Kami Tachi ni Hirowareta (NL)

Volumen 11

Capitulo 7

Episodio 33: Una Pequeña Charla En El Camino A Casa Y El Estado Actual De La Ciudad

Me encontré con mi guardaespaldas Hudom en el área de recepción del gremio.

“Lo siento por la espera”.

“Oh. ¿Se acabó la reunión?”

“Sí. Todo transcurrió sin problemas”.

Hice que me esperara en el área de recepción durante la reunión.

“E-Entonces, debería volver al trabajo”, dijo una de las recepcionistas.

Aparentemente, ella y Hudom habían estado hablando.

“¿Interrumpí?”

“Simplemente charlando. Y reuniendo información. ¿Qué sigue en la agenda?”

“Limpiar las calles por la tarde, pero aún queda algo de tiempo. Iba a pasar por el cuartel general de seguridad. He dejado manos capaces en cada puesto, pero necesito revisar y firmar algunos documentos”.

“Entendido.”

Justo cuando Hudom se acercaba a la puerta principal del Gremio de Comerciantes, hice contacto visual con un hombre que entraba al edificio. La repugnancia brilló en su rostro por una fracción de segundo antes de que inmediatamente se transformara en una sonrisa cuando gritó: “Vaya, vaya. Mucho tiempo sin verlo.”

“Hola, Wanz”.

“No hemos hablado desde la desafortunada conclusión de nuestra conferencia. Pareces estar bien.”

“Si, gracias. ¿Has perdido algo de peso, por casualidad?”

“Con el clima frío llegando rápidamente… Me apetece verte aquí”.

“Vine a ver a un amigo”.

“Ya veo. Es lo mismo para mí. Discúlpame.”

“Cuídate.”

Wanz se dirigió al mostrador de recepción mientras salíamos. Aparentemente quería evitar conversaciones conmigo tanto como yo lo hice con él. Sólo un saludo ostentoso por obligación.

“Jefe, ¿lo llamaste Wanz?”

“Él es el único.”

“Él es con quien debatiste ferozmente cuando estabas nervioso. Me alegro de que haya ido en paz”.

“No iba a empezar a discutir con él en ese momento. Parece que quiere seguir jugando al ciudadano inocente y respetuoso de la ley”.

“¿Oh?” Hudom me miró a la cara. “¿Y por qué te sientes mal? Estoy seguro de que no querías conocer a ese tipo, pero ¿te molestó tanto?

“¿Me veo tan molesto?”

“Sí.”

Debe haber estado escrito en toda mi cara. “Bueno, no lo había visto desde el debate, y no entiendo por qué llegué tan lejos contra alguien así. Realmente no puedo explicarlo… Pero cuando lo conocí, sentí esta presión… como si tuviera que detenerlo a toda costa”.

“¿Presión de él?”

“No estoy seguro. Sentía que no podía dejar que las cosas salieran como él quería”.

Pero no me sentí así en absoluto cuando me topé con él. No podía entender por qué estaba tan estresado por eso en la conferencia. Incluso me pareció excesivo haber reaccionado tan drásticamente. Era excesivo, supongo.

“Es como si estuviera enfrentando a un solo duende con muchos aliados de mi lado, y debería haberlo hecho con suficiente precaución para evitar lesiones, pero entré listo para morir en el intento, imaginando de alguna manera que toda la nación se derrumbaría. si perdiera… ¡Reaccioné tan mal ante una amenaza tan pequeña que quiero ir a arrastrarme por un agujero! Cuanto más lo pienso, más avergonzado estoy, y podría decir que me sentí acorralado o…

“Entiendo. Entiendo que es vergonzoso para ti pensar en eso”.

Sentí que este incidente sería mi peor recuerdo de esta vida.

“Por curiosidad personal y profesional… ¿Deberías hacer algo con él?” Hudom preguntó después de echar un vistazo a nuestro entorno.

Miré a mi alrededor antes de responder: “Nuestro enemigo está plantando todo tipo de trampas para aumentar el crimen en Gimul. No vamos a vencerlos eliminando a agentes humildes como Wanz”.

Digamos que podríamos deshacernos de Wanz, ya sea legalmente obteniendo pruebas sólidas de su mala conducta, o por la fuerza sin que nadie lo sepa. ¿Entonces qué? A menos que fuéramos tras los nobles que controlaban agentes como Wanz, y el líder entre ellos, solo se enviarían más agentes a la ciudad hasta que abandonaran todo el plan. En este momento, no hay casi nada que podamos hacer contra los nobles que acechan detrás de los agentes. Haga un ataque apresurado contra un noble, y fácilmente podríamos pintarnos de villanos. Habiendo dicho eso…

“Me han dicho que el duque y la duquesa ya están trabajando en ese frente en la capital. No hay necesidad de que nos arriesguemos saltando a la acción. Desenmascararán al titiritero”. Déjalo en manos de los expertos, diría yo. “Lo que podemos hacer en esta ciudad ahora es mitigar el crimen en Gimul y el daño causado por él tanto como sea posible hasta que el duque y la duquesa cumplan su misión, con suerte llevar el crimen a donde estaba antes de la gran afluencia de trabajadores. De lo contrario, nos prepararemos para el peor de los casos. En otras palabras, no necesitamos apresurarnos para curar la enfermedad, solo tratar los síntomas”.

Incluso durante la reunión de hoy, Dameyer había mencionado que la tasa de delincuencia había bajado casi a donde estaba antes de que llegaran los trabajadores. “Todavía hay peleas y conflictos menores atribuidos al aumento de la población, pero se evita que aumenten porque Los equipos de la compañía de seguridad están utilizando su gran número para obtener una ventaja al hacer rondas frecuentes”.

“Algunos de su personal son los trabajadores que vienen, ¿verdad? No es de extrañar que tengas muchos miembros”.

“Todavía estamos contratando regularmente”.

Hablando de ellos, acabamos de pasar una unidad de patrulla mientras hablábamos. Unos pasos más adelante, escuché que alguien llamaba al equipo y les daba las gracias. Mis oficiales de patrulla casi se habían quedado sin hogar, pero su trabajo honesto les había ganado una recepción decente por parte de la gente de Gimul.

“Siento que la ciudad ha recuperado su antigua tranquilidad. Tendríamos que mantener la guardia alta, pero creo que hemos evitado el peor de los casos. Ahora, solo debemos concentrarnos en preservar este estado y confiar en que el duque y la duquesa llegarán a la fuente. La ciudad es más importante que lidiar con ese pequeño títere”. Aunque solo había llegado a esta conclusión después de escuchar lo que Hughes y los otros miembros del personal tenían que decir. “Me han dicho que el enfrentamiento será durante la temporada de baile de fin de año, y la victoria es nuestra si podemos llegar tan lejos. Lo tomé como una muestra de confianza de que van a atrapar al titiritero dentro de un año”.

“Oh, es porque las cosas han progresado tanto”.

“¿Qué es?”

“Qué tranquilo estás en comparación con antes. Y no te ofendas, pero no pareces tan ocupado. Solo una impresión rápida de mi primer día como tú guardaespaldas, pero…”

“¿No es tan malo como pensabas?”

Hudom asintió tímidamente, pero no me ofendí.

“Estoy mucho más tranquilo gracias a todos los que vinieron de casa del duque, y realmente ya no estoy ocupado. Pero no creo que eso afecte lo que está pasando en la ciudad”.

“Eres una figura central en la ciudad ahora, jefe”.

“Bueno… Di mi opinión aquí y allá, pero eso es todo. Construí la compañía de seguridad y la planta de basura, y la fábrica de productos de limo con la compañía Morgan, pero solo di mi opinión y mi dinero, y firmé algunos papeles. Delego completamente el trabajo real a quien esté a cargo”. Realmente estaba haciendo esto. Todo lo que tenía que hacer como propietario era firmar un resumen de las progresiones comerciales, lo que no llevó mucho tiempo. “Podría decir que los paseos matutinos como este son parte del trabajo si digo que verifico dos veces que las notas que recibo sean precisas… De todos modos, definitivamente tengo suficiente espacio para respirar que no diría que estoy ocupado. De hecho, nunca siento que estoy trabajando últimamente. En su mayor parte, uso mi tiempo para mis pasatiempos, como investigar limos, trabajar en la granja o estudiar para el examen de licencia en el Gremio de Domadores”.

“Estabas en una reunión”.

Incluso esas reuniones fueron solo una oportunidad para escuchar lo que tenían que decir y dar mi opinión sobre ellos. Los que harían el trabajo real serían los maestros del gremio y su gente. Incluso antes de que construyera la empresa de seguridad, había agentes defendiendo la ciudad y muchas personas estaban trabajando para promulgar políticas que la ayudarían. Incluso cuando la delincuencia iba en aumento, el sistema de autolimpieza de la ciudad estaba presente en la forma de personas que intentaban mejorar su propia situación. Esta vez, sin embargo, la afluencia de trabajadores había cerrado esos mecanismos, como un servidor sobrecargado con una avalancha de ataques cibernéticos. Solo tenía que disminuir la carga en cada departamento. Si la ciudad se estaba quedando sin trabajos y alojamientos para acoger a estos trabajadores, solo tenía que construir más receptáculos. Una vez que el entorno se recupere lo suficiente como para que funcione su mecanismo de autolimpieza, la tasa de criminalidad mejorará naturalmente.

“Yo sugiero cosas como esa, y las empujo con dinero, poder y conexiones. Cuando todo está dicho y hecho, arrojo el proyecto a manos capaces. Definitivamente no estoy tan ocupado como todos parecen pensar que estoy”.

Dado que había hecho un montón de trabajos llamativos por mi cuenta, las personas que sabían lo que estaba pasando podrían verme como una figura central de la ciudad, pero dudaba que fuera a obtener mucho beneficio para él tratando de obtener información de mi vida. De hecho, ¿no perdería tiempo y esfuerzo cuanto más pusiera su atención en mí? Expresé esta preocupación y Hudom devolvió un largo suspiro.

“¿Alguna vez la gente te dice lo sorprendentemente malvado que eres?”

“Disculpe. No es que sea algo de lo que estar orgulloso, pero soy fácil de manipular y aprovechar”. Eso fue solo porque estuve rodeado de manipuladores durante mis treinta y nueve años en la Tierra, así que había aprendido sus técnicas por experiencia… No, eso seguramente no tenía nada que ver con esto. “No soy malvado, vamos. Volvamos al tema que estábamos discutiendo antes de la reunión”.

“Una desviación bastante obvia, pero está bien. ¿No estábamos hablando de los movimientos que usé en nuestro combate?”

“Si no te importa hablar de eso”.

“Ninguna de ellas son técnicas secretas, y mi entrenador me las enseñó en la academia, así que no me importa compartirlas”.

“Gracias. Si también estás dispuesto a enseñarme tus técnicas, estableceré un momento y un lugar para ello. Hay muchas cosas sobre las que quiero preguntar, pero quiero comenzar con aquella en la que me disparaste tu energía”.

“Si te diste cuenta de eso, no hay mucho que pueda decirte… Pero usaste energía para fortalecer todo tu cuerpo”.

“Sí. Así me enseñaron a usar la energía”.

“El primer paso es poder luchar con normalidad mientras fortaleces todo tu cuerpo. Es la base, y lo haces bien. Si puedes vencer a tus oponentes con eso, genial. Pero nunca se sabe lo que sucederá en la batalla. Podrías enfrentarte a un oponente mucho más fuerte o más difícil de manejar. La necesidad de prepararse para lo peor inventó los movimientos que estaba usando el otro día. Eso es lo que me dijeron, de todos modos. Aquel en el que te disparo mi energía, por ejemplo, se usa para atacar a enemigos fuera del alcance de nuestros puños o armas. Con suficiente habilidad, puedes usar eso para luchar contra monstruos voladores o arqueros distantes. Por supuesto, nada mejor que una preparación adecuada. Hay otros, como uno que fortalece tu puño o arma para golpear monstruos cubiertos con caparazones duros. Pero el mejor maestro solo puede utilizar completamente su fuerza cuando su arma alcanza su máximo potencial. Todas estas técnicas comienzan con el fortalecimiento de su cuerpo, y dominarlas lo lleva de vuelta a fortalecer su cuerpo. Es la base y el objetivo final de esta serie de técnicas”.

Estaba a punto de mencionar lo interesante que fue cuando continuó: “Y me hice parecer un experto, pero estoy lejos de serlo, así que todo eso fue un rumor. Pero, según la leyenda de Tigar, el Dios Guerrero, su piel se convirtió en una armadura impenetrable con el uso de la energía, y sus puños rompieron escamas de dragón. Digo leyenda, pero hay varios documentos que respaldan esto”.

“Oh…” Fue una sorpresa escuchar (hasta donde todos sabían) el nombre de mi abuelo de la nada. Hudom continuó contándome historias interesantes sobre militares famosos y aventureros de la historia. Era un compañero de conversación aún más entretenido de lo que esperaba, lo que hizo que el camino de regreso a la compañía de seguridad se sintiera muy corto.

Cuando llegamos, estaba a punto de presionar con pesar el botón de pausa en nuestra conversación para volver al trabajo cuando Lilian, la criada, nos llamó.

“Maestro Ryoma”. Estaba de pie en el mostrador de recepción, fuera del camino. “Orest Moulton, de la Compañía de Comercio de Esclavos Moulton, está aquí para verlo”.

“¿Orest?” ¿El desconfiado y apuesto presidente de la empresa? Estaba seguro de que no teníamos una cita.

“Le avisé de tu ausencia y me dijo que no era problema y que había venido sin cita. Pidió esperar tu regreso… Ahora está en la sala de reuniones. ¿Debería despedirlo?”

“No, lo veré si me está esperando”.

Quería saber qué quería, y le debía una de la última vez… Aun así, tenía la sensación de que nuestro encuentro no iba a ser tan fácil. Con la guardia en alto, me dirigí a la sala de reuniones.