Taimadou Gakuen 35 Shiken Shoutai (NL)

Volumen 9

Capitulo 6: Florecimiento

El cuerpo de Kiseki corroyó las paredes y el techo en un instante, acercándose a Takeru.

Takeru inconscientemente activó Soumatou y observó los movimientos de Kiseki en el mundo en cámara lenta.

Inmediatamente después de que la carne del Hyakki Yakou corroyera la pared y el techo, los tentáculos fueron volando hacia él vigorosamente.

No apuntaban a Takeru, sino a Kyouya y Yoshimizu.

En el momento que se dio cuenta de eso, el cuerpo de Takeru se movió.

Kyouya quien puso una mano en el contenedor de Yoshimizu estaba paralizado por la situación.

El único que podía moverse era Takeru. Se detuvo a protegerlos y atacó los tentáculos sin saber lo que pasaba.

“… Ghh… ¡¡UOOooo…!”

Como varios tentáculos lo atacaron, ni pudo responder a todos.

Luego uno de los tentáculos se estiró, golpeando el contenedor de Yoshimizu.

Se escuchó el sonido de un vidrio quebrándose. Cuando miró atrás, el contenedor detrás de él estaba destruido.

Takeru entendió que el tratamiento de prolongación de vida para Yoshimizu se detuvo por completo. Kyouya estaba paralizado, luego abrazó a la dormida Yoshimizu.

“¿Akira…? ¡¡Akira…!!”

Al mismo tiempo que el contenedor dejó de funcionar, Yoshimizu empezó a convulsionarse y escupió sangre de la boca.

Sin habla, Kyouya abrazó a Yoshimizu con lágrimas en sus ojos. “…no, no puede ser…….. ”

Perdiendo el significado de su vida momentáneamente, solo podía abrazar a Yoshimizu.

Los tentáculos alrededor, la pared de carne dejó de moverse. Takeru se volteó de nuevo al frente con miedo.

En el centro del infierno rojo… estaba Kiseki, sonriendo. “… detén esto… Kiseki… ¿qué estás haciendo…?”

Por qué hizo esa pregunta, ni siquiera Takeru lo entendió.

El Hyakki Yakou no podía ser controlado. Contra la razón de Kiseki, continuará corroyendo las cosas eternamente.

Ese tipo de palabras seguramente la herirían. Como hermano, decir algo así a su amada hermana lo descalifica. Es como si la culpara por ello.

Pero la expresión de Kiseki era alegre.

No parecía como si fuese incapaz de controlarlo.

Kiseki inclinó su cabeza con curiosidad y puso sus dedos en sus labios. “Pero qué preguntas… vine a ver a Onii-chan.”

No preguntes cosas obvias, Kiseki movió su cabeza como si dijera eso. Por un momento pensó si era falsa, sin embargo Takeru lo sabía.

La Kiseki frente a él, era la real.

“Me levanté de una pesadilla, me salí de cierto tipo de dispositivo y sentí la esencia de Onii-chan por aquí cerca. P…por…eso… corrí a toda prisa.”

Ehehe, se rascó la mejilla con un dedo, sonrojándose. Era la tímida Kiseki de siempre.

“Ahhh… como pensé, Onii-chan es tan lindo. Que esté a mi lado me hace sentir cálida. Fue como esa persona dijo.”

Amar a su hermano, su preciosa hermana menor. Kiseki actuaba como siempre. Era real.

Eso hizo pensar a Takeru que ella se ha roto.

Agarró el mango de su espada y bajó su cintura, apretando sus dientes.

Debió haberse vuelto loca por los experimentos de los alquimistas… ni las drogas ni la tortura… ¡fue eso!

Reprimiendo su ira, Takeru se relajó y miró el rostro de Kiseki.

“Kiseki, ya está bien.” “¿Bien? ¿Qué?”

“Ya no tienes que sufrir más. Encontré una manera de salvarte. Ya no tendrás que estar más a a merced de ese poder y estar encerrada en esa jaula.”

“¿Eh…?”

“Con este hechizo y el cuerpo dentro de este recipiente podrás vivir una vida normal. ¡Puedes vivir como una humana normal!”

Takeru abrió la armadura en su espalda, luego sacó el hechizo y el feto de homúnculo en el recipiente.

Abrió sus brazos llamando a Kiseki.

“Kiseki… ven… regresemos juntos. Ven junto a Nii-chan.” Kiseki miró a Takeru.

Él pudo ver sus pupilas sacudirse. Confundida, los labios de Kiseki temblaron.

“¿Y cuál es el significado de eso?”

Sin poder entender las palabras de Kiseki, Takeru se quedó atónito. “Significado… entiendes ¿no? Podemos salvarte con esto. Serás libre.” “Pero Kiseki… es libre.”

“No. No tendrás que sufrir por ese cuerpo. Siempre has deseado eso ¿no?” “Kiseki siempre es honesta. No entiendo lo que dice Onii-chan.”

Como si en verdad no entendiera, Kiseki levantó sus cejas. Takeru se quedó congelado.

“El deseo de Kiseki no ha cambiado desde el inicio. Ese no es el deseo de Kiseki, sino el deseo de Onii-chan… ¿no?”

“……….”

¿No ha cambiado desde el inicio?

『¿Podrías matar a Kiseki por favor?』

“El deseo de Kiseki es ser asesinada por Onii-chan y que Onii-chan muera con ella. No tengo ningún otro deseo ¿okay? ¿Una vida normal? Hmmm, eso no suena muy atractivo. Mejor… quiero morir junto a Onii-chan.”

Por qué está tan feliz… y avergonzada de decir eso… Takeru se quedó sin habla.

No pudo ni siquiera hacer una sonrisa forzada. “Yo…quiero… vivir contigo.”

“Como dije, ese es el deseo de Onii-chan ¿no?” “… ¡nhh…!”

El cuerpo de Takeru tembló. Su cara pálida no tenía circulación. No podía ponerse al tanto de todos estos eventos, apretó sus dientes.

Hasta ahora ha estado moviéndose por su objetivo. Para salvar a Kiseki y cumplir su deseo. Eso era todo.

No es como que pensara que su salvación no salvaría a Kiseki. Pero en algún lugar en lo más profundo de su corazón quiere que Kiseki quiera vivir junto a él, una parte de él es optimista.

Al igual que Kiseki desea lo que nunca ha cambiado desde el inicio. Era obvio. Después de todo no hay diferencia de traicionar a Kiseki. Porque él… rompió la promesa.

“… ¡khhh…uuu…!”

La sangre escurrió de sus dientes apretados. El sabor a metal, el sabor de la desesperación.

¡Pero rendirme aquí es algo que no puedo hacer!

Entre él y Kiseki estaba una masa de carne del Hyakki Yakou.

En este estado le es imposible salvar a Kiseki. No tiene tiempo para cortar las variantes una por una.

“Lapis… ¡Encantamiento Ragnarøkkr… por favor…!” Como si escupiera sangre, se lo rogó a Lapis

≪¡Pero… Ootori Ouka-sama no está aquí…!≫

“Necesito salvar a Kiseki aquí y ahora… ¡podría no haber otra oportunidad!”

≪………. entiendo.≫

Junto a la respuesta de Lapis, un círculo mágico color crepúsculo apareció.

Al mismo tiempo Takeru dio un paso al frente. La forma Cazador de Dioses se ha activado, la armadura cubría su rostro. Las llamas crepusculares ardían en su espada y los pies del Hyakki Yakou fueron destruidos en un instante.

Caminando firmemente por las llamas, Takeru se puso frente a Kiseki. Estirando sus manos hacia ella, dijo:

“¡Kiseki, por favor… !”

“……….”

“¡Por favor… sálvame… !”

Al escuchar a Takeru rogar, las pupilas de Kiseki se sacudieron. Y con una complicada sonrisa,

“No.”

Rechazó el deseo de Takeru.

La mano intentando tocar su mejilla se detuvo. A su vez, Kiseki estiró sus manos para tocar las mejillas de Takeru. La armadura en su cabeza se quebró y el rostro real de Takeru quien recibió la corrosión apareció.

En medio de las llamas, ambos se miraron a los ojos.

“¿Cómo fue? ¿Dolió?” “. ”

“¿Puedes entender un poco los sentimientos de Kiseki?” Al decir eso, acercó más su rostro y besó a Takeru.

Violentamente, unilateral, fue un beso que se sintió lleno de ego. La lengua de Kiseki se entrelazó con la de Takeru.

Su lengua estaba muy fría.

Haciendo un sonido húmedo y jalando el hilo de saliva, los labios de Kiseki se separaron de los de él.

Con un rostro ruborizado y un aliento helado, ella dijo, “Si entiendes… continuemos donde lo dejamos……………………………. ¿okay?”

Donde lo dejaron…

Eso fue cuando Takeru trató de morir junto a Kiseki, el principio de todo.

Cuando decidió salvarla a pesar del hecho de que no había salvación, donde todo inició.

Con lágrimas, Takeru se dio cuenta que tan profundo es el destino de Kiseki.

≪¡¡Huésped!!≫

Como si lo jalara de la desesperación, la voz de la salvación resonó. Takeru regresó a la realidad.

“¡¡Libéralo…!!” Gritó, negando todo.

≪¡¡I-Imposible…!! ¡Debimos haberlo hecho a tiempo…!≫

Las anormalidades aparecieron de inmediato. Su memoria empezó a distorsionarse, su conciencia se volvía ambigua.

La corrosión es imparable. Ni Takeru ni Lapis pueden detenerla.

…a este paso, de perderá a sí mismo. Justo frente a Kiseki se perderá.

La expresión de Kiseki estaba en éxtasis, veía a Takeru convertirse en un completo Cazador de Dioses.

¡No…! ¡No no no no no no! ¡Aún no me rendiré! ¡No quiero rendirme! No importa cuanto lo deseara, no podía hacer nada.

A este paso matará a Kiseki.

Se olvidará de sus compañeras. No quiero eso. No quiero eso.

¡Definitivamente…no quiero eso!

“Vlad… penetra.”

≪Como desees.≫

Perforando las llamas, provino una luz roja como un meteoro. Se acercó a Takeru y golpeó su hombro.

En ese momento la armadura de Takeru se quebró como cristal.

Las llamas que lo envolvían se extinguieron como si nunca hubieran existido, volviéndose de carne y hueso Takeru cayó al suelo de rodillas y apoyándose con su espada.

“…¡Ouka!”

“Parece que lo hice justo a tiempo.”

Ouka estaba al lado de Kyouya en forma Cazador de Brujas. Tenía una sonrisa confiable en su rostro.

“Te lo dije. Cree en mí.”

Al escuchar esas palabras que resonaron en sus oídos, Takeru se sintió aliviado.

Si no fuera por Ouka, Takeru definitivamente no habría regresado a la normalidad.

Solo podía agradecerle. Pudo permanecer como es gracias a Ouka. “Mejor… ¿qué clase de situación es esta?”

Apartando su mirada de Takeru, Ouka vio a Kiseki. “Kiseki, ¿me recuerdas? Por qué…”

“¡Cállate! ¿¡Por qué te metes en mi camino!? ¡¡Te odio te odio te odio!! ¡No toques a Onii-chan! ¡No hables con Onii-chan! ¡Aparta tu mirada de Onii- chan!”

Kiseki estaba furiosa. Era la primera vez que la veían tan furiosa. Con lágrimas, apretando sus dientes, frunció el ceño, lo cual la hacía parecer un demonio.

Ouka de sorprendió por un instante, luego miró fijamente a Kiseki. Estaba tranquila, como si lo supiera desde el inicio.

“… ¿por qué te niegas a la salvación de Takeru? ¿No quieres estar con él?” “¿¡Q-Qué sabes sobre Kiseki y Onii-chan…!?”

“Cierto, no sé nada sobre ustedes dos. Sin embargo Takeru decidió salvar todo y tú estás incluida, lo sé porque estuve cerca. ¿Por qué razón lo rechazas? ¿Por qué te niegas a vivir juntos?”

“…cállate, ¡cállate cállate cállate cállate! Caminas al lado de él sin permiso y tratas de robármelo… ¡no te perdonaré!”

“No me robaré a tu hermano. Takeru es tu único hermano y tú eres su única hermana… ¡nadie está tratando de robártelo!”

Cada palabra de Ouka irritaba a Kiseki.

El Hyakki Yakou de alrededor respondió en respuesta a la furia de Kiseki.

『Muere.』『Matar.』『Matar.』『No la necesitas.』『Obstáculo.』『La peor.』『Mátala.』『La odio.』

Se escuchó una insana voz llena de resentimiento, el cabello de Kiseki se levantó y las variantes se retorcieron más y más. Los múltiples ojos en la carne miraron a Ouka.

“… ¡no Kiseki!”

Con su cuerpo de carne y hueso, tale y brincó en medio de Ouka y Kiseki. Con lágrimas, Kiseki lo miró.

Takeru envainó su espada y abrió sus brazos para proteger a Ouka. El rostro de Kiseki se distorsionó y cerró con fuerza sus ojos.

Luego,

“… ¡hh…ghhh…uuUuuu…!”

Apretó sus dientes, conteniendo la ira.

El Hyakki Yakou también detuvo sus movimientos. Como si su ataque hubiera cesado, Kiseki miró el techo mientras relajaba sus hombros.

“Bien. Entiendo. Tal y como pensé… Kiseki tiene que dar lo mejor.”

Aun volteando hacia arriba, miró a Takeru y a Ouka por detrás de su fleco.

“No te mataré y te dejaré ir hoy. Pero al final, ten por seguro que te mataré. Sí… poco a poco. Si hago eso, Onii-chan finalmente entenderá.”

“¿Qué quieres decir…?”

Cuando Ouka preguntó, Kiseki puso una sonrisa exhausta y se dio la vuelta hacia ella.

“Verás, primero mataré a toda la gente del mundo. Luego, mataré a las amigas de Onii-chan. Quién primero… quizás Saionji-san, la desmembraré parte por parte. La siguiente será Nikaido-san, la despellejaré viva. Para Suginami-san… comenzando por sus pies, dejaré que estos pequeños la devoren. Luego…finalmente será tu turno.”

Kiseki apuntó con su dedo hacia Ouka.

“Para ti… frente a Onii-chan, sin dejar ni una célula, te lastimaré, te desgarraré, te violaré, te aplastaré y te daré un sufrimiento peor al que Kiseki ha saboreado.”

“………..”

“¿No está bien Oniiii-chan?”

Al escuchar los deseos perversos de Kiseki, Takeru palideció. Ouka solo entrecerró sus ojos.

Kiseki les dio la espalda y vestida en el Hyakki Yakou, empezó a caminar hacia la oscuridad.

“Espéralo. Perderás todo, cada cosa, todo.” “.     ”

“Bye bye… Onii-chan.”

Arrastrando la carne con ella, Kiseki se iba.

Ouka miró a Takeru por un lado y mordió su labio inferior. “Espera.”

Fue entonces cuando Takeru hablo. Kiseki se detuvo por un momento. Takeru se paró, apretando su espada.

“… Kiseki, por tu deseo… vas a sacrificar todo ¿verdad?” “.         sip, así es.”

“…….. ya veo. Entiendo.”

Los ojos de los dos se cruzaron, intercambiando palabras.

Tal y como lo hizo Kiseki hace rato, Takeru miró hacia el techo. “Entiendo. En ese caso yo…. ya no mostraré misericordia.”

Ouka miró a Takeru con sorpresa, los hombros de Kiseki temblaron. “Nii-chan está enojado.”

“……….”

“Tú también estás enojada, pero yo no gritaré.” “.       ”

“Esto hace nuestra primer disputa como hermanos ¿no?”

Takeru lentamente desenvainó su espada, apuntando a la espalda de Kiseki. Y, con los ojos de un demonio la miró.

“Estilo de Doble Filo Kusanagi, Kusanagi Takeru.

No importa cuánto llores, cuánto grites o cuánto te rehúses, te salvaré

No escucharé lo que tengas que decir y….. ¡te haré feliz mientras tengas vida!”

El juramento está firmado, lleno de terror, lleno de ira. “… ”

Kiseki desapareció en la oscuridad sin decir nada.

Takeru continuó apuntando su espada hacia ella hasta que dejó de ser visible.