Zaregoto  (NL)

Volumen 1: Ciclo De Decapitación Y La Savant Azul

Epilogo: Cuento de Hadas Carmesí

Había pasado una semana desde haber vuelto a tierra firme.

Finalmente empecé a asistir a la universidad, pero encontrándome irremediablemente incapaz de adaptarme debido a mi comienzo tardío, simplemente no podía entrar en el estado de ánimo. Y así me encontré cortando las clases de la mañana, caminando por West Main Street. Lo que llamas un día de salud mental, o faltar a la escuela, si quieres ser un idiota al respecto.

“¿Qué diablos estaba haciendo todo ese tiempo antes de regresar a Japón?” Mis autos dirigidos murmullos eran más o menos sinceros, pero probablemente eran en su mayoría sin sentido.

Ya sea que yo estuviera en el ER3, Kyoto, o la Isla Pluma Cuervo Mojado, había cambiado poco, al igual que dejar un espacio en blanco de cinco años había apenas cambiado a Kunagisa.

“Hmm, ¿más tonterías?” Murmuré mientras yo seguía mi caminata. Me volví al sur, pensando que me dirigiría de nuevo a mi Apartamento en Nakadachiuri para leer un poco, pero en el camino me acordé de que hoy era el día en que la revista favorita de Kunagisa salía a la venta, así que paré en una librería local para comprar una copia.

“¿Kunagisa Tomo?”

Desde los incidentes de la isla, Kunagisa se había quedado encerrada en su casa. Ella estaba profundamente inmersa en hacer todo tipo de reparaciones en la estación de trabajo y los PC que Akane-san había destruido. Esta vez ella estaba entusiasmada, diciendo que iba a reconstruirlos completamente de casi invulnerable acero, pero me pareció que no era lógicamente posible. Por supuesto, de lo que estaba entusiasmada era acerca de sus intereses, así que no dije nada sobre eso.

En cuanto a Sonoyama Akane-san y Sakaki Shinya-san, Kunagisa reviso qué había sido de ellos en Internet, lo más probable empleando las habilidades de su viejo amigo Chii-kun. Akane-san se había retirado de los Siete Tontos y comenzado una existencia un tanto recluida, pero mantuvo su importancia como un erudito. Shinya-san supuestamente se mantuvo a su lado. Teniendo en cuenta el hecho de que nadie le había informado a la policía, esto parecía bastante plausible.

Entré en la librería y compré lo que quería con un certificado de regalo, luego me detuve y lo hojee por un tiempo antes de salir de la tienda. En el exterior, un muy llamativo (es decir, de aspecto caro) convertible estaba estacionado frente a la tienda. Era un tipo excéntrico de coche que se hubiera destacado incluso si se trataba de una calle en el centro de Kyoto.

El tipo de coche de clase alta que se ve en las revistas y similares. Ya sabes, con nombres como «Anaconda» o «Viper» o «Ratsnake japonés». Esto probablemente no era un Ratsnake japonés, pero yo estaba seguro de que era algo en la familia de las serpientes. Pero ¿qué estaban haciendo conduciendo en un coche como ese en un carretera japonesa? O más importante, ¿qué tipo de persona conducía en esa ridícula bestia mecánica? Eché un vistazo a tiempo para ver al conductor salir del coche. Así que para no dejarse ganar por el coche, la misma conductora estaba adornada con un atuendo tan llamativo.

Llevaba una camisa de vestir generosamente reveladora dentro de un traje rojo vino que obligaba a captar la atención de cualquier transeúnte, quisiera o no.

Además de eso tenía un abrigo de primavera cubriendo sobre sus hombros con nada en las mangas. Su cabello a la altura de los hombros era innaturalmente brilloso, lo que sugiere que había usado cualquier número de caros productos para el cabello. Gafas de sol de color rojo oscuro que ocultaban completamente sus ojos. Sus proporciones eran suficientes para hacer que te preguntes si ella era una modelo, y ella era alta para empezar. Ella era una mujer hermosa en el sentido más verdadero, pero al mismo tiempo, ella era el tipo de mujer hermosa que no quisieras acercarte. Ella parecía el tipo que tiene muchos malos hábitos y una falta de atractivo universal.

Había algo ofensivo o inarmónico sobre ella.

“Wow” me las arreglé para dar una expresión de asombro.

Así, los coches de buen aspecto tienen conductores de buen ver, yo pensé mientras la miré caminando hacia mí. Me quite del camino para ella, pensando que quería hacer una parada en la librería, pero estaba mal.

Ella se detuvo justo en frente de mí. Luego se quedó mirándome por encima de sus gafas de sol. Dominado por su abrumadora, mirada abusiva, me encontré incapaz de moverme. Al igual que una rana en la mira de una serpiente. Y como tal, fui incapaz de evadirlo.

Sin previo aviso, ella llevo su larga pierna hacia arriba, hundiendo su pie con zapato adornado en mis entrañas. Me derrumbe boca abajo sobre el pavimento.

“Uguu…”

Sentí como que iba a vomitar hasta que no quedara nada en mi estómago. Pero no había tiempo para gritar. Sin piedad ni reserva, comenzó a pisotear mi cuerpo con la parte del talón de su zapato, por lo que dolió un montón.

Como es siempre el caso cuando estás en problemas, no había una sola persona en los alrededores. Había una parada de autobús cercana, pero el bus debe haberse ido porque no había nadie. Maldita sea, debe ser mi día de suerte. Aun así, no tengo ninguna intención de hacer un feo espectáculo de mí mismo pidiendo ayuda a gritos. Rodé en un intento de escapar de alguna manera, pero eso terminó en un fracaso en cuanto me agarró por el cuello.

Así, ella me levantó.

“Huh… De verdad no cierras los ojos” dijo como impresionada. “Wow, es bastante sorprendente. Jaja. Eso es un poco genial. Bueno, de todos modos… Hola.”

“Hola.” “Vamos, esto no es un funeral.”

¿De qué demonios está ella hablando? Me preguntaba cuando apretó alrededor de mi cuello. Ella me arrastró hasta su convertible y me tiró en el asiento del pasajero como una maleta. Ella misma se metió en el asiento del conductor. Se quitó los lentes y aplasto con el pie el acelerador.

Parecía que el coche había estado encendido todo el tiempo. Ella era un enemigo para el medio ambiente.

Pensé mientras me frotaba el estómago y la espalda.

Um, ¿Qué es esto? ¿Qué estaba ocurriendo? ¿Era un secuestro? ¿Por qué yo? Las cosas se estaban moviendo demasiado rápido para seguirles el ritmo. Por mucho que yo fuera alguien de 19 años que va con la corriente, apenas si había estado atrapado en una rápido torrencial como este antes. ¿Quién era esta mujer?

“Um, ¿quién es usted?”

“¿Hmm? ¿Mi nombre? ¿Acabas de pedir mi nombre, amigo?”

Ella me miró. Su mirada era aún peor sin las gafas. Era una mirada aterradora que parecía perforar directamente a través de mi corazón. ¿Qué clase de vida tenía uno que vivir para obtener una mirada así?

“El nombre es Aikawa Jun.”

¿Aikawa?

Aikawa, Aikawa…

El nombre sonó una campana.

“¿Aikawa-san?”

“Jun está bien.”

Su voz era brusca y maleducada. Parecía un desperdicio, teniendo en cuenta lo hermosa que era, pero a lo mejor se adapta a su personalidad sorprendentemente bien.

“Uh, Jun-san. ¿Nos conocemos de alguna parte? Tengo una especie de mala memoria cuando se trata de conocidos, pero no siento que nos hayamos visto antes.”

“Primera vez.”

“Eso pensé.”

Incluso si sólo nos habíamos conocido una vez, no olvidaría una mujer como esta.

“¿Qué es eso? ¿Eh? ¿Te refieres a que Iria-san nunca te lo dijo?”

“¿Iria-san?” Ese nombre sonó una campana también. “Uh, Iria-san, Iria-san…”

Ah.

Por fin, el circuito en mi cerebro conecto. Cierto. Recuerdo.

“¿Así que, usted es el detective Aikawa-san?”

“Yo soy una contratista independiente, para ser precisos” dijo cínicamente. “Parece que te acordaste.”

“No pensé que eras una mujer.”

“Gracias. Ese es el mejor cumplido que hay.”

Ella me golpeó en el hombro. Era más que un poco sorprendente saber que el Aikawa-san del que había estado pensando durante mucho tiempo que era un hombre era, de hecho, una mujer y una tan hermosa. Pero si pensabas en ello, excepto por los cuidadores como Shinya-san y yo, Iria-san había en su mayoría traído mujeres relativamente jóvenes a la isla. Mirándolo de esa manera, probablemente debería haberme dado cuenta de Aikawa-san era una mujer.

Pero Iria-san se mantuvo usando palabras ambiguas como «héroe».

“Iba a ir todo el camino a tu universidad” dijo con una sonrisa turbia. “Pero luego te vi allí de pie leyendo en esa librería. Fue una infernal coincidencia, así que pensé que te daría un silbido.”

“¿Quieres decir que me estaba buscando?”

“Sí. Pensé que debería ver con mis propios ojos qué clase de imbécil estaba fisgoneando por ahí robando mis trabajos. Gracias a ti, zoquete, nunca tuve mi turno. ¿Cómo vas a compensarme por eso?

Su mirada perforó a través de mí. Era como si ella tuviera un agarre directo en mi corazón. En mi mente, los acontecimientos que se habían producido en esa isla ya estaban acabados, por lo que este desarrollo fue totalmente más allá de mis expectativas.

“Debido a ti me perdí un trabajo. Y eso que me dijeron que iba a ser un caso fácil y seguro.”

“Uh, yo…” En realidad no entendiendo la situación, decidí seguir adelante y pedir disculpas. “Realmente lo siento. Por favor, perdóneme.”

“¡Haha!” Aikawa-san se rio. “No hay razón para pedir disculpas. De hecho, yo debería estar dándote las gracias por hacer las cosas fáciles.”

Bueno, ¿cuál era? Mi inquietud crecía proporcionalmente a mi compostura. ¿En qué situación infernal me había metido? Estaba más allá de mi comprensión. No tenía idea de lo que este personaje Aikawa Jun estaba tratando de hacer.

“Um, ¿dónde nos dirigimos ahora?”

“El cielo. O tal vez el infierno. Lo olvidé.”

“Son totalmente diferentes.”

“Sip, totalmente diferentes. Son completamente opuestos. Así que estamos obligados a terminar en uno de ellos.”

¿De dónde estaba ella sacando estas cosas?

Siguió conduciendo sin un cuidado en el mundo. Puede ser que realmente nos dirigimos hacia el infierno. Parecía bastante plausible. En un giro relativamente inesperado, tal vez mi vida estaba a punto de terminar. Pero entonces creo que el final es siempre inesperado.

“Pues bien, ahora que he visto tu rostro, eso es una cosa para borrar de la lista de tareas pendientes. Eso deja a una más.”

Sin una pizca de reserva, Aikawa-san inclinó esa seductora cara suya junto a la mía. Me estremecí reflexivamente por como era de caprichosa. Yo no estaba muy acostumbrado al contacto cercano con personas aparte de Kunagisa.

“Um, ¿uno más? ¿Qué es?”

“Oh, yo sólo pensé que pondría uno de tus problemas a descansar” dijo Aikawa-san. “Yo soy una contratista independiente. Es mi trabajo el resolver los molestos pequeños problemas de la gente. Yo les presto una mano rescatadora a las personas con problemas que gente como tú nunca podría manejar. Tu zoquete.”

“¿Así que eso es a lo que se refiere por «contratista independiente»?”

Es decir, la medida en que un detective es también alguien que consigue contratos. “Pero, ¿qué problema tengo?”

“En raras ocasiones se me ha conocido por trabajar por caridad. Llámame caprichosa. Va a ser tu recompensa por resolver el último caso tan espléndidamente en mi lugar.”

“¿Recompensa?”

“No estés tan tenso. Puede que no lo parezca, pero estoy bastante llena de bondad.”

Las buenas personas no suelen sacarles el relleno a los demás con sus zapatos en el primer encuentro.

“Ahora bien, aquejumbrado. ¿Vas a tomar mi mano?” dijo, mostrándome la palma de su mano. “¿Qué va a ser? Tu decisión.”

Ella era extraña. Como, loca extraña. Su rareza se encontraba en una liga propia. Si pones ese conjunto de locos excéntricos en nuestra isla desierta favorita como el promedio, la rareza de Aikawa-san estaba fuera de la tabla. Sin embargo, agarre su mano en una rara exhibición de seguridad.

Este bizarro ser humano. ¿Cómo iba a perder la oportunidad de esto?

“Está bien, amigo.”

Ella dio una sonrisa maliciosa.

Tal vez eso fue apresurado de mí, pensé.

“Um, antes de entrar en cualquier cosa, ¿qué es este problema mío que menciona?

“Esa es la única cosa que debes saber mucho mejor que yo. Mucho mejor. ¿No puedes adivinar? He venido a verte. Yo. Así que obviamente es sobre el incidente en la Isla Pluma Cuervo Mojado.”

“¿El incidente?” dije.

“Sip” Aikawa-san dio una pequeña afirmación. “Después de eso, terminé dándole una visita a la isla de todos modos. Yo estaba originalmente planeando hacer unas vacaciones, así que tuve suerte de que el caso ya había sido resuelto. Lo digo de verdad. De todos modos, he hablado con Iria, Hikari, Akari, y Rei. Por cierto, Teruko no dijo ni una palabra. Ella se quedó en silencio como siempre. Incluso yo sólo he oído su voz una vez. Ah, sí, también había una infernal chef y una espeluznante adivina. Ah, yo no quiero pensar en ella. ¿Qué pasaba con esa mujer?”

De repente furiosa, ella golpeo el volante, prácticamente rompiéndolo. Evidentemente algo había ocurrido con Maki-san en la isla. ¿Qué había esa mujer hecho ahora? Sin duda, se podría decir con sólo mirar que esas dos mujeres eran incompatibles.

“Hmph” Aikawa-san se quejó antes de continuar su historia.

“De todos modos, hablé con ellos sobre el incidente. Sin ningún detalle excluido.”

“¿Así que piensa que todavía hay algo mal?” Le dije. “¿Quiero decir, qué piensa usted personalmente, Aikawa-san?”

“Es Jun” dijo en una repentinamente voz baja y sombría. “No me llames por mi apellido. Sólo mis enemigos hacen eso.”

“¿Todavía crees que hay algo mal, Jun-san?” me corregí a mí mismo y pregunté de nuevo.

“Eso está mejor” sonrió. Su estado de ánimo cambia como loco. Yo diría que cambian como el clima, pero ni siquiera el clima de montaña cambia tan a menudo.

“No, no… Yo no soy la que siente descontento, amigo. Eres tú, ¿verdad? Has resuelto el caso. Y lo hiciste muy bien. Lo hiciste tan condenadamente bien que nadie podría incluso plantear una objeción. Pero tú mismo todavía tienes dudas, ¿no? ¿No hay algo faltando en tu trabajo de detective?”

No pude encontrar palabras. Indiferente a esto, ella continuó.

“¿Estoy en lo cierto? Resolviste el caso en tres días. Es sólo natural que alguien con un cerebro como el tuyo aún tendría dudas. Detenme si me equivoco.”

No podía decir nada, y obviamente no era porque ella estaba equivocada. Era porque estaba en lo cierto.

Exactamente.

Yo… Kunagisa y yo habíamos hecho resolver el caso rápidamente una prioridad y empujamos nuestras propias dudas en un rincón oscuro. Ella había presentado una solución que personalmente no aprobábamos.

Aikawa-san sonrió.

“Ese sentimiento de descontento, esas dudas, esas cosas que parecen menos agradables para ti, tu tonto, ¿las tienes identificadas?”

“Uh, bueno…”

“¿Por qué mataría Shinya a Ibuki? ¿Por qué estarían Shinya y Sonoyama trabajando confabulados?” Ella chasqueó la lengua de color rojo oscuro provocativamente. “Eso es, ¿no es así?”

“Sí” Asentí de mala gana. “Pero eso es su problema y, en última instancia, de nadie más, ¿verdad? Tiene que ver con sus motivos, y eso es algo fuera de mi alcance, así que…”

“Eres similar” dijo Aikawa-san. “¿No lo creías así? ¿No Shinya te dijo eso el mismo? Que tú y él son similares. Ahora ¿por qué este hombre tan parecido a ti mato a Ibuki Kanami, la única persona insustituible para él, su versión de esa chica de cabello azul tuya?”

“Probablemente sea sólo un malentendido. Si no lo fuera… Sí, es probable que sea en realidad Akane-san quien es insustituible para Shinya-san.”

“¿Estás satisfecho con eso?” dijo Aikawa-san con sarcasmo. “De ninguna manera, ¿no? No hay manera que estés satisfecho con eso. Entiendo perfectamente tus sentimientos.”

“Está yéndose por las ramas, ¿no es así? Tiene razón, Aikawa-san, no estoy totalmente convencido. Pero…”

“Es Jun. Te dije que no me llames por mi apellido.”

Recibí la mirada de nuevo. Fue aterrador.

“Jun-san. Tienes razón. No estoy totalmente convencido, pero no hay otras posibilidades, así que no hay nada que pueda hacer. Cuándo has borrado todas las imposibles posibilidades, lo restante es la verdad, no importa lo imposible que parezca.”

“Eso es un mito. ¿Así que quieres decir que has estado tomándote ese ridículo motivo acerca de comer los cerebros de la gente en serio?”

Huh. Yo estaba sin palabras. Aikawa-san se rio, deleitándose en mi respuesta.

“Ahora, ahora, ahora, mantente unido. Mantente unido, hombre. ¿De verdad crees que hay un solo idiota en todo el mundo lo suficientemente estúpido para creer que sí comes el cerebro de un genio, te conviertes en un genio? No es algo malo si hay alguien asi. La gente es libre de pensar lo que quiere. Todo el mundo tiene derecho a ser débil mentalmente. No hay nada malo con eso. Tenemos libertad de pensamiento y la libertad de ser estúpido. Pero, ¿alguien dispuesto a utilizar un cadáver como un escalón, alguien que no tiene absolutamente ningún respeto por los humanos, realmente puede estar pensando algo así? ¿Qué piensas, compañero?”

Bueno, de hecho, ese era un buen punto.

“Bueno, ¿y qué? ¿Qué estás diciendo? Siempre he sido confiado en mi capacidad para hablar en torno a temas, pero incluso yo nunca he llegado tan lejos.”

“Eso es porque estás debajo de mí. Yo sé algo que tú no sabes. No es que diga que eres un incompetente o nada.”

“¿Estas llamándote a ti misma competente?”

“Soy una mil oficios. Si no lo hiciera, no puedo hacer este tipo de trabajo” se jactó. Ella era casi aterradoramente narcisista.

“Bueno, entonces, ¿qué piensas de ello, Jun-san? Dices que lo sabes todo, ¿no? Por favor ilumíname.”

“Sí sólo me hubieras pedido eso en primer lugar podríamos haber ido directo al grano” se rio. “Vamos, compañero. Notaste algo antinatural, ¿no? Lo he oído de Hikari. Te has dado cuenta, ¿no? Esa pintura para la que modelaste. ¿Por qué estaba un reloj pintado en él?”

¿El reloj?

Me había olvidado completamente de eso.

“No te olvidaste de eso, ¿verdad?” dijo. “Por favor no me digas que se te olvidó algo tan importante.”

“Por supuesto que no. ¿Cómo podría olvidarlo? Pero pensé que era sólo un error al pintar. Kanami-san se basó en su memoria al hacer la pintura, así que pensé que era sólo un problema de memoria.”

“No es probable. Es esencialmente imposible para alguien que afirma que su memoria y percepción son sinónimos, el poder cometer un error así. Incluso suponiendo que fuera posible, ¿no crees que haya alguna otra razón, compañero?”

“Está bien, Ai… Jun-san. ¿Qué piensas?”

“No sé lo que piensan los demás, pero esto es lo que yo, Aikawa Jun, la contratista más poderosa del mundo, ha concluido: que la imagen no fue pintada por Kanami.”

“Es verdad. Esa es la única posibilidad viable. Quiero decir, piensa al respecto a la inversa. Digamos que Ibuki lo pintó. Si ella lo pintó, sería raro que hubiese un reloj, ¿no? No estabas usando un reloj cuando estuviste sentado delante de ella. Así que es probable que no fuera pintado por ella.”

“¿Por qué?”

“¿Qué quiere decir con por qué? en realidad no la viste pintando, ¿no? Claro, tal vez hay artistas que siempre trabajan solos, pero no creo que Ibuki fuera uno de ellos. Yo propongo que Ibuki no podía haber hecho esa pintura.”

“¿Ella no podía? Kanami-san era una artista. Ella era famosa. Seguramente podía haber pintado eso.”

“Un montón de artistas han utilizado fraudulentos pintores fantasma” ella lo dijo como si fuera obvio. “Aproximadamente cincuenta mil. No resultaría extraño que Ibuki fuera uno de ellos. No sería extraño en absoluto.”

“¿Así que piensas Kanami-san era un fraude?”

“Sólo piensa en ello” dijo Aikawa-san. “¿No eres un pintor?”

“El arte no es mi fuerte.”

“Así que estabas pensando probablemente algo como esta persona es un artista hasta el hueso, ¿no?”

¿Por qué esta mujer sabe lo que la gente estaba pensando con tan maldita precisión? Ella me recordó a Maki-san, pero diciéndole a ella esto la enfurecería, así que me mantuve en silencio.

“No me compares con ese personaje defectuoso.”

Hey vamos.

Ella me miró con una sonrisa. “No te quedes callado. Ese era sólo un truco básico para leer la mente. Es sólo una técnica. Con un poco de entrenamiento, cualquiera puede hacerlo. Pero aparte de eso, ¿por qué creíste que Ibuki era una artista?”

“¿Por qué? Bueno, yo…” el gato se comió mi lengua.

“No es como si alguna vez la viste pintando algo, ¿verdad? Ella sólo te dijo eso, compañero. Oíste lo que ella tenía que decir, y luego, basándose únicamente en eso, asumiste que ella era una artista.”

“Vi sus pinturas también. Al igual que la del cerezo y esas cosas.”

“Pero no la viste pintarlo, ¿lo hiciste? Hombre, para alguien que no confía en nadie, seguro que eres ingenuo. Es como si no confiaras en nadie, pero no dudas de ellos tampoco, o como que sólo retienes todas las conclusiones de indefinidamente. Simplemente tomaste el humeante montón de popo de Ibuki como hecho.”

¿Popo?

¿Dijo popo? ¿Era todo lo que Kanami-san dijo nada más que popo? ¿Cómo iba yo a sa…?

“Oh, ¿cómo se suponía que ibas a saber?” Aikawa-san me golpeo con mi propia línea. “Me pregunto. Realmente me pregunto, amigo.”

“Si hay algo que quieras decir, ve a por ello.”

“Esa no es la forma de pedir un favor.”

“Por favor dime.”

Ella sonrió. Ella era probablemente un poco más infantil de lo que había pensado.

“Al igual que todo el asunto de los vestidos. Cuando modelaste para ella, la viste con su vestido, y ¿lo que dijiste? ¿Dijiste va a pintar así? ¿Verdad?”

Yo no sabía de quien ella había oído eso (y sólo Maki-san era probable que supiera), pero ella estaba en lo cierto.

“Un verdadero artista nunca ensucia su ropa con materiales de pintura” Aikawa-san murmuró. Y luego de repente “¡Como si alguien así realmente existiera!” gritó. “¡Eso es imposible! ¡Incluso sí ella no ensuciaba su ropa, estarían empapados en hedor! No es una cuestión de poder y no poder ¡la gente no hace eso! ¿No te das cuenta de estas cosas, idiota?”

Esto no era un acto, ella realmente parecía loca. Me encogí en toda seriedad. Pensé que estaba a punto de ser golpeado. De repente entendí lo que Hikari-san había querido decir.

Una persona «de temperamento violento» ¿huh?

“De todos modos, cuando trabajas con pintura en lienzo, al menos te pones un delantal. Incluso si apestas en arte, eso es sentido común.”

“Claro. Pero si ese es el caso, entonces…”

Entonces ¿qué significaba eso? ¿Kanami-san me mintió? No, no sólo eso: ¿ella no sabía nada de arte?

No había forma de que un genio artístico como Ibuki Kanami no supiera algo tan simple como eso. ¿Por qué?, debido a que era un hecho que cualquier persona con un poco de experiencia se daría cuenta…

Lo que significaba…

“Sip, no sabía nada” Dijo Aikawa-san con un tono un poco burlón. “Ibuki Kanami, la genio pintor que no podía pintar. Así que, ¿cómo resolverás este enigma?”

“Bueno, eh, ¿estás diciendo que Kanami-san era un fraude, entonces?”

“No. Piensa. Y luego date cuenta, hombre. Ibuki no pintó esa imagen. Pero Ibuki era la pintora. Por lo tanto, por la ley del silogismo, Ibuki era una impostora. Y así, por supuesto, ella no podía pintar.”

“¿Una impostora? Pero, una impostora podría… ¿Por qué? Um, lo siento. Estoy totalmente confundido” Agarré mi cabeza y reflexione. “Así que… en otras palabras… una Kanami-san impostora fue asesinada, y ¿la real no lo fue?”

“Sí. Y la verdadera Sonoyama Akane fue asesinada.”

Bam, otro golpe en el hombro.

Mi cerebro se detuvo por un momento.

“¿Qué dijo ahora? Akane-san?”

“Sí. Sonoyama Akane. Si piensas en ello, eso borra toda la confusión, ¿no es así? ¿Por qué Shinya mato a Ibuki? Sencillo. Él no lo hizo. ¿Por qué Shinya entro en complicidad con Sonoyama? Sencillo. Él no lo hizo. Estaba trabajando con Ibuki. Su irreemplazable Ibuki.”

“¿Así que Kanami-san y Akane-san cambiaron lugares? ¿Cuándo? Espera un segundo. Pasé tres días en la misma isla con esas dos. Puede que tenga una mala memoria, pero definitivamente lo hubiera sabido si hicieron un cambio.”

“Lo que estoy diciendo es que cambiaron antes de eso, antes de que llegaran a la isla. No sé cuánto tiempo las dos estuvieron allí, pero fue antes de eso.”

“Una tiene el pelo rubio y ojos azules. La otra es una morena de apariencia intelectual. ¿Cómo diablos haces que dos personas tan diferentes intercambien lug…?”

“El cabello puede ser teñido. Puedes ponerte lentes de contacto de color. Si realmente quieres parecerte a otra persona, es muy sencillo. Especialmente cuando la persona tiene tales características notables. Piensa en ello.”

“Pero… entonces aquellos pinturas…”

“Es como te he estado diciendo, Sonoyama pintó esos. Ese día, apuesto a que llevabas un reloj cada vez que Sonoyama te veía. Por lo tanto, ella es la que te pintó. Sonoyama… como Ibuki.”

Sonoyama Akane como Ibuki Kanami. Pensando en ello, ¿dónde estaba Akane-san esa mañana? ¿Ella estaba en el taller haciendo esa imagen del cerezo? ¿Significaba eso que Akane-san era la que me pintaba esa noche?

“¿Por qué iba ella…?”

“Para que todo el mundo pensara que ella era Ibuki. Seguramente tú nunca habrías adivinado que el pintor de eso no era ella. Pero tienes que admitirlo, todo el error del reloj no es como ella.”

“Pero… pero, Iria-san… ella es quien las invitó. Ella debería haberse dado cuenta de inmediato, ¿verdad?”

“¿Cómo lo sabes?”

“Quiero decir, ella debe de haber al menos visto fotos de ellas antes.”

“¿Fotos? Hey vamos. Hey vamos, hombre. No me hagas reír aquí, amigo. ¿Estás tratando de hacerme reír a muerte? Dame un respiro. ¿Crees que las caras de las personas tienen el mismo aspecto en la vida real como lo hacen en las fotos? Dejan diferentes impresiones, ¿no es así? Es por eso es que los posters de se busca nunca funcionan. Las fotos no son todavía movimiento, la realidad se mueve. Y el ojo humano escoge cosas arbitrariamente. Así que, naturalmente, cuando se comparan las dos, tu mente favorece la realidad.”

Ella estaba en lo cierto. Kanami-san misma había dicho lo mismo. De repente tuve la bizarra, verdaderamente bizarra sensación que yo era el criminal real y el detective Aikawa-san aquí estaba pisándome los talones.

“¿Por qué… por qué estaban haciendo eso?”

“Era un engaño. Cambiaron lugares como un engaño. Iria y Rei cambiaron de lugar también, ¿verdad? Y ellos dijeron que era una broma cuando les preguntaste por qué, ¿no?”

“Es la misma cosa. Me pregunto quién se daría cuenta. ¿Alguno de estos llamados genios se daría cuenta? ¿Puede esta administradora de salones incluso decir la diferencia entre nosotras? Eso es al menos lo que estaba pensando Sonoyama. Oh, la real, quiero decir. Así que, Shinya, e Ibuki se reunieron e hicieron estos planes. Sonoyama estaba a bordo. Probablemente pensó que sería divertido. Los académicos pueden estar sorprendentemente dispuestos a tomar parte en tales placeres hedonistas. Especialmente aquellos matones del sistema ER3. Sin embargo estoy segura de que sabes eso. Estuviste en medio de ello.”

Esa información de Chii-kun.

Ibuki Kanami y Sonoyama Akane se habían reunido en Chicago. Eran conocidas. No era tan imposible que ellas hayan planeado una cosa así. Kanami-san y Akane-san, que se habían metido en un sinnúmero de discusiones. Pero, ¿significa todo esto que las discusiones eran sólo algo que planearon para que su cambio no fuera obvio?

“¿Y ahora qué?”

Va así. Ibuki y Sonoyama cambiaron lugares. Ibuki se convirtió en Sonoyama, Sonoyama se convirtió en Ibuki. Entonces, a una de ellas la mataron. La restante fue Sonoyama. La Sonoyama intercambiada.

“¿Quién hubiera pensado que la mujer una vez creída muerta y luego acusada de asesinar era en realidad otra persona?”

“¿Quieres decir que era Kanami-san posando como Akane-san?”

Akane-san se había retirado de los Siete Tontos y comenzado una existencia un tanto recluida, pero mantuvo su importancia como un erudito. Shinya-san supuestamente se mantuvo a su lado.

“Teniendo en cuenta el hecho de que nadie los haya reportado con la policía, esto parece bastante plausible” dijo Aikawa-san cínicamente.

“¿Estás diciendo que ese es el motivo? Pero ¿por qué habrían de hacer…?”

“¡Ja!” Aikawa-san se rio mientras entrecerró los ojos hacia mí. “Esa es una pregunta indescriptiblemente irrelevante, mi hombre. Hombre, me refiero a ¿qué dirías si yo te pregunto por qué estás vivo? Por supuesto, un tipo como tú probablemente nunca pensó en ello. ¿Alguna vez has querido ser algo? No ¿alguna vez has querido ser alguien? No, entonces nunca entenderás los sentimientos de Ibuki Kanami, no importa cuántas veces lo explique. Tú, con tu estilo establecido, nunca entenderás a Ibuki Kanami, incluso si viajas a los cuatro rincones de la tierra.”

Era otra máquina virtual, me di cuenta. Un engaño. Hay que engañar al software.

“¿Eso significa que lo comprendes?”

“Nop. Los sentimientos de otras personas están más allá de mi comprensión. Pero en tanto que tengo un cerebro trabajando, puedo al menos imaginarlo. Sí. Todas esas cosas del cuarto sellado era sólo un juego de niños para ellos. Un desvío para mantener a la gente de aprender su verdadero objetivo. Incluso te pusiste tan distraído por todas las habitaciones selladas y decapitaciones en curso que ni siquiera consideraste la posibilidad de que habían cambiado, ¿no?”

Ella estaba en lo cierto.

Pero… pero todo era demasiado repentino.

“Hey, no puedo simplemente creer todo esto desde el principio”.

“Eso es correcto. Sin lugar a duda. Es tan enrevesado que es increíble. Es tan complicado, mis palabras pierden todo significado e incluso tu personalidad no es un problema. Pero una cosa está clara. Esa mujer descarto su ex caparazón conocido como «Ibuki» y logró ser renacida como «Sonoyama». Ella completamente secuestro el pasado de Sonoyama Akane.”

“¿Pero no sería descubierta?”

“Por supuesto que no. Probablemente se había estado preparando para esto desde hace mucho, mucho tiempo. Y ¿no te parece que toda la loca idea de reemplazar a Sonoyama, para convertirse en ella, vino del hecho de que sus rostros eran similares para empezar?”

“Para convertirse en ella… ¿Así que estás diciendo que es por eso que ella la mató? Quiero decir que supongo que si quisieras convertirte en alguien habrías también querer deshacerte de la persona real, pero aun así…”

Para estar seguros, matar a alguien era la manera más rápida de deshacerse de él. Y en efecto, una isla desierta más allá de la influencia de la policía fue el principal lugar para hacerlo.

“Si ese es el caso, entonces debería haber terminado una vez Ibuki-san fue asesinada.”

No había necesidad de hacerse una víctima y hacerse la muerta.

“Contrólate, hombre. Caray, eres inútil. Si ella lo hizo así, sin duda, la pregunta de por qué Ibuki era la única muerta podría llegar en poco tiempo. Es por eso que tenía que hacer que se vea como un asesinato en serie. Para ocultar sus verdaderas intenciones. Ella tuvo que pasar por un lujurioso asesino yendo tras de todos. Ese asunto de comer los cerebros de todos fue probablemente añadido en el último momento; sin duda, después de que ella los escuchó a ustedes chicos hablando de ello. Pero incluso si tenía que matar a alguien, probablemente no podía soportar matar a un inocente, así que ella fingió ser la propia víctima en su lugar. Es tan clara. Sus cálculos eran tan asquerosamente agudos.”

“¿Un asesino realmente pone tanta planificación en ello?”

“No todos los asesinos son maniáticos sedientos de sangre. Al igual que no todos los lobos actúan de la misma manera. Para llegar a su objetivo, es sencillamente natural el tratar de evitar el peligro tanto como sea posible. Cuantos más incidentes causes, más pistas das a todos los demás. ¿Estoy mal?”

Shinya-san me dijo que estaban planeando matar a todo el mundo, y yo le creí. Después de que ya habían matado a dos personas, además de tratar de matar a Yayoi-san y a mí, yo nunca habría soñado que conocían algo de misericordia.

Sin embargo…

“Pero ella trató de matar a Yayoi-san.”

“Ella no la mató” Aikawa-san cortó mis objeciones con un solo golpe. “Has hecho una suposición. Asumiste que «Sonoyama Akane» mataría de nuevo después de que ella fue tan lejos como para reciclar un cadáver para ocultarse a sí misma. Es por eso que pensaste en esa trampa, utilizando a Sashirono como cebo. Pero fuiste ciego. Piensa en ello. Entonces date cuenta, hombre, estuviste bailando en la palma de la mano de Ibuki y Shinya. ¿Por qué Shinya te enseñaría la bolsa de dormir? ¿Por qué Ibuki aplastaría las computadoras en la mañana cuando todo el mundo claramente tenía una coartada?”

“¿Incluso eso?”

¿Todo, hasta eso, había sido pre calculado? ¿Tenían predichas, no, dictadas, nuestras acciones tan lejos? ¿El enfrentamiento en la habitación de Yayoi-san, la angustia de Kunagisa, toda ello, todo ello estaba en la palma de su mano? ¿Todos habíamos sido nada más que piezas de ajedrez sujetos a una estrategia tan astuta que no había espacio para anticipar en el próximo movimiento? Pensando todo el tiempo que éramos tan inteligentes, estábamos realmente sólo siendo controlados.

Y yo con ninguna base para discutir. ¿Pero no era todo esto simplemente un poco demasiado escandaloso?

Esa vaga sensación de desconcierto que sentía ahora había desaparecido sin dejar rastro.

Aikawa-san estiró su mano derecha en frente de mí y, usando esos largos y delgados, dedos blancos, comenzó a rozar mis labios. Aunque no puedo hablar por experiencia, pensé que se sentía muy parecido a ser violado.

“Seguramente se habían enamorado del trabajo de su objetivo. Esas pinturas de Ibuki Kanami, completamente sin errores, sin reloj y todo. Eso sí que es un artista, dijeron probablemente. Jaja, yo apuesto a que originalmente planeaban la intención de usarme en su esquema. No importaba a quien usaran. Todo lo que necesitaban era de alguien para resolver el misterio de las habitaciones selladas. Siempre que alguien descubriera y expusiera la verdad de que Sonoyama Akane no estaba muerta y luego la señalara como el asesino, Ibuki renacería y eso era todo lo que importaba.”

Y ella obtendría una magnífica nueva identidad.

Disfrutando de reconocimiento mundial como una erudito comprensiva.

“Pero, hey, incluso si ella cambió de pasado y logró convertirse en otra persona, todavía tienes que dar cuenta de la capacidad. Akane-san está aún hoy en día continuando su vida como una completa y excepcional erudita, a pesar de que se ha retirado de los Siete Tontos. Si las dos realmente cambiaron lugares…

“Sí, ¿huh?” dijo Aikawa-san. “¿Todavía sigues hablando en esos términos, hombre? ¿Seguro no sabes cuándo rendirte, o si?”

“Basado en tu trabajo de detective, Akane-san es realmente Kanami-san. Pero hasta donde Kunagisa ha investigado, ella sigue siendo una académica activa.”

“¿Qué hay de malo en eso? Ella puede pintar y estudiar las pinturas, obviamente ella es capaz de asesinar, y ella es incluso capaz de cambiar su identidad por completo. ¿Eso esencialmente la hace… un genio?”

“¿Un genio?”

¿Por qué había sido llamada Ibuki-san allí? ¿No era porque ella poseía una habilidad extraordinaria? Ella era la extraña de todos los forasteros. La penúltima. Trascendente de fronteras. Sí, eso era absolutamente…

“¿Cuál era tu definición de genio de nuevo, amigo? ¿Alguien que está muy lejos? lo oí de Iria. Pero estas mal. Es un vector, básicamente… alguien que dedica todo el tiempo en si o toda su vida en una sola dirección, para llegar a un dado máximo potencial. Los seres humanos pueden hacer todo tipo de cosas. Pero sí, en cambio, sólo se centran en una habilidad, pueden perfeccionarlo a un nivel ridículo. Tanto es así, que parecen distantes, como podrías decir.”

Una función prominente.

La dirección de un vector.

Un sesgo restrictivo.

Si pones esa flecha en una sola dirección, en lugar de dispersarlo en todas direcciones…

El poder de concentrar. El síndrome del sabio. Una motivación inagotable.

«Pon-pon» Aikawa-san me golpeó en el hombro.

“Lo hiciste bien, amigo. Pero sigues siendo un aficionado. En términos de béisbol, eres de la liga chica, Sr. lanzador. Y justo cuando pensaste que tu oponente era de la liga chica también, ella resultó ser Domo-kun, en sentido figurado. ¿Lo conoces? Domo-kun. ¿Antes de tu tiempo?” dijo Aikawa-san, poniéndose un poco amable mientras ella tamborileaba alrededor de mis hombros. “Fue sólo un poco prematuro, tratando de terminar la historia antes de que el detective en jefe llegara, mi hombre. Y todavía estabas demasiado verde.”

“Pero… espera un segundo. Kanami-san estaba en una silla de ruedas.”

“Cualquier viejo pelmazo con piernas de trabajo puede sentarse en una silla de ruedas” dijo cínicamente. “Eso es todo lo que hay, de verdad. Incluso Ibuki Kanami dijo que las piernas son sólo un adorno. Claro, ayudaron en patearte por todos lados, pero eso es todo.”

“Tal vez ese es el caso para Akane-san. Todo lo que tenía que hacer era sentarse en una silla de ruedas. Pero Kanami-san nació con malas piernas. Ella no podía saltar por todo el lugar como…”

“Ibuki Kanami quería ser Sonoyama Akane. Ella quería hacerse cargo de las identidades de otros. Yo no estaría sorprendida si esa no era la primera vez que Ibuki Kanami había cambiado de lugar con alguien.”

¿Qué tanto Shinya-san había estado sirviendo a Ibuki-san?

Él había dicho que era un largo tiempo.

¿Desde cuándo, exactamente?

E incluso ahora se quedó al lado de Akane-san.

¿Cuánto tiempo duraría esto? Era una máquina virtual. Simulando la presencia de varias máquinas. Poseyendo ningún estilo. Evitando el concepto mismo.

“Hizo…”

¿Qué hay de Maki-san?

¿Había, la famosa trascendental Himena Maki, conocido incluso este hecho? ¿Estaba simplemente vigilando, o volando, la situación con una sonrisa tonta, a pesar de saber todo?

¿Qué era real? ¿Qué era falso? ¿Quién era real? ¿Quién era falso? “No puedes hacer preguntas” Aikawa-san se rio. Y por fin, sacó el coche a un lado de la carretera. “Mala suerte, chico. Eso es todo lo que puedo decir. Y lo hiciste bien. Lo hiciste muy bien. ¿Qué tal eso como cumplido? Pero tienes que tratar un poco más duro que eso. Si tienes dudas persistentes, no sólo las arranques. Resuelve tus sospechas. Haz lo inconcebible concebible. No escribas tus pensamientos fuera como sólo un montón de mierda. ¿Okay?”

“Okay.”

“Esa es la respuesta A” dijo ella, sacando su lengua de color rojo oscuro.

“Bueno, he terminado de molestarte. Es gracias a chicos como tú que vale la pena vivir. Realmente lo creo. Pero amigo, sólo tienes que reducir la flojera un poco. Los seres humanos pueden hacer mucho más, por lo que sal y hazlo, maldita sea.”

Luego, con una pequeña inclinación de su cabeza:

“Bueno, eso es todo por hoy. Nos vemos. Hey, sal de aquí, chico, me molestas.”

Ella tenía unos infernales nervios lanzándome dentro del coche y luego pateándome fuera. Pero, naturalmente, no podía reunir la energía para contradecirla, así que abrí la puerta y salí.

Mirando alrededor para ver dónde estaba, descubrí que estábamos justo en frente del condominio de Kunagisa. Si alguna vez hubo una calle en este mundo donde no pertenecía Kyoto, era esta elegante residencia, Shirosaki. Incluso el coche rojo sangre de Aikawa-san no parecía fuera de lugar aquí.

“Bueno, ahí lo tienes…” Asentí, mirando hacia el techo del edificio. “Esto realmente es el cielo.”

“O Infierno. Jaja. Aquí es a donde te dirigías todos modos, ¿verdad?”

“¿Cómo lo sabes?”

Aikawa-san señaló la bolsa de la librería en mis manos. Ahora que lo pienso, yo estaba en mi camino para entregar el contenido a Kunagisa. ¿Pero esta señora realmente lo imagino solo de esta bolsa? Ella era como… como uno de esos libros famosos de antaño. Como…

Como un detective.

“Ja” Aikawa-san se rio. “Bueno, si nuestros destinos están unidos, nos encontraremos de nuevo. Sin que haya ninguna duda sobre eso.”

Ella me dio una regular sonrisa no cínica y me palmeó una vez en la cabeza y el hombro.

Luego, señalando al piso superior del condominio:

“Dile hola a Kunagisa por mí también” dijo.

Ahora eso era un poco sospechoso. Si había alguien que felicitar en este caso, Kunagisa merecía al menos la mitad del crédito. Así que ¿por qué había Aikawa-san sólo venido a verme? ¿Estaba ella planeando ver a Kunagisa más tarde?

“¿No vas a verla?” le pregunté. “Viniste todo el camino. Podrías hacerlo también.”

“No, eso está bien. La vi ayer.”

Así que yo era el de segundo plato. La fuerza se dreno fuera de mis hombros.

«Haa» suspiré.

“Jun-san…”

Mi pregunta final.

“Entonces… entonces ¿de qué es lo que vives?”

“Al igual que tienes que preguntar. Soy lo mismo que tú, señor Ii” ella dijo antes de pisar el acelerador, y en otro instante, el coche rojo había desaparecido de la vista. Me quede rígido en ese lugar por un rato, incapaz de pensar. Incapaz de querer pensar.

Suspiro…

“Me siento como si acabara de encontrarme con un bandido callejero.”

Era una analogía bastante exacta. Sentí un vacío, como si el equipaje había sido arrebatado de mi espalda.

¿Qué pasaba con esa señora? ¿Por qué empezó todo sacándome el relleno? ¿Estaba simplemente probando lo que oyó de Teruko-san? ¿O era sólo compensación?

Teniendo en cuenta que había venido hasta aquí para conocerme, era probablemente eso. Compensación… ¿por robar su turno? Tal vez eso era, o tal vez ella estaba simplemente en uno de esos estados de ánimo, o tal vez era tal como lo había afirmado, algún tipo de recompensa.

Pero tal vez nada de eso importaba tampoco. En cualquier caso, ella no parecía una persona muy agradable, e incluso si me equivoco sobre eso, yo no estaba tan mal que fuera incorregible.

Realmente…

Maldita sea.

¿Qué es esto?

Estoy rodeado aquí.

Realmente ahora.

“Realmente ahora, este es sólo un montón de tonterías de mierda.”

Toma a Akagami Iria.

Ella reunió a los genios, les engaño, los estafo, hizo todo lo que ella quería sólo por el bien de su propio disfrute, por el bien del pequeño mundo que lo era todo.

Toma a las hermanas Chiga.

Las tres parecían un poco apagadas, las tres eran lo mismo, a la vez que eran totalmente diferentes. Eran como el Triángulo de Sierpinski, teniendo auto-similitud completa, las piezas individuales y su suma todo uniforme, todas ellas exactamente lo mismo al mismo tiempo de ser completamente diferentes, un abismo infinito dentro de ellas, imposible para cualquiera de ver.

Toma a Himena Maki.

Ella, quien tiene el final de su vida esperando en dos años, ella que sabía la verdad de todas las cosas, la verdad de todo, y sin embargo, lo único que hizo fue holgazanear por ahí, bostezando y ronroneando como un gatito.

Toma a Aikawa Jun.

Una gran mancha de color rojo en el disfraz de un detective con una reputación como la mejor contratista del mundo, se había presentado en la isla y resuelto el caso ya resuelto más allá de cualquier ápice de duda, ni una brizna de hierba sin revisar, todo por ninguna razón, y luego desapareció en una nube de cinismo.

Tome esa mujer cuyo nombre no supe, esa mujer quien no era nadie. Sin duda, era un genio.

“Y luego…”

Y luego.

Y luego, toma a Kunagisa.

Nada realmente me importa.

El mundo sólo hace lo que quiere, e incluso si no lo hacía, eso no tendría nada que ver conmigo, e incluso si tenía algo que ver conmigo, yo no estaría interesado. Yo nunca quise ser alguien, y nunca me he sentido como que había algo que tenía que hacer. A veces me pregunto si eso está bien, pero al final, eso no me importa tampoco.

En algún lugar en el camino acabe de enfriarme. No, eso no es correcto. Probablemente, me sequé. Apático e indiferente. Y es por eso que Kunagisa era humedad para mí.

“Humedad, eh” me dije a mí mismo.

¿Era Shinya-san igual? Sakaki Shinya, pegado a esa mujer como una sombra. Si es así, él y yo en realidad éramos de la misma camada, casi demasiado.

“Ah…”

«Suspiro».

Yo no sabía alrededor de quien giraban nuestros mundos, pero este mundo giraba alrededor del sol. Eso es todo lo que había, realmente, y nunca ascendió a algo más. Y eso va para todo el mundo.

La verdad está siempre fuera de mi alcance.

Y lo que es más, nunca me importó alcanzarla.

Tal vez ese era el problema. Esto fue probablemente lo que Aikawa-san entiende por flojear.

“Eh, eso no importa. Yo no vivo para sentarme aquí y pensar sobre ese tipo de cosas, y no es como que estoy tratando de cambiar el mundo o resolver sus misterios. Cuando me enfrento con un rompecabezas, es simplemente molesto. Si puedo seguir viviendo así mañana, eso va a ser suficiente.”

Acabando de hablar conmigo mismo, por fin empecé a seguir a pie.

Cualquier otro pensamiento no sería más que una molestia. Se lo dejare a la gente que quiera reflexionarlo. Sin ofender a Aikawa-san, pero yo no estaba esperando dar algún tipo de pena para el mundo.

Si alguien me preguntaba por qué estaba con vida, probablemente diría por si acaso. Eso es la única razón que la gente tiene, y eso va para mí, para ti, y para todo el mundo.

Pero…

Pero Kunagisa es diferente.

Ya sabes, si tuvieras que ponerlo en palabras.

“Lo que sea.”

Con el condominio de Kunagisa a la vista, pensé en sólo volver a casa en ese momento. Yo sólo quería deshacerme de las expectativas de esa contratista arrogante, eso es todo. Incluso si no nos reuniéramos hoy, siempre podríamos vernos mañana. Podríamos vernos en cualquier momento que quisiéramos. Nada más que eso.

Hmm, pero…

Mis piernas se detuvieron una vez más. Y yo pensé.

Hace cinco años, antes de reunirme con Kunagisa Tomo, yo no tuve nada. Pero incluso reuniéndonos ahora, incluso ahora que hemos sido capaces de estar juntos para siempre, todavía no tenía nada.

Yo estaba vacío. Era como… una rutina de trabajo sin sentido. Sólo funcionando, simplemente viviendo.

“Ah, maldita sea.”

La sonrisa cínica de la contratista cruzó por mi mente. Recordé las palabras del profeta. Las palabras de las hermanas mentirosas también.

Y entonces, el consejo de esa mujer cuya identidad permanece como un misterio.

“Sólo debes ir.”

Agravándose como esta, mi vida equivale a poco más que simplemente ir con la corriente. Dejándome manipular como sea que la gente guste, como sea que les plazca, como sea que deseen. Como una muñeca. Como una máquina sin corazón. Tan incompetente como pueda parecer.

Y así, este ambiguo y mecánico garabateado de preguntas sin respuesta, acompañado de una certeza tan poco cocida es prácticamente antinatural, llega a su casi predecible final decepcionante, como un vago, cuento de hadas carmesí.

Estoy listo para ponerme de pie al lado de Kunagisa, pensé.

-FIN DEL VOLUMEN 1-