Campione (NL)

Volumen 9

Capítulo 1: La Herida de la Lanza Divina.

Parte 2

“¡Señor Caballero! ¡Guinevere siempre ha creído en usted caballero!”

Lancelot simplemente asintió con la cabeza ante sus gritos emocionales de gratitud. Volviendo la mirada hacia Athena, de repente habló.

“Este caballero se disculpa sinceramente por el acto grosero de señalar una lanza a un oponente desarmado como usted sin siquiera una espada. Sin embargo, esto se hace en aras de proteger a la amada hija del caballero. Oro para que me conceda su perdón”.

“Fu – Incluso si el perdón es retenido, aun así esa lanza permanece para atacar.” Athena sonrió a pesar de sus pesadas lesiones.

“Una casi se había olvidado del nombre de un poderoso [acero] de la niebla y el trueno que se rumorea se ha convertido en el retén de aquel hombre, ¡debes ser tú!”

Atenea era la diosa de la sabiduría y de la guerra, así como de la tierra, la oscuridad y el cielo.

Sin embargo, fue a causa del ‘tranquilo aspecto guerrero’ de la diosa el por qué la Athena herida parecía un tipo exótico de belleza, llena de dominación. Al estar bañada en sangre fresca simplemente ayudó a su glamour como un maquillaje pesado.

Lancelot sentia sobre como debía pronunciar la palabra “hermosa” con alabanza y admiración.

“Sin preocupaciones. Incluso si es desafiada por la lanza, una deberá responder con la fuerza. Más bien sería mejor decir que una siendo una niña quien no conozca la etiqueta del campo de batalla sería verdaderamente vergonzoso. ¡En última instancia, Athena es la hija celestial de la muerte y la guerra!”

Athena de repente creció en su altura, pasando de ser una niña hacia una joven de diecisiete o dieciocho años de edad, con su madurez llegando hasta un sentido de la belleza y un vigor dinámico. La apariencia y los poderes de la hermosa chica evolucionaron al mismo tiempo.

La herida del hombro sanó al cerrarse y detenerse el sangrado.

Como el arma icónica de una parca, una guadaña con un largo eje se manifestó en su mano derecha. Su hoja era de un color negro azabache. Encarnando la oscuridad y la tierra – esta era el arma de la reina gobernante del subterráneo inframundo.

“¡Ahora bien, vien con todo lo que tengas, Lancelot du Lac!”

“Lo aprecio bastante. Este caballero expresa el mayor respeto hacia su coraje.” Lancelot respetuosamente contestó en lo alto de su caballo.

A pesar de que ella había crecido más, Athena aun se encontraba en una altura en donde debía estar mirándolo hacia arriba. Pero ella se echó a reír sin miedo.

“… Pero dios de la guerra, una lo sabe. Seguramente no estás completo en este momento, ¿no?”

“¿Ah, sí? Es bastante inteligente.”

El proceso de llevar a cabo el renacimiento de Excalibur y cancelar el hechizo del guardian había comenzado hace un mes y medio.

Sin embargo, Lancelot aún no se había restablecido en un sentido completo de la palabra.

“Una se informa desde la sabiduría, no eres ni un [Dios Correcto] ni un [Dios Hereje]. Permaneciendo a largo plazo en este estado intermedio, a tu cuerpo aun le

falta acostumbrarse a este mundo. En fin, gastas la mayoría de tu tiempo con una aturdida conciencia, ¿no es así?”

Lancelot asintió lentamente como respuesta ante las palabras de la diosa.

“Es cierto modo. Por el bien de inyectar vigor al cuerpo exhausto de este caballero, hay que sumergirse en las nubes tormentosas todos los días para ser alcanzado por un rayo. Sin esto, el enlace del cuerpo con la tierra se siente como que si se estuviera separando. Pero gracias a usted, este Caballero ya no necesita vagar sin rumbo”.

Incluso mientras confesaba su debilidad, el caballero se mantuvo relajado y tolerante.

“Por otro lado, bueno, no hay motivo para preocuparse. Este caballero ha ofrecido su máximo respeto y por lo tanto luchará hasta el final, ¡concluyendo con nada más que la muerte misma!”

Frente a un duelo a muerte, estaba completa y absolutamente intrépido.

Como si estuviera viendo las hojas de hierba flotando lejos en las corrientes de agua sin ningún cuidado en el mundo.

“Este caballero va a ir a toda velocidad con su máxima potencia para derrotar a Athena. Por favor, comprenda que la batalla es lo que este caballero ha estado buscando durante mucho tiempo a través de miles de días y noches, este es el estilo de Lancelot. Llendo hacia el viento locamente soplado, valientemente galopando un rayo, aplastando enemigos en un instante. De hecho, esa es la forma de ser del caballero”.

“¡Ha-! Bueno. Si ese fuera el caso, una deberá responder con todo también!” Athena dio un paso gigante.

Este fue un salto gigantesco que ninguna criatura bípeda podría haber tomado de forma natural. En un solo salto, cerró la distancia de 100 metros entre ella y Lancelot montado en su caballo blanco. Voló tan elegantemente como un pájaro blanco con las alas emplumadas.

“¡Oh Tierra, conoces la determinación de una! ¡O oscuridad, entiendes la creciente emoción de una! ¡Tal como una es del largo linaje de la matriarca, la presente Athena juzga a este seguidor del acero como el archienemigo!”

La voz adorable gritó palabras hechizos en voz alta.

Boom boom boom boom BOOM. Con un sonido aterrador que helaba los huesos, el suelo comenzó a retumbar.

Era un terremoto. El cielo también comenzó a oscurecerse, o más bien, la oscuridad se extendió hacia él. De algún modo, las amplias llanuras de Tracia se desplomaron repentinamente desde la luz del día con un manto de oscuridad.

“Esta mano del Señor Caballero contamina sus restos divinos, rezo para que me conceda su absolución.”

Lancelot silencio murmuró mientras tranquilamente montó su corcel blanco sobre la tierra temblando. Volando hacia el cielo, el caballo y el jinete divino eran completamente imperturbables por las amenazas sobre el nivel de los terremotos.

“¡Rasgando la antigua tierra, penetrando los cielos, la Espada Divina que trae las estrellas que caen, ahora es el momento de su declaración, ante la mano del Caballero del Lago, que suenen una vez más los cuernos de la guerra!”

Desde lo alto de su montura, Lancelot extendió su mano hacia la hoja blanca incrustada en el suelo temblando.

Guinevere había despertado la nueva Excalibur. Inmediatamente, la hoja blanca de 50cm dejó la superficie de la tierra y voló hacia la mano de Lancelot.

“¡Poderes místicos de la encina, préstenle su fuerza al caballero!” Guinevere utilizó inmediatamente magia.

Un árbol de roble de repente se manifestó en la hoja blanca convocada y procedió a aparecer en la mano derecha de Lancelot. Combinando la cuchilla y el largo eje se hizo una verdadera [Lanza].

La divina Lanza Excalibur había nacido.

“¡Colapsando la tierra tierra y abriendo el suelo, he aquí la canción violenta de la diosa de la destrucción!”

Cuando Athena comenzó a cantar, el suelo por debajo de Lancelot y su caballo divino colapsó.

El terremoto atacando las vastas llanuras se hizo aún más intenso, creando grietas en el suelo. Al mismo tiempo, cientos de serpientes negras volaron desde el suelo. Lancelot y su querido caballo fueron enredados y arrastrados por las serpientes enseñándole sus colmillos y tratando de arrastrarlos hacia la tierra.

“Vientos de niebla, soplen hacia atrás.” Mientras montaba su caballo, Lancelot cantó.

Niebal comenzó a fluir a su alrededor. Además, los cuerpos materiales del caballero y del caballo divino perdieron su color y forma.

La niebla estalló continuamente llegando a ser más gruesa y más gruesa. Era así como la densa niebla se cernía sobre los lagos, con una visibilidad de menos de 5m.

“… ¡Señor caballero no podré acompañarle en su fortuna de la batalla!” Usando la magia de vuelo, Guinevere huyó por su seguridad.

Al verla irse, Lancelot quien se había convertido en la niebla, murmuró: “La diosa Athena… es un enemigo peligroso y formidable.”

La autoridad de convertirse en niebla era parte de su inmortalidad como [acero].

La niebla no podía ser golpeada. La niebla no podía ser cortada. Sin embargo, Athena era el gobernante del inframundo. Ella sostenía la máxima autoridad sobre todo lo relacionado con la muerte y la inmortalidad. Era natural para ella estar bien informada en los métodos inmortales del [acero], pero había un problema.

“Sin embargo, el encuentro de este caballero es verdaderamente su desgracia. Este caballero es la espada divina invencible galopante que pisotea innumerables dragones y serpientes. Incluso Athena, o más bien, precisamente porque eres Athena, la derrota es inevitable.”

Estaba actualmente exhibiendo las artes marciales de su espada las cuales había perfeccionado en lo más alto.

Este era el ataque final e impactante del asesino de dragones. Para Athena, se trataba de un arma mortal similar a un depredador natural debido a que los dragones y las serpientes son las encarnaciones violentas de la gran diosa madre tierra.

Lancelot y el caballo divino volaron en forma de niebla materializándose en el aire.

Volaron hacia la nube de tormenta que había descendido desde la primera vez que la convocaron. Dentro de las nubes oscuras, donde los relámpagos crepitaban y se provocaban, el caballero le habló en voz baja a su querido caballo.

“Respondan a la voluntad del hijo amado, dividan al gran y venerado enemigo, vamos a tomar la forma de un relámpago y la vida de este caballero se les hes confiada.”

Lancelot preparó la lanza divina señalando su hoja hacia adelante.

¡El caballo blanco divino galopó sucesivamente hacia el suelo, donde Atenea estaba de pie!

Habían tomado la forma de un rayo al salvar a Guinevere al principio. Pero esta vez se movieron a gran velocidad – a una velocidad de dios, y esta vez con un extremo poder destructivo también.

Este impacto y poder destructivo fueron comparables a un meteorito enorme que hubiera descendido desde los cielos.

¡Crash!

Un meteoro blanco se derrumbó con la velocidad de un rayo. Fue un martillo de hierro divino que desafió la existencia.

El caballero blanco y el caballo divino descendieron del cielo cargando hacia la tierra como un dios de la destrucción. Al llegar a la tierra en un instante, la lanza divina se extendió.

Athena blandió la guadaña de color negro azabache con la intención de desviar la hoja de la lanza divina.

Esta era la habilidad divina de la diosa cuando percibió la punta de la lanza acercándosele con la velocidad de dios.

La Lanza y la guadaña, las dos armas se enfrentaron entre sí con violencia.

Una tormenta se creó en el momento del impacto. En el ojo de la tormenta estaban Lancelot y Athena, mientras que todo lo demás en su entorno fue destrosado por el clón formado del impacto.

La tierra se desmoronó bajo los pies de Athena.

La vegetación que crecía en las llanuras de Tracia, la tierra y las rocas fueron todas desenterradas junto con el viento.

La superficie de la tierra se transformó en como un cráter. La enorme zona excavada fue de aproximadamente 2 o 3 kilometros de diámetro y el ambiente retumbó.

En la parte inferior de este cráter, elchoque de la diosa y el dios de la guerra se intensificó.

Athena absorbió la esencia de la tierra, con la infusión de poder sin igual en sus delgados brazos de chica. La oscuridad se materializó en nueve serpientes demoníacas que intentaron aplastar a Lancelot con sus mandíbulas.

Sin Embargo, el resultado final fue de lo más inesperado.

Al final, la guadaña de Athena salió volando por la lanza divina de Lancelot y las serpientes demoníacas de la oscuridad fueron aniquiladas por el impacto resultante.

Esto se logró por una caída de meteoros desde los cielos hasta la tierra derrumbándose.

“Guh – gah, ¡¡aaaaaaaaaaaaaaah!!”

Finalmente ensartada a través del pecho por la lanza divina, Athena emitió gritos dolorosos.

Sin embargo, los ojos de la serpiente siguiero mirando a Lancelot.

¡Implacablemente, su deseo de venganza seguía ardiendo como fuego!

El caballero blanco dio patada en el vientre del caballo divino con la intención de pasar a través de la ruptura de la diosa por completo. Sin embargo, la diosa, traspasada por la lanza, reunió el poder divino de la tierra, tratando de producir una fuerza de repulsión para hacer retroceder a Lancelot en su forma de meteorito blanco.

En términos de kendo, sería descrito como una situación de Tsuba-zeriai.

Athena era verdaderamente digna de ese nombre. Lancelot generosamente la alabó con admiración cuando llamó a la chica a quien estaba protegiendo.

“¡Amada niña, ahora es el momento de liberar los poderes místicos del Santo Grial!”

(¿¡Que debo hacer, Señor Caballero!?)

Los pensamientos de Guinevere llegaron volando desde muy lejos.

“El Santo Grial tiene la propiedad de absorber la fuerza de vida de las grandes diosas de la madre tierra y almacenarla. ¡Ahora es la oportunidad perfecta para obtener la fuerza vital de la clasificada más alta diosa de la madre tierra! ¡No la pierdas!”

(¡Entendido!)

Más instrucciones no fueron necesarias.

Una urna de oro, el Santo Grial de repente apareció junto a Lancelot. “Caballero del Lago, ¿¡Qué es lo que estás planeando!?”

“Porque probablemente el que tan solo la derrote, no será suficiente para superar su inmortalidad. Sin embargo, sería un asunto completamente diferente si el Santo Grial absorbe toda su fuerza de vida. Adiós, Hereje Athena. Fue el enemigo más formidablemente adecuado que este caballero hubiera esperado para la batalla”.

¡Desde la herida donde la lanza divina Excalibur estaba perforada, la fuerza vital de la gran diosa de la madre tierra, Athena, comenzó a derramarse y fluir hacia el Santo Grial!

“¡Esto parece ser una técnica misteriosa!”

Athena envolvió el Santo Grial con una niebla negra proveniente de sus manos.

Lancelot se dio cuenta de que era un gas corrosivo. Sin embargo, el Grial continuó absorbiendo la fuerza vital de Athena. ¡Con un brillo lustroso, el recipiente de oro no vaciló!

“Este es el poder infinito que ofrece el Señor Caballero, el buque creado al sacrificar la fuerza de la vida de la diosa madre tierra igual a su rango, lo llamamos el Santo Grial”.

Lancelot explicó con indiferencia hacia la sorprendida Athena.

“Da la impresión de ser un material como la tierra, pero no lo es en realidad. Con la sabiduría divina, la cual está simbolizada por la verdad de los cielos y la tierra.

Incluso para usted, Athena, no puede ser destruido.”

“Guh… ¿Que tal? Es como el Gorgoneion que una buscaba, un recipiente indestructible inmortal.”

Con su hermoso rostro palidecido, Athena murmuró.

Sin embargo, Lancelot se asombró por los ojos de la diosa que aún no perdían su brillo.

“Una lo siente con claridad. La fuerza de la vida de una de está apagado, está siendo devorada por ese buque de allá.”

En un momento en el tiempo, el movimiento de Lancelot y su caballo divino se detuvieron. Al final, ya todo su esfuerzo se había gastado al detener la carga de los meteoros.

“¿Esta será la embarcación que completará la caída de la diosa sierva de la madre tierra? ¡Oh Desesperación!”

En este punto, el Santo Grial ya se había cobrado la vida de un buen número de diosas madre tierra.

Incluso Athena no tenía forma de escapar. Sin embargo, la diosa no perdió la voluntad de luchar. Agarró con fuerza y sacó la lanza atravesándole el pecho. La sangre se derramó en un torrente desde la herida penetrante entre sus pechos.

Athena procedió a mostrar una sonrisa de desaliento absoluto.

“Sin embargo, una es la diosa de la sabiduría, quien reclama todos los conocimientos como su posesión. Un pequeño juguete como este Santo Grial, una nunca esperó que este cuerpo lo descubriría y lo experimentaría desde primera mano. ¡Pero aun así, este suceso no encaja en el estilo de una, por lo que una se comprometerá en la venganza!”

Las manos salpicadas por la sangre de Athena se dirigieron lentamente hacia el Santo Grial.

Entonces, el Santo Grial parecido a una urna, comenzó a volar hacia Athena. “¡Santo Grial que absorbe la vida, una será tu guardiana!”

Athena se acercó con las manos para tocar el Santo Grial, causando que la gran urna de la altura de un niño desapareciera en un instante.

Fue absorbido en el cuerpo de la diosa.

“Una prefiere dejarlo por ahora, Caballero del Lago. ¡Tú reembolsaras el resto en otra oportunidad!”

Después de haber devorado el Santo Grial, Athena empezó a hundirse en la tierra. Lancelot cargó hacia delante buscándola y giró su lanza.

Sin embargo, ya era demasiado tarde. La punta de la lanza sólo logró perforar el aire.

“¡Qué desastre!… ¿Quién podría esperar que las cosas hubieran terminado así?”

“No, señor caballero. Guinevere cree que este resultado no es absolutamente desfavorable.”

Cuando Lancelot sacudió la cabeza con tristeza, Guinevere le respondió después de haberse devuelto con la magia de vuelo.

En la parte inferior donde el cráter había estropeado la llanura de Tracia, el caballero y la chica se hablaron entre sí.

“Athena parece haber devorado el Santo Grial para suprimir sus efectos. Sin embargo, Guinevere no cree que esto sea suficiente para detener el funcionamiento de absorción de la vida del Santo Grial”.

Guinevere habló como alguien quien tiene un vínculo misterioso con el Santo Grial. El artefacto divino había sido creado por la deidad matriarca de todas las diosas de la tierra a través de sacrificar su propia inmortalidad y divinidad. Mientras que el Santo Grial permaneció activo en la tierra, fue hecho para que siempre fuera indestructible.

“Incluso si lo dejamos tal como está, en este punto deberíamos acumular una cantidad considerable de energía mágica. No importa lo que pase, a partir de ahora hay una conexión entre la espada divina del Señor Caballero y el Santo Grial de Athena.”

“Ejercer el acero que divide las estrellas, ¿es así?”

Lancelot murmuró. En la batalla de ahora mismo, él simplemente lo había utilizado como un objeto afilado.

El acero conocido como la legendaria Excalibur aun tenía que mostrar su verdadero valor…

“Pero antes de que esa forma se pueda lograr, ¿ella logrará eliminar el Santo Grial de su cuerpo?”

“Incluso si eso sucede, también puede ser igual de bueno. Después de haber tragado el Santo Grial en su cuerpo para suprimirlo, el regreso de Athena no tomará más de la mitad de un mes”

“Entonces Athena va a morir, ¿es así? En ese caso, tal vez no sea tan malo.” Lancelot asintió.

Un “camino” siempre aparecía en el final.

Si fuera abandonado en algún lugar o fuera separado por cualquier distancia, siempre y cuando siquiera existiendo el Santo Grial en la tierra, seguiría absorbiendo la vida de Athena.

El artefacto divino que había sido creado a costa de la vida inmortal.

Este era su aspecto verdaderamente aterrador. La sabiduría y las oraciones de la diosa de la muerte aún tenían que ser talladas en lo más profundo de la tierra. Por otra parte, los poderes del Santo Grial se extendían hasta los confines más lejanos de la tierra.

“En ese caso, chica, ¿Athena no es de ninguna preocupación por ahora?”

“Sí. Guinevere ahora irá a Japón, la isla donde el maestro duerme. Por favor concédame su protección.”

Lancelot cogió en silencio las riendas de su querido caballo volando hacia el cielo y recuperando su brillo con la escapada de Athena. Todavía poco acostumbrado a las condiciones de la tierra, el ataque de potencia de ahora ya había agotado su poder divino.

Él debía tener un buen descanso entre las nubes de tormenta, una vez más. El Hereje Lancelot.

A pesar de su abrumador poder de destrucción, todavía no podía considerarse totalmente restablecido en este punto.