Zaregoto  (NL)

Volumen 1: Ciclo De Decapitación Y La Savant Azul

Capitulo 5: Día 5 (1) La Segunda Decapitación

Parte 1

 

 

Zaregoto Volumen 1 Capitulo 5 Parte 1 Novela Ligera

 

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Muerte a los lobos, y también a los cerdos

***

 

 

Me desperté por un fuerte sonido. Mi cabeza seguía entumida por el sueño, Me levante y abrí la puerta solo para que Hikari-san irrumpiera en la habitación y me agarrara por el cuello.

“¡Bastardo!” repentinamente ella grito.

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No, esta no era Hikari-san, me di cuenta. El día en que Hikari-san diga algo como “¡Bastardo!” es el día en que cambie mi nombre a Samanta. Para decir algo como eso y agarrarme del cuello era, para Hikari-san algo literalmente imposible. Ella carecía de esa capacidad. Incluso Teruko-san tampoco… entonces debe ser… ¿Akari-san?

“Por usted, esto… ¡maldita sea! ¡Pedazo de mierda!”

Incluso para Akari-san, fue un comportamiento bastante extraño. En un frenesí total, se veía como si fuera a empezar a darme puñetazos en cualquier momento. O en realidad, ya me había golpeado en el pecho varias veces a este punto. Estaba demasiado sorprendido por su comportamiento para notar el dolor.

“Estoy tan cansada de que esto pase” Ella estaba jadeando y temblando. “No más de esto… Es demasiado horrible… Es demasiado horrible. ¿Por qué? ¡¿Por qué?!”

“Cálmate, Akari-san” Tome sus hombros y le di un firme sacudida.

“¿Acaso algo… paso?”

Ella me lanzó una mirada. Era una mirada de verdadero resentimiento. Indignación vengativa desde el núcleo de su ser.

Ella me miró con todas sus fuerzas.

¿No había dicho ayer Hikari-san algo como Nosotras hemos sido entrenadas para mantener la compostura? No era probable que Hikari-san recibiera una formación que Akari-san no tenía. Sin embargo, aquí estaba ella, fuera de sí. ¿Qué demonios había sucedido?

Por fin, ella sacudió la cabeza suavemente. “Lo siento mucho. Por favor discúlpeme, mi comportamiento fue muy inadecuado” Ella bajó la cabeza avergonzada. “Ni siquiera es su culpa. Esta cosa terrible no es su culpa…”

“Oye, no te preocupes por eso… Pero, ¿qué pasó exactamente?” Repetí mi pregunta. “Sea lo que sea, por favor dime.”

En lugar de responder directamente, ella se dio la vuelta con su espalda hacia mí. “Por favor, venga conmigo al cuarto de almacenamiento del primer piso” dijo ella, y comenzó a caminar.

Me quedé paralizado. “¿Q-qué? Pero eso es…”

Akari-san y Teruko-san habían supuestamente pasado la noche en tierra firme; ¿cuándo habían regresado? De acuerdo con el reloj que Kunagisa había arreglado para mí, ya eran las diez de la mañana (aunque era difícil de leer, ya que los números estaban al revés). No era propio de mí haberme quedado dormido. Qué vergüenza.

Pero ahora no era el momento para este tipo de pensamientos. Cuando Akari-san había regresado y cuánto tiempo me quedé dormido eran cuestiones demasiado triviales en este punto.

Más importante…

Más importante…

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“Akari-san, ¿que acabas de decir?”

¿El cuarto de almacenamiento del primer piso?

Tuve un mal presentimiento sobre esto. ¿Quién estaba allí?

Un verdadero mal presentimiento.

¿Qué estaba sucediendo en esta isla?

Un realmente mal presentimiento.

Y el presentimiento probablemente era correcto. Había un patrón desarrollándose aquí.

“Hey, despierta. Tomo.”

“¿Hmm? ¿Buen días… atas mi cabello?”

Kunagisa adormilada levantó la cabeza. Ella tenía una extrañamente contenta expresión, como si ella hubiera estado teniendo un buen sueño.

“Parece que ahora no es el momento para eso.”

Se frotó los ojos. “Eso significa que tampoco tengo que lavarme la cara.”

2

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Una puerta que se abre hacia el interior.

En el otro lado, Akane-san yacía boca abajo, con su cuerpo apuntando hacia nosotros. Como resultado, la sección transversal del corte (así como toda la carne y huesos y venas que revelaba) estaba a la vista. Fue un recordatorio grotesco que, al final, los seres humanos no son más que fajos gigantes de materia orgánica.

Sí.

Era otro cuerpo decapitado.

Al igual que el cuerpo de Kanami-san, la cabeza había sido completamente cortada desde la base del cuello.

Estaba vestido con un traje. Uno gris de aspecto caro. Arruinado por manchas de sangre.

Pero aun suponiendo que no lo hubiera estado, tal como fue el caso con el vestido de

Kanami-san el día anterior, no había nadie para llevarlo.

La habitación era austera y árida. Yo había pasado tres días aquí. Akane-san no había durado una noche.

Era una habitación vacía. Las únicas cosas dentro de ella eran una silla de madera junto a la pared, un teléfono de casa colgado en la pared, un futón, algunos libros que Akane-san presumiblemente había traído con ella, y el soporte de la lámpara.

“La puerta estaba cerrada con llave, ¿no?” preguntó Iria-san. “¿Correcto, Hikari?”

“Sí” La voz de Hikari-san temblaba. Miré para ver que su cuerpo también estaba temblando. “Estaba definitivamente cerrada. No hay error.”

“Bueno, ¿qué hay de la ventana, entonces?”

Levanté la vista al sonido de la voz de Iria. En la parte superior de la pared opuesta a la puerta, donde todos nos encontrábamos, había una ventana rectangular. Pero era estrictamente para dejar entrar la luz del sol y la ventilación. En cuanto a permitir a alguien colarse dentro o salir, era demasiado…

“Estaba abierta.”

Tenía una palanca de abrir/cerrar que podría ser operada desde el interior de la habitación. Si pensabas en ello, era lo suficientemente grande para que una sola persona pase a través, si la persona pone un poco de esfuerzo.

Pero aun así…

“Es demasiado alto” dije a nadie en particular.

Irrumpir dentro a través de esa ventana sería como escalar una altura de dos pisos, y escapar hubiera sido aún peor. La imposibilidad de entrar o salir por la ventana era la razón por la que elegimos esta habitación como la celda de Akane-san en el primer lugar.

En otras palabras, la ventana era impenetrable.

Sin embargo.

El único otro puerto de entrada o de salida había sido bloqueado.

Este era un callejón sin salida. Otra habitación sellada. Una segunda decapitación. Dos decapitaciones, dos cuartos sellados.

Kunagisa, que estaba de pie junto a mí, dejó escapar un gemido. Traté de decir algo, pero al final quedé en silencio.

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Tendido en el suelo delante de nosotros estaba el cuerpo sin cabeza, de la mujer que todos habíamos sospechado era el asesino. En una situación como ésta, ¿qué palabras eran adecuadas?

La Cabeza no estaba por ningún lado.

Esto significa que al igual que Kanami-san, muerte accidental y suicidio estaban fuera de la cuestión.

“De todos modos, parece que tenemos algunas cosas para reconsiderar” dijo finalmente Iria-san. “¿Podemos reunirnos todos en el comedor? Hikari, cierra este cuarto.”

Una vez más, Iria-san fue la primera en salir. Rei-san en silencio la siguió de cerca.

“¿Algunas cosas que reconsiderar?” Repetí dolorosamente. De hecho, eso era correcto. Todo nuestro razonamiento y cada especulación que habíamos hecho hasta este momento tendrían que ser cambiados. También parecía como si tuviéramos un montón de nuevos detalles a tener en cuenta.

“Supongo que esto lo convierte en un asesinato en serie, ¿eh?”

Fue muy doloroso decir eso.

Un asesinato en serie.

Yo había encerrado a Akane-san aquí para evitar esa misma cosa. Y ella como resultado se había convertido en la segunda víctima.

Sí, que situación de seguridad real habíamos creado. ¿Qué diablos se me ocurrió que pasaría? ¿Qué esperaba de una persona que mata a los demás y corta sus cabezas? Probablemente el sentido común y el pensamiento estratégico de, ya sabes, un ser humano.

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Me había sentido tan relajado. Totalmente a gusto. Completamente orgulloso de mí mismo.

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Había detenido al asesino de estarse moviendo. Yo estaba tan confiado. Dejándome llevar.

Cabezón.

Las palabras que Akane-san dijo la noche anterior nos hicieron retroceder. Las palabras que me había dejado.

¿Podía esto ser perdonado?

“Es una tontería, en verdad.”

Giré sobre mis talones y salí de la escena del crimen.

En ese momento, vi a Yayoi-san por el rabillo de mi ojo. Se veía terriblemente pálida. Incluso más que ayer. Supongo que esperarías tanto de cualquier persona que había visto dos cadáveres decapitados en dos días. No era como mirar cerdo o pollo.

Sin embargo, había algo, justo en ese momento Yayoi-san pareció darse cuenta de mi mirada y salió a toda velocidad hacia el comedor, como para alejarse de mí.

Me pregunté de qué se trataba cuando Kunagisa tiró de mi brazo.

“Ii-chan, vamos ya. Iria-chan se cansará de esperar. Todo el mundo ya se ha ido; no tiene sentido quedarse.”

Asentí con la cabeza.

Cosas que repensar, y nuevas cosas en que pensar.

Como tal, la mañana del quinto día era una mierda total.

***

 

 

“Eran cerca de las dos de la mañana” dijo Hikari-san. Comedor.

Mesa redonda.

Pero éramos dos personas menos que hace apenas dos días.

La extraordinaria artista Ibuki Kanami y el miembro de los Siete Tontos, Sonoyama Akane.


El dúo peleonero ya no existía. Ellas ya no estaban vivas.

“Recibí una llamada de teléfono en mi habitación… de Sonoyama-san. Ella dijo que había olvidado un libro en su habitación que ella quería que le llevara.”

“¿Y entonces?” Dijo Iria -san. “¿Supongo que hiciste como te han pedido?”

“Sí” Hikari-san asintió. “Era una especie de viejo libro de bolsillo de Bakaichi de Mushanokoji.”

“Eso no es realmente importante. Así que en ese momento, Akane-san estaba todavía viva, ¿no? ¿Y aún tenía la cabeza?”

“Sí, en ese momento ella estaba viva” dijo Hikari-san claramente.

Esto significaba que Akane-san había sido asesinada después de las dos a.m. Yo había asumido que fui la última persona que vio a Akane-san con vida, así que estaba un poco sorprendido. Pero en realidad, no la había visto a ella, ya que sólo habíamos hablado a través de la puerta.

Su cuerpo aparentemente había sido descubierto alrededor de las nueve de la mañana. Por lo general se despertaba e iba a desayunar a una hora determinada todos los días, por lo que Hikari-san se preocupó cuando ninguna llamada provino de la habitación de Akane-san, y se convirtió así en la persona quien descubrió el cuerpo.

Al principio ella había sospechado que Akane-san simplemente se había quedado dormida a causa de estar en un nuevo entorno. Pero la realidad tenía otra cosa en reserva. En cualquier caso, asumiendo que el testimonio de Hikari-san era cierto, el momento del asesinato estaba limitado a una ventana de siete horas y media. El cuerpo no parecía recién muerto en el momento en que fue descubierto, por lo que parecía que el asesinato ocurrió probablemente en el medio de la noche.

“Bueno, entonces” dijo Iria-san, mirando por encima de las personas en la mesa. “Vamos a empezar mirando coartadas como lo hicimos ayer.”

Sonaba como si estuviera jugando una especie de juego. No voy a pretender ser capaz de juzgar lo que había dentro del corazón de Iria-san, pero por lo menos, ella parecía no tener sensación de tristeza o dolor.

No importa a quien le hubiera pasado todo, o qué pasó, no le pasó a ella. Eso es todo lo que había.

“Esta vez, no tengo una coartada” Decidí rodar la pelota ya que nadie estaba hablando. “Hikari-san vino a visitar nuestra habitación alrededor de las diez o las once de la noche anterior. Creo. Pero entonces Kunagisa y yo fuimos a la cama y quedamos dormidos.”

“¿Fueron a la cama juntos?” Iria-san bromeó.

“Sí, claro. Fuimos a la cama es sólo una forma de hablar. Yo dormí en el sofá.”

“Pero si ambos fueron a dormir, no hay manera de confirmar que uno de ustedes no escapo en medio de la noche.”

“Oh, oh, pero me puedes descartar” Kunagisa deslizó su mano horizontalmente a través de su cuello. “El cuarto de almacenamiento está en el primer piso, ¿no? No puedo bajar las escaleras sola.”

“¿Eh?” No sólo Iria-san, pero todos miraban boquiabiertos a Kunagisa sorprendidos. Bueno, todo el mundo a excepción de Maki-san, que tenía una expresión totalmente indiferente, como si dijera: Yo ya lo sabía. Pero siempre se puede contar con ella para ser la excepción.”

“Es por eso que siempre hago que Ii-chan venga conmigo.”

Sí. Yo no había venido a esta isla sólo porque estaba aburrido o interesado. Yo tenía una razón auténtica para estar aquí, y era que Kunagisa me necesitaba.

Kunagisa tenía una amplia gama de peculiaridades únicas y características que hacían la vida cotidiana un riesgo grave para la salud, pero entre estos eran tres los más importantes, y dentro de los tres había una de especial interés: ella no podía manejar la locomoción vertical extrema por su cuenta.

Esa era una regla.

Supongo que es más apropiado llamarlo una inquebrantable, compulsiva e inconsciente regla, que estaba en algún lugar de su mente más que una peculiaridad. Si es pobremente cumplida, sería revelado, y ella iba a gritar y gritar y no podrías poner un dedo sobre ella. Era de la misma manera en el pasado. Me preguntaba si ella podría haber sido curada, pero parecía que no era una condición tan simple.

“¿Es eso cierto?” La mirada de sorpresa se mantuvo en el rostro de Iria-san. “Pero esta es la primera vez que he oído hablar de esto.”

“Bueno, en realidad no es algo que sacarías todo el tiempo. Pero si me has estado observando, habrás notado que no he subido o bajado alguna vez las escaleras sola en todo el tiempo que he estado en esta isla.”

Yo estaba siempre con ella durante las comidas, o cuando estaba encerrada en su habitación.

Kunagisa Tomo.

“Ahora que lo mencionas, siempre consigues que ese chico vaya a tu cuarto y te traiga. Pero no tenemos ninguna manera de probar eso.”

“Tenemos un certificado médico” le dije. “Es un trastorno mental, por así decirlo. Así que creo que podemos confirmar la coartada de Kunagisa por ahora.”

No la mía, sin embargo.

Iria-san parecía estar reflexionando sobre esto por un momento, pero luego cambió su forma de pensar. “Bueno, ¿qué pasa con Himena-san?”

“Yo estaba en mi habitación bebiendo toda la noche” Miró a Shinya-san. “Junto con ese maravilloso caballero de allí.”

“¿Es eso cierto, Sakaki-san?”

“Bueno, no lo sé sobre la parte de caballero, pero por lo demás, sí” Él le dio a Maki-san un pequeño guiño. “Yo sólo quería ir molestarla por un rato, pero terminé quedándome toda la noche bebiendo.”

Eso hace dos noches seguidas en que estuvieron bebiendo. Deben haber tenido una resistencia increíble. O tal vez ese no fue el caso para Shinya-san. Tal vez él no podía soportar estar sobrio después de la pérdida de Kanami-san.

Me podía imaginar lo importante que era para él. Él le había enseñado pintura, e incluso la forma tan bien que incluso logro superarlo. Ella era especial. Su existencia había sido importante para él.

“Ninguno de nosotros estaba particularmente intoxicado, así que creo que podemos dar fe por el otro” dijo Shinya-san. “Sí, era la una de la mañana. No pude llegar a dormir… ya sabes, por lo que pasó, así que fui a la sala y allí estaba ella. Entonces ella me invitó a su habitación, y terminamos quedándonos allí hasta la mañana.”

Sip. Eso es lo que quería decir. Pero de cualquier manera, él estaba en su habitación de hecho; así que los dos tenían coartadas sólidas.

“Yo estuve durmiendo todo el tiempo” Yayoi-san dijo incluso antes de que le preguntaran, como si fuéramos en algún tipo de orden. “No tengo ninguna coartada en absoluto. Pero creo que Hikari-san puede al menos dar fe de que me levanté a las seis de la mañana y que ella me ayudó a prepararme el desayuno.”

Por alguna razón, ella estaba de alguna manera murmurando sus palabras, y ella levantó la vista para ver la reacción de Iria-san. Había algo fuera de ella, y algo en su extraña disposición me estaba molestando. Es difícil de explicar, pero algo llamó mi atención. Solo no sabía lo que era.

“Hmm” dijo Iria-san. “¿Y tú, Hikari?”

“Bueno, yo entregué el libro a Sonoyama-san a las dos de la mañana, luego me fui a la cama. Así que no tengo una coartada hasta el momento en que me desperté esta mañana.”

“Ya veo… Oh, supongo que tengo que dar mi historia también. Yo estaba en mi habitación hablando con Rei toda la noche. Estábamos hablando de qué hacer a partir de ahora y qué decirle a Aikawa-san. ¿No es así, Rei?”

Rei asintió silenciosamente.

“Yo ya había dormido esa tarde, así que no podía conciliar el sueño por la noche. Para el momento en que terminamos de hablar, ya era de mañana, así que pensé que era demasiado tarde para tratar de dormir, así entonces… lo de siempre, y finalmente, el desayuno. Creo que es una coartada sólida, ¿no es así?”

Por alguna razón, Iria-san me miró cuando lo dijo. Era una mirada desafiante. Me encogí de hombros. “Sip, seguro que lo es. Así que ¿Cuándo volvieron Teruko-san y Akari-san?”

“A eso de las nueve” Fue Akari-san, quien había sólo un rato antes saltado sobre mí en el cuarto de Kunagisa. Ella había regresado completamente a la normalidad a este punto, pero no trato de hacer contacto visual conmigo.

“¿Nueve en punto?”

Hablando de eso, ella había dicho algo un poco extraño antes. «Estoy tan cansada de que esto ocurra» o algo por el estilo. Pero, ¿de qué estaba tan casada? No importa cómo lo miraras, había algo extraño en toda su actitud en ese momento.

Algo me dijo que no estaba refiriéndose solo a la muerte de Kanami-san.

“Bueno, supongo que eso significa que Akari y Teruko tienen una coartada, ¿no? Lo que significa…” dijo Iria-san. “Las personas con coartadas son Sakaki-san y Himena-san, seguido por Rei de mí, y Teruko y Akari. Y lo más probable Kunagisa también. Eso es siete.”

Por otro lado teníamos a mí mismo, Sashirono Yayoi, y Chiga Hikari. Los tres no teníamos coartadas. Pero mientras que la cuestión de quién tenía una coartada era importante, había una cosa más importante en este caso.

“¿Um, Hikari-san?”

“¿Sí?” Ella miró en mi dirección.

“Tal vez estoy siendo demasiado trivial aquí, ¿pero me podrías decir sí estaba o no la ventana abierta cuando entregaste el libro al cuarto de almacenamiento a las dos?”

Ella miró hacia el espacio mientras pensó en ello por un momento. “Creo que estaba cerrada” respondió ella.

“Ya veo. ¿Es algo que una persona puede abrir fácilmente?”

“Sí. Se supone que es para la ventilación, por lo que sólo tiene que utilizar la palanca, tiene que accionarlo de esta forma, se abre y se cierra normalmente. Pero eso es sólo desde el interior. Está completamente aislada del exterior.”

“Ya veo.”

Era un desarrollo problemático. Un muy problemático desarrollo. Una ventana de más de tres metros de altura. Sin escaleras, era virtualmente imposible que alguien bajara por ella, y aún más imposible, que alguien saliera.

En otras palabras, teníamos otra misteriosa «Habitación sellada».

“Bueno, dime entonces, ¿cómo es el uso de las llaves? ¿Hay copias de ellas o algo?”

“Tengo la única llave. No hay copias o llaves maestras.”

Ella parecía muy preocupada. Lo cual era muy natural. Las implicaciones de esta conversación eran que ella era la única persona que podría haber posiblemente cometido el asesinato. Con solo mirarlo objetivamente, ese era el caso más probable.

Pero yo no estaba a punto de señalar eso. Yo no quería causar otro accidente al estilo de Akane-san.

“¿Qué tipo de cerradura es?”

“Sólo una normal. Usted gira la llave de esta manera y los pernos cierran… No sé el nombre oficial…”

“¿Y definitivamente cerraste la puerta a las dos?”

“Sí, yo la cerré. Sin lugar a duda. Incluso lo comprobé varias veces” respondió ella con una expresión algo dolorosa. “Sin lugar a duda.”

“Ya veo…”

Ella era una chica honesta.

Hasta el punto de que debe haber hecho la vida más difícil para ella.

Al verla así, parecía claro para mí que ella no era el asesino. Si fuera el asesino, ella no habría tenido la molestia de informar que había sido llamada a la habitación de Akane-san en el medio de la noche. Cualquiera podría haber deducido hasta eso.

Por supuesto, no se puede tirar la posibilidad de que ella había planeado todo esto para engañar a todos. Ese tipo de argumento podría continuar para siempre.

Continué mi interrogatorio.

“¿Y nadie más estaba en su habitación cuando fuiste allí? ¿Qué pasa con la posibilidad de que alguien se ocultaba en la oscuridad o algo así?”

“Bueno, no sentí a nadie más en la habitación, pero…” ella inclinó la cabeza como si no entendiera el punto de mi pregunta “no puedo estar segura. Yo en realidad no fui al interior de la habitación. Le di el libro en la puerta.”

“¿No sentiste miedo?” Yayoi-san preguntó de pronto, su voz débil. Llevaba una expresión de molestia mientras continuaba. “Quiero decir, ¿acaso no pensábamos que Sonoyama-san podría ser el asesino? Y te reuniste con ella a solas, en medio de la noche ¿No estabas asustada?”

“No, en absoluto” Hikari-san respondió tras un momento de vacilación. “Yo no creo que Sonoyama-san fuera el asesino.”

“¿Por qué no?” Por alguna razón, Yayoi-san estaba siendo extrañamente insistente con Hikari-san. “¿Qué te hace estar tan segura?”

“Uh, bueno…” Hikari-san me miró con una expresión de preocupación. Ah, fue a causa de su conversación con Kunagisa ayer. De hecho, después de escuchar esa conversación no había ninguna razón para sospechar de Akane-san en particular.

Pensé en las cosas mientras veía esta conversación desarrollada entre las dos damas. Pero yo no podía precisar nada concluyente. Me había parecido a mí que si algo había sucedido, probablemente ocurrió alrededor de las dos de la mañana, cuando Hikari-san entregó el libro, pero luego, después de escuchar su testimonio, no parece ser el caso.

Entonces, ¿qué hacemos ahora?

¿Cómo continuar?

“No creo que la habitación estuviese completamente sellada. La ventana estaba abierta, después de todo” dijo Iria-san a mí. “En ese sentido no es exactamente lo que definirías como cerrado.”

“Pero es imposible entrar o salir por la ventana.”

“Hay una silla en la habitación, ¿no? ¿No podrías llegar a la ventana si te subieras en la silla?”

“No lo creo. Incluso si se estira y salta al mismo tiempo, no creo que llegue. Shinya-san es la persona más alta aquí, y no creo que ni siquiera él podría llegar.”

“¿Es eso así? Así que la habitación de Ibuki-san fue sellada por un río de pintura, y esta vez se trata de una habitación sellada por un problema de altura…” Iria-san extendió sus brazos con un suspiro de irritación. “Y ambas mujeres fueron decapitadas.”

Sí, había esa cuestión también.

El asesino había cortado las cabezas de Kanami-san, y Akane-san.

Eso era todavía un misterio. No había ninguna razón para sospechar de cuerpos intercambiados, pero ¿qué otra razón había para cortar las cabezas? ¿Podríamos ponerlo que era como un fetiche bizarro?


Es más, el hecho de que el asesino se llevó la cabeza cortada no tiene mucho sentido. Por supuesto, también estaba la posibilidad de que el asesino cortó la cabeza específicamente por el bien de llevarla a alguna parte, ¿pero qué demonios haces con una cabeza humana cercenada?

Y esa pregunta sólo llevó a la otra pregunta: ¿por qué fueron estas mujeres asesinadas en primer lugar? No tenía ni idea. Este caso estaba lleno de cosas que no entendía. Todo era desesperanzador y sin sentido.

Maldición.

¿Desde cuándo me había vuelto tan tonto?

“Hmm… mirando las cosas objetivamente, Hikari es la más sospechosa aquí” Dijo Iria-san repentinamente.

Hikari-san se estremeció por un momento. “¿Eh? Oh, um, yo…”

“Hikari era la que tenía la llave, y una de las tres personas que no tienen coartada. Si la ventana no es una posible entrada o salida, la puerta es la única posibilidad, ¿no? Hay tres personas sin coartadas, pero sólo uno de los tres tiene una llave.”

“Por favor, espere un segundo” me metí en el monólogo de Iria-san. “Eso no está bien. Esa no es una asunción justa.”

“¿Asunción? Creo que el término correcto es razonamiento.”

Hikari-san vio nuestra interacción con una expresión de preocupación. Ella no sabía qué decir.

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“Es como Akane-san dijo ayer. Es una tontería llegar a una conclusión basada en el proceso de eliminación y pensamiento selectivo. No voy a ir tan lejos como para llamarlo tonto, pero sí creo que estamos dejando cosas fuera.”

“Me pregunto. ¿Es eso cierto? Yo no lo creo, personalmente.”

“Fue ese pensamiento que me hizo tener a Akane-san encerrada como la principal sospechosa. Y este es el resultado. Este es el resultado de eso, Iria-san. No hay nada que pueda decir de lo que ya está terminado y hecho, pero me niego a cometer el mismo error otra vez. Entiende, ¿verdad? Es demasiado peligroso para cualquier persona que lo dejen solo nuevamente.”

“Ahora dígame usted” ella dijo con una sonrisa. En otras circunstancias, podría haber sido bonita. “¿No fue su idea tener a Akane-san encerrada, lo siento, aislada en primer lugar?”

“Eso es correcto. No estoy aquí para debatir ese hecho. Fui yo quien sugirió que la encerramos allí, y por lo que ahora es mi deber hacer frente a esta sugerencia. Si tengo que asumir la responsabilidad de lo que sucedió, asegurándome de que no vuelva a ocurrir es cómo voy a tomar esa responsabilidad. En este punto, todavía es demasiado pronto para determinar quién es el asesino. Ni siquiera estamos pensando en las cosas que tenemos que estar pensando.”

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