Nishino (NL)

Volumen 8

Capitulo 2: Takeuchi-Kun 2

Ese día, la presidenta fue convocada por Risa-chan a la escuela.

Dijo que realmente quería hablar de algo durante el descanso. El lugar de encuentro designado era un espacio menos popular detrás del edificio de la escuela. Por cierto, un corto paseo desde allí lleva al lugar donde Rose y Takeuchi-kun están juntos.

—Es raro que Risa-chan me llame de nuevo. ¿Qué pasa?

Shimizu llegó al mismo lugar con su uniforme de siempre.

Como presidenta de la clase, suele visitar la escuela en sus días libres. Y cuando la otra persona es una alumna de la misma clase con la que es buena amiga, no se pone más a la defensiva, y su visita es tan natural como un día de la semana.

Risa-chan está de pie a un par de metros de ella. La presidenta acaba de acercarse a su amiga que había visitado antes el mismo lugar. La ubicación de la escuela también ayuda, y Risa-chan sigue con su uniforme escolar al ser un día laborable.

—Lo siento, presidenta. Siento haberte llamado de repente.

—No me importa, ¿y a ti? ¿Quieres hablar conmigo de algo? Puedes decirme lo que quieras.

—…

Normalmente, la presidenta habría estado en su mesa de trabajo en su habitación desde la mañana hasta la noche de hoy. Francisca le ha pedido que haga algún trabajo. La amistad es importante, pero por el momento, está pensando en los exámenes de ingreso que vienen el año siguiente, priorizando sus estudios.

Pero aun así, era el tipo de persona que iría a ver a un amigo de la misma clase si se lo pidieran.

Shimizu sonríe a Risa-chan, que parece disculpada.

Ante su comportamiento, los hombros de Risa-chan temblaron de miedo.

—¿Risa?

—…

Risa-chan es una chica guapa que se caracteriza por su energía. Su vivaz personalidad une a las chicas de la clase y también funciona como un elemento de ánimo. Al verla encorvada, la presidenta se preguntó.

¿Podría ser un asunto serio de consulta?

Con esto en mente, la presidenta ha venido aquí para cambiar su actitud.

Recientemente, han ocurrido una serie de sucesos impactantes, y Shimizu se ha visto arrastrada mentalmente con frecuencia. Se siente cada vez menos segura de sí misma, por lo que piensa sinceramente que debería recobrar la compostura para que sus estudios no se vean afectados.

Al mismo tiempo, la imagen que se le vino de repente a la cabeza fue la de alguien que siempre va a su aire.

—Presidenta, esto que voy a decir..

—U-Uhm. Di lo que quieras. Te escucharé.

—.. ¿De verdad?

—¿En serio?

—..

La presidenta se emociona al ver la vacilación de Risa-chan, que está fuera de su carácter.

Su expresión se tensa ante las palabras que siguen.

Varias preguntas siguen apareciendo y desapareciendo en el fondo de su cerebro. Se preguntó si algo salió mal en el encuentro de ayer. O tal vez las otras chicas se están animando de nuevo con respecto a Matsuura-san. O algo así, no hay escasez de cosas por las que preocuparse estos días en la clase 2A.

Mientras tanto, Risa-chan vuelve la cara hacia abajo para mirar sus propios pies. Sus flecos oscurecen su expresión. Sus puños están apretados con fuerza a los lados de su falda, y se agitan y tiemblan ligeramente.

La ansiedad de la presidenta va en aumento.

Me gustaría que se diera prisa en decírmelo. Es lo que realmente quiere.

Entonces, quizás el deseo de Shimizu fue respondido, y Risa-chan volvió a levantar la vista.

—¡Presidenta, sa-sabes qué!

—Sí.

Risa-chan, que había recuperado el impulso, dijo en voz alta.

—¡Me gusta la presidenta! Por favor, sal conmigo.

En la escuela en vacaciones, la voz de Risa-chan resonó con fuerza en el fondo de aquel edificio escolar.

Si hubiera sido un día de semana, un tercero podría haberlo escuchado. Pero hoy, la escuela está cerrada. Nadie puede escucharlo. No es sorprendente que Takeuchi-kun lo hubiera escuchado, pero fue estrangulado por Rose al mismo tiempo, y su vida estaba en el viento. Pero no es el punto..

—¡Como mujer, sí, me gusta la presidenta! Lo digo en serio.

—…

La cara de Risa-chan se pone roja y grita.

Me han dicho algo que me va a hacer perder los estudios de nuevo, pensó Shimizu

Al mismo tiempo que Takeuchi-kun está medio muerto a manos de Rose y la presidenta de la clase recibe una confesión de amor de Risa-chan, Nishino deja la casa de Rose para ir a la casa compartida a la que se mudo. Vuelve a casa decidido a limpiar la casa mientras está libre.

Allí encontró a sus compañeros de piso en la sala.

La chica gyaru y Yukki..

Estaban limpiando lo vandalizado.

Debieron comprarlo en una tienda cercana. Un flamante trapo en la mano, estaban fregando el sofá. Parecían estar limpiando un desastre que alguna loli rubia había hecho. La orina de Rose se había secado y pegado a ella después de una noche.

—¿Volvieron a casa ambos?

—O-Oh, ¿Nishino?

—¡Buenos días, Nishi! Ah..

Inmediatamente después de llamarlo Nishi, Yamanobe se tapó la boca con una mirada que decía “¡Oh no!.” Aparentemente, recordó el incidente de ayer. Al ver esto, Nishino le devolvió las palabras con una sonrisa irónica.

—Está bien. Esa mujer no está con nosotros.

—¿E-En verdad? Lo siento.

—No, no me importa cómo me llames.

Nishino se alegraba de que le llamaran Nishi si era posible.

Es un poco adolescente ser llamado por un apodo por el sexo opuesto, o algo así.

—Me enteré por Yamanobe de que Nishino se encargó de todo. Para ser honesto, fue una historia bastante loca y todavía no puedo creerlo, pero el hecho de que ambos hayamos llegado a casa sanos y salvos significa que debe ser cierto.

Yukki soltó el trapo en el sofá y se dirigió a Nishino.

La chica gyaru le siguió por detrás.

—No, sólo estaba allí. No hace falta que me des las gracias.

—Pero, gracias.. Eres un poco más yanqui de lo que pareces, sabes.

—Bueno, quién sabe..

No sé cómo se lo dijo la chica gyaru. Pero por el momento, el futsumen mantuvo su cinismo.

Pensó que sería problemático si le contaba lo que había pasado.

Yukki se rió de esto y dijo las siguientes palabras.

—Y siento haberte metido en problemas con nosotros.

La expresión de su rostro mientras habla es de calma.

Se inclinó profundamente ante Nishino.

A su lado, Yamanobe se inclina de la misma manera.

—No es mucho problema, tampoco te preocupes por eso.

—Si no me hubieras salvado de eso, creo que esta chica y yo no habríamos tenido una buena forma de morir. Así es como conseguimos volver a casa de una pieza. No puedo agradecerte lo suficiente. Muchas gracias.

—¡Gracias, Nishi!

—..

Fue Rose quien realmente hizo el movimiento, así que es un sentimiento muy mezclado.

Todavía no se ha aclarado el incidente en el que la descuartizó porque tomó una decisión precipitada. El día de hoy ha pasado, pero está seguro de que la otra parte no está convencida, es su juicio. Y cuando hasta la vida de su mascota se salvó, es una posición muy complicada en este momento.

Por lo menos, no puede ser un intercambio ligero, como lo ha sido en el pasado.

—Vivimos en la misma casa. Si mis compañeros de piso tienen problemas, al menos les echaré una mano.

—.. Nishino, sobre eso.

—¿Qué pasa?

Yukki dijo, su voz bajando de lo que había sido antes.

—Hemos decidido dejar esta casa.

—..

A su lado, Yamanobe también le mira con una expresión misteriosa en su rostro.

Aparentemente, no parece estar bromeando, es el juicio del futsumen. Esta no es una situación en la que él sugeriría mudarse como una broma, pero el futsumen, que ha pasado toda su vida bromeando, no tiene tiempo para considerar ese tipo de cosas.

—Si quieren cuidar de mí, eso es innecesario.

Cada vez más cínico en el campo.

Sin inmutarse, Yukki continuó.

—Aunque lo hiciera, podría causar problemas en el barrio, ¿no? Además, no tengo las agallas para seguir viviendo en la misma casa si creo que me van a atacar de nuevo. También quiero cuidar de Yamanobe.

Yanagida, que estaba preocupado por Nishino, dijo lo que pensaba honestamente.

Es el verdadero sentimiento de un hombre que no quería decirlo aunque pudiera.

—Ya veo..

En cambio, el futsumen respondió de manera pomposa.

Todavía le faltan habilidades de comunicación.

Si hubiera sido Takeuchi-kun, lo habría mandado un poco mejor redactado.

—Vale.

—Lo siento. Te acabas de mudar aquí.

—No, no te preocupes. Cada uno tiene sus razones.

Yanagida dijo con una expresión de disculpa sincera.

Entonces Nishino se dirige a ella y dice.

—Estoy aquí. Si alguna vez necesitan ayuda, pueden contar conmigo.

El futsumen, que sintió una sensación de separación de los dos, fue directamente a la línea cínica.

Esta sigue siendo la línea decisiva en la atmósfera.

A pesar de su vacilación al verlo, el maduro Yukki respondió con un asentimiento directo.

—A-Aah, sí, gracias.

—Nishi es tan pretencioso, ¿no? Es muy divertido.

—.. ¿De verdad?

—¡Sí!

Durante algún tiempo después, el futsumen limpió el desorden de su casa, mientras charlaba con ellos de otras cosas. Yamanobe y Yanagida rechazaron su oferta de ayuda porque era culpa suya, pero Nishino no la aceptó.

El último trabajo conjunto con los compañeros, no se lo iba a perder, así que se unió sin falta.

Para cuando todas las zonas interiores, incluida su propia habitación, estaban despejadas, el sol del oeste brillaba a través de las ventanas. Finalmente, compartieron una comida preparada por Yamanobe en el comedor. Y al caer la noche, la chica gyaru y Yukki hicieron las maletas y se marcharon.

—…

Se fueron con sus maletas de mano a cuestas.

Los vió al final de la calle, y se siente un poco triste.

A partir de hoy, la casa se sentirá vacía sin ellos..

—.. Hora volver.

No murmura a nadie y se vuelve sobre sus talones hacia su casa.

Entonces, al reanudar la marcha, vio un coche en su campo de visión. Un coche que venía en dirección contraria a la que había caminado. Un coupé extranjero de aspecto caro con matrícula azul en lugar de la blanca que debería tener.

El coche se acercó para bloquear el paso de Nishino y se detuvo frente a su casa.

Francisca se asomó a la ventana.

—¿Ara? Qué casualidad verte aquí.

—.. ¿Eres tú?

El ceño fruncido del futsumen que se detuvo frente al coche.

Ella, en cambio, sonríe mientras le habla.

—Hoy no estoy de buen humor. Lárgate de aquí.

—Después de todo lo que he hecho por ti, no es una buena manera de decirlo.

—… ¿Qué?

En respuesta al comentario casual de Francisca, las cejas del futsumen tiemblan. Por lo que a él respecta, son gruesas y nunca se han depilado ni afeitado. Todos en la clase piensan que deberían depilarse o afeitarse un poco, pero nadie ofrece ningún consejo.

Al parecer se enfadarían si lo hicieran.

—Conseguí que el hospital aceptara a heridos que no tenían tarjeta del seguro, organicé su traslado a un nuevo lugar e incluso arreglé con la policía. Si le preguntaras a tu amigo, ¿cuánto costaría? Es más probable que me llegue de forma indirecta.

Aparentemente, los desalojos de Yamanobe y Yukki fueron facilitados por ella.

—¿Estás convencido?

—Por supuesto que no. No es normal seguir viviendo en una casa que ha sido vandalizada.

—…

—Bueno, dicho esto, la mayoría de las personas involucradas parecen haber sido eliminadas por ti, así que creo que es poco probable que ocurra algo similar. Aah, y también tuve que hacer un movimiento allí en su lugar. Dado esto, me gustaría al menos un agradecimiento.

—… Ya veo

—Por lo que he oído, Rose-chan tuvo un papel importante esta vez, ¿no?

—Sí, gracias por la ayuda.

—Entonces también podrías ser un poco más amable conmigo.

Las palabras de Francisca eran plausibles.

En este caso, Nishino está siendo constantemente atendido por las dos rubias. Sin embargo, todavía estaba preocupado por algo. Gracias a esto, fue incapaz de expresar sus disculpas honestamente a la persona que tenía delante.

—Eso es una farsa, junto con el fuego.

—¿No me digas que estás hablando de tu apartamento?

—¿No?

—Por supuesto que no, me gustaría que no dijeras algo tan estúpido.

—El momento es demasiado bueno para eso.

—Estamos de acuerdo en que el momento era bueno. También teníamos previsto organizar un hogar temporal para ti cuando perdieras tu lugar de residencia. Y entonces decides mudarte el mismo día, lo que es un verdadero problema.

—…

—En lo que a mí respecta, no me importa dónde vivas. Es más conveniente vivir en un apartamento viejo como ese, donde es más fácil captar el sonido. Rose-chan es muy particular, pero no puedo ocuparme tanto de ella.

—… Ya veo.

—Si todavía estás preocupado, puedes comprobar la fecha y la hora del incendio con el servicio de bomberos. Ella estaba contigo al mismo tiempo. Sé que sospechas mucho, pero todavía soy su supervisora, ¿verdad?

—…

Ni siquiera había confirmado la fecha y la hora del incendio. Si se le dice tanto, es difícil dudar más. En otras palabras, este movimiento fue todo una coincidencia. La duda en él se atrofió y desapareció.

Se quedó en silencio.

El hecho de haber golpeado tan fuerte a Rose me está afectando extraordinariamente en el pecho.

—Por cierto, hay un chico llamado Takeuchi-kun en tu clase, ¿verdad?

—… ¿Qué le pasa a Takeuchi-kun?

—¿Me pregunto si se lleva bien con [Normal]?

—…

Cuando escuchó las palabras de Francisca, las cejas de Nishino volvieron a moverse y reaccionó. Cuando el nombre de su compañero de clase salió de su boca junto con la palabra [Normal], el futsumen no se quedó tranquilo.

—Si le pasa algo a Takeuchi-kun, aunque sean vosotros, no tendré piedad.

—Ara, eso es un problema..

—¿Qué estás haciendo?

—¿Nada? Sólo estaba comprobando. No importa.

—…

Una expresión de dificultad aparece en su rostro y Nishino mira a la otra persona.

—Eso es todo lo que voy a hablar. Entonces te dejo con ello.

—Aah.

Asintió de mala gana a su saludo.

En cuanto Francisca encendió el coche, el motor rugió. Normalmente, se habría implicado un poco más, pero hoy estaba asertiva. El coche se puso en marcha y desapareció por la calle, pasando al lado del futsumen mientras lo hacía.

—…

Nishino lo observó atentamente hasta que la carrocería del vehículo dobló la esquina y se perdió de vista.

***

Esa misma noche, Takeuchi-kun estaba en la sala de su casa, devanándose los sesos sobre esto y aquello.

Delante de su mesa de estudio hay una jaula de plástico transparente comprada en una tienda de animales local. En la jaula hay varias ratas de almez, que también se vendieron en la misma tienda como cebo vivo, y se mueven con impaciencia.

Al tomar una de ellas en la mano, Takeuchi-kun-san babeó un gotero de saliva recogida de su propia boca.

—ts..

Tan pronto como cayó sobre los pelos de la rata, empezó a disolver la zona que tocaba. Las puntas de los pelos se desmoronaron con un sonido sibilante. Finalmente, empezó a erosionar más allá de la epidermis, disolviendo incluso la carne y el músculo.

La rata comienza a arremeter violentamente mientras comienza a disolverse bajo la piel.

El eco de los masticados y los chillidos se extiende por la habitación.

Agarrándola para no perderla, Takeuchi-kun observó a la rata. El movimiento fue intenso durante dos o tres minutos. Finalmente, la reacción se ralentizó y en cinco minutos, la rata dejó de moverse.

El abdomen arde por estar empapado de saliva.

Es como si se hubiera expuesto a un ácido fuerte.

Sin embargo, las quemaduras parciales no son suficientes para ser mortales.

Naturalmente, también hay poca pérdida de sangre.

Sin embargo, la rata murió.

—…

Esta era ya la tercera.

Takeuchi-kun metió la rata muerta en la bolsa de plástico que había preparado a sus pies y se dejó caer sobre su escritorio. En los dos últimos experimentos, así como en esta ocasión, la rata había sido quemada por la saliva de Takeuchi-kun, y había muerto tal cual.

La palabra veneno, que Rose había mencionado, le vino a la mente. Sintió que se trataba, en efecto, de una reacción similar mientras miraba el cadáver de la rata. Pero cuando fue segregado por su propia boca, no pudo evitar sentirse preocupado.

—.. De verdad, no quiero hacer este tipo de cosas.

No murmura a nadie.

Era un hombre abrumadoramente guapo.

Incluso de forma gratuita, su relación con Rose se ha convertido en un problema. Su presencia en la cúspide de la casta del campus es algo que ni siquiera Takeuchi-kun puede ignorar. A partir de mañana, la idea de comunicarse en el campus le da al guapo un dolor de cabeza.

—…

Después de un momento de puchero, volvió a levantar la cabeza y se volvió hacia su escritorio.

Parece que ha decidido dar prioridad a la investigación de su propio cuerpo. Si esto sigue así, su familia, que duerme y se despierta en la misma casa, también podría verse perjudicada. Estos miedos le estaban impulsando. Inténtalo durante una semana y si no funciona, pide ayuda a tus padres, ese es el plan.

—… OK

Ese día, Takeuchi-kun tuvo que pasar toda la noche experimentando.

Recogió sus propios fluidos corporales, empezando por la saliva, e incluyendo las lágrimas, el sudor, la sangre y el semen, y luego hizo que las ratas los tocaran para ver cómo reaccionaban. Estas actividades a espaldas de la familia eran a la vez vergonzosas y horrorosas, y estaban minando su salud mental como nunca antes.

Como resultado, todos los fluidos corporales de Takeuchi-kun, sin excepción, quemaron la piel de los ratones en diversos grados. Algunas cosas se extinguieron. El experimento terminó finalmente con la pérdida de todos los ratones que habían sido comprados. Un hombre guapo que comprendió que no podía sudar en el club por el momento.

Y ya casi era hora de que el cielo se iluminara.

Llegó a una conclusión.

—Esto significa que ni siquiera puedo follar con una mujer…

Takeuchi-kun estaba desesperado por haber perdido la posibilidad de tener una compañía heterosexual.

***

Esa noche, Rose recibió una visita en su casa.

El dueño de la casa, mientras levanta las cejas al ver la cara de la otra parte, le invita honestamente a pasar a la sala. El invitado se acerca y se acomoda en el sofá por voluntad propia.

—Entonces, ¿cómo te fue?

—Nueve de diez, no lo sabe.

—Ya veo..

Dos rubias sentadas en el sofá de la sala, frente a frente e intercambiando palabras. La primera en hacer una pregunta es una chica encantadora con un cuerpo pequeño de loli.

La invitada que recibió Rose fue Francisca.

—Es toda una hazaña que [Normal] no lo haya notado.

—Sí, claro.

—¿Qué piensas, Rose-chan?

—Debería matarlo inmediatamente.

—Ara bueno, eres tan radical.

—…

Todavía le guarda rencor a Takeuchi-kun por el incidente con Nishino.

Francisca, en cambio, parece estar de buen humor.

—En cuanto a mí, me gustaría asegurarlo.

—¿No puedes pensar que la otra parte está tras él?

—Por supuesto que vamos a investigar eso de nuevo. Cuando lo investigamos antes, no encontramos nada. Recuerdo que fue muy fácil porque sus padres son médicos con fuertes raíces locales.

—… Sí.

—Por favor, no lo mates por error, ¿vale? Rose-chan.

—No puedo estar segura.

—Pero él no sabe nada de esto, ¿verdad? Si descubre que lo hiciste, no podrás pedirle ayuda, ¿verdad? Si no tienes cuidado, podrías acabar siendo el objetivo de [Normal]…

—…

Habiendo ganado la Nishino y limpiado su nombre de zorra, Rose ha dado por fin un paso adelante. Está deseando ver a su novio en la escuela mañana. Si pudiera, realmente quiere cerrar la distancia entre ellos de una vez.

Pero aun así, un sentimiento de odio hacia Takeuchi-kun todavía se arremolina en su pecho.

Lo hubiera matado, y como resultado, ni siquiera le importaría si Nishino la odiara. El hecho es que fue impulsiva justo el otro día. Si Takeuchi-kun no se hubiera convertido en veneno en ese momento, ya habría sido perseguida por Nishino.

Si eso fue bueno o malo, no puede decidirlo.

—Eso es todo lo que puedo decirte por el momento.

—Gracias por tu ayuda. Si has terminado de hablar, vete.

—Por cierto, hace tiempo que me han dicho que vives en un lugar bonito, pero no me di cuenta de lo lúgubre que era. ¿Te importa que me quede aquí esta noche? Vives sola, ¿no? Tienes al menos una de las habitaciones de invitados disponible, ¿no?

—Lárgate de aquí.

—Podrías al menos pensarlo.

Era casi de día y Francisca estaba cansada de volver al hotel. Estaba claramente dispuesta a abrir una lata de cerveza e irse directamente a dormir. Es una persona muy ocupada que no ha vuelto a su casa al otro lado del mar desde hace unos seis meses.

—¿Es esa la palabra de alguien que ha dado mis datos personales a un desconocido no relacionado?

—¿De qué estás hablando?

—A la mujer perturbada que anda cerca de él.

—Aah, esa chica.

La mente de Francisca mostró la imagen de Shimizu cuando Rose la señaló.

Ella fue la que estuvo en contacto telefónico con ella anteayer.

—No es irrelevante, ¿sabes? La tengo trabajando para mí.

—Tus chistes siguen siendo aburridos. ¿Qué puede hacer una niña así?

—No estoy bromeando. Gracias a ella, he resuelto uno de los trabajos que tenía. Me preguntaba cómo hacer eso, ya que no es un trabajo duro. Llevas mucho tiempo haciendo esto, ¿por qué no haces algunos trabajos más?

—…

Todo fue una coincidencia, pero era la oportunidad perfecta para poner a Rose en su lugar, y Francisca estaba más que feliz de hacerlo. No le hizo gracia esto a la rubia loli.

—Entonces tendrás que trabajar con esa chica a partir de ahora.

—También me preocupa el informe que me diste ayer.

—… ¿Ayer?

Rose recuerda el contenido del correo electrónico que se le envió anoche.

La frase relevante fue la que mencionó en su informe.

—Dijiste que había incapacitado a dos varones adultos con las manos inmovilizadas.

—¿He mencionado eso?

—Ser padre soltero es también algo conveniente para algunas cosas.

—…

Sin saberlo, el futuro de la presidenta estaba en duda.