Bungo Stray Dogs (NL)

Volumen 5

Prologo: Dark Disgrace

 

 

Bungo Stray Dogs Volumen 5 Prologo Novela Ligera

 


Nunca en la historia de la sociedad clandestina de Yokohama se

amontonaron tantos cadáveres como durante ese baño de sangre de ochenta y ocho días conocido como el Conflicto de la Cabeza del Dragón. Un gran número de organizaciones participaron en la matanza.

La noche antes de su conclusión…

***

 


 

Publicidad G-M2



Una luna llena carmesí reinaba sobre el cielo nocturno. Las hojas marchitas bailaban con el viento mientras descendían al suelo. Un aire pesado llenó las calles mientras un esbirro de bajo nivel de la Mafia Port, Sakunosuke Oda, trotaba hacia su destino. Disparos resonaban en los callejones traseros; incluso Odasaku tenía su arma desenfundada, inspeccionando cada esquina para no ser tomado por sorpresa. Después de girar en una esquina, se encontró ante un viejo y sucio edificio de ladrillos que olía a sangre.

Publicidad G-M1



«Estoy harto de esto» pensó Odasaku con un breve suspiro. En todas las direcciones que miraba había muerte: montones de cuerpos cubrían las calles. Cada cadáver tenía una pistola en la mano con casquillos esparcidos por todas partes. Parecía que algunas facciones criminales opuestas se habían metido en un tiroteo.

Publicidad M-M1

De la nada, Odasaku creyó escuchar algo. Era un sonido inadecuado para una noche tan sombría, pero no había tiempo para dudar.

Odasaku corrió por la calle en la dirección de la voz, a pesar de que iba en la dirección opuesta a su destino. Al llegar se encontró con un auto volcado de costado. Cerca había personas en el suelo que aparentemente habían sido lanzadas por la ventanilla del automóvil. Al acercarse a ellos, Odasaku enfundó su arma y revisó los cuerpos. Lo más probable es que fueran una pareja casada. El marido yacía encima de ella como para proteger a su amada. Estaba desarmado y su atuendo dejaba en claro que simplemente había estado en el lugar equivocado en el momento equivocado.

El esposo y la esposa ya habían exhalado su último aliento, tal vez después de haber sido alcanzados por una bala perdida. Sin embargo, parecía que habían logrado proteger a su hijo de los disparos. La pequeña y joven niña estaba llorando —el sonido que había atraído a Odasaku. La tomó en brazos y comprobó si estaba herida, pero milagrosamente solo tenía algunas heridas leves. En un pañuelo que se asomaba por debajo del dobladillo de su camisa estaba el nombre Sakura, claramente escrito por un niño.

—Tienes suerte de estar viva —le dijo.

De repente, una fuerte estática resonó en los auriculares de Odasaku, seguida de la voz de un amigo muy cercano.

Odasaku.

Odasaku agudizó su mirada en el instante en que recibió la llamada.

—Dazai, ¿dónde estás? —preguntó Odasaku en voz baja.

—Tengo una buena idea de lo que estás haciendo, pero tienes que correr. Ahora. El infierno está a punto de desatarse —fue la respuesta apresurada de Dazai, seguida de más estática cuando alguien más se conectó a la llamada— ¡Fuera del camino, esbirro!

Odasaku miró hacia el sonido de la nueva voz, e inmediatamente una motocicleta pasó a su lado. Conduciendo la motocicleta había un hombre con un distintivo sombrero negro, la misma persona que interrumpió la llamada de Odasaku y Dazai hace un segundo. Era el ejecutivo de Port Mafia conocido como Chuuya Nakahara. A pesar de su complexión pequeña y modesta, giró salvajemente el acelerador para conducir aún más rápido.

Se pudo escuchar una voz suave y despreocupada proveniente de los auriculares de Chuuya. Era de Dazai.

—Oye, Chuuya. Estás en la línea de fuego del enemigo ahora, así que trágate una bala y muere, ¿de acuerdo?

—¡Callate la boca! —gritó Chuuya furiosamente. Pero cuando miró hacia arriba, notó que una granada se dirigía directamente hacia él, tal como lo había advertido Dazai. Era de un RPG-7, un lanzagranadas antitanque de alta explosividad propulsado por cohetes lo suficientemente potentes como para atravesar una gruesa armadura. No era algo que usarías contra un solo humano.

La granada se dirigía directamente hacia Chuuya, pero el usó hábilmente el peso de su cuerpo para girar la moto y esquivar el proyectil. Sin embargo, tuvo que inclinar su vehículo casi paralelo al suelo, creando chispas cuando su pedal raspó contra la grava. La granada le golpeó el hombro izquierdo al pasar y estalló en la calle detrás de él.

Publicidad M-M2

El enemigo disparó una segunda granada, esta vez apuntando ligeramente por delante de Chuuya como si supiera que eludiría el primero. El camino justo enfrente de él se vio envuelto en una explosión, pero pudo esquivarlo justo a tiempo una vez más. Luego vino una tercera granada, que trajo consigo una explosión y una onda de choque posteriores.

El camino estaba plagado de cráteres y humo blanco mientras la grava se esparcía por el aire. Ningún ser humano común podría escapar de estos ataques. Sin embargo, Chuuya emergió del denso humo en su motocicleta, acelerando furiosamente hacia adelante. La granada final debería haberlo golpeado, ya que no había espacio para que él esquivara su explosión como lo hizo con los dos primeros disparos. Así que, ¿cómo lo hizo? Cronometrándolo. Calculó rápidamente el curso del proyectil y redujo la velocidad de su motocicleta para no recibir un impacto directo.

Mientras fue golpeado por la onda de choque, Chuuya pudo usar su peso y el de la motocicleta para minimizar su impacto. Sus poderes de observación, visión cinética y capacidades informáticas lo ayudaron a predecir instantáneamente la velocidad y la trayectoria de la granada y su destreza como un piloto de carreras le permitió manejar su motocicleta con tanta precisión.

Chuuya dejó que las ruedas de su bicicleta se deslizaran por el pavimento mientras el humo negro le hacía cosquillas en la nariz. El enemigo inmediatamente se abalanzó sobre él con un nuevo método de ataque, como si pensara que disparándole no funcionaría. Un hombre enmascarado que estaba en lo alto del edificio al lado de la oficina de la prefectura miraba a Chuuya. El hombre levantó una mano en el aire e instantáneamente un relámpago iluminó el cielo nocturno. Luego movió su brazo, apuntando un rayo directamente a él.

Tch. ¡Maldito usuario de habilidades!

El rayo atravesó el suelo mientras perseguía a Chuuya, quien chasqueaba la lengua con amargura. Trató de girar inclinando su motocicleta hacia la derecha, solo para ser rodeado por otro relámpago. Entre el poder, el alcance y los ataques simultáneos, la habilidad del hombre enmascarado era increíblemente fuerte.

Un relámpago brilló sobre la calle y el suelo comenzó a derrumbarse. El polvo se elevó en el aire y se tragó a Chuuya. Parecía un golpe directo, pero en el momento siguiente, resurgió del humo, subiendo perpendicularmente por la pared del edificio de oficinas. El motor enfriado por aire rugió; los neumáticos de goma se quemaron al raspar contra la pared. Pero la motocicleta, que debería haberse caído debido a la gravedad, aún no mostraba signos de desaceleración. El usuario de habilidades enmascarado lanzó otro rayo a Chuuya, quien aceleró y esquivó fácilmente.

Después de llegar a la azotea, Chuuya lanzó una mirada penetrante al hombre enmascarado en el edificio vecino.

—Te creíste demasiado —se burló Chuuya antes de acelerar aún más su motor. Se dirigía directamente hacia el hombre enmascarado.

Deslizándose entre los ataques de relámpagos consecutivos, Chuuya atravesó el pasillo y luego comenzó a escalar la pared del edificio vecino sin perder velocidad. La motocicleta se elevó sobre la superficie, los neumáticos rugieron mientras giraban en el aire antes de aterrizar en el techo, el mismo techo en el que estaba parado el hombre enmascarado. Chuuya patinó las llantas por las tejas del tejado para romper el impulso de la bicicleta, y la llanta trasera dejó escapar un chirrido ensordecedor mientras raspaba contra las tejas. El usuario de habilidad enmascarado continuó lanzando mientras la motocicleta rodaba hasta que alcanzó al motor con un rayo, causando una explosión.

***

 

 

El sonido de la violenta explosión llegó incluso a Dazai que estaba cerca; de hecho, había estado en el mismo techo que el hombre enmascarado todo el tiempo. Había visto cómo la motocicleta estallaba en llamas.

Después de ser capturado por el enemigo, Dazai había sido esposado y llevado a ese mismo lugar. Tenía los brazos envueltos en vendajes y tenía unos leves moretones alrededor de la boca ensangrentada donde le habían dado un puñetazo. Su ojo derecho estaba envuelto en los mismos vendajes que sus brazos, lo que dificultaba leer su expresión.





Sintiendo que había alguien detrás de él vigilando, Dazai susurró en su micrófono oculto:

—Hubiera sido mucho más divertido si te hubiera alcanzado un rayo y hubieras muerto.

—¿Quieres que te dé en la madre?

Dazai observó a Chuuya mientras emergía de los escombros, apagándose las llamas con mal humor. A pesar de que parecía haber quedado atrapado en la explosión, ni siquiera tenía un rasguño. Dazai, sin embargo, no pareció sorprendido en lo más mínimo.

Publicidad M-M4

—Llegas cinco minutos tarde —dijo Dazai antes de patear al guardia detrás de él en el aire, dejando al hombre inconsciente—Me golpearon tres veces, sabes —bromeó.

Chuuya se burló: —¿Qué tal si te mato con la cuarta?

—No soy yo a quien matarás hoy —afirmó Dazai antes de quitarse las esposas. De hecho, se había hecho capturar a sí mismo a propósito. Golpear al guardia y deshacer las esposas eran tareas simples para Dazai.

Él y Chuuya comenzaron a alejarse casualmente cuando numerosos hombres enmascarados los rodearon de repente. Parecía que todavía había enemigos acechando en las sombras.

—La patética basura me hace perder el tiempo… —dijo Chuuya frunciendo el ceño.

—Solo date prisa y deshazte de ellos —dijo Dazai con un tono molesto— No es como si no lo hubieras visto venir-

Pero justo cuando estaba a punto de replicar, notó que se acercaba un usuario de habilidades, un hombre enmascarado con rayos enroscados en sus brazos. Era la misma persona que había estado acechando tras él.

—…Casi lo olvido. Todavía te debo lo de antes —Chuuya fijó una mirada asesina en el portador del rayo.

El edificio tembló por el impacto, aplastado por la fuerza. Se estaba formando una nube de polvo mientras los cuerpos, incluido el del hombre enmascarado, cubrían la azotea. Chuuya había usado su habilidad. Subir por la pared en su motocicleta, apagar las llamas de la explosión… todo esto fue posible gracias a su habilidad.

Chuuya se dirigió hacia el edificio con Dazai, sin siquiera mirar las pilas de muertos de los que era responsable. El hombre al que buscaban estaba dentro.

Una vez que los dos bajaron la escalera de emergencia, descubrieron que el interior del edificio también estaba bastante deteriorado. Los pasillos estaban acumulando polvo y había señales de ratas en varios lugares. Ambos caminaron en la dirección donde sintieron la presencia de alguien hasta que llegaron a una habitación espaciosa con escritorios de oficina y estantes apilados en la esquina. Se había cortado la línea telefónica y las luces parpadeaban. Se habían arrojado valiosos billetes y valores junto con diversos documentos sin importancia.

En el centro de la habitación había lo que parecía ser una especie de pabellón extraño. El hombre que buscaban estaba sentado adentro. Murmuraba para sí mismo, con los ojos bajos mientras arrojaba varias cosas a un cubo de fuego.

—Será mío. No será mío. Será mío. No será mío…

Publicidad M-M5

Era como si estuviera recogiendo pétalos de flores y tratando de adivinar su fortuna. Excepto que en lugar de pétalos de flores, estaba usando billetes y acciones. Incluso había gemas brillantes en la cubeta.

—Será mío. No será mío. Será mío. No será mío…

Los billetes de banco se quemaron, las acciones se hicieron trizas y las gemas fueron devoradas por las llamas. Dazai miró las piedras y murmuró:

—Esas joyas son todas reales… Ah, esa valía cincuenta millones…

Otra gran joya fue arrojada al fuego con un tintineo.

—…No será mío. —El hombre suspiró. Esa pareció ser la última de las gemas— ¿Por qué el destino siempre se burla de mí? Parece que ni siquiera formar un sindicato me dará lo que quiero.

Las llamas iluminaron el rostro del hombre mientras se cruzaba de brazos. Tenía una tez pálida con cabello blanco cayendo en cascada hasta su espalda. Una sola trenza le colgaba de los hombros. De todos sus atractivos rasgos, sus espeluznantes ojos rojos eran los que más destacaban.

Tatsuhiko Shibusawa. Matar a este hombre acabaría con el Conflicto de la Cabeza del Dragón. Chuuya dio un paso adelante para acercarse a la raíz de esta tragedia.

—…Devuélveme a mis hombres —exigió en voz baja. Fue entonces cuando Shibusawa levantó la cabeza como si finalmente los hubiera notado.

—Bienvenidos, mis aburridos visitantes —Volvió su mirada apática hacia los dos hombres— Sé que ninguno de los dos me concederá mi deseo, así que apresúrense y mueran… como el resto de ellos.

Una niebla se levantó lentamente detrás de Shibusawa, revelando algo a sus pies. Los ojos de Chuuya se abrieron de par en par en el momento en que se dio cuenta de lo que era. Eran sus colegas, los seis que habían desaparecido. Cada una de sus pupilas estaba dilatada mientras yacían inmóviles. Era evidente que ya estaban muertos.

—Todos tus amigos se suicidaron —continuó Shibusawa— Ni siquiera la muerte puede curar a una persona aburrida de ser aburrida.

—¡Bastardo…! —Chuuya se quedó ciego de rabia. Las marcas rojas de su habilidad se extendieron por su rostro. Su puño cerrado tembló y sus guantes estallaron en jirones. Las marcas incluso aparecieron en sus brazos ahora desnudos.

Chuuya desató su habilidad, rindiéndose a su rabia. Una ráfaga de viento le revolvió el pelo.

—Ni siquiera pienses en detenerme —advirtió Chuuya a Dazai antes de enfrentarse a Shibusawa.

Haah… —Dazai simplemente dio un paso atrás— ¿[Dark Disgrace]1? Hmph

Entonces, la habilidad de Chuuya comenzó a volverse loca. Carcajadas. Rugidos Explosiones. Se escuchó todo tipo de sonidos cuando el edificio comenzó a derrumbarse. El aire tembló bajo la onda expansiva, lanzando escombros como balas.

  • Dark Disgrace: Se traduce como Desgracia Oscura

***

 

 

Un hombre miraba la miserable vista desde lejos. Tenía el pelo negro hasta los hombros y ojos como cristales violetas que brillaban a la luz de la luna. Su manto ondeaba al viento.


—Je.

Mostró una sonrisa inocente, pero tenía una expresión misteriosa en su rostro. El hombre, Fyodor, murmuró para sí mismo, sus delicados dedos se deslizaban por el cielo como si estuviera tocando un instrumento:

—…Esto es muy divertido.

Las balas se dispararon por el aire, los disparos resonaron, el asfalto se llenó de cadáveres y se derramó mucha sangre. La ciudad fue tragada por los gritos, las risas y el resentimiento de su gente. Se perdieron innumerables vidas y se produjeron daños irreversibles durante el Conflicto de la Cabeza del Dragón. Esta lucha, que comenzó como una disputa por quinientos mil millones de yenes, convirtió a Yokohama en una zona de guerra. Algunos lucharon bajo el alias Twin Dark2, otros perdieron a su familia y quedaron a la deriva y un individuo acabaría adoptando a los niños que quedaron huérfanos durante la sangrienta guerra.

Seis años después, un dragón comenzó a despertar de su letargo.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios