Kumo Desu Ga Nani Ka?

Volumen 14

Capítulo 8: Fin de la Batalla – Ella Quien Camina junto al Señor

Mi clon que está monitoreando el sistema me informó que se abrió una nueva ranura para Diligencia.

Inmediatamente me dispongo a rellenar el espacio vacío del Privilegio del Comandante, con cuidado de ajustarlo para que no haya ningún efecto en el funcionamiento del sistema.

Además de eso, me obligo a entrar en la ranura recién abierta.

Ahora solo necesito una ranura más.

Si el espacio de Diligencia se ha abierto, eso debe significar que Potimas ha muerto.

O supongo que es más como si lo hubieran borrado.

¿Qué clase de karma es que Potimas, que continuó viviendo solo porque no quería morir, encontrara un destino mucho peor que la muerte al final?

Honestamente, es casi demasiado apropiado.

Pero para alguien que cometió tantos crímenes atroces, su final fue sinceramente bastante rápido.

Cuando pienso en todas las cosas que ha hecho, no puedo evitar sentir que el Señor Demonio debería haberle torturado más antes de golpearle con la Magia Abisal.

Supongo que quizás ella solo quería que se fuera lo antes posible.

De algún modo, tengo la sensación de que no es realmente eso, pero no creo que nadie más que el Señor Demonio pueda entender cómo se siente ella realmente en todo este asunto.

Su historia era demasiado profunda y complicada.

Ni siquiera yo puedo adivinar lo que debe estar sintiendo.

Entro en el OVNI que atrapé con mis hilos.

Esta cosa apareció después de que derribara al enjambre de erizos de mar y la pirámide.

Según el momento, tuve la impresión de que esta cosa era la verdadera fortaleza final de Potimas, así que la capturé en lugar de destruirla. Aparentemente, esa fue la decisión correcta.

Honestamente, estaría sorprendida si todavía hubiera otro truco bajo la manga después de esto.

En este punto, tendría que darle más crédito a Potimas.

Pero como el verdadero Potimas está muerto ahora, supongo que ese debió haber sido el último truco.

Cuando finalmente alcanzo el final de un pasillo inútilmente largo, encuentro al Señor Demonio sentado en una silla, jugando con una especie de consola frente a ella.

“Se acabó”, me informa sin darse la vuelta.

“Ya veo.”

Probablemente tenga una gran agitación interna después de finalmente poner punto final a una lucha tan larga.

A juzgar por su tono distante, estaría dispuesta a suponer que está abrumada por diferentes emociones que ni siquiera puede resolver con sus propios sentimientos.

A veces, cuando tienes demasiados sentimientos fuertes, acabas sintiéndote sin emociones, ¿sabes?

“Mira esto.”

El Señor Demonio señala al monitor.

Hojeando el texto que hay, encuentro algo bastante desagradable.

Un experimento de deificación usando las almas de las reencarnaciones para convertirse en un dios, ¿eh?

Para resumir la teoría grandilocuente o lo que sea, la idea básicamente era meter a la fuerza las almas de un grupo de reencarnaciones en un objetivo y ver qué sucedía.

Potimas había descubierto que no podía convertirse en un dios solo con el poder del sistema.

No importa cuántas almas recogiera en forma de puntos de experiencia, nunca podría superar el límite.

Así que decidió probar un tipo diferente de experiencia—concretamente, las almas de las personas que venían de un mundo diferente—y ver si eso podía romper las limitaciones de su alma.

Menuda estupidez.

Lo siento, pero venga ya.

Odio decirlo, pero definitivamente no veo que eso vaya a funcionar.

No puedes romper el límite reuniendo almas de este mundo.

¡Así que usemos almas de un mundo diferente en su lugar!

… Ya, si fuera tan fácil convertirse en dios, mucha gente lo haría.

Aunque supongo que yo no soy la indicada para hablar, ya que me convertí en dios por accidente…

Pero es por eso por lo que él estaba reuniendo a las reencarnaciones, ¿eh?

Pobre Srta. Oka, que se ha estado esforzando tanto por su bien…

“Bueno, me imagino que Potimas tampoco pensaba realmente que eso fuera a funcionar para convertirlo en dios, ¿sabes? Era solo una diminuta posibilidad.”

“Pero parece que puso mucho esfuerzo en investigar cuidadosamente la teoría y fabricar equipos para ello…”

“Así es como Potimas hace las cosas.”

El texto en la pantalla muestra registros completos de maquinaria en desarrollo, ecuaciones para los experimentos, etc.

Por lo que parece, la razón por la que hizo hincapié en evitar que las reencarnaciones adquirieran habilidades en su vida cotidiana era para que sus almas no se adaptaran a este mundo y se alteraran, o algo así.

No sé, parece una dolorosa cantidad de esfuerzo puesto en un experimento con posibilidades astronómicamente pequeñas de éxito.

¿Realmente deseaba tanto ser un dios?

Sí, supongo que sí…

“Tenemos suerte de que fuera tan cauteloso que al final no llegara a ejecutarlo. Si le hubiéramos dado otro año, podría haber terminado el equipo y arrojado a todas esas reencarnaciones a la licuadora.”

Por favor, no digas cosas tan aterradoras como esa.

Aunque tiene toda la razón.

Esta vez, resultó a nuestro favor que Potimas fuera siempre tan cauteloso.

Después de todo, ya está en su historial el intentar poner a la diosa Sariel en la licuadora y usarla por partes.

“Aquí también hay miles de registros de otros experimentos de Potimas.”

“Guau”, no puedo evitar decirlo en voz alta.

Los materiales de investigación de Potimas.

Apuesto a que hay todo tipo de cosas desagradables ahí.

“Voy a echar solo un vistazo rápido y luego lo destruiré.”

“Sí, probablemente sea lo mejor.”

Dejar que cosas como estas permanezcan en el mundo solo causaría problemas.

En todo caso, no creo que haya necesidad de que el Señor Demonio lo revise primero.

“Pues ya está todo por aquí. ¿Qué hay de tu parte?”

“Con quién te crees que estás hablando, ¿hmm?”

Lo clavé totalmente, obvio.

Ya he recuperado todos los restos de los erizos de mar, la pirámide, etc.

También apagué los incendios para que no se extendieran por el resto del bosque.

Por no mencionar que volé por completo la base secreta que estaba escondida bajo tierra.

Oh, sí, y…

“La Srta. Oka es la única elfa que queda con vida.”

Todos los elfos han sido eliminados.

Después de capturar este OVNI en mi red, cacé al último de los elfos con mis clones.

Quedan algunos semi elfos y cuarto elfos, etc. pero ya no hay más elfos de sangre pura en este mundo.

“Entendido. Entonces, una vez nos deshagamos de esta nave espacial, se acabó, ¿no?”

“¿Estás sensible?”

“Un poquito.”

Dicho eso, mirándola de perfil, el Señor Demonio se ve más callado que de costumbre.

“Oh sí. Ey, cumplí mi promesa.”

¿Promesa?

Oh, es verdad. Le hice prometer que siguiera con vida.

“Completé mi misión de manera segura, jefa.”

El Señor Demonio gira en la silla y me lanza un saludo jovial.

De manera segura, ¿eh…?

“¿Realmente puedes llamar a eso segura?”

“Ey, siempre y cuando no muera.”

El Señor Demonio sonríe.

Ya, claro. Está tan cerca de la muerte, que ni siquiera puede levantarse de esa silla.

El Señor Demonio no tiene heridas físicas.

Pero tiene una herida muy profunda, no en su cuerpo, sino en su alma.

Su presencia solía tener mucho peso, pero ahora parece increíblemente frágil.

“¿Cómo de malo es?”

“Hmm. En cuento descanse un poco, estoy bastante segura de que podré moverme lo suficiente como para que no obstaculice mi vida diaria. La única razón por la que ahora mismo no me puedo mover es porque mi magia se ha secado. Una vez que recupere eso, al menos podré caminar de nuevo.”

“En otras palabras, no puedes luchar.”

“Claro que puedo, si no te importa que acorte mi vida aún más.”

“Señor Demonio…”

“Venga ya, solo estoy bromeando. De todas formas, no me queda mucho tiempo. Yo diría que quizás un año más o menos. Así que usaré lo último que me queda de vida para ver las cosas con mis propios ojos.”

Incluso antes de esto, la esperanza de vida de el Señor Demonio se estaba acortando.

Pero estoy segura de que todavía le quedaba un tiempo por delante.

Y ahora, después de que lo acortara en esta batalla, solo tiene un año.

“Mi papel termina aquí. Me hubiera gustado continuar un poco más, pero tendré que dejarte el resto a ti, Blanca.”

“Entendido.”

“Entonces, vas a empezar, ¿sí?”

Asiento ante la pregunta del Señor Demonio.

Nos hemos encargado de Potimas, el enemigo del mundo.

La siguiente parte de la historia es salvar el mundo.

Pero aunque voy a salvar el mundo, nunca dije que salvaría a los humanos.

Así que, a partir de este momento, interpretaré el papel de enemiga de la humanidad.

En fin, es hora de destruir a la humanidad y salvar al mundo y a la diosa.

Incluso si eso va en contra de los deseos de la diosa.

-FIN DEL VOLUMEN 14-