Ore dake Ireru Kakushi Dungeon (NL)

Volumen 6

Capítulo 2: Conversión De Artículos

Parte 1

Tenía el día libre, así que me tomé mi tiempo para levantarme de la cama. Cuando desperté, escuché a mi padre gritar afuera.

“¡Noooooor! ¡Ven abajo! ¡Apúrate!”

Gruñí y bajé las escaleras. Cuando salí, mi padre estaba de pie junto a una enorme pila de cadáveres de jabalíes gigantes. Parecía que estaba en estado de shock. ¿Qué demonios…?

“¿Los cazaste, Noir?”

“¿Yo? No. ¿Tal vez Tigerson?”

“Fue temprano a la tienda con tu madre y Alice. No creo que haya sido él.”

Lo que convertía a Olivia en la culpable más probable. Me dirigí de nuevo adentro y la encontré tomando té en la sala de estar.

“Ese fuiste tú, ¿no? ¿Qué estás haciendo con todos esos monstruos?”

“¡Ah ha ha ha! Maté a demasiados. Pensé que podría usarlos para devolverte el dinero, considerando todo el asunto de la casa y todo.”

“Bueno, puedo vender sus partes en la tienda, así que al menos debería agradecerte por eso”.

Pero mi padre estaba actuando un poco extraño. “¡Lady Olivia, déjamelo todo a mí! Noir, ¿te importa si se los vendo a un amigo?”

“Bien por mí. Simplemente no regales la granja”. “¡Te amo, mi querido niño!”

Una vez que se fue, le pregunté a Olivia algo que me rondaba por la cabeza. “¿Estás planeando volver a la mazmorra oculta?”

“Mmm. Estoy un poco aburrida con eso para ser honesta. Puedes hacerlo por mí.”

“Está bien, bueno, me iré entonces”.

“Solo prométeme que no harás ninguna tontería, ¿de acuerdo?” ella dijo. “Voy a dormir todo el día”.

¿Ya se iba a la cama? Ella debe haber estado cansada.

Me cambié de ropa y me dirigí a la mazmorra oculta, tomándome un momento para verificar mi estado.

Nivel: 182

Armas Actuales: Espadas de Dos Filos (Filo Afilado, Buena Suerte); Lanza Perforante (Perforante); Escudo de Campeones (Duradero, Resistencia al Fuego de Grado A, Resistencia al Agua de Grado A, Resistencia al Viento de Grado A); Mazo sin Nombre (Trituradora de Piedra); Arco Encantado del Progreso (Tiro Con Arco Mejorado); Shockwave Morningstar (Onda de Choque)

Habilidades: Gran Sabio; Ser creativo; Otorgar; Editor; Conversión de LP; Conversión de LP (Dinero); Conversión de LP (Artículos); Bala de Piedra; Llama Sagrada; Relámpago; Trueno; Gota de Agua; Tempano; Bola de Hielo; Luz Cegadora; Esquivar Espigado; Corte de Energía; Esgrima (Grado C); Flecha Explosiva; Lanzamiento (Grado B); Salto (Grado A); Alquimia (Grado B); Ojo Perspicaz; Ojo Perspicaz para los Artículos; Agudeza Visual Variable; Dimensión de Bolsillo (Grado C); Ascensor de Mazmorras; Matanza; Exorcismo; Excavar; Estocada Mejorada; Paso Lateral Mejorado; Paso Atrás Mejorado; Defensa Pasiva; Fusión Mágica; Desodorizar; Afortunado Pervertido; Masaje de Hombros; Visión Nocturna; Perseguidor; Inmunidad al Dolor de Cabeza; Resistencia al Veneno (Grado A); Inmunidad a la Parálisis (Grado C); Resistencia al Calor (Grado A); Inmunidad a la Petrificación (Grado A); Recuperación de Condiciones Anormales (Grado C); Inmunidad al Efecto del Estado Mental (Grado C); Coraje; Protección Auditiva; Bailando; Buceo; Respiración Cero

¿Me había convertido en un acaparador de habilidades? Verlo todo dispuesto así me hizo dudar. Yo también tenía 7200 LP. También tuve tiro con Arco de Grado S en un momento, pero lo sacrifiqué en la lucha contra las Cadenas de la Muerte para hacerme más fuerte. Podría haberlo hecho de nuevo, pero la idea de gastar 3500 LP era demasiado dolorosa. Tal vez cuando tuviera más LP de sobra, lo reconsideraría.

Usé mi Ascensor de Mazmorras para ir directamente al decimoquinto piso. El familiar aire frío rozó mi piel. Estaba en una habitación larga y estrecha con paredes grises y suelo gris oscuro. Era una zona muy sencilla. Una vez hubo una gran estatua en la parte de atrás, pero había sido destruida cuando luché contra las Cadenas de la Muerte, revelando las escaleras detrás. Por supuesto, la copia de mi maestro que había estado unida a las cadenas también se había ido. Me dirigí hacia abajo.

El decimosexto piso parecía casi elegante con su pulcro corredor revestido de ladrillos. Fue un tiro directo, y pude escuchar a una mujer cantando desde el otro lado. Fue hermoso, y cuando escuché, me di cuenta de que no era solo una voz. Varias personas cantaban por turno.

“¿Qué canción es esa?”

Continué por el pasillo, cauteloso de que pudiera ser una trampa. Eventualmente, me encontré en una habitación grande con cuatro mujeres. Todos llevaban vestidos y parecían tener veinte años. Todos tenían rasgos similares, pero sus colores de piel eran todos diferentes: claro, oscuro, bronceado y uno con una palidez casi azulada.

Las cuatro mujeres se volvieron hacia mí al unísono, pero no sentí hostilidad por su parte. Todo lo contrario, de hecho. Todas me sonrieron.

“Ooh, un chico lindo”.

“Vamos, ahora, es de mala educación decir eso”.

“Sí, debe ser muy fuerte para haber llegado tan lejos”. “¡Tenemos mucho amor y respeto por ti~!”

Casi cantaron en lugar de hablar. Había algo extraño en ellos, pero mi Ojo Perspicaz no funcionó en ellos, lo que significaba que debían haber sido creados por la mazmorra.

“Si desea continuar más allá de este punto, debe elegir a una de nosotras para que lo acompañe”, dijo la bronceada, sonando relajada. “Somos las Cuatro Sirenas. Yo soy la mayor, y canto canciones de destrucción.”

“Soy la segunda hermana y canto canciones de sanación”. “Yo soy la tercera, y canto canciones de protección”.

“Y yo soy la cuarta. Canto canciones de aliento”.

Un patrón familiar. Cualquiera de ellas podría traicionarme en cualquier momento, pero teniendo en cuenta cómo solían ser estas cosas, necesitaba elegir uno antes de poder continuar.

“Entonces iré con la tercera hermana, ya que soy el tercer hijo”.

Además, la protección definitivamente sonaba útil. Y quería tomar decisiones rápidas y decisivas en lugar de preocuparme por cada pequeño detalle.

“Gracias por elegirme. Cantaré mis mejores canciones de protección para ti”.

“Mi nombre es Noir. ¿Y el tuyo?”

“No tengo nombre. Puedes simplemente llamarme la Tercera.”

¿La tercera? Seguro que sonaba incómodo. Tuve que preguntarme si sus personalidades diferían de alguna manera significativa. Las otras no parecían particularmente molestas porque no los había elegido.

“Deberíamos irnos. Hermanas, es hora de la canción de despedida”. “¡La la la la la la~!”

Las tres hermanas restantes cantaron una canción conmovedora y animada. Sus voces eran hermosas. Removieron sentimientos de felicidad, tristeza y patetismo, todos mezclados. Me levantó el ánimo. No es de extrañar que los cantantes fueran tan populares.

Tal vez debería empezar a practicar en secreto.

Mientras avanzábamos, me aseguré de mantener medio paso detrás del Tercero, solo para estar seguro. Hubiera sido extremadamente feliz si resultaba ser una buena chica, como Dory del séptimo piso, pero aún había una buena posibilidad de que fuera una enemiga. De repente, el pasaje se volvió más complicado.

“Noir, te protegeré, así que espero que me devuelvas el favor”. “Me imagino que no podré llegar al siguiente piso si no lo hago”. “Te imaginas correctamente”.

Parecía que sabía dónde encontrar las escaleras. O eso o ella era la única que podía abrirles el camino. Tal vez elegir a la hermana que cantaba canciones de protección había sido la decisión correcta.

“¡Que tu cuerpo se vuelva tan duro como el acero y robusto como el de un ogro!”

Su voz era más que agradable: podía sentir mi cuerpo cada vez más fuerte. Eso fue muy bienvenido.

Avanzamos por el pasillo, dando vueltas aquí y allá, hasta que algo hizo clic bajo mis pies.

“Oh, no, no me digas…” “Mira.”

La Tercera señaló el pasillo, donde los ladrillos se estaban desprendiendo de las paredes. Flotaban en el aire, casi como si tuvieran una mente propia. Tenía razón, ¡era una trampa! Los ladrillos hostiles se lanzaron hacia nosotros. A pesar de su gran número, todos y cada uno de ellos estaban dirigidos directamente a la Tercera.

“Me voy a morir si no haces algo”. Su tono era inhumanamente tranquilo, casi desprovisto de emoción.

“¡No voy a dejar que eso suceda!”

Salté frente a ella y saqué el Escudo de Campeones de mi Dimensión de Bolsillo. Era lo suficientemente grande como para que yo pudiera caber cómodamente detrás de él mientras los ladrillos resonaban inofensivamente.

“¿Estás bien?” Yo pregunté. “Sí, estoy ilesa. Sigamos.”

Continuamos nuestra búsqueda.

“¿Entonces tu canción de protección no tiene ningún efecto en ti?” Yo pregunté.

“Ninguno en absoluto. Para empeorar las cosas, soy bastante frágil”.

Sería mejor asumir que incluso un solo ladrillo la mataría. Recorrí varios escenarios en mi cabeza, debatiéndome si sería más sensato otorgarle una habilidad para mejorar su defensa o si sería mejor darme algo a mí mismo. Sentí que dependería de la situación, aunque lo ideal sería bueno si las cosas se mantuvieran más o menos así hasta las escaleras.

“Dobla la siguiente esquina y sigue recto. Encontrarás una habitación. Las escaleras están escondidas allí.”

“¿Hay monstruos ahí dentro?”

“No lo sabría”.

En otras palabras, lo mejor es asumir que la respuesta fue sí.

Había un espacio abierto al final del pasillo, tal como había dicho la Tercera. Pero no había puerta, y las escaleras no se veían por ninguna parte. Era solo un espacio vacío, bueno, aparte de los ladrillos que comenzaron a despegarse de la pared cuando entramos. Probablemente era el mismo tipo de trampa que antes.

Me moví frente a la Tercera para protegerla, pero al final, fue innecesario. Los ladrillos pasaron volando junto a nosotros y comenzaron a amontonarse en la entrada. Momentos después, habían cerrado todo el espacio. Parecía que no iba a ninguna parte hasta que borré el nivel. Por supuesto, siempre podría usar mi Ascensor de Mazmorras si lo necesitara, pero primero quería esperar y ver qué pasaba.

¡Bang, bang…bang! ¡Bang!

Sonaba como si algo estuviera atacando la pared del fondo. Las piedras eran resistentes, pero no pasó mucho tiempo antes de que se abriera un agujero. Era demasiado pequeño para una persona adulta, pero más que suficiente para un goblin.

Ocho de ellos entraron, uno tras otro. Todos eran bastante pequeños, de alrededor de un metro de altura, y sostenían lanzas igualmente pequeñas. Quizá las armas habían sido hechas a medida para ellos. Inmediatamente me rodearon.

“¡Veo lo que estás haciendo!”

Estaba un poco sorprendido cuando miré sus habilidades.

Nombre: Goblin Nivel: 16

Habilidades: Agilidad (Grado A)

Solo eran goblins normales, y también de muy bajo nivel para este piso de la mazmorra. Todos tenían Agilidad de Grado A, y supuse que planeaban usar su velocidad para destruir al Tercero. Sería más fácil que derrotarme, y también me impediría llegar al siguiente piso.

Ejecuté la primera estrategia que se me ocurrió, usando 500 LP para crear la habilidad Muro de Piedra.

“¡Eeee!”

Los goblins volaron hacia la Tercera con sus lanzas, y actué rápidamente, manifestando una pared frente a ella que tenía casi la misma altura que yo. Los goblins se estrellaron contra él de cabeza y cayeron al suelo. Las cosas habían tenido un buen comienzo, pero eso no sería suficiente para protegerla.

Muro de Piedra: Manifiesta un muro de piedra frente al usuario. El efecto es temporal.

El tamaño y la fuerza del muro dependían de la experiencia, las reservas mágicas y el talento del usuario. Usé Editor para que sea más fácil de usar.

Agregue “se pueden conectar varias paredes para crear una caja”.

Solo costó 600 LP, así que no dudé. Después de todo, los goblins venían hacia ella por todos lados.

“¡Agáchate, por favor!”

La Tercera hizo lo que le pedí, y rápidamente la rodeé con muros. “¡¿Eek?!”

Los goblins se estrellaron contra la caja de piedra y trataron de apuñalarla con sus lanzas, pero no cedió. Recogí las lanzas de los goblins caídos. A continuación, se volvieron contra mí. Parecía que tenían algún tipo de habilidad para tomar decisiones después de todo. Disparé una Llama Sagrada y un Rayo con una mano y balanceé mi espada con la otra, cortando cualquier cosa a corta distancia. Los goblins eran ágiles, por lo que tomó un tiempo, pero los derroté sin un rasguño.

“¿Estás bien?” Le pregunté a la Tercera. “Sí, parece que estoy bastante bien”.

Mientras me preguntaba cómo sacarla de la caja, el efecto desapareció y las paredes desaparecieron.

“Derroté a los goblins”, dije. “Vamos a buscar las escaleras”.

Es cierto que no estaba exactamente seguro de cómo hacer eso. Por lo que pude ver, la habitación estaba vacía. Miré a través del agujero por el que habían entrado los goblins y vi otra habitación al otro lado. Era muy parecido a este, y tampoco había señales de puertas o escaleras allí. La Tercera tomó eso como su señal para colarse por el agujero.

“Las cosas podrían ponerse peligrosas allí”, le advertí. “Eso no será un problema, porque vendrás conmigo”.

La seguí a través del agujero. El Tercero se paró frente a una de las paredes y me miró.

Las escaleras están al otro lado. “¿De la pared? ¿Debería destruirlo?”

“No, no es necesario. ¡Ábrete, oh muro, déjanos pasar~!” ella cantó.

La letra era más bien… literal. Unos veinte segundos después, la pared retumbó y se abrió, revelando otra pequeña habitación. Ah, y allí estaban las escaleras al siguiente piso. Supuse que había algún tipo de truco, pero seguramente también podría haberme abierto camino.

“Felicitaciones, valiente,” dijo la Tercera. “Buena suerte en los niveles inferiores”.

“Gracias por toda tu ayuda. ¿Qué te va a pasar?”

“Nada en concreto. Seguiré cantando, como siempre lo he hecho. Solo así:

¡Date prisa en tu camino~! ¡No tienes todo el día~!” “……”

Ella me estaba tratando como una plaga.

“Está bien, no tienes que decirlo dos veces. Me voy. Adiós por ahora.” “¡Que te vaya bien~! ¡Y nunca vuelvas~!”

Bueno, eso dolió. ¡En realidad me había gustado un poco! Aunque supuse que había sido una relación totalmente superficial…

Con su inmenso talento vocal para animarme, bajé al decimoséptimo piso. En poco tiempo, su canto se desvaneció y toda la atmósfera de la mazmorra cambió.

Para empezar, ¡era tan brillante aquí abajo! Y el sonido de las olas rompiendo era abrumador. Una playa de arena se extendía ante un vasto océano frente a mí. Detrás de mí había un enorme bosque verde. Bien podría haber estado en una isla. El sol incluso brillaba intensamente en lo alto. Si no lo hubiera sabido mejor, nunca hubiera adivinado que todavía estaba dentro de una mazmorra.

Teniendo en cuenta el bosque de Dory y el nivel volcánico, realmente no debería haberme sorprendido más, pero aun así fue impresionante cada vez.

“¿Supongo que es una isla desierta? Apuesto a que todavía hay monstruos aquí. Probablemente debería dejarlo por ahora”.

Después de todo, mi habilidad con el ascensor registró el nuevo nivel tan pronto como puse un pie en él. Por lo tanto, usé mi Ascensor de Mazmorra y me fui. Dado lo grande que parecía este piso, probablemente me llevaría un tiempo encontrar el siguiente tramo de escaleras.

De camino a casa, le pregunté al Gran Sabio cómo debería hacerlo.

<Otórgate una habilidad que te permita detectar objetos encantados u obtén un objeto que posea tal habilidad. Usa esa habilidad para buscar las escaleras.>

La percepción de objetos encantados costaba 5000 LP. Podría haberlo logrado, pero pensé que sería mejor encontrar un elemento que ya tuviera la habilidad. Podría haberle preguntado al Gran Sabio dónde encontrar uno, pero quería evitarlo si podía. Mi cabeza ya estaba palpitando, y si fuera un artículo de alto grado, probablemente tendría un gran dolor de cabeza por mi problema.

***

La Competencia del Rey del Año Escolar estaba cerca de nosotros, con la batalla por invitación con nuestra escuela hermana poco después. Me sentía más entusiasmado con la clase también. La Sra. Elena nos estaba instruyendo en el patio de la escuela bajo el sol brillante. Todos tuvieron cuidado de mantenerse hidratados para evitar un golpe de calor.

La Sra. Elena nos miró desde lo alto de una espada de práctica de madera que había sido clavada en la tierra. Realmente disfrutó tener el terreno elevado.

“Creo que encontrarás la técnica de hoy útil contra monstruos y oponentes humanos. Pero para ser honesto, no soy un fanático”.

Parecía que pensaba que sería valioso que lo supiéramos, incluso si no le importaba. Saltó de su posición, recuperó su espada y me apuntó.

“Párate frente a mí y sujeta tu espada”. “Sí, señora.”

Hice lo que me dijeron. Sentí que me habían puesto mucho en esta posición últimamente. Me sostuvo a punta de espada y, por alguna razón, comencé a respirar con más dificultad.

“Debes usar esta técnica entre la mitad y el final de un encuentro. Recuerda, siempre puedes usarlo si las cosas van mal. Está bien, Noir, dame todo lo que tengas. Ataca cada vez que veas una apertura.”

“Lo entendiste.”

Había estado entrenando todos los días, tenía una habilidad de esgrima de Grado C y había adquirido bastante experiencia en combate. Incluso si la Sra. Elena vino hacia mí con todas sus fuerzas, estaba bastante seguro de que podría defenderme. Al menos un rato. Justo cuando me había calmado, la Sra. Elena me apresuró.

“¡Haaaah!”

Había tal intensidad en su ataque. Necesitaba mantener la calma, ¿eh? Su movimiento fue impresionante, pero tropezó mientras corría hacia adelante. Se las arregló para recuperar el equilibrio, pero aun así terminó sobre una rodilla. La Sra. Elena hizo una mueca. Huh, realmente fue un error. No podía dejar pasar la oportunidad. Cerré la distancia entre nosotros, balanceando mi espada de madera hacia su cuello.

“¡¿Que—?!”

La Sra. Elena explotó con fuerza y se deslizó detrás de mí. Ella había estado esperando este momento. Y luego, ¡zas!, un golpe furioso, seguido de la sensación helada de su espada de madera en la nuca. Si hubiera sido una espada real, probablemente ya no habría tenido cabeza.

“Fue… fue un farol”, le dije.

“Exactamente. Es tan barato. No lo uso. Pero en mis días como mercenaria, vi a mucha gente ganar así”.

Me había enamorado por completo, por lo que era un poco inquietante pensar en cuántas otras personas también lo habían hecho.

“Incluso si no usas la técnica tú mismo, recuerda que otras personas podrían hacerlo. Eres vulnerable cuando crees que tu oponente está completamente abierto”.

Ella tenía un punto. Hubo muchas historias de luchadores fuertes que se adelantaron y luego perdieron. Crear situaciones como esta también facilitó la ejecución de movimientos más arriesgados.

“Es un movimiento cobarde seguro”, dijo la Sra. Elena. “Y algunas personas no lo aprobarán. No te diré que lo uses. Pero para los propósitos de esta lección, vamos a practicarlo, así como algunas contramedidas”.

Nos dividimos en parejas y comenzamos. Como de costumbre, me emparejaron con Emma.

“Entonces, ¿cuál de nosotros hará la acción?” ella preguntó.

“¿Te importaría ir primero?” Yo pregunté. “Quiero idear algunas contramedidas”.

“¡Está bien!”

Emma comenzó a acercarse a mí, luego se agarró el estómago y se derrumbó en el suelo. Bueno, eso funcionó. Fingí un golpe y Emma lo paró, contrarrestando mi ataque con un movimiento rápido. Se detuvo antes de golpearme, así que no me dolió, pero me hizo darme cuenta de lo difícil que era defenderse de ese tipo de ataque.

“Es difícil saber si alguien está actuando, ¿eh?”

“Sí. Sería muy difícil decirlo en medio de una pelea. Pero también tendrías que ser valiente para intentarlo”.

Sería mejor reservarlo para cuando se encuentre en una seria desventaja. Probablemente también funcionaría mejor en un oponente exaltado.

“Mi turno. Hagámoslo.”

Cargué con mi arma en alto. Deliberadamente exageré mis movimientos y Emma me esquivó como una mariposa. Empecé a jadear y me senté en el suelo.

“Haah, haah, no puedo seguir”.

Esto fue realmente vergonzoso. También necesitabas algo de habilidad actoral para lograrlo. Planeé contrarrestar el momento en que Emma atacó, pero en lugar de eso, dejó caer su arma y me abrazó con ternura…

“Nada bueno viene de pelear. Perdonémonos las transgresiones de los demás y comencemos de nuevo”.

“Emma… tienes razón. Y acabo de recibir algo muy valioso: LP”. “Bueno, felicidades”.

Bromeamos un poco, y no pasó mucho tiempo antes de que sintiera la sed de sangre de la Sra. Elena atravesándome.

“¡Disculpen, gusanos! ¿Encuentras mi clase tan aburrida?”

“O-oh, no… um… Tenemos que reponer nuestra energía vital, así que…” “Ah, ¿eso es todo? Bueno, creo que tus tanques ya deberían estar llenos.

¡Clase, atención!”

La Sra. Elena tenía una sonrisa maliciosa en su rostro mientras reunía al resto de la clase.

“Ustedes dos van a practicar hasta que toda la clase esté de acuerdo en que su actuación fue perfecta”.

“Pero… Sra. Elena…” suplicamos.

¡Nunca podríamos irnos! Aunque supuse que era culpa nuestra por perder el tiempo.

Nos tomó unas diez veces cada uno antes de que nuestros compañeros de clase acordaran que podíamos parar. Ojalá tuviera el talento actoral para engañar a la Sra. Elena. Al menos cuando terminó la clase, su estado de ánimo parecía haber mejorado un poco. Aproveché la oportunidad para preguntarle sobre el próximo Concurso Rey del Año Escolar.

“¿Puedes decirme algo sobre el objeto encantado que obtienes si ganas?”

“Espera hasta la competencia. Solo obtienes un premio, pero hay varias opciones para elegir”.

Eso tenía sentido. Después de todo, un arquero no estaría muy contento con un hacha. Al menos probablemente era algo bueno.

“Noir, recuerda que la fuerza no siempre es física. Las personas que son fuertes en el sentido tradicional no ganan todas las batallas. Nunca olvides eso.”

Grabé su consejo en mi corazón. La batalla nunca fue una simple ecuación en la que la persona con el nivel más alto o la mayor cantidad de habilidades y experiencia estaba destinada a ganar. A veces, el desvalido podría sacar la alfombra debajo de un cierto vencedor. Había muchos ejemplos de personas así golpeando a alguien objetivamente más poderoso. Ver, por ejemplo: mi encuentro con el Lancero Negro en la mazmorra oculta.

“Em. Elena, ¿alguna vez has derrotado a alguien más fuerte que tú?” “Puedes apostar tu culo a que sí. ¿Quién diablos te crees que soy?”

Su puño voló por el aire, deteniéndose a un pelo de mi nariz. ¡No tuve tiempo de reaccionar en absoluto! Me sorprendió lo rápido que se movió. Incluso Leila, que se especializó en el combate cuerpo a cuerpo, probablemente habría tenido problemas.

“No importa si tu oponente te ganó en nivel, habilidades y experiencia”, dijo. “No puedes dejar que te ganen aquí”.

Señaló mi pecho. “¡No lo olvidaré!”

La Sra. Elena me mostró una hermosa sonrisa, como si estuviera orgullosa de mí. Tuve mucha suerte de tenerla como mi maestra.