Choppiri Toshiue demo Kanojo ni Shitekuremasu ka? (NL)

Volumen 2

Capitulo 7: La Princesa Elegida Y La Princesa No Elegida

“La vida es una serie de elecciones”.

Esa es una cita famosa del famoso dramaturgo William Shakespeare. Bueno, estrictamente hablando, no son sus palabras, sino más bien una línea que aparece en la tragedia escrita por él, Hamlet, y en realidad, esas palabras en realidad no aparecen en Hamlet en absoluto y parece ser una cita ficticia que se ha difundido libremente en internet. En cualquier caso, ya sea que Shakespeare lo haya dicho o no, personalmente creo que la cita es definitivamente cierta y sabia.

La vida es una serie de elecciones. Con solo vivir, las personas se ven presionadas por opciones de todas las formas y tamaños. Hay grandes decisiones que pueden afectar tu vida, como seguir una educación superior y encontrar un trabajo, y luego hay todo tipo de pequeñas decisiones, como tus planes para tu día libre o después de la escuela, la ropa que usas, la comida que comes, los libros que lees y los videojuegos que juegas. Con solo vivir, las elecciones inevitables te vienen incesantemente una tras otra.

Y en el amor es igual. Confesarse o no confesarse. Aceptar una confesión o no aceptar una confesión. Pedir el número de teléfono de alguien o no. Escoger el lugar para una cita. Lo que se come juntos y lo elegante que será. Dar un regalo o no. Dar una sorpresa o no.

Junto con estas opciones más pequeñas, existen opciones más grandes e importantes que forman los cimientos del amor, como con quién sales o a quién eliges.

Si la vida fuera una novela visual, podrías simplemente volver a cargar un archivo de guardado y hacerlo de nuevo, o disfrutar de las otras rutas en la segunda partida. Si se trata de un juego con varias heroínas, a menudo hay finales preparados para cada una de ellas. Sin embargo, la realidad y los videojuegos son diferentes. Si te equivocas en la vida real, no puedes intentarlo de nuevo y no hay una segunda vuelta. Es más, no se garantiza que haya una elección correcta. Las decisiones que tomas en la vida no se pueden rehacer como en un videojuego. Las opciones no se pueden rehacer y por eso son valiosas.

La vida es una serie de elecciones. O quizás se podría decir que la serie de elecciones que tomas es tu vida. Lo que elegiste y lo que no elegiste. A quién elegiste y a quién no. Solo las decisiones que tomaste por ti mismo pueden determinar tu vida. Decenas, cientos, miles, millones, miles de millones, billones de opciones; mientras vivamos, seguiremos tomando innumerables opciones que derivarán en un único camino como resultado de esas elecciones y puede que eso sea a lo que la gente llama “vida”.

***

“¿Ah?”

Mi voz sonaba extraña por la locura que acababa de escuchar por teléfono. No podía creer lo que me decía Ura.

“¿Q-Qué estás diciendo, Ura? ¿Quieres que tenga una cita con Ibusuki mañana?” Cuando regresé de mi cita en la ciudad vecina, cené y fui a mi habitación y entonces

recibí una llamada de Ura, cuyo tema me estaba costando mucho entender.

“Cualquier cosa está bien. Ir al cine, a un parque de diversiones, a un acuario o lo que sea. Simplemente diviértanse juntos.”

“No entiendo nada. Pero no hay forma de que pueda hacer eso. Simplemente no puedo salir a solas con ella y divertirme.”

Creo que los criterios de infidelidad son diferentes para cada persona, pero estoy seguro de que la mayoría de personas reconocen como infidelidad salir a solas con una chica de tu grado que ya se te confesó anteriormente. Incluso si por casualidad Orihara-san estuviera de acuerdo con eso, yo no querría hacerlo. No quería hacer nada que la hiciera sentir incómoda. Sin embargo…

“Sé que estoy pidiendo mucho. Pero… Momo, te lo ruego. ¿No puedes hacer nada?” Por teléfono, la voz de Ura sonaba inusualmente seria y desesperada.

“¿Ibusuki te pidió que hicieras esto?”

“No. Ella no tiene nada que ver con esto. Te lo estoy pidiendo por mi propia cuenta.” “…No lo entiendo. ¿Por qué estás haciendo todo esto por el bien de Ibusuki?” “No es por el bien de esa mujer…”

Su voz, que sonaba joven para su edad, adquirió un tono de tristeza. “Es solo que… me cabrea. Ese deseo de terminar todo sin haber hecho nada… Todas esas sonrisitas falsas… Simplemente no puedo mirar la autocomodidad de alguien que se da aires de héroe trágico.”

“……”

Lo entendí. Esa condena. Ese reproche. Esa burla. Nada de eso iba dirigido a Ibusuki. El objetivo de su cinismo cortante era…

“Ura… todavía estás…”

Rápidamente me detuve para no terminar las palabras que salían de mi boca. No era un tema del que hablar libremente. No era una historia que debiera plantearse con tanta sencillez. No era el tipo de herida que se podía tocar con tanta facilidad. La parte más sensible de Izumi Urano no era algo para tocar con tanta indiferencia.

“Te lo ruego, Momo. Por favor, hazlo por mí.”

“……”

Un montón de emociones y pensamientos corrieron dentro de mi cabeza. Al final de mi conflicto interno, la respuesta que elegí fue…

***

“¿Ah?”

Mi voz sonaba extraña por la locura que acababa de escuchar por teléfono. No podía creer que Momota-kun dijera algo así.

“¿Q-Qué estás diciendo, Momota-kun? ¿Quieres tener una cita con Ibusuki-san mañana?”

Cuando regresé de mi cita en la ciudad vecina, cené y me relajé, y entonces recibí una llamada de Momota-kun. Salí a la veranda para que mi hermana no me oyera.

“E-Este… bueno, cómo decirlo… ¿No cuenta eso como engañar?”

Estaba tan sorprendida que realmente no pude hablar con firmeza. No quiero ser el tipo de novia de mente estrecha que tiene un ataque cada vez que mi novio entra en contacto con otra mujer, pero… ¿este tipo de cosas no están obviamente fuera de discusión? Salir a solas con una chica, además, la chica que se le confesó antes… Hmm. ¿Cómo debería decir esto? Lo odio.

“Así que es un e-engaño después de todo, ¿eh?”

La voz de Momota-kun era apologética, pero reconoció claramente que se trataba de una infidelidad.

“…Más bien, ¿por qué te molestaste en decírmelo? Es solo que, si vas a engañarme, entonces debes hacerlo de una manera que no me dé cuenta… ¡No digo que esté bien que lo hagas si no me doy cuenta! P-Pero no entiendo por qué me lo anunciaste…”

“Bueno… solo pensé que, si me quedaba callado, sería completamente una infidelidad.” “No creo que deje de ser una infidelidad incluso si me lo dices.”

“Eso es cierto, pero…”

El estado de ánimo se volvió incómodo. Más que enojada por su declaración de infidelidad, estaba preocupada. Digo, era totalmente extraño que Momota-kun dijera algo como esto.

“¿Paso algo?” pregunté.

“…Ura me lo pidió.”

“¿Ura-kun?”

“Sí. Dijo que quiere que tenga una cita con Ibusuki. Me negué, pero aun así me pidió que lo hiciera.”

“…¿Por qué Ura-kun hizo eso?”

“Tampoco sé los detalles, pero creo que él tiene sus razones.”

Ura-kun. Izumi Urano-kun. Un amigo de la infancia de Momota-kun y un amigo importante que va a la misma escuela. No lo he conocido, pero Momota-kun me mostró una foto de ellos dos con Kana-kun. Sus ojos se ven un poco antipáticos, pero tiene una cara linda.

“Ya que Ura me lo pidió, quiero ayudarlo tanto como pueda. Pero si estás en contra, lo rechazaré.”

“Eh…”

Me quedé sin palabras. ¿Dejo que lo haga o no lo dejo?

No sabía cuál era la opción correcta entre las dos. A decir verdad, no quería que tuviera una cita con otra mujer. Solo imaginarlo hacía que me doliera el pecho como si lo estuvieran apretando. Estaba nerviosa de que algo pudiera salir mal. Sin embargo, no quería destruir la relación de Momota-kun con su amigo por mi egoísmo. ¿Qué tengo que hacer?

“Ah. No, lo siento. Olvida lo que dije”, dijo Momota-kun después de que me volví incapaz de hablar. “Esto es… injusto. Es como si te estuviera echando toda la responsabilidad.”

Momota-kun se reprendió a sí mismo y luego reformuló sus palabras. “Lo siento, Orihara-san. Mañana voy a tener una cita con otra mujer”, dijo, anunciando audazmente su infidelidad. “Sé que, si realmente pienso en ti, debería negarme… Pero quiero hacer lo correcto con Ura e Ibusuki.”

“……”

“Por supuesto, te prometo que no haré nada que pueda hacer que te preocupes. Te lo compensaré sin falta. Así que… Por favor, dame tu permiso.”

Oh, Momota-kun es increíble después de todo. No transfiere la responsabilidad a nadie más y no huye de sus elecciones. No importa la decisión o elección, él mismo asume la responsabilidad. No se parece en nada a mí, que tenía tanto miedo de salir lastimada que le puse toda la responsabilidad diciéndole “Puedes dejarme en cualquier momento”. Aunque soy mayor, doce años mayor, él me está enseñando mucho.

¿Puedes respetar a un novio que es más joven? Ahora puedo objetar lo que dijo Komatsu-san. La edad no importa. Puedo respetar profundamente a Momota-kun como hombre y como persona. Puedo atesorarlo y respetarlo.

“Entiendo”, dije. “Puedes ir a esa cita, Momota-kun. Como tu novia, te doy permiso oficialmente.”

“¿En serio?”

“Sí. Estaré bien porque confío en ti, Momota-kun. Así que ve a esa cita. No lo entiendo del todo… pero creo que es importante para Ura-kun e Ibusuki-san.”

“M-Muchas gracias.”

Momota-kun me agradeció con una voz aliviada. Aunque había hecho una declaración audaz con una voz fría, en el fondo, parecía que estaba muy preocupado por haberle hecho una declaración de infidelidad a su novia.

“Sin embargo, Momota-kun. Como condición para permitirte ir a esta cita, ¿escucharías mi petición?”

***

Ibusuki y yo quedamos en un parque de atracciones en Koriyama el domingo, el día después de la llamada de Ura. Como no tenía el número de contacto de Ibusuki, ayer arreglamos todo a través de Ura y decidimos tener la cita en un parque de diversiones.

“Ah, Momota”, dijo Ibusuki y corrió hacia mí. Habíamos quedado en la entrada del parque y yo había llegado un poco antes.

“B-Buenos días”, Ibusuki me saludó torpemente.

“S-Sí”, le respondí torpemente.

El atuendo de Ibusuki era un suéter de verano con hombros descubiertos y una falda de cintura alta. Era completamente diferente a su atuendo sencillo que usó el otro día en el acuario. Se veía femenina y linda, como si estuviera haciendo todo lo posible por mostrar su encanto a la persona que le gusta.

“Lo siento… por hacerte tener una cita conmigo hoy”, se disculpó y miró hacia abajo. “Tu novia… ¿Se lo dijiste a Orihara-san?”

“Sí.”

“¿Y está todo bien?”

“Sí, bueno, algo así.” Probablemente esté bien. Incluso accedí a su condición. “Ya veo… eso es asombroso. Ella realmente confía en ti, Momota.” “Espero que así sea.”

“¡Bien! ¡Entonces divirtámonos sin trabas hoy!” dijo Ibusuki con una voz forzada y alegre y corrió hacia la entrada del parque de diversiones.

Me reí ligeramente y la perseguí, diciendo, “Oye, si no compramos los boletos primero, no podremos entrar.”

“¡Uwaaa, increíble! ¡Es un súper parque de diversiones!” “Sí, seguro que lo es.”

“Estoy emocionada porque hace tiempo que no vengo a uno. Oye, Momota, ¿se te dan bien las atracciones intensas?”

“No particularmente, pero… bueno, creo que puedo manejar la montaña rusa de aquí.” “¡Muy bien! ¡Entonces vamos a subirnos a todo! ¡Hoy vamos a conquistar todas las

atracciones adrenalínicas!”

Desde que entramos en el parque, Ibusuki había estado de excesivamente buen humor y excesivamente habladora. Era como si se estuviera obligando a estar de buen humor. Pensé que sus sentimientos de culpa hacia Orihara-san y hacia mí la hacían actuar de esa manera. Sin embargo, después de subirnos a la montaña rusa, los go-karts, el carrusel y otras atracciones, sentí que su estado de ánimo se volvía más natural.

“¡Oh, Momota, mira!” Estábamos en un área de juego con máquinas un poco anticuada y entre las máquinas de rodeo y máquinas de golpe, había una que Ibusuki estaba señalando: un juego de baloncesto de tiros libres. Había nueve aros alineados en filas de tres y parecía que, si podías encestarlos todos dentro del límite de tiempo, ganarías un premio. Era algo así como una versión “Struck Out” de baloncesto.

“Esto debería ser muy fácil para ti, ya que eres tan alto, ¿verdad?” “Mmm…”

Supongo que debería serlo. Tal vez porque estaba configurado para ser fácil, o tal vez porque estaba destinado a niños, los aros estaban en una posición en la que, si extendía la mano, podía tocarlos. No importa lo malo que sea en los deportes, debería ser capaz de lograrlo. Soy malo en el baloncesto porque no puedo driblear, así que, si es solo un tiro libre, probablemente estará bien.

“Está bien, intentémoslo.” Puse doscientos yenes en la máquina y unas diez bolas rodaron hacia mí. Cuando agarré una pelota con una mano, los ojos de Ibusuki se iluminaron.

“Wow. ¡Increíble! ¡Momota, ¿puedes sostener una bola de baloncesto con una mano?!” “Sí, no es gran cosa.”

“¡Eso es una locura! ¡Es súper asombroso! ¡Eres como un atleta profesional! ¡Esto no debería ser un problema para ti!”

“Jajaja. Bueno, Solo mira.”

Ser elogiado así no se siente tan mal. Bien, estoy totalmente emocionado. Por alguna razón, hoy me siento diferente de lo habitual. Siento que puedo hacerlo. Me concentré en el aro. Adopté mi mejor postura y solté la bola en el momento justo.

“…¡Nyeah!”

Inmediatamente después de disparar la bola con todas mis fuerzas, desapareció. No había señales de que se hubiera dirigido hacia el aro y no estaba en ninguna parte de mi campo de visión. ¿Qué? ¿A dónde se fue? ¿Es una bola mágica que desaparece? ¿El “Tiro Fantasma”? Espera, no, ¿qué sentido tiene un tiro que desaparece contra ti mismo?

“¿Dónde está la bola? ¡Ay!” Inmediatamente después de mirar a mi alrededor, hubo un impacto en la parte superior de mi cabeza. Sentí que me había encogido unos cinco centímetros. La bola que rebotó en mi cabeza cayó al asfalto y se alejó rodando. Me agaché y sostuve mi cabeza mientras el dolor reverberaba en la coronilla de mi cabeza.

“U-Ugh…”

“¿Qué? ¿En serio?” dijo Ibusuki.

Soportando el dolor, miré hacia arriba y pude ver a Ibusuki dándome una mirada terriblemente perpleja. La expresión de su rostro era más de confusión que de burla, como si no pudiera entender el fenómeno que había ocurrido ante sus ojos. Tenía los ojos de un humano que había presenciado a un animal muy raro.

“Eso de hace un momento… ¿fue una broma?”

“…No.”

“P-Pero no tiene ningún sentido… Lanzaste como una chica, tu pequeño grito fue espeluznante y tus ojos estaban completamente cerrados. Y sin embargo, pusiste una fuerza increíble que hizo que la bola saliera disparada como un jet hacia arriba.”

“……”

“Momota, ¿podría ser… que eres realmente malo en los deportes?”

“…Me avergüenza decirlo, pero sí”, dije en voz baja. La mirada seria en el rostro de Ibusuki fue reemplazada por una carcajada.

“Pfft. ¡Jajaja! Oh cielos, qué gracioso. Conque es así, y eso que pareces un deportista.” “Ugh…”

“Si eras tan malo, deberías haberte negado. No estaba tratando de obligarte a hacerlo, ¿sabes?”

“Pensé que podría hacerlo hoy…”

Realmente creí que podría. Pero pensándolo con calma otra vez, cada vez que intentaba algo como esto, tenía un buen presentimiento y terminaba fracasando de todos modos.

“¿Lo dices en serio…? Jajaja. Qué divertido. Oh, debería haber grabado un vídeo. Si lo hubiera subido a instagram, te habrías vuelto completamente famoso.”

Ibusuki se reía tanto que era exagerado. Como hombre me sentí patético, pero extrañamente no me sentí mal. Me encontré disfrutando saber que Ibusuki podía reír así.

Puede haber sido solo un golpe de buena suerte, pero después de mi patético tiro, pareció que el estado de ánimo se volvió instantáneamente más relajado. La incomodidad entre nosotros dos desapareció y pudimos disfrutar del parque de diversiones de forma natural.

“¡¿Ehh?! ¿El otro día era su aniversario de un mes?”

Mientras hacíamos fila para el famoso helado suave del parque, comenzamos a hablar sobre el día en el acuario.

“Entonces, ¿hicieron algo especial para su aniversario?”

“Le di un regalo, unas flores hechas de jabón. Además, pensé en darle otra sorpresa, pero… pasaron muchas cosas y al final no pude dársela.”

“No puede ser, eso es una pena. ¿Qué tipo de sorpresa era?” “Estaba pensando en leerle un poema que hice yo mismo.” “……”

“Para nuestro primer mes de aniversario, trabajé una y otra vez para componer una obra maestra y… ¿Hm? ¿E-Eh? ¿Qué pasa, Ibusuki? ¿Qué pasa con esa mezcla de desprecio y lástima en tu rostro?”

“…Momota. Alégrate de que no pudieras. Y agradécele a Dios por tu buena suerte.” Parece que mis poemas eran tan impopulares como de costumbre. A pesar de que escribí uno bueno. Mientras charlábamos ociosamente, llegó nuestro turno de comprar

helados suaves. Compré el de sabor a vainilla e Ibusuki compró el de fresa.

“Mmm. Es delicioso.” Ibusuki tenía una expresión de felicidad en su rostro después de tomar un bocado de su helado con su cuchara de plástico. “Es como si la delicia se volviera más deliciosa en mi boca y la delicia de la fresa es tan deliciosa.”

“No se te da bien describir la comida, ¿verdad? Ah, pero ese helado de fresa se ve delicioso.”

“¿Quieres probar un poco? ¡Aah!” dijo Ibusuki. Cogió una cucharada de helado y me la ofreció.

“Eh… Este.” Reflexivamente me tensé y, pareciendo entender qué pasaba, Ibusuki se sonrojó y rápidamente retiró la cuchara.

“P-Perdón. Es solo que… a menudo alimento a mi hermanito de esta manera.” “D-Descuida…”

“…No te gustaría, aunque sea solo un beso indirecto, ¿verdad? No sería justo para tu novia”, dijo Ibusuki. Ella dio una pequeña e increíblemente solitaria sonrisa.

Siento que hoy la distancia entre nosotros se ha acortado considerablemente. La incomodidad que teníamos entre nosotros al principio ha desaparecido por completo. Podemos pasar tiempo juntos como amigos normales. Sin embargo, no importa cuánto se haya acortado la distancia entre nosotros, no podemos convertirnos en pareja. No… Decir “no podemos” no está bien. Simplemente le estoy imponiendo la responsabilidad a otra persona. No es que no podamos convertirnos en pareja, sino que no lo haremos. No nos convertiremos en pareja porque no elegiré a Ibusuki.

Si soy sincero, mi intención era no divertirme realmente en la cita de hoy en el parque de diversiones. Más precisamente, pensé que estaría mal si me divirtiera. Me sentía mal por Orihara-san, y sobre todo, no podía perdonarme por divertirme con otra chica que no era mi novia. Me habría sentido mal por hacérselo a Ibusuki, pero pensaba mantener mi entusiasmo bajo y acabar la cita con una mirada hosca, como si fuera un trabajo de línea de ensamblaje. Sin embargo, en algún momento, ese autocontrol desapareció de mi mente. Fue como si me atrajera la forma en que Ibusuki estaba haciendo todo lo posible para pasar un buen rato y, naturalmente, comencé a divertirme. Sinceramente, me divertí mucho. Pero aun así…

“Vaya, estamos muy arriba. Ha pasado un tiempo desde que me monté en uno de estos, así que da bastante miedo”, dijo Ibusuki. Después de pasar por las otras atracciones, montamos juntos la noria para concluir la cita. Era lo que quería Ibusuki. Nos sentamos frente a frente en una pequeña góndola.

“Momota, ¿no le tienes miedo a las alturas?”

“No realmente. Pero a Ura le aterrorizan las alturas. Y también los espacios cerrados y la oscuridad.”

“Jajaja. El combo completo”, se rió Ibusuki. “Ustedes realmente son cercanos.” “¿En serio? Creo que es una amistad normal.”

“No, puedo sentir un gran vínculo entre ustedes. Por ejemplo, si Urano no hubiera sido el intermediario, no habrías tenido una cita conmigo hoy, ¿verdad?”

“…Probablemente no.”

La conversación murió ahí mismo. Sin nadie hablando, nos gustara o no, nos dimos cuenta de que estábamos encerrados en este espacio y una atmósfera indeciblemente incómoda llenó la góndola.

“…Jajaja, de alguna manera, es un poco incómodo, ¿eh?” dijo Ibusuki y soltó una leve risa como si no pudiera soportar el silencio. “Digo, ¿no es esto demasiado cliché? Montar una noria al final de esta manera es demasiado cliché, ¿no crees?”

“……”

“Jajaja. Esto realmente no tiene sentido. Pasar por todo este esfuerzo solo para ser rechazada. Mejor detengámonos. Hacer que aceptes todo esto solo por mi propia satisfacción es probablemente solo una molestia para ti…”

De repente, Ibusuki dejó de evitar la situación con su risa extrañamente alegre. En cambio, tenía una sonrisa exasperada en su rostro como si estuviera avergonzada de sí misma.

“No, esto está mal. Tratar de reírse de esto así es el problema. Urano se va a enojar conmigo de nuevo por esto.”

“…¿De qué parte de mí te enamoraste, Ibusuki?” “Uwa… ¿me vas a preguntar eso?” “S-Sí. Si puedo, me gustaría escucharlo.”

Ella dijo que cualquiera habría estado bien. Esa fue la razón que Ibusuki dio antes, pero su amiga Uomi lo negó. Además, más que nada, de alguna manera lo entendí a partir de la cita de hoy. Incluso yo no podía ser tan denso. Tal vez esto sea solo un malentendido producto de mi vanidad, pero no pude evitar sentir el afecto de Saki Ibusuki hacia mí en sus palabras y acciones mientras pasábamos el tiempo juntos hoy.

Sus ojos vagaron de un lado a otro como si sufriera de agonía, dejando escapar un “Uh,

ah”.

“…N-No es una gran razón en absoluto”, dijo ella, y después de ese prefacio, comenzó a hablar poco a poco. “Viajas en tren a la escuela, ¿verdad? En realidad, yo también tomo el mismo tren, ¿no te diste cuenta?”

“¿Eh? ¿En serio? No me di cuenta en absoluto.”

“Bueno, es justo. Hay un montón de personas con el mismo uniforme en ese tren. Pero yo te noté, Momota. Digo, te destacas mucho por lo alto que eres. Incluso en un tren lleno de gente, tu cabeza está por encima de la de los demás.”

“Ya veo.”

“Y cuando vas de pie en el tren, a veces te agarras a la barra en lugar de a una correa, ¿verdad? Cuando te vi, pensé, ‘Wow, puede llegar tan alto, increíble’.”

“Ah, sí, lo hago.” Debido a mi altura, es más fácil agarrarse a una barra que a una correa, así que tiendo a hacerlo por reflejo.

“Sí… bueno, de todos modos… esa es la razón.”

“Eh, conque esa es la razón… ¿Eh?” Sin querer, miré a Ibusuki. Cerró la boca, agarró su falda con tanta fuerza que se formaron arrugas y comenzó a temblar mientras parecía muerta de vergüenza.

“¿Eso es todo?” pregunté. ¿Porque me agarro a la barra y no a la correa? ¿Le gustaba solo por eso?

“¡T-Te lo dije! ¡No era una razón tan especial!” El grito de vergüenza de Ibusuki resonó dentro de la góndola. “No puedo evitarlo, ¿de acuerdo…? Cuando vi cómo podías hacer eso, pensé que te veías realmente genial.”

“…E-En otras palabras, ¿es por mi altura?”

“Por tu altura también… Pero además, me gustaba la forma en que te agarrabas a la barra con la mano.”

“¿Mi mano? ¿Tienes un fetiche con las manos…?”

“No, no es como un fetiche. Hay muchas chicas a las que les gustan las manos de los hombres, ¿sabes? Tus manos son grandes y robustas, son tan varoniles… Antes, cuando agarraste la bola de baloncesto con una mano, me emocioné un poco.”

“Oh, ¿de verdad?”

“Bueno, justo después de tu extraño grito y tu tiro de chica, esa emoción murió al instante.”

“…Oh, de verdad…”

Fui ensalzado y después humillado, lo que me deprimió por completo. Al verme así, Ibusuki se rió. Y comenzó a hablar con una suave sonrisa esta vez.

“Al principio realmente fue solo eso. Pero entonces empecé a seguirte con mis ojos incluso en la escuela. En poco tiempo… Uta y Kanao empezaron a salir y todas mis amigas a mi alrededor tenían novios. Y cuando pensé que yo también quería tener un novio… tú apareciste en mi mente.”

“……”

“Así que, supongo que no era tanto que me gustaras, sino que… quería conocerte. Tenía curiosidad por ti, así que pensé que me gustaría saber más sobre ti. Y pensé que, si sabía más sobre ti, entonces tal vez me enamoraría más de ti.”

Sí… entiendo esa sensación totalmente. No es que me haya enamorado de Orihara-san después de saber todo sobre ella. Lejos de eso, al principio pensé que era una chica de preparatoria de mi edad. Para empezar, probablemente no haya una sola persona que sepa todo sobre alguien y luego se enamore de esa persona. Ni siquiera comprendes tu propio corazón, por lo que no hace falta decir que no comprendes el corazón de otro. Cuando se trata de otra persona, es natural que haya más cosas que no sabías sobre ellas que cosas que sabías. A pesar de eso, la gente se enamora de otras personas. Incluso si no conocen realmente a su pareja, se enamoran de ella. De hecho, podría ser todo lo contrario. Probablemente porque no las conocen realmente, se enamoran. El sentimiento de amor probablemente comienza por querer saber más sobre esa persona.

“No fue el tipo de enamoramiento ‘a primera vista’. Tampoco fue un tipo de amor apasionado. Pero cuando pensé que quería un novio, la primera persona en la que pensé fue en ti, Momota.”

Fue entonces cuando Ibusuki me miró directamente. Desde el día en que se me confesó, nos hemos encontrado y hemos hablado muchas veces… pero sentí que esta era la primera vez. Siento que es la primera vez que Ibusuki y yo nos miramos el uno al otro tan seriamente.

“Me gustas. Por favor, sal conmigo.”

Fue una confesión muy sencilla que fue dicha con una voz temblorosa. Sin adornos, sin exageraciones y sin dramas. Parecían los verdaderos sentimientos de una persona que se había despojado de toda vanidad y engaños. Era completamente diferente de su confesión extremadamente arrogante y condescendiente de antes. Estas eran las palabras que esta chica, Saki Ibusuki, había reunido desde el fondo de su corazón.

“…Gracias”, dije, reflexionando sobre su confesión. “Estoy muy feliz de que una linda chica como tú diga que le gusto.”

Quería responderle honestamente. Pensé que era lo menos que podía hacer por la persona que me estaba expresando sus verdaderos sentimientos. “Para ser honesto… mi primera impresión de ti no fue tan buena. Sentí que siempre eras agresiva y, francamente, el tipo de persona con la que no me llevo bien.”

“E-Eso fue solo… ya sabes… Solo pensé que, si mostraba debilidad, entonces perdería, así que estaba tratando desesperadamente de hacer valer mi dominio o algo así.”

“Pero gradualmente mi imagen de ti cambió. Cada vez que nos encontrábamos, aprendía sobre tus puntos buenos y tus lados dulces. La cita de hoy fue muy divertida. Pero…”

Tenía que decirlo. Incluso si no lo dijera, Ibusuki probablemente ya lo sabía. Pero tenía que decirlo. Estoy seguro de que hay un significado en decirlo con mi propia boca.

“Lo siento. No puedo salir contigo. Ahora mismo, ya estoy saliendo con alguien.”

“…Sí. Lo sé.” Ibusuki sonrió. Era una sonrisa solitaria, fugaz y dolorosa. “…Oye. ¿Cuándo conociste a Orihara-san, Momota?”

“Fue a mediados de mayo. Orihara-san viajaba en el mismo tren y… bueno, hubo algunos problemas y terminé salvándola.”

“Ya veo. Entonces… yo fui la primera. Comencé a interesarme en ti a finales de abril.” “……”

“Si…” dijo Ibusuki con una voz llena de una esperanza fugaz. “Si me hubiera confesado antes… Antes de que conocieras a Orihara-san, ¿habrías salido conmigo?”

“……”

“Si… Si hubiera sido yo y no Orihara-san, la que se hubiera metido en problemas en el tren, ¿me habrías salvado y nos habríamos enamorado?”

“……”

Sin darme cuenta, me metí la mano en el bolsillo. Inconscientemente, estaba agarrando con fuerza la cosa que tenía dentro. En la palma de mi mano había unas llaves con un llavero de pingüino azul.

“…No lo sé”, dije.

Sentí como si estuviera huyendo de la pregunta, pero eso fue todo lo que pude decir. Si Ibusuki se me hubiera confesado antes de conocer a Orihara-san, ¿cómo habría resultado? En abril no tenía una chica que me gustara, así que, si se me hubiera confesado una chica linda como Ibusuki, en ese momento probablemente le habría dicho que sí. Si fuera Ibusuki y no Orihara-san quien se hubiera topado con ese abusador en el tren, mi vida probablemente habría tomado un camino diferente.

Sin embargo, eso es un “qué pasaría si” en el que no sirve de nada pensar. La vida es una serie de elecciones y la serie de elecciones que haces es tu vida. La realidad es diferente a la de los videojuegos y no hay puntos de guardado ni segundas partidas. No puedes volver atrás y rehacer tus elecciones anteriores. Tus elecciones son preciosas y siempre van seguidas de arrepentimiento y apego persistente. La gente imaginará constantemente innumerables “qué pasaría si”, futuros que pudieron haber sido y caminos alternativos y sentirá esperanza y tristeza. Y es por eso…

“No sé qué habría elegido en el pasado. Pero ahora… aunque pueda rehacer mi vida un millón de veces, me gustaría volver a enamorarme de Orihara-san.” Incluso si pudiera rehacer el pasado, querría tomar esta decisión. Este camino donde pude encontrarme con Orihara-san es el único que quiero recorrer. No necesito un final harén o un final alternativo. Mi camino es el que camino con la mujer que amo.

“…Ya veo”, dijo Ibusuki.

Pensé que había dicho algo lo suficientemente pomposo como para reírse, pero Ibusuki no se rió. Había una leve sonrisa en su rostro, pero no era de burla. Era una sonrisa tranquila y silenciosa, como si hubiera renunciado a algo y aceptado algo.

“Gracias, Momota. Por ayudarme a lidiar con mis sentimientos”, dijo y aplaudió como si estuviera cambiando de marcha. “Bueno, entonces de ahora en adelante seremos amigos. Llevémonos bien.”

“¿Amigos?”

“Está bien, ¿verdad? ¿O es Orihara-san del tipo que se opone a que su novio tenga el contacto de otras chicas en su teléfono?”

“No, no creo que sea tan rigurosa.”

“Entonces no hay problema. Aunque no creo que sea bueno que salgamos solo nosotros dos, así que divirtámonos todos juntos la próxima vez. Con Urano y Kanao, ¿de acuerdo?” dijo Ibusuki con una sonrisa brillante y despreocupada. Era el tipo de sonrisa alegre sin ningún significado oculto que le mostraría a un buen amigo y no a alguien de quien se ha enamorado. Sin embargo, pude ver lágrimas brotar de sus ojos. Fingí no notarlas mientras asentía.

Salimos del parque antes de que se pusiera el sol y pronto me separé de Momota. Se ofreció a acompañarme, pero me negué. No era como si estuviera pensando en los sentimientos de Orihara-san… simplemente quería estar sola por un rato. Sin embargo, solo estuve sola unos minutos.

“¿Eh, Urano?”

Cuando caminaba hacia la estación, vi una pequeña sombra sentada en un banco en la acera. La gorra que ocultaba sus ojos era la misma que había usado el otro día cuando seguimos a Momota y Orihara-san.

“¿Qué estás haciendo en un lugar como este?”

“…Nada en particular.”

“¿Podría ser que viniste a reírte de mí y decirme ‘Oye, chica rechazada’?” “¿Qué…? P-Por supuesto que no.”

“Estoy bromeando”, dije y me senté junto a Urano, que se estaba poniendo nervioso. “Gracias. Viniste a ver cómo estaba porque estabas preocupado, ¿verdad?”

“…N-Nadie está preocupado por ti. Solo vine porque me sentía responsable a mi manera y pensé que tenía la obligación de ver cómo terminaban las cosas.”

“Urano, eres un malhablado, pero eres una buena persona.” “¡C-Cállate, idiota!”

Aunque me tomé la molestia de elogiar a Urano, su rostro se puso rojo y lo ocultó con su gorra. Este tipo es un verdadero dolor.

“…D-De todos modos, ¿cómo te fue?”

“¿Hm?”

“¿Pudiste decírselo a Momo?”

“Sí. Se lo dije todo. Pero él me rechazó contundentemente.” “…Ya veo.”

“No pudo haber sido más claro al rechazarme. Me dijo ‘Aunque pueda rehacer mi vida un millón de veces, me gustaría volver a enamorarme de Orihara-san’.”

“Sí que suena dramático ese Momo.”

“Totalmente. Nadie le dijo que fuera tan serio y expresara su amor. Por ejemplo, podría haber mentido y haber dicho “Podría haber habido un futuro en el que decidiera salir contigo” y eso habría sido un poco reconfortante. Pero… gracias a eso, me siento realmente renovada. He aceptado completamente lo que pasó.”

Después de eso, bajé un poco la cabeza y miré a los ojos a Urano.

“Gracias, Urano. Gracias a ti, fui capaz de terminar con este amor no correspondido.” Si hubiera continuado rompiéndome la cabeza y poniendo excusas, todo habría

terminado sin haber podido transmitir mis verdaderos sentimientos. Pero ahora… había escapado de las garras de ese amor no correspondido. Era incluso ridículo sentirse deprimida después de un rechazo como ese.

“…Mmm.”

“Oye, Urano. ¿Estás libre después de esto?”

“¿Eh? Lo estoy, pero…”

“Entonces ven conmigo al karaoke.

“¡¿Qué?!”

“Tengo ganas de cantar con todas mis fuerzas.” “¡N-No me jodas! ¿Por qué tengo que ir al karaoke contigo…?” “Está bien, ¿no? So-mos-a-mi-gos, ¿verdad?” “¡¿~~!? ¡¿Q-Quién es tu amigo?!”

Me burlé un poco de él y Urano refutó nervioso. Me levanté riendo y empecé a caminar hacia la estación.

“Venga, vámonos, Urano. Ah. Y por supuesto, tú pagas el karaoke.”

“¡¿Ah?! Oye, e-espera… ¡N-No voy a ir! ¡No iré a ningún lado y no pagaré por nada!” A pesar de todas sus quejas, Urano me siguió. A este paso, parecía que él me

acompañaría al karaoke. Caminé con pasos ligeros por el camino bañado por el atardecer. Aunque había sido rechazada por completo, extrañamente, mi corazón se sentía ligero. Era como si estuviera montada en la espalda de una golondrina.

***

“Cuando la cita termine, quiero que vengas a verme de inmediato”.

Esa fue la condición que Orihara-san me dio para dejarme ir a la cita. Fue tan indulgente que me sentí culpable. Cumpliendo esa condición, me dirigí directamente al apartamento de Orihara-san sin detenerme en ningún lado después de separarme de Ibusuki. Llegué… y me quedé sin palabras.

“B-Bienvenido, Momota-kun.”

“……”

Miré a mi novia mientras me saludaba y me quedé en estado de shock. Sentí que mi alma había abandonado mi cuerpo y se había ido volando a alguna parte. Antes, había tenido una reacción similar cuando vi a Orihara-san con su babydoll. Sin embargo, en cierto sentido, lo que estaba viendo ahora fue más impactante que en ese momento.

“E-Este… ¿puedes al menos decir algo? Si te quedas en silencio así… me hace desear morir.”

“…¿Qué estás haciendo, Orihara-san?” De alguna manera me las arreglé para hablar después de reprimir mi desconcierto. “¿Por qué llevas bloomers?”

Frente a mí estaba Orihara-san en bloomers. Y no estaba hablando de la esposa de Vegeta, sino de la prenda de color azul oscuro que era un símbolo de la era Showa. Arriba llevaba una camiseta blanca de gimnasia de manga corta y debajo llevaba bloomers. Era un estilo de ropa deportiva de la era Showa que ahora solo se podía ver en el manga y anime.

“Esto es… bueno, una declaración de que no voy a perder contra una chica de preparatoria… ¿o algo así?” dijo algo sinsentido con una sonrisa tensa. “Pensé que para competir contra las chicas de preparatoria de la era Heisei, no tenía más remedio que atacar con el encanto de la era Showa.”

“Pero naciste en la era Heisei, ¿no?”

“E-Es verdad, pero… ya sabes, hace poco tuvimos una pelea porque mencionaste lo de los bloomers, ¿verdad? Entonces pensé que podría tratarse de una petición indirecta de que querías verme en bloomers.”

“…Le diste demasiadas vueltas. No tengo un fetiche por los bloomers.”

“¡¿E-Ehhhh?! No puede ser… Entonces, ¿para qué me puse este atuendo extremadamente vergonzoso…?” dijo Orihara-san mientras se deprimía infinitamente.

No tenía ningún fetiche por los bloomers. Al menos… no debería tenerlo. Sin embargo, en este momento mis ojos estaban pegados a un cuerpo femenino que estaba vestido con bloomers. La tela azul oscuro que se ajustaba perfectamente a su espléndido trasero; el diseño que se cerraba alrededor de la base de sus piernas, enfatizando sus muslos; parecía que esta ropa estaba liberando la sensualidad escondida en la parte inferior de su cuerpo femenino. Asombroso. Los bloomers son muy sexys. Por supuesto que algo como esto sería abolido. ¿Las chicas de entonces realmente usaban algo como esto cuando estaban justo en medio de la pubertad?

“No tengo un fetiche, pero la forma en que te ves con ellos ahora realmente me excita. Es como si… podría despertar un gusto por ellos.”

“¿E-En serio? H-Hmm. Ni siquiera sé cómo reaccionar ante un cumplido así…” Como dijo Orihara-san, la expresión de su rostro era de sentimientos encontrados.

Cuando miré alrededor de la habitación, pude ver una lata de Chu-Hi y una bolsa de palitos de queso en la mesa.

“¿Estabas bebiendo?”

“Sí… Una mujer de 27 años no se pondría unos bloomers estando sobria.”

Parece que Orihara-san bebió para reunir valor o tal vez para deshacerse de la razón. “…En serio, ¿qué pasa con este atuendo? Esta es la primera vez que me pongo

bloomers, pero… ¿no son demasiado eróticos? ¿Todo el mundo solía ponerse algo así en el pasado? Con solo moverme un poco, se me mete entre las nalgas…”

Mientras se giraba tímidamente, examinó su cuerpo vestido con el uniforme de gimnasia. Sus pechos y nalgas bailaron sensualmente mientras usaba su dedo para ajustar los bloomers. Sentí que me iba a desmayar.

“Hmm… supongo que debería haber comprado una talla más grande… Oh, hmm, ahora que lo pienso, por cierto…” De repente, la voz de Orihara-san se volvió monótona y se sentó frente a la mesa. Se llevó a los labios el agua carbonatada que había estado bebiendo y cambió de tema mientras desviaba la mirada de forma antinatural.

“¿C-Cómo estuvo la cita…?” Se obligó a parecer casual, pero no engañaba a nadie.

Mientras sonreía por dentro, me senté a su lado.

“No pasó nada.”

“E-Eh, ya veo. Bueno, confiaba en ti, así que no me preocupé en absoluto.”

“Perdón por hacerte preocupar.”

“Ugh… D-Dije que estaba totalmente bien”, dijo Orihara-san mientras se enfurruñaba y masticaba sus palitos de queso.

“Ibusuki se me confesó de nuevo y la rechacé apropiadamente de nuevo.” “…¿D-De verdad estás bien con eso?” “¿Qué quieres decir?”

“Es solo que… rechazaste tan fácilmente a Ibusuki-san. ¿No te estabas divirtiendo con ella en el parque de diversiones? ¿No es más divertido salir con una chica de tu misma edad que conmigo?” dijo Orihara-san rápidamente y luego miró hacia abajo como si estuviera avergonzada. “Ugh… Lo siento. Dije algo desagradable. A pesar de que había decidido no preocuparme y confiar en ti.”

“No te disculpes. Esta vez es completamente mi culpa.” Salí a una cita con otra mujer. No puedo quejarme sin importar lo que me diga.

“¿Hm?” De repente noté algo en la mesa. Era una llave con un llavero de pingüino rojo colocado junto a una lata vacía. “Esto es…”

“Oh. Este, eso es… mi amuleto de la suerte. Le estaba rezando para que me ayudara a calmarme…” dijo Orihara-san, explicándose rápidamente.

Me sentí totalmente culpable, pero me pareció muy lindo. Fue mi culpa que se preocupara, así que realmente no debería pensar en cosas como esa, pero… imaginarla seriamente rezando a su llavero a juego mientras estoy con otra mujer fue tan lindo que casi me hizo sonreír. Es irresistiblemente adorable y francamente preciosa. Quiero gritar a todo pulmón que mi novia es la mejor.

“Tienes razón… mi cita con Ibusuki fue divertida”, le dije. “Pude ver muchas caras nuevas de Ibusuki y me di cuenta dolorosamente de lo mucho que le gusto. Honestamente, me ha comenzado a gustar un poco.”

“…..”

“Pero, por supuesto, solo como amiga. Solo tengo ojos para ti, Orihara-san”, dije y metí la mano en mi bolsillo. Saqué mis llaves y mi llavero y los puse sobre la mesa. Nuestros pingüinos a juego rojo y azul se alinearon uno al lado del otro.

“Eso es…”

“Hoy llevé esto conmigo en mi bolsillo todo el tiempo.” Miré directamente a Orihara-san, que parecía que sus inseguridades la aplastarían en cualquier momento. Tomé su mano que temblaba levemente y la apreté con fuerza. “Te amo, Orihara-san. Muchas gracias por ser mi novia.”

Estas palabras eran en realidad el final del poema sorpresa que había preparado. Honestamente, quería leerlo todo en voz alta y envolver este lugar en una lluvia de emociones, pero era tan largo que ni siquiera yo podía recordarlo sin las tarjetas de referencia. Mmm. Qué lástima.

“Momota-kun…” Orihara-san me miró con ojos suaves y embelesados. Su rostro enrojecido por el alcohol y sus ojos ligeramente llorosos eran tan lindos que inconscientemente quería abrazarla con fuerza. En poco tiempo, dejó caer la cabeza sobre mi hombro.

“…Oh, vaya, me he emborrachado”, dijo de nuevo con voz monótona. “Estoy muy borracha. Probablemente no recordaré nada cuando me despierte mañana. A-Así que… ahora mismo, no importa qué tipo de cosa audaz me hagan, probablemente lo olvidaré.”

“Orihara-san…” Después de que me dijera todo eso, incluso yo pude leer la situación. Durante unos segundos, nos miramos de cerca en silencio. Ya no necesitábamos palabras. Éramos nosotros, en nuestro propio espacio privado, y los únicos que miraban eran el pingüino rojo y azul. No teníamos que preocuparnos por nadie. Con este momento y esta situación, sentí que podía ser inteligente al respecto y tocar cualquier parte del cuerpo de mi novia. Extendí mis manos hacia la parte azul de las mangas de su ropa de gimnasia y acerqué mi rostro al suyo… y fue entonces cuando escuché el sonido de la puerta principal abriéndose.

“Estoy de vuelta.”

La visitante abrió la puerta sin siquiera tocar el timbre. Como si esta fuera su casa, atravesó la entrada con total libertad.

“De alguna manera, a mi amiga de repente se le presentó un trabajo, así que la fiesta se canceló. Hime-chan, vayamos a algún sitio a comer juntas—” Al vernos, Kisaki-san se congeló como si hubiera visto algo que se suponía que no debía ver. Por supuesto, nosotros también nos quedamos paralizados y una atmósfera ferozmente incómoda de otro mundo llenó la habitación. En poco tiempo, Kisaki-san se hundió en el suelo como si estuviera mareada. Su mirada demacrada se dirigió a los bloomers que llevaba su hermana menor.

“…¡¿Por qué ustedes siempre están haciendo cosas raras y pervertidas?!” exclamó como si estuviera dejando escapar un gran suspiro. No pudimos decirle nada.

Cosplay de chica de preparatoria, cosplay de bloomers… Mi romance con mi novia de veintisiete años siempre se desvía, pero me encanta. No importa cuán perdidos estemos, siento que cuando se mira todo, este camino se convertirá en una historia divertida.