Campione (NL)

Volumen 9

Capítulo 3: Athena Reaparece.

Parte 1

El trabajo se estaba desarrollando con cautela bajo una estricta seguridad.

La torpe maquinaria grande (se refieren a las grúas) estaba siendo empleada para excavar un objetivo por debajo del sello sagrado rojo (llamado algo así como torii).

El Rey que se manifiesta al final de las eras.

El secreto de su ubicación se encontraba latente en este lugar sagrado costero.

El lugar estaba mucho más lleno que la última vez que Guinevere lo había visitado. El guardián oculto de este lugar había sido capaz de sentir vagamente la “fuerza de la vida” desde esta tierra.

Aunque Guinevere se había estado ocultando mediante la magia, la otra parte parecía haber sentido su presencia ligeramente.

Debido al repentino aumento en el nivel de alerta, Guinevere se había retirado rápidamente.

“Tal como se temía, las cosas no van a progresar tan fácilmente.”

Usando el [ojo de la bruja] para mejorar la su visión, ella estaba viendo la excavación desde lejos.

Ella tenía la intención de volver a visitar esta playa en el Lejano Oriente para buscar su secreto. Pero los magos locales parecían estar pensando en confiar el secreto al Campione. Mientras que las máquinas sin interés se dedicaban a excavar, el esfuerzo conjunto de varias decenas de asistentes había lanzado el sello bajo la tierra. Los guardias habían sido colocados para evitar interferencias.

Entre esas decenas de personas presentes había espadachines, ninjas, magos y mikos en modo de espera.

El oponente más problemático de todos era la miko que empuñaba la espada que podía utilizar la posesión divina. Guinevere la había visto por última vez cuando apareció el Gran Sabio que Iguala el Cielo. Sería prudente evitar una confrontación frontal contra esa chica.

“Todavía es demasiado pronto para poner la vida de Guinevere en la borda. En vez de estar de pie alrededor sin poder hacer nada, sería mejor revertir la situación en la mano del oponente.”

Buscar la ayuda en la fuerza de Lancelot… No era una opción que consideraba.

A pesar de que él era el caballero que servía a Guinevere, era una deidad con todas las cosas consideradas. Si no se mantuviera un nivel pertinente de respeto, sus bonos probablemente disminuirían progresivamente.

Pero, que hiciera de nuevo una petición a ese humilde humano realmente sería ridículo al extremo.

“Kusanagi Godou-sama quien derrotó al Gran Sabio que Iguala el cielo… Ya exhibe el poder de un asesino de dioses. Ahora que lo pienso, Athena le llamó su enemigo mortal…”

Así como Guinevere estaba analizando la situación en desarrollo, se dio cuenta del “movimiento”.

“Ella vino tal como se esperaba, la diosa Athena. Vino para enviar a Guinevere hacia la tumba en lugar de sentarse en algún lugar esperando su desaparición.”

(Querida niña, este caballero está apto para la batalla.)

Susurros fueron llevados hasta sus oídos desde donde Lancelot yacía descansando.

(Si la diosa vuelve a aparecer, simplemente la enfrentaré en batalla. En verdad, ella es un enemigo formidable… Pero será una excelente oportunidad para hacer contacto con el Santo Grial. Si tenemos éxito, la Espada Divina de la Salvación también podrá recuperar su verdadero poder y la inmortalidad de Athena llegará a su fin enviándola de regreso hacia el infierno.)

Era una propuesta muy atractiva, pero Guinevere se negó con la cabeza.

“No, no vamos a hacer eso todavía. Si vas con todo tal como antes, el tiempo requerido para que el caballero se recupere se retrasará aún más.”

Con cerca de más de diez días, Lancelot recuperaría su verdadero poder, no tenía sentido esforzarlo en exceso. Después de todo, otros héroes estaban disponibles para combatir a la diosa.

“Quédate oculto por ahora. Hoy no es definitivamente el momento adecuado para enfrentar a Athena.”

Guinevere activó sus poderes mágicos de antepasado divino.

Disociando su cuerpo de bruja, ella se convirtió en una con el aire y se fue volando por el viento.

Mientras que borraba su rastro mientras se escapaba de esta manera, incluso Athena tendría dificultades para rastrearla.

“Tsk, ¿una dio un paso demasiado tarde?”

Al hacer clic en la lengua en señal de desaprobación, Athena estaba de pie en un acantilado junto al mar en la forma de una chica joven.

Su mirada apuntaba hacia las olas blancas que se estrellaban sobre el acantilado. Se había producido un minuto permanente con la presencia persistente de Guinevere. Sin embargo, ahora se había desvanecido.

“En verdad, ‘el Santo Grial dentro del cuerpo de una… alertó a la presa.” Athena murmuró para sí misma.

Gracias a que había tragado el Grial, ahora entendía su naturaleza plenamente.

“Mientras este objeto permanece en el cuerpo de una, ¿es imposible acercarse al descendiente de su creador?”

Guinevere era la bruja que nació de la reencarnación de la diedad, la blanca matriarca.

Al parecer había huido tan pronto como sintió que Athena se acercó. Si nada cambiaba, esta situación sólo se repetiría una y otra vez.

“¿No hay manera de enviar a esa bruja hasta su tumba y evitar que reactive a ese hombre…? Hmm,” el destino de una es derrotar a Kusanagi Godou. Pero tal como están las cosas, él no puede derrotar a ese hombre. Ningún asesino de dioses puede prevalecer contra ese hombre una vez que se despierte”.

Si ese fuera el caso, ¿Qué podría hacer? ¿Qué podía hacer la Diosa Athena?

“Fu – Una había deseado una oportunidad para que madurara, pero el tiempo para la cosecha ha llegado. Una tendrá un enfrentamiento decisivo contra Kusanagi Godou aquí.”

¡Si esta vida persiste después de que el duelo llegara a su conclusión, entonces Lancelot se vería obligado a pagar sus deudas en ese momento…!

Su tiempo restante no era abundante.

Después de haber tomado su decisión, Athena mostró una sonrisa valiente y audaz.

El “espíritu de batalla de la diosa despertó y las olas por debajo de ella se intensificaron a su vez. Vientos violentos volaron por el cielo para responder al ‘furioso espíritu’ de la diosa.

“Lo hiciste magníficamente, dios de la guerra Lancelot. Tal como correspondía al adecuado [acero] que heredó los caminos de los antiguos. ¡Profanar la propia inmortalidad de esta manera!”

La ingestión del Santo Grial continuaba erosionando su vida desde dentro.

La vida de la diosa inmortal era absorbida gradualmente por este artefacto divino. Lento pero seguro, Athena se acercaba a la muerte.

“Hohoho. Una debe tomar este Santo Grial y dirigirse hasta los [Límites de la Vida y la Inmortalidad], así tal vez esta vida pueda persistir indefinidamente…”

Había ocasionales en que los [Dioses Herejes], cansados de vagar sin fin, elegían vivir recluidos en ese mundo.

Podría muy bien la primera y única vía de supervivencia para Athena.

“Sin embargo, una no está obligada a tomar ese camino. El dejar que la rabia del espíritu se desenfrene en la guerra y elegir el camino de la batalla es lo que corresponde a esta diosa. Una primero debe derrotar a Kusanagi Godou, entonces Lancelot será vencido. ¡Si esto se tarda, entonces la justicia se reunirá en aquella sierva y la venganza de ese hombre se realizará…!”

Precisamente porque había trascendido la mortalidad, no había nadie que luchara por el bien de la prolongación de su vida.

La muerte era bienvenida, siempre y cuando todas las tareas incumplidas podrían resolverse sin pesar. Cuando llegara el momento y su poder estuviera completamente agotado, se establecería sobre la tierra y pasaría a como si entrara en un sueño eterno.

Athena no sólo era la diosa tripartita, sino que también la diosa de la guerra.

A medida que el final se acercaba, ¡¿no sería particularmente significativo para una el abrazar a la muerte como la diosa de la guerra?!

De pie ante el turbulento mar oriental, Athena sintió alegría cuando sus emociones se elevaron hacia nuevas alturas.

***

El viernes después de que el festival de la escuela había terminado, Kusanagi Godou iba hacia la prefuctura de Chiba. El día anterior, había recibido una llamada telefónica de Seishuuin Ena.

“¡Hola, Su Majestad, por favor! ¡Espero que usted me pueda ayudar!”

Fue la primera vez que recibía una llamada de Ena. Esta era la chica que rara vez utilizaba las herramientas modernas de la civilización para sus propósitos.

“Claro, si está dentro de mi poder… ¿Es algo problemático?”

“Me temo que sí. Ah, pero Amakasu-san dijo que Su Majestad había una vez aceptado una solicitud similar de Erica-san, así que no debería importar.”

“Algo que Erica me pidió una vez…”

Godou se acordó de todo tipo de demandas irracionales que habían sido forzadas sobre él anteriormente.

Todas ellas habían sembrado las semillas para algún futuro conflicto con los dioses.

“El peor momento fue cuando ella me obligó a traer de vuelta el medallón de piedra que atrajo a Athena hacia Tokio.”

“Sí, sí, eso es exactamente lo mismo. Hay una cosa como esa medalla que deseamos Su Majestad la salvaguarde para nosotros. Todavía está siendo excavada en la tierra, pero probablemente estará listo para mañana o al siguiente día.”

La última vez le había confiado el inolvidable Gorgoneion. Era un medallón con la sabiduría de la diosa de la madre tierra grabada en él.

Bueno, no se puede evitar. Godou suspiró.

Esto era como si voluntariamente iba a terminar el trabajo. Significaba que iba a ayudar a Ena, Amakasu y al resto de ellos incluso aun más en el futuro.

Comenzando alrededor de la primavera a principios de este año, ya había sido completamente absorbido por su participación en lo mundialmente sobrenatural.

Godou lamentó para sus adentros mientras respondió. “Entendido. Yo te ayudaré. ¿Qué tengo que hacer primero?”

“Vamos a darle la bienvenida a Su Majestad aquí para mañana. Ena se encuentra actualmente en Chiba, ¿si?”

Al día siguiente después de esa llamada telefónica, era un viernes luminoso y soleado.

Después de regresar de la escuela, Godou mintió sobre su estancia en casa de un amigo por el fin de semana antes de salir de casa.

Habiendo organizado un paseo con un conocido de antemano, esperaba en una calle principal cercana. Un coche domésticamente común de plata se detuvo bruscamente ante Godou en la carretera.

Godou se sorprendió al ver a la persona en el volante.

Era la andrógina Hime Miko, Sayanomiya Kaoru, quien se parecía tanto a un joven guapo y una hermosa dama al mismo tiempo.

“En realidad, yo acabo de recibir mi licencia de conducir, por lo que permítame ser el chofer por hoy.”

Ella le guiñó un ojo y le explicó mientras se sentaba en el asiento del pasajero a su lado.

Ahora que lo pienso, ella (a menudo se siente como un él) estaba en su tercer año de la escuela secundaria.

Incluso si hubiera llegado a los dieciocho años de edad, había sido suficiente para obtener una licencia oficial normal.

“Gracias por sus esfuerzos… ¿Pero acaso Kaoru-san no parece estar bastante familiarizada con la conducción?”

“Sí. Yo por ‘casualidad’ obtuve mi licencia recientemente. Por otro lado, tener un coche es mucho más conveniente para salir con las chicas a varios lugares por la diversión. En el pasado a veces llevaba la autorización a nombre de otra persona y a menudo demostraba ser útil”.

El control de Kaoru del volante era muy estable. De alguna manera, Godou sentia como podía verificar si podía conducir imprudentemente como un novato…

“Se sintió bastante increíble cuando me di cuenta recientemente de cuántas personas impesionantes están a mi alrededor, lo que me lleva una vida normal…”

“Hmm, esto podría muy bien ser llamado “aves de una pluma juntándose” “. Kaoru respondió alegremente ante la exclamación de Godou.

Además, fue sugestivamente agrupandose a sí misma con Godou y sus otros compañeros extraños al mismo tiempo.

“Bueno, a partir de este momento, voy a ser el orgulloso conductor a cargo de nuestro viaje. ¿Quieres ir a dar una vuelta y recoger a las jóvenes? ¡Estoy segura de que si las socias de Godou-san van conmigo, estaremos preparados para un buen acontecimiento!”

“¡No estoy acostumbrado a estar con un gran número de jóvenes de esa manera!”

Kaoru continuó impulsando constantemente cuando hizo su inquietante sugerencia.

En el camino recogieron a dos jóvenes. Mariya Yuri y Liliana Kranjcar.

Ambas en traje casual, Yuri estaba usando un vestido de una sola pieza con un top de punto a juego, mientras que Liliana estaba vestida con una blusa de manga corta, pantalones vaqueros y una media capa.

“Así que, ahora que todo el mundo está aquí, voy a explicar brevemente la situación.”

Kaoru habló lentamente tan pronto como llegaron a la autopista Shuto.

La Hime-Miko del Comité de Compilación de Historia reveló una increíble leyenda.

La reina Oto Tachibana-Hime saltó al mar con la espada ensenada. Las corrientes marinas llevaron su espada a un lugar donde no habia ni tierra ni el mar y de donde posteriormente apareció una isla flotante.

“Ahora que se menciona, Kazusa y Awa son sin duda colocadas con profundos vínculos con Yamato Takeru no Mikoto y Oto Tachibana-Hime”.

Yuri, la Hime-Miko fue la primero en asentir. “¿Es así, Mariya?”

“Sí. Godou-san probablemente debería saberlo”

Yuri procedió a relatar los últimos momentos de Oto Tachibana-Hime. Era una historia más familiar.

“El lugar donde Takeru no Mikoto y Hime partieron a la mar fue llamado Hashirimizu, ese lugar todavía existe en la prefectura de Kanagawa. Santuarios fueron construidos en la adoración de Oto Tachibana-Hime como una deidad en ambos lados de la bahía de Tokio en Kanagawa y Chiba.”

Era la historia de Yamato Takeru que Godou conocía desde la infancia.

Para que la bahía de Tokio participara en ese entorno… Godou Honestamente fue sorprendido

“Lo interesante aquí es que los rumores superficiales siempre implican a Oto Tachibana-Hime. Incluso la versión descontinuada tenía una parte sobre Yamato Takeru y Hime”.

Kaoru proporcionó detalles suplementarios.

“La espada de prestigio y su titular el único Noble, se hundieron en el mar flotando hacia “la isla donde no hay ni tierra ni mar.” Cuando la espada vuelva a aparecer en la tierra, el Noble deberá revivir… Eso es lo que se dijo”.

“En ese caso…”

Liliana de repente interrumpió.

Dado que el tema de conversación era sobre los mitos japoneses que estaban fuera de su experiencia, había guardado silencio hasta ahora.

“Lo que esta fantástica leyenda está realmente tratando de transmitir, no es sobre los momentos finales de Hime, sino que el paradero de la espada… ¿No es eso correcto?”

“Eso podría muy bien ser de verdad. Por lo menos, así fue como Amakasu-san y yo metimos las manos en este asunto.”

Kaoru expresó su acuerdo mientras continuaba conduciendo.

“Con respecto a este tema, tengo toda una lista de preguntas que me gustaría hacerle a los ancianos. En un principio, una política de secreto absoluto fue aplicada sobre ese lugar por un tiempo muy largo, muy probablemente más de mil años.

Pero desde que una explosiva situación es sin duda inevitable, pensamos, ¿por qué no añadir a Kusanagi-san hacia la mezcla para detonarla?”.

“Es una situación bastante indefensa, Sayanomiya Kaoru.”

“Bueno, no exactamente. Como un asunto secreto relacionado con los dioses, siempre hay una alta probabilidad de que Godou-san estará involucrado con el tiempo. En ese caso, ¿por qué no llamarlo desde el principio?”

“Ya veo. Si lo pones de esa manera, estoy de acuerdo.”

Liliana asintió con Kaoru quien acababa de describir a Godou como si fuera una bomba de pie.

Godou estaba a punto de objetar con indignación.

“Dicho esto, ¿hay realmente un Noble Único enlazado en un sueño eterno con la espada? En este mundo, no hay tal cosa como una isla en un lugar donde no hay ni tierra ni mar. La descripción es prácticamente la misma que la del Rey Arturo y Excalibur dormiendo en Avalon, la tierra de las hadas”.

El caballero de cabellos plateados reflexionó más, sorprendiendo a Kaoru. “Que digno de Liliana-san Amakasu-san también había hecho la misma observación. Yamato Takeru, el rey Arturo y los dioses de la guerra de acero están todos implicados en esta leyenda.”

Por lo tanto, se hizo una declaración peligrosa.

El coche que llevaba al grupo entró en la autopista de Trans-Bahía de Tokio desde la unión de Kawasaki-Ukishima.

Pasando a través de la autopista de Shuto, fueron absorbidos por una sombra de la oscuridad al entrar en el túnel que atraviesa la bahía de Tokio. Continuando hacia adelante llegarían hasta la zona de aparcamiento de la isla artificial Umihotaru. A partir de ahí, la Península Bousou podría llegar a través de la ruta de enlace Kisarazu.

A medida que estaban en la etapa en que un mito se había levantado, este mar podría ser atravesado en decenas de minutos.

“La llamada isla flotante se cree que sea el ‘Palacio de la Isla Flotante’ donde el padre de Yamato Takeru, el emperador Keiko celebraba sus banquetes cuando estaba visitando a sus hijos en la región de Kantou.”

Kaoru explicó en el camino.

Era casi de noche cuando llegaron a Kisarazu y Kaoru detuvo el coche en algún lugar cerca de la costa.

“¡He estado esperando a todo el mundo!”

“Ah, una gran bienvenida hacia nuestros invitados especiales desde muy lejos.” Dos caras familiares se acercaron a medida que bajaron del coche.

Seishuuin Ena y Amakasu Touma. Ena vestia su uniforme habitual, mientras que Amakasu también andaba con su traje descuidado habitual. En ese sentido eran un buen estilo y no como los demás. Junto con Kaoru quien estaba impecablemente vestida con una chaqueta de invierno, esta noción de atuendo habitual se reforzó aún más.

“Eh, ¿Erica-san no vino?”

“Ella dijo que estaba ocupada y tuvo que volver a Italia.” Ena murmuró “hmm” en respuesta a la simple explicación.

Una expresión frenética cruzó por su rostro. Pero Ena ignoró la mirada de curiosidad de Godou y fue a saludar a los demás.

Yuri sonrió en respuesta al entusiasmo habitual de Ena mientras que Liliana la saludó con generosidad.

“Por cierto, ¿podemos hablar un momento?” Amakasu llamó, no a Godou, sino a Yuri y Liliana.

“Un objeto llamado Alabarda Inversa Celestial está siendo excavada actualmente. Para ser honesto, es imposible adivinar en este momento como se verá esa cosa. Por lo tanto, esperamos que ustedes dos puedan prestar sus ojos de la sabiduría.”

Básicamente querían la ayuda del poder de la visión espiritual.

En respuesta a la petición de “ver” el lugar de la excavación, Yuri y Liliana respondieron de la siguiente manera:

“No puedo estar segura de si será visto algo, pero vamos a ir hasta el lugar por ahora.”

“Ya veo. Tal vez como una bruja, podrías ser capaz de ayudar a la investigación”. “… ¿Tengo que estar de acuerdo?”

Sin pensarlo Godou preguntó, porque estaba un poco intrigado.

“Oh, Kusanagi-san, considerando todas las cosas, todavía tienes muchos otros asuntos que atender.”

“Umm, sí, ¿Su Majestad puede acompañarme un poco?”

A Godou le resultó bastante extraño. El agente especial relajado tenía muchos intereses ocultos. Sea como fuere, su tono de voz era un poco diferente de lo habitual y esta vez fue un tono grave de voz.

Pero antes de que Godou pudiera expresar sus dudas, Ena le guió de la mano y lo arrastró lejos.

“Entonces le encomiendo los asuntos a todos ustedes. Especialmente a ti, Kusanagi- san, por favor resuelve las cosas adecuadamente.”

Con Amakasu, Yuri y Liliana por un lado. Godou y Ena eran el otro.

Cuando los dos grupos partieron hacia diferentes destinos, Kaoru les despidió con un extraño comentario.