Sekai Saikou no Ansatsusha (NL)

Volumen 6

Capítulo 8: El Asesino Hace Un Voto

Elegí hacer de la celebración un buffet de pie, colocando un trío de pequeñas mesas de bar en el medio de la habitación y la comida a lo largo de las paredes. Esta configuración permitió a todos tomar la comida que querían y hablar con quién quisieran mientras comían.

“Empieza llenando tus platos. Brindaremos después de eso” anuncié.

“Vaya, hay tanta comida que no sé ni por dónde empezar. ¡Oh, gratinado! Lo pones en el caparazón de un cangrejo. Eso es tan lindo. ¡Gracias por hacer mi comida favorita, Lugh!”. Dijo Dia emocionada.

El gratinado siempre se veía descuidado y asqueroso después de ser picoteado. No quería que eso sucediera, así que lo vertí en pequeños caparazones de cangrejo y los horneé juntos. Para evitar que el resto del cangrejo se desperdicie, cociné la carne en el gratinado y usé mantequilla de cangrejo para la salsa, creando un gratinado de cangrejo de alta calidad. La apariencia y el sabor se complementan bien.

“Todo se ve tan delicioso que es difícil elegir”, expresó Tarte.

“Ha pasado mucho tiempo desde que comí tu comida, querido hermano.

No se me ocurre mejor festín que uno preparado por ti”, afirmó Maha.

“Esto se ve increíble, Cian”, dijo mi madre.

Sonriendo, mi padre respondió: “Así es. Vamos a tomar algo de comida.”

Elegí este formato para la fiesta a pesar de que solo había seis asistentes porque mis padres dijeron que querían tiempo para hablar con cada una de mis prometidas individualmente. Si hubiera sido una fiesta sentada, habríamos tenido que cambiar de asiento con frecuencia, lo cual era una idea desagradable. Dia también había mencionado que esperaba hablar con Maha a solas, y Tarte y Maha eran grandes amigos y probablemente tenían mucho de qué hablar.

Realmente son hermosos. Volví a observar a mis prometidas. Los vestidos que Maha había seleccionado les quedaban deslumbrantes.

El vestido de Dia era principalmente blanco y tenía muchos adornos. Parecía un hada encantadora. Tarte estaba envuelta en un vestido amarillo hinchado que mostraba una cantidad audaz de escote. Los acentos rojos en el atuendo se adaptaban a su cálida personalidad. También era sexy. Maha usó un vestido morado maduro que se quitó impecablemente. Las rendijas revelaron sus piernas. Era hermosa, elegante y seductora.

Cada prenda ha sido confeccionada por un diseñador de élite con los mejores materiales. Que Maha los consiguiera con tan poca antelación fue realmente impresionante.

“Parece que todos han recibido algo de comida. Me gustaría dar un breve discurso antes del brindis. Primero, quiero agradecer a Dia, Tarte y Maha por enamorarse de mí. Los tres son hermosos y talentosos. Cada uno de ustedes podría haber elegido a cualquier hombre, y estoy feliz de que me hayan elegido a mí. Esa selección no fue un error, y les demostraré eso todos los días de nuestras vidas en el futuro”.

Siempre he odiado la humildad. Era común en momentos como este ser autocrítico mientras le agradecías a tu prometida por elegirte. “No sé lo que ella ve en mí”, “No la merezco”, y cosas por el estilo. Sin embargo, eso sería como decirles a las chicas que carecían de buen ojo para los hombres. Yo no los insultaría así.

Por eso declaré que elegirme no fue un error. Me di cuenta de que solo estaba haciendo las cosas más difíciles para mí al decir eso, pero si no podía cumplir con esa promesa, no las merecía.

“Haré felices a todos ustedes. Sin embargo, tengo una petición. Por favor, haz tu mejor esfuerzo para traerme alegría también. Si todos trabajamos juntos para traer felicidad a la vida de los demás, construiremos un futuro mejor del que podría lograr solo con mis esfuerzos. Mamá y papá son los ejemplos perfectos. Quiero hacer un hogar tan cálido como el que tienen”.

Antes de mi reencarnación, existía solo como una herramienta para matar.

No sabía nada de la preciosidad y el calor de la vida.

Había considerado el amor familiar y romántico como nada más que métodos para ayudar a mis asesinatos. Me había acostado con demasiadas personas para contarlas y les susurraba dulces palabras al oído, pero mis palabras siempre eran huecas. Fue solo después de que nací en la familia Tuatha Dé bajo mis amados padres que el amor se volvió real para mí.

Mis padres me transformaron de una herramienta a una persona. Estaba agradecido por eso, y los admiraba profundamente.

“Por supuesto, Lugh. No quiero que esta sea una relación unilateral”, respondió Dia.

“Soy tuya, Lord Lugh. ¡Nuestro compromiso no hace nada para cambiar el hecho de que vivo para ti!” Tarte declaró.

“Siento lo mismo que Tarte. Sin embargo, voy a aflojar un poco mi autocontrol”, respondió Maha.

Eso era lo que quería escuchar. Me conmovió profundamente. Que pudiera sentir tanta emoción sin una pizca de inquietud probó que eran los compañeros perfectos para mí.

“Eso es todo de mi parte. Pasemos al brindis” dije.

Todos levantamos nuestras copas. El alcohol que serví era uno local hecho en Tuatha Dé. El ingrediente principal era el jarabe de arce. El jarabe de arce solo se podía cosechar durante un período de tiempo muy pequeño en invierno, y un solo árbol no producía tanto. Se agotó antes de que saliera de nuestro dominio, lo que lo convirtió en un lujo que solo podían disfrutar los ciudadanos de Tuatha Dé. Por eso elegí este alcohol para el brindis de nuestra fiesta de compromiso.

“¡Salud!”

Chocamos nuestras copas y sonreímos. Con eso, comenzaron las verdaderas festividades.

***

Mis padres se pusieron manos a la obra en sus entrevistas con mis prometidas, convocando primero a Maha. Ante esto, Dia, Tarte y yo nos sentamos en una mesa, mientras mi madre y mi padre tomaron otra con Maha.

Sonriendo, Dia dijo: “Heh-heh, creo que empezaré con el gratinado que hiciste para mí”.

“Algunas cosas nunca cambian,” dije.

“Yo, por mi parte, creo que es extraño cómo siempre guardas lo mejor para el final, Lugh. La comida sabe mejor si la comes mientras tienes hambre. ¡Wow, este cangrejo gratinado es increíble!”

Claramente teníamos diferentes preferencias cuando se trataba de cenar.

Siempre me ha gustado guardar mi parte favorita de la comida para el final.

“Um, ¡¿qué es este pez esponjoso?! ¡Este es el pescado más delicioso que he probado en mi vida!” exclamó Tarte.

“Eso es anguila. Esta es la mejor manera de comerlo”.

La comida fue bien recibida y el entusiasmo aumentó en la sala. Dia y Tarte estaban comiendo mucho más de lo habitual. Miré a Maha y la vi disfrutando de una animada conversación con mis padres, a pesar de que nunca se habían visto antes. Sus habilidades sociales no tenían rival. Mezclarse en la alta sociedad y soportar su maldad desenfrenada a diario como representante de Natural You era algo que no muchos podían lograr.

“Maha es tan bonita”, comentó Dia.

“Estoy celosa. Ella es tan madura. No puedo creer que tenga la misma edad que yo”, se lamentó Tarte.

La apariencia, los modales y la forma de hablar de Maha eran todos elegantes. Gran parte de eso era natural, pero ella no habría alcanzado este nivel de refinamiento sin trabajar duro también. Las personas eran reconocidas como adultas a los catorce años en este país, y aunque la mayoría conservaba un comportamiento infantil a esa edad, no había señales de eso con Maha. Le dio una ventaja.

“Si bien ustedes dos no están a su nivel, ambas pueden actuar lo suficientemente maduras en ocasiones formales. Sin embargo, tienes la costumbre de dejar que tus verdaderas personalidades emerjan a veces…

Lo que distingue a Maha es su capacidad para mantenerse así todo el tiempo”.

Dia y Tarte eran muy atractivas, y más que parecían la parte de la alta sociedad. Ambas eran perfectamente capaces de utilizar eso; Dia había recibido una formación exhaustiva en el arte de la etiqueta como hija del conde Viekone, y yo había entrenado a Tarte para que sirviera sin problemas como la doncella de un noble sin avergonzarse a sí misma ni a mí. Incluso entonces, no pudieron mantenerlo en todo momento.

“Simplemente pierdo todo el deseo de actuar si no estoy en ese tipo de situación”, admitió Dia.

Tarte asintió. “Yo también. Creo que ser capaz de mantenerlo funcionando veinticuatro siete como lo hace Maha es un talento”.

No estaba dispuesto a estar en desacuerdo. Dicho esto, Maha se comportó como una adolescente ordinaria cuando estábamos solos, pero lo mantuve en secreto.

Maha volvió a nuestra mesa y Dia se puso de pie para unirse a mis padres. “Bienvenido de nuevo. ¿Qué dijeron mamá y papá?” Yo pregunté. “Me pidieron que cuidara de ti”, respondió Maha. “¿Pudiste obtener su aprobación, entonces?”

“Me aprobaron desde el principio. Dijeron que confiaban absolutamente en tu juicio sobre las mujeres. Sólo querían tranquilidad. Les dije qué tipo de persona era sin ocultar nada”.

Mis padres realmente tenían fe en mí.

“Eso es bueno escuchar.”

“Sí. Me alivia que parezcan buenas personas. Creo que salió bastante bien. Sin embargo, tengo un problema. Quiero seguir administrando Natural You, pero no podemos desarraigar exactamente a la familia de Tuatha Dé… Encontrar una manera de vivir juntos va a ser difícil”.

Eso era cierto. No podíamos abandonar el dominio Tuatha Dé y Maha no podía abandonar Natural You. La empresa hacía negocios por todo el país, o mejor dicho, por todo el mundo, pero su centro seguía siendo la tienda insignia de Milteu. Como la ciudad portuaria más grande del país, Milteu era un centro de información y distribución. Moverse desde allí fue un golpe letal para un comerciante.

“Iré a verte tan a menudo como pueda. ¿Qué tal si traigo a mamá y papá la próxima vez para que podamos hacer turismo juntos?” Yo ofrecí.

Maha suspiró. “… He sido capaz de soportarlo hasta ahora, pero vivir separados después del matrimonio sería miserable. Así que tengo una propuesta para ti”.

“Tengo un mal presentimiento sobre esto.”

“Traslademos aquí la tienda insignia de Natural You”.

“¿Qué crees que podrás lograr después de migrar la tienda principal a una región rural como esta?”

“Voy a desarrollar Tuatha Dé en una región aún más grande que Milteu. Si puedo hacer eso, entonces la tienda no estará fuera de lugar aquí en absoluto”.

No podía creer lo que decía Maha. Milteu se había convertido en lo que era en gran parte por su ventajosa ubicación. Estaba justo en el medio de la nación, por lo que era fácil viajar. Las carreteras circundantes estaban bien mantenidas y era el puerto más grande del país, lo que facilitaba mucho el transporte de mercancías.

Tuatha Dé, por otro lado, estaba ubicado en el borde occidental de Alvan. No poseía acceso al océano. Ni siquiera había un río lo suficientemente grande para que pasaran los barcos. Incluso viajar aquí por tierra era difícil debido a las montañas en el camino. Era una región central increíblemente desfavorable para la distribución.

“Convertir Tuatha Dé en una ciudad de comercio no es realista”, dije.

“Soy consciente de eso, pero tengo un plan para hacerlo posible. Vas a quedar impresionado. Sin embargo, probablemente tomará más de una década lograrlo”, respondió Maha.

“Supongo que tienes la intención de mantener en secreto los detalles de este plan”.

“Sí, será más divertido de esa manera”.

Bueno, conociendo a Maha, dudo que salga nada malo. Ella no cambiaría a Tuatha Dé de una manera que yo desaprobara.

Continuamos hablando hasta que terminó la conversación de Dia con mis padres. Dia caminó… hacia la comida a lo largo de las paredes, no hacia nosotros. Esta vez eligió langosta frita. Tarte se acercó a mis padres después de que mi mamá le hizo señas. Dia volvió a mi mesa poco después.

“Wow, esto es tierno y dulce. La salsa agria también es increíble. Ahh, esto es una bendición”, dijo Dia, claramente encantada.

“… ¿Así qué? ¿Qué opinas?” cuestioné

“Es absolutamente delicioso”.

Me refiero a tu charla con mis padres.

“Estuvo bien. Se emocionaron mucho, me presionaron para que tuviera hijos lo más rápido posible y se aseguraron de que yo supiera que, aunque soy la primera esposa, el heredero podría no terminar siendo mío porque se elegirá al hijo más talentoso. Ya sabes, cosas típicas.”

“Suena bastante pesado para mí”. Solo un noble nacido como Dia consideraría tal discusión tan a la ligera.

“Es lógico que el niño más talentoso herede la casa. Además, estoy bastante segura de que será uno de los míos. Las mujeres de la Casa Viekone siempre dan a luz una descendencia fuerte. Vas a amar a nuestros hijos. ¡Trabajaré duro como tu esposa!”

Esa no era una creencia infundada sino la pura verdad. Después de todo, mi madre, una mujer de Viekone, me dio a luz, la Tuatha Dé más grande de la historia, y Dia fue una vez el objetivo de nobles prominentes en Soigel que querían secuestrarla.

Nací como Lugh Tuatha Dé porque la diosa lo juzgó como el niño más dotado de toda la humanidad. Fue asombroso que mi madre diera a luz a un niño que superó a cualquiera de la Casa Romalung, que había realizado siglos de crianza selectiva. La sangre de Viekone fue lo que lo hizo posible.

Mi madre una vez fue atacada por nobles al igual que Dia, y mi padre fue quien la llevó a un lugar seguro. No podía creerlo cuando me contó esa historia. Había mostrado una pasión y una temeridad que no podía imaginar de él ahora, y no sabía que ese lado de él alguna vez existió.

“No tienes que preocuparte por eso. Solo quiero que mis hijos sean felices”, dije. Quería atesorar a todos mis hijos, sin importar cuán talentosos fueran.

“Amaré a mis hijos pase lo que pase, pero estarán más seguros cuanto más capaces sean. Los nobles inevitablemente llevan vidas difíciles. Voy a criarlos para que sean fuertes, por su propio bien. ¡Seré un maestro estricto!” declaró Dia.

“No seas demasiado duro con ellos”.

“Hmm, no creo que seas alguien para hablar, Lugh. Los presionarías mucho más que yo. Te conviertes en un demonio durante nuestras sesiones de entrenamiento.”

“Sin embargo, no creo que sea severo”.

Todo lo que hice fue analizar los cuerpos de Dia y Tarte y empujarlas a la máxima eficiencia dentro de sus límites físicos. No los estaba sobrecargando.

“Lo que tú digas, Lugh. Ah, Tarte ha vuelto.” Tarte volvió a nuestra mesa. “¿Te fue bien?” Yo pregunté.

“S-Sí. Ellos, um, me dieron muchos consejos sobre cómo convertirme en la esposa de un noble. Dijeron que debería estar preparado para los comentarios sobre mi nacimiento cuando asistiera a funciones en la alta sociedad y otras cosas por el estilo. Tendré en cuenta lo que dijeron”, respondió Tarte.

Mis padres se concentraron en darle consejos en lugar de juzgarla por su aprobación. Tarte había vivido con nosotros durante años y básicamente había sido un miembro de nuestra familia. Mi madre y mi padre probablemente no tenían nada más para probarla en este punto.

“También dijeron que eres pasivo con respecto a las mujeres, por lo que sería mejor para mí tomar la iniciativa. Mamá dijo que ella, um, me enseñaría un truco realmente efectivo para… ponerte de humor,” continuó Tarte, sonrojándose profundamente en la última parte.

A veces no podía creer a esa mujer.

“… No necesitas pensar demasiado en eso”.

“Si mi señor. ¡Haré mi mejor esfuerzo!”

Estaba extremadamente preocupado por eso. Tendría que tener cuidado con Tarte por un tiempo. No me desagradaban los avances sexuales de ella, pero tenía que pensar en mi orgullo.

Mis padres me llamaron a continuación. ¿Qué querían discutir?

***

Me acerqué a la mesa de mis padres. Ambos tenían expresiones serias. Estaba acostumbrado a eso por parte de mi padre, pero era una vista inusual de parte de mi madre.

“Tus prometidas son todas personas maravillosas. Parece que tienes un gran gusto por las mujeres, además de todos tus otros talentos”, dijo mi padre.

“¡Lo hiciste muy bien, Lugh! Estoy tan feliz de tener tres hijas maravillosas”, aclamó mi madre, dándome un pulgar hacia arriba.

“Sí, todas son chicas geniales”, estuve de acuerdo.

“Dicho eso, tomarlas a todas como tus esposas será difícil. Solo Esri ha sido más que suficiente para mí”, afirmó mi padre.

Con una sonrisa superficial, mi madre preguntó: “¿Qué quieres decir con eso?”

“Ahem… Baste decir que el matrimonio es una tarea difícil”, advirtió mi padre.

“Soy consciente de eso. Tomé esta decisión con la determinación de hacerlos felices a todos. No importa cuán difícil resulté ser nuestra vida, será mejor que verlas arrebatadas por otros hombres”, respondí.

Casarme con los tres no había sido mi plan inicial. Pensé que elegiría uno eventualmente y que apoyaría a cualquiera de ellos si elegían otro esposo.

Pero cuando vi que alguien le propuso matrimonio a Maha mientras yo ya estaba ligado sentimentalmente a Dia y Tarte, me invadieron intensos sentimientos de pérdida, miedo e ira ante la idea de que me la robaran. Fue en ese momento que me decidí. No dejaría ir a ninguno de ellos. Los haría felices a todos.

Estaba convencido de que la alegría que ganábamos compensaría cualquier dificultad que encontráramos. También decidí que si iba a persistir en este egoísmo, necesitaba darles mejores vidas que cualquier otro hombre en el mundo.

“Es bueno que estés entrando en esto con la mentalidad correcta. Ahora debes cumplir tu palabra.” Había una mirada severa en los ojos de mi padre.

“Naturalmente. Sé que soy capaz de ello. Ese es el tipo de persona que me criaste para ser, después de todo” le aseguré.

“Dios mío, mi pequeño Lugh se ha convertido en un buen joven. ¡Quiero ver las caras de mis nietos lo antes posible, así que espero que se pongan manos a la obra!”. mi madre dijo.

“Tendrás que esperar un poco más para eso”.

Mi plan era no tener hijos hasta después de salvar al mundo. Además de ser mis prometidas, Dia, Tarte y Maha fueron fundamentales en mi batalla contra los demonios.

“Tacaño” dijo mamá, mirándome. Ella no iba a ceder a ese deseo.

Hablamos del futuro a continuación. Mis padres estaban sonriendo. En la mesa de al lado, mis tres prometidas se divertían charlando sin mí. Dado este cálido ambiente familiar, sabía que las cosas iban a ir bien. Todos eran tan buenas personas.

Daría todo de mí para proteger esta felicidad. Y mientras reflexionaba sobre esa determinación, la fiesta de compromiso se prolongó hasta altas horas de la noche.