Zaregoto  (NL)

Volumen 6: Magica Masacre

Capitulo 7: Campo De Batalla (Mil Grullas De Papel)

Parte 2

Sobre la profesora asistente Kigamine y Kuchiha-chan, lo entendí.

Eran los objetivos del asesino profesional.

Los objetivos son asesinados.

Esa es la regla.

Eso es sentido común.

Como mínimo, es cortesía.

“Pero… ¿por qué Izumu-kun…?”

O por qué Rizumu-chan.

Muertos.

No entiendo.

No necesito entender.

“………………………………………………………………………………………………………… Necesito huir.”

Tengo que despertar a Hime-chan y huir.

El Fiat no es bueno, así que usaremos la motocicleta.

No necesitamos pasar la montaña.

Algún lado.

Al menos, en algún lugar que no esté aquí.

Este lugar es… no bueno.

Este lugar ya está terminado.

Quité a los hermanos Niounomiya de mi campo de visión y salí de la habitación. Abrí la puerta de la siguiente habitación del hospital. No toqué. No tenía la compostura para pensar en eso. ¿Qué es tocar?

“¡Ichihime! ¡Despierta!” Me apresuré hacia la cama y sacudí a Hime-chan que todavía estaba en su futón. “Vamos a escapar de aquí… las cosas se han vuelto… un desastre.”

Noté algo extraño.

Mi mano que intentó sacudirla se hundió.

Esta no es la elasticidad de un cuerpo humano.

“¿¡……………!?”

Levanté el futón.

Dentro había un futón.

El futón llevaba un futón.

“…………………”

Es un futón.

No importa cómo lo mires, es un futón. Sin subterfugios, un espléndido futón. Una persona que no lo llamaría futón tendría un tornillo suelto. Si tu cabeza es normal, entonces tus ojos son extraños. Si tus ojos están bien, entonces tu cabeza es extraña. De todos modos, creo que algo es extraño.

No.

Pero soy extraño.

Debo ser anormal.

No poseo ninguna normalidad.

“… ¿Eh?”

Ladeé la cabeza.

“¿Dónde está Hime-chan?”

¿Dónde está Hime-chan?

***

Hime-chan estaba muerta en el patio.

Sus brazos estaban… arrancados de sus codos.

Y su cuello estaba torcido en una dirección imposible.

Estaba muerta dentro de un charco de sangre.

No hubo sonrisa.

No había esperanza.

“………”

Trozos de carne.

El olor a sangre. Un charco de sangre.

En ese pequeño cuerpo, ¿dónde, dónde estaba tanta sangre?

Mucha.

A la deriva.

Era como si ese pequeño cuerpo estuviera flotando dentro de un lago.

Huesos. ¿Líquido cefalorraquídeo? Los huesos se asoman. Brazos.

¿Dónde están los brazos? Los brazos desgarrados.

Picados en pedazos, empapados en sangre, aquí y allá.

Trozos de carne.

Fragmentos de carne.

Un cuello torcido.

Alumnos sin vida. Alumnos sin chispas.

Sus pupilas estaban abiertas como si miraran el mal mismo, pero sus ojos no estaban deformados por el miedo ni congelados por el heroísmo, estaban huecos. Su lazo estaba desatado.

El cabello que estaba creciendo estaba perturbado.

Cruel, cruel, cruel.

Uniforme.

Su uniforme aún nuevo estaba roto por todas partes.

Parecía que fue atacada por una bestia.

Como si fuera pisoteada por una bestia mítica.

Pisoteada.

Conquistada. Profanada.

Sacrificio, presa, glotonería.

Desgracia. Destrucción, destrucción, destrucción.

Asesinato. Asesinato. Sangre, carne, hueso, sangre, carne, carne.

Trozos de carne. El olor a sangre. Un charco de sangre. En ese pequeño cuerpo, ¿dónde, dónde había tanta sangre? Mucha. A la deriva. Era como si ese pequeño cuerpo estuviera flotando dentro de un lago.

Huesos. ¿Líquido cefalorraquídeo? Los huesos se asoman. Brazos. ¿Dónde están los brazos? Los brazos desgarrados. Picados en pedazos, empapados en sangre, aquí y allá. Trozos de carne. Fragmentos de carne. Un cuello torcido. Alumnos sin vida. Alumnos sin chispas. Sus pupilas estaban abiertas como si miraran el mal mismo, pero sus ojos no estaban deformados por el miedo ni congelados por el heroísmo, estaban huecos. Su lazo estaba desatado. El cabello que estaba creciendo estaba perturbado. Cruel, cruel, cruel. Uniforme. Su uniforme aún nuevo estaba roto por todas partes. Parecía que fue atacada por una bestia. Como si fuera pisoteada por una bestia mítica. Pisoteada. Conquistada. Profanada. Sacrificio, presa, glotonería. Desgracia. Destrucción, destrucción, destrucción. Asesinato. Asesinato. Sangre, carne, hueso, sangre, carne, carne.

Trozos de carne. El olor a sangre. Un charco de sangre. En ese pequeño cuerpo, ¿dónde, dónde había tanta sangre? Mucha. A la deriva. Era como si ese pequeño cuerpo estuviera flotando dentro de un lago.

Huesos. ¿Líquido cefalorraquídeo? Los huesos se asoman. Brazos. ¿Dónde están los brazos? Los brazos desgarrados. Picados en pedazos, empapados en sangre, aquí y allá. Trozos de carne. Fragmentos de carne. Un cuello torcido. Alumnos sin vida. Alumnos sin chispas. Sus pupilas estaban abiertas como si miraran el mal mismo, pero sus ojos no estaban deformados por el miedo ni congelados por el heroísmo, estaban huecos. Su lazo estaba desatado. El cabello que estaba creciendo estaba perturbado. Cruel, cruel, cruel. Uniforme. Su uniforme aún nuevo estaba roto por todas partes. Parecía que fue atacada por una bestia. Como si fuera pisoteada por una bestia mítica Pisoteada. Conquistada. Profanada. Sacrificio, presa, glotonería. Desgracia. Destrucción, destrucción, destrucción. Asesinato. Asesinato. Sangre, carne, hueso, sangre, carne, carne.

Trozos de carne. El olor a sangre. Charco de sangre. En ese pequeño cuerpo, ¿dónde, dónde había tanta sangre? Mucha. A la deriva. Era como si ese pequeño cuerpo estuviera flotando dentro de un lago.

Huesos. ¿Líquido cefalorraquídeo? Los huesos se asoman. Brazos. ¿Dónde están los brazos? Los brazos desgarrados. Picados en pedazos, empapados en sangre, aquí y allá. Trozos de carne. Fragmentos de carne. Un cuello torcido. Alumnos sin vida. Alumnos sin chispas. Sus pupilas estaban abiertas como si miraran el mal mismo, pero sus ojos no estaban deformados por el miedo ni congelados por el heroísmo, estaban huecos. Su lazo estaba desatado. El cabello que estaba creciendo estaba perturbado. Cruel, cruel, cruel. Uniforme. Su uniforme aún nuevo estaba roto por todas partes. Parecía que fue atacada por una bestia. Como si fuera pisoteada por una bestia mítica. Pisoteada. Conquistada. Profanada. Sacrificio, presa, glotonería. Desgracia. Destrucción, destrucción, destrucción. Asesinato. Asesinato. ¡Sangre, carne, hueso, sangre, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne, carne-carne-carne-carne-carne-carne!

Yukariki Ichihime.

El desarrollo de Yukariki Ichihime fue ordinario.

Normal y un poco inusual.

Es una historia simple y corriente.

Desafortunadamente, esta no fue una historia que pueda satisfacer tanto con mal gusto como con mala curiosidad. Esta no era una historia que podía contarse y escucharse, incluso si se esforzaba por escuchar, no era una historia que pudiera aclararse. La historia en sí era una historia común.

No hay nada nuevo, ningún desarrollo sorprendente.

Fue moderadamente desafortunado.

Fue moderadamente trágico.

Fue moderadamente cruel.

Pero, Yukariki Ichihime no era una chica moderada.

Por lo tanto, fue muy desafortunado.

Por lo tanto, fue muy trágico.

Por lo tanto, fue muy cruel.

Siendo salvada por Aikawa Jun.

Recibiendo entrenamiento de Shisei Yuma.

Y, sin embargo, para ella todavía era desafortunado, trágico y cruel.

No cambio.

Esencialmente, nada cambia.

Fue lo mismo para el caso de junio, al final fue porque ella no fue moderada que sucedió. Si ella fuera un poco más moderada, tal tragedia no habría sucedido. Sí, admitámoslo. Admitámoslo, ¿por qué no admitirlo? Yukariki Ichihime no fue de ninguna manera una víctima. Incluso se podría decir que ella fue la perpetradora.

Tal vez ella era de un tipo diferente, peculiar y grotesco.

Su brillante sonrisa fue un engaño.

Sus brillantes palabras fueron hipocresía.

Su brillante postura era un disfraz.

Su brillante atmósfera era una invención.

Todo era artificial y sin remedio, distorsionado.

Tal vez ella era de un tipo diferente, peculiar y grotesco.

Tal vez ella era el perpetrador.

“Pero… incluso entonces, ¿qué es esto?”

Dentro del charco de sangre.

A la deriva como comida y dispersa.

Perder sus dos brazos confiables, perder todos los pensamientos, deseos, anhelos y oraciones, ojos vacíos y huecos.

Esa expresión, esa figura, ¿no es ella una víctima?

La miré desde lejos.

Saqué mi teléfono de mi bolsillo.

Presioné los botones que recordaba.

“Ah… soy yo.”

La llamada conecto, dije.

“La gente… está muerta.”

“¿Y?”

Una voz respondió al otro lado del teléfono.

“La gente murió.”

“¿Y?”

“Incluyéndome a mí, cinco personas… cuando me desperté esta mañana, cuatro personas estaban muertas.”

“¿Y?”

“Excepto yo, todos están muertos.”

“¿Y?”

“Quiero escapar, pero estoy un poco en las montañas… todos los autos fueron deshabilitados…”

“¿Y?”

“Por favor, ayúdame.”

“Entendido. Espera ahí. No hagas nada, en absoluto. No contactes a la policía ni a ningún otro lugar. Déjalo en manos de Boku-sama-chan.”

“Bien, hasta luego.”

Colgué el teléfono.

También lo apague.

Luego, caminé hacia Hime-chan, un paso a la vez.

Ya… ya no recuerdo a nadie.

La profesora asistente Kigamine, Kuchiha-chan.

Los hermanos Niounomiya, Rizumu-chan, Izumu-kun.

Todo desapareció y se fue volando.

Borré todo.

Lo consumí.

“… Lo siento, Hime-chan.”

Pisé mi pie en el charco de sangre.

Todavía no estaba completamente seco e hizo un sonido de salpicadura. Mis zapatos estaban sucios. ¿Sucios? ¿Quiero decir que están sucios porque tienen sangre humana? Es sangre. Es parte de un humano. ¿Quiero insultar eso? No tiene nada que ver conmigo.

Suavemente, sostuve a Hime-chan.

Preservar la escena, ¿por qué me importaría eso?

“Aaaaah…”

Hime-chan ha muerto.

Murió.

“Siempre te he causado problemas…… me siento mal, por siempre involucrarte en todo esto… incluso ahora. Es verdad. Cierto. Cierto. No es una mentira.”

Murmuré para mí mismo de forma espeluznante.

Yo, ¿de qué se supone estaba hablando?

Pero no dejé de hablar.

No pude controlarme.

“Para Hime-chan, fue solo el comienzo…”

“Maestro.” Recordé cuando Hime-chan dijo eso. “¿Cuándo te sientes feliz?”

“¿……?” No entendí el punto de la pregunta e incliné la cabeza como un tonto. “Uh… Lo

siento, pero realmente no entiendo el significado de esa pregunta.”

“Porr loo tantoo. ¿A qué hora, en qué momentos te sentiste feliz de estar vivo?”

“Creo que vivir juntos con tres sirvientas Onee-san en un apartamento de cuatro tatamis sería una felicidad, pero no he tenido esa experiencia.”

“Si lo hubieras hecho, recibirías la pena de muerte.”

“Ser ejecutado parece un poco exagerado.”

“Es un crimen de pensamiento.”

“¿Solo eso…? Pero, felicidad, eh… Nunca pensé en eso. No creo que pueda serlo, y especialmente, no creo que quiera serlo.”

“¿No crees?”

“Estoy bien siendo así. Ser capaz de vivir normalmente, ir a la universidad normalmente, llevarme bien con las personas que me rodean, de vez en cuando trabajar a tiempo parcial, ir de viaje, ese tipo de vida normal y perfectamente normal me conviene. Es todo lo que necesito. En particular, no necesito nada. En particular, no quiero nada.”

“Um. No tienes algo que quieras. Algo personal. Algunas personas respondieron que serían felices si hubiera paz mundial.”

“No me importa el mundo. Pensando en el mundo, ¿puede el mundo hacerme feliz? Eso es completamente risible. En este momento, solo estoy pensando en las cosas presentes. ¿No está bien eso? No hay necesidad de preocuparse por ganar la lotería, lograr un gran éxito financiero o cumplir un viejo sueño. Si hoy y mañana y pasado mañana, las personas que me rodean y yo podemos seguir viviendo adecuadamente, ¿no crees que está bien?”

“Hmm. Ah, ya veo.”

Hime-chan sonrió.

Una sonrisa encantadora.

“Entonces eso es lo que hace feliz al Maestro.”

Felicidad.

Aparentemente es felicidad.

¿Qué es eso?

¿Qué significa eso?

¿Qué estás diciendo?

No soy tal cosa.

Incluso una felicidad ordinaria no me conviene.

Ya ha sido demasiado tarde para mí, desde hace mucho tiempo que lo ha sido.

Sin embargo, Hime-chan no es yo.

A diferencia de mí, Hime-chan tenía un futuro. Finalmente, tenía algo por delante. Finalmente, pudo ver las cosas que aún no habían llegado. Vivir no estaba completamente lleno de cosas malas, finalmente Hime-chan debería haber comenzado a pensar de esa manera.

En ese punto, ¿era demasiado tarde?

En ese punto, ¿no era bueno?

Incluso si era demasiado tarde, ¿no era bueno?

Para mí y para Hime-chan.

¿Estás diciendo que desde el principio ya habíamos fallado?

Ella debería haber sido feliz.

Ella dijo que estaba feliz.

Hime-chan dijo que todos los días son divertidos.

Y, aun así.

¿Por qué no podía obtener incluso eso?

¿Es algo tan escandaloso?

¿Puede una persona desafortunada no ser feliz?

¿Solo por ser desafortunado no puedes ser feliz?

No es que ella quisiera ser más feliz que otras personas.

Incluso la mitad de eso está bien.

Incluso el diez por ciento de eso está bien.

Si solo ella no fuera desafortunada, hubiera estado bien.

No es que ella quisiera algo.

No es que ella deseara algo.

“Hime… -chan.”

Pesado.

El cuerpo de Hime-chan era pesado.

Aunque debería ser ligero.

El cuerpo de Hime-chan, que debería haber sido tan ligero como una pluma, era mucho más pesado que la Tierra. Pesado, como un peso que solo puede destruir, como si fuera para torturarme. Cortando y cortando y cortando hasta la última parte, hasta la última parte, hasta la última parte. Atormentante. Asfixiante.

Estrangulante. Clausurante.

Creando un bloqueo.

Estaba a punto de que me mataran.

Da miedo.

Realmente aterrador.

Miré al cielo.

Azul.

El clima es genial

Incluso sopla una brisa agradable.

Va bien con una casa japonesa.

Un buen lugar.

Este es un buen lugar.

Vivir en un lugar como este no sería malo.

Supongo que a Kuchiha-chan también le debe haber gustado. Ella dijo algo así. Que este lugar tiene un ambiente agradable. Así es. Este es un ambiente muy agradable para que la gente viva.

Sin embargo… aquí no hay nadie.

En ningún lugar.

Solo yo estoy aquí.

Nadie… nada que ver conmigo.

Sin sonido, sin luz.

Como si estuviera aislado del mundo, estaba apartado.

Este lugar esta oscuro.

Esta oscuro.

Soledad dentro de la oscuridad.

Oscuro.

La oscuridad es oscura.

Sin ninguna esperanza, solo con desesperación.

Odio esto. No me gusta este lugar.

Es como una tortura.

Es la prisión del destino.

La guillotina del destino.

No quiero estar en este lugar.

No me gusta estar solo.

Por favor no me dejes solo.

He tenido suficiente.

Por favor, déjame en paz.

No quiero sentirme así.

Estos sentimientos, no los quería.

¿Para qué nací?

¿Con qué significado nací?

Por lo menos… no quiero sentirme así.

Si fuera para sentirme así, preferiría no haber nacido. Si fuera por este sentimiento patético, por el sentimiento de que sería mucho mejor morir, preferiría no haber nacido. Desearía haber sido asesinado el mes pasado. Desearía haber sido asesinado hace dos meses. Y antes de eso y antes de eso y antes de eso y antes de eso, en cualquier momento, de cualquier manera, siempre y cuando supiera de esa sensación de pérdida que no se podía escapar, como la oscuridad, luego, rápidamente, en algún momento y en algún lugar antes de ahora, desearía haber sido liquidado.

Desearía no existir desde el principio.

Llegué a pensar que todo estaba mal.

Llegué a pensar que vivir en sí mismo estaba mal.

Llegué a pensar que todo fue un fracaso.

Llegué a pensar que no estar muerto era un fracaso.

“Lo siento… Hime-chan. Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento…” Murmuré y murmuré y murmuré y murmuré y murmuré como un loco. “Estoy… incluso en esta situación, alguien que no puede llorar…”

No hubo respuesta de Hime-chan.

Incluso sin una respuesta, continué.

Continúo mis tonterías sin sustancia.

“… En ese caso, esa vez no debería haberla salvado. En ese momento, todavía… Morir no habría sido aterrador.”

Tenías miedo, ¿verdad?

Porque parecías estar divirtiéndote. Cuando estabas hablando con Miiko-san, cuando estabas jugando con Moeta-kun y Houkou-chan, cuando esa idiota Nanananami te hizo compañía, cuando bromeaste con Koutoumaru-san, e hiciste amigos en la escuela, ¿verdad? Bien, hasta me los presentaste.

Tenías a alguien que te gustaba, ¿verdad?

En verdad, parecías estar divirtiéndote.

Desearía no haber sabido eso.

Con un sentimiento como el mío en este momento.

¿Ella fue a morir?

“Uuuuuuhhhhhh.”

Ya no eran ni siquiera palabras.

Ya no había nada que hacer.

Entonces, te lo ruego.

Alguien, por favor, mátame ahora.

No quiero encontrar más dolor.

No te diré que retrocedas en el tiempo.

No pediré ese tipo de cosas.

Así que, por favor, no adelantes más el tiempo.

Terminemos aquí.

Estoy bien con un mal final, solo termínalo.

No continúes.

¡No continúes, no continúes, no continúes!

¡Deja de continuar con la inercia!

“Bueno, supongo que moriré…”

Sorprendentemente, honestamente, pensé eso.

“Bueno, supongo que moriré…”

Por lo menos, terminaré.

Incluso si el destino y lo inevitable y la causalidad y el destino no terminan.

Solo yo terminaré.

El yo en este momento no tiene miedo de morir.

Solo conozco la desesperación.

“………………………………………”

Con un edificio de dos pisos, saltar no me matará. ¿Hay un cuchillo en alguna parte? Al menos debería haber cuchillos en la cocina. Y es una antigua clínica, por lo que debería haber bisturís. Está bien incluso si no los hay. Solo necesito golpearme la cabeza contra la pared y moriré. Hay infinitas formas. Está bien, después de todo, fue una vida sin valor.

Terminemos por aquí.

El término.

La última parada.

El fin.

“……………”

Hime-chan y yo estábamos en una relación casual. Si no fuera por Aikawa-san y mucho menos encontrarla, no hubiera sabido su existencia. Ella es residente de otro mundo. Un residente del mismo lado que Shiogi-chan y Tamamo-chan. Incluso si ella se ríe amigablemente y sin pensar, incluso si habla inocentemente y como si se estuviera divirtiendo, incluso entonces ella es definitivamente diferente de mí.

Ella es diferente, por lo que no está relacionada.

No relacionado.

Ella no está relacionada.

Para empezar, era malo tratando con Hime-chan.

Ella es demasiado familiar, se parece a Kunagisa.

Y ella se parece a mí.

Fui malo tratando con ella.

¿Qué estoy haciendo, muriendo por eso?

No soy ese tipo de hombre.

No soy tan buen tipo.

Soy un producto defectuoso.

Mis circuitos que sienten ese tipo de cosas están rotos.

No tengo emociones.

No estoy sintiendo ninguna emoción.

No siento nada.

No me siento.

No estoy triste.

“Porque Hime-chan murió… ¿qué hace eso?”

Solté el cuerpo de Hime-chan. Ella cayó en el charco de sangre con un chapoteo, su pequeño cuerpo. Me puse de pie. Me toqué la cara con las manos cubiertas de sangre. Tenía una sensación viscosa. Se siente inquietante. Se siente inquietante. Se siente inquietante. Se siente inquietante. Se siente asqueroso. Se siente asqueroso. Se siente asqueroso. Se siente asqueroso.

Se siente asqueroso.

Se siente bien.

Lamí un dedo cubierto de sangre.

Tenía mal gusto.

Eso es obvio.

La sangre que había tocado el aire era solo hierro.

Tal cosa no es parte de un ser humano.

“Esperemos ayuda mientras tomamos té o algo así…”

Si voy a la cocina, debería poder hervir un poco de agua caliente. Estoy seguro de que incluso Kunagisa tendrá que realizar varios trámites, y llegar aquí tomaría aproximadamente una hora.

Lavaré esta sangre en el cuarto de baño.

Luego tomaré prestado un libro de la biblioteca.

Beberé un poco de té y esperaré.

Cuando estaba a punto de comenzar a mover mis pies hacia la entrada.

“Ah, eso es correcto.”

Me di la vuelta.

Lo había olvidado.

Caramba.

¿Qué estoy haciendo olvidando cosas importantes como esa?

Dije.

“Hime-chan, lo hiciste bien.”

Adiós.

Despedida.

Buenas noches.