Sekai Saikou no Ansatsusha (NL)

Volumen 4

Capitulo 16: El Asesino Mata A Un Príncipe

Llegamos a la capital real. Nuestro objetivo era asesinar al segundo príncipe mayor, el príncipe Ricla.

Recopilé información sobre el joven miembro de la realeza mientras formaba mi plan. Mientras lo hacía, llegué a comprender por qué la princesa Farina y el duque Romalung lo consideraban imposible de salvar. Se había convertido en un títere del demonio serpiente Mina y no le importaba en lo más mínimo su país.

Teniendo en cuenta que se le habían acreditado logros no ganados mientras se desempeñaba como títere de la princesa Farina, no fue sorprendente saber que Ricla era un poco tonto. Su elevada posición como segundo príncipe y su brillante reputación lo llevaron a un comportamiento imprudente.

“No trajiste a tus adorables asistentes”, observó Nevan.

“Yo tampoco estaba interesado en traerte, si es posible”, respondí.

Estaba participando en el Festival de la Fundación disfrazado de un joven comerciante llamado Frank Hartman.

Frank Hartman no era una de las identidades que mi padre había preparado, sino una que yo mismo había fabricado. El verdadero hombre era un joven vendedor ambulante sin parientes que había sido devorado por monstruos en el camino, lo que hacía que su nombre fuera ideal para adoptar.

En la Fiesta Fundacional se había instalado un gran número de puestos. Abrí uno bajo mi identidad falsa. Nevan había decidido ayudar a ejecutarlo por alguna razón. Naturalmente, ella también estaba disfrazada.

Estábamos vendiendo crepes. Eran una variedad especial hecha con fécula de patata cocinada en la masa, lo que le daba a las crepas una textura elástica. También les permitió tostarse ligeramente sin desmoronarse y le dio a la masa casi transparente.

El resultado fue hermoso y se sintió genial cuando se pegó a la boca. Cada crepa se rellenó con crema fresca de la más alta calidad y las mejores frutas de temporada.

Esperaba que fuera un gran éxito y, efectivamente, tuvimos una línea constante solo unos momentos después de abrir el negocio.

“Conseguir una línea en la capital real donde todos tienen un paladar refinado no es poca cosa. Resulta que tú también eres un chef de élite. Aun así, ¿no parece que lo estamos haciendo demasiado bien?” preguntó Nevan.

“Vender cualquier cosa por debajo de la tarifa máxima en realidad haría que nos destaquemos más. Un puesto autorizado para operar en la capital real necesita un producto que coincida”, respondí.

Normalmente era mejor tener la menor cantidad de gente posible al asesinar. Cuantos más testigos había, más difíciles se volvían las cosas. Esa era la forma estándar de operar, de todos modos. Para este asesinato, un número más significativo de clientes facilitaría el trabajo sin llamar la atención.

Nevan consideró mi respuesta. “Eso es verdad. ¿Pero no será eso una desventaja para tu propósito principal aquí?”

“Puedo operar bien bajo estas circunstancias. El puesto que está tan ocupado lo convierte en una buena tapadera”.

Nadie sospecharía que el que regentaba un puesto con tantos clientes era el responsable de un asesinato.

Nevan y yo conversábamos en silencio leyéndonos los labios y moviendo apenas nuestras bocas. Además, solo estábamos mirando al otro por el rabillo del ojo. Mirar los labios de alguien sin decir nada habría parecido llamativo.

Esta era una técnica especial, pero Nevan la había dominado después de que le enseñé una vez. Ella era un verdadero monstruo.

Tuve que dejar atrás a Tarte y Dia porque aún no eran lo suficientemente hábiles con los disfraces. Si solo hubiera sido una cuestión de apariencia, habría encontrado una manera de hacerlo funcionar.

Sin embargo, ninguna de las chicas poseía la habilidad suficiente para enmascarar su personalidad. Para realizar otra identidad a la perfección, necesitabas construir esa persona dentro de ti. La respiración, los hábitos, el habla, los gestos, la forma de pensar, la forma en que interactuaba con las personas y más, todo necesitaba ser cambiado y mantenido en un nivel subconsciente.

Cualquier cosa menos significaba que no estabas haciendo nada más que usar un disfraz. No era algo que pudieras aprender en un día. Sin embargo, Nevan ya había perfeccionado el arte. Tiene sentido. Ella sirvió como doble de cuerpo de la princesa Farina, después de todo.

“Tengo muchas ganas de ver cómo lo matas”, gorjeó.

“Te di el documento que describe el plan”, respondí.

“Lo leí, pero todo lo que escribiste fue que vas a hacer que parezca que murió de una enfermedad. Seguro que te gusta mantener tus cartas cerca del chaleco.”

“Solo relájate y observa. Sin embargo, no estoy seguro de que lo entiendas incluso si lo haces.”

Este trabajo se completó en un 90 por ciento en el momento en que aseguré este lugar. Realicé una investigación exhaustiva sobre la ruta que la familia real planeaba tomar durante el desfile, a qué hora pasarían por cada punto, la cantidad de guardias y sus estaciones, los carruajes que se utilizarían y más.

Este es el lugar más accesible para matarlo.

Hubo un punto en la ruta donde el camino se volvió angosto y curvo, lo que significaba que el carruaje del príncipe no tendría más remedio que acercarse bastante a los espectadores.

Nuestro puesto de crepes estaba en ese lugar. El carruaje del príncipe se acercaría a tres metros de él, y eso fue lo suficientemente cerca como para asesinar a Ricla mientras lo hacía parecer como una enfermedad. La Casa Romalung había ayudado a asegurar este lugar.

Los crepes seguían vendiéndose bien.

Una vez que comenzó el desfile, el número de clientes disminuyó ligeramente.

Algunos soldados dieron un paso adelante y cambiaron la dirección de nuestra línea para asegurarse de que la procesión tuviera espacio para pasar por la calle estrecha. Los carruajes con miembros de la familia real comenzaron a pasar uno tras otro.

El príncipe primogénito era excepcionalmente popular. Su destreza militar fue elogiada como divina, y fue un combatiente capaz por derecho propio. Sin embargo, le faltaba sentido de la política.

La siguiente en provocar fuertes vítores de la multitud fue la princesa Farina, la cliente de este asesinato. La gente amaba a la joven por su impresionante belleza y su encantadora sonrisa.

Una vez al mes, cantaba en un concierto benéfico en el salón más grande del Reino de Alvanian, y siempre estaba lleno de gente. Las entradas se agotaron en minutos. Todos los asistentes juraron que tenía la voz de un ángel.

La popularidad de Farina era similar a la de un ídolo del pop, pero eso era una fachada de su verdadera naturaleza como maestra táctica.

Todos los demás príncipes y princesas, excepto Ricla, pasaron sin incidentes. No eran tan populares. La gente no los veía como especiales más allá de haber nacido en la familia real.

“Ahí viene.”

El segundo príncipe ocupaba la retaguardia del desfile. A las dos estrellas más grandes se les habían dado los actos de apertura y cierre, por así decirlo.

En total contraste con el primer príncipe, Ricla fue elogiado por sus muchos logros en política y diplomacia. También era guapo y disfrutaba de la fama a la par de su hermano mayor y la princesa Farina.

La multitud de personas rugió con entusiasmo cuando el Príncipe Ricla apareció a la vista. Una sonrisa alegre estaba en su rostro. Su voz era aguda y enérgica, y se veía tan guapo como todos los retratos que representaban su rostro. Sin embargo, no había vida en sus ojos. Su mirada parecía desenfocada y lenta. Estaba claro para mí que no estaba en su sano juicio.

Lo miré con mis ojos Tuatha Dé y analicé el color y la longitud de onda de su maná.

Los magos siempre se envolvían inconscientemente en poder mágico, incluso cuando no estaban en guardia. Es por eso que si una persona normal intenta apuñalar a un mago con una espada, no podría infligir una herida fatal.

Matar a un mago requería una fuerza considerable. Sin embargo, cualquier ataque con esa potencia de fuego necesaria me expondría de inmediato.

No podía ser asesinado sin potencia de fuego, pero cualquier nivel de potencia de fuego haría detectable que fue asesinado.

Justo ahí.

Empecé un encantamiento. Apenas moví los labios y hablé a un volumen que ni siquiera los clientes que esperaban crepes frente a mí podían escuchar. Este era un nuevo hechizo que Dia y yo habíamos desarrollado.

Era un hechizo no elemental diseñado para eliminar el maná. Al disparar un poder mágico que coincidía con la longitud de onda del objetivo, podías abrir un agujero en su armadura protectora de maná. No infligió ningún daño físico, lo que hizo que el destinatario no supiera que había sido golpeado.

Sin embargo, lanzarlo no fue fácil. Era imposible saber la longitud de onda de una persona a menos que poseyera los ojos de Tuatha Dé, y usar demasiado poder corría el riesgo de perforar la armadura del objetivo en lugar de simplemente borrarla, lo que el objetivo sentiría.

Terminé la recitación justo antes de que el Príncipe Ricla nos alcanzara, lanzando una bala invisible de maná hacia su cuello y abriendo un agujero en su escudo. Luego usé una herramienta de asesinato disfrazada para que pareciera un equipo para mi puesto para disparar una aguja. El equipo era lo suficientemente grande como para que abrir una cabina fuera la única forma de ocultarlo de manera confiable.

El segundo príncipe agarró su cuello, luego se volvió y habló a sus guardias. No podía oírlos por encima de la multitud, así que leí sus labios.

“¿Qué pasa, Su Alteza?”

“Simplemente sentí un pinchazo. No es nada. Sigue moviéndote.”

El príncipe retiró la mano de su cuello. No había una marca. Mi trabajo había sido un éxito.

Ricla pasó como si nada.

“Aquí está su crepe, buen señor”, le dije, pasándole a un cliente su pedido con una sonrisa.

Por lo que todos sabían, solo estaba cocinando crepes. Estaba seguro de que ni una sola persona notó que acababa de matar al segundo príncipe.

***

Una vez finalizada la cabalgata, sonó un pregón proclamando el fin de las Fiestas Fundacionales.

Los puestos comenzaron a cerrarse, mientras los establecimientos de bebidas llamaban con celo a los clientes potenciales.

Nevan y yo rápidamente terminamos de limpiar nuestro stand.

“Uf, estoy cansado. Estoy feliz de que nuestras crepes fueran tan populares”, comentó Nevan mientras se estiraba.

“Sí yo también. Regresemos a la posada”, respondí.

Se vería extraño si dos comerciantes comunes salieran de la ciudad tan tarde en el día, por lo que habíamos asegurado alojamiento con anticipación. Nevan, por supuesto, todavía estaba disfrazado de empleado de mi puesto, y yo permanecería como Frank hasta que partiera de la capital.

“Solo estamos nosotros dos en la posada, y tú estás lejos de casa. Esta es la oportunidad perfecta para que engañes a tu pequeña novia. No diré una palabra”, propuso Nevan.

“No tengo ganas. Mantente fuera de mi habitación” dije secamente.

Sin inmutarse, Nevan sugirió: “He estado pensando. Sería perfectamente natural que dos comerciantes jóvenes y enérgicos celebraran sus ganancias disfrutando de una comida en un buen restaurante”.

“…Sí, tienes razón. Vamos”, acepté.

“Maravilloso. Muéstrame dónde le gusta comer a la chusma.”

Los restaurantes en la capital real eran caros en general. Que Nevan pudiera referirse a ellos como los restaurantes de “la chusma” era precisamente lo que hacía que la gente rica fuera tan aterradora.

***

Cuando estábamos en la Real Academia, la capital era prácticamente el único lugar al que podíamos ir para divertirnos, así que estaba familiarizado con algunos lugares de la ciudad. Elegí uno con habitaciones privadas y buena comida. Quería uno donde pudiéramos estar solos porque pensé que Nevan deseaba hablar.

Después de que llegaron nuestras órdenes, usé un hechizo de viento para evitar que nuestra conversación fuera escuchada. Nevan vio eso y sonrió, evidentemente entendiendo lo que hacía la magia.

“Buen trabajo ahí fuera. Tengo algunas preguntas. ¿Está bien que el príncipe no muriera?” ella preguntó.

“Lo hará con el tiempo, Lady Nevan. En su propia habitación en el castillo.

Eso causará el menor problema”, respondí.

Tenía memorizado el horario de Ricla y había ajustado la dosis de veneno para que muriera después de regresar a sus aposentos.

“Aw, ¿qué es esta congestión de ‘Lady Nevan’? Prefiero cuando hablas casualmente.”

“No necesito actuar como Frank en este momento”.

Estaba aislando el sonido de la habitación usando magia de viento, y estábamos hablando del asesinato. Por lo tanto, yo era Lugh, no Frank.

“¿Exactamente cómo lo mataste?”

“Utilicé una aguja. Tenía solo unos pocos milímetros de largo. Instalé una máquina disfrazada de equipo de cocina en el establo para encenderla. Disparar proyectiles tan pequeños es difícil, así que no tuve más remedio que usar un dispositivo grande. Abrir un puesto era la única manera de traer el artilugio y ocultarlo mientras también estaba dentro del rango de ataque del príncipe”.

Nuestro puesto de crepes realmente había sido la fachada perfecta. “¿Puedes matar a alguien con una aguja tan pequeña?”

“Sí, aunque hubiera sido imposible usar uno normal. La aguja en sí era veneno solidificado. Lo inyecté en una vena de su cuello para que lo llevara a través de su torrente sanguíneo hasta su corazón, donde se derretiría”.

“¿Y qué pasa entonces?”

“Hará que sus músculos se relajen. Después de que su corazón disminuya, su flujo de sangre se detendrá. Sufrirá un paro cardíaco, haciendo que su muerte parezca una enfermedad”.

“¿No descubrirán el veneno?”

“La aguja se derretirá, y todo lo que hace la toxina es relajar los músculos del cuerpo. No quedará nada por encontrar.”

A decir verdad, quedarían rastros en el cuerpo del Príncipe Ricla, pero nada en este mundo podría detectarlos.

“Qué veneno tan interesante. Nunca he oído hablar de algo así.”

“En unas pocas horas, el príncipe se retirará a su habitación, donde está protegido por un artefacto que evita la entrada de intrusos. Luego morirá de un infarto. Aparecerá como nada más que la muerte por enfermedad.”

“Hmm-hmm, qué perfecto. Eso es un resumen de este problema. Haremos un gran uso de este método de matar en nuestro trabajo futuro”, dijo Nevan con una sonrisa cautivadora antes de tomar un sorbo de su alcohol. Eso fue todo lo que hizo, pero de alguna manera, hizo que el gesto pareciera tremendamente atractivo.

“Esa fue una gran comida. ¿Qué tal si regresamos?” Sugerí.

Nevan asintió. “Sí, vamos.” Me ofreció su mano, diciéndome en silencio que la acompañara.

Podría permitirle tanto. Nuestro éxito de hoy se debió a su trabajo preliminar y su presencia en el puesto de crepes. Necesitaba expresar mi gratitud.

Aun así, no podía permitirme ser descuidado. Nevan ya estaba tratando de seducirme presionando su pecho contra el mío. También era obvio que no estaba usando un perfume normal, sino uno diseñado para excitar a los hombres.

Ahora que lo pensaba, todos sus gestos fueron elegidos específicamente para ese propósito. Ella estaba haciendo todo lo que podía para derribarme.

“La noche es joven”, dijo con una risita.

Aparentemente, la verdadera batalla comenzaría una vez que llegáramos a la posada. No podía permitirme perder. Maha y yo teníamos una cita al día siguiente, y llegar con el olor de otra mujer en mí fue una mala idea. Maha trabajó duro para mí y no se lo merecía.