Buta Koushaku ni Tensei Shitakara, Kondo wa Kimi ni Suki to Iitai (NL)

Volumen 6

Capitulo 5: Profesora Yugiri

Parte 3

 

 

Desde su posición en el suelo, la profesora Yugiri no podía ver a Charlotte y al Gran Espíritu de la Oscuridad ya que las dos se habían atrincherado dentro de las ruinas. Por lo que parece, el Gran Espíritu estaba encantando continuamente el edificio con un hechizo de glamour que hacía difícil verlas, y la profesora ni siquiera se había dado cuenta de nuestra sesión de gritos antes. Eso fue un suspiro de alivio para mí… pero el hecho de que su fuerza vital estaba siendo arrebatada con avidez por los espíritus también le dificultaba darse cuenta de otras cosas… Y ahora incluso logró ponerse de pie. ¡Perfecto, simplemente perfecto! Yo estaba al extremo de mi ingenio.

“Profesora, poder volver a levantarse en tan poco tiempo significa que su poder ha superado al de un dragón, ¿lo sabía?”


“Ja, ja, así que actualmente soy más grande que una bestia así…,” se rió. “Pero debes decirme una cosa, Slowe Denning. ¿Soy aterradora en este momento, incluso para alguien de tu capacidad?”

“Tu realmente lo eres. Eres aterradora, especialmente teniendo en cuenta que sería carne muerta en el momento en que el veneno que sale de tu espada me tocase.”

“Ya veo; Tenía razón… Pero en mi estado actual, hacer esto parece perfectamente normal. En mi mente, así parece ser como siempre he actuado. A pesar de pensar que algo anda mal, no puedo cuestionar mis acciones. Esto es probablemente lo que llaman tener una mente rota.”

Guardé un grave silencio mientras escuchaba hablar a la profesora.

“Mírame. He sido reducida a nada más que una mujer tonta que no merece vivir, ya sea como un caballero, como un noble o incluso como un ser humano.”


Después de un momento en el que ninguno de los dos podía hablar, la profesora continuó. “Slowe Denning, eres poderoso. Posees verdadera fuerza, un tipo que difiere de esta imitación barata que estoy manejando en el presente.”

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Había una montaña de diferencia entre esta batalla y cuando luché contra Dreibach Steibelt en Zenelaus. La oponente a la que me enfrentaba ahora había recuperado su racionalidad.

La profesora terminó su discurso en un tono sombrío lleno de desesperación. “Veo que ya no planeas correr por ahí.”

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“Yo no. No puedo, y no debo, huir de usted tal como están las cosas, profesora.”

La profesora Yugiri sabía que su vida casi se había quemado hasta el final de su mecha. No podría hacerle tal cosa.

Para agregar a eso, Charlotte había dicho que si la observaba de cerca, podría captar algo. No necesitaba ninguna evidencia para convencerme de sus palabras. Confiaba en Charlotte y no tenía intención de rehuir como un ratón.

“¿Moriré yo primero, o tú?” ella reflexionó. “Pero, si ganas… Por favor acaba conmigo en un instante. A decir verdad, no puedo tolerar el dolor.”

Mis ojos se abrieron. “No esperaba eso. ¿Puedo difundir eso en la escuela?”

“No lo harás. Pude dejar a mis alumnos con una buena lección final que les dejó una impresión. No arruines la imagen que tienen de mí.”

“Solo entre usted y yo, profesora, nunca imaginé que todos la adoraran tanto.”

“Yo tampoco. Había pensado que los estudiantes me despreciaban porque esa era la reacción normal a mis formas de disciplina…”

La profesora Yugiri permaneció bajo la influencia de mi hechizo incluso mientras hablaba. Sin embargo, todavía logró avanzar, paso a paso, para cerrar la distancia entre nosotros.

Con una sonrisa irónica en sus labios, dijo: “Pero parece que tú fuiste la excepción y me odiaste hasta el final.”

“¿Así que estabas al tanto?”

“Por supuesto. Después de todo, eres el honorable futuro Caballero Guardián de la Princesa Carina…”

Vi como el maná de la bruja hizo que todo tipo de espíritus se juntaran alrededor del cuerpo de la profesora en un enjambre mortal. Nunca he visto un hechizo tan complicado en mi vida. Eliminar esto sería completamente imposible para mí en este momento… Estoy completamente agotado con estas heridas en todo mi cuerpo.

“Hablando de eso, había algo más que quería decirle, profesora.”

La bruja del norte comienza su lavado de cerebro explotando la debilidad de alguien. Cuando la profesora llegó por primera vez a Kirsch, escuché que no había sido capaz de encajar y que estaba muy nerviosa. La bruja probablemente fijó su mirada en la grieta que notó en la armadura mental de la profesora, formada por su vida como Caballero Real, y se acercó a ella. Incluso en el anime, esa bruja había usado medios similares para ganarse a los camaradas de Shuya.

Reuniendo mis pensamientos, dije: “Gracias a ti, muchas personas que sufrieron un incidente traumático se salvaron. Estoy seguro de que sabes lo que estoy tratando de decir.”

Se quedó en silencio por un momento, luego simplemente dijo: “No fui yo.”

“No, lo he oído todo. Fuiste tú quien le dijo a Tina que dirigiera a los alumnos dolidos hacia ti. También mencionó que había momentos en los que ponías cara de profesor estricto, pero que también había momentos en los que esa etiqueta no se aplicaba. Cuando no eres profesor, eres una persona de muy buen corazón, y… también dijo que estabas muy preocupada por mí porque me habían elegido como Caballero Guardián. Después de que Tina me dijera todo esto, finalmente me di cuenta de la verdad. Profesora, usted estaba tratando de….” Me detuve.

La profesora se quedó callada. Ella no tuvo refutaciones, ninguna respuesta.

Yo continué. “Estabas tratando de enseñarme el sufrimiento que traería la vida de un caballero lo mejor que pudiste. No fue por despecho o celos por no haber sido elegida. Estabas tratando de decirle al ignorante Slowe Denning que el camino del Caballero Guardián es un camino hecho de espinas, y estabas tratando de disuadirme de caminar por él. Tengo razón, ¿no es así, profesora?”

Su silencio era más revelador que cualquier otra cosa. Así es. Ella estaba tratando de ponerme a prueba. Ella sabe más que nadie sobre las dificultades del título y, por lo tanto, siempre me preguntó si realmente tenía la determinación de asumirlo. Pero… probablemente era demasiado torpe para tener tacto al respecto.

“Nunca me habría dado cuenta de cómo me estaba enseñando, profesora Yugiri…” murmuré.

La pausa después de eso pareció extenderse por una eternidad, pero la profesora finalmente la rompió. “En solo unos pocos pasos más, estarás al alcance de mi espada. Dime… ¿Cómo planeas derribarme en mi estado?”

“A decir verdad, tengo un plan secreto que ni siquiera usted podría adivinar, profesora.”

“Ya veo… me alegro de escuchar eso.”

El Gran Espíritu de la Oscuridad dijo que podría ver algo si me acercaba a la profesora. Pero no lo veo. No todavía. Solo podía sentir la desesperación tirando de mí al ver a la profesora cautiva en un intrincado y complejo hechizo.

O al menos…

“Date prisa… y mátame, Slowe Denning.”

… eso era lo que pensaba hasta que me di cuenta de eso.

“Si todavía estás completamente a oscuras, Slowe Denning, ¿te doy una pista?”

Con la ayuda de los espíritus, la voz de Nanatrij me llegó. Su oferta era muy tentadora, pero bueno, ya no la necesitaba. A mis ojos, los espíritus eran seres visibles en este mundo, y finalmente había encontrado lo que estaba buscando. Vi el más mínimo temblor en el hechizo que rodeaba a la profesora.

“Finalmente lo notaste. Ella todavía se resiste. Diría que en este punto, llamarla una perdedora terriblemente dolorida ni siquiera sería suficiente.”

Incluso en este mismo momento, la bruja continuó vertiendo su maná en el hechizo y controló a la profesora como una marioneta. Sin embargo, dentro de este hechizo tan potente que incluso me dio náuseas, pude discernir momentos en los que parpadearía.

Podría decir que fue causado por los elementos del agua, la luz y el viento; los tres elementos transmitidos en la línea de sangre de la profesora.

“Esto ha sido más que suficiente, Slowe Denning… No me humilles más de lo que ya lo he hecho.”

“Esa pequeña distorsión interna en el hechizo… Con tu habilidad para ver espíritus, seguramente puedes convertir eso en un trampolín hacia la victoria, ¿no?”

Una vez que alguien abrazaba por completo el hechizo de la bruja, no había posibilidad de liberarse. Incluso yo había pensado que la profesora Yugiri había caído completamente en las garras de la bruja… Pero en verdad, ella había estado luchando todo este tiempo.

El hechizo de Francisca era demasiado laberíntico para ser destruido por una fuerza externa. Sin embargo, si había incluso un agujero que se conectaba a su interior, no importaba cuán pequeño fuera, ya no era imposible atravesarlo. La profesora había roto el hechizo muy levemente, y gracias a eso, había encontrado el hilo que me llevaría a través del laberinto.

“Pero está fuera de discusión para ti en este momento ya que te estás enfocando en la Manipulación de la Gravedad, ¿verdad? La distancia también lo hace difícil…”

Ella es tan aterradora… ¿Cómo se dio cuenta de eso? En este momento, tengo las manos ocupadas con la detención de la profesora. ¡No puedo lanzar otro hechizo encima de esto! Durar tanto contra alguien tan superior a mí es un milagro en primer lugar.

“De todos modos, detendré a esa dama en seco por ti. Oh, asegúrate de que no se dé cuenta de mi presencia hasta el último momento. Para hacer eso… ¡Bueno, estoy segura de que sabes qué hacer!

Estaba completamente asombrado. Parecía que el Gran Espíritu de la Oscuridad lo sabía todo. Sabía que para superar el hechizo de la bruja, necesitaba acercarme lo más posible a la profesora. Idealmente, quiero estar justo en frente de ella, pero si me acerco tanto, estaré al alcance de su espada. ¡Si eso sucediera, me cortarían la cabeza antes de que pudiera liberarla del hechizo! El espíritu lo dijo tan fácilmente, pero para mí, su sugerencia fue como pedirme que me colgara voluntariamente del borde de un pozo sin fondo…

“¡Si planeas aceptar mi propuesta, no me muestres esa cara de ‘el mundo se va a acabar’! ¡Sonríe un poco!”

Finalmente lo resolví. Esta no era una batalla contra la bruja. Era una simple pregunta de sí o no de si podía confiar en el Gran Espíritu de la Oscuridad… y si podía confiar en Charlotte.

En ese caso, no tengo nada que dudar. La profesora se está acercando lentamente pero con seguridad y eso me asusta muchísimo, pero he descubierto sus verdaderos sentimientos. Asi que…

Dejé que el trazo de una sonrisa levantara las comisuras de mis labios.

En las ruinas detrás de la profesora, noté que Charlotte se movía, tratando de hacerme un gesto. ¿Ella… está tratando de decirme que debo huir después de todo?

No puedo hacer eso, no puedo huir, Charlotte. ¡La profesora Yugiri sigue luchando! Ella está tratando de darme una lección final significativa incluso si eso significa perder su vida.

La profesora Yugiri siempre me preguntaba una cosa en sus conferencias sin falta: “¿Tienes la resolución necesaria para el título?” Cada vez, la escuchaba solo a medias, lamentando mentalmente que fuera tan regañona, pero realmente había hablado en serio. En serio sobre mí.

La profesora me apoyaba y estaba de mi lado. Se preocupaba seriamente por mi futuro, y nadie podía sustituirla.

“Finalmente lo descubrí, profesora. Eres mucho más amable y tímida de lo que deja entrever tu apariencia. Tu naturaleza no encaja bien con el trabajo de un Caballero Real, ¿sabes?”

“Realmente… no vas a correr, eh…”

“No lo haré, porque he aprendido tus verdaderos sentimientos, Profesora No-eres-muy-Honesta-Después-de-Todo. Y si te soy sincero, estoy en mi límite. Corrí mucho porque me perseguiste, así que estoy completamente sin energía.”

Hizo una pausa y luego murmuró: “Por eso te dije tantas veces que no debes mantener ese estilo de vida descuidado.”

“Sí. Tenías toda la razón.”

Antes de que me diera cuenta, la profesora se paró justo frente a mí con su espada en la cadera. Ella había destrozado por completo mi hechizo de Manipulación de Gravedad. Quizás lo más temible aquí son las habilidades de la bruja.

“Debería haberte dicho todo antes. Solo un tonto asumiría el puesto de Caballero Guardián. Debes centrarte únicamente en tu propia felicidad. Incluso podrías huir a un país extranjero con tu sirvienta.”

Una vez más, la profesora Yugiri colocó su mano sobre la espada en su cadera. Lentamente, muy lentamente, la sacó… y su punta se posó justo contra mi cuello. Con un movimiento de su muñeca, pudo separar fácilmente mi cabeza de mi cuerpo.

“Profesora Yugiri, no lo entendí bien. No eras una de las personas más compasivas hacia mí.”

“Te tomó demasiado tiempo darte cuenta… Pero… también estoy en mi límite ahora… No puedo contenerme…”

“Es curioso. Solía frustrarme sin fin, pero ahora, desde el fondo de mi corazón, quiero salvarla, profesora.”

“Ya veo… Por extraño que parezca, mi estado de ánimo ya no es demasiado amargo. Pero es imposible. Incluso ahora, estas manos mías están tratando de matarte… No puedo detenerlas más.”

Ella estaba sonriendo mientras las lágrimas rodaban por sus mejillas. Probablemente solo hubo una persona que tuvo el honor de presenciar tal expresión en el rostro de la profesora Yugiri.

Yo.

“Profesora, obtuvo la ayuda de una bruja malvada para salvar a los estudiantes de Kirsch. Por lo tanto, tomaré la mano de una oscuridad aún más profunda para salvarte… ¡un mal titánico estremecedor que avergonzaría tu crimen!”

Un grito resonó en una voz que no pertenecía a ninguno de los dos. “¡El chico de todos los elementos de Daryth seguro que tiene agallas!”

A diferencia de todas sus declaraciones hasta ahora, ya no me susurraba a través de los espíritus. Era la voz cruda del mago más infame del mundo, y el sonido sacudió mis tímpanos con su incuestionable existencia.

“¡Dame el mando a mí! ¡De aquí en adelante, es mi turno!” gritó la chica.

El comandante de las fuerzas de Dustour se había escondido dentro de las ruinas todo este tiempo. Los había hecho casi imperceptibles con un poderoso encantamiento de glamour. Probablemente había hecho todo esto para que la vigilante bruja Francisca no sintiera su presencia en absoluto.

En algún momento, el Gran Espíritu de la Oscuridad había saltado de su zona de seguridad y ahora estaba detrás de la profesora Yugiri. La profesora ahora estaba atrapada en un ataque de pinza entre el Gran Espíritu y yo.

Tejo estos lazos del destino desde la Tierra de la Eternidad, Dustour.”

Inhalé profundamente en el momento en que esas palabras salieron de los labios de Nanatrij. Los espíritus que pululaban alrededor de la profesora inmediatamente entraron en acción. Parecían pedir perdón a la chica, tratando de expresar que no tenían parte en todo esto.

Sin embargo, no eran los únicos aterrorizados por su pequeña forma. Yo también lo estaba. Ni siquiera me había dado cuenta de su acercamiento hasta que estuvo tan cerca de nosotros.

Su voz serena resonó con fuerza, y su canto incluso sonaba más como una canción. El cabello de Nanatrij revoloteó mientras el viento bailaba a su alrededor. “De todos a uno, de la oscuridad a la llama.”

Solo podía mirar al cielo con la mandíbula en el suelo. ¡No pude evitarlo porque ascuas de llamas se elevaron y comenzaron a dibujar un símbolo ridículamente enorme en el aire!

“Francisca,” dijo, “este es tu castigo.”

La escritura escarlata en el cielo brillaba con un brillo vertiginoso. La bruja al otro lado de los hilos de la marioneta de la profesora intentó tomar medidas para contrarrestarlo, pero ya era demasiado tarde.

“Arrepiéntete de tus acciones. Tierra Asolada Sin Límites, Prominencia.

Un sol en miniatura apareció de la nada en un abrir y cerrar de ojos. La luz cortó y rasgó la oscuridad de la noche en pedazos, cayendo como una cascada sobre todo el cuerpo de la profesora Yugiri.

“Esto… Tú… ¡Debes estar bromeando!” Miré directamente al infierno repentino ante mí, y mi mirada se pintó de un blanco cegador en el lapso de segundos. “¿Ella fue capaz de lanzar un hechizo tan increíble en solo unos momentos…?”

El Gran Espíritu de la Oscuridad cumplió sus promesas y fue una chica de acción. Ella siempre se ocupaba de la mala conducta de sus subordinados en persona. Por eso había aparecido sola en Zenelaus cuando Dreibach había ido en contra de sus órdenes. Pero nunca pensé que llegaría tan lejos.

“¡Profesora Yugiri!” grité. “¡¿Estás bien?!”

Todavía no había recuperado la vista por completo, pero recordé la escena hace un momento. La luz ardiente que envolvía el cielo había caído sobre la profesora, y aún podía escuchar sus gruñidos de dolor. Era casi como si alguien hubiera hecho retroceder el reloj para que fuera de día, e incluso en este mismo momento, el sol manifestado colgaba allí con orgullo como si hubiera jurado eliminar toda sombra del mundo.

En cuanto a mí, entendí completamente por qué el espíritu había elegido este hechizo. El sol deslumbrante estaba allí para exponer a cierta persona que acechaba dentro de la profesora Yugiri.

“¡Slowe Denning! ¡Estoy segura de que ves dónde está tu enemigo ahora!”

El espíritu había tenido razón. El hechizo de Francisca ya se había desmoronado. La profesora había abierto un agujero desde el interior de la prisión formada por un caleidoscopio de magia.

Puedo sentir la magia arrasadora dentro de su cuerpo. Oye tú, bruja. Francisca. En este momento, estás vertiendo desesperadamente tu magia en él, ¿no es así? Bueno, muy mal por ti. El hechizo del Gran Espíritu ha demolido por completo todos los lugares donde podías refugiarte.

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“¡Ella va a salir en cualquier momento!” gritó Nanatrij. “¡Prepárate!”

La única oscuridad en este mundo de luz, una pequeña sombra bajo los pies de la profesora, se retorció y se transformó de un objeto plano a un ser sólido. Un montón de negro puro se derramó como tinta. Tal vez ella había visto que las probabilidades no estaban a su favor.

Esto había sido lo que el Gran Espíritu de la Oscuridad quería que notara. Si me hubiera acercado a la profesora, habría visto la extraña sombra que se retorcía cerca de sus pies.

La transformación que estaba experimentando no podía describirse en ningún idioma. Era casi como si fuera la materialización de la locura misma. Y ahora, podía ver claramente la mano de la sombra negra que agarraba al espíritu. Sabía de esto por el anime, pero aún así era tan horrible de contemplar que quería cerrar los ojos.

“¡Líder de la Alianza! ¡¿Cómo pudiste unir fuerzas con el enemigo?!” gritó una voz de mujer.

Casi como un fantasma, la mujer apareció desde el interior de la sombra que se retorcía. La sombra negra tomó lentamente la forma de un ser humano, específicamente la vaga silueta de una mujer. Esta era la verdadera forma de la bruja que acechaba en la sombra: una de los Tres Mosqueteros conocida como la Bruja Traficante de Sueños.

Debo admitir que estoy un poco frustrado. Después de todo, la Bruja Traficante de Sueños no me está mirando en absoluto────solo tiene ojos para el Gran Espíritu de la Oscuridad. A pesar de que la batalla ha progresado hasta este punto y estoy tan cerca de ella… ¡Ni siquiera soy digno de una sola mirada!

Apreté los dientes. Ella me está mirando por encima del hombro.

“Retrocede, niño. Puede que tengas bastante talento dentro del País de los Caballeros, pero seguramente puedes ver el mundo de diferencia entre nosotros,” dijo la mujer, burlándose de mí. “Contra alguien como tú, mi victoria está escrita en piedra.”

Francisca. Una mosquetera, la fundadora de la Asociación de Distribuidores de Pociones y una maga que nunca ha conocido la derrota en su vida. De hecho, para ti, probablemente soy intrascendente. Así son las cosas, y no puedo culparla por pensar eso. Después de todo, ni siquiera pude oponer una resistencia decente contra su peón, la profesora Yugiri.

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“Sin embargo, parece que sería difícil aplastarte en este momento,” señaló la mujer. “Bueno, entonces, ¿qué tal esto? Si te quitas del camino obedientemente, te dejaré libre por ahora. Muy bien entonces, muévete. Todo el mundo desea sinceramente aferrarse a sus vidas y tú no eres la excepción, ¿Verdad?”

Pensé en mi viaje hasta ahora, comenzando con No Face, luego Sepith Pendragon, el dragón negro e incluso todo lo que sucedió en Zenelaus. Mis recuerdos de esas batallas, mis experiencias de esos muchos conflictos de vida o muerte, se habían acumulado y construido una base sólida en mi corazón.

“No puedo hacerme a un lado ahora. Todavía hay algo que necesito hacer,” declaré.

“Oh, qué tragedia para uno desperdiciar su propia oportunidad de supervivencia. Si es tan inflexible, ¿podrías responder una de mis preguntas?” La bruja continuó burlándose. “Eres un simple niño que ni siquiera podría esperar arrastrarme a este escenario sin la ayuda de la Líder de la Alianza… Me encantaría saber qué crees que puedes lograr contra mí.”

Si bien antes había estado escondida dentro de la sombra de la profesora, la bruja ahora era un ser sustancial frente a mí. No pude sacarte de la profesora yo mismo… ¡pero hay algo que puedo hacer ahora!

“Voy a acabar con esa actitud presumida tuya,” anuncié lentamente.

“¡Esa es la mejor broma que he escuchado en años! He vencido a muchos magos inferiores alrededor de tu nivel en el norte. A ver, ¿han sido veinte de ellos? ¿Treinta? Quizás más.”

Esta mujer no había escatimado ni una sola mirada en mi dirección después de la aparición de Nanatrij. Sabía que incluso durante toda nuestra conversación, ella solo prestó atención al espíritu.

La bruja continuó: “Un barril vacío hace más ruido… Creo que esa forma de hablar es perfecta para ti, Dragon Slayer del Sur.”

Fue porque ella pensó tan poco en mí que pude construir y manifestar esto sin ser notado. El Gran Espíritu de la Oscuridad había borrado las sombras del área por lo que no había refugio para la bruja. Decidí que daría un paso más allá. Le infundiré a este hechizo la firme convicción de no dejarla escapar a toda costa.

“Bueno, supongo que puedes ver por ti misma si ladro y no muerdo… Mundo Glacial.

Este hechizo tenía un marcado contraste con el sol suspendido en el aire. El hielo era el depredador natural de todos los seres vivos, una antítesis del calor en el cielo, y fue mi aspecto elegido para este momento. El paisaje circundante fue reescrito y pintado con maravillosos y hermosos trazos de hielo, como una escena de un cuento de hadas.

Pisoteé la sombra de la profesora y todos los alrededores se congelaron con hielo hasta donde alcanzaba la vista. Mi objetivo no era contrarrestar el sol agitado que el espíritu había creado. Esa esfera de calor había sido creada principalmente para destruir las vías de escape de la bruja, pero mi hechizo…

La bruja seguía pareciendo tan escurridiza como una nube de humo, pero cambió bruscamente su tono pausado. “Esto es… ¡Me han engañado!”.

Este hechizo mío puso en exhibición mi firme determinación de nunca dejarla deslizarse entre las sombras, sin importar lo que sucediera de ahora en adelante. Sabía que cubrir el suelo con hielo inquebrantable sería el golpe decisivo contra esta bruja después de que revelara su verdadera forma.

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“Hm, qué curioso. Estabas tan segura hace unos momentos de lo insignificante que era mi presencia, así que ¿por qué estás tan nerviosa ahora, eh?”

Todo lo que había sucedido hasta ahora era tal como se había desarrollado en mi mente. El mundo finalmente se estaba moviendo en una dirección pacífica, ¿sabes? Derramé mi sangre, sudor y lágrimas en esto. Escuche, señora. ¡Un personaje que apareció al azar de la nada no tiene derecho a interponerse en el camino de mis esfuerzos que finalmente dan sus frutos!


La bruja hizo una pausa, y cuando volvió a hablar, había una nota frenética en su voz. “¡Líder de la Alianza! ¿No crees que has ido demasiado lejos…? ¡¿Cuánta información sobre mí has difundido al enemigo?!”

“Con esto, no puedes huir ahora. Después de todo, tu cuerpo real siempre está en las sombras,” dije con firmeza.

Vi mi silueta claramente en los ojos de la bruja. Este mosquetero, que había estado lidiando con el hechizo de Nanatrij todo el tiempo, finalmente me miró. La temida Bruja Traficante de Sueños, la mujer que había devastado varios países en el norte como un ejército de un solo hombre, tuvo terror en sus ojos por un solo momento, y no me lo perdí.

La bruja era una maga que podía correr a donde quisiera mientras hubiera sombras con las que conectarse y moverse. Desafortunadamente para ella, había encerrado su cuerpo real en su lugar.

“Este hielo maldito…” gritó. “¡¿Cuánto hay ahí?!”

“¡Tanto como puedas imaginar! ¡Y ahora, estás atascada!”

“¡Cómo te atreves! ¡No eres nada sin el apoyo de mi Líder de la Alianza! Y sí, sé contra quién perdió Dreibach en Zenelaus, ¡pero eso no cambia nada!”

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La bruja probablemente tenía un encantamiento constante que hacía que sus rasgos fueran difíciles de detectar, pero ahora, mientras se sentía conmocionada, podía ver su expresión con claridad. Era el rostro de una mujer con una belleza inigualable que estaba retorcida de rabia. Si las miradas pudieran matar, estaría muerto hace mucho tiempo. Me reí nerviosamente en mi mente. ¡Ella es aterradora!

La voz de la bruja coincidía con su expresión. “Slowe Denning. Recuerda que no fuiste tú quien cambió el rumbo────”

“¡Oh, cállate, lo sé! ¡Está bien! Soy un mago que no pertenece en absoluto a esta batalla. ¡Comparado contigo, soy inferior en el mejor de los casos! ¡Soy consciente, así que cierra la boca!”

Si esto hubiera sido una batalla uno a uno, no habría sido capaz de oponer un momento de resistencia contra ella. En Zenelaus, solo pude encontrar la victoria contra Dreibach gracias a la ayuda de Eldred. Tenía mucho más que ver con el Gran Espíritu que con mis propios méritos.

Sabía mejor que nadie que era débil. Comparado con los guerreros genuinamente temibles de este mundo, yo era extremadamente patético. Incluso si pudiera ganar fácilmente contra oponentes de nivel medio como No Face y Sepith Pendragon, hacer eso realmente no podría cambiar el destino del mundo. Mis habilidades son tan frustrantemente… a medias.

“¡Escucha! ¡Todo este tiempo, he hecho uso de todo lo que pude para poder cumplir mis objetivos egoístas!” Los recuerdos que tenía del anime me habían dado una ventaja absoluta, y con esos, nunca podría perder. “¡Y continuaré haciéndolo! Por el bien de mis deseos egoístas────”

Atrapada sin salida, la bruja estaba en el extremo receptor del ataque abrasador del sol flotante. Esta mujer probablemente ya no podía escuchar mi voz en absoluto, pero… aún tenía que terminar mi pensamiento.

Soy débil. Y por eso, en otro mundo, luché patéticamente por mi cuenta para derribar aquellas pesadas adversidades que se me presentaban. Luché solo y perdí solo.

“──── ¡y por el bien de realizar mi sueño que una vez se me escapó de las manos como la arena, incluso uniré mis manos con un demonio!”

Prominencia y Mundo Glacial…” La bruja se apagó. “¡Me tomaste por sorpresa, sí, pero mientras tenga suficiente tiempo, puedo producir una cantidad infinita de sombras!”

Mosquetero y Bruja Traficante de Sueños, el mundo se está volviendo pacífico, ¡y no permitiré que entres y lo arruines ahora!

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Por eso────

“No te atrevas a aparecer sin invitación…”

Apretando la espada de la profesora Yugiri, empujé su punta hacia el cuerpo real de la bruja, escondido dentro de la sombra plana en el suelo. Era la sombra de la bruja que no había conocido una sola derrota en su vida.

“¡¡¡… y te interpongas en el camino de mi futuro!!!”

Buta Koushaku ni Tensei Shitakara Volumen 6 Capitulo 5 Parte 3 Novela Ligera

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