Ichiban Ushiro No Daimaou (NL)

Volumen 4

Capitulo 4: La Guerra De La Gran Capital Imperial De Akuto

Parte 2

Los primeros en llegar a la Academia de Magia Constante fueron las fuerzas ninjas Kouka comandadas por la familia Teruya. Aunque eran ninjas, los que no eran fuerzas especiales no eran más que soldados normales. Estaban armados principalmente con rifles equipados con bayonetas y espadas largas. Quinientos de ellos estaban reunidos.

En batallas con magia, las armas de fuego tenían poco sentido, así que los soldados más poderosos tendían a no llevarlas. Los soldados normales solo cargaban rifles porque tenían malas habilidades mágicas, pero las tropas de ataque como los guerreros blindados estaban armadas con sus propias armas favoritas como lanzas largas, espadas largas, y hachas de guerra. Un centenar de esas tropas más poderosas estaban reunidas.

Esto era casi la totalidad de las fuerzas ninjas Kouka y estaba a la escala de un batallón. Teruya Eiko los comandaba a todos y ella actualmente estaba dando instrucciones para la formación a los comandantes de compañía que había reunido.

Mientras lo hacía, las cámaras estaban centradas en ella. Los medios de comunicación habían llegado antes que los caballeros o las tropas de la familia Hattori y otros grupos. Ella les había dado permiso para transmitir lo que estaba sucediendo. Era tarde en la noche, pero un informe especial siendo transmitido a través de la capital imperial mostró el castillo del rey demonio que una vez había sido un edificio escolar.

Naturalmente, el rey demonio estaba siendo reportado como el enemigo común de toda la humanidad. La expectativa era que la batalla involucraría en su mayoría luchas contra bestias demoníacas. A diferencia de cuando eran oponentes humanos, podían transmitir sin censura sin importar lo que pasara. Todo el imperio sin duda lo estaría viendo como una forma de entretenimiento.

El objetivo de Eiko de obtener popularidad iba tan bien como era posible. Para los que no la conocían, ella parecía ser una chica digna y hermosa que no le temía a nada. Y parecía que la casualidad estaba de su lado también. Los tres miembros de la familia Hattori llegaron donde las cámaras podían verlos.

Cuando Youzou, Junko y Yuuko llegaron a la tienda de Eiko, fueron los blancos perfectos para las cámaras. Youzou parecía bastante heroico y sus dos hijas eran hermosas. Como un bono, una de esas hijas era una famosa idol.

Youzou no había esperado las cámaras. Esto significaba que estaba ayudando a Eiko en su intento de popularidad. Aun así, no tenía más remedio que obedecer a regañadientes a Eiko aquí.

A Junko y Yuuko no les gustó tampoco, pero no podían permitirse mostrarlo en sus rostros. Junko se centró en preservar su expresión perfectamente diligente, pero Yuuko se volvió agradablemente hacia la cámara porque estaba acostumbrada a esto

La condición de Yuuko se había recuperado de antes, pero los efectos del mana de bestia demoníaca no había desaparecido realmente. Su traje de batalla lo ocultaba, pero los vasos sanguíneos negros que sobresalían de su cuello solo iban en aumento. Aun así, ella había recuperado su energía cuando escuchó que lucharían contra el rey demonio. De hecho, tenía aún más energía que antes.

Youzou le dio Eiko un saludo formal.

Las fuerzas Iga dirigidas por la familia Hattori han llegado.

Eiko asintió con calma ante el saludo de Youzou.

Deseo utilizar a la familia Hattori al máximo ahora que está bajo mi mando.

La mirada de Eiko se detuvo en la espada de Junko. Esa espada era el tesoro sagrado de Suhara y la familia Teruya había odiado por mucho tiempo el hecho de que no la poseyeran. Eiko se rio para sus adentros. La oportunidad de adquirirla podría haber llegado.

Haré que la compañía de Junko y Yuuko tomen la vanguardia.

La familia Hattori había traído un batallón de 600 soldados. Sin embargo, la mayoría de ellos se especializaba en trabajo ninja, por lo que no eran adecuados para una batalla en un campo de batalla abierto. Tomar la vanguardia sería muy peligroso. Y no podían negarse mientras las cámaras observaban. Eiko planeaba aprovechar esta oportunidad para acabar con la familia Hattori. Ese era el tipo de persona que era ella.

Youzou y Junko se dieron cuenta de lo que estaba pensando Eiko. Youzou abrió la boca para proporcionar algún tipo de resistencia. Simplemente necesitaba alguna razón que pudiera dar aquí. Sin embargo, fue interrumpido por un grito de Yuuko.

¡Está bien! ¡Voy a derrotar a todas las bestias demoníacas en la vanguardia! ¡No les dejaré ninguna a los demás!

Sin importar lo salvaje que podría ser Yuuko, ella no había sido del tipo que diría algo así. Youzou y Junko la miraron con sorpresa. Sin embargo, no fueron capaces de detenerla. Cuando se trata de comodidad frente a las cámaras de televisión, nadie podía superar a Yuuko. Ella le prometió a los espectadores que tomaría la vanguardia y, con lágrimas falsas en los ojos, anunció su determinación para cazar a las bestias demoníacas.

Sin que tuvieran la oportunidad de dar marcha atrás, la familia Hattori se vio obligada a tomar parte en la reunión de estrategia.

Casi al mismo tiempo, llegó un informe de que el portaaviones volador del ejército imperial, Genkaku, había llegado. Era una fortaleza móvil que contenía una brigada entera de 2,500 personas. Poseía un motor que creaba energía por su cuenta que le permitía difundir mana. Su habilidad para crear un entorno en el que se podía usar el mana lo volvía perfecto para las batallas mágicas.

En ese momento, amaneció. Cuando la luz del amanecer hizo que el Genkaku brillara, tenía una majestad indescriptible. Era igual de grande que el edificio escolar de la Academia de Magia Constante que se había transformado en el castillo del rey demonio. Se detuvo a un kilómetro del edificio de la escuela.

Con eso, Eiko tenía más de 3,700 tropas bajo su mando. Y los caballeros se reunirían con ella más tarde. La gente viendo casualmente la batalla en la televisión nunca habrían adivinado qué evento tan extraordinario estaba a punto de ocurrir.

Mientras observaba la transición desde el cielo, Hiroshi no pudo evitar sorprenderse por la llegada del Genkaku y la participación de Yuuko y los demás de la familia Hattori. Él no sabía lo que estaba pensando Akuto, pero ya que sabía lo que había llevado a todo esto, solo pudo reírse por lo fuera de control que se había vuelto la situación.

¿Qué se supone que debo hacer?

No sabía qué hacer, pero una cosa destacó para él. La visera de su traje podía recibir todo tipo de información. Por supuesto estaba recibiendo las imágenes de televisión siendo transmitidas. La diferencia en la forma que Yuuko actuaba le molestaba. Él sabía cómo actuaba ella en televisión y cómo actuaba en realidad, así que pudo sentir algo ominoso acerca de su comportamiento.

¿Hay algo que pueda hacer por ella? ¿Puedo luchar contra tantas bestias demoníacas? ¿Puedo luchar contra ese portaaviones gigantesco? No…

Pero cuando pensó en lo grande que se había vuelto la situación, sintió una emoción similar a la ira dirigida hacia Akuto que había invitado a todo esto.

Yo quería ser tan fuerte como él, pero esto está mal. ¿Está abandonando algo por sus propios deseos egoístas?

Hiroshi pensó.

Ahora que lo pienso, este traje fue hecho para el combate anti magia.

Le ordenó al traje que mostrara sus habilidades en la visera y lo hizo. Leyó cuidadosamente la parte relativa al cancelador de mana. Sus habilidades eran sorprendentes. Podía negar cualquier mana a unos cientos de metros del traje.

Si uso esto… ¿podría ser capaz de derrotar a cualquiera de los dos?

Hiroshi miró primero al castillo lleno de bestias demoníacas y luego al portaaviones.

En ese caso, solo hay una cosa que puedo hacer, y que debo hacer.

Con su mente decidida, Hiroshi comenzó su descenso. La compañía de Junko y Yuuko había terminado de tomar su posición. Aterrizó en el centro de la formación de esa compañía.

Los ninjas completamente armados inicialmente se pusieron tensos ante su aproximación, pero todos sabían que Brave había protegido a Yuuko. También era conocido comúnmente como el Asesino de Bestias Demoníacas Brave. Cuando vieron quién era, la tensión se transformó en gritos de alegría.

El equipo de las noticias también había visto a Brave. Hiroshi comprobó las imágenes en su visera. Verlo hizo que se sintiera un poco incómodo.

Pero no fueron los ninjas o los reporteros los que le dieron la mayor bienvenida, fue Yuuko. Ella corrió hasta él y envolvió sus brazos alrededor de su cuello.

¡Has venido! ¡Es cierto! ¡Matemos juntos a estas abominables bestias demoníacas! – dijo Yuuko con una expresión de alegría.

Hiroshi podía sentir muy bien lo extraño que estaba actuando.

Ya sea que mate a las bestias demoníacas o no, yo te protegeré. – dijo él en voz baja.

Las cámaras estaban filmando este encuentro entre la idol Hoshino Yuri y el Asesino de Bestias Demoníacas Brave, pero no habían captado su voz.

Yuuko respondió con una voz igualmente baja.

Tienes que matarlas. Tenemos que matar montones y montones de ellas. Odio a las bestias demoníacas.

Yuuko mostró una sonrisa despreocupada. Esta era la expresión perfecta de una idol, pero le dio a Hiroshi una terrible sensación por alguna razón.

Estaba usando el cancelador de mana para evitar que se usara mana alrededor de ellos, así que nadie podía estar escuchando su conversación. Aun así, seguía preocupado por Junko y los otros que observaban. Junko les estaba dando una mirada sospechosa, pero Hiroshi no podía determinar si ella había notado lo extraño que estaba actuando Yuuko.

Él fue incapaz de dar una respuesta a la solicitud de Yuuko de “matar montones y montones de ellas”. Por suerte, el camarógrafo se acercó y Hiroshi dio una excusa para volar al cielo. La saludó y le dijo a Yuuko que regresaría una vez que comenzara la batalla.

¿Una vez que comience la batalla? ¿Qué se supone que haga entonces?

Divertido por sus propias palabras, se rio de sí mismo. Todavía no podía decir lo que debería hacer y sin embargo había decidido proteger a Yuuko.

Hiroshi finalmente se dio cuenta de que sus acciones afectaban a los que lo rodeaban cuando tenía incluso un poco de poder. Comenzó a preguntarse si ahora estaba en la misma posición que Akuto, pero rápidamente negó con la cabeza. Akuto tenía la intención de sacrificar todo lo demás por el bien de Keena. Y como prueba de eso…

Puede haber sido indirecto, pero él le hizo esto a Yuuko-chan. Y sin embargo él escapó, dejándola de este modo.

Con las tropas en su lugar, Eiko solo tenía que dar las instrucciones para la operación. Pero antes de que pudiera, alguien la llamó de repente por detrás.

¿Qué es esto? No veo cómo esperas ganar con este despliegue de tropas. Oh, ¿estás tratando de aniquilarlos por completo? Tus tropas no están hechas para eso.

Eiko se sorprendió de que alguien le dijera eso a ella, la comandante. Con las cámaras sobre ella, no podía permitirlo.

Nos enfrentamos a bestias demoníacas insensibles. La aniquilación es la única opción. Y esta operación fue armada con el consentimiento de las tropas…

Eiko se volvió mientras hablaba, pero se detuvo con sorpresa cuando vio a un hombre en ropa ordinaria en lugar de un traje militar. Además, todos los relacionados con los medios se habían ido.

¿Quién eres tú?

Yo soy del Gabinete de Inteligencia y la Oficina de Magia. Pedí que las cámaras se fueran temporalmente. De esa manera podemos discutir algunos temas más peligrosos. Si sabes lo que quiero decir.

El hombre sonrió mientras hablaba en un tono alegre. Eiko bajó la guardia cuando oyó donde trabajaba. – ¿Trajiste a los caballeros contigo?

El Gabinete de Inteligencia y la Oficina de Magia era la agencia de inteligencia de la oficina del gabinete. Normalmente tenía ocho miembros registrados, por lo que era comúnmente conocido como CIMO 8. Sin embargo, los detalles de la organización no eran bien conocidos. Eiko solo sabía que eran los subordinados de Bouichirou. Casi no tenían ninguna influencia sobre los militares, pero tenían influencia sobre los caballeros.

Estaban de guardia para mantener a las personas normales fuera. Además, ese no es nuestro trabajo. Hemos venido solos.

¿Entonces qué? No me digas que quieres tomar el mando.

No, no. No tienes que ser tan cautelosa. Simplemente queremos el derecho a actuar como nos plazca aquí.

¿Debido a que su líder está dentro de ese castillo?

Oh, y si los militares nos apuñalan accidentalmente por la espalda, no nos quejaremos. Simplemente queremos el derecho de actuar como nos plazca aquí.

Eiko dudó en concederle ese derecho, pero esta operación simplemente requería que las bestias demoníacas fueran eliminadas. No importaría si actuaban por su cuenta.

– Bien entonces. Si eso es lo que tú…

Eiko dejó de hablar porque el hombre desapareció antes de que terminara de hablar.

Ella había estado insegura de sus decisiones no mucho antes, pero con el inicio de la operación acercándose, Eiko cambió su proceso de pensamiento. Una vez que vio regresar a los medios, anunció el nombre de la operación propuesto anteriormente.