Ryuuou No Oshigoto! (NL)

Volumen 15

Capítulo 5: Fifth Score

Parte 8: La Historia Que Te Dedico

Dos semanas después de mi sesión de estudio––– Y el libro está terminado.

“¡Wow! ¡¡Mi primer lanzamiento……!!”

Esa mesa con 10 copias del Libro de Kuzuryu apiladas puede no parecer gran cosa para nadie, pero para mí brilla como si tuviera su propio foco de atención.

Es raro que los jugadores en el mundo del Shogi vean que sus esfuerzos toman forma física. Entonces, tener algo que mostrar por todo ese tiempo y energía que dediqué es extremadamente gratificante. ¡¡C-Cielos, estoy sobre la luna ahora mismo……!!

“¡¡No tenía idea de que pudieras conseguirlos con tanta anticipación!!”

“Naturalmente. Tanto las asociaciones del este como del oeste tendrán eventos exclusivos de ventas anticipadas”

El libro no llegará a las estanterías hasta abril. Machi me explica que planean lanzarlo junto con el comienzo de la próxima temporada de Shogi.

“Entonces, Yaichi. ¿Qué pasa con tus copias de cortesía?”

“¿Mis qué?”

“¿No leíste sobre ellas en tu contrato? El autor adquirirá 10 ejemplares como muestra. Por lo general, se entregan como obsequios a aquellos a quienes el autor desea agradecer”

“Oh, ahora que lo pienso, he recibido libros de jugadores de Shogi antes”

Pensé que solo estaban pasando libros que obtenían de la editorial de forma gratuita, pero

¿Realmente pagaron por ellos? Bueno, debería haber estado más agradecido…

“Así como muchos jugadores escriben mensajes personalizados con autógrafos para los fanáticos, también escriben mensajes en sus libros cuando los dan como regalos. Por lo tanto, traje las 10 muestras conmigo para la firma del contrato”

“Entonces, si firmo y sello estos, entonces te los doy–––”

“Me encargaré de que sean entregados a aquellos que desees. Además, puede haber algunas personas a las que el editor también desee enviar copias. El Meijin, por ejemplo”

“¡¿E-Ellos van a enviarlo al Meijin?!”

“¿La aparición de una de las estrategias contenidas en el Libro de Kuzuryu en la Partida por el Titulo de Meijin no serviría como el mejor anuncio posible?”

¿Él… realmente usaría alguna?

Y, si una de mis estrategias fuera de juego aparece en el combate por el título de Meijin, me asusta saber que serán criticadas por usar una estrategia que es indecente. Los revisores aficionados me van a asar en línea…

“Además, enviar copias a personas famosas es imprescindible. La Blancanieves de Naniwa, por ejemplo”

El hecho de que haya dejado caer ese nombre tan casualmente me hace enojar.

“¡¡……!! ¡¿Te diste cuenta?! ¡¿Sabes dónde está Anedeshi en este momento?!”

“Lo he sabido todo el tiempo”

…………………………………………………… ¿Qué dices?

“¿Eh?    ¿Qué?……………    ¿EH?!    ¡¿Lo    sabes?!

¡¿Entonces por qué diablos trabajé casi hasta la muerte para escribir este libro en primer lugar?!”

“Tú completaste el libro, entonces, ¿Qué importa? Y,

¿no sientes la alegría del logro?”

“B-Bueno, sí, pero ese no es el punto–––”

“La dirección de donde Ginko está convaleciente está escrita en este papel”

Mi corazón salta.

Incluso mis músculos se congelan…

Me duele el pecho, como si mi corazón estuviera siendo estrangulado por todos lados… Me duele tanto que podría llorar…

“Anedeshi………… ¿Está aquí………… ?”

“Sí. Yo misma me reuní con ella. Como O-Ryou me acompañó, no puedo ocultar ese hecho. Ginko parecía muy bien, sorprendentemente”

“¡¿También hablaste con Anedeshi?!”

“Ella no lo hizo. A O-Ryou le faltó coraje y optó por permanecer en el auto. Ella siempre es débil de corazón en los momentos más importantes”

Machi sigue hablando con el papel que me tiende.

“Existe la posibilidad de que el personal te prohíba verla. En ese caso, tu viaje habrá sido una pérdida de tiempo… y Ginko también puede ser transferida.

¿Estás dispuesto a correr ese riesgo?” “ ”

Quiero   verla. Quiero ver su rostro incluso un segundo antes.

Cada célula de mi cuerpo lo está gritando. Quiero verla. ¡Quiero, quiero, QUIERO, QUIERO!

Pero–––

“Todo lo que quiero decirle ahora mismo está escrito en este libro”

Digo rotundamente y le devuelvo el papel a Machi.

“Escribir el libro me hizo darme cuenta de que, al final del día, quiero jugar Shogi con ella. Desde la primera vez que jugamos en el segundo piso de la casa del Maestro… Me he vuelto más fuerte para jugar contra ella porque fue muy divertido ”

Incluso si pudiera hablar con ella, sabiendo lo mal que soy con las palabras, no sería capaz de hacer nada por ella.

Pero, con el Shogi.

“Ginko lo dijo ella misma. Se convirtió en profesional para poder jugar contra mí. No tengo ninguna duda de que ese sentimiento no cambiará”

Recojo un libro y se lo entrego a Machi tal como está.

“Ella no necesita mi sello. Dale este a ella sin extras”

Siempre probaba las estrategias que aprendió en los libros sobre mí. Sé que me usó para la experimentación humana.

Entonces, si le envío este libro, definitivamente––––

–– –––––– Esa chica estaba sentada en una silla en la terraza suavemente iluminada por el sol con un libro en sus brazos, como de costumbre.

Dicho esto, su piel blanca como la nieve era vulnerable a la luz solar. Por lo tanto, la silla en la esquina donde la luz solar directa no podía llegar por los márgenes más delgados se había convertido en suya por defecto. Se había convertido en una rutina que ella se absorbería en un libro en este mismo lugar una vez que las manecillas de su reloj indicaran una hora determinada.

Ella había amado los libros desde que podía recordar.

Para una niña físicamente incapaz de salir y jugar, los libros eran lo único que podía enseñarle lo que había más allá de las paredes de su habitación de hospital.

Las novelas románticas proporcionadas por Keika se habían convertido recientemente en sus favoritas.

La historia era siempre la misma. Una heroína oprimida se encontraría con un hombre con un alto estatus social de una forma u otra y los dos se casarían. Su relación sería inestable al principio, pero se iría acercando hasta… Ese tipo de historias.

Aunque los menospreció por su previsibilidad, la euforia que proporcionaron junto con los momentos de suspenso oportunos la hicieron leer hasta el final. Otra razón por la que seguía viniendo era que podía sostener esos libros de bolsillo durante horas sin cansarse a pesar de tener tan poca energía.

Sin embargo, ella estaba sosteniendo un libro diferente en este día. Este era mucho más grueso de lo normal, y sobre Shogi.

“¿Vaya? Ginko-chan, ese libro……” Keika fue tomada por sorpresa.

La niña había leído muchos libros desde que llegó a esta instalación, pero no había podido leer ni uno solo sobre Shogi.

Sin embargo, una mirada y Keika entendió por qué de inmediato.

Con esa portada, ¿cómo no iba a hacerlo?

“…… Ya veo. Se escondió en algún lugar para escribir un libro, ¿eh? ¡Estaba preocupada por nada!”

Keika se fue a preparar un poco de té, murmurando enojada sobre cómo iba a exigir copias para ella y su padre una vez que llegara a casa, pero no pudo ocultar el brillo de felicidad en sus ojos.

¿Por qué motivo Yaichi Kuzuryu escribió este libro?

¿Quién quería que lo leyera?

La respuesta a esas preguntas estaba en la primera página.

Al fantasma de Shogi que habitaba el segundo piso de la casa de mi Maestro, te dedico esta historia, así como a mi amor.

“…………….. Tonto”

Pasó las páginas, omitiendo las secciones de Shogi por completo para leer las columnas.

Cada uno de ellas era sobre ella… Sobre el fantasma de Shogi.

Sintió que sus mejillas se calentaban con cada página. De vez en cuando susurraba… Tonto en voz baja.

Para cualquier otra persona, el Libro de Kuzuryu era un libro sobre la estrategia del Shogi. Uno muy creativo en eso.

Sin embargo, para la chica… era una carta de amor a gran escala.

Un pequeño papel revoloteó entre las páginas. Aterrizó a los pies de la niña y esta se apresuró a recogerlo antes de que se lo llevara la brisa.

Era un marcapáginas con Saludos impreso en el frente. En el reverso había elegantes letras escritas por una mano firme.

“Será mejor que regreses rápido, de lo contrario lo tomaré como mío”

Luego, dio la vuelta a la portada para mirar la fotografía del autor… y jadeó.

“¡……! ……………… Ya ………… Yai………….. ”

No había visto la cara de su Otoutodeshi en medio año.

En el instante en que su amable sonrisa se encontró con sus ojos, no pudo evitar abrazar el libro contra su pecho.

Sin embargo, una vez que se dio cuenta de que alguien más había tomado esa foto, su ira aumentó instantáneamente.

Eran celos… Celos ardientes.

“Estúpido………… ¿Cómo te atreves a mostrarle a otra mujer esa cara?……………………………………. ¿Eres estúpido?”

Una vez que arrancó la cubierta del libro, decidió intentar leerlo desde el principio. Este libro está inundado de innumerables números y gráficos, de principio a fin.

Sus dedos temblorosos dieron vuelta a la página–––.

Y, poco a poco, Ginko Sora comenzó a abrir la puerta que conducía al campo de batalla.