Buta Koushaku ni Tensei Shitakara, Kondo wa Kimi ni Suki to Iitai (NL)

Volumen 1

Capitulo 5: El Mago De Todos Los Elementos

Parte 1

 

 

Necesito salir de aquí, pensó la mercenaria. Sé que los archivos confidenciales que necesito están escondidos en una habitación secreta que solo se abre en la noche de luna llena, pero no tengo tiempo. Esperar la luna llena ya no es una opción. Aunque no pudo obtener la información confidencial, estaba segura de que Dustour estaría de acuerdo en que era necesario escapar para evitar el peor de los casos de ser atrapada y obligada a revelar a su empleador.

“Vamos. Anda. Incluso el caballo puede seguir las instrucciones mejor que tú,” se burló la mercenaria, tirando de las riendas del caballo que caminaba a su lado.


“Profesora Arle, ninguno de los nobles de Daryth la dejará en libertad por establecer un círculo mágico oscuro en el instituto,” siseó Alicia.

La mercenaria soltó una carcajada. “¿Yo? ¿Profesora? Eso es hilarante. ¿De verdad creías que era maestra? Mis lecciones fueron tan aburridas. Todo lo que hice fue leer el libro de texto en voz alta, ¿y me llamas profesora? ¡Ah, ja, ja!”

Alicia apretó los dientes, dándose cuenta de que no tenía más remedio que reunir finalmente el coraje para aceptar que esta era la realidad—que la seguridad que tenía durante mucho tiempo asociado con esta escuela fue poco más que una ilusión.

“Bueno, siempre te dormías en clase, así que, por supuesto, no te darías cuenta de la verdad,” se burló la mercenaria. “No soy una verdadera profesora. Me contrataron para infiltrarme en esta escuela.”

“Eso es…” Alicia se quedó sin palabras.

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Niños nobles de todo Daryth se reunieron en este instituto, niños que provenían de todas las innumerables filas de la nobleza, desde los que poseían el territorio hasta los que supervisaban los puestos judiciales o administrativos. Planear una conspiración contra Kirsch significaba arriesgarse a la ira de todos los nobles de Daryth.

Los graduados de Kirsch pasaron a ocupar muchos puestos en el mundo político y económico. Incluso entre los plebeyos que no podían usar la magia, hubo algunos que hicieron uso de las conexiones que hicieron después de graduarse para iniciar grandes empresas comerciales. Estos graduados luego donarían grandes sumas de dinero a la escuela, asegurando que la escuela pudiera seguir siendo autosuficiente a pesar de su ubicación remota.

Los guardias siempre vigilaban en la puerta, monitoreando quién pasaba a través de los robustos muros del campus. Alicia nunca pudo imaginarse a Kirsch, el corazón de Daryth y hogar de los niños que marcarían el comienzo de su futuro, siendo infiltrado por alguien malintencionado.

“Realmente no crees que te saldrás con la tuya, ¿verdad? Hay guardias en la puerta,” desafió Alicia.

“Ahí es donde entras tú. Si te tengo conmigo, podrían ser un poco más indulgentes con las reglas. Tú y el hijo de ese duque son personas muy especiales en esta escuela, ¿sabes?” La mercenaria no rompió su paso seguro, marchando hacia la libertad.

Más allá de los campos de deportes, un camino serpenteaba entre dos edificios de conferencias que conducían a la puerta principal, más allá de la cual se encontraba su destino.

“Hará lo que le diga delante de los guardias, Alteza.”

“¿Parezco que estoy a punto de recibir órdenes de alguien como tú?” Dijo Alicia después de un momento de vacilación.

“Piensa antes de hablar, ¿de acuerdo? Si actúas de forma imprudente, ¿quién sabe qué consecuencias caerán sobre la nobleza de Daryth? Eso sería todo un espectáculo.”

No importaba quién era la chica que la sorprendió grabando esos círculos mágicos. Lo que importaba era que ella era inofensiva. Si hubiera sido el Director Morozov o el ex Caballero Real que había contratado, la mercenaria habría tenido que sacar su varita y luchar hasta la muerte. Pero ninguna cantidad de sangre real cambiaría el hecho de que este testigo no era más que una niña que conocía algunos trucos de salón. La mercenaria no tenía nada de qué preocuparse.

“¿Crees que puedes salirte con la tuya tratándome así?” Dijo Alicia, levantando la barbilla en desafío.

“Por supuesto que puedo salirme con la mía. Eres solo una niñita. No puedes hacer nada.”

Sin embargo, había algo que inquietaba a la mercenaria: no podía averiguar quién había destruido sus círculos mágicos. Al principio, pensó que había sido el director, el anciano del que más desconfiaba mientras estaba de incógnito. Pero había seguido de cerca todos sus movimientos, llegando incluso a convertirse en profesora para estar más cerca de él. Conocía su horario como la palma de su mano; hoy no sería diferente. En este momento, él debería estar en el bosque hasta el mediodía para su control diario en busca de disturbios allí.

“Si desaparezco repentinamente sin una buena razón, causaré un alboroto,” argumentó Alicia.

“Sí, Alteza. Después de todo, eres la preciada estudiante extranjera de la escuela, así que no esperaría menos. Eso es, sin embargo, si al principio notan su ausencia. Espero que tengamos hasta el mediodía antes de que alguien se dé cuenta, como muy pronto.”

Alicia guardó silencio un momento. “Serás una criminal buscada en todas partes de Daryth. No hay forma de que puedas escapar.”

La mercenaria se rió entre dientes. “¿Está preocupada por mí? No te preocupes. No pueden atrapar a alguien que no existe, ¿no estás de acuerdo?”

Tampoco pudo haber sido el ex Caballero Real Loco Moco Highland quien sobrescribió los círculos mágicos. No tenía la habilidad magica para eso; sus puntos fuertes residen en el combate en comparación con otros Caballeros Reales. Quizás podría destruir un círculo mágico, pero no tuvo la delicadeza para reconfigurar uno.

¿Quién sobrescribió mis círculos mágicos? En lugar de destruirlos a todos, se esforzaron por dejar atrás círculos mágicos reconfigurados en algunos lugares. Deben estar intentando provocarme. Intentan hacerme pensar que son más poderosos que yo.

“Tú… ¿Quién eres tú?” Preguntó Alicia.

“Soy la Mujer Sin Rostro. Una niña ignorante como tú probablemente no sabría de mí, pero soy muy conocida en el mundo subterráneo, ¿ves?”

No, debería dejar de pensar en quién es esta persona misteriosa. No llegare a ninguna parte. La mercenaria rompió ese hilo de pensamientos. Después de todo, yo voy a desaparecer. Borraré todos los recuerdos que hice durante esta misión de mi mente y pasaré a la siguiente. Ese es mi principio como mercenaria.

***

 

 

Cada semana, Charlotte enviaba un informe a la Casa Denning sobre mi vida en la escuela. Charlotte supervisaba el tipo de clases que tomaba, si entregaba mis deberes y cómo era mi reputación en la escuela. La Casa Denning enviaría una respuesta todos los meses en respuesta a los informes en los que Charlotte puso su corazón.

“Maestro Slowe, por favor, mire esto.” Estaba desayunando en mi habitación por una vez cuando Charlotte se acercó, sacó un pergamino enrollado de su bolsillo y me lo mostró. “¡Llegó una carta de la Casa esta mañana!”

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En cuanto a por qué estaba comiendo en mi habitación y no en el comedor… Bueno, a veces quiero desayunar a mi propio ritmo.

Por eso estabas tan inquieta,” comenté. “¿Qué escribieron este mes?”

“Oh, todavía no lo he leído. Lo comprobaré ahora. Hmm… ¿Hmm? ¿Mmm? ¿Eh? Eso es horrible…” Charlotte comenzó a temblar y el color desapareció de su rostro mientras leía, sus murmullos hicieron sonar las alarmas en mi cabeza.

Tengo un mal presentimiento sobre esto.

“¿Qué ocurre?” Yo pregunté. Nunca leí las cartas de mi familia. Intenté leer una de ellas una vez, pero hubo tantas reprimendas dirigidas hacia mí que todo se volvió borroso para mí. Charlotte era quien se ocupaba de las cartas todos los meses, y por eso le tenía mucho respeto y gratitud.

“Um, bueno… están realmente enojados y me regañaron, diciendo que no debería escribir mentiras. Escribieron que la idea de que hagas amigos, y mucho menos una amiga, es “tan creíble como un dragón que se pone un delantal y cocine”. Y que si vuelvo a escribir esas tonterías, me recortarán el sueldo. ¿Estás siendo amenazado?… Oh, esa última parte estaba dirigida a mí…” Los hombros de Charlotte se hundieron, consternada. Era una vista lamentable, todo lo contrario de cuando sus ojos habían brillado con entusiasmo solo unos momentos antes.

“¿Qué informaste este mes, si no te importa que te pregunte?”

“Um…” Charlotte se calló en sus pensamientos. “Escribí que habías reflexionado sobre tus acciones pasadas y habías cambiado de página. Que empezaste a hacer ejercicio para bajar de peso y bajaste una talla para tu uniforme… ¡Ah, y también escribí sobre cómo hiciste un amigo! Y cómo todos en Kirsch estaban felices con tu cambio… Bueno, podría haber exagerado algunas cosas…”

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Me reí. No pude evitarlo. Nada de eso es una tontería. ¡Es toda la verdad! Realmente no tienen ninguna fe en mí, ¿eh?

“Todo es verdad, sin embargo…” Charlotte rompió a llorar. “¡Pensé que me elogiarían! ¡Estaba tan segura…!”

Oh querida. Charlotte se hundió en una silla y se derrumbó sobre la mesa, su motivación desapareció visiblemente. Presionó su mejilla contra la mesa mientras dibujaba patrones sin sentido en su superficie con un dedo. Fue una vista rara. Charlotte solía ser muy serena. Probablemente pensó que sería elogiada como mi anticipo por todos los cambios que hice. Los dos rara vez éramos elogiados por mi familia, y Charlotte probablemente lo anhelaba.


“Charlotte… Está bien. Anímate,” la consolé.

Silencio.

Oh wow. Ella está realmente deprimida por esto, ¿eh? Necesito animarla de alguna manera. Terminando la gran porción de desayuno que había pedido, me levanté y tomé una botella del estante. Bebí la botella casi vacía de un solo golpe y la golpeé contra la mesa.

Al ver eso, Charlotte pareció recuperar algo de vida en sus ojos. “¡Oh! Casi has terminado con las porciones para bajar de peso. Tendré que hacer más.”

“Lo he estado bebiendo todos los días. También comencé a beberlo al mediodía, recientemente,” dije. La adaptabilidad de los humanos era un rasgo aterrador. Ahora podía tragar la poción para bajar de peso sin siquiera pensarlo 2 veces.

“Maestro Slowe, ¡te prepararé una nueva poción para bajar de peso de inmediato! ¡Déjamelo a mí!” Charlotte infló el pecho.

Me alegra que estés feliz de nuevo, pero… acabo de escuchar una palabra muy siniestra… “¿Eh? ¿Una nueva?” Pregunté con creciente pavor.

“Investigué el contenido de la poción para bajar de peso que obtuviste en el concurso de comer rápido e hice un descubrimiento monumental,” declaró Charlotte.

“¿Analizaste el contenido? Charlotte, ¿puedes hacer eso? Espera, la botella se hizo añicos, ¿no?”

“Tengo a alguien que puede decirmelo. Fui a preguntarle a la compañía que hizo la poción para bajar de peso, y al principio, no me hablaron y me dijeron que estaba siendo ridícula. Sin embargo, una vez que les dije que era un sirviente de la Casa Denning, fueron muy cooperativos. ¡Lo que aprendí fue asombroso! ¡Descubrí que la poción para bajar de peso tiene un secreto monumental!” Exclamó Charlotte.

Guau. Tiene mucha iniciativa. Me di cuenta de ello al registrar exactamente lo que Charlotte acababa de decir. Espera un minuto. Quiero decir, tenía la sospecha de que Charlotte a veces usa el nombre de la Casa Denning para su beneficio, pero definitivamente está confirmado ahora. ¡Esa es mi increíble sirvienta! Es una chica astuta, pensé con orgullo.

“Entonces, eh, ¿cuál es este secreto?”

Charlotte entró en pánico de repente. “Oh… no puedo decirlo. Acabo de recordar que la gente de la empresa dijo ‘no se lo digas a nadie’.”

Eso tiene sentido. La poción para bajar de peso fue un producto revolucionario; Sería desastroso si una empresa rival tuviera en sus manos esa información. En realidad, no me importa el secreto de la poción para bajar de peso. Me alegro de que Charlotte se animara.

“Ya veo. Bueno, he terminado con el desayuno, así que me iré y torturaré la grasa de mi cuerpo con algo de entrenamiento,” bromeé.

“Buena suerte, Maestro Slowe,” dijo Charlotte. “Oh, necesito escribir otra carta. ¡Necesito enviar una inmediatamente para decirles que no estoy mintiendo! ¿Puedo escribirla aquí?”


“Adelante. Te veré más tarde.” La dejé para que escribiera su carta en mi habitación, saliendo al pasillo. Había sido una mañana tranquila y tenía la sensación de que hoy seguiría ese patrón. Seguramente sería un día tranquilo iluminado por el cálido sol con muy poco viento.

Comencé mi rutina de ejercicios de Tae Bo solo esa mañana, pero después de un tiempo, comencé a sentir muchas miradas incrédulas sobre mí. ¿Están todos sorprendidos porque estoy sudando a mares y haciendo sonidos incoherentes, mientras trabajo duro para perder peso?

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Aparentemente, se corrió la voz en la calle de que me estaba preparando para un ritual de maldición y que esta era la única explicación de mi repentino cambio de comportamiento. Los estudiantes inicialmente enviaron equipos de exploradores con la esperanza de descubrir mis motivos. ¡Qué groseros! Me burlé por dentro. Hay tanta gente insensible en esta escuela. No maldeciría a nadie.

Habían pasado algunas semanas desde que decidí adelgazar. Por lo que pude ver por los susurros de los estudiantes a mi alrededor, parecía que la gente de Kirsch estaba comenzando a aceptar que no había motivos ocultos detrás de mi cambio. Ni siquiera me había dado cuenta de que la gente podía considerar la idea de que yo estaba siendo genuino hasta ahora.

“Ese Duque Cerdito todavía va,” escuché murmurar a un estudiante.

“Gané la apuesta. El Duque Cerdito no se rindió de inmediato, así que me debes quince chelines de cobre. Debes pagarme, aunque no quieras,” exigió su amigo.

“Maldita sea.” El primer estudiante chasqueó la lengua con molestia.

Los estudiantes incluso habían comenzado a apostar por cuánto tiempo podría perseverar en mi rutina de adelgazamiento. Estas personas se entretienen con demasiada facilidad, ¿eh? Siguiendo cada uno de mis movimientos de esta manera… Deberían llamarme el Mejor Animador de todo Kirsch—no, en todo Daryth.

Cuando Lord Pauper me habló de las apuestas, le dije que debería apostar toda su fortuna a mi éxito. Sin embargo, era asombrosamente pobre a pesar de ser de la casa de un conde, por lo que no era como si realmente tuviera una fortuna que apostar en primer lugar. No pude evitar sentir lástima por él.

Volví a centrar mi atención en mi trote, jadeando. Estaba más en forma que cuando comencé a hacer ejercicio, así que había estado tomando una nueva ruta en mis trotes. Comencé desde el costado del edificio de investigación, luego di una vuelta alrededor de los campos deportivos y me dirigí hacia las puertas principales. Una vez allí, golpeaba la pared una vez antes de volver sobre mis pasos hasta el final.

“Oh, buenos días, Lord Denning. Por favor, enséñame magia otra vez en algún momento,” me gritó alguien, resoplando.

Fue Tina. Luchaba con una pila de heno en sus brazos tan grande que solo podía ver la mitad de su rostro por encima de ella.

“Trabajas duro por la mañana, eh,” comenté. “Si seguro. Practiquemos juntos alguna vez.”

“¡Sí, gracias!” Tina dijo felizmente mientras pasaba junto a mí con el heno.

Tina trabajaba a tiempo parcial en los establos alimentando a los caballos por las mañanas. Los plebeyos como Tina trabajaron duro en trabajos de medio tiempo para poder pagar la costosa matrícula y sus propios gastos de vida además de eso. Tina me había dicho una vez: “Los trabajos aquí son muy diferentes a los de la ciudad, así que sorprendentemente me estoy divirtiendo un poco.”

Después de haber pasado por un área relativamente desierta, llegué a los campos deportivos abiertos y espaciosos.

Todos pasaban las mañanas de manera diferente en Kirsch. Algunos plebeyos practicaron con sus espadas y sus varitas en un área abierta que había sido aplanada por los magos de tierra, y algunos estudiantes optaron por leer libros con cubiertas elegantes como los estereotipos de magos en entrenamiento. En cuanto a mí, llevé a cabo mi rutina de adelgazamiento como de costumbre.

Pero sabía que esta paz era frágil, porque alguien se había infiltrado en esta escuela.

Si los estudiantes se enteraran de que había un espía aquí, la escuela se sumiría en un caos total. Algunos de los estudiantes nobles empezarían a buscar al espía en un intento por alcanzar la gloria, mientras que muchos otros estudiantes se esconderían en sus habitaciones por miedo. Ser alborotadores era su especialidad, y apostaría dinero a que aprovecharía la oportunidad para crear más discordia para su propio beneficio.

Maldita mercenaria. Ella está tan abrumadora. ¡Definitivamente traeré toda la fuerza de mi conocimiento del anime para enfrentarla! Pensé con convicción.

Me las había arreglado para lidiar con casi todos los círculos mágicos que había establecido alrededor de la escuela durante los últimos días. Era solo cuestión de tiempo antes de que se diera cuenta de que algo andaba mal.

Ahora, todo depende de cómo reaccione. Su primera prioridad debería ser obtener información confidencial, pero en una situación inesperada como esta, podría planear un escape.

Y entonces hice… preparativos.

Ordené a los guardias que me informaran si alguien quería salir de la escuela inesperadamente debido a un asunto urgente. Normalmente, los estudiantes no podían dar órdenes a los soldados, pero mi estatus de pertenecer a la Casa Denning tenía sus ventajas. Mi padre y los otros duques están a cargo de los soldados en este país, y el nombre de mi padre es muy efectivo a la hora de tratar con ellos. Usaré el nombre de la Casa Denning si es necesario. He llegado tan lejos; No puedo dejarla escapar.

También pedí hablar con el director más tarde esta noche para poder informar sobre los círculos mágicos. Hice todo lo que pude para evitar que ella escapara; ahora todo lo que podía hacer era esperar.

“Oink, oink…” Jadeé, trotando como de costumbre. Fue entonces cuando noté algo. “¿Hm? Esa es…”

Divisé a una chica que caminaba con una expresión distante en su rostro. Era Alicia, y caminaba con un miembro del personal que había visto varias veces por el campus y con un caballo a cuestas. Se comportaba con arrogancia y autoridad mientras hacía que el miembro del personal la siguiera como un criado. Probablemente, así es como el Duque Cerdo de corazón negro se veía para todos los demás. Al pensar eso, suspiré.

***

 

 

Aunque estaba familiarizada con su entorno, un sentimiento surrealista se aferró a Alicia y no pudo deshacerse de él. Era como una nube nebulosa que se cernía sobre ella, pintando el mundo inundado de colores apagados y separándola de la realidad.

Alicia permaneció en silencio durante un buen rato.

Al ser miembro de la familia real, Alicia existía para ser protegida. Se suponía que su único futuro era verla casada con un noble poderoso o con la familia real de un país extranjero. Nunca se supuso que pelear fuera parte de su vida y, por lo tanto, nunca le enseñaron cómo defenderse en la batalla.

Si hubiera estado en una escuela de magos en algún lugar, en cualquier lugar de Cirquista en este momento, habría pedido ayuda. En su país, muchos nobles no dudarían en arriesgar la vida por ella.

Pero esto no era Cirquista. Este era Daryth.

Si un noble de Daryth moría como resultado de la solicitud de ayuda de Alicia, Cirquista estaría en deuda con Daryth. No podía permitirse el lujo de permitir que eso sucediera, especialmente porque fue ella quien hizo la solicitud irrazonable de inscribirse en Kirsch en primer lugar. Ella solo estaba aquí porque había logrado salir adelante con esa ridícula solicitud.

Alicia recordó la primera vez que llegó a Kirsch.

Una princesa extranjera como Alicia estaba destinada a llamar la atención en una escuela extranjera sin caras conocidas. Cuando comenzó su primer año, todos la trataban como si fuera una especie de espectáculo de fenómenos. O, por otro lado, recurrieron a coquetear con ella; ella perdió la cuenta de cuántas veces había sido abordada. Fue en este momento de su vida, cuando Alicia se había sentido abrumada por todo en esta escuela, que tuvo la oportunidad de conocer a un chico extraño. El pelirrojo había roto accidentalmente un jarrón caro que le envió su familia en ese primer encuentro, chocando con ella y tirándolo de sus manos.

Este chico irrumpió en el mundo de Alicia y forzosamente se hizo un lugar allí. Y ahora este chico tonto, misterioso y enérgico que no fue a ninguna parte sin su bola de cristal, este chico que trabajó tan duro para pagar la deuda que juró que le debía, este chico que tenía un lugar especial en el corazón de Alicia…—Shuya Newkern—se paró frente a ella y la llamó.

“Hola, Alicia. ¿A dónde vas con ese caballo?”

En realidad, a Alicia no le importaba el dinero y nunca tuvo la intención de pedirle a Shuya que le devolviera el dinero. Shuya, sin embargo, se mantuvo firme en su deseo de pagarle la pérdida. Tenía un fuerte sentido de la responsabilidad, propio de un noble de Daryth. Alicia no tenía un sirviente aquí en Kirsch, a diferencia de cuando estaba en Cirquista, así que él era un perfecto chico de los recados. Ahora que lo recordaba, le había dado ordenes durante casi medio año.

“Shuya,” respondió Alicia de manera uniforme, “surgió algo urgente y tengo que irme del campus.”

“¿Eh? ¿Completó el formulario de permiso para ello?” Preguntó Shuya, desconcertado.

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“No, no lo hice, pero no será un problema.”

“¿Ah, de verdad? Bueno, eres una princesa, así que supongo que tiene sentido que infrinjas las reglas,” dijo Shuya encogiéndose de hombros. “¿Quieres que vaya contigo?”

“¿Eh? Pero…” Alicia se sorprendió por su oferta.

“Estoy un poco preocupado por ti.” Shuya hizo una pausa por un momento. “He escuchado algunos rumores turbios últimamente, ¿sabes?”

Durante los últimos días, Shuya había estado actuando de manera extraña. Desde el día en que repentinamente abandonó la clase, había estado caminando con una mirada agitada en su rostro, y evitó todas las preguntas de Alicia cuando le preguntó qué estaba haciendo.

¿Shuya sospecha que hay un espía aquí en Kirsch? Pensó Alicia. Lo sospechara o no, ella no podría confirmarlo con él. Una varita se le clavó en la espalda incluso ahora, amenazándola silenciosamente. Alicia pensó en la mujer, en la forma en que hizo el círculo mágico y en cómo agarró la varita de Alicia con practicada facilidad. Esta mujer era una maga poderosa y probablemente una forajida. No se podía jugar con ella.

“¿Rumores turbios? Bueno, supongo.” Alicia restó importancia a su pregunta. “Además, ¿no tienes Pociones esta mañana? Recuerdo que hace un tiempo te quejaste de tener dificultades para prepararte para esa clase.”

Shuya se congeló. “¡Oh, mierda, me olvidé de la tarea de Pociones! ¡Gracias por recordármelo, Alicia!” dijo mientras se alejaba apresuradamente.

Eres un idiota impulsivo, pensó Alicia con cariño. No puedo arrastrarte a

esto.

“Vaya, vaya, qué amiga considerada eres,” se burló la mujer. “Continúe con el acto, Alteza.”

Alicia gruño, continuando su marcha hacia el frente. Al igual que ella hizo eso, lo vio a él. El cerdito obeso, que fue, con mucho, el mayor problema de los estudiantes en la larga historia de Kirsch y su ex prometido… el Duque Cerdito.

Por mucho que ella haya intentado olvidarlo antes, su pasado como prodigio todavía estaba profundamente arraigado en la mente de Alicia. Nunca podría olvidar lo que le había dicho la primera vez que se conocieron.

“Es un placer conocerte, Alteza. He escuchado muchas cosas sobre ti, pero esta es la primera vez que nos vemos en persona. Permítame darle un recorrido por las tierras de Denning. Se dice que nuestro territorio es el más peligroso de este país, pero no debes temer. Estás a salvo conmigo. Ahora, por favor, tome mi mano, Lady Alicia.

Con una pequeña y desesperada esperanza en su corazón, Alicia levantó la barbilla.

***

 

 

“Espera,” ordenó una voz.

Mantener un ritmo constante era esencial para trotar con éxito. Cada vez que hacía una pausa, la necesidad de colapsar y descansar en el suelo solo aumentaba, por lo que normalmente detenerse incluso por un momento estaba fuera de discusión.

Pero con una palabra de ella, rompí mi regla y me detuve en seco sin pensar. Era raro que ella comenzara una conversación conmigo; de hecho, ella había evitado el contacto conmigo prácticamente a toda costa hasta este punto.

“¿Qué quieres, Alicia?”

Siendo la ex prometida de una persona tan poco atractiva como el infame Duque Cerdito, Alicia había sufrido mucho acoso no tan discreto en Cirquista. Realmente me hizo preguntarme por qué había elegido inscribirse en la escuela de magos de Daryth en primer lugar, a pesar de que yo estaba aquí. Ni siquiera se reveló en el anime por qué vino a Kirsch.

“¿Sigues intentando perder peso?” Preguntó Alicia.

“Claro que sigo. ¿No puedes verlo? Estoy trotando. Es uno de los ejercicios fundamentales para perder peso. Estoy mucho más delgado en comparación con antes, ¿no crees?” Respondí.

Según Tina y Lord Pauper, estaba perdiendo peso increíblemente rápido. Inspeccioné mi figura con el gran espejo de mi habitación todas las mañanas en ropa interior, y tenían razón. Yo era una persona completamente nueva en comparación con ese cerdo listo para el matadero. Incluso podría declarar con orgullo que había bajado dos tallas. Alicia escrutó mi cuerpo, mirando hacia arriba de la cabeza a los pies y hacia atrás.

“Asi parece,” estuvo de acuerdo. “Siempre estás bromeando con todo el mundo y causándonos problemas a todos, así que pensé que comenzaste tu dieta por capricho. Honestamente, no pensé que durarías tanto. Estoy muy sorprendida, Slowe.”

Ya no había ninguna razón para que Alicia me hablara. A sus ojos, ya había perdido mi lugar como legítimo heredero de la Casa Denning. Tradicionalmente, el heredero de la Casa Denning se casaría con una hija de un poderoso noble extranjero o de la realeza extranjera. Tenían el deber de asegurar fuertes lazos con otros países para combatir a Dustour.

Pero en mi caso, mi infamia fue internacional, y no había absolutamente ninguna forma de que pudiera forzarme a volver a la carrera para convertirme en el próximo Duque Denning. La mera mención de mí era un tabú incluso en la Casa Denning, lo que lo hacía aún más improbable. Quiero decir, no tengo ninguna intención de perseguir ese título en particular, pero, bueno… honestamente, el puesto realmente no me importa, de todos modos.

En cualquier caso, yo era el peor contendiente imaginable para el prometido de la princesa de Cirquista, ya que no tenía ninguna posibilidad de convertirme en heredero.

“Bien, lo que sea que digas. ¿Y tú? ¿Has provocado algún problema? Te ves muy tensa.” Hice una pausa en mis pensamientos. “Bingo, lo tengo. Te peleaste, ¿no? Actualmente se encuentra en camino a Yoram para comprar medicamentos costosos a modo de disculpa. ¿Estoy en lo cierto?”

Alicia vaciló. “Bueno… algo así.”

La puerta principal de Kirsch conducía a un camino que atravesaba el bosque y se extendía hasta Yoram, una ciudad en la región sureste de Daryth. Era la tercera ciudad más grande de este país y estaba a unas dos o tres horas de viaje a caballo. Había escuchado rumores de jóvenes estudiantes nobles en Kirsch que se iban a Yoram los fines de semana para ligar con las chicas de allí.

“Espera. ¿Viajas con un miembro del personal? Sé que no puedes montar a caballo tú sola, pero ¿no vas a montar con Shuya esta vez?” Yo pregunté.

“Cállate. Puedo hacer lo que quiera,” espetó Alicia. “Además, Slowe. ¿Has olvidado el hecho de que eres tú quien tiene la reputación de causar problemas hasta ahora?”

Asenti. “No puedo discutir con eso.”

“—Disculpas, Lord Denning, pero tenemos poco tiempo,” dijo el miembro del personal, cortando nuestras bromas. Seguro que era una cara familiar. Estoy seguro de que le causé problemas unas cuantas veces, entre otras. Pensé. “Necesitamos regresar antes del anochecer. Su Alteza, deberíamos despedirnos.”

Alicia guardó silencio un momento. “Slowe,” comenzó, “hoy sopla un viento feroz en el campus. Deberías ser cuidadoso. Eres bastante obeso, por lo que podrías lastimarte si te tropiezas y te caes.”

“¿Estás segura? Hoy es un hermoso día de verano. No hay viento en absoluto.” Hice una pausa, solo para estar seguro. “No, ni siquiera una brisa.”

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“Bueno, no digas que no te lo advertí, Slowe,” dijo Alicia.

“Sí, sí. Gracias por la advertencia. Lo tendré en cuenta, muchas gracias.

Nos vemos, Alicia.” Habiendo dicho mi respuesta, comencé a trotar de nuevo.

Justo cuando la pasé, alcancé la funda en mi cintura, y—

***

 

 

Un paso. Otro. Y otro.

Con cada paso, Alicia sintió que su ansiedad se transformaba en miedo. ¿Realmente tenía una salida?

Con cada paso que daba en los campos deportivos, se alejaba más de todos en Kirsch. Si seguía caminando, llegaría a un punto sin retorno.Buta Koushaku ni Tensei Shitakara Volumen 1 Capitulo 5 Parte 1 Novela Ligera

 

Por favor.

Por favor, suplicó en su corazón. Por favor, comprende lo que estaba tratando de decir.

A Alicia le robaron la varita. Nunca se había entrenado para el combate y, sin él, no era diferente de una plebeya. Aferrándose a algo casi imposible, Alicia se volvió.

“Parece ser mala para seguir instrucciones incluso fuera de clase, Alteza,” dijo No Face con irritación detrás de Alicia—. ¿No comprende la posición en la que se encuentra? ¿Aunque ella sea de la realeza? pensó con ira.

No Face miró en la dirección hacia la que se dirigió su rehén. Allí estaba el estudiante problemático de Kirsch, y se burló. “Es Slowe Denning. ¿Qué puede hacer el Duque Cerdito? Nada.”

A pesar de eso, Alicia se había vuelto de todos modos. Por favor, suplicó Alicia para sus adentros. Por favor, date cuenta. Deberías saberlo. Usé palabras en código que solo tú entenderías.

Y allí, ante los ojos de Alicia, el chico apuntaba con su varita en su dirección.

Alicia no podía apartar la mirada de la mirada penetrante en los ojos del chico.

Ha llegado el momento de su primera batalla.

“Alicia…” comenzó lentamente. “… retrocede dos pasos.”

No importa dónde esté el escenario, siempre es bueno comenzar el espectáculo con una sorpresa. Cuanto más llamativo sea el primer ataque, mayor impacto tendrá en la audiencia.

Alicia saltó hacia atrás. Al ver eso, el chico hizo un gesto con su varita negra con un movimiento de muñeca.

Un gran muro de tierra apareció con un estruendo ensordecedor, separando a Alicia del miembro del personal. La enorme pared parecía que alcanzaría los diez metros de largo antes de que finalmente dejara de crecer. Sobresaltado por el ruido repentino, el caballo se soltó de las riendas y se alejó a galope con un relincho de pánico. Que un movimiento aparentemente caprichoso de su varita pudiera conjurar un resultado tan increíble rozaba lo milagroso. Esto era magia, el poder otorgado por los espíritus invisibles de este mundo.

“¿Fue capaz de convocar tanta tierra sin pronunciar ni una palabra?” Los ojos de No Face se agrandaron en estado de shock.

Teniendo en cuenta el enorme muro de tierra que apareció ante ella de la nada, su sorpresa fue comprensible. Aunque todavía se estaba recuperando de la conmoción, No Face no era una mercenaria experimentada por nada. Rápidamente, se recompuso, sacó su varita y comenzó a cantar. En respuesta a su llamada, el agua brotó del suelo y cortó la pared diagonalmente en dos. Se derrumbó.

Y así comienza, esta historia de un niño amado por los espíritus y su ilimitado ascenso a la grandeza.

***

 

 

Mi conocimiento de Shuya Marionette no era lo único que sabía sobre este mundo. Tenía recuerdos de cuando conocí a Charlotte en el bosque cuando era joven. Tenía recuerdos de cuando fui elegido heredero de la Casa Denning. Tenía recuerdos de los dos talentosos caballeros que me asignaron y del tiempo que pasé con ellos.

Lo tenía todo—todos mis recuerdos desde el momento en que fui el Prodigio del Viento hasta el momento en que me convertí en el Duque Cerdito de corazón negro y llegué a Kirsh.

Alicia venía a menudo a visitarme y divertirse en las tierras de Denning con el pretexto de conocerme mejor. Cirquista era parte de la Gran Alianza del Sur, y la Casa Denning era lo suficientemente poderosa en Daryth como para arreglar un matrimonio entre su hijo y la princesa de Cirquistan.

La Casa Denning era tan poderosa que teníamos objetivos pintados a nuestras espaldas, el peligro acechaba por todos lados. Dentro de Daryth, muchos intentaron arrebatarnos el poder. Desde fuera de Daryth, muchos países también nos atacaron, y muchas veces, intentaron tentarnos para que declaráramos la independencia de Daryth o abandonemos este país por el suyo.

En este momento, el mundo estaba inquieto, lo suficiente como para que circularan rumores sobre el gran Imperio Dustour en el norte que se preparaba para una invasión. Sabiendo eso, la Casa Denning había hecho todo tipo de preparativos discretos para el día en que se cumpliera ese escenario.

El uso de palabras en clave fue solo uno de los preparativos antes mencionados. A los Dennings a menudo se nos llamaba el Clan del Viento debido a nuestra afinidad con la magia del viento. Por eso, a menudo comparamos a las personas con el viento. Sin embargo, me sorprende que lo recuerde.

Era una mañana tranquila y soleada. No había viento real en ninguna parte. Justo ahora, Alicia había usado la palabra “viento” como palabra clave para una persona.

“¿Ella ya está tan lejos…?” murmuró el miembro del personal, asombrado. Alicia había escapado a la velocidad del rayo. Luego, el personal se volvió hacia mí con furia. “¿Cómo te atreves a meterte en mi camino?,” siseó. Me volví para enfrentar al miembro del personal que había amenazado a Alicia justo ante mis ojos.

“Cometiste un gran error al elegirla como rehén,” le dije. Alicia me dejó muchas pistas en nuestra conversación. No se puede jugar con la heroína principal. Es muy ingeniosa, incluso en situaciones difíciles.

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El miembro del personal hizo una pausa. “Pensé que ustedes dos eran como agua y aceite, pero parece que estaba equivocada.”

Alicia no era una idiota, y yo tampoco. No había forma de que pudiera dejar que el culpable se escapara frente a mis ojos. Después de todo, yo era un Denning.

“No, tenías razón. No nos llevamos bien en absoluto,” bromeé. “Nuestra conversación anterior fue tan extraña que en realidad estoy bastante asqueado.”

Miré a los espíritus oscuros que se reunieron alrededor de la mujer frente a mí. A menos que estés usando un poderoso hechizo oscuro para cambiar tu apariencia, ¡esos espíritus no estarían allí!

“No Face,” declaré su nombre con convicción. “¿No lo sabías? ¡¡¡Alicia nunca pierde la oportunidad de llamarme cerdo!!!”

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