Ichiban Ushiro No Daimaou (NL)

Volumen 5

Capitulo 4: ¿El Final Perfecto?

Parte 3

La voz de la sacerdotisa resonó misteriosamente desde abajo. Akuto bajó la vista justo a tiempo para ver la cabeza del torso cortado de la sacerdotisa ser arrastrada abajo por el suelo derrumbándose.

– Kh…

Akuto desvió la mirada y miró hacia el cielo en su lugar.

El dios árbol flotante ya había ascendido una distancia considerable.

– ¡Peterhausen! – gritó Akuto.

En respuesta, Peterhausen bajó volando de donde había estado esperando en el aire.

¿¡Este es nuestro último trabajo, verdad!?

Sí. Y esta es mi última petición como tu amigo.

Akuto dejó a Keena y Bouichirou abajo y montó a Peterhausen.

– Espera. ¿Realmente intentas arriesgar tu vida por esto?

Bouichirou señaló hacia el dios árbol, pero Akuto solo miró hacia adelante.

Así es. Nací como una existencia con un ridículo objetivo. Si puedo actuar por mi propia voluntad al final, eso está bien para mí. – respondió Akuto sin mirar atrás.

Esto puede que no cambie el resultado. Puede ser como me lo dijeron y esto no cambiará nada y la humanidad todavía será destruida. ¿Por qué estás tan convencido de que esto es lo que debes hacer? – preguntó Bouichirou.

Akuto instruyó a Peterhausen para despegar.

Porque he aprendido que ser capaz de empatizar con las personas en tu vida diaria es más importante que la fe o alguna historia muy alejada de tu vida. Si destruyo este sistema, las personas serán capaces de hacer frente a otras personas. – luego se volvió hacia Keena. – Tenías razón, Keena. Si todos pueden comer arroz juntos, podríamos tener la paz mundial.

Peterhausen voló poderosamente hacia el cielo, pero…

¡Arroz! – gritó Keena con una voz encantadora.

¿Eh?

Akuto estaba confundido por el cambio en la actitud de Keena, pero Peterhausen ya había volado alto en el cielo. El dios árbol se movía lentamente, por lo que ya lo habían alcanzado.

Pero sorprendentemente, Keena voló hacia el cielo y persiguió a Akuto.

¡A-chan, no puedes! ¡No puedes hacer que te respondan!

¿Q-Qué? ¿Tienes una conciencia separada mientras eres la Ley de la Identidad? – Akuto preguntó mientras Keena volaba junto a Peterhausen, pero ella no estaba escuchando.

¡A-chan, dime lo que estás planeando hacer!

Keena le habló sin rodeos a Akuto.

Um, bueno…voy a cargar al dios árbol y transferir sus funciones a Peterhausen. Y luego lo voy a destruir. – respondió.

Keena negó con la cabeza.

– No puedes. Piensas morir, ¿no es así?

Haberlo declarado tan claramente dejó a Akuto sin saber qué decir.

No, no va a suceder necesariamente. Sin duda será peligroso y si tengo éxito en matar incluso a un dios, voy a perder cualquier lugar en la sociedad. Así que…

¡No! ¡Idiota! ¡Idiota! ¡No te voy a dejar!

Keena negó violentamente con la cabeza.

Pero en ese momento Peterhausen dejó escapar un grito.

¡Amo, es demasiado tarde! ¡Vamos a cargar contra el dios árbol!

Entonces no tenemos otra opción. ¡Keena, fuera del

camino!

Akuto empujó a Keena.

Ella voló una buena distancia lejos de Peterhausen, pero claramente no estaba lista para rendirse. Comenzó a quitarse su ropa mientras volaba y desapareció.

Ahora Akuto no podía saber dónde estaba.

– … ¡Vamos!

Sin embargo, Akuto no podía cambiar sus planes.

Peterhausen disparó una estaca de metal con una espiral tallada de su boca que abrió un gran agujero en el cuerpo del dios árbol. Luego cargó al interior a través de él.

El interior es una dimensión pseudo alternativa. Nosotros y nuestros oponentes tenemos formas reales, así que podemos recibir daño. – advirtió Peterhausen.

En el interior estaba el mismo laberinto de madera visto cuando Bouichirou había abierto el dios árbol. Su visión se llenó con nada más que pilares bermellón lacado y corredores de madera desnuda.

– Transfiere sus funciones. – instruyó Akuto.

Peterhausen envió cables extendiéndose en las cuatro direcciones desde varias partes de su cuerpo. Todos se conectaron en conectores ubicados en los corredores.

Una vez que la transferencia se complete, liberaré a aquellos como Hattori Yuuko del control del dios. Pero la transferencia tomará algún tiempo. Hasta entonces…

Peterhausen se detuvo.

Akuto miró a su alrededor y se dio cuenta de por qué.

Sacerdotisas L’Isle-Adam aparecieron de todos los corredores aparentemente infinitos. Todas ellas tenían sus ojos de muñeca vueltos hacia Akuto y Peterhausen.

– Ellas son reales… ¿verdad?

Peterhausen asintió en respuesta a la pregunta susurrada de Akuto.

Estos corredores parecen infinitos, pero el espacio aquí es finito. Y puede haber un gran número de L’Isle-Adams, pero no son infinitos tampoco.

Pero seguían estando en una gran desventaja. Akuto tenía que proteger a Peterhausen que no podía moverse. Si incluso un solo cable era cortado, la transferencia estaría incompleta y Yuuko y otros seguidores Suhara como ella estarían en peligro.

Naturalmente, el rey demonio y los dioses ya no estaban cooperando. Para los dioses, Akuto y Peterhausen eran objetos extraños que debían ser asesinados.

Maldición. ¿¡No voy a ser capaz de lograr nada después de hacer todos esos anuncios dramáticos!? – rugió Akuto.

Sin embargo, Peterhausen se rió alegremente.

Todavía no. El hecho de que no puedo moverme no significa que no puedo luchar. Vamos a contraatacar, amo. ¡Puedes haber dicho que no tendrías a dónde ir después, pero siempre puedes seguir luchando hasta que la última terminal de los dioses haya sido destruida!

Eh…Eso podría funcionar también. – murmuró Akuto.

Como si eso hubiera sido su señal, las innumerables sacerdotisas corrieron hacia Peterhausen.

Las sacerdotisas cubrieron a Peterhausen como hormigas feroces atacando a su presa. Akuto voló alrededor, tratando de arrancarlas, pero tenía las manos llenas con las sacerdotisas que lo atacaban por detrás. Sus ataques no mostraron piedad y era dolorosamente claro que eran existencias extrañas que no podían comunicarse realmente con los humanos.

¡Cualquiera que luche de esta forma no debería guiar a la gente!

La ira de Akuto subió a la superficie. Su mana aumentó y un torbellino apareció a su alrededor.

Sin embargo…

– ¡Gaaaaaah!

Peterhausen dejó escapar un grito.

– ¿Qué pasa?

Akuto se volvió hacia él.

La herida causada cuando el portaaviones lo golpeó estaba brillando.

– Oh, no…

Akuto se dio cuenta de lo que estaba causando el dolor de Peterhausen.

La pesada carga de transferir las funciones de Suhara, luchar, y controlar el mana de Akuto había superado el límite de su capacidad.

¡Puedo manejar esto! ¡No te preocupes por mí! – gritó Peterhausen con una voz profundamente dolida pero intensamente valiente.

¡Pero!

¿¡Siempre estuvimos planeando morir, verdad!? Estábamos determinados a salvar a los demás sacrificándonos a nosotros mismos. ¡Tomar medidas de seguridad aquí sería demasiado tonto! Amo, voy a quitar el limitador en tu control de mana. ¡Eso disminuirá la carga sobre mí y te permitirá el uso total de tu poder! Pero a cambio…

¿¡No puedes garantizar que mi cuerpo vaya a durar!? ¡Me parece justo!

Akuto una vez más comenzó a enfocar el mana en su cuerpo.

Una vez que su cuerpo empezó a brillar, las sacerdotisas que se acercaban a él fueron lanzadas hacia atrás por un impacto.

– ¡Ooohhhhhhhhhh!

Akuto era consciente de que no podía controlar su mana. Sin importar lo mucho que lo intentara, no podía detener el torrente de poder o la emoción en aumento.

Akuto usó ese poder para mandar a volar a las sacerdotisas que se aferraban a Peterhausen. El dragón liberado gritó de alegría por la ausencia de los obstáculos.

¡He asumido las funciones de Suhara! ¡Ahora puedo liberar a la gente del control del dios en cualquier momento! ¡Podemos volar todo aquí sin preocupaciones!

Pero Akuto no respondió.

El cuerpo de Akuto producía un calor tremendo. Mientras yacía acurrucado e inmóvil, su cuerpo derritió gradualmente el suelo y se hundió. Su tremenda energía estaba empezando a derretir la propia dimensión pseudo alternativa.

– ¡Espera…amo! ¡Amo! Kh… ¡ya no puedo contener su poder!

La expresión de Peterhausen mostró confusión por una vez, pero esa confusión rápidamente se convirtió en miedo.

¡Para evitar una mayor invasión en la dimensión pseudo alternativa, la propia dimensión se está cerrando sobre sí misma!

Los corredores comenzaron a ser aplastados mientras se plegaban entre sí, uno por uno. Las sacerdotisas fueron capturadas sin piedad en medio y fueron aplastadas por el propio espacio. No quedó nada de ellas después. Solo quedaba la nada.

El plegado del espacio se acercaba a Akuto a una velocidad tremenda.

¡Tienes que liberar tu poder de una u otra manera! ¡Deja que explote! ¡Si lo haces, puedes volar al dios árbol, dimensión pseudo alternativa y todo! – gritó Peterhausen.

Sin embargo, Akuto no podía moverse ni un centímetro.

Cuando vio eso, Peterhausen negó con la cabeza.

…Debe ser muy difícil.

Oye, ¿por qué es tan difícil?

El mana es controlado por las emociones de uno. Mi amo todavía tiene miedo de liberar su poder. – respondió Peterhausen antes de mirar alrededor para ver quién había preguntado.

Pero él siguió diciendo que iba a hacerlo. – respondió la voz.

Peterhausen se dio cuenta de que Keena flotaba alrededor estando invisible.

Su voluntad para reformar al mundo es fuerte. Sin embargo, está preocupado por el hecho de que no será capaz de asumir la responsabilidad por el mundo después. Después de todo, carece de la habilidad para construir un nuevo mundo… En cualquier caso, tienes que escapar. Quedarás atrapada en la explosión aquí.

¿Entonces por qué no estás escapando, Pe-chan?

Tengo el deber de controlar apenas el mana de mi amo y la explosión subsecuente. Si lo hago, puedo salvarlo.

¿Entonces morirás, Pe-chan? – preguntó con sorpresa.

Así es. Un dragón con las mismas habilidades exactas que yo puede ser creado después, pero un dragón sin la misma historia y sentido de sí mismo como yo no seré yo.

¡Yo no quiero eso! ¡No me gusta este final! ¡Esto es solo el tipo de final que les gusta a los chicos! – gimió Keena.

Peterhausen sonrió amablemente.

Entonces ve a decirle a mi amo que está equivocado. Enséñale que puede crear algo en el mundo después de que la historia de los dioses haya terminado.

Pe-chan…

Keena apareció y acarició la cabeza de Peterhausen.

Por favor toma esto. Lamento que no sea nada emocionante.

Peterhausen hizo que uno de sus colmillos cayera en la mano de Keena.

Keena lo miró, asintió y corrió hacia Akuto mientras sostenía el colmillo con fuerza en su mano. Akuto estaba produciendo una tremenda cantidad de luz, pero Keena entró fácilmente en esa luz y calor.

Mientras Akuto sufría, la forma desnuda de Keena lo abrazó suavemente y le susurró al oído.

No te preocupes, A-chan. Haré todo lo posible para asegurarme de que todos se lleven bien por ti.

Akuto abrió los ojos.