Koujo Denka (NL)

Volumen 2

Capitulo 3: Sé Honesto Y Confiesa

Parte 1

“Ahora, sé honesto y confiesa. Aún no me has contado todo, ¿verdad?”

La voz pertenecía a una chica del clan de los lobos que vestía el uniforme de la Royal Academy: mi hermana menor, Karen. Yo estaba sentado en una vieja silla de madera, mientras ella estaba de pie acusadoramente sobre mí con las manos en las caderas. La sonrisa en su rostro era preciosa, me hubiera encantado grabarla en un orbe, pero sus ojos estaban cambiando de su habitual marrón oscuro a violeta, y podía sentir el poderoso pulso de su maná.

“Ya he oído que te quedarás como tutor privado y sobre el incidente con Lydia-san”, continuó.

“No puedo que estoy sorprendida….Sé cómo eres y no puedo culparte por ello. Dicho eso…”

Sus ojos se entrecerraron en una expresión de intensa sospecha; parecía que no sería capaz de engañarla por completo.

“¿Por qué el mismo director te convocó hoy, el primer día de clases para la orientación para nuevos estudiantes?  Es  inexplicable, absolutamente inexplicable”

Habían pasado cuatro días desde la ceremonia de entrada, y esa mañana había recibido una citación de la Royal Academy. Les había informado a los Leinster que los visitaría a la hora del almuerzo y me dirigiría a la academia de inmediato, solo para encontrar a mi hermana visiblemente descontenta esperándome en la puerta principal. Me había llevado directamente a la oficina del consejo estudiantil, me gustara o no. Le había pedido específicamente al director que mantuviera mi visita en secreto, pero nunca facilitó las cosas.

Como estaba previsto, habíamos hablado de Frigid Crane, la Dukesa Rosa y el diario el día después de la ceremonia de entrada. El director se había mostrado reacio al principio, pero después de algunas persuasiones, halagos y una amenaza, quiero decir, una oferta…Todo el asunto quedo en las manos del profesor, debe haberse dado cuenta de la gravedad del problema.

“Está bien, cooperaré”, finalmente había concedido.

“Pero también quiero que me ayudes con algo. Te daré los detalles en unos días. No será un compromiso a largo plazo: las casas ducales de Leinster y Howard me han advertido acerca de atarte”

Pero ¿por qué debería ser yo el único en sufrir? Oh, disculpa. Lapsus de lengua.

Dejando a un lado el resto de nuestra conversación, esa había sido una declaración preocupante. ¿Qué podría involucrar no solo a Lisa y al Duke Liam, sino también al Duke Walter…?

Maldito elfo retorcido. Debió haberse tomado la molestia de decirle a Karen que me había llamado. ¿Por qué tenía que ir directamente a vengarse? Él debe haber sabido que—

Una vista a quemarropa del rostro de Karen interrumpió mis pensamientos. Sus ojos se estaban volviendo de un tono aún más profundo de violeta.

“¡¿Me estás escuchando?!” preguntó, pronunciando claramente cada palabra.

“Estoy escuchando”, le aseguré.

“Parece que te he preocupado. Lo siento”

“No diría que he estado preocupada”

Objetó después de una pausa, haciendo como si cruzara los brazos y actuando distante. Ella quería que supiera que estaba enfadada.

Habíamos planeado volver a casa juntos durante las vacaciones de primavera si aprobaba el examen de hechicero de la corte. Yo tampoco había tenido la oportunidad de tener una conversación adecuada con ella durante algún tiempo, e incluso había incumplido mi promesa de unirme a ella para almorzar después de la ceremonia de entrada. Ella debe haber estado sola. Yo no era un gran hermano para causarle tanta preocupación.

“No te preocupes”, le dije.

“No estoy en peligro… Creo”

“¿Crees?” repitió ella.

“¡Siempre, siempre eres así! Piensa en lo mucho que haces que me preocupe cada vez que…”

De repente se detuvo a mitad de la oración.

“O-Olvida que dije eso. N-No estoy preocupada por ti. Lo digo en serio”

Se veía adorable sacudiendo la cabeza en negación vehemente; nadie podría discutir con eso. Su gorra de la escuela se soltó y cayó al suelo, revelando sus orejas de color gris plateado. Me levanté para recogerlo y, al hacerlo, me di cuenta de que tenía la insignia plateada de un ala y un bastón que la marcaba como vicepresidenta del consejo estudiantil. No pude evitar sonreír ante la insignia, que era prueba de todo su arduo trabajo. Sacudí el polvo de la gorra y se la volví a poner en la cabeza.

“Cielos…” refunfuñó ella, frunciendo los labios.

“Ya tenía suficiente en mi plato con Lydia-san, ¿y ahora tus estudiantes están en la academia, una en un puesto alto y la otra en la cima de su clase? ¡¿Y Lynne se inscribió con ellas?!”

“Debe ser el destino”, comenté.

“Son  estudiantes   maravillosas,  y  disfruto enseñándoles. Ya sabes lo capaz que es Lynne, y Tina y Ellie también son extremadamente talentosas”

Ante eso, Karen se quedó en silencio por un momento.

“Espera un minuto”, dijo ella.

No oculté mi confusión. ¿Qué había provocado esto? Karen fruncía el ceño y se presionaba la frente con una mano. ¿Tenía dolor de cabeza?

“¿Que acabas de decir?” preguntó finalmente.

“Son estudiantes maravillosas”, repetí.

“Después”

“Sabes lo capaz que es Lynne, Tina y Ellie son…”

“¡Ahí!” Ella exclamo.

“¡Eso es!”

Yo estaba desconcertado. ¿Qué tenía de extraño? Su maná rápidamente convergente interrumpió mis pensamientos.  Chisporroteantes   destellos   de relámpagos violetas atravesaron la habitación.

“¿Por qué los llamas por su nombre?” preguntó después de un largo silencio.

Sus ojos estaban desenfocados y su voz era baja.

“Lydia, Lynne y yo somos las únicas chicas de tu edad a las que te diriges tan casualmente. Siempre llamas a esas dos ‘Su Excelencia’ en tus cartas”.

Hizo una nueva pausa y luego dijo:

“Dime, ¿Qué está pasando?”

Esto    no    fue    bueno.     Karen     podía     depender intensamente de mí en un sentido diferente al de Lydia, y ella era especialmente sensible a las chicas en mi vida. Ni siquiera me presentó a sus amigas en persona.

Cielos. ¿Sus ojos son violetas y la cola de la antera está erizada? Ella podría volar todo si lanza un hechizo relámpago de talmagnitud.

“Ambas son mis estudiantes, ¿recuerdas?” Le expliqué, poniendo una mano sobre su cabeza cubierta por una gorra.

“Por supuesto que las llamo por su nombre”

“¿Eso es todo?” preguntó después de una pausa tensa.

“Eso es todo”, le aseguré.

“Sin embargo, es posible que no hagan berrinches como tú”

“¡N-No estoy haciendo una rabieta!” ella protestó.

“¿Estas segura?”

“¡B-Bastante segura!”

“¿En serio?”

Dio un pequeño grito ahogado cuando retiré mi mano. Sus ojos clamaban por afecto, y su cola colgaba sin fuerzas. Estaba tan necesitada, pero también tan indescriptiblemente encantadora que no pude evitar abrazarla.

“¡¿N-Nii-san?!” Ella exclamo.

“N-Ni siquiera está oscuro todavía. ¿Es este realmente el momento?”

“¿Qué?” Yo pregunté.

“Estaba pensando que tengo la hermanita más linda del mundo”.

“¿E-En todo el mundo…?” repitió.

“¿De verdad quieres decir eso?”

Karen se había quedado rígida por la sorpresa, pero pronto se quedó sin fuerzas en mis brazos. Su cola parecía feliz y sus ojos habían vuelto a la normalidad. Ya…Ya….Me aseguré de que estuviera llena de cariño y luego la solté.

“Eso no fue justo, Nii-san…”

Me reprochó, mirándome con las mejillas sonrojadas mientras se aferraba a mis mangas.

“No me culpes por tener una hermana tan adorable”, le dije.

“¡Eso es justo lo que quiero decir!”

“Sí…Sí”

“¡Un ‘sí‘ es suficiente!”

“¿Es eso una moda pasajera de algún tipo?” Yo pregunté. Lydia y Tina también lo dijeron.

“D-De todos modos”, tartamudeó.

“¡Deja de seducir a las chicas cuando Lydia-san y yo no estamos mirando! ¡Causa tantos problemas!”

“Difícilmente lo llamaría ‘seducir‘“, dije.

“Sabes que nunca he tenido suerte en el amor”

“Esa es la única cosa de la que no te das cuenta”, murmuró Karen.

“¿Es uno de tus defectos o es una virtud que me beneficia? Ciertamente espero que sigas así”

“¿Dijiste algo?” Pregunté, confundido.