Nishino (NL)

Volumen 8

Capitulo 12: Experiencia Laboral 6

La historia fue más rápida después de que Francisca empezara a hacerse cargo de la escena.

El hombre, tras abandonar su idea, arrojó la hoja en su mano y se rindió. Pareció abandonar su resistencia cuando se dio cuenta de que era imposible ocultar las pruebas y escapar del hospital. Esto liberó finalmente a la presidenta del calor de las nalgas del sexo opuesto que había sentido en su abdomen.

Naturalmente, la policía habría acudido al lugar de los hechos. Pero cuando la tia cascarrabias llamó a la nada, aparecieron un par de hombres de aspecto fuerte y con trajes negros y se llevaron al hombre. Los acontecimientos en el lugar de los hechos no causaron ningún revuelo. La policía ni siquiera tuvo que ser llamada al lugar de los hechos.

Al mismo tiempo, el hombre confesó la verdad detrás de la conmoción por un error médico en el hospital. Según él, había manipulado el equipo médico de un paciente. Y la prueba era el paquete de plástico que la presidenta recogió y el cuentagotas que había en él.

—Nunca pensé que [Normal] se me adelantaría, pero tú.

—Lo-Lo siento…

La presidenta rehuyó e inclinó la cabeza en respuesta a las palabras de Francisca.

El lugar sigue siendo el mismo, el hueco de la escalera antes de la azotea en el último piso de la escalera de incendios. En el mismo lugar, la gente está ahora cómoda después de la salida del hombre. La presidenta, que había estado tumbada en el suelo hace unos momentos, está ahora de pie y se gira para mirar a todo el mundo.

—Rose-chan, ¿tu amigo no parecía estar involucrado?

—¿No es tu trabajo averiguarlo? Eres una vaga.

—Solamente es hoy, después de todo.

—Parece que se mueve, sin embargo, ¿no?

—Me gustaría que no hicieras esto con [Normal].

Inmediatamente después de despedir al hombre, Rose y Francisca comenzaron a intercambiar palabras. Comprendieron que Takeuchi-kun no estaba involucrado en esta conmoción. Al mismo tiempo, surgió el tema de la existencia de Nishino, que se había movido antes que ellas.

Escuchó este intercambio y, naturalmente, levantó la voz.

—No, este es el trabajo de Marquis.

—Mira esto. ¿El tipo es un informante de la calle?

—No se me dan bien estos pequeños trabajos. Y no hay información para todos.

—Siempre pones las mismas excusas.

—He tomado medidas en previsión de eso. No es posible ahora mismo, pero debería ser un poco más fácil dentro de un tiempo. Mientras tanto, podría ser un trabajo duro para Rose-chan.

—Por cierto, Francisca, ¿qué quieres decir con ‘tu amigo’?

Nishino escucha la narración casual pronunciada por Francisca y levanta la voz en forma de pregunta. Todavía no es consciente de la existencia y posición de Takeuchi-kun. No espera que sus compañeros sean tan conscientes de sus diferentes habilidades como él.

—¿Ara? Tal vez se pregunte a qué nos dedicamos.

—…

La serie de conversaciones del dúo de rubias incluyó una confirmación a Nishino. Esto les hizo entender que el futsumen no estaba informado sobre el veneno de Takeuchi-kun. Desde el punto de vista de Francisca, esto fue un golpe de tripa interior.

El hecho de que tenga una extraordinaria confianza en Takeuchi-kun, asegurarlo significaba mucho para ella. Si era capaz de usarlo bien, podría explotar a Nishino más fácilmente.

—Estoy hablando de aquí. No puedo decirte más que eso.

—No estarás pensando en algo extraño otra vez, ¿verdad?

—Al menos no estoy pensando en enemistarme contigo.

—… Esa palabra también es dudosa.

El futsumen murmura abominablemente y lo escupe.

Comprendió que si la persona que tenía delante no podía decírselo, no lo diría ni aunque le apuntara con una pistola. Por lo que su conversación termina ahí. Mirando a la sonriente Francisca, el futsumen desvía la mirada a otra parte.

Mientras tanto, la atención de la cascarrabias se dirige a la presidenta de la clase.

—Por cierto, Shimizu-chan, ¿puedo tener ese paquete?

—¿Eh? Ah, sí..

Ella entregó el paquete que encaja el gotero en su mano honestamente.

No tiene ni idea de la posición en la que se encuentra la belleza rubia que tiene enfrente. Simplemente pensó que no era una mala persona basándose en su relación de las últimas semanas. Parece que se echaría a reír si lo oyera, pero ese es el sentimiento sincero de la presidenta de la clase.

—Gracias. Gracias por tu ayuda de nuevo.

—No-No, no quise…

Esto se hizo por la frustración de que le frotaran el pecho durante las prácticas.

Esto provocó el interés de Francisca.

—¿No es estupendo ir por delante de [Normal]?

—Oye, Francisca.

—Perdón. Pero hay que premiar a los colaboradores.

—…

La palabra [Normal], que se pronuncia repetidamente, hace que Nishino muestre irritación. Naturalmente, esto plantea preguntas a la presidenta que lo oye. De alguna manera entiende que el sonido se refiere a su compañero que está a su lado.

—Eso, ¿qué es [normal]?

Una pregunta sale de la boca de Shimizu.

Su mirada miraba de refilón a Nishino.

—… ¿Quieres saberlo?

Algunos mechones del flequillo de Francisca se agitaron mientras murmuraba.

El rubio brillante se agita en el suelo.

—¡E-Espera, tienes que estar bromeando!

—Ya te he dicho en repetidas ocasiones que tus chistes son aburridos.

—Lo sé..

—¿Y qué vas a hacer con esto?

—En realidad no me importa, pero tengo un buen uso para la gente involucrada en este hospital, así que haré lo que quiera por aquí. Les pagaremos también como colaboradores, así que está bien, ¿no? Ese es el final de la historia, ¿de acuerdo?

—Una cosa te diré, no trates mal a Takeuchi-kun o a su gente, ¿vale?

—Entiendo.

—Espero que sí…

Hablando con desprecio, Francisca dirigió su mirada a Rose.

Su propósito original era asegurar a Takeuchi-kun.

Ella asintió ante esto, y el dúo de rubias decidió retirarse. La información obtenida en el mismo lugar no era mala. Esto podría disuadir a Takeuchi-kun de salir, pensó Francisca.

Al mismo tiempo, es fácil citar este único incidente y rodearlos de custodia.

—Bueno, ahora te dejamos.

Gira sobre sus talones y comienza a bajar las escaleras por donde vino.

El sonido de las pisadas se alejó rápidamente en la distancia y dejó de oírse.

Las dos personas que quedan son Nishino y la presidenta de la clase.

La escalera de emergencia es muy silenciosa, muy lejos de las siempre populares salas. Sólo se oye ocasionalmente a la gente que sube y baja por la escalera desde otras plantas. También está bastante alejada, así que apenas se nota.

Hace un silencio muy incómodo.

Tal vez incapaz de soportar tal ambiente, Nishino abrió la boca.

—… ¿No preguntaras?

—…

Con un solo golpe, la piel de gallina apareció en los brazos de la presidenta. ‘No quiero escuchar esa línea’, es el pensamiento que por reflejo apareció en su mente. Sin embargo, la otra parte es la persona que salvó su castidad, por lo que tiene miedo de quejarse.

A la vista de su relación en las últimas semanas, ni siquiera cree que Nishino tenga malas intenciones. La presidenta entiende ahora muy bien que probablemente se trata de una reacción genuina. También hay un deseo de respetar los deseos de la otra persona, que no es nulo.

Pero aún así, la otra persona es el futsumen.

Es como un collage de frases de actores guapos con comediantes.

—No-No es de mi incumbencia preguntar, ¿verdad?

—No, no lo es.

‘Mentiría si dijera que no me preocupa,’ piensa Shimizu.

También hay un deseo de confirmar.

—La presidenta me ayudó de nuevo esta vez. Quiero darte las gracias, gracias.

—¡No-No quise ayudar a Nishino-kun!

—Ha ocurrido como resultado.

Nishino inclinó la cabeza de forma sorprendentemente directa.

Y cuando la otra persona se inclina, la presidenta quiere inclinarse también. Mirando los espirales deformes justo delante de ella, naturalmente continuó sus palabras. Era una señal de conciencia que nunca había sido dirigida de Shimizu a Nishino antes.

—Eso, Ni-Nishino-kun…

—¿Qué pasa?

—También tengo, ¿cómo se llama? Eso..

—…

Dijo lentamente.

Al final, se dejó llevar por su impulso y habló más fuerte.

—¡Siento ha-haber sido tan grosera contigo!

Por una vez, su boca se movía con naturalidad, ya que había sido ayudada unilateralmente. A diferencia de las otras veces durante el viaje, no pudo ver a su enemiga natural, Rose, cerca. La presidenta fue un poco más honesta. Sus palabras fueron genuinas.

Probablemente por eso el futsumen se sorprendió.

No esperaba una disculpa de ella.

Siente un calor abrasador en su interior.

Tengo la sensación de estar un paso más cerca de mis compañeros.

Lo que vino naturalmente fue ese cinismo arraigado.

—No te preocupes, creo que también es parte del encanto de la presidenta.

—…

Es un incontenible futsumen.

Un compromiso de Shimizu fue inmediatamente ampollado.

Aunque lo sentía, la presidenta de la clase no pudo evitar querer dar un puñetazo a la persona que tenía delante. Eso tampoco es bueno para el futsumen. Siempre es Nishino quien dice dos o tres palabras de más en lugar de una. Si no fuera por esto, podrían haberse hecho más amigos. Son dos personas que podrían haberse hecho más cercanas.

‘Si fuera atractivo,’ es una peligrosa imaginación que de repente apareció en la mente de Shimizu.

***

Tras disculparse con Nishino, la presidenta abandonó rápidamente la pista frente a la azotea.

Tenía miedo de que, si estaba a solas con él durante mucho tiempo, volviera a decirle algo violento al futsumen. ‘Me voy a casa.’ Murmuró brevemente y echó a correr por la escalera de incendios. Su figura desapareció escaleras abajo y pronto se perdió de vista.

—… Bueno

Con toda la gente que estaba allí habiendo abandonado la escena, Nishino también dio un paso adelante.

Estaba pensando en ir con Marquis hoy.

Ya había anochecido y el cielo más allá de la puerta de hierro estaba negro como el carbón. Una brisa fría entró y se le ocurrió que había dejado la puerta abierta. Se apartó de las escaleras que llevaban al piso inferior y se dirigió al exterior.

Entonces, inesperadamente, apareció una figura humana en su campo de visión.

—… Takeuchi-kun, ¿qué estás haciendo aquí?

—…

Al pasar la puerta de hierro, había un hombre guapo que era el orgullo de la clase 2A.

Parece algo sombrío bajo la oscuridad de la noche.

Nishino, que no esperaba que hubiera nadie más allí, se sorprendió un poco al verlo. Cuando fue al mismo lugar, también utilizó la entrada y la salida exterior. Supuso que estaba detrás de la escalera, ya que no lo vio al principio.

De hecho, era Takeuchi-kun, solo y abatido en la azotea.

Es un funcionario del hospital, así que la cerradura de la puerta de hierro no es nada para él.

—Hace frío fuera en esta época del año, ¿verdad? El viento también se está enfriando.

—Siempre he pensado que eras raro, ¿sabes?

—…

El futsumen le habla de la misma manera que de costumbre, pretendiendo ser casual.

Takeuchi-kun respondió a esto con una mirada algo acorralada.

Al comprobar su expresión, Nishino comprendió que había visto toda la serie de intercambios. En el pasado había habido muchas escenas comprometedoras, pero esta vez lo habría visto todo, incluida la conversación con Francisca y Rose.

Es una situación bastante problemática, es su sincera opinión.

—… Oi, Nishino.

—¿Qué pasa? Takeuchi-kun.

—¿Es cierto lo que has dicho antes? ¿Que ese hombre es el culpable de los recientes disturbios?

—Sí, es verdad.

—¿Cómo lo sabes?

—Es mejor no involucrarse más. Este caso también comenzó como una represalia por el anterior incidente de secuestro. Takeuchi-kun, tienes el objetivo de convertirte en médico, ¿verdad? Si es así, quiero que pases tus días en un entorno limpio.

—…

Las palabras, normalmente exasperantes, del futsumen resonaron en su corazón. Takeuchi-kun nunca había soñado que llegaría el día en que su propia vida social se salvaría. Le sacudió hasta el fondo, incluso más que su relación con Rose.

—… ¿Qué demonios es eso?

—… ¿Qué pasa? Takeuchi-kun.

Además, al lado de Nishino había una hermosa mujer rubia a la que no había conseguido ligar en sus viajes hace tiempo. El futsumen le dijo que era su tía política, pero la escena nunca fue así. También le dijo que tenía casi cuarenta años, pero la verdad es dudosa cuando se trata de esto.

Gracias a esto, la mente de Takeuchi-kun se encuentra en un estado de flujo.

Fue el momento en que Nishino, en su mente, se alineó consigo mismo en todos los sentidos.

En la clase 2A, el guapo menospreciaba a todos menos a sí mismo. Creía que ningún chico era mejor que él. Por eso siempre se comportaba cómodamente en el aula y lideraba a todos los demás. Siempre era el líder de la clase.

Para él, era la primera vez que nacía como un igual.

—Nishino, fui derrotado sólo por ti.

Parece decidido y habla alto y claro.

Sus poderosos ojos brillaban en la luz que se filtraba desde la escalera. Estas eran palabras sin parangón para que un orgulloso Takeuchi-kun se las dijera a alguien de su mismo sexo. Incluso el hombre que las dijo no tenía experiencia en expresar sentimientos más fuertes a otros.

En cambio, Nishino devolvió las palabras más largas del guapo en sentido contrario.

—No, parece que el ganador ya está decidido. Perderé contra Takeuchi-kun.

Rose fue lo primero que le vino a la mente al futsumen.

Era un hombre guapo que nunca había dejado de acercarse a ella en el pasado. Pensó que este intercambio también se refería a la persona que le interesaba. Nishino pensó que no había otro trasfondo posible para que la persona que tenía delante le desafiara.

De hecho, parte de la victoria o la derrota incluía la presencia de Rose.

—¿Jaa? O-Oi, ¡espera un momento!

—Puedes estar tranquilo por el tema del hospital, se solucionará mañana.

—¡Nishino! Espera un momento..

Murmurando brevemente, el futsumen se dio la vuelta.

Sigue siendo un hombre que no escucha a los demás.

Con una ligera patada en el suelo, bajó las escaleras que conducían al rellano en un solo suspiro. Bajó decenas de escalones de un solo salto. Un ligero golpe sonó al aterrizar. La acción fue como si a su cuerpo le hubieran crecido alas.

Esta es la versión en escaleres de hablar con tu espalda que amaba Nishino.

El futsumen desapareció en el piso de abajo, sin prestar atención a la voz de Takeuchi-kun para detenerlo.

***

En otro lugar, esta es Risa-chan, que ha perdido de vista a la presidenta de la clase.

Se separó de la persona que buscaba en un pasillo atestado de gente, pero seguía deambulando por el hospital. Yendo de un lado a otro, preguntando a la gente que pasaba por el pasillo si habían visto a una chica de uniforme.

Luego, algo más tarde, se encontró con su homólogo con el mismo uniforme en el pasillo de la sala.

Sólo que no era la persona que buscaba.

—Ah, Gabu-chan..

—Creo que eres un estudiante en la misma clase que él.

Es Gabriella.

Últimamente la han dejado de lado muchas veces. Después de dejar a los demás en la entrada, parecía dar vueltas por el hospital sin parar. Pero se estaba cansando de eso, y justo cuando empezaba a pensar en irse a casa, pasó esto.

Lo hicieron por casualidad y se encontraron en un rincón de la sala.

—¿Qué estás haciendo aquí? Y sola.

—Me han dejado atrás y no estoy ocupada.

—¿Eh? Ah, ¿tal vez después de eso?

—Sí.

—Ya-Ya veo…

La apariencia menuda e infantil de Gabriella, combinada con su honesta pregunta y respuesta, hace que, naturalmente, una expresión de disculpa aparezca en el rostro de Risa-chan. Estaba tan preocupada por la presidenta que no podía ver lo que ocurría a su alrededor.

En su vida normal, Risa-chan habría valorado la armonía del grupo de chicas más que cualquier otra cosa. Tampoco estaba interesada en Takeuchi-kun, en parte por su historia de devoción a su padre. Con ella en la cima, la unidad del grupo de chicas en la clase 2A era sólida como una roca.

—… Si quieres, podemos volver juntas a la estación.

—¿Qué estabas haciendo aquí?

—Bueno, e-esa cuestión…

Inmediatamente después de la pregunta, el cerebro de Risa-chan se llenó con la imagen escabrosa de la presidenta de la clase.

Anoche, se divirtió sola en su habitación, pensando en ello. Risa-chan había llegado a la conclusión de que era bisexual. Cuando lo buscó en Internet, descubrió que era bastante común entre las mujeres, y lo aceptó sin ninguna resistencia.

—¿Estabas persiguiendo a esa mujer?

—… Sí.

Risa-chan pudo determinar rápidamente que con esa mujer se refería a la presidenta de la clase.

Sus mejillas se relajaron naturalmente cuando salió el tema que le interesaba.

Tras confirmar esas reacciones, Gabu-chan continuó sus palabras.

—¿Te gusta esa mujer?

—¿Eh, ta-tal vez lo entiendas?

—Sé muchas cosas.

—… Ya veo.

Gabriella, que había adorado y seguido a Rose en el pasado, pudo notar fácilmente el cambio en Risa-chan. Mientras tanto, cuando inesperadamente entiende el punto, continúa sus palabras, pareciendo un poco emocionada.

—Pero la presidenta no parece tener pensamiento para ello.

—Ya veo.

—Gabu-chan, ahora que lo pienso, estabas persiguiendo a Rose-chan, ¿no?

—Eso me ha pasado a mí.

—Si quieres, si sabes cómo enamorar a una chica de tu mismo sexo, ¿podrías decírmelo? ¿Cómo se consigue que a las chicas les gusten las chicas? Siento preguntarte esto sin venir a cuento, pero..

Risa-chan se atrevió a preguntar.

Se estaba agarrando a un clavo ardiendo.

Y la respuesta fue más fácil de lo esperado.

—La mejor manera es enseñarle a sentir placer.

—¿Eh?

—Las mujeres saben mejor lo que les hace sentir bien.

—… Ya veo.

Fue una respuesta muy sencilla.

Por eso resonó inesperadamente con Risa-chan.

—Las sensaciones físicas son lo suficientemente poderosas como para transformar el espíritu.

—S-Sí, eso puede ser cierto…

—¿Es todo lo que tienes que oír?

—Sí, gracias. Siento que ahora entiendo un poco más.

—Eso estuvo bien.

La pasión de Risa-chan se acelera tras su conversación con Gabriella.

Es probable que los problemas de la presidenta continúen en el futuro inmediato.

***

Ese mismo día, después de la reunión con Marquis, Nishino volvió a su casa.

Subió las escaleras hasta la sala del segundo piso. Ya era tarde y la casa estaba en silencio. Sus compañeros de piso probablemente estaban durmiendo. Con esto en mente, se dirigió a la sala. Decidió relajarse y tomar una taza de té.

Entonces, lo que ocurrió fue que había un visitante delante de él en el mismo lugar.

—Ara, llegas muy tarde.

—… ¿Eres tú?

En cuanto se encendieron las luces de la sala, apareció una figura humana en el sofá.

Fue Rose quien levantó la voz.

—¿Qué estabas haciendo en la oscuridad?

—No estaba haciendo nada. Sólo me estaba tomando mi tiempo.

—…

Parecía que acababa de salir del baño, y su pelo estaba húmedo y mojado. Combinado con su piel respingona, parecía más sexy que de costumbre. Para un virgen con poca interacción con el sexo opuesto, esta era una visión que le ponía más o menos nervioso.

—Lamento molestarte mientras te relajas.

Se gira sobre sus talones antes de tiempo.

Ella le impidió hacerlo.

—¿Puedo hablar contigo?

—…

Dio un paso adelante y se detuvo.

Podría haberse ido si hubiera puesto una excusa adecuada sobre el cansancio o algo así. Sin embargo, Nishino decidió cumplir. Esto se debió a su interacción con Takeuchi-kun hoy, además de sus diversas reservas sobre Rose.

Compañeros de clase.

La mujer de Takeuchi-kun.

Compañeros.

Esas palabras clave daban vueltas en la mente de Nishino.

—Perdón por lo que hice hoy.

En la puerta de la sala, mirando a Rose, Nishino le habla.

A esto respondió mientras estaba sentada en el sofá.

—No es de eso de lo que quiero hablar.

Francisca se ha hecho cargo del asunto de la fabricación de errores médicos. Serán informados en un futuro próximo. Y fue una promesa hecha entre ella y Nishino que al menos no haría nada que interfiriera con la gestión del hospital.

—…

Cuando el rostro de Francisca llegó a su conciencia, Nishino recordó de repente los acontecimientos de ayer. Era Rose, que había estado en contacto con ella en la parte trasera del hospital por los recientes disturbios, sobre ella y las circunstancias del incidente.

—Sé que has hecho mucho trabajo para Takeuchi-kun.

—Ara, ¿estabas mirando? Eso es asqueroso.

—En efecto, tus palabras parecen auténticas.

—…

Rose pudo imaginar inmediatamente que las palabras de Nishino eran una frase como ‘Por el bien de mis compañeros’. En algunos casos, podría haber sido vista comunicándose con Francisca, que es exactamente la suposición correcta.

Rose meditó para sus adentros que, como habían recibido formación en el mismo hospital, esas cosas sucederían. Esto no fue en su detrimento. Más bien, el futsumen parecía haberlo tomado de una manera conveniente para Rose. Rose no era la única a la que le habían contado el incidente.

—¿Qué importa?

—Takeuchi-kun, es un buen hombre.

—… ¿Eh?

Pero cuando escucha las palabras que continúan, inclina la cabeza.

Se preguntaba por qué había sido mencionado Takeuchi-kun.

Nishino, ajeno a las dudas de Rose, continúa con sus palabras. Su tono es muy tranquilo. El tono es muy alegre, como los saludos matutinos que da en la clase 2A justo después de las clases todos los días.

Naturalmente, es algo extraordinario que él se lo diga.

—Por eso entiendo perfectamente tus sentimientos.

—Nishino-kun, ¿qué significa eso?

Rose estaba desconcertada por el comportamiento inusual de Nishino.

Y luego, para colmo de males, le entregaron una propuesta impactante.

—Si tienes algún problema en el trabajo, puedes decírmelo.

—Eh…

—… Te ayudaré si estoy disponible.

Eso es lo que ella y Francisca estaban inicialmente tan desesperadas por escuchar. Es sorprendente que esto se les haya dado después de todo este tiempo. Es una gran sorpresa que luego de todo este tiempo lo haya obtenido.

—¡E-Espera! ¿Qué significa eso..?

—Bien entonces.

Entonces el futsumen dijo lo que quería decir y salió de la habitación. La puerta se cierra tras él y la sala se queda en silencio. El sonido de los pasos que suben por las escaleras resuena suavemente, y luego se aleja cada vez más.

Fue Rose quien certificó unilateralmente que estaba interesada en Takeuchi-kun.

—… No puedo evitarlo.

Si intentas mantener las distancias, serás odiado, y si intentas acercarte, serás incomprendido. Por eso los vírgenes son vírgenes. Normalmente, es una persona segura de sí misma en todo lo que

haceo, pero cuando se trata de relaciones con el sexo opuesto es un futsumen con una autoestima extrañamente baja.

Eso es lo malo de que la edad sea igual a no tener novia.

—Pero yo también amo esa parte de ti… Nishino-kun.

El plan original de juntar a Takeuchi-kun con Gabriella acabó en fracaso. No sólo eso, ella misma se topó con Takeuchi-kun, causando todo tipo de problemas. Aun así, esta tarde Rose estaba pensando en él y decidió divertirse sola.