Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 13

Epílogo: La «Reina de las Flores de Hielo»

Antes de amanecer, el cielo estaba todavía oscuro y la tierra cubierta de nieve estaba envuelta en el silencio.

Habiendo perdido su núcleo, la «Reina de las Flores de Hielo», la hinchada existencia de Zirnitra no pudo sostenerse y se desplomó. Originalmente, los espíritus destruidos en el reino humano desaparecían y regresaban a Astral Zero, pero habiéndose fusionado con la materia tangible, Zirnitra había perdido este rasgo de los espíritus y terminó como un cadáver dejado a la intemperie.

Tomando a la inconsciente Judia, Kamito y Rinslet regresaron por el momento al castillo del Golfo de Invierno.

Atacado por los dragones de hielo, los muros del castillo fueron severamente dañados, pero el interior del castillo estaba esencialmente ileso. No hubo muertos entre los soldados tampoco.

Con el fin de evitar que el caos estalle entre la gente en el castillo, Rinslet mantuvo a Judia en su propia habitación por ahora. Roncando a causa del sueño, Judia se veía muy joven en el rostro, casi como si su tiempo se hubiera detenido desde ese día, en el «Festival Elemental del Agua» hace cuatro años.

En cuanto al retorno repentino de Judia, Mireille apenas pudo contener su sorpresa al principio, pero pronto mostró su optimismo característico, ofreciéndose con Milla para cuidar juntas a Judia.

Después de terminar sus deberes en su mayor parte, Rinslet estaba tomando un baño sola en la instalación de purificación.

“… Ufff. Como sucedieron muchas cosas, estoy totalmente agotada.”

Inmersa en el agua caliente hasta los hombros, Rinslet dio un suspiro de alivio.

Ya que defendió el Castillo del Golfo de Invierno y le dio a Kamito la mayor parte de su poder divino, su cuerpo estaba excesivamente cansado.

Para evitar desmayarse en el suelo, tenía que recuperar su poder divino lo más rápido posible.

… Las cosas sólo se pondrán más atareadas de ahora en adelante. No sólo acerca de Judia, sino también la organización de los médicos para tratar a los soldados heridos, la reparación de los muros medio destruidos del castillo, así como-

(… Todavía tengo que hacer algo con esos niños que perdieron sus bosques.)

Rinslet había reunido a los niños Elfim cuyo asentamiento fue destruido, trayéndolos al castillo para protegerlos y brindarles tratamiento médico.

Las tribus Elfim no estaban ligadas a las leyes imperiales, para empezar, pero aquellos que viven en el «Bosque de las Flores de Hielo» eran equivalentes a personas del territorio Laurenfrost. Darles la protección necesaria era parte de los deberes de un noble.

(… Antes de que Padre y Madre regresen, debo cumplir con los deberes de un gobernante temporal apropiadamente.)

Mientras reflexionaba sobre estos asuntos en el baño, su cuerpo se sintió ardiente, como si estuviera en llamas.

“¡… Huah… E-Está aquí… otra vez…!”

El corazón latía intensamente y podía sentir el poder divino que debía estar agotado, corriendo rápidamente a través de su cuerpo.

…La razón no requería pensarlo mucho. Fue precisamente el beso que compartió con Kamito.

(… Este poder, ¿qué diablos está pasando?)

Tocando sus labios húmedos con los dedos, Rinslet murmuró para sí misma.

***

-Kamito estaba solo en una terraza en el castillo, mirando hacia el alba.

Los rayos del sol provenientes de la Cordillera de Kyria iluminaron gradualmente la totalidad del «Bosque de las Flores de Hielo» bajo su vista.

Mientras tanto, él estaba mirando el cadáver gigante de «Zirnitra», situado en las profundidades del bosque.

(… Restia, ¿a dónde exactamente se fue?)

Kamito exhaló niebla blanca.

Ella escapó al bosque – Eso era lo que la doncella Elfim había dicho.

Entonces ella probablemente seguía en el bosque.

Una vez que el sol estuviera alto, Kamito tenía la intención de buscarla de nuevo.

(… Es una pena que las caballeros del Santo Reino escaparan.)

De acuerdo con Natalia, la capitana de las «Wolf Ritters», Luminaris y las «Sagrados Caballeros Espirituales» ya habían desaparecido sin dejar rastro para cuando los miembros de rescate de las «Wolf Ritters» fueron a rescatarlas. Kamito naturalmente quería capturar a Luminaris para interrogarla y obtener información. Pero incluyendo a Luminaris, cada una de ellas debería estar cubiertas de heridas, por lo que las «Sagrados Caballeros Espirituales» probablemente no podrían continuar cazando a Restia.

“Kamito-san-”

En ese momento, oyó una voz nerviosa desde atrás.

Mirando hacia atrás, encontró a Rinslet en la entrada de la terraza, que acaba de terminar su baño.

Aún llevaba el atuendo para el ritual de purificación con una bata de baño sobre sus hombros.

Su piel todavía mostraba un rubor rojo con leve vapor de agua saliendo.

Frente a la apariencia seductora de la joven, Kamito no pudo evitar sentir que su corazón se aceleraba.

“Rinslet…”

Ella se acercó al lado de Kamito y se apoyó en la barandilla.

“Umm, sobre Judia, estoy muy agradecida. Es todo gracias a ti, Kamito-san.”

“No, yo soy el que debería estar agradecido. Si no hubieras estado allí en ese momento, Rinslet…”

“… ¿Qué pasa?”

“No, nada…”

Vislumbrando débilmente su escote por la brecha en su bata de baño, Kamito desvió la mirada.

El sol estaba saliendo poco a poco, haciendo que su largo cabello rubio se vea cada vez más brillante y hermoso.

“Umm, sí…”

Rinslet parecía estar tartamudeando tímidamente mientras trataba de iniciar una conversación.

“Umm, q-quería hablar de lo que sucedió en aquel momento…”

“… ¿En aquel momento?”

“S-Sí… ¡C-Como dije, en aquel momento!”

Su rostro se puso más rojo y ella incluso hizo un puchero.

“Oh, claro…”

Sólo ahora Kamito finalmente se dio cuenta.

… Ella estaba hablando sobre el beso que le dio a Kamito para transferirle poder divino “… E-En aquel momento, umm… Gracias al cielo.”

Todavía haciendo pucheros, Rinslet de repente se apoyó en Kamito.

“En ese entonces, lo que dije, eh… era en serio, ¿sabes?”

Sus claros ojos esmeralda estaban mirando a Kamito con inquietud.

En cuanto a Kamito-

“… ¿Que dijiste?”

“… ¿Eh? Sí… ”

Al ver signos de interrogación apareciendo sobre la cabeza de Kamito, Rinslet apenas podía ocultar su confusión.

“Umm…, dime… ¿Podría ser, que no lo escuchaste?”

“L-Lo siento… En aquel entonces, mi mente estaba muy confusa…”

… Kamito se disculpó sinceramente. En efecto, Rinslet parecía haber dicho algo antes de besarlo

“… ¿¡~ Q-Q-Q-Q-Q-Qué…!?”

Rinslet se estremeció y tembló.

Whoosh zas zas zas zas zas zas… De repente, una tormenta de nieve comenzó a soplar en los alrededores.

“L-Lo siento… Podrías decirlo de nuevo…”

“… ¡~O-Olvídate de eso!”

Enojada, Rinslet apartó su mirada.

“… Yo claramente tomé mi decisión, un beso serio… es por eso…”

“¡…!”

-Justo cuando Kamito fue sacudido, en ese momento…

“… B-Beso, B- Beso… ¿De nuevo?”

“Maldición… ¡Así que te has involucrado en tal conducta desvergonzada de nuevo!”

¡Estruendo, estruendo, estruendo, estruendo, estruendo, estruendo, estruendo estruendo…!

Esta vez, la temperatura circundante aumentó rápidamente.

(… ¿¡Espera, esta voz es!?)

“… ¡C-Claire! ¿¡y la capitana!?”

Rinslet gritó en pánico.

“E-Espera… ¿Por están ustedes dos aquí?”

“Escuchamos que ustedes dos se fueron de viaje-”

“¡Hemos venido persiguiéndolos!”

Con auras enojadas, las dos chicas se acercaron a Kamito. “…H-Hablando de eso, ¿qué es eso de un b-beso, b-beso?” “Hmm, ¡no puedo fingir que no escuché eso!” “N-no… Umm, eh, no es lo que está pensando-”

“… K-Kamito-san, ¿¡qué quieres decir con eso!?”

Por alguna razón, incluso Rinslet comenzó a hacer pucheros, cuando se suponía que sabía la verdad.

-En este momento…

La mirada de Kamito fue repentinamente atraída hacia la entrada de la terraza.

-Alguien estaba de pie allí.

Una chica con magnífico cabello negro y ojos de color anochecer.

“… ¿Res…tia-?”

-FIN DEL VOLUMEN 13-