Kawaikereba Hentai demo Suki (NL)

Volumen 3

Capitulo 2: Yuika-Sama Desea Ser La Única.

Parte 1

Esta es una breve historia que sucedió mucho antes del incidente con la carta. Era abril, el lugar, era la biblioteca después de clases, en ese lugar, había una hermosa chica rubia leyendo un libro.

“¿Eh? Así que viniste hoy también, Koga-san.”

“No tiene nada que ver con Kiryuu-senpai.” Ante la pregunta común que hizo Keiki, ella respondió de una manera extraña.

Pero bueno, era mejor que antes, ya que cuando él le hablaba, ella ni le contestaba. Era de esa forma como antes pasaban su tiempo juntos en la biblioteca.

La primera vez que Kiryuu Keiki y Koga Yuika se conocieron, fue cuando el chico estaba en segundo año de secundaria. En ese momento, tenían una relación Senpai – kouhai, un poco fría, ya que casi no se hablaban. Por parte de Keiki, él estaba obnubilado con la extraña belleza de la chica rubia con ojos azules.

Con su inusual pelo y apariencia, ella estaba en una liga totalmente diferente de todas las personas que había conocido y para bien o para mal, además de ser compañeros de clase o ser compañeros de biblioteca nada más, todos y cada uno de los estudiantes se mantenía alejado de la pequeña chica, lo cual le hacía imposible encajar en la escuela. Yuika por su parte, tampoco es que mostrara mucho interés en integrarse a estos grupos.

La Yuika de esa época, quien estaba claramente excluida de todo humano en la escuela, era alguien fría y distante. Keiki pensó que esta era la razón por la que las demás personas la evitaban. Era porque sus hermosos ojos azules siempre estaban fijos en algún libro y cuando alguien intentaba hacer cualquier clase de contacto con ella, de forma rápida y sin compasión, ella cortaba esa comunicación. Pero, aun así, después de saberlo, Keiki continuaba acercándose a ella.

“¿Qué lees, Koga-san?”

“……”

Sin decirle una sola palabra, ella ladeó un poco el libro que estaba leyendo para mostrarle la portada a Keiki. El título de este era: El príncipe más indeciso del mundo.

“Vaya… ese es un título bastante extraño, ¿no crees?”

“No está mal, es cómico y Yuika piensa que es interesante.”

Y así nuevamente había terminado la conversación, y Yuika había vuelto a fijar su mirada en el libro. Cuando ella cerraba su boca, parecía más bien una especie de marioneta. De repente en ese momento, una suave brisa entró por la ventana e hizo que su cabello se moviera un poco. Esta hermosa imagen hizo que Keiki la mirara fijamente.

“… ¿Tengo algo raro o qué?”

“¿Eh?”

“Yuika cree que es muy grosero mirar fijamente a alguien.”

“Ah, sí, lo lamento, es solo que es muy hermoso.”

“¿Hermoso?”

“Sí, tu cabello es muy hermoso.”

“Eres muy extraño, Kiryuu-senpai.” La hermosa joven soltó un suspiro y se acercó un poco a Keiki. “Kiryuu-senpai, ¿por qué te preocupas tanto por Yuika? Una Kouhai que es tan grosera, no es linda, ¿sabes?… o… ¿acaso Senpai cree que burlarse de las mujeres es algo divertido?”

“No, para nada.”

“Bien, ¿te podrías callar entonces? Como puedes ver, estoy leyendo.” Sin titubear al haber dicho eso, ella volvió a ver fijamente su libro.

Justo antes de comenzar a odiarse a sí mismo, Keiki notó cierto libro encima de la mesa.

“Oh, he visto este libro antes.”

“¿En serio?”

“Sí, en la escena donde el protagonista se vuelve en el enemigo de su país para ayudar a la heroína, fue genial.”

“¡Cierto! ¡El protagonista de ese libro es increíble!” “S-sí…”

“Él tuvo muchos problemas, pero los superó, y en el final cuando salvó a la heroína de la cárcel, ¡fue lo mejor sin duda!”

“S-sí, eso me conmovió demasiado.”

“¡¿Cierto?! ¡De solo recordarlo hace que el corazón de Yuika lata rápidamente!”

Cuando vio los azules ojos, de la chica, brillando y su hermosa sonrisa en su rostro, Keiki comenzó a reír.

“Al fin sonreíste, Koga-san.”

“Ahh…”

Cuando Yuika se dio cuenta de que se había emocionado un poco, sus mejillas comenzaron a sonrojarse.

“¡No creas que podrás usar eso en contra de Yuika!”

“No lo haré…”

Y no era algo de importancia tampoco.

En sí, lo que los había comenzado a acercar más desde este punto, fue que algunas veces leían los mismos libros. Después de esta situación, siguieron hablando como los miembros del comité de la biblioteca que eran y además sobre sus gustos, y así fue como gradualmente comenzaron a ser más cercanos. Fue lento pero seguro que la chica comenzó a sonreír con más confianza, además, Keiki creía que ver a su hermosa Kouhai sonreír, era mucho mejor que su fría mirada.

***

Después del día, en el cual Keiki fue descubierto mirando la ropa interior de Yuika. Su nueva vida como esclavo había comenzado.

“Oye, Keiki-senpai, Yuika quiere tomar un poco de jugo frío.”

“¡Iré a comprar uno ahora mismo!”

Cuando la hermosa chica tenía sed, él actuaba inmediatamente…

“Keiki-senpai, Yuika siente sus hombros un poco rígidos.”

“¡Claro, iré a darte un masaje ahora mismo!”

En ese instante, el joven fue a darle un masaje a la chica…

“Keiki-senpai… los calcetines de Yuika están un poco calientes, ayúdala a quitárselos.”

“¡Sí, con mucho gusto!”

También la ayudaba a quitarse sus calcetines.

“Senpai, sé que tienes un fetiche con las medias que van por encima de la rodilla, por lo que no las puedes oler, ¿está bien?”

“No lo voy a hacer, y, además, no tengo un fetiche como ese.” “Yuika te va a pisotear si intentas mirar sus panties.” “No lo haré.”

Aun si él quisiera hacerlo, no lo podría hacer ya que la falda que tenía puesta la hermosa jovencita, le impedía tal maravillosa vista. En ese momento, como ella le había ordenado, comenzó a quitarle las medias a Yuika y le puso un nuevo par que ella misma había sacado de su bolso. Él estaba arrodillado, lo que hacía parecer que era el mayordomo de una arrogante Ojou-sama. Además, como estaban en el interior del salón del club, no era extraño que la presidenta de este los mirara con sorpresa.

“Keiki-kun, o más bien… ¿Amo?”

“No soy tu Amo, pero, aun así, ¿qué sucede?”

“¿Por qué estás obedeciendo todo lo que dice Koga-san?”

“Eh… Pasaron algunas cosas y por eso fue que terminé siendo el esclavo de Yuika-chan.”

“… ¿Qué acabas de decir?”

“Fufufu, justo como lo escuchaste.” En ese momento, Yuika se abalanzó sobre él y lo abrazó. Hacía esto para apoyar la declaración de Keiki. “Desde ahora en adelante, Keiki-senpai es el esclavo de Yuika, es algo muy vergonzoso, ¿no crees, Bruja-senpai?”

Sayuki le respondió de forma calmada a la clara provocación que le había hecho Yuika. “Hmph… De seguro estás aprovechándote de una de las debilidades de Keiki-kun para obligarlo a hacer esto, ¿no? Mi Amo no se iría con unos pechos tan pequeños como los tuyos, Koga-san.”

“Qué perspicaz.”

Era justo lo que se esperaba de la chica que tenía excelentes calificaciones. A pesar de que ella era absurdamente mala con los deportes, en su cabeza, no había otra igual.

“Esta relación no tiene ningún significado en sí, apuesto que no durará mucho tiempo esto de Ama y esclavo.”

“Uuu…” Gracias a la precisión tan escandalosa de la deducción de Sayuki, la pequeña chica continuó: “B-bien, si ese es el caso, ¡Keiki-senpai, jura en este momento que te gustan más los pechos pequeños que los grandes!”

“¡¿Eh?! ¿Por qué tuviste que llegar a eso?”

“Keiki-senpai, te gusta acariciar los pechos de Yuika y decir que fue un accidente, ¿verdad?”

“¡¿Espera… Yuika-chan?!”

“¿Ah, eso pasó? Pues en mi caso, él ya metió su mano en la mitad de mis pechos.”

“¡¿Sayuki-senpai?!”

Y las dos no estaban mintiendo, aunque ambas cosas fueron un accidente o manipulación de una fuerza superior, accidente era accidente. Además, no podía decir que no estaba alegre de que eso sucediera, porque era mentira.

“Pero, ¿qué te pasa, Keiki-senpai? ¿En serio pusiste tus manos en esos pechos?”

“Sí, ¿qué pasa Keiki-kun? ¿En verdad acariciaste los pequeños pechos de Koga-san? ¿Acaso fue mentira cuando me dijiste que preferías los pechos grandes…?”

Él estaba recibiendo un doble ataque en ese momento.

“¡Dilo en este momento! Pequeños…”

“O grandes, ¡¿cuál te gusta más?!”

A su derecha, había unos tiernos pechos pequeños.

A su izquierda, había unos hermosos pechos grandes.

Aun si los pequeños pechos de su Kouhai eran encantadores, los enormes pechos, que eran del tamaño de un melón, de su Senpai; podrían jugar con la razón de cualquier chico de la escuela. Y aunque la sensación que tuvo, de los senos de Yuika, era algo maravilloso; los pechos de Sayuki que eran tan suaves, lo mantenían cautivo.

“Yo… yo…”

Los grandes pechos eran fenomenales, pero lo pechos pequeños tampoco estaban mal. No había un modo para escoger cuál era el mejor entre ellos. Ya que ambos eran como hermosas flores que no tenían igual. Sin embargo, Keiki debía escoger cuál era mejor aquí y en este momento, y para él la respuesta era obvia.

“¡Me gustan más los pechos grandes! ¡Aun si soy un esclavo, mi respuesta jamás cambiará!”

“¡Keiki-senpai, eres un idiota! ¡Idiota!”

“Fufu, gané esta vez.”

La perdedora comenzó a golpear suavemente el pecho de su esclavo, mientras tanto, la ganadora mostraba una hermosa sonrisa. Aparte de eso, el árbitro de este concurso de pechos, tenía que agregar otra cosa.

“¡No me malinterpreten! A pesar de eso, no significa que odie los pechos pequeños, ya sean grandes o chicos, me gustan como sea.”

“¡Decirlo de esa manera no te excusa de lo que hiciste!”

“Bien, ver el lloriqueo de una perdedora no es muy agradable para mi vista.”

“Gununununu…”

En respuesta a la provocación de Sayuki, la pequeña chica rubia cerró su boca con fuerza.

“Está bien, como tuvimos que llegar a esto, Yuika te mostrará cuán fuerte es nuestro vínculo.”

“¿Eh? ¿Qué quieres decir con eso, Koga-san?”

En ese momento, Yuika se volteó a ver a Keiki y extendió una de sus pequeñas manos.

“¡Keiki-senpai, la pata!”

“¡Waa!”

Cuando escuchó las palabras de ella, Keiki rápidamente puso una de sus manos sobre la de ella.

“Joder… eso lo hice sin pensar.”

El día que Yuika le tomó la foto a Keiki mientras él buscaba entre su ropa interior, Yuika le había metido en su cabeza ciertas órdenes que él no podía incumplir, por eso fue que reaccionó automáticamente.

“Keiki-kun… has progresado bastante en tu entrenamiento…” “¡¿S-Sayuki-senpai?!”

Cuando volteó a verla, pudo ver que Sayuki tenía lágrimas en sus ojos. “Yo… ¡No quiero ver cómo mi Amo le sirve a esta vil perra!” “¡Espera, Sayuki-senpai!”

Al parecer, Sayuki recibió demasiado daño por esto, por eso fue que salió corriendo del salón como si fuera una joven enamorada a la cual le habían roto el corazón.

“Jejeje, parece que por fin entendió que Keiki-senpai me pertenece.” “No no no no…”

Aunque su Ama mostraba una sonrisa de victoria, el esclavo solo miraba con impotencia hacia la puerta.

“Ahhh, todo lo que pasó con Bruja-senpai hizo que Yuika se cansara, a ella le gustaría que le hicieran un masaje ahora mismo.”

“Claro que sí, mi Ama.”

“Puedes hacerlo un poco más fuerte.”

“Entiendo.”

“… Eso… así está bien.”

Y así fue como Yuika seguía demostrando su verdadera personalidad: Una sádica dominatrix que tenía un hermoso rostro. Sin embargo, Keiki no planeaba quedarse así para siempre.

• Paciencia, Kiryuu Keiki. Solo tienes que aguantar por ahora, ya casi llega el día en el que descubrirás si Yuika es o no tu Cenicienta.

Si Yuika llegaba a ser la Cenicienta de él, eso significaría que ella estaba enamorada de Keiki.

Si eso pasa, entonces podría hacer que esta situación de Amo – Esclavo, se inclinara a mi favor y usarla para mi propia conveniencia. Por lo que esta es mi única oportunidad, es más, incluso podría decirle que voy a limpiar, ¡y así poder desenmascararla!

Después de eso, él pensó que si hacía que Yuika vistiera de Maid y le sirviera, sería una humillación demasiado grande para ella.

Incluso la podría obligar a que camine en cuatro patas y acariciarle su trasero… Sí… eso podría ser algo bueno.

En ese momento comenzó a imaginarse a Yuika totalmente roja y haciendo todo lo posible para no morir de la vergüenza.

Sí, esa es la venganza perfecta, es el plan perfecto.

Para mejorar la situación en la que estaba ahora, él tenía que encontrar sí o sí una prueba lo suficientemente sólida para atraparla, y para poder hacerlo, necesitaba encontrar la ropa interior que le fue hurtada. Esa era la razón por la que en este momento era un obediente esclavo.

“… Jejeje, espera nomás. Vas a sufrir igual que yo.” Susurró el esclavo que estaba planeando una gran humillación para su Ama, mientras que seguía con el masaje.

***

“Uhm… ¿lo pongo acá?”

“No, solo un poco más abajo. Hazlo lentamente, ¿bueno? ¿Está estrecho?”

“Nnn… ¿Eh? Sí, está un poco estrecho, no lo puedo meter.”

“A-aah… no seas tan brusco.”

“Lo sé… Aahh… listo, entró.”

“Sí… por fin entró, eso hizo que mi corazón se acelerara.”

Una vez que terminó de acomodar unas cajas en una estantería, Keiki bajó de la escalera y miró si había otra caja que acomodar.

“… Bien, parece que ya no hay más.”

“Sí, muchas gracias, en verdad me salvaste.” Dijo una hermosa chica que tenía un ojo oculto por su flequillo, ella era Fujimoto Ayano.

Ella era una compañera que estaba en el mismo año que él, además era la vicepresidenta del consejo estudiantil.

“Discúlpame por llamarte sin avisar antes.”

“No te preocupes, no es la gran cosa.”

Era un viernes después de clases, de repente Keiki había recibido un mensaje de texto de Ayano, el cual decía: ´Emergencia, solicito apoyo´, de esa extraña manera ella lo llamó al salón del consejo estudiantil para que la ayudara a ordenar unas cajas. En el interior de estas cajas, había paquetes llenos de papeles y documentos del consejo estudiantil, como eran bastante pesados, Ayano no tuvo más opción que pedirle ayuda a Keiki.

“En verdad me ayudaste, después de todo, solo hay chicas en el consejo estudiantil.” “Ah, sí, la presidenta también es una mujer.”

“Nuestra secretaria también. Por eso el consejo estudiantil hace todo lo posible para que los hombres se unan… Kiryuu-kun, ¿no te gustaría unirte a nosotros?”

“Mm… lastimosamente debo rechazar tu oferta.”

“¿Acaso es porque te sientes cómodo con tu harem del club?”

“El club de Caligrafía no es la utopía que se podría decir que es…”

Ya que después de todo, de todos los miembros que habían, Keiki era el único que no era pervertido.

“Qué pena. Había pensado que podría olerte todos los días.” “Sí, justo pensé que lo decías por eso.”

La estudiante de honor, Fujimoto Ayano, era una pervertida que se excitaba sexualmente con los olores corporales y últimamente se había vuelto adicta al olor de Keiki, incluso llegó al extremo de drogarlo cuando puso ciertas pastillas en un té que le dio, con esto, ella quería quitarle su ropa interior recién usada.

De pronto, esta peligrosa individua comenzó a sonreír.

“Puede que parezca repentino y eso, pero, ¿cuánto quieres por tu ropa interior?”

“Esto es algo que no puedes comprar.”

“A ver, por tu ropa interior, te pagaría 30,000 yenes. Si es por una que usaste en la clase de gimnasia, te daría 50,000.”

“No te las voy a vender, ¿está bien?”

Al parecer, Ayano quería con muchas ansias poseer la ropa interior de Keiki.

“Hay muchas chicas que venden sus panties recién usadas a los viejos, por lo que no debe ser extraño que un hombre le venda sus boxers a una mujer.”

“Sí, pero no me gusta darle mi ropa interior a una mujer que está en el mismo año que yo.”

Un viejo que quiere la ropa interior de una chica de secundaria.

Y una chica que quiere algo de dinero rápido.

A esto se le llamaba oferta y demanda.

“Bien, como dije, por favor te pido que renuncies a mi ropa interior.”

“Qué lástima. Pero, por lo menos déjame tener una buena olida de ti, Kiryuu-kun.”

“Oye, ¡no te me pegues de esa forma!”

“Ah… este olor es demasiado bueno. Incluso creo que podría volverme adicta a él. Sniff sniff. Haa… aahhh…”

“Por favor, termina rápido… Tengo que irme.”

En estos momentos, Ayano parecía una tierna gatita que se aferraba a Keiki mientras estaba sonrojada. Aunque para la mayoría, ser abrazado por una mujer tan hermosa es algo demasiado bueno. Para Keiki, no lo era tanto.

Cuando intentaba soltarse y escapar de la chica pervertida, comenzó a escuchar unos suaves pasos detrás de él.

“… ¿Keiki-senpai?”

“¿Y-Yuika-chan…?”

Cuando él se dio media vuelta, la pequeña chica rubia que incluso parecía más occidental que oriental, estaba de pie dentro del marco de la puerta. Cuando vio que ellos se estaban abrazando, Yuika se puso rígida y comenzó a sonreírles como si fuera un ángel, sin embargo, en vez de parecer bonita, más bien estaba emitiendo un aura que asustaría a cualquiera.

“Yuika-chan, ¿qué haces acá?”

“No contestaste el mensaje de Yuika, ella te buscaba. Así que cuando le pregunté a Akiyama-senpai dónde estabas, él me dijo que estabas en la oficina del consejo estudiantil.”

“Ah, ya veo.”

“Entonces, Keiki-senpai, después de dejar sola a Yuika, ¿viniste a coquetear con otra chica?”

“N-no es eso, fue Fujimoto-san quien me abrazó.”

“Así que fue así. Me parece que estás diciendo puras excusas.” Eso dijo Yuika mientras parecía una CEO de una corporación maligna.

“Ehhh…”

A pesar de que ella fue la que preguntó, solamente dijo eso. Mientras soltaba un suspiro, su mirada cambió inmediatamente hacia Ayano, la miraba con desprecio.

“Tú eres la vicepresidenta del consejo estudiantil. Exactamente, Fujimoto-senpai, ¿no? Es un placer conocerte, soy Koga Yuika de primer año.”

“Sí, lo sé, Koga-san es muy famosa.”

Era famosa por su inusual belleza.

“Fujimoto-senpai, ¿Yuika puede pedirte que sueltes a Keiki-senpai? Él es una persona muy importante para Yuika.”

“¿Acaso Koga-san es la novia de Kiryuu-kun?”

“No, pero tenemos un lazo aún más profundo.”

“Realmente no lo entiendo. Pero, aun así, no lo soltaré tan fácil.”

“¡¿Eh?! ¡¿Por qué?!”

En respuesta a la indignada Yuika, las mejillas de Ayano se sonrojaron aún más, además que también comenzó a agarrar más fuerte a Keiki.

“Kiryuu-kun es la persona que satisface todos mis deseos sexuales.” “¿Espe…?”

Tanto la cara como la actitud de Yuika se oscureció aún más cuando escuchó la escandalosa declaración de la vicepresidenta.

“¡Espe… Fujimoto-san! ¡¿Qué estás diciendo?!”

“Es la verdad. Ayano-san está cautiva por Kiryuu-kun. Ya que siempre me excito cuando lo abrazo así.”

“Entonces sus escandalosas declaraciones no se detienen, ¿eh?”

Aunque la verdad era que ella estaba cautivada por el olor de Keiki, sin embargo, no tenía tiempo para aclarar esto.

“……”

Sin decir ni una palabra, Yuika agarró con fuerza una de las manos de Keiki.

“… Ven inmediatamente con Yuika.”

Estas palabras tenían una presión increíblemente alta.

“E-entiendo…” Su voz estaba temblando.

De esa manera fue llevado a la fuerza por Yuika. Una vez que salieron del salón, caminaron por un pasillo, Yuika lo llevó a un salón que estaba vacío. Cerró la puerta, así como las ventanas, ella se giró para mirar fijamente a Keiki.

“Fufufu, por fin estamos solo los dos.”

Normalmente, Yuika siempre actuaba como una gatita consentida frente a otras personas además de Keiki y Sayuki, pero en este momento, no podía contenerse.

“Bien, Keiki-senpai, ¿una última palabra?”

“Soy inocente.”

“¿Es así? Pues todo culpable dice eso.”

“¿Acaso esta es una cacería de brujas?”

Ya que él había sido declarado culpable desde un inicio.

“Oye, Senpai, Yuika está enojada, ¿sabes? Ella nunca se esperó que la fueras a engañar de esa forma. Por eso está la necesidad de castigarte.”

“Sé que me voy a arrepentir de preguntar esto, pero… ¿qué me vas a hacer?”

“Keiki-senpai date la vuelta.”

“No puede ser… ¿acaso vas a nalguearme?”

“Fufufu… esa no sería una mala idea.”

Con movimientos extraños como si fuera un robot, Keiki se dio media vuelta. En este momento, no tenía idea alguna de qué era lo que iban a hacer con él, además, gracias al calor que hacía en este momento, Keiki comenzó a sudar. Justo en el instante en que una gota de sudor cayó al suelo, alguien lo abrazó por detrás. En su espalda, él podía sentir la suave sensación que generaba el delicado cuerpo de una mujer, además podía sentir su respiración. Gracias a este extraño suceso, el corazón de Keiki comenzó a latir a mil por hora.

“¿Y-Yuika-chan? ¿Qué haces?”

“Este es un castigo… ya que recibir un abrazo mientras estás tan sudoroso, no es muy cómodo, ¿verdad?”

“Bueno, eso es cierto, pero…”

Pero, aun más que la incomodidad, estaba muy avergonzado.

Yuika no tenía el mismo fetiche que Ayano, por lo que no había razón alguna por la que ella lo abrazara de esta manera. Eso significa que había otra razón por la que este abrazo, obviamente no fuera su castigo. Mientras pensaba en eso, su corazón casi se salió de su pecho. ¿Acaso esta era la verdadera intención de su castigo?”

“… Oye, Yuika-chan.”

“¿Qué sucede?”

“Antes, solo ayudaba a Fujimoto-san a organizar algunas cajas del consejo estudiantil, como son tan pesadas, me pidió ayuda.”

“… Hmph.”

“¿No me crees?”

“Yuika te creerá solo por esta vez… pero no te vuelvas a acercar así a otras chicas.” Justo ahora ella sonaba como si estuviera haciendo pucheros mientras aumentaba la fuerza de su agarre. “Porque ahora Keiki-senpai es el esclavo de Yuika.” Ella dijo en un tono muy suave estas palabras, pero a pesar de eso, el joven pudo escucharlas claramente.

Aunque entendía las verdaderas intenciones detrás de esto. Este castigo era lo suficientemente fuerte como para detener los pensamientos de cualquier chico…

En ese momento, él decidió mantener el hecho de que se emocionó un poco al ver a su linda Ama.