Campione (NL)

Volumen 15

Capitulo 2: Viaje a la Colonia Agrippina

Parte 2

“E-es fácil decirlo para ti…” Con la cara roja, Godou quería negarse, pero la señora Aisha miró con lágrimas en él de una manera suplicante, por lo que realmente era imposible negarse. Godou no tuvo más remedio que dejar de lado la camisa en el hombro de la señora y descubrió un gecko en su omóplato.

Lo recogió casualmente y lo tiró lejos, el asunto ridículo llegó a la conclusión finalmente. “Umm… ahora está bien.” “Mu-muchas gracias.” Pensando en ello después del hecho, este incidente del gecko fue realmente una tormenta en un vaso.

Ante los ojos de Dios estaba el cuerpo desnudo de la señora Aisha, vistiendo nada más que sandalias, lo que significaba que estaba mirando al frente de ella.

Por otra parte, no había una sola nube en el cielo de la noche con el brillo de una clara luna arriba. Bañado por debajo de la luz de la luna, el cuerpo de la señora no era de ninguna manera inferior a una diosa.

A la vista de la fantasía. Además, la piel de oliva perfectamente sin manchas rojas se estaba convirtiendo poco a poco, finalmente, con una sensación de vergüenza…

“¡Kyaaaaaaaah!”

Ella gritó al fin. Entonces, la señora comenzó a gritar de incómoda vergüenza.

“¡Honestamente, Kusanagi-san, estás descartando tu parte delantera seria habitual para comerse con los ojos con esa mirada masculina…! Tal como me di cuenta, estás tan cautivado por mí que no puedes hacer nada, ¿¡no!?”

“Por favor, deja de hablar cosas incomprensibles. ¡Date prisa y ponte algo de ropa!”

***

Después de tomar turnos para vigilar el fuego durante toda la noche, Godou y la señora Aisha fueron recibidos por la llegada de la mañana.

Sin ropa extra para utilizar como mantas, duraron toda la noche contando con nada más que el fuego. No coger un resfriado fue probablemente gracias a la suerte de la resistencia de los Campiones.

Tan pronto como el cielo se volvió con la luz, los dos fueron a lo largo del Rin y regresaron a la carretera.

Después de caminar varias horas aguas abajo, llegaron a un pequeño pueblo. Ahí, compraron cosas como comida y equipo de viaje. Preguntandole a los habitantes del pueblo, se enteraron de que Colonia Agrippina estaba a dos días y medio de viaje en coche.

“La ciudad donde llegamos antes, Aisha-san… Esa fue Mogontiacum, ¿verdad? Me acuerdo que se necesitaba una semana para llegar a Colonia Agrippina desde ella,

¿verdad?”

“¡Bueno, porque llegamos encantadoramente aquí, terminó siendo un atajo!” De hecho, una disfrazada bendición.

La protección de fortuna conferida por la autoridad de la señora Aisha era sin duda muy útil en términos de posibles beneficios. Sin embargo, de ser barrido en los desastres causados por desgracia era algo demasiado…

Después de que la señora compró un abrigo nuevo en el pueblo, los dos reanudaron su viaje. Ya fuera en los tiempos antiguos o modernos, se montaba en los caballos que eran un caro ganado. Por otra parte, este pueblo no tenía caballos para la venta. Así que al final, los dos Campiones decidieron trasladarse a pie.

Godou se enorgullecía de su capacidad atlética y no encontró el caminar difícil en absoluto. A pesar de su apariencia delicada y elegante, la señora Aisha resultó ser sorprendentemente hábil para caminar largas distancias. A pesar de que los dos se llevaban bastante bien a medida que avanzaban a lo largo de su viaje, hubo disputas menores en alguna ocasión.

Al ponerse el sol, la señora Aisha habló incómoda: “D-discúlpame, los chicos y chicas no deben compartir las camas después de la edad de siete años. ¡Vamos a dormir en habitaciones separadas cuando encontremos refugio por esta noche!”

“Está muy bien. Entiendo.”

Naturalmente, Godou estuvo de acuerdo con esta solicitud perfectamente razonable.

Por alguna razón, la señora Aisha fue sorprendida por su respuesta, con la mirada fija en el rostro de Godou. “¿¡K-Kusanagi-san está muy bien con eso!?”

“Por supuesto que no hay problema.”

“U-Um. Al igual que cuando viajamos juntos como un pareja, buscando una oportunidad de hacer una excusa adecuada para dormir en la misma habitación…

¿¡Seguro que no estás albergando ese tipo de intenciones indecentes, Kusanagi- san!?”

“Por supuesto que no. Por favor descansa sin preocupaciones.”

Godou respondió con indiferencia en respuesta a las preocupaciones extrañas de la señora Aisha. ¿Al haber expuesto su cuerpo desnudo la noche anterior colocó estos miedos redundantes en su mente?

“Um, creo que el incidente de la noche anterior fue el resultado de un descuido de nuestra parte. Proporcionalmente hablando, creo que eres el responsable del 60%, Aisha-san…”

“Oh… Bueno, aunque no puedo negar que yo estaba gritando en voz bastante alta…”

Sin embargo, sólo se dio cuenta de eso después de caminar más lejos. Esta zona no parecía tener ningún hogar para que ellos buscaran refugio. Por lo tanto, el par acampó al aire libre de nuevo.

Aún así, las cosas fueron mucho más suaves que la noche anterior. No sólo tenían indumentaria de viajes para reemplazar lo que habían perdido, sino que también alimentos deliciosos y portátiles recién comprados. Por supuesto, el riesgo de bandidos aún existia pero teniendo en cuenta las autoridades de la señora Aisha, podrían escapar fácilmente de las trampas de los humanos, por lo general. Por lo tanto, esa noche…

En un claro lejos de la carretera, los dos comenzaron a acampar. Frente a Godou quien estaba sentado junto al fuego,

La señora Aisha murmuró con inquietud:

“U-Um, Kusanagi-san, ya que no hay ningún muro para separarnos, no vas a hacer nada de pudor, ¿verdad?” “Por supuesto que no.”

“Porque soy una chica después de todo. Si vas a abrazarme con pasión, Kusanagi- san, susurrando palabras dulces al oído en tu forma habitual, con la intención de robar mis labios, aunque podrías acabar siendo un poco excitado, eso es completamente inaceptable, ¿¡Lo entiendes!?” (Que le da color, cuando ya se pone tan cargante pareciera que lo estuviera pidiendo indirectamente…)

“Nunca he tenido la costumbre de hacer algo como eso en primer lugar.”

“En realidad, ¿a pesar de pasar tus días como de luna de miel con Erica-san y Ena- san?” “¡Eso no es como son nuestras relaciones!”

Encontrando las probabilidades bastante apiladas contra él en esta conversación, Godou cambió de tema.

“Además, ¿no eres más de ciento cincuenta años mayor que yo, Aisha-san? Normalmente, susurrarle palabras de amor a alguien como eso no es posible,

¿verdad?”

“¡S-se supone que se dice ‘el amor no conoce límites en la edad’ en una situación como esta, Kusanagi-san!” “No… yo creo que hay una brecha generacional.”

“¡En serio! Me haces sentir una vieja bruja o algo… Permítame dejarlo claro. ¡Por no hablar de un siglo y medio, ni siquiera he llegado a la mitad de esa edad todavía!” (Vieja, corta xd)

La señora Aisha levantó indignadas objeciones inesperadas. “Al regresar a la época actual, hubo muchas ocasiones en las que salté durante décadas.” “… ¿Saltaste décadas?”

“En una ocasión, después de pasar tres meses en el pasado, regresé al presente utilizando el pasillo para encontrar que ásperos treinta años ya habían transcurrido.” “!?”

“Por el contrario, hubo un momento en que ni siquiera dos días habían pasado en el presente a pesar de pasar dos años en el pasado.” Urashima Taro, Rip Van Winkle, esa parábola china de un sueño transitorio…

Los viajes de la señora Aisha a través del tiempo eran tan increíbles como los lugares visitados en esas historias. Entonces Godou se sorprendió. ¿Qué pasa si un siglo hubiera pasado cuando regresara al mundo moderno? entonces tendría una experiencia surrealista como la de Taro Urashima…

Las esperanzas de vida llevadas de todos los que conocía, todas pasando… Sin embargo, la señora Aisha le dijo simplemente a Godou:

“Bueno, siempre y cuando se inyecte una gran cantidad de poder mágico en el pasillo durante el retorno, es posible controlar el paso del tiempo a varias décadas o unos pocos días más tarde, hasta cierto punto.”

Al enterarse de eso, Godou dio un suspiro de alivio.

“… Si es posible ajustarlo, ¿por qué regresaste a treinta años más tarde?”

“¡P-porque si yo no lo hubiera hecho, habría terminado con la edad real de una anciana a pesar de ser de treinta años en los registros oficiales!” “Deliberadamente convertiste a Taro Urashima por tu propia voluntad…”

Eso sería como el establecimiento de un viajero del tiempo en el año 1999 y luego intencionalmente “volver” diez años más tarde en 2009 para evitar que otras personas lo llamaran prematuramente envejecido. ¿Qué clase de historia épica de ciencia ficción era esta…?

Por otra parte, la señora Aisha era un Campione. Dada su constitución sobrehumana, su cuerpo lo más probablemente que sería en verdad muy juvenil. Al parecer, los cuerpos de las magas envejecían mucho más lento que el de los magos.

Más aún para los Campiones. Su hermana mayor jurada, Luo Cuilian, era un buen ejemplo. “Si ese es el caso, tengo curiosidad por algo.”

“¿Qué es?”

“Si tuviera que decirlo, Aisha-san, ¿cuántos años tienes? No tu edad de acuerdo con registros oficiales, sino el tiempo real que has vivido.”

Esta fue una pregunta un poco de mala educación, por lo que Godou intentó pedirla sin mucha expectativa. “Um, nunca he intentado calcularlo correctamente…”

“Una estimación está muy bien. ¿Estás más o menos entre los cuarenta o cincuenta?” “. ” “Oh, por supuesto, no voy a obligarte a responder.” “. Di-diecisiete.”

“¿Eh?”

“Mi edad física y mental es de diecisiete años de edad.”

“Espera un segundo, eso es un número imposible no importa qué.”

“Sin saber nada de mi vida, Kusanagi-san, estás en condiciones de rechazarlo. ¡Si digo que tengo diecisiete años de edad, entonces eso es al final!” (VIEJA xd)

“Entonces eso me haría contemporánea ” “¿¡C-cualquier objeción a eso!?”

En cualquier caso, no hubo ningún otro pasatiempo durante su viaje, aparte de hablar. Antes de que se dieran cuenta, los dos estaban profundamente dedicados a la conversación. Pero entonces, de repente dejaron de hablar al mismo tiempo. Un hedor distintivo e inusual iba a la deriva sobre ellos, llevado por la brisa de la noche. En comparación con los malos olores de los animales en los zoológicos, esto era aún más intenso.

“¿Hay un rancho cercano? Cría de cerdos o ganado.” “Tal vez, supongo ” La respuesta de la señora Aisha fue muy simple.

Pero de hecho, incluso Godou no creía en su propia especulación. A pesar de que no había pruebas, en todo caso, lo único que tenía era una sensación de que este inusual hedor era una mala señal de algo desfavorable por venir. Por alguna razón, eso era lo que él pensaba.

Godou se levantó en silencio y se fue contra el viento. La señora Aisha siguió en silencio también.

Estaban sentados en una llanura cubierta de hierba. Subiendo una pequeña colina frente a ellos, Godou y la señora Aisha se quedaron sin habla. En el otro lado de la colina, sesenta osos se movían.

Todos los osos se movían en una dirección.

Como ovejas tras un pastor, los osos venían hacia Godou y Aisha como si cabalgaran sobre el viento. También había algo más sorprendente. Sin excepción, cada oso era masivo, de aproximadamente dos metros de longitud corporal. De vez en cuando, había osos aún más grandes, de cuatro a cinco metros de largo y tan grandes como pequeñas colinas.

“Aisha-san, umm, estos no son osos normales en esta época, ¿verdad?” “Lo dudo, no importa cómo se mire…”

Todos los osos parecían muy emocionados y mostraban ojos feroces. Sin embargo, ni un solo oso se metió en una pelea con cualquiera de sus parientes circundantes.

Eran como gángsters yendo a una pelea grupal. Un contingente humano apareció en frente del avance de los osos, más o menos un ochenta por la numeración. Todos los miembros estaban armados con espadas, lanzas, hachas y escudos o similares, les dispararon a todos y listos para matar.

“Oh querido, ¿Quiénes podrían ser estas personas?”

“La forma en que lo veo, se ven como gángsteres antes de iniciar una pelea.” Después de murmurar eso, Godou se dio cuenta de que su impresión era correcta.

Los hombres armados de repente sacaron sus armas y comenzaron a cargar hacia el ejército de osos con un gran grito de guerra. “¿¡Ehhh!?” Demasiado imprudente. Godou se sorprendió.

El lado humano consistia en caucásicos con un gran y alto físico. Su equipo les hizo temblar. Todos ellos tenían el pelo de color claro y casi todos tenían peinados extraños. En la parte superior de la cabeza, su pelo estaba recogido en “moños”.

“Son probablemente los francos.” “¿¡De verdad!?”

“Sí, ese peinado debe ser parte de las costumbres de los francos.”

La señora Aisha señaló al grupo armado que estaba comenzando una batalla en la colina.

En primer lugar, tiraron hachas de mano hacia los osos cercanos. Entonces, cuando las bestias esquivaron, utilizaron armas como lanzas y espadas para atacar. Muchos de los guerreros francos lanzaron primeros ejes que luego cambiaron a combates a corta distancia. Sus costumbres eran probablemente tan extrañas como sus peinados.

En general, más que imprudentes, los guerreros francos se describían mejor como valientes. Enfrentado a un ejército de osos que les superaban en fuerza y tamaño, todavía lucharon valientemente.

Algunos de los osos estaban sobre sus patas traseras y utilizaron sus extremidades anteriores para golpear a los guerreros francos. Usando garras afiladas para desgarrar a los enemigos, otros osos golpearon con fuerza en las inmediaciones de los francos a lo lejos y fácilmente los cortaron.

Sufriendo los ataques de las bestias salvajes, el campo de batalla pronto se llenó de sangre y gritos.

Sin embargo, hubo muy pocos francos que lograron esquivar los ataques y utilizar sus escudos para defenderse con los compañeros guerreros que iban a la ofensiva. Usando hachas y espadas para cortar a través del ejército de osos, los supervivientes comenzaron a contraatacar. Además, hubo otros que atravesaron osos con lanzas y flechas disparando desde una distancia.

Cuando la batalla comenzó, Godou había esperado que los francos perdieran miserablemente. Pero inesperadamente, la marea había cambiado a una batalla en igualdad de condiciones. A pesar de que los francos no eran expertos en artes marciales como Erica o Ena, estos antiguos guerreros empuñaban armas antiguas magníficamente para enganchar a las bestias feroces en la batalla.

“Hablando de eso, los anfiteatros romanos tenían gladiadores derrotando a las bestias feroces…” Godou recordó lo que había oído desde Erica.

Los artistas marciales que luchaban contra osos desarmados, probablemente sería suicida, pero dadas las lanzas, escudos, redes y otros equipos, los humanos tenían posibilidades muy bien incluso de ir en contra de leones como oponentes. Los gladiadores antiguos se presentaron como evidencia de ello.

Pero en este caso, el ejército de osos incluía a masivos gigantes más allá de los parámetros normales.

Estos eran los cuatro osos de cinco metros de largo que eran tan grandes como pequeñas colinas, sumando un total de seis. Como era de esperar, los francos fueron incapaces de mantener sus posiciones en contra de estas bestias. A medida que la batalla se desesperaba, más y más bajas dieron como resultado. Godou frunció el ceño. Si salvar las vidas humanas o proteger a los animales, no podía comprometerse activamente a cualquiera.

“¡Kusanagi-san, iré a detener esta batalla!” “Entonces voy a ir también” Del mismo modo que asintió en respuesta a Aisha, Godou vio.

Entre los francos, había varios hombres que custodiaban carros tirados por caballos en la parte trasera en lugar de tomar parte en la batalla. Uno de los hombres estaba caminando tranquilamente hacia el punto más intenso en la batalla.

En el camino, fue atacado por un número de osos gigantes.

Cada vez, cortó las garras y dientes de los osos gigantes que atacaban y luego continuó avanzando. Al igual que el suave descenso de los pétalos de flor, su cuerpo ágil hizo movimientos simples para evadir a las bestias feroces. Con sólo mirarñp, éstos eran claramente los movimientos que no eran posibles sin un dominio avanzado de las artes marciales.

Había un enorme oso en especial en el lugar donde se dirigía. Los francos luchando vigorosamente se retiraron tan pronto como se dieron cuenta de su llegada. Es probable que tuviera la intención de permanecer fuera de la batalla como [Rey].

Casualmente llevando una espada a la cintura, el hombre se acercó a uno de los osos más grandes.

Era un oso gigante con una longitud corporal de cuatro a cinco metros. Si se colocara de pie sobre sus patas traseras, el oso sería de un solo piso. Tomando pasos pausados, el hombre se acercó a esta bestia feroz.

De hecho, él estaba caminando con tanta naturalidad como si estuviera de visita en la casa de un amigo. Luego vino un destello de la espada.

Incluso la visión dinámica de Godou combinada con el enfoque de un exterminador de dioses no pudo capturar el balanceo de su espada con claridad. Por otro lado, una oscilación de la espada acabó cortando el cuerpo gigante del oso en dos.

Cortando desde la cabeza hasta la rabadilla en una línea vertical, el oso fue definitivamente dividido en dos por un solo ataque.

Como nota al margen, el oso masivo no derramó una sola gota de sangre. Es de suponer que no es una criatura de este mundo, era un ser más parecido a una bestia divina. Entonces, el joven utilizó la misma técnica para hacer cinco cambios de su espada.

Los osos gigantes restantes fueron divididos en dos mitades y al instante aniquilados. “- !?”

Por el lado de Godou, la señora Aisha se quedó sin aliento.

Ella debió haberse sentido conmocionada por la escena y se dio cuenta de la verdadera identidad del hombre. “Ese tipo Doni está por allí. Pasaré a echar un vistazo en primer lugar.”

Dicho esto, Godou bajó la colina. A pesar de que sabía que la señora Aisha estaba siguiéndole detrás, él no apartó la mirada del hombre en absoluto.

EL que mostró algo como la esgrima y esencia de la espada mágica fue un joven rubio. Salvatore Doni, por supuesto. Había llegado a esta antigua época hace un par de meses. Su vestimenta también pertenecía a esta época. Usando ropa similar a una camiseta, su sencilla vestimenta incluía un cinturón y pantalones estrechos en la parte inferior con un abrigo marrón en la parte superior.

Sólo sus botas todavía eran los zapatos de cuero que le gustaba usar en el presente.

Como era de esperar, esta forma de vestir facilitaba el movimiento. Una espada colgaba desde su cintura.

Las espadas en la antigua Galia eran en su mayoría con una sola mano con empuñaduras cortas. Sin embargo, la espada de Doni tenía una larga empuñadura y parecía que podría ser ejercida ya fuera con una mano o dos. Esto era probablemente un articulo que había traído a lo largo del presente.

Al darse cuenta de que Godou se acercaba, Doni sonrió alegremente. “Ah, eres tú, Godou. Siento que ha pasado un tiempo.”

“Por supuesto, has estado aquí tres meses ya, ¿verdad?” Suspirando, Godou respondió.

Por otra parte, aunque los osos gigantes fueron eliminados, decenas de osos normales todavía permanecieron.

Sin embargo, estos osos de repente dejaron de luchar con los francos y se calmaron. Parecía que habían perdido el interés y la hostilidad hacia los seres humanos, como si fueran exorcizados de una posesión demoníaca.

Alejándose de forma independiente, los osos casualmente se dispersaron.

Era como si se estuvieran moviendo de nuevo al bosque, después de haber terminado su tarea. Al ver a los enemigos retroceder, los guerreros francos supervivientes vitorearon victoriosamente.

¡Ohhhhhhhhhhh! ¡Ohhhhhhhhhhh! ¡Ohhhhhhhhhhh!

Bajo el cielo de la noche, la llanura resonaba con las voces de hombres guerreros.

“He escuchado mucho sobre ti. Ser el jefe de los francos y desafiar a Uldin de los hunos a una futura pelea y todo eso.” “Oh, así que también te has reunido con el asesino de dioses de esta era.” “No sólo eso, incluso he conocido a alguien de nuestra era…”

La señora Aisha no estaba cerca de Doni y Godou. En cambio, estaba yendo y viniendo entre alrededor de los francos heridos que yacían en el suelo. Con el fin de curarlos, se precipitaba sobre todo el lugar.

Aparte de la muerte inminente, todas las lesiones se podrían curar rápidamente, no importaba qué tan grave fueran. Este era el efecto de la autoridad de la señora.

Viendo esta escena, Doni dijo “Ya veo” y sonrió. Él era bastante agudo en estos asuntos.

“Como era de esperar de mi querido amigo, Godou. ¿Cuándo te enteraste de la señora Aisha? Ella realmente es bastante fuerte, ¿verdad?” “No es para nada fuerte en el sentido del que estás hablando. Además, deja de añadir esas descripciones en la parte superior de mi nombre.” Las cosas se saledría de las manos si el apetito de Doni para la batalla se disparara hacia arriba. Por lo tanto, Godou le refutó con firmeza.

Sin embargo, Godou no consideró a la señora “débil”. Lo terrorífico de la señora Aisha era probablemente una dimensión completamente diferente en comparación con la lucha con espadas.

¿Doni se dio cuenta de lo que Godou estaba pensando? En una rara muestra, que estaba mirando a esta mujer con ojos llenos de curiosidad. Pero de repente se echó a reír y se volvió hacia Godou.

“Cierto, Godou, aunque hay mucho que quiero hablar, ¿podrías por primera vez acompañarme a hacer algunas tareas triviales?” Entonces Doni desvió la mirada hacia la colina, el lugar donde Godou estaba hace un momento.

Godou miró en esa dirección y se encontró con la sorpresa. Sin que se enterara, nuevos oponentes se habían reunido en la colina. Al igual a los que Doni había masacrado antes, había un ejército de osos gigantes grandes como casas.

Esta vez, había una treintena de ellos. Estos animales fueron dispuestos en una fila en la colina, moviéndose de esta manera. Más exactamente, estaban brutalmente mirando hacia abajo a Salvatore Doni.

Sin embargo, de pie detrás de los osos masivos había un monstruo aún más grande.

Alrededor de treinta metros de longitud completa, asemejado a un búho de extremidades gruesas, pero en lugar de alas, eran garras. Parecía una especie de híbrido búho-oso.

Al ver este tipo de búho-oso que uno definitivamente no podría encontrar en una enciclopedia de animales, Godou murmuró: “Se siente como un señor de la selva de algún tipo de anime…”

EL búho-oso se puso de pie sobre sus patas traseras, con su aspecto tan solemne como un dios.

Muy claramente una bestia divina. La espalda de Godou se sacudió al sentir que su cuerpo se llenó de poder para luchar. Al ver esto, Doni sonrió a su lado.

Mientras tanto, los francos circundantes fueron enviados en un pánico ante la visión de la gigante bestia divina.

Los guerreros gritaban de terror, sus cuerpos temblaban mientras que huían con armas en la mano, lo que resultó en un gran caos. A pesar de que habían luchado valientemente en el campo de batalla, no fueron capaces de suprimir su temor por el monstruo desconocido.

La señora Aisha también analizó a la bestia divina con una expresión de sorpresa. “¡Puedes manejar al gran monstruo, Godou! ¡Voy a encargarme de los más pequeños!” “No te limites a volcarle tareas molestas a los demás!”

Refunfuñando, Godou veía seriamente al gigante búho-oso.

Él no estaba obligando a Doni con su humor. Sin embargo, vacilar aquí sobre si luchar o no pondría a la señora Aisha y los francos en riesgo. Por otra parte, esa presencia que sintió justo ahora-

“¡Un ataque de brazos largos!” Doni balanceó su espada larga ampliamente en un arco horizontal con una extrema velocidad.

Entonces, la [Espada Mágica Severa] radió luz de color plata liberada desde el borde de la hoja.

Esta luz trazó una magnífica línea horizontal en la oscuridad de la noche. Alineados en una fila, el ejército de osos gigantes en la colina fue tratado en un solo golpe.

Treinta enemigos fueron completamente bifurcados en sus cinturas.

La colina era de unos cincuenta metros desde su ubicación. Que acto aterrador de la divinidad. Por otro lado, Godou no perdió el tiempo junto a Doni.

“¡Los pecadores indespuntados e inaccesibles! ¡Al romper el juramento seran purgados por el martillo de hierro de la justicia!” Al cantar las palabras de hechizo, convocó al [jabalí].

Naturalmente, el objetivo era el núho-oso de treinta metros de largo.

Con la piel de tono negro y una longitud de veinte metros más o menos, el jabalí gigante perdió mucho en tamaño. Sin embargo, el avatar de Godou no se intimidaría fácilmente.

¡ROOOOOOOOOOOAAAAAAAAAAAAR!

Aullando como de costumbre, el [jabalí] cargó a toda velocidad. Golpeado por las pezuñas, el suelo retumbó cuando la bestia al instante se precipitó por la colina verde. ¡Usando los colmillos de su boca como lanzas, cargó para crear una colisión!

Por el contrario, el búho-oso se puso en pie sin moverse, como si tratara de mostrar la inmovilidad de su cuerpo masivo.

¡ROOOOOOOOOOOOAAAAAAAAAAAAAR!

El búho-oso aulló, así, bloqueando la cabeza del [jabalí] como una red gigante. Las dos enormes bestias divinas se enfrentaron cara a cara.

El resultado fue la victoria del poder del [jabalí] y el impulso.

El jabalí gigante enterró sus colmillos profundamente en el pecho del búho-oso, audazmente empujando hacia abajo a su presa. Soportando la masa de las dos bestias divinas, el suelo retumbó en gran medida y se sacudió violentamente. Con eso, el búho-oso fue exterminado. El [jabalí] rugió victorioso.

¡ROOOOOOOOOOOOOAAAAAAAAAAAAAAR!

A pesar de ello, Godou todavía frunció el ceño. Había previsto una lucha mucho más dura. El maestro del enemigo todavía debía estar cerca y Godou había esperado a que un más poderoso Dios hubiera convocado a la bestia divina.

“Debido a las lesiones, el enemigo se ha vuelto prudente”.

Doni echó una mirada hacia él, provocando la ira de Godou ligeramente.

Se sentia inexplicablemente exasperante escuchar con Doni hablando en este momento, como si hubiera leído la mente de Kusanagi Godou. Poniendo a un lado este asunto, Godou miró hacia la colina de nuevo.

Aún intoxicado en el resplandor de la victoria, el [jabalí] rugió hacia la luna.

Pero en el instante siguiente, un humo verde fue lanzado desde el suelo. Inhalando el gas, el [jabalí] de repente comenzó a toser violentamente.

El humo verde rodeó el cuerpo negro gigante. El [jabalí] tosió aún más intensamente. “¡Kusanagi-san, es niebla venenosa! ¡Esto va a ser muy peligroso si continúa!”

La señora Aisha habló desde su lado.

Como era de esperar de alguien capaz de utilizar una autoridad de curación, al instante discernió lo que era. Por otra parte, el enemigo era bastante astuto, orientándose de la abertura del [jabalí] cuando era descuidado de la alegría de la victoria.

“¡Eso es suficiente, date prisa y desaparece!”

Godou le ordenó al [jabalí] que estaba a punto de asfixiarse por la tos.

La bestia divina de tono negro al instante desapareció. Probablemente siguió las órdenes de manera obediente, porque ya había vencido a su objetivo. El ejército franco también comenzó a retirarse del campo de batalla.

Con monstruos gigantes apareciendo uno tras otro, el miedo ya había llegado a un límite. Por otra parte, los tres asesinos de dioses restantes…

“Es hora de que te muestres, ¿verdad?” Godou casualmente llamó al oponente oculto.

Entonces, una belleza de pronto hizo su aparición. De fuerte constitución, mirando bruscamente, exudaba soberbia de una reina y solemnidad. Llevaba ropas simples similares a prendas interiores con una piel en la parte superior.

Una piel de profundidad de color marrón rojizo, parecía que había desollado un oso junto con su cabeza. Además, llevaba el rostro de la difunta bestia feroz en su cabeza como una corona.

Godou sabía con certeza. La diosa ante sus ojos se llamaba la “Reina de las Bestias”.

La mente y el cuerpo de cada Campione entrarían en un estado de preparación de batalla cuando se enfrentaran a una deidad.

Debido a sentir la oleada de poder en previsión de batalla desde hace un tiempo, Godou ya sabía que iba a aparecer. “A decir verdad, todavía estoy dudando incluso ahora…”

La diosa bestia murmuró suavemente.

“Aunque ya puede ser irritante, un buen número de asesinos de dioses siguen existiendo en este mundo. Uno de ellos incluso fue tan lejos como para infligir lesiones así de pesadas sobre mí… Con este cuerpo herido, cobrar venganza no será una fácil tarea…”

Aparte de la piel, su atuendo era básicamente de ropa interior, por lo que estaba claro al verlo inmediatamente.

El pálido abdomen de la diosa se vio empañado por una larga laceración. Roja- negra y ulcerada, la herida se veía muy dolorosa. Debía ser una lesión muy grave.

“Sin embargo, esto no es suficiente para permitir que una diosa de la tierra forje esa cierta hoja. No en la causa de nadie más que mi propio orgullo que prohíbe de modo. De ahí mi duda. Por otra parte, los preparativos están aún por estar listos…”

En este momento, la diosa dirigió su mirada penetrante hacia Godou y el resto.

Después de mirar a Salvatore Doni, Kusanagi Godou y la señora Aisha en secuencia, ella negó con la cabeza como si estuviera preocupada por un dilema. Al final, ella murmuró con resignación:

“Por otro lado, el hecho de que las cosas han llegado a esto no se puede evitar. Dado que los asesinos de Dios se han incrementado en dos, es necesario que me decida en soportar las aguas que contaminan mi herida… Tengan cuidado, dioses asesinos. Abominables Reyes Rakshasa”.

La diosa bestia habló en voz baja. De repente, ella reveló una suave sonrisa. “En nuestro próximo encuentro, los guiaré ante mi hijo. Él es la existencia enviada por los cielos para vencerlos a todos ustedes.”

A pesar de pronunciar claramente una sentencia de muerte hacia Godou y los otros Campiones, el tono de voz de la diosa era muy tranquilo.

Era como si estuviera de luto por la muerte de algunos de estos formidables adversarios.

“Tarde o temprano, el hijo de la diosa Artio se manifestó ante todos ustedes. Tiemblen todo lo que quieran cuando llegue el momento…” Dejando atrás estos susurros, como una canción, la diosa de repente desapareció de su vista.

De esta manera, Kusanagi Godou se encontró con una [Diosa Hereje] en la antigua Galia.

Ella fue llamada la diosa de artiodáctilos. Este encuentro levantaría el telón para una nueva batalla que no se suponía tendría lugar.