Infinite Dendrogram (NL)

Volumen 8: La Esperanza Que Ellos Dejaron Atras

Capítulo 4: La Primera Noche

Parte 1

Gran Demonio Miasmico, Gardranda.

Ese era el nombre de la primera UBM que había encontrado aquí en Infinite Dendrogram. Era la criatura que se había convertido en mi primera recompensa especial: Miasmaflame Bracers, Gardranda.

Ahora, me enfrentaba a una entidad que parecía representar la voluntad de ese artículo, y esta no era nuestra primera reunión.

Mi primer encuentro con ella fue cuando me desmayé mientras luchaba contra mi segundo UBM, Gouz-Maise, en medio de un sueño que representaba mis recuerdos.

En aquel entonces, ella no era más que una silueta rojo-negra de pocas palabras, ninguna de ellas pronunciada con fluidez. Ahora, sin embargo, era claramente visible y podía mantener una conversación adecuada.

“Vi el letrero ‘Próximamente’ varias veces”, dije mientras miraba alrededor de la habitación. “Y parece que llegó”.

“Mm-hm”, asintió Gardranda. “Todo está preparado… ¿supongo?” ¿Por qué suena tan insegura sobre todo lo que dice? Me preguntaba.

“Entonces, comencemos con una pregunta… ¿Qué eres, de todos modos?” Yo pregunté.

Shu y Figaro me habían dicho que nunca habían oído hablar de un UBM derrotado que se presentara a alguien mientras estaban inconscientes. Esos dos eran veteranos que habían vencido a Mythicals e incluso a un SUBM, y sin embargo, ni siquiera ellos lo habían experimentado.

Entonces, ¿por qué le estaba pasando a Gardranda?

Como no lo sabía, le pregunté.

“Soy lo que pasó con el poder y la mente que el Gardranda original no usó… ¿creo?”

Tú ‘crees’, ¿eh?

“También puedes decir que soy el niño que estaba dentro de ella… ¿tal vez?” ella añadió.

“¿Era una mujer embarazada?” Arqueé una ceja.

Las vidas de Tian habían estado en juego, así que no me arrepiento de golpear a la criatura, pero esta revelación me dio un regusto un poco malo.

“Ese era el tipo de criatura que era… ¿verdad?” ella dijo. “Era como una cáscara de huevo… ¿supongo?”

“¿Una cáscara de huevo?”

Así que la Gardranda con la que luché era como un huevo con extremidades, mientras que la Gardranda con la que hablo es como una… ¿verdadera Gardranda?

“¿Éramos un diseño de dos capas de madre e hijo?” ella continuó. “Incluso yo realmente no lo entiendo… ¿creo?”

“Entonces, ¿cómo es realmente?” Yo pregunté.

“Está bien… me estoy manifestando así porque fui derrotado antes de que se cumplieran las condiciones para liberar mi verdadero poder y pudiera romper el caparazón y nacer… ¿probablemente?”

La única razón por la que había derrotado a Gardranda tan fácilmente era porque Cheshire había insinuado que el núcleo estaba en el estómago. Entonces, solo podía suponer que, si no hubiera sabido de eso, la situación habría empeorado y habría entrado en su forma final: esta chica aquí misma.

De todos modos, aunque ella no era la Gardranda con la que había peleado, era Gardranda de todos modos, lo que significa que los UBM podían tener una mente incluso después de convertirse en recompensas especiales.

Ese hecho me hizo preocuparme por algo.

“¿Podría suceder esto también con Gouz-Maise y Monochrome?” Yo pregunté. ¿Volverían a manifestarse ante mí el retornado devorador de hombres y la estrella negra?

“No sucederá con Gouz-Maise… seguramente”, dijo Gardranda. “No es más que un recipiente ahora. En cuanto a Monochrome… no estoy muy seguro”.

“¿Por qué no?”

“Tiene una historia más larga y un estatus más alto que yo. Pero sus

poderes  se  centran  en  una  sola  cosa,  por  lo  que  no  se  mostrará…

¿supongo? ”

La ‘única cosa’ tenía que ser la habilidad que todavía no podía usar.

Aparte de eso, si ella tenía razón, probablemente no tendría que preocuparme de que esos dos volvieran a perseguirme.

Estaba dispuesto a enviar a Gouz-Maise de vuelta al infierno si alguna vez aparecía ante mí de nuevo, pero si eso nunca sucedía, mejor.

Mientras que Gardranda y Monochrome habían sido criaturas que actuaban dentro de marcos no humanos, Gouz-Maise había sido un espectro lleno de malicia humana y convicción malvada, y yo no tenía tolerancia por eso.

No hace falta decir que escuchar las palabras de Gardranda me tranquilizó. “Entonces,” hablé. “¿Por qué me trajiste aquí?”

La última vez, había querido conocerme a mí, al que la había golpeado, y ahora, lo que fuera que había sido “Próximamente” había llegado, pero todavía no sabía realmente qué era.

Sin embargo, tengo una buena suposición, pensé. “Préstame tu oído… ¿quieres?” ella pidió. “¿Hm? Por supuesto.”

Éramos los únicos aquí, así que tenía curiosidad por saber por qué veía la necesidad de susurrar, pero fui e hice lo que ella quería. Suavemente acerqué mi oído a ella y…

“¡Amph!”

… ella me mordió… Espera, ¡¿QUÉ?!

“¡¿GYAAHHH?!”

¡No había dolor, pero podía sentirlo claramente!

¡¿En serio me acaba de morder?! ¡¿Me estás tomando el pelo?!

“¡¿Qué demonios estás haciendo?!” Grité.

“Mi madre no pudo comerte mientras estaba viva, así que solo te probé un poco… ¿supongo?”

“…”

Por supuesto. ¿Cómo podría olvidar que ella era un demonio devorador de hombres? Bueno, técnicamente, esa era su madre. No iba a culparla por el pecado de sus padres, pero ella estaba a un paso de cometer un pecado por sí misma.

“No lo mordí, pero me lamí. Fue bueno… ¿sabes?”

“Cállate”, espeté. No sentí ningún placer al recibir elogios por mi sabor.

“Ahora, para el asunto principal… ¿de acuerdo?” Dijo Gardranda mientras arreglaba su postura y me miraba directamente antes de continuar. “Debido a que derrotaste a un tercer UBM, desbloqueaste la tercera habilidad en los Miasmaflame Bracers… ¿sabes?”

***

Me desperté poco después de terminar mi conversación con Gardranda.

Silenciosamente, busqué en mi inventario y equipé los Miasmaflame Bracers.

La descripción del artículo demostró que lo que acababa de ver no había sido un sueño: la tercera habilidad fue revelada y explicada.

“Hhhh …” Suspiré.

Después de decirme que la habilidad ya estaba disponible, Gardranda pasó a explicar sus efectos… y condiciones.

Podía verlos ante mí aquí mismo en el menú, y podría decir una cosa sobre esta habilidad: estaba en un nivel completamente diferente a las habilidades que normalmente encontrarías en los artículos, incluidas las recompensas especiales.

De hecho, muchos lo considerarían roto e injusto.

Claro, estaba por debajo de la habilidad de Fang of Gloria: Overdrive de Gloria α de Figaro, pero el hecho mismo de que estaba pensando en eso cuando intentaba hacer comparaciones decía mucho al respecto.

Pero había un problema…

Suspiré. “Y así, obtengo otra habilidad difícil de manejar”.

Incluso Shining Despair era más fácil de usar, y ese tenía tasas de carga obscenas.

Las condiciones para la tercera habilidad de Gardranda eran tan duras que en realidad sería mejor si nunca me metiera en una situación que lo requiriera.

Básicamente, era tan difícil de manejar como poderoso.

Aun así, en la remota posibilidad de que me encontrara en un escenario en el que usarlo fuera mi mejor opción, definitivamente sería una habilidad confiable.

“¿Hm? Ray. Estás despierto”, dijo Némesis mientras abría la puerta, poniendo fin a mi línea de pensamiento. Su largo cabello negro estaba húmedo y vestía una yukata que venía con la habitación.

Su apariencia me hizo mirar fijamente y mi corazón dio un vuelco.

“¿Todavía estabas en las aguas termales?” Yo pregunté.

“¿’Todavía’? No, entré allí de nuevo. Después de que te desmayaste, te llevé al vestuario, te sequé, te puse un yukata y te traje aquí. Me hizo sudar mucho, así que tuve que bañarme por segunda vez”.

Me miré a mí mismo y, efectivamente, a pesar de perder el conocimiento desnudo, ahora estaba en un yukata.

“Ya veo”, dije. “Lo siento… y gracias”.

Ella se merecía una disculpa por mi delito menor, así como gratitud por cuidarme mientras estaba inconsciente.

“Bueno, no podría dejarte allí en el frío”, dijo. “Así es como se contraen las enfermedades. No quería que algo así obstaculizara lo que estaríamos haciendo mañana y más allá. Además, no me importa mucho lo que pasó, pero definitivamente deberías disculparte con Azurite. Parecía estar bastante sorprendida de que la vieran… y de lo que vio”.

“Si, tienes razón. No estoy seguro de que me perdone, pero me disculparé cuando tenga la oportunidad”.

“Bueno. Aparte de eso, tengo una pregunta para ti”.

“¿Qué es?”

A pesar de que éramos las únicas personas en la habitación, se acercó a mí en un susurro.

Eso me puso un poco tenso, ya que me recordó el mordisco de Gardranda.

“Te veías terriblemente sereno allí”, susurró. “¿De verdad no sentiste nada acerca de nuestros cuerpos desnudos?”

Ahora, esa era una pregunta difícil de responder. Sentí que no estaría satisfecha con ninguna respuesta que pudiera darle.

Aun así, esto era todo mi mal, así que tenía que ser honesto, al menos.

“En ese entonces sólo parecía sereno”, respondí. “En retrospectiva, probablemente estaba muy entrando en pánico. Y, eh…”

“¿Y…?”

Urgido, seguí adelante y pronuncié las palabras atascadas en mi boca.

“La vista no me emocionó… pero lo encontré hermoso”.

De repente, el silencio se apoderó de la habitación. “…”

“…” Ninguno de los dos dijo una palabra.

No fue una especie de silencio frío, pero tampoco fue cálido; no estaba seguro de cómo describirlo.

Me di cuenta tardíamente de la gravedad de lo que acababa de decir. Hacía difícil mirar el rostro de Némesis.

“… ¿A cuál de nosotros te refieres?”

“Ambos”, respondí sin ni un segundo después de la pregunta.

Mierda… no me gusta a dónde va esto. “¿Cuál de nosotros era más hermosa?”

“¡Vamos a dejar las cosas así!” Exclamé para evitar recordar lo que había visto y compararlos.

“Gngh…” Némesis expresó su frustración, y tuve miedo de mirarla.

Dije demasiado, pensé. Pero no puedo dejar de decir otra cosa…

“Hablando de ‘hermosa’, te ves genial en esa yukata. Te queda muy bien”.

Esos fueron mis pensamientos honestos. Su largo cabello negro, piel pálida y rasgos faciales combinaban perfectamente con el yukata. De hecho, habría ido tan lejos como para decir que nunca había visto a una persona con un yukata tan hermosa como ella.

“¿E-En serio?” ella dijo. “Ya veo…”

Esperaba más palabras, pero ella se quedó en silencio con eso. No estaba seguro de qué más decir, y ella tampoco habló.

Cuando el silencio volvió a impregnar la habitación, alguien llamó a la puerta y dijo: “Sr. Starling, ¿estás despierto? ¿Quieres cenar?”

La persona sonaba como un hombre joven. Su voz no me era familiar, pero sus palabras permitieron asumir con seguridad que era un trabajador aquí.

“Oh, cierto”, dijo Némesis. “Pasó por aquí hace aproximadamente una hora, mientras usted estaba inconsciente”.

Miré el reloj y vi que eran las siete. Me recordó que Shirley había dicho que la cena sería entre las seis y las ocho.

Entonces supongo que es un buen momento para comer algo.

“Ah, me iré de inmediato”, dije mientras hacía mi inventario.

Ambos salimos de la habitación.

***

El trabajador que nos llevó a la cafetería era… diferente, para decirlo a la ligera.

Primero que nada, había una máscara de madera en su rostro. A diferencia de Azurite, que solo ocultaba la mitad superior, está la cubría por completo, solo tenía agujeros para los ojos.

En segundo lugar, su mano derecha era una prótesis, al igual que mi mano izquierda lo había sido hasta ayer.

No parecía tan anciano; de hecho, parecía y sonaba más joven que yo, y sin embargo, de alguna manera ya había perdido un brazo.

No pude evitar preguntarme qué había sucedido para que terminara así.

Notó mi mirada y me saludó. Me disculpé por mi inapropiada mirada y pregunté por él.

Aparentemente, había resultado gravemente herido en la guerra y luego lo había salvado el dueño de esta posada, un soldado él mismo. Sin embargo, las heridas le habían hecho perder la memoria y no tenía nada sobre él que pudiera probar su identidad, dejándolo sin un lugar adonde ir. Y así, después de que el dueño de la posada lo cuidó, se convirtió en un trabajador aquí.

Al parecer, el reino contaba con una gran cantidad de personas en situaciones similares a la suya. Muchos habían terminado en sus circunstancias debido al Dragón Tri-Cenit, Gloria, en lugar de la guerra que había seguido, pero independientemente, las cicatrices en el reino eran profundas.

Liliana y Milianne, por ejemplo, habían perdido a su padre en la guerra.

Las cosas podrían haber ido de otra manera si más Maestros hubieran luchado por el reino.

Por desgracia, los Maestros que habían participado eran pocos, y los Superiores, incluido Shu, no estaban entre ellos.

Escuché que esto se debió a que el reino eligió no recompensar a ningún participante, sino que se basó solo en las decisiones personales de los Maestros.

Todos los superiores habían tenido sus razones para no participar, como la condición de Figaro (aunque no estaba muy seguro de que la señorita Eldritch tuviera una buena razón).

Sentí que el resultado de la guerra había sido el resultado de las circunstancias.

Aun así, eso no cambió el hecho de que muchos ciudadanos probablemente se habían sentido abandonados.

Ese hecho me dejó un mal sabor de boca.

No había estado aquí durante esa guerra. Pero si algo así volviera a suceder, yo… yo seguramente…

***

Mientras el joven enmascarado nos conducía hacia la cafetería del edificio principal, pasamos junto a muchas otras personas que se alojaban aquí. Probablemente acababan de terminar de comer.

Muchos de ellos eran compañeros Maestros, que seguramente estaban aquí por las ruinas. Algunos de ellos incluso llevaban yukatas, como yo.

Mientras caminábamos, me encontré con alguien particularmente único. Mi mirada se encontró con la de ellos.

“Ah.”

“¿Oohh?”

La mirada que mis ojos encontraron no eran los de la persona, esos ojos estaban completamente ocultos por el flequillo frontal. Los ojos que estaba mirando ahora eran los del gato regordete en la cabeza de la persona.

De hecho, era un joven con un gato encima. Parecía curioso incluso para los estándares de Dendro, y yo sabía quién era esta persona.

“¿Ohhh?” él dijo. “Bueno, si no son Némesis y Raaay. No esperaba verte aquí”.

“Del mismo modo”, asintió Némesis.

“Hola, Tom”, dije. “¿Por qué estás en esta ciudad?”

Esta persona era Tom Cat, el segundo en la clasificación de duelo del reino y el portador del apodo de “Monster Cat Mansion”. Su trabajo era “The Lynx”.

Había sido el campeón de duelo reinante antes de que Figaro tomara la corona, y ahora estaba evitando que Kashimiya, que estaba en tercer lugar, avanzara más.

No hace falta decir que fue un gran problema. Incluso si el gato en su cabeza y su comportamiento suave lo hacía difícil de creer.

“Estoy aquí para explorar las ruinas”, dijo. “Kashimiya parece haber regresado, así que decidí volver a entrenarme y ganar algo de dinero aquí”.

“Ah, ya veo”, asentí.

Los tres primeros clasificados solo podían ser desafiados a un duelo clasificado por aquellos que estaban por debajo de ellos. Ahora que Kashimiya, tercero en el puesto, estaba de regreso, podía desafiar a Tom por el trono del segundo. Tom tenía todas las razones para prepararse para eso.

Esto me recordó que, debido a que nadie había estado allí para desafiarlo, nunca lo había visto pelear.

Tampoco había participado nunca en las batallas simuladas. Demonios, solo nos conocimos por un encuentro casual durante el almuerzo con otros rankers.

“¿También buscas las ruinas?” preguntó.

“Sí”, respondí. “Cambiaré de trabajo”.

“Oh, cierto, encontraron un trabajo perdido aquí”.

Deje que un ranker experimentado como él ya lo sepa.

“Podríamos encontrarnos en las ruinas, entonceeeeees”, dijo. “Seamos amistosos si eso sucede. Buenas nocheeeeees”.

“Buenas noches”, respondí.

“Tú también, Grimalkin”, dijo Némesis mientras miraba al gato en la cabeza de Tom, su Embrión. “Dulces sueños.”

Grimalkin maulló en respuesta, y Tom se alejó, saludando casualmente mientras se iba.

“Qué reunión tan inesperada”, dijo Némesis.

Seriamente. Fue un encuentro particularmente raro entre los rangos de Gideon, por lo que nunca hubiera esperado encontrarme con él en un lugar como este.

Además, ¿por qué no puedo deshacerme de la sensación de que lo conocí antes de nuestra presentación en Gideon?

***

La cafetería estaba muy llena. Lo cual tenía sentido, considerando que era la hora de cenar.

“¡Ah! ¡Sr. Ray!” Shirley me vio y corrió. “¡Te llevaré a tu mesa! ¡Gracias por traerlo, Lefty! ”

El joven enmascarado respondió con un leve asentimiento y se alejó para hacer algún otro trabajo.

“¿’Lefty’ es su nombre, supongo?” preguntó Némesis.

“¡Sí!” dijo Shirley. “¡El nombre está basado en una palabra maestra!”

Entonces, en lugar de un nombre que se refiriera a su falta de mano derecha, se habían ido con un nombre que señalaba el hecho de que tenía una izquierda. El vaso está medio lleno, ¿eh?

De todos modos, Shirley nos condujo a una mesa redonda, que parecía algo fuera de lugar, dado que todas las demás en la habitación eran rectangulares.

Solo podía adivinar que los rectangulares originalmente habían estado aquí, y habían tenido suficientes para todos los invitados en el edificio principal, pero no suficientes para los del anexo, y por eso habían traído este redondo aquí.

Azurite ya estaba sentada en una de las sillas a su alrededor.

“…” Me miró en silencio a través de su máscara.

Fue incómodo, por decir lo menos. Casi me hizo recordar lo que había visto antes de desmayarme.

Aun así, realmente no podía actuar como si no hubiera sucedido.

“Azurite”, hablé. “Lo que pasó fue todo mi mal. Debería haber tenido más cuidado… Lo siento”.

En serio, podría haber descubierto lo que estaba sucediendo en el momento en que me di cuenta de que había alguien dentro. Además, no importa lo perplejo que haya estado, unirme a ellos debería haber sido un no-no obvio, realmente grande.

“Está bien”, dijo, mientras seguía mirándome. “Me perdonaste por atacarte por un malentendido. Puedo hacer lo mismo por ti.”

Y entonces, todo era agua debajo del puente.

“Gracias”, dije.

“De nuevo, está bien. De todos modos, es hora de cenar. Démonos un capricho”.

“¡Vamos!” —dijo Némesis, claramente extasiada.

En conclusión, la comida estuvo muy buena.

Los deliciosos ingredientes adquiridos localmente estaban bien preparados para hacer una serie de platos excelentes. Disfruté especialmente el quiche de pollo y verduras silvestres.

Una vez que terminamos ese plato principal, comencé con las frutas para el postre.

Dado que cada uno de nosotros solo había recibido la porción de una persona, estaba seguro de que Némesis todavía tenía una gran cantidad de espacio en su estómago. Probablemente pediría un bocadillo de medianoche a este ritmo, así que sería mejor alimentarla ahora, pero…

“Todo lo que tengo son palomitas de maíz de Shu”, le dije.

“Delicioso, pero no exactamente abundante”.

“Algún lugar cercano podría estar todavía abierto. Ve a buscar algo”, le dije mientras sacaba 10,000 liras de mi billetera y se las entregaba.

“Muy bien”, dijo mientras lo tomaba y se iba.

Me di cuenta de que casualmente le entregué una cantidad de dinero equivalente a 100.000 yenes, pensé. Gracias a todas las ganancias inesperadas que estoy obteniendo y a la influencia de Shu, parece que estoy adquiriendo un sentido retorcido del dinero.

“Muy bien, entonces,” dije.

Azurite ya se había disculpado, aparentemente había visto algo, así que yo era el único que quedaba en la mesa. Dijo que dejaría de comer postre y salió de la cafetería. Naturalmente, su postre estaba ahora en el estómago de Némesis.

De todos modos, he terminado con la cena, entonces, ¿qué hago ahora? Me preguntaba. Esta es una posada de aguas termales, así que ahora que las chicas están fuera, ¿quizás debería darme un baño relajado?

Hablando de aguas termales, el edificio principal obviamente también tenía algunas. Esto fue evidenciado por el hecho de que muchos de los invitados aquí en la cafetería usaban yukatas, al igual que yo.

No todos los días podías usar esta ropa de estilo Tenchi aquí en el reino, por lo que probablemente era popular solo por su valor de novedad. Sin embargo, claramente no sabían cómo ponérselos correctamente. La forma en que los usaban era desordenada, y se podían ver pechos y piernas expuestos por todas partes.

Sin embargo, la mayoría de los que los usaban eran hombres. Las mujeres vestían su ropa normal o tenían ropa interior de aspecto sencillo debajo.

Dejando de lado todo interés sexual o la falta de él, en realidad era una visión bastante triste. Me sentí como si estuviera mirando a una chica que llevaba una falda sobre unos pantalones deportivos.

Pensando en esto y aquello, salí de la cafetería.

Al entrar en el salón justo al lado, encontré una extraña reunión de gente.

“¿Hm?” Murmuré.

Sus edades y apariencias me dijeron que no eran parte de un solo grupo.

Curioso por saber de qué se trataba, me acerqué a la multitud y descubrí que estaban rodeando a un solo hombre.

No llevaba un yukata, pero no tenía ropa superior, lo que lo hacía lucir bastante informal.

Llevaba un par de gafas gruesas, por lo que era difícil decirlo con precisión, pero parecía tener unos treinta años.

“Doctor, creo que esta es mi mayor captura hoy. ¿Lo es?” —dijo un invitado musculoso, claramente un tian que había explorado las ruinas. Le entregó un objeto del tamaño de un puño que parecía un diamante al hombre de las gruesas gafas.

“Ohh, bello… Molto bello, pero esto no es una verdadera joya, ¿no?” él dijo.

Es extraño cómo puede sonar tan extraño cuando tenemos una traducción universal, reflexioné.

“Es un diamante falso para las lentes láser”, continuó. “Bene y largo, pero ah, como dices… vale menos que uno real”.

“Oh…” El hombre del diamante se hundió en los hombros.

Pero entonces el hombre de las gafas gruesas sonrió. Pero hay dilettanti que coleccionan muchas cosas como esta. ¿A ellos? Molto… Molto prezioso! 200.000 liras”.

“¡¿Seriamente?! ¡Eso es genial! ¡Ahora puedo conseguir algo para mi madre en casa! ¡Gracias, doctor!” El hombre tian puso alegremente el diamante artificial en su inventario.

“¿Quién es el siguiente?” preguntó el hombre de gafas gruesas.

“¡Yo! Quiero preguntar por esta placa de metal”.

“¡Che bello! Es un plato utilizado en las unidades de batalla de la civilización antigua. Incluso antes de cualquier procesamiento, es más difícil que los escudos mágicos más débiles”.

Uno tras otro, los invitados le presentaron al hombre cosas que habían encontrado en las ruinas.

Me di cuenta de que se trataba básicamente de una reunión para tasar antigüedades, pero ¿quién era ese hombre de las gafas?

Shirley pasaba por allí, así que aproveché la oportunidad para preguntar:

“¿Quién es esa persona a la que siguen llamando ‘Doctor’?”

“Ese es el Dr. Mario”, respondió ella. “Es un doctor en arqueología que se ha quedado con nosotros desde ayer. ¡Dijo que viaja por el mundo investigando las ruinas de la civilización pre-antigua!”

“Ya veo.”

Supongo que es natural que las ruinas atraigan a los arqueólogos. Tengo

que decir, sin embargo…

“Ese nombre hace que parezca que salta muy alto y se sumerge a través de tuberías. Quizás mata los virus por diversión adicional”.

“¡Wahoo!” el hombre se rio. “Cinque… Esa sería la quinta vez que un Maestro me ha dicho algo como esto”.

Vaya, nos escuchó.

“Ah, lo siento”, me disculpé.

“No es un problema, no hay problema en absoluto… Está claro que te gusta el nombre, después de todo”.

A pesar de sonar como un falso extranjero, no parecía un mal tipo.

“Si puedo preguntar, ¿qué hace que su evaluación sea diferente de la habilidad de identificación?” Yo pregunté.

“No puedes encontrar todo sobre una reliquia de civilización pre-antigua con solo una Identificación. Non posso”, explicó. “Si no tienes, cómo dices… conocimientos y habilidades especiales, muchas descripciones dirían ‘Detalles desconocidos’.”

“… Ohhh”. Ahora que lo mencionó, la descripción de Silver fue breve y terminó exactamente con eso.

Los exploradores aquí me dejaron ver sus hallazgos y, a cambio, los valoro por ellos. Valutare, ¿sí? De esta manera, el Dr. Mario pudo examinar los elementos de las ruinas, mientras que los buscadores aprendieron el valor de lo que habían descubierto: una situación en la que todos ganan, si es que alguna vez vi una.

Espera, esta es una oportunidad perfecta. Debería conseguir que le echara un vistazo a Silver.

“Um, también tengo algo de la civilización pre-antigua”, dije. “¿Le gustaría mirarlo? Sin embargo, no es de estas ruinas”.

“¡Nessun problema! ¡No hay problema!”

“Es grande, así que no puedo sacarlo aquí. Te lo mostraré afuera una vez que hayas terminado de evaluar las cosas de los demás”.

“Nessun problema”, asintió. “Entonces por favor, trenta minuti… ah… ¿cómo dices? ¡Treinta minutos!”

“Muy bien.”

Sí. Esto es bueno, pensé.

Descubriría más sobre Silver el mismo día en que sentí curiosidad por él.

Que golpe de suerte.

Ahora, para encontrar una manera de matar el tiempo mientras espero al Dr. Mario.