Boku Wa Tomodachi (NL)

Volumen 6

Capitulo 10: Fiesta de Cumpleaños (Con el Club de Vecinos)

Y así, el día del cumpleaños de Kobato, 18 de octubre, por fin llegó.

Mis compañeros del club y yo nos juntamos en la sala del club más temprano de lo usual, y esperamos a que Kobato llegara.

María fue la única que no pudo hacerlo a causa de estar ocupada con su trabajo. Le mencioné sobre la fiesta de cumpleaños, así que sería bueno si pudiera venir al menos más tarde.

—Hmm, finalmente es el cumpleaños de Kobato-chan y todo, pero se siente un poco simple, no es así…

Sena dijo luego de mirar alrededor de la habitación, parecía insatisfecha.

Toda esta cosa fue algo muy espontaneo, así que la mayoría de la habitación no estaba decorada, estaba en el mismo estado general usual.

Teníamos unas pocas cadenas de papel que hicimos colgadas aquí y haya, pero eran tan pocas que no podía negar la sensación pálida que daban.

Parte de eso era porque nadie en el Club de Vecinos tenía mucho conocimiento en decoración de fiestas, así que no teníamos idea de cuanto papel necesitábamos, o cuanto esfuerzo tomaría hacer una cadena.

A parte de las cadenas, compramos un mantel estampado de flores para la mesa, que la hacía parecer más festiva que lo normal, y teníamos una pizarra que tenía escrito “FELIZ CUMPLEAÑOS ☆KOBATO-CHAN☆” (Lo cual, obviamente, fue escrito por Sena).

—A propósito, Aniki, ¿Qué hace uno en una fiesta de cumpleaños?

Yukimura tímidamente me preguntó.

—Esa es una pregunta muy difícil…

Me froté la cabeza.

—Tú das regalos, comes torta, ¿y… luego qué?

—Tal vez podamos jugar un juego juntos— Dijo Rika, respondiendo a mi pregunta.

—Un juego, eh… pero los únicos juegos que tenemos son los galge de Carne y los juegos de PC de Rika. ¿Cómo se supone que jugaremos esos juntos?— Yozora dijo con una cara de desapruebo.

—Probablemente hubiera sido una buena idea preparar algunos juegos de fiesta con anterioridad. Tampoco hay algun juego análogo en la habitación de Rika…

—¿Ves? ¡Sabía que teníamos que haber comprado ese Twister que vimos antes! Hubiera tenido una excusa legal para agarrar a Kobato-chan de esa manera— Sena me dijo.

Dejar jugar al Twister a alguien con motivos secretos como ella es algo que nunca debes hacer, si me preguntas.

—¿No hay alguna tienda de juguetes cerca de la escuela? Vamos a comprar algo rápido. ¡Como el Twister!

—En serio, cuanto quieres jugar al Twister…

—Ahora que pienso en ello, nosotros jugamos el Juego del Rey antes, en esa fiesta que tuvimos, ¿no?

—Uu…

Todas nuestras caras se pusieron rígidas luego de escuchar lo que Rika dijo.

Ese juego fue un total desastre.

—Estoy segura que antes también estábamos confundidos en qué hacer en una fiesta… no hemos progresado nada desde entonces, tenemos…

Mientras reflexionábamos sobre cosas, mi teléfono empezó a vibrar después de haber recibido un mensaje de Kobato.

Le dije que me haga saber cuándo ella estuviera viniendo, así que creo que eso significa que ella estará aquí pronto.

Abrí su mensaje y lo leí.

Título: Kukuku…

Mensaje: Kukuku… No quiero ir.

Tienes que estar bromeando…

Ahora que lo pienso, Kobato ha estado muy nerviosa sobre la fiesta de cumpleaños desde anoche.

Esta es su primer fiesta de cumpleaños con gente fuera de la familia, así que, bien, se cómo se siente. Realmente eres tímida, Kobato.

Dicho eso, no podemos hacerla sin la chica del cumpleaños aquí, así que le mandé una respuesta que decía, “Sólo ven. Tenemos una torta gigante aquí.”

Después de enviarlo, la puerta del club lentamente se abrió, revelando detrás la cara de Kobato.

Aparentemente vino todo el camino hacia aquí antes de empezar a acobardarse.

¡Bang!

—¿¡Hyah!?

Kobato se agachó y cubrió su cabeza luego de ser sorprendida con el repentino sonido del cañón de serpentinas.

La persona que lo hizo estallar no fue otra que Sena.

Todos también tenían el suyo, y el plan era estallarlos todos a la vez cuando Kobato entrara, pero la llegada de Kobato fue tan repentina que sólo Sena se las arregló para reaccionar a tiempo.

… Como resultado, Sena terminó siendo quien asustó a Kobato.

—¡Feliz cumpleaños, Kobato-chan!

—¡Grrrr~!

Kobato, como un gato callejero, mostró abiertamente su desconfianza a Sena, quien fue a saludarla llena de energía.

Justo después, el sonido de un cañón haciendo “¡Bang!” llenó la habitación.

Esta vez fue Yukimura, quien tenía una cara que decía “También debería estallar el mío.”

—¿Hm? Ahh, entonces yo también lo haré…

Yozora también tenía una cara que gritaba “yo también debería” mientras tiraba de la soga del cañón.

Hizo un sonido más débil “bam”.

Rika fue la siguiente en hacer estallar su cañón, y yo el mío poco después.

Bang…

Bang…

¿……Qué demonios es esto?

La manera en que me imaginaba una fiesta de cumpleaños en mi cabeza era todos tirando de la soga de los cañones a la vez, empezando la celebración, pero esto no estaba nada cerca, sin importar como lo veas.

—¿…? ¿…?

Kobato parecía estar pérdida también, y me miró por ayuda.

—… Uh… Ok, creo que comeremos la torta ahora.

Nos juntamos alrededor de la mesa con Kobato al centro, y pusimos la caja de la torta en frente de ella.

Lo que vio luego de abrirla, fue una lujosa torta decorada llena de colores cubierta con chocolate, frutillas, y otras frutas. En el segundo en que la vio, Kobato dijo —Woww…— y sus ojos empezaron a brillar.

El resto de nosotros hicimos lo mismo, y dijimos —Wow…— mientras exhalábamos de admiración.

Típicamente, comemos una tarta cuando tenemos la fiesta de cumpleaños en casa también, pero ni siquiera a mi padre o a mi nos gustan tanto las cosas dulces, así que nunca compramos una tarta tan grande como esta.

Sin embargo, mientras Kobato parecía increíblemente feliz al principio, una vez que vio la barra de chocolate encima de la torta que tenía escrito “¡Feliz Cumpleaños! Mi Amado Ángel Kobato-chan♥”, ella dijo —Uu…— y frunció el ceño.

Aun más, debajo del escrito había un dibujo de una chica con 2 colas en un vestido y una chica con una horquilla en forma de mariposa sosteniendo manos y sonriendo.

Aparentemente Sena fue quien compró la tarta, e hizo que Stella la traiga el colegio.

—¿¡Bien, cómo está!? ¿¡Te gusta!? ¡Kobato-chan!— Dijo Sena, quien tomó una de las sillas al lado de Kobato, mientras hacia una gran sonrisa triunfante en su cara.

—… Seriamente, tú siempre llevas las cosas demasiado lejos— Dijo Yozora, con una voz que sonaba como si realmente estuviera sorprendida.

—¿Eh? ¿A qué te refieres?

Yozora dirigió una mirada de lástima hacia Sena, quien estaba tan feliz como podía ser.

—¡OK, prendamos las velas ahora!

Sena y yo tomamos cada uno 7 de las 14 velas, y las pusimos alrededor del borde de la tarta antes de que Yukimura cerrara las cortinas y apagase las luces.

Empujé hacia abajo el botón de la luz, haciendo que la pequeña flama se destacara en el ahora oscuro salón.

La luz de las velas brillaba sobre Kobato, revelando su rostro fascinado.

—Wow, así que esta es una torta de cumpleaños real, eh…

Rika dejó salir su voz que sonaba llena de admiración.

—Es hermosa— Dijo Yukimura.

—Hmph… No está mal, creo— Dijo Yozora, pero las esquinas de su boca formaban una débil sonrisa visible.

—¡De acuerdo, ahora cantemos!

—¿Cantar…?

Yozora le dio a Sena una mirada dudosa.

—Claro. Cantar la canción del cumpleaños.

—Una-canción, eh…

—Eso es algo embarazoso…

—Kodaka, ¿¡qué estás diciendo!? ¡Pon tu corazón en ella y canta para Kobato-chan! ¡OK, aquí vamos! ¡Feliz cumple——

Sena comenzó a cantar, justo como ella dijo que haría.

Ella tenía una buena voz para cantar que daba una sensación de energía en ella.

El resto de nosotros no podíamos sólo quedarnos en silencio, así que nos unimos a ella cantando.

Podía escuchar la voz reservada de Yozora cantando al lado mío.

Era clara, una hermosa voz, muy diferente a su usual voz grave.

Recordé su voz de antes, ese mes de Mayo, cuando ella estaba hablando con su amigo de aire sola en el salón.

Debo ser yo, pero creo que la voz de Yozora ahora es como debería ser.

La linda voz de Rika y la simple de Yukimura se mezclaron también, creando un coro simple, pero con una increíble sensación.

—Feliz Cumpleaños,

— Feliz Cumpleaños,

— Feliz Cumpleaños, querida Kobato-chwa~n!

—Ko~ba~to~

—Hermana menor de Kodaka~

—Kobato~

—Honorable hermana menor~

¿¡Qué!? ¡¡Vamos, aquí es donde supuestamente tenemos que emparejar!! ¿¡No podían simplemente decir “Kobato” ahí!? Me quejé en mi cabeza.

—¡Feliz Cumpleaños!

Nos las apañamos para sincronizarnos con cada uno hermosamente al final.

—Ah, Auu…

La cara de Kobato se puso roja mientras balbuceaba algunas palabras.

—Vamos, Kobato. Sopla las velas.

—Ah, O-Ok-

Kobato rápido respiró profundamente, y:

—¡¡Fuuuuuuuuu!!

Triunfó al soplar las 14 velas de una sola vez.

Luego de eso, yo corté la tarta, y todos comimos juntos.

Una vez que terminamos de comer, le dimos a Kobato sus regalos igual que en cualquier otra fiesta de cumpleaños.

Mi regalo era un nuevo juego de Kurogane no Necromancer.

Yozora le dio un lindo set de pañuelos.

Aparentemente ella lo eligió porque era “algo que no se estorbara en su camino si ella no lo quería”, pero pareció que a Kobato le gustaron todos por igual.

El regalo de Rika era una colección de velas aromatizadas.

—No tienen ninguna función como afrodisiaco, ¡Así que por favor pruébalo con Kodaka-senpai alguna vez!— eso fue lo que ella dijo en un extraño tono enérgico, pero probablemente sólo era ella tratando de esconder su vergüenza por haberle dado un regalo tan simple.

Yukimura le dio… talismanes de Ragaraja.

La noche que fuimos a Nagaya, ella me mandó un mensaje pidiéndome un consejo, así que le dije “intenta llevar algo que te gustaría que te den”, pero no creí que a ella le gustaría que el dieran esto…

—En verdad, quería darte una escultura tallada en madera de ciprés, pero no era capaz de hacerlo dado el dinero para gastos que tenía. Los siento mucho, Aniki.

—B-Bien, creo que lo más importante es que es un regalo de corazón. ¿Verdad, Kobato?

—Kukuku… Talismanes mágicos del Oriente son raros en efecto… Debo ser capaz de completar ‘esa técnica’ con esto en mis manos…

¿Oh? Eso es sorprendente, parece que realmente le gustaron…

La siguiente fue Sena, quien le dio a Kobato dos kilos de carne de alta calidad para sukiyaki.

—¿…Qué, así que terminaste eligiendo la carne después de todo?— Dije en voz baja, haciendo que Sena se sonrojara.

—Ca-cállate, no pude evitarlo… Esto es lo mejor que pude pensar… además, tú dijiste que querías tener un poco y todo…

—…Carne… esto es muy masoquista, incluso para ti…

—Esto no es divertido, incluso si es una broma…

Yozora y Rika, ambas estaban desconcertadas.

—¡¡No es una broma!!— Gritó Sena protestando.

Bien, es verdad que ella solo quería hacer feliz a Kobato, así que sólo debemos tomarlo con una sonrisa.

—¿No estás feliz, Kobato? Vamos a tener sukiyaki esta noche.

—Sukiyaki… *slurp*…

Kobato lamió sus labios con la propuesta.

—Uhehehe… Kobato-chan, pretende que soy yo cuando lo comas, ¿OK?

—¡No!

Kobato parecía como si estuviera a punto de llorar después del comentario de Sena.

Nosotros no teníamos nada más que hacer después de darle a Kobato sus regalos, así que decidimos terminar la fiesta de cumpleaños aquí.

Tengo que poner la carne en la nevera pronto, así que Kobato y yo nos fuimos antes que el resto de los miembros del club tan pronto como terminamos de limpiar las decoraciones.

Kobato estaba llevando una gran bolsa con todos sus regalos en ella mientras caminábamos a casa (le dije que la llevaría por ella, pero dijo que lo quería hacer ella misma), y estaba increíblemente feliz todo el camino a casa.