias. Aun así, esto es realmente horrible…” comentó Kamyua Yoshu, de espaldas a Polarth mientras desataba el bulto. Y luego, dijo divertido: “Oh… Leito, ven a mirar. Hay una herida bastante profunda en la palma de la mano.”

Tal como había dicho Kamyua Yoshu, había señales de que el centro de su palma había sido apuñalado bruscamente con una cuchilla. Ella también debe haber sangrado profusamente por esa herida. Después de todo, la palma y la base de los dedos estaban teñidas de un rojo intenso.

“¿Se hizo esta herida mientras intentaba protegerse de una daga que venía a su pecho?” Leito se preguntó.

“¿Quién puede decir? Ese puede ser el caso o puede que no”. La mirada de Kamyua Yoshu cambió repentinamente y llamó al guardia cercano: “Disculpe, pero ¿qué es ese edificio allí?”

“El jardinero dijo que era un galpón para guardar herramientas y leña. Lo buscamos de inmediato, pero no encontramos nada sospechoso”.

“El jardinero… ¿Te refieres a ese hombre Zess?”” “Sí, creo que ese era su nombre.”

Después de confiarle el bulto ensangrentado al soldado una vez más, Kamyua Yoshu deambuló por ese camino. Era una choza de madera tosca y pequeña. La puerta no estaba cerrada con llave, así que casualmente la abrió.

El interior estaba mal iluminado y desordenado. Estaba repleto del tipo de cosas que el guardia había mencionado, y dado que era solo una habitación individual, no había ningún lugar donde una persona pudiera esconderse.

Kamyua Yoshu echó un vistazo al espacio y pronto se acercó a la pared derecha, donde colgaban una variedad de herramientas grandes, como una guadaña y una azada. De entre ellos, recogió una herramienta de hoja de dos puntas de forma extraña.

“Leito, ¿sabes qué es esto? Se llaman tijeras de podar, destinadas a cortar ramas altas”.

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“¿Tijeras?”

“Sí. Cuando juntas las manijas de esta manera, estas dos cuchillas cortan lo que sea que esté en el medio. Con unas tijeras de este tamaño, podrías cortar fácilmente una rama de grige resistente”.

Efectivamente, esas hojas eran cada una más largas que una daga, y parecían bastante peligrosas. En cuanto a los mangos, probablemente eran tan largos como el brazo de Leito. Definitivamente podría usarse para cortar ramas altas. Cuando Kamyua Yoshu abrió y cerró con ambas manos, se volvió hacia la entrada de la choza.

“Hay un poco de humedad en las manijas. ¿Alguien lo usó esta mañana?”

Uno de los guardias estaba parado en la entrada, observando sospechosamente las acciones de Kamyua Yoshu. Sin embargo, dado que necesitaba ser cortés con ellos, ya que eran invitados de Polarth, el hombre asintió rápidamente. “Sí. Aparentemente, el jardinero estaba afilando las cuchillas. Dijo que eso era parte de sus deberes matutinos”.

“Ya veo. Efectivamente, los mangos de la guadaña y la azada también parecen estar húmedos.”

Con eso, Kamyua Yoshu devolvió las tijeras a la pared y salió de la choza. Luego, volvió su mirada hacia la izquierda. La mansión Alphan se elevaba sobre ellos en esa dirección. Había ventanas a lo largo de la pared gris, y una de ellas estaba abierta de par en par.

“Parece que puedes ver el dormitorio de la dama desde aquí”.

“Por cierto. Pero el jardinero dice que estuvo en esta choza todo el tiempo y no notó nada”.

“Ya veo. Muchísimas gracias.”

Kamyua Yoshu luego caminó casualmente de regreso a Polarth. Leito miró el rostro de su maestro mientras caminaba al lado del hombre.

“Has resuelto todo el misterio, ¿no es así, Kamyua?”

“¿Hmm? ¿Por qué piensas eso?”

“Es lo que me dice la expresión de tu cara”.

“Seguro que eres ingenioso, Leito”, comentó Kamyua Yoshu con una sonrisa, sus ojos morados se movieron para mirar a su aprendiz. “¿Qué opinas? Has visto y oído las mismas cosas que yo, así que ¿has podido llegar a una conclusión por tu cuenta?”

“Bueno, según lo que hemos aprendido hasta ahora… creo que el culpable fue Zess”.

“¿Oh? ¿Porque eso?”

“No creo que el sirviente hubiera tenido una manera de evitar que la sangre lo manchara, y no puedo imaginar que Lady Nicola pueda clavar la daga tan profundamente. Eso dejaría a alguien forzando su entrada a través de la ventana… Y como tú y los guardias dijisteis, alguien dentro de la mansión habría sido capaz de hacerlo mucho más fácilmente que un forastero que habría tenido que escalar las paredes.”

“Cierto. Pero aún necesita una razón para destacar a Zess. Además, creo que sería difícil escalar ese muro con la fuerza de un jardinero”.

“Sí, pero ¿y si Lady Nicola bajara una cuerda desde el dormitorio? Entonces podría haber subido al dormitorio, asesinado a la dama con su propia daga y cortado su mano con la herramienta de antes. Eso explicaría por qué esas tijeras estaban mojadas y la mano estaba enterrada cerca de esa choza.”

“Hmm ya veo. Hay cierta consistencia en tu lógica… En ese caso, ¿por qué Zess tuvo que esforzarse para cortarle la mano a la dama?”

“Bueno… ¿para profanar el cadáver? Que Dame Mateela supuestamente valoraba bastante su autoridad como noble. Así que quitarle el anillo que servía como prueba de su título sería una terrible humillación para ella”.

“¡Ya veo! Sí, esa es ciertamente una forma de ver las cosas”.

Al escuchar eso, los hombros de Leito se desplomaron. “Si esa es tu respuesta, debes pensar diferente, ¿verdad, Kamyua?”

“¿Hmm? Sí. Todavía no tengo todo perfectamente alineado, pero bueno, supongo que esta es una situación excepcional.”

“En ese caso, debo estar equivocado. Además, no puedo ver una razón para que el hermano mayor de la primera hija, Zess, y la segunda hija, Nicola, conspiren juntos”.

“Yo tampoco tengo ninguna pista sobre eso. Pero no hay razón para que nos rindamos antes de saber la verdad”.

“No, mi forma de pensar debe estar equivocada”.

Encogiéndose de hombros, Kamyua Yoshu regresó con Polarth, que estaba de pie a un lado sin nada que hacer.

“Bueno, entonces, ¿regresamos a la mansión? Me gustaría molestar a Lady Nicola, Lady Tetia y Zess para que se reúnan y sacar la verdad a la luz”.

***

 

 

Seis personas se habían reunido en la habitación de Tetia: Tetia, Nicola, Zess, Kamyua Yoshu, Polarth y Leito.

Esta fue la primera vez que conocieron a la hija mayor, Tetia. Estaba sentada en su cama, con su cabello castaño claro rojizo cayéndole hasta los hombros. Tenía una mirada pusilánime a su alrededor, ya que aún no se había recuperado del impacto de la muerte de su abuela. Su rostro estaba tan pálido como un cadáver.

Mientras tanto, Nicola parecía estar de peor humor que antes, y Zess tenía una mirada en sus ojos como un espadachín ansioso por pelear.

Mientras miraba a los residentes de la casa de Alphan, Kamyua Yoshu dijo: “Ahora bien… He visto esta situación a mi manera particular y reconstruí lo que creo que es la verdad detrás de este incidente. Puede resultar difícil de escuchar, pero agradecería escuchar todas sus opiniones”.

“¿Estás planeando hacer afirmaciones ridículas de nuevo, como que el ladrón todavía puede estar aquí en la mansión?” Nicola cuestionó duramente.

“No”, respondió Kamyua Yoshu con un movimiento de cabeza. “No creo que podamos seguir llamando ladrón al culpable de este incidente. Después de todo, es una falta de respeto referirse a los miembros del noble linaje Alphan como tales”.

“Aha… ¿Entonces tienes la intención de convertirme en el villano aquí?” Nicola cuestionó, sonriendo solo con su boca.

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Zess temblaba de ira, mientras Tetia permanecía inexpresiva como una muñeca.

“Dios nos libre. Una dulce jovencita como usted nunca podría cometer un acto tan violento, Lady Nicola.”

“¡Deja de tontear! ¡¿Qué, estás llamando a Tetia la culpable?!”

“Para nada… Bueno, tal vez podrías decirlo. Diría que la verdad aquí es un poco más complicada que eso”, respondió Kamyua Yoshu con una sonrisa. ¿Qué habían visto exactamente esos misteriosos ojos morados suyos? En cualquier caso, Leito solo escuchó en silencio. “Mi primer pensamiento básico fue descartar la hipótesis de que el culpable era un intruso externo. Solo pude concluir que ese no podía ser el caso, ya que estaba claro por el estado del cadáver de Dame Mateela que estaba viva hasta la mañana. Escalar ese muro durante la segunda hora de la mañana y escapar sin que ningún transeúnte lo vea simplemente no sería posible. No, quienquiera que haya sido el culpable, sin duda se quedaron aquí en la mansión.”

Todos simplemente escucharon atentamente mientras él continuaba.

Isekai Ryouridou Volumen 19 Capitulo 4 Parte 2 Novela Ligera

 

 

“Con eso en mente, llegué a la conclusión de que los únicos que podrían haber dañado a Dame Mateela son las tres personas que pusieron un pie en su habitación esta mañana. Como el sirviente que vigiló toda la noche es visto como el más sospechoso, actualmente está siendo interrogado intensamente por los guardias… Sin embargo, tampoco creo que él sea el culpable.”

“Hmm, ¿sería eso por el hecho de que no pudo haber escondido la mano que el culpable cortó, ni pudo haberse limpiado toda la sangre?” cuestionó Polarth.

“Sí.” Kamyua Yoshu asintió en respuesta. “Ahora, si tuviera un cómplice, ya no sería así. Podría haber bajado el arma y la mano al suelo debajo de la ventana con una cuerda para que un aliado se escondiera. Pero encuentro que esa explicación es muy poco probable”.

“¿Oh? ¿Y por qué es eso?”

“Porque no habría tenido ninguna razón para llevar a cabo el plan en la mañana. Los otros sirvientes ya estaban trabajando duro a la segunda hora de la mañana, por lo que no se sabría cuándo alguien podría venir y descubrir el crimen. Sería completamente ridículo bajar una cuerda por una ventana o convocar a un aliado a la habitación del segundo piso mientras el sol estaba alto en el cielo. Y también sería prudente hacer el acto de noche para que parezca obra de un ladrón. En realidad, los guardias ya han llegado a la conclusión de que no sería posible escalar ese muro durante la mañana. Después de detenerse para respirar y mirar en silencio a la gente reunida, Kamyua Yoshu continuó. “Si este crimen hubiera sido planeado de antemano, absolutamente se habría llevado a cabo de noche. Sin embargo, Mateela perdió la vida esta mañana. Quizás eso signifique que fue un crimen espontáneo que nadie planeó”.

“¿Un crimen espontáneo?”

“Así es. Creo que esto no fue un complot hecho de antemano para herir a la dama, sino el resultado final de una serie de desafortunadas coincidencias”, dijo Kamyua Yoshu, con la mirada fija en Nicola. “Ahora bien, cuando visitó la habitación de Mateela por la mañana, usted es la segunda persona que podría haber cometido el crimen, Lady Nicola. Sin embargo, no podrías haber clavado esa daga tan profundamente con esos brazos tuyos… Después de todo, la hoja rompió una costilla y llegó hasta su corazón. Necesitarías la fuerza del brazo de alguien como Zess o yo mismo para lograr eso”.

“¿Entonces estás diciendo que lo hice?” cuestionó Zess.

“Ah, no. Después de todo, tampoco habrías podido escalar el muro de la mansión por la mañana. Todo lo que hiciste fue tirar las tijeras de podar por la ventana, ¿verdad?” Zess se congeló en el lugar con una mirada de terror. La sangre se había drenado por completo de su rostro. “Bajo las órdenes de Lady Nicola, arrojaste las tijeras del jardín trasero al dormitorio del segundo piso. Y después había que cuidar las tijeras ensangrentadas y la mano derecha envuelta en el mantón. La tarea debe haber devorado tu alma.

“Oh, entonces parece que deseas tratarme como el culpable después de todo”, comentó Nicola con una sonrisa fría.

Sin embargo, Kamyua Yoshu negó con la cabeza y dijo: “No. Creo que solo le cortó la mano al cadáver, Lady Nicola. ¿Tal vez viste a Zess al lado de la choza cuando abriste la ventana para que pareciera obra de un ladrón? Fue entonces cuando le habrías pedido que proporcionara las tijeras y se encargara de la limpieza. Para bien o para mal, las cosas nunca se habrían vuelto tan complicadas si no lo hubieras llamado.”

“¡¿Qué estás diciendo?! ¡¿Por qué cortaría la mano de mi propia abuela de todas las cosas?!”

“Fue para salvar a Lady Tetia, ¿no? Para ocultar pruebas de sus crímenes.” Ahora fue el turno de Nicola de congelarse en su lugar.

Kamyua Yoshu se volvió hacia la cama. “Lady Tetia, usted fue quien apuñaló a Dame Mateela en el pecho con la daga, ¿no?”

Tetia miró lentamente hacia Kamyua Yoshu.

Pero justo antes de que pudiera pronunciar una respuesta, Nicola gritó:

“¡Alto! ¡No digas nada, Tetia!

“Ustedes… Todos se dieron cuenta de lo que hice, ¿no?” Una sola lágrima rodó por su rostro, tan pálido como un cadáver. “Sí… Apuñalé a la abuela en el pecho con su daga…”

“¡Tetia!”

“Yo soy el que la asesinó. Nicola y Zess no tuvieron nada que ver con eso. Soy el único culpable aquí…”

“No. Es cierto que la apuñalaste, pero eso fue anoche, ¿correcto? La dama perdió la vida después del amanecer. No fuiste tú quien la mató”, declaró Kamyua Yoshu, su mirada volviendo a Nicola. “La dama fue apuñalada en el pecho por Lady Tetia. Pero debe haber rebotado en el hueso y no penetrado tan profundo. La dama tenía una figura bastante regordeta. De todos modos, creo que después de que Lady Tetia se fue, trató de sacar la daga y se lastimó gravemente la palma de la mano derecha. Había un corte profundo en la mano que se encontró recientemente”.

Nadie se atrevió a interponerse.

“Luego, para detener el sangrado, la dama envolvió un chal cercano alrededor de su mano. Tal vez perdió el conocimiento en ese momento, o tal vez simplemente le faltó la fuerza para gritar debido a la pérdida de sangre… Independientemente, no pudo convocar al sirviente afuera de su puerta, y se quedó indefensa y sola durante la noche.”

Nicola se mordió el labio mientras permanecía en silencio.

A su vez, Kamyua Yoshu le dirigió una sonrisa amable.

“Entonces llegó la mañana y Lady Nicola visitó su dormitorio. No sé qué pasó entre ustedes dos en ese momento, pero la dama se cayó de su cama y pereció. El impacto de golpear el suelo hizo que la daga que había sido clavada superficialmente en su pecho se hundiera más profundamente, rompiendo una costilla y llegando hasta su corazón. Naturalmente, fuiste a llamar al sirviente… pero sabías que Lady Tetia había visitado el dormitorio anoche, ¿no? O tal vez la dama misma le informó de ese hecho esta mañana. En cualquier caso, los crímenes de Lady Tetia habrían quedado expuestos si no hubieras intervenido, por lo que no tuviste más remedio que idear un plan.”

“¿Pero por qué? ¿Deshacer el chal envuelto alrededor de su mano no serviría para ocultar cuándo se produjo la herida?” Polarth intervino, sonando bastante compuesto.

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“No”, respondió Kamyua Yoshu con un movimiento de cabeza. “Eso probablemente no hubiera funcionado. Como había estado atada durante toda la noche, la mano de la dama se habría hinchado. Lady Nicola necesitaba deshacerse de toda la mano para ocultar ese hecho.”

“Hmm, ¡cuanto más escucho, más asombroso se vuelve todo! ¿Había tal vez signos de tal hinchazón en la mano que se descubrió hace un rato?”

“No. El área alrededor de la herida estaba tan ensangrentada que no pude confirmar ese hecho”.

“Ugh, solo escucharlo es suficiente para enviarme un escalofrío por la columna… Aun así, eso deja todo esto como pura conjetura. ¿Cómo pusiste todo junto para llegar a tal conclusión?” preguntó Polarth, luciendo confundido.

Con una sonrisa relajada, Kamyua Yoshu respondió: “No fue tan difícil. La prueba estaba sobre la cama.

“¿La cama? ¿Te refieres al que está en el dormitorio de Mateela?”

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“Sí. Había algunas manchas de sangre muy claras encima. Dado que la herida en su pecho no era tan grave, todo debe haber venido de su palma. La sangre que se había esparcido en lugar de acumularse se había secado lo suficiente como para que pudiera rasparla con el dedo. Si todo hubiera sido de esta mañana, no estaría tan seco, ¿verdad?” Dijo Kamyua Yoshu, mirando a las personas presentes. “El cadáver de la dama aún conservaba un poco de calor, por lo que no hay duda de que murió en la mañana. Y, sin embargo, a pesar de eso, había sangre de antes en su cama. Desde el comienzo de mi investigación, pasé de persona en persona, haciendo preguntas para resolver el misterio de por qué podría haber sido eso”.

Leito dejó escapar un pequeño grito ahogado, tan pequeño que nadie más pudo oírlo.

Podía recordar claramente a Kamyua Yoshu sacándose la sangre seca de la uña. Y, sin embargo, a pesar de eso, no había podido seguir la misma línea de pensamiento.

“Lady Tetia fue la única que visitó el dormitorio de la dama anoche. Tenía que ser ella o el sirviente en la antecámara quien había causado que la dama sangrara así. Pero si el sirviente hubiera sido el culpable, ciertamente la habría acabado durante la noche, lo que no conduciría a las circunstancias actuales. Por lo tanto, llegué a la conclusión de que fue Lady Tetia quien la apuñaló con la daga, y Lady Nicola quien trató de hacer que pareciera obra de un ladrón. ¿Entonces, qué piensan todos ustedes?”

Mirando fijamente a su media hermana, Tetia preguntó: “Nicola, ¿es eso cierto…? ¿Tú y mi hermano Zess hicieron eso para protegerme?”

“No sabías nada al respecto, ¿verdad, Lady Tetia?” Dijo Kamyua Yoshu.

“No… No tenía idea de lo que estaba pasando cuando escuché que un ladrón había matado a mi abuela y que le habían quitado la mano derecha. Me quedé preguntándome si algo tan extraño realmente podría haber sucedido, con alguien que simplemente entró y la mató después de que la lastimé anoche…”

“¿Por qué exactamente atacaste a la dama?” Kamyua Yoshu cuestionó, causando que más lágrimas brotaran de los ojos de Tetia.

“Yo… Visité la habitación de la abuela para discutir el asunto de quién sería el heredero de la casa de Alphan. Aunque es cierto que mi madre era sirvienta, las autoridades de Genos me han reconocido oficialmente como hijo legítimo. No había manera de que ella hubiera torcido las cosas para convertir a Nicola en la heredera, así que quería pedirle que reconsiderara su posición”.

“Pero ella se negó a considerar su solicitud”.

“Así es… En cambio, me entregó esa daga y me presionó para que me suicidara…” Los delgados dedos de Tetia estaban agarrando su ropa de cama con fuerza. “‘Si tan solo no estuvieras aquí, todo estaría bien… Paga con tu vida el imperdonable crimen que cometió tu madre…’ Eso fue lo que me dijo. Y ella abusó tan horriblemente de mi madre… Antes de que me diera cuenta, le había clavado la daga en el pecho…”

“¿Es eso lo que pasó, Tetia?” Zess preguntó en voz baja y tranquila. Sus ojos estaban llenos de una angustia terrible. “Si lo hubiera sabido, habría tomado una espada en tu lugar. ¡¿Por qué esa vieja bruja nos odiaba tanto…?! Si alguien no nació en una casa noble, ¿no se le permite desear tanta felicidad como cualquier otra persona?”

“No hay forma de ayudar que… Nuestra madre aceptó los avances de mi noble padre, después de todo…”

“¡Aun así, la abuela no tenía derecho a abusar de ti de esa manera! ¡Nuestro padre es el culpable de dejar embarazada a su doncella! Gritó Nicolás. Había lágrimas corriendo por su rostro ahora también. “¡Ni siquiera quería heredar la casa! ¡Yo… yo solo quería casarme con Zess!” Mientras lloraba, Nicola miró a Kamyua Yoshu con ojos llorosos. “¡Por eso fui a la habitación de la abuela, para tratar de persuadirla! ¡Decirle que debería dejar de lado sus estúpidos planes y dejar que el marido de Tetia sea el próximo jefe de la casa!”

“Dijiste la verdad sobre eso, lo sé. Pero, ¿por qué eso terminó en que la dama perdiera la vida?” Kamyua Yoshu preguntó en un tono suave.

Nicola parecía haber sido repentinamente alcanzada por escalofríos, envolviendo sus brazos alrededor de su propio cuerpo. “La abuela estaba encima de la cama, agarrándome. ¡Tetia hizo esto! Esa chica es una criminal, y ahora tú puedes ser el heredero… Su rostro estaba pálido, pero sonreía como una bestia salvaje cuando logró agarrarme. Intenté huir y ella se cayó de la cama…”

Nicola parecía que estaba a punto de colapsar. Sin embargo, Zess apoyó su esbelto cuerpo sin demorar un momento.

Mientras miraba a su hermana, Tetia susurró con voz ronca: “Nicola, Zess, quería que ustedes dos estuvieran juntos… así que decidí asumir el nombre de la casa Alphan yo misma… Pero abuela, simplemente no lo haría”. no lo permitas…”

“¡La abuela estaba obsesionada con el estatus! ¡Aunque el vizconde no es un gran título en primer lugar! ¡Y sin embargo, ella quería proteger ese título más que su propia carne y sangre!”

Nicola y Tetia estaban sollozando. La boca de Zess estaba cerrada con fuerza, como para evitar llorar también.

Estos tres solo querían protegerse unos a otros. Incluso como alguien que nunca supo lo que era tener una familia, Leito aún podía imaginar la angustia y la tristeza que debieron sentir.

“Parecería que mi lógica estaba en lo cierto. El que finalmente mató a la dama fue la tercera persona presente… La dama misma”, declaró Kamyua Yoshu con mucha calma y una sonrisa amable.

***

 

 

“Dios, qué incidente tan increíble…” comentó Polarth cuando salían de la mansión Alphan.

Cuando pasaron por la puerta principal, Kamyua Yoshu se volvió hacia él.

“Lord Polarth, ¿qué pretendes hacer con ellos?”

“¿Hmm? Que digan toda la verdad, por supuesto. Apuntar con una espada a la familia y engañar a los guardias para ocultar ese hecho son crímenes a los ojos de Genos”, respondió Polarth con severidad. “Todos deben ser juzgados justamente de acuerdo con la ley. Todos los hechos deben ser debidamente transmitidos, incluido que Mateela perdió la vida debido a un lamentable accidente”.

“En ese caso, ¿qué será de la casa de Alphan?”

“Naturalmente, serán despojados de su rango. La gente de la capital insistiría en que la casa de un duque debería continuar sin importar qué, pero cuando se trata de un rango como el de vizconde, se dejará que el duque Genos lo maneje solo. Todo lo que tendrá que hacer es enviar un totos para llevar las noticias a la capital”, dijo Polarth, y luego estalló en una leve sonrisa. “Bueno, sin embargo, eso puede resultar una buena noticia para ellos. Para alguien que no lo quiere, un título no es más que una carga. A cambio de dejar de lado el honor y la vida fácil que disfrutan los nobles, han ganado su libertad. Es probable que Lady Tetia y el jardinero sean encarcelados por un tiempo, pero una vez que hayan pagado por sus crímenes, creo que les pediré que trabajen para la casa de Daleim”.

“Hmm. Entonces, ¿qué pasa con Lady Nicola?”

“Creo que le pediré que trabaje para mí mientras espera el regreso de su hermana y pareja. Nuestro jefe de cocina está buscando asistentes en este momento, por lo que tal vez pueda desempeñar ese papel”.

“Oh, ya veo”, comentó Kamyua Yoshu con una sonrisa. Parecía despreocupado y natural, lo cual era inusual en él. “Bueno, entonces, te dejo el resto a ti. Y por favor dale mis saludos al Duque Genos.”

“¡Cierto! ¡Y la próxima vez te invitaré a mi casa!”

Después de despedirse de Polarth, quien los saludó con la mano cuando se fueron, Kamyua Yoshu y Leito atravesaron la puerta.

La pareja paseó por el camino pavimentado de piedra que atraviesa la ciudad del castillo, uno al lado del otro. Todo el lugar parecía brillante y animado, sin saber nada de la tragedia que había ocurrido en la mansión Alphan.

“Um, todavía hay una cosa que no entiendo del todo…”, dijo Leito mientras caminaban.

Con un “¿Hmm?” Kamyua Yoshu le envió una mirada inquisitiva.

“Incluso con su falta de fuerza, Lady Nicola podría haber acabado con la dama sin dejarla caer de la cama, ¿verdad? Pero llegaste a la conclusión de que Lady Mateela perdió la vida debido a su propio descuido. No puedo entender por qué.”

“Traté de no entrar en esto con ningún tipo de conclusión en mente. Estuve observando los cambios en la expresión y las acciones de Lady Nicola todo el tiempo que estuve hablando. La única razón por la que inicialmente dije que ella no era la culpable fue para hacer que bajara la guardia”, respondió Kamyua Yoshu con indiferencia. “Aun así, no esperaba que fuera tan hábil para ocultar sus emociones. Parecía tener una voluntad y nervios más fuertes que la mayoría, pero no pensé que fuera del tipo insensible que dañaría a sus propios parientes. Así que supuse que era inocente a pesar de la falta de pruebas sobre ese punto… Si no, su alma eventualmente será juzgada por el dios occidental en nuestro lugar”.

“Realmente no puedo estar a tu altura, Kamyua…” comentó Leito con un profundo suspiro. “Aunque estaba justo a tu lado, viendo las mismas cosas, no pude llegar a las mismas conclusiones. Lo siento por ser un aprendiz tan indigno.”

“Estás siendo un poco dramático allí. ¿Qué edad tienes, Leito?” “Ya lo sabes. Este año cumplo once.

“¡Tan joven!” Kamyua Yoshu se rio entre dientes. “Cuando tenía once años, era solo un desastre tembloroso que no sabía nada sobre cómo funcionaba el mundo. Eres sorprendentemente maduro en comparación, Leito.”

“Sin embargo, solo ser maduro no es suficiente. Ya quiero ser un adulto”.

“Los años pasarán de todos modos, así que ¿por qué no disfrutar de tu juventud al máximo por ahora?” Kamyua Yoshu respondió con una sonrisa, acariciando la cabeza de Leito con su gran mano. Eso también era bastante diferente a él.

“Um, esto me hace sentir aún más como un niño…”

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“A los once años, absolutamente eres un niño. No hay necesidad de obligarte a ser otra cosa”.

“Sí, y supongo que tienes treinta, Kamyua”.

“¡Tengo veintinueve años! ¡Qué horrible decir eso cuando lo sabes mejor!” Incluso mientras se quejaba, su mano permaneció fija en su lugar. El calor ayudó a su aprendiz a sentirse más tranquilo. “Escucha, Leito, puede ser cierto que eres mi aprendiz, pero eso es solo como guardaespaldas. Todo lo que puedo enseñarte es cosas como cómo blandir una espada o montar un totos.”

“Lo sé. Quiero trabajar duro para convertirme en alguien como tú, a mi manera”.

“¡¿Por qué pretendes ser alguien como yo?! Me imagino que si le dijeras eso a cien personas, hasta el último de ellos se opondría firmemente”.

“Bueno, entonces yo sería el centésimo primero”.

Con una sonrisa forzada, Kamyua le dio varias palmaditas en la cabeza a Leito y finalmente le quitó la mano.

“Es bastante seguro que un tipo como yo terminará muriendo como un perro. Creo que serías mucho más feliz tratando de tener una vida más cómoda”.

“Sí, Bartha de Masara me advirtió que no morirías en paz”.

“Sí, y eso es natural. Es extremadamente importante cómo muere una persona. No importa cuán bendecida sea la vida que vivas, si al final terminas siendo odiado por tu familia, entonces todo fue en vano, ¿verdad?”

Debe haber estado hablando de Dame Mateela.

¿Tuvo Mateela la culpa de fijarse en el título de vizconde?


¿O fue Tetia, por no poder contener sus emociones?

¿Quizás el padre de Tetia por tener un hijo con su sirvienta?

¿Quizás incluso la madre de Tetia por no rechazar los avances de su empleador?

Eso estaba más allá de las capacidades de Leito para discernir.

“Todavía tengo solo once años, así que realmente no puedo imaginar mi muerte ideal… Pero me gustaría vivir una vida que me satisfaga y aceptar lo que me espera al final”.

“Hmm. Seguro que da miedo, ver a un niño de once años pensar tan lejos…”

“Tienes poco menos de treinta, Kamyua, ¿puedes imaginar cómo morirás?”

“¡Deja de enfatizar treinta así! De todos modos… incluso si muero como un perro, me gustaría que mi alma fuera solo al dios occidental mientras me reía como un tonto”, dijo Kamyua Yoshu mientras soltaba una risita tonta. Miraba a lo lejos como si escrutara algo. “Sabes, pensando en ello, es posible que Mateela tuviera una muerte sorprendentemente feliz, creyendo que Lady Nicola se convertiría en la heredera mientras perecía. Son los que quedan atrás los que tienen que sufrir”.

“¿Es por eso que no tendrás un hijo propio, Kamyua?”

“¿Quién puede decir?” Kamyua Yoshu se rio entre dientes. “Bueno, no creo que alguna vez sienta el impulso de tener un hijo en este momento, pero estaría satisfecho si al menos pudiera ver a mi amado aprendiz capaz de valerse por sí mismo como guardaespaldas.”


“Haré todo lo posible para estar a la altura de sus expectativas”.

“Sí, dalo todo”, comentó Kamyua Yoshu con una sonrisa. “Ahora bien, creo que nos queda al menos tiempo suficiente para un refrigerio, así que ¿qué tal si nos apresuramos a regresar a la ciudad postal?”

“Claro.”

Aunque habían estado juntos durante dos años, Leito todavía solo entendía parcialmente a Kamyua Yoshu. Viajó a donde quiso, ignorando los tabúes y sin preocuparse nunca por la ira de ningún dios, ganándose tanto el respeto como el desprecio de muchas personas a lo largo del camino. Entonces, ¿era feliz o no? Quizás Leito había permanecido a su lado todo este tiempo por el deseo de conocer la respuesta a esa pregunta.

Aun así, de cualquier manera, quiero ser como tú, Kamyua, pensó Leito mientras perseguía a su inusual maestro por el camino de piedra.

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[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

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