Ichiban Ushiro No Daimaou (NL)

Volumen 9

Capitulo 1: El Comienzo de la Batalla Final

Parte 1

Sai Akuto miró a la escena de abajo mientras flotaba en el aire.

Una gran multitud rodeaba el palacio. Hasta donde podía verse, el suelo y el cielo estaban llenos de gente. Esas eran las personas que se habían revelado al control de Zero con los L’Isle-Adams. Protestar con su odio puro estaba bien, pero el problema fue su repentino apoyo en cuanto la Emperatriz Kazuko declaró su dictadura.

Eso me dejó sin otra opción.

Akuto acababa de anunciar que él era el rey demonio. Hacer eso y derrotar a Zero y Kazuko era la única manera de liberar a la gente. Zero había sido despertado y utilizado por 2V, pero Kazuko era la que ahora lo controlaba. Zero había sido utilizado para llenar a la gente de inquietud y Kazuko se estaba aprovechando de esa inquietud.

Utilizaré este poder al máximo.

Al morir y resucitar, él había ganado su poder como rey demonio. Era un hecho aterrador e incluso él no quería creer que era verdad, pero había sido creado como humano y arma. Fue creado para retener las emociones y sentido de sí mismo de un humano al tiempo que tenía un control ilimitado sobre el poder de los dioses conocido como magia. Eso significaba que estaba perfectamente cuerdo. Entendía completamente cuánto poder tenía y lo que era posible para él, pero no se volvió loco con el poder o lo temía.

Si iban a convertirme en un rey demonio, ellos debieron haberme dado la habilidad de volverme realmente loco con el acto del villano.

Akuto se quejó en silencio.

Sin embargo, tenía que mantener el acto en el exterior.

¡Esta creación artificial que dice ser un rey demonio puede haber causado miedo en la gente, pero yo les mostraré que solo uno puede tener ese título! – gritó.

Sintió una dolorosa oleada de emociones surgir desde abajo. La gran multitud volvió toda su ira y miedo hacia él.

Akuto podía sentirlo todo porque ahora podía ver los registros almacenados en los dioses. Esos registros convertían las emociones de la gente en datos y luego en palabras. El cerebro de Akuto estaba conectado directamente con los dioses, así que podía sentir cómo cada individuo había vivido su vida en el pasado. Podía saber lo que cada uno de ellos había cenado hace tres años.

Este poder…es como si pudiera leer sus mentes. En serio puedo volverme un dios o un rey demonio. Y por eso soy una persona normal como los demás que puede convertirse en cualquiera. Todos los reyes demonios del pasado deben haber estado en esta misma posición y tomaron algún tipo de decisión. Igual que yo, deben haber querido liberar a la gente y deben haber trabajado para sonar como un rey demonio.

¡Llénense de rabia y terror! ¡Denme más y más! ¡Eso es lo que me da poder!

Estaba inventando cosas de rey demonio que decir, pero incluso si eran mentiras, podía sentir que estaba siendo llevado a ser un rey demonio mientras hablaba. Si no tenía cuidado, realmente podría terminar así. Tenía que ser doblemente cuidadoso para seguir cuerdo.

Necesito mantener la calma. Tengo que analizar la información y pensar en qué hacer después.

La habilidad para saber cómo vivían otras personas le dio una cantidad inimaginable de información. Podía leer las acciones pasadas y emociones de cada persona en la multitud, así que sabía exactamente cómo se sentían sobre la situación actual y lo que debía hacer.

Ellos creen que la emperatriz es la única que puede salvarlos del gobierno de Zero. Y creen que estoy usando la confusión para derrotar a Zero y la emperatriz.

Era cierto que Zero había tratado de apoderarse de la humanidad tras despertar, pero quien usó la confusión para apoderarse del poder fue la Emperatriz Kazuko. Sin embargo, las personas confiaban totalmente en Kazuko. Ella era la emperatriz, parecía benevolente, y usaba acciones suaves.

Su título y apariencia eran suficientes para que la gente confiara a pesar de que en realidad no sabían casi nada de ella.

Necesito derrotar a Zero. También a la emperatriz. Y tengo que destruir esta ridícula historia que todos creen. Destruiré el concepto del emperador y el rey demonio.

Con su mente decidida, sintió una especie de resolución.

Y vio a una persona elevándose entre la multitud de abajo. Él llevaba un traje especial y era visto como un héroe por la gente.

Si él me derrota al final, la historia en que todos creen encontrará su perdición. Y una vez que eso suceda…

En el pasado, Miwa Hiroshi no había hecho más que dudar, pero Akuto sintió una resolución definitiva en él ahora. Se estaba alejando para llevar a Hattori Yuuko a un lugar seguro, pero volvería.

La apelación de Lily Shiraishi a él había funcionado o las acciones de Yuuko le habían dado valor. Ahora que Akuto había despertado, podía sentir el flujo de emociones que Hiroshi había experimentado.

¡Después de que me haya ido, puedo dejarle todo a Hiroshi!

Akuto se volvió hacia la terraza del palacio. Un L’Isle-Adam había aparecido allí.

Era un L’Isle-Adam con una constitución majestuosa. Ese era el cuerpo dado al programa conocido como Zero. Miró a Akuto con ojos inexpresivos y expresó sus pensamientos.

“Tú también no eres nada más que una máquina de combate. ¿Por qué estás tan concentrado en eliminarme?”

Sus palabras sonaban como una provocación, pero eso puede haber sido simplemente la interpretación de Akuto. Era posible que Zero lo dijera como una pregunta honesta.

Akuto respondió sin hablar.

“Es cierto que también soy un ser artificial. Pero tengo algo fundamentalmente diferente a ti. Tengo el sentido de mí mismo de un ser vivo. Tengo un corazón humano. Tu corazón y tus emociones son como verter agua de un color diferente en un cubo de agua. No eres un individuo independiente. Sin embargo, yo soy yo. De la misma manera, todos los humanos son personas independientes. No puedo dejar que nos fundas todos juntos.”

“Es porque están divididos en individuos que no pueden ser controlados. Mi ama siente lo mismo.”

“¿Tu ama? ¿Te refieres a Kazuko?” – preguntó Akuto. Una voz brillante se unió.

“Correcto. Estoy segura de que ya lo sabes debido a tu poder, pero he tomado el poder de 2V.”

Esa voz tenía un timbre que tranquilizaría a cualquiera y los haría sonreír. Sin embargo, sonaba como la voz seductora de un súcubo para Akuto. Solo oír su voz lo hizo querer coincidir con todo lo que ella decía.

“Si tú estás controlando a Zero, entonces no veo por qué tiene que ser derrotado.” – dijo Akuto con cautela.

La Emperatriz Kazuko se mantuvo oculta en el palacio y habló telepáticamente.

– “Eso es cierto. Sí, muy cierto.”

Kazuko estuvo de acuerdo, pero no significaba que coincidiera completamente con Akuto.

“Así que déjame derrotarte.” – continuó con una voz sonriente. – “Eso debería convencer a la gente, ¿no te parece?”

Akuto hizo una mueca.

“¿Y tú los gobernaras a todos después?”

“Sí. Es bastante simple, ¿no? La situación ha cambiado, pero mantendré mi promesa. Mientras me obedezcas, no te mataré y te garantizaré una vida cómoda.”

Ella habló como si la idea de que alguien no coincidiera con ella fuera impensable.

Akuto chasqueó la lengua.

– “Todo se trata sobre ti, ¿no?”

Pero Kazuko no mostró señales de importarle. Ella inclinó su cabeza como si hiciera una petición lindamente.

“Sí. Esta es una demanda egoísta, ¿pero me escucharías por favor? ¿O solo fingiste escucharme antes? ¿Estabas planeando traicionarme después de que derrotaras a Zero? No deberías jugar sucio de esa forma. La gente pensará que eres una mala persona.”

Kazuko sonrió y Akuto respondió con ira evidente en su

rostro.

“No me importa si lo hacen. Y si ya lo entiendes, no tiene sentido ocultarlo: me opongo a lo que estás haciendo. Cambiaste de opinión y comenzaste a proteger a Zero porque tu gobierno será más conveniente con los dioses aquí. Si Zero es derrotado, los dioses perderán sus cimientos.”

“Oh, qué chico tan listo. En ese caso, ¿te has dado cuenta de que lo que quiero no es tan diferente de lo que tú quieres? Quieres que todos sepan quién eres realmente. Yo igual.” – dijo Kazuko sin ningún rastro de temer a Akuto.

Akuto sabía lo que se sentía querer que la gente supiera quién eras realmente.

Pero su verdadera esencia era lo contrario de la de ella.

“¡Si tu identidad como emperatriz es solo una ilusión y no es para nada tu yo real, entonces tírala y vive tu vida real!”

“Eso no sucederá. Soy una persona codiciosa. De ninguna manera soy una emperatriz humana y amable, pero ser emperatriz es conveniente. Tirar eso sería un desperdicio. Utilizaré esa identidad. ¿Y no has usado tu identidad como rey demonio para tu propia conveniencia?”

“Lo siento, pero no lo creo conveniente. Quiero que esta sea la última vez que uso mis poderes.” – respondió Akuto.

La respuesta de Kazuko no llegó hasta después de una breve pausa.

“Sabía que esto pasaría, pero parece que nuestras negociaciones han fracasado.”

“No teníamos un terreno común para empezar.”

“En ese caso, todo ciudadano imperial es tu enemigo. Ahora, comencemos. No estoy interesada en ver una farsa, así que por favor conviértelo en un gran espectáculo.”

A la señal de Kazuko, Zero saltó de la terraza.

Akuto tomó una postura defensiva, pero el salto de Zero lo alejó. Se detuvo en el aire a una buena distancia y arrancó la piel artificial de sus brazos para exponer la maquinaria interna. Akuto observó confundido mientras un sinnúmero de L’Isle-Adams volaban desde abajo y se reunían con Zero. Se juntaron alrededor de su cuerpo uniéndose a sus brazos expuestos.

Como si apilaran bloques de construcción, Zero creó un cuerpo gigante para sí mismo.

Tienes que estar bromeando… Akuto hizo una mueca.

Lo que finalmente se puso frente a él fue un gigante de 15 metros con la maquinaria expuesta.

Qué fastidio. ¿Realmente tengo que pelear a puñetazos con esta cosa? – se quejó.

Esa combinación a una forma gigante no es sin sentido. Aunque a primera vista, parece el producto de una creencia tonta de que un gigante de acero es un símbolo de poder.

Ese comentario vino de Kita Yoshie. Ella tenía el hábito de emocionarse demasiado y actualmente tenía puestas sus gafas mientras analizaba la nueva forma de Zero que había aparecido en el patio del palacio.

– ¿Quieres decir que eso tiene un significado? – preguntó Hattori Junko.

Ellas habían estado volando sobre la multitud en un bote flotador, pero llegaron a una de las terrazas del palacio después de abrirse paso sobre el muro.

Incluso con el rey demonio o Zero, todo se reduce a una lucha por el recurso conocido como mana. Y esa lucha no se libra en el mundo real. Es como correr un programa; su poder de procesamiento decide quién gana.

Yoshie se volvió sobre la terraza mientras explicaba.

¿Combinarse aumenta su poder de procesamiento?

Sí. Le permite utilizar procesamiento paralelo. Normalmente, Zero sería peor porque el rey demonio puede usar todos los recursos, pero esta forma podría darle más poder de procesamiento.

Entonces, cómo el rey demonio… ¿cómo Akuto consigue poder de procesamiento?

Él no es una máquina, así que usa su cerebro humano. Sin embargo, nuestro sistema mágico se creó para reaccionar a la imaginación y las emociones humanas. Aunque esté perdiendo en la lucha por el poder, debería ganar cuando se trata de usar magia. Su pasión ganará al final. ¡Fwoh! ¡Esto es muy emocionante!

Junko miró a Yoshie, se asomó por la terraza, y miró hacia abajo.

– Los espectadores han escapado.

La transformación de Zero y la insinuación de una batalla habían hecho que la multitud cerca del palacio se fuera, así que los únicos en los terrenos del palacio eran Junko, Yoshie, Keisu, y los que estaban dentro del palacio.

¿Qué? ¿No te parece esto emocionante? Supongo que puedo ver por qué. Vinimos hasta aquí, pero la situación ha cambiado y Keisu no puede recordar nada. Se siente como si no hubiéramos logrado nada.

Yoshie miró a Keisu, cuyos hombros estaban echados hacia atrás.

Keisu era una pequeña chica de estilo samurái con una cola de caballo. Era la única L’Isle-Adam que no estaba bajo el control de Zero y tenía el secreto para sellarlo, pero no había hecho nada más que viajar con ellas hasta ahora.

Me siento muy avergonzada por no poder recordar nada. – se disculpó Keisu.

No, está bien. Solo trata de recordar por si acaso. Yoshie frotó la cabeza de Keisu.

A ella le dio cosquillas eso y miró a Yoshie.

Sí que eres amable, jefa.

¿Jefa?

Pido que me dejes llamarte así. Te ofrezco mi vida. Yoshie puso una amplia sonrisa.

Está bien. Mientras sientas que esto te ayuda de alguna manera.

Parece que podríamos tener que proteger a Keisu primero. – dijo Junko nerviosamente.

Yoshie se volvió hacia el interior del palacio y su expresión se tensó cuando vio quién estaba allí.

Kazuko había aparecido en un pasillo del palacio.

– Esa es Keisu, ¿no es así?

Kazuko habló amablemente y caminó elegantemente hacia ellas, pero estaba manchada de sangre.

– Su Majestad…Eso es…sangre humana…

Junko había luchado en un campo de batalla antes, así que podía distinguir entre la sangre de bestia demoníaca y la sangre humana por el olor. Sin embargo, Kazuko no mostró ninguna preocupación.

– se rio en voz baja. – Simplemente estaba encargándome de un pequeño problema doméstico interno. Me avergüenza que tuvieran que ver la evidencia de la lucha.

¡…!

Junko soltó un jadeo mudo. Sintió un miedo instintivo hacia Kazuko.

Oh vaya. No me veas como si estuviera loca. Por lo menos, yo tengo más confianza que cualquier otra persona en que estoy cuerda.

Mientras Kazuko hablaba, un aura anormal se elevó de su cuerpo. Era diferente de un destello de mana. Era un conjunto de una emoción similar a la intención asesina, y pareció congelar a Yoshie y Junko en sus lugares.

Ella es…

Peligrosa…

Las dos chicas comenzaron a sudar y no podían moverse correctamente.

En un instante, una voz pareció despertarlas.

– ¡Dejen que Keisu escape!

La voz vino de atrás de Kazuko y Junko la reconoció.

– ¿Keena? – murmuró.

Esa distracción le permitió moverse de nuevo.

Y entonces una esfera de mana se disparó hacia ellas. Cuando Junko la bloqueó con su espada, la esfera de mana giró en la espada como si estuviera pegada a ella, pero en el instante que tocó la hoja, se partió en dos como un dulce de jalea.