Shin no nakama janai to Yuusha (NL)

Volumen 6

Capítulo 5: La Loba Rit Y Una Noche De Luna

A la mañana del día siguiente salimos del apartado pueblo.

Tres de los dragones que montaban se habían ido, por lo que el obispo Shien tomó el de la izquierda, Rit y Tisse montaron el espíritu del lobo terrible que invocó Rit, y yo corrí a su lado.

No quería que la gente me viera moviéndome tan rápido, así que Rit usó su Aspecto de lobo para confirmar que no había nadie más cerca.

Llegamos a Zoltan antes del mediodía. Rit y yo nos detuvimos en casa para cambiarnos la ropa sucia y luego fuimos a ver a Ruti.

“Bienvenido de nuevo, Hermano Mayor”.

Por alguna razón, Ruti estaba sentada en la silla del alcalde. El actual alcalde, Tornado, estaba a su lado, donde normalmente estaría la secretaria, revisando el papeleo en silencio.

¿Qué está pasando?

“Tuve que pedirle instrucciones a la Sra. Ruhr sobre tantas cosas que fue más fácil para ella lidiar con los problemas primero mientras yo hacía un seguimiento y verificaba las cosas después”, explicó el alcalde Tornado con una sonrisa.

“Sin embargo, no tenías que cambiar de asiento”, dije.

“Este edificio ha sido diseñado para funcionar con la persona en la silla del alcalde en su centro. El asiento del secretario y el del alcalde están uno al lado del otro, pero tiene más sentido que me siente aquí por ahora”. Tornado recogió su papeleo y se puso de pie.

“Me imagino que tienes algo privado que discutir. Puedo salir.”

“No, me gustaría que estuvieras aquí para eso también”, dijo Ruti, deteniendo al alcalde.

“Ya veo. En ese caso, me uniré a ti”, respondió Tornado antes de volver a sentarse.

Claramente estaba haciendo todo lo posible para que a Ruti le resultara más fácil actuar, pero tampoco le estaba confiando todo ciegamente. El alcalde Tornado estaba considerando lo que era mejor mientras apoyaba a Ruti.

Mi respeto por él creció un poco cuando me di cuenta de eso. En términos de habilidad política, Tornado sin duda no era tan hábil como el Príncipe Salius o Lilinrala, pero era honesto consigo mismo acerca de lo que podía y no podía hacer y siempre pensaba detenidamente en lo que era necesario.

Si me preguntas, el hecho de que fuera alcalde fue una bendición tanto como la presencia de Ruti en Zoltan. Y Ruti pareció estar de acuerdo.

Zoltan era una pequeña región fronteriza sin ningún poder militar o económico, pero había todo tipo de personas aquí.

“El príncipe Salius está buscando a Mistorm…”, divulgó Rit.

Ruti asintió en silencio. El rostro del alcalde se puso rojo y luego palideció en estado de shock. Se secó el sudor que se le formaba en la frente con su pañuelo.

Ciertamente dio la impresión de ser poco confiable. Aun así, permaneció donde estaba y escuchó hasta el final.

Era natural que la gente fuerte no se postulara, pero el alcalde era un político de poca monta y atrasado. Esta fue una batalla mucho más allá de sus capacidades, pero se mantuvo firme.

Zoltan era un buen lugar. Fue una suerte que hubiera elegido establecerme aquí.

“¿Qué crees que deberíamos hacer, hermano mayor?” preguntó Ruti una vez que escuchó todo.

“Sobre eso… Si Zoltan va a proteger a Mistorm, entonces creo que sería mejor negociar con Lilinrala”, respondí.

“Mhm. Estoy de acuerdo. Lilinrala tiene como objetivo evitar que el Príncipe Salius y Mistorm se reúnan, lo que está en desacuerdo con el objetivo del príncipe de llevar a Mistorm de regreso a Veronia”, dijo Ruti.

Asentí. “Si las negociaciones avanzan sin problemas, debería ser posible evitar que ambas partes salgan perjudicadas”.

“Pero será difícil moverse rápidamente. Si el secreto sale a la luz, Lilinrala se moverá para deshacerse de todos los que tengan alguna conexión con él”, comentó mi hermana.

“Sí, eso es bastante probable… En ese caso, ¿por qué no esperar y observar un poco más?” Sugerí.

“Habiendo perdido a sus subordinados y a los asesinos callejeros, debería estar impacientándose. No pasará mucho tiempo antes de que ella misma haga un movimiento”, dijo Ruti.

“Déjala hacer su mejor tiro si quiere”, declaró Rit.

La primera lección de la espada fue no temer ser cortado, tener la voluntad de recibir un golpe y aun así ganar.

“La existencia de Mistorm no es una debilidad para Zoltan; es una fortaleza. Tanto el príncipe Salius como Lilinrala están obligados a que ella esté aquí. Entonces, si esperamos, tendrán que hacer un movimiento”, dije.

“Mhm, hagamos eso”. Ruti asintió con la cabeza, aparentemente complacida de que yo estuviera pensando lo mismo que ella.

“Entonces no entregaremos al Maestro Mistorm, entonces… Gracias a Dios…” El alcalde Tornado pareció aliviado después de escuchar el veredicto de Ruti.

Una emergencia a la mañana siguiente hizo que Ruti se apresurara a verme.

Rápidamente me cambié y partimos juntos hacia su granja. “Red”, llamó Tisse, saludando desde el lado de su invernadero.

Estaba claro en sus ojos que la situación no era agradable. Ruti y yo entramos al invernadero.

“¿Qué debemos hacer, Hermano Mayor…?”

Ella agarró mi manga ansiosamente. No había rastro de la niña fortalecida por las inmunidades del Héroe. Ella era solo Ruti, una joven normal preocupada por la escena que teníamos delante.

“Hmmm.”

Miré de cerca los diminutos brotes de hierba gris estrella de mar que yacían sin fuerzas en el suelo. Ruti y Tisse cultivaban la hierba en un rincón del invernadero. Los brotes estaban visiblemente debilitados. Por lo general, la hierba estrella de mar gris tenía raíces firmes y las plántulas brotaban rectas. Sin embargo, estos estaban marchitos.

“¿Por qué?” Ruti preguntó.

“Moho”, respondí, usando una paleta para recoger un poco de tierra para mostrarle. Un examen cuidadoso reveló que la suciedad unos centímetros debajo de la superficie había comenzado a adquirir un tono amarillo. “El color del suelo ha cambiado”.

Ruti y Tisse miraban la tierra allí en la paleta.

“Es moho frío. Absorbe el calor de su entorno para crecer”, le expliqué.

“Lo he visto en cuevas y ruinas, pero entonces era más grande”, comentó Ruti.

“Es solo un problema aventurarse cuando está prosperando en grandes colonias”.

El moho frío era uno de los muchos tipos de hongos que crecían en todo el continente. Era un espécimen único que absorbía el calor de su entorno para reproducirse. Cuando su radio se extendía más allá de medio metro, se le llamaba colonia, y cuando el radio llegaba a los diez metros, se le llamaba territorio. Con ese tamaño, cualquier fuente de calor, incluidas las criaturas vivas, que se acercaba experimentaba una pérdida repentina de calor. Fue suficiente que, para las personas que tenían un nivel de bendición bajo, treinta segundos de exposición podrían desmayarlos.

Mientras te alejaras rápidamente para calentarte, estarías bien. Sin embargo, si resultó herido y no pudo escapar, podría ser letal.

Examinando el suelo, dije: “Casi nunca se convertirá en una colonia en lugares civilizados, pero puede reproducirse en pequeñas cantidades en un suelo cálido como este”.

El moho frío estaba bajando la temperatura de la tierra, haciendo que la hierba gris estrella de mar se debilitara.

“Cómo se formó el moho frío…”, murmuró Ruti.

“Probablemente estaba latente en el suelo. Normalmente, hiberna durante el invierno y solo queda una pequeña cantidad. El invernadero debe haberlo revitalizado”, supuse.

Supongo que se podría decir que Ruti y Tisse tuvieron mala suerte. Pero era casi un hecho que algo imprevisto sucedería durante el proceso de cambio de la tierra a un nuevo cultivo. Sin duda, también surgirían algunos problemas más durante el primer año.

“…” Ruti se derrumbó tristemente.

“Ya que lo notaste tan rápido, aún podría haber tiempo para tomar algunas contramedidas”, alenté.

“¿Contramedidas? ¿Se pueden salvar las plantas?” “Sí, aunque no hay garantía”.

El moho frío era peligroso, pero por lo que observé, no se había extendido demasiado. A diferencia de los mohos que parasitaban directamente a las plantas, si eliminaba el moho frío y luego volvía a elevar la temperatura del suelo, los cultivos tenían la oportunidad de sobrevivir.

Como Ruti había reconocido el problema esta mañana y acudió a mí de inmediato, creí que había tiempo suficiente para rescatar las hierbas.

“Tenemos que atacar rápidamente. Prepararé algo para eliminar el moho frío” dije.

“¡Okay!”

Dejándole la finca a Tisse, Ruti y yo fuimos rápidamente a comprar los ingredientes que necesitaba.

Después de diluir el producto químico necesario varias veces, lo esparcimos con cuidado alrededor de la parcela y luego verificamos el estado debajo de la superficie. Las cosas parecían ir a nuestro favor. Afortunadamente, el moho frío no fue especialmente resistente. Si todo iba bien, se habría ido a la mañana siguiente.

“Después de asegurarse de que el moho esté muerto mañana, debe colocar una tela gruesa sobre el suelo para calentarlo un poco”, le aconsejé.

“Entiendo.” Ruti apretó los puños frente a su pecho mientras respondía. Había una poderosa determinación en sus ojos. Quería salvar esos brotes de hierbas medicinales.

Irónicamente, ella nunca había mostrado ese tipo de convicción mientras era la Héroe.

“Hiciste bien en darte cuenta.” “Mhm”.

Empecé a extender mi mano para acariciarle la cabeza. “Whoops”.

Sin embargo, me detuve. Mi mano estaba sucia de trabajar con la tierra. No podía estropear los mechones azules y limpios de mi hermana.

Ruti hizo un puchero cuando me vio detenerme. “Mrgh”. Agarró mi mano con las suyas, tirando de ella y colocándola sobre su cabeza.

“Te ensuciarás”.

“Tomaré un baño después, así que está bien”.

Presionó su cabeza contra mi palma, como para confirmar la sensación. No pude evitar sonreír ante eso.

“Bien, lo entiendo. Lo hiciste muy bien, Ruti. Esa es mi hermanita para ti”, la elogié mientras acariciaba su cabeza suavemente, con la esperanza de no ensuciarla demasiado.

“Mhm, soy tu hermana pequeña”.

Las comisuras de la boca de Ruti se curvaron ligeramente mientras sonreía feliz.

Me entraron ganas de envolverla en un gran abrazo cuando vi su lindo y pequeño gesto. Sin embargo, logré contenerme.

Cuando salí del invernadero, vi a Tisse sentada para alimentar al Señor Crawly Wawly con un insecto después de que ella terminara de cuidar las otras hierbas que ella y Ruti estaban cultivando.

“Gracias por tu ayuda… ¿Está todo bien?”

“Sí. Menos mal que ustedes dos detectaron el problema tan rápido. Es probable que algunos de los brotes se echen a perder, pero la mayoría se recuperará”.

“Está bien.” Tisse respiró aliviada.

El Señor Crawly Wawly abrió las piernas y dejó caer el estómago al suelo con aparente alivio. Sonreí ante la vista.

“El Señor Crawly Wawly se sintió culpable por no haber notado el moho frío antes. Dijo que lo habría reconocido de inmediato si hubiera caminado sobre el suelo”, explicó Tisse.

Parecía estar un poco deprimida. Casi triste.

“Ya veo. Obtener su ayuda para administrar las cosas podría ser una buena idea en el futuro”, respondí.

Probablemente no había muchos granjeros que pudieran sentir la condición de la tierra tan bien como él.

En aparente respuesta a lo que dije, el señor Crawly Wawly giró sus patas delanteras como si dijera: “¡Haré lo mejor que pueda!”

“Red.” Tisse se levantó y me miró directamente a los ojos. “Antes de conocerlos a todos, nunca hubiera imaginado una vida cotidiana tan tranquila trabajando la tierra. Mi antiguo yo no se habría sentido cómodo pasando un tiempo así con una nave enemiga tan cerca. A decir verdad, puede que simplemente haya asesinado al Príncipe Salius.”

Las palabras eran en broma, pero si Tisse alguna vez se puso seria, probablemente sería una hazaña simple para ella. Sus ojos se entrecerraron muy ligeramente; los cambios en su expresión fueron tan mínimos como siempre.

“Aunque me gusta esto.” “Ya veo.”

Al ver la sonrisa apenas reconocible en su rostro, también sonreí. Tisse era una amiga preciosa.

Al mediodía, le dejé la tienda a Rit y fui a ver a Yarandrala.

“¡Red!” Al verme desde lejos, corrió directamente hacia mí en lugar de simplemente saludarme con la mano. “¡Viniste!”

No se molestó en reducir la velocidad en absoluto, cargando directamente en un gran abrazo. Sonreí torpemente mientras soportaba su peso.

“Tch… Red, idiota…”

¡Los trabajadores cercanos me miraron con miradas aterradoras en sus ojos!

¡Están equivocados! ¡Los altos elfos se ponen demasiado sensibles con los amigos! ¡No es lo que piensas!

Sin embargo, mis excusas mentales flotaron en el cielo de Zoltan sin llegar a nadie.

Finalmente despegué a Yarandrala y logré ver cómo avanzaba el trabajo. “¿Cómo están los cocoteros?” Yo consulté.

“Están bien”, respondió Yarandrala, sacando pecho. “Cada uno está rebosante de vitalidad. Solo estamos cosechando los cocos para hacer un par de meses de aceite. Sé que a la gente de Zoltan le gusta tomarse las cosas con calma, pero están escuchando mis instrucciones y cuidando las plantas como es debido. ¡Así que no tengo quejas!”

“¡Excelente! ¡Gracias, Yarandrala!”

“De nada. ¡Me alegro de poder ayudar!”

Cuando se trataba de cuidar los árboles que usábamos para cosechar cocos para obtener aceite, Yarandrala tenía más conocimientos y habilidades que los botánicos de Central. Había investigado cuánto sería mejor recolectar de cuántos árboles y había elaborado un plan que cualquiera podía comprender.

“Heh-heh”, Yarandrala se rio entre dientes felizmente. “Esta es la primera vez que vienes a pedirme ayuda con plantas en lugar de algo relacionado con peleas o aventuras”.

“Solo porque mi vida fue un combate sin parar hasta que llegué aquí”. “Me alegro. Realmente soy. Siempre quise intentar cultivar cosas contigo”. Envolvió sus brazos alrededor de mi cuello, me miró a los ojos y sonrió.

“Cuando se aclaren las cosas con Lilinrala, levantemos algunas flores juntos. Estoy seguro de que los que cultivemos florecerán maravillosamente”.

Yarandrala besó mi mejilla y luego volvió con los trabajadores.

“Cultivando flores, ¿eh? Parece que a ella también le ha gustado Zoltan.” Sonreí mientras la veía irse.

Sin embargo, ser inundado por miradas de odio se estaba volviendo aterrador, así que decidí ir a la refinería de petróleo.

A pesar del nombre, era solo una glorieta que protegía del sol. Los trabajadores estaban extrayendo aceite de los cocos. Estaban usando la receta que había diseñado, así que miré a mi alrededor y les di algunos consejos a algunas personas.

“No parece que haya ningún problema aquí”.

Todos estaban trabajando duro, incluso en el aire frío del invierno. Fue una demostración de esfuerzo bastante diferente a la de Zoltan.

“Si tan solo fueran tan serios todo el tiempo… No, eso sería demasiado estresante, supongo”.

“Sí, estoy de acuerdo”, dijo una voz familiar. Al darme la vuelta, vi al comerciante con el que había hablado en el Gremio de Comerciantes. Aparentemente, el gremio le había encargado que observara la operación. “La gente está trabajando diligentemente porque el trabajo recién comienza. Una vez que se acostumbren, recordarán holgazanear aquí y allá.”

Rascándome la mejilla, respondí: “Ha-ha, eso es un pequeño problema, aunque supongo que le queda bien a Zoltan”.

“Ya hemos repartido varios barriles y la respuesta ha sido favorable. No tiene el olor del aceite de pescado, por lo que algunos querían cambiar al aceite de coco en el futuro”.

“Eso es bueno escuchar.”

“Afortunadamente, no parece que vayamos a tener problemas con los suministros, a pesar de los mejores esfuerzos de esa nave Veroniana.

Sería mortal para los negocios si el mercado se estancara, pero mientras haya algo que moverse, nos las arreglaremos”.

“Sin embargo, los ingresos caerán”, comenté.

“El gremio manejará las cosas con subsidios para evitar que la gente se hunda por completo”, aseguró el comerciante. El incidente probablemente lo había golpeado más fuerte que a nadie, pero su rostro permaneció brillante. “Todo esto es por ti y por Rit. Tienes mi gratitud.”

Aprecio por Red el boticario en lugar de Gideon y su espada, no podría explicarlo, pero me hizo muy feliz.

Después de eso, volví a la tienda.

Los clientes eran escasos, así que conversé informalmente mientras les vendía cualquier medicamento que necesitaran.

Aunque preocupados por el acorazado Veronian, la gente de Zoltan mantuvo su personalidad de “se resolverá solo mañana” y siguió con su vida diaria.

Después de cerrar por la noche, Rit y yo tuvimos una agradable cena con Ruti, Tisse y Yarandrala, y después de que los tres se fueron, Rit y yo nos metimos juntos en el baño para lavarnos.

Nos tomamos nuestro tiempo para entrar en calor y preparé un poco de leche caliente mientras Rit cuidaba su cabello.

Era nuestra vida normal y cotidiana.

Después de que se puso el sol, me senté bajo la luz de la luna y cuidé mi espada. La hoja de bronce era resistente al óxido, a diferencia de las de acero. La mayoría de las veces, todo lo que realmente necesitaba era una limpieza rápida con un paño.

“Acabo de comprar uno nuevo, pero ya está mellado”. Estaba bastante golpeado por las peleas con la bestia gema y los asesinos callejeros. Recientemente, parecía que nos habíamos enfrentado a bastantes oponentes poderosos, y las cosas con Veronia aún no se habían resuelto. “Sin embargo, el núcleo todavía parece estar bien”.

Quería mostrarle un poco más de aprecio a la espada, así que saqué algunas piedras de afilar y tomé un balde de agua. Afilé la espada con dos piedras de afilar con diferente grosor.

La espada corta de Tisse era lo suficientemente afilada como para cortar la piel con solo tocar su hoja, pero mi espada no tenía un borde tan afilado. Pulirlo fue realmente solo un retoque menor.

El proceso no tomó mucho tiempo. Enjuagué la hoja cuando terminé, la pulí con el paño y luego la sostuve bajo la luz de la luna.

“Estoy seguro de que nunca imaginaste enfrentarte a enemigos como esos”.

Un arma como esta estaba pensada para novatos que recién comenzaban. Iba a ser usado contra goblins y limos menores. Después de medio año, sería cambiada por una mejor arma y luego comprada de segunda mano por otro novato, convirtiéndose en su primer socio…

Sentado allí, bajé la espada una vez. Cortó el aire con un silbido y captó la pálida luz del exterior.

“No es como si hubiera salido a buscar batallas… pero no pelear por mis amigos solo porque quiero vivir libremente se siente limitante. Lo siento, pero probablemente te necesitaré de nuevo en algún momento”.

“Muy bien. Si quisieras manejarnos en una batalla que deseas, no desearíamos más”, respondió una voz resonante.

Me reí de eso. “¿Oh? ¿Quién podrías ser, alguien que responda a mi petición?”

“Hah-hah-hah. Soy el espíritu que mora en esta espada de bronce. Reconozco que me has amado. Ya sea por el bien de tu hermana y su compañero, tus amigos en Zoltan, o por tu bien amado, si soy útil para protegerlos, entonces úsanos como quieras”.

“Muchas gracias, Señor Espíritu”. El espíritu volvió a reír.

“Tengo un último consejo para ti”. “¿Qué es?”

El espíritu autoproclamado de la espada de bronce que estaba detrás de mí envolvió mi cabeza en un gran abrazo.

“¡Deberías ser fiel a tus deseos hacia tu amada!” Rit me apretó fuerte.

“¿Qué quieres decir con ‘deseos’…? ¿Eh? Algo se siente diferente”. “Eh-heh-heh”.

Rit se sentía rara, casi esponjosa… “¿Estás usando Aspecto de Lobo?”

“Bingo. Vamos. ¡Sé que has querido acariciarme desde el momento en que me viste así! O, más precisamente, ¡querías ponerte todo cariñoso!”

Había orejas tupidas de lobo en la cabeza de Rit, y una cola esponjosa se asomaba por debajo de su falda.

¿Cómo funciona eso con su ropa interior? Me preguntaba. Los hechizos de forma subsumieron temporalmente la ropa del usuario en su cuerpo mientras se transformaba, pero se suponía que los hechizos de aspecto dejarían la ropa sin cambios. Era demasiado vergonzoso preguntar, por supuesto, pero no pude evitar especular.

“¿Por qué no lo sientes por ti mismo?” Rit sonrió mientras se sentaba en mi regazo.

“I-Incluso si dices eso…”

Rit meneó la cola, disfrutando de mi agitación. Por alguna razón, se sentía como si estuviera siendo particularmente agresiva hoy.

“Has estado un poco preocupado por las cosas últimamente, ¿no es así?”

“… ¿Lo notaste?”

“Nada pasa por la nariz de la Loba Rit”.

Rit se giró, sus rodillas presionando contra mi estómago mientras se sentaba frente a mí en mi regazo.

“No tengo una respuesta para tus preocupaciones sobre el mundo o las Bendiciones Divinas. Todo lo que puedo hacer es decirte que has tomado la decisión correcta”. Ella sonrió antes de presionar su frente contra la mía. “Me alegro de que estés aquí, así que esto no puede estar mal”.

“Supongo que sí…”

Rit y yo éramos felices.

No importa qué vida lleváramos, permanecer fieles a eso era la respuesta correcta para nosotros.

“¡Así que mímame más ahora!”

Rit besó mi mejilla… Su lengua se sentía diferente. Estaba un poco sorprendido.

“Uh, ummm…”

“Vamos ya. Querías acariciarme así, ¿verdad?”

Rit miró hacia abajo, señalando ligeramente la parte superior de su cabeza hacia mí mientras sus orejas de lobo se contraían.

“Te estás volviendo bastante fuerte esta noche…” A pesar de lo que dije, yo también estaba disfrutando las cosas. Sin embargo, estaba trabajando duro para contenerme porque mi amor amenazaba con volverse loco.

Empecé a acariciar suavemente la cabeza de Rit, teniendo cuidado de no estropear sus mechones rubios. Sin embargo, a juzgar por su expresión, eso no fue suficiente, así que la acaricié con más firmeza, como si jugara con un perro. La cola de Rit se movió en respuesta. Entrecerró los ojos y sus labios se abrieron en una pequeña sonrisa.

Aspecto de Lobo era magia para la batalla. Otorgó los sentidos mejorados y las habilidades físicas de un lobo para obtener una ventaja en el combate. Los asesinos de antes también habían empleado Aspecto de Montar a

Draco para luchar. La gran mayoría de la magia y las habilidades eran para el combate.

Sin embargo, Rit lo estaba usando para animarme, para adquirir la apariencia y personalidad fría y encantadora de un lobo en lugar de sus capacidades físicas. Dudo que cualquier gran mago que haya desarrollado ese hechizo por primera vez en el pasado distante haya imaginado que se utilizaría de esta manera. Eso me trajo alegría. Era como magia que Rit había creado solo para mí.

Ya no satisfecha con ser mi mascota, Rit me rodeó con sus brazos, abrazándome y frotando su mejilla contra la mía.

Sentados allí abrazándose así… La sensación de cercanía era increíble. No podría comenzar a describir la oleada de emociones, pero fue una sensación maravillosa.

Todas mis preocupaciones sobre pelear parecían pequeñas en comparación. Parecía que el cuerpo de Rit estaba un poco más caliente de lo habitual en el modo Aspecto de Lobo. Ese calor era agradable en una fresca noche de invierno.

“¿Por qué no sentir cómo funciona la cola?” Rit sugirió, retorciendo su cola en mi regazo.

“Si vas a insistir, entonces supongo que tengo que hacerlo”. “Eh-heh-heh. ¡Sé mi invitado!”

Rit se aferró más a mí. Mirando por encima de su hombro, pude ver la hermosa curva de su espalda hasta el trasero, y su cola sobresaliendo por debajo de la falda. No podía ver desde mi posición, pero con el dobladillo tan levantado, su ropa interior tenía que estar mostrando.

Aspecto de Lobo era una magia verdaderamente gloriosa, pero tal vez era demasiado para los humanos. Sin embargo, solo éramos nosotros dos.

“Está bien, tengo orejas y nariz de lobo. Lo sabré si alguien viene”, aseguró Rit antes de besar mi mejilla una y otra vez.

No pude contenerme más y apreté a Rit con fuerza. Ella le devolvió el gesto con la misma fuerza.

Fue un momento maravilloso.

Llevé mi mano hasta la cola de Rit. Mi corazón comenzó a latir más rápido. La única forma de saber cómo funcionaba la cola era metiendo la mano en su falda.

Cómo (swish) hizo (swish) su (swish, swish) cola (swish, swish, swish, swish, swish) …

“Rit”.

“¿Q-Qué?”

“Tu cola se está moviendo demasiado fuerte. No puedo acercarme más.”

Se movía tanto que temí que se rompiera. El rostro de Rit se puso rojo brillante.

“¡No es justo!” gritó, y me empujó hacia abajo. “No es justo. Me aseguré de que no pudieras ver mi cara, pero mi cola me traicionó.”

Estaba frotando su rostro contra mi mejilla y mi mandíbula. Supongo que sus emociones se estaban volviendo un poco como las de un lobo. El poder de la magia debe haber sido la razón por la que estaba actuando hoy.

Rit finalmente dejó de frotarse contra mi pecho y mi cara y se apartó un poco. Estaba encima de mi pecho cuando me acosté en el suelo, con las mejillas sonrojadas. La vista de ella allí era demasiado linda para mí.

“Sabes, probablemente me encerraré en el dormitorio por vergüenza mañana”, admitió.

“Sí, puedo ver que eso suceda”, estuve de acuerdo. “Entonces…”

“¿Uh huh?”

“Quiero abrazarte más hoy para compensarlo”, dijo Rit, sonriendo. Su apariencia alterada era realmente demasiado emocionante.

“Mientras estés conmigo, no podría ser más feliz”, confesé, dejando que mis sentimientos salieran a la luz. Así de irritado estaba.

Rit sonrió y su cola se movió lentamente en un amplio arco. “Te amo” susurró Rit.

No pude soportarlo más.

Tal vez debería preguntarle si puede usar Aspecto de Gato en otro momento…