Last Round Arthurs (NL)

Volumen 2

Capítulo 6: El Sangriento Santo Y El Caballero Con Los Escudos Rojos

Parte 1

Había pasado algún tiempo después de que Emma había sido despertada a su nuevo Royal Road.

El grupo estaba en algún lugar dentro del Área Tres de la ciudad internacional de Avalonia, en cierta casa de estilo occidental con un salón lleno de muebles finos.

“En serio… Incluso si todo fue una farsa, desearía que pudieras haber sido un poco más indulgente conmigo”, reprendió una chica con una túnica negra.

Ella fue a quien Sir Lamorak le envió la cabeza volando en el estacionamiento del sótano. Contra viento y marea, ella estaba bien y sana mientras estaba parada en la esquina de la habitación.

“Fue una llamada cercana. Quiero decir, casi muero… Bueno, supongo que tendríamos que llegar a los extremos para engañar a los ojos de Rintarou Magami”.

“Hey, Morgan… ¿Conoces la mejor manera de disfrutar de una bebida?” Sir Lamorak dijo, hundiéndose profundamente en un lujoso sofá e ignorando las objeciones de la niña. Ella sorbió su vino.

Durante un tiempo, sir Lamorak admiró la tenue luz de la lámpara que pasaba a través del líquido carmesí en su vaso. Sus dulces labios lo besaron.

“… No entiendo lo que estás tratando de decir. ¿Qué intentas sugerir con esa pregunta?” preguntó la chica de negro, llamada Morgan, con ojos impresionados.

“Hee-hee… Chateau Latour 1950… me gusta este”, se susurró el caballero.

Sir Lamorak recogió la botella de vino que había colocado sobre la mesa baja con una tapa de cristal y miró esa etiqueta. “Está bien, continuemos donde lo dejamos. La respuesta es la destrucción. Es entonces cuando una persona es la más bella y querida del mundo. Combinar esta destrucción con una bebida… Ahora ese es el néctar de los dioses en el cielo… Esa es la conclusión a la que he llegado”.

“… ¿Es esa la razón de? ¿Es por eso que respondiste a la llamada de Emma Michelle?” Morgan parecía exasperado.

Sir Lamorak sonrió. “Si. Sé que la destrucción de Emma será magnífica, especialmente con todo su abigarrado conjunto de ideales falsos. Es una chica amable que nunca podrá lograr sus objetivos falsos. Incluso un Jack así de bueno no puede salvarla. Y la estoy apoyando con todo en mi arsenal. Cuando sepa la verdad, se sentirá perdida, llorando por la decepción, la tristeza y la desesperación, incapaz de aceptar los hechos. Solo imaginar la dulzura de esas lágrimas… profundiza el sabor de este vino”, dijo Sir Lamorak en éxtasis, inclinando el vaso para pulirlo.

Gulp. Su cuello seductor se contrajo.

“Aaah… Sí, por eso, Emma es el mejor Rey para mí. Tiene sentido para mí apostar todo por ella. No pude estar presente en la destrucción del Rey Arturo, aunque puse toda mi alma en la línea por él… ‘Esta vez, buscaré la visión de la destrucción del Rey en mis ojos… y veré que suceda’… Por eso Peleo.”

“Ha-ha-ha… estás loca”, dijo Morgan con alegría y desprecio. “Estoy asombrado de que te llamen caballero de la Mesa Redonda que protege la fe cuando vivías un estilo de vida pródigo desordenado. Y eso es decir algo, verte desde la época de la leyenda. Tu retorcido sentido de la lealtad. Tu amor por la destrucción. ¿No se supone que eres cristiano? ¿No tienes miedo de la ira de tu Dios, tu Padre?”

“¿Asustada? ¿Por qué lo sería?” Sir Lamorak preguntó con perplejidad. “Soy amada por Dios, más que nadie en este mundo”, dijo, como si fuera un hecho. Ella habló sin ninguna duda o duda.

“Soy el caballero más fuerte que existe. Nunca he perdido en una batalla uno contra uno. Quiero decir, debes saber esto. Un duelo entre dos caballeros es una ceremonia sagrada que se nos otorga como la voluntad del Dios todopoderoso. Si Dios me rechazara, si recibiera el castigo divino, habría perdido mi lugar hace mucho tiempo. ¿No es así?”

“……”

“Sí, sé que Dios me ama porque he acumulado mil victorias. Porque Dios me ama, me prometen la victoria. Como soy victoriosa, Dios ha perdonado mis pecados. Dios está afirmando mis formas retorcidas.

“Por eso, hasta que mi vida termine, continuaré probando el amor de Dios con mi espada.

“Como soy quien soy, no puedo permitir que las cosas descansen en paz y orden. Amo la destrucción y anhelo el placer. Continuaré lanzándome hacia adelante, peleando mil batallas, resultando en una montaña de cadáveres y un río de sangre. Eso es caballerosidad para Lamorak de Gales”, dijo Sir Lamorak sin la menor vacilación.

“¡Ha-ha-ha! Ha-ha-ha-ha… Rintarou Magami… Quiero decir, Merlín, el soldado sin igual y el mago más fuerte del mundo. Mi querido amor. Mi amado. Cómo te he anhelado, pero nunca pude encontrar una oportunidad para pelear. Si lo derroto, puedo demostrar el amor que Dios tiene por mí. ¡Para mí conocerlo en esta era solo puede ser la voluntad de Dios! ¡Aaah, es maravilloso! ¡Qué mundo tan hermoso! Para mí desbordar con el amor de mi Señor, cumplido. ¡Qué radiante y sublime!”

Como una niña virtuosa, sonrió, dibujando una cruz sobre sí misma con la mano izquierda y juntando las manos como si rezara.

“Por eso respondiste a mi trato cuando te contacté en secreto”, dijo Morgan, como si estuviera casi exasperada con ella.

“Me hiciste poner una Maldición de un Corazón Cambiado sobre Emma para avivar las llamas del amor… Ibas a hacer que Emma y Rintarou Magami se separaran para tener el pretexto para luchar contra él hasta la muerte. Lo hiciste para no desviarte del camino caballeresco de los caballeros. Lo hiciste para destruir profundamente a Emma.”

“Sí, así es”.

“Aaah… Me pregunto si tu imprudente plan realmente funcionará. Según cómo lo veo, Emma ama sinceramente a Rintarou Magami. Me pregunto si ella podrá odiarlo”.

“Todo estará bien. Estoy segura de que irá según lo planeado”, declaró Sir Lamorak con confianza. “Rintarou Magami ciertamente rechazará a Emma… Traicionada, Emma luchará con amor y odio. Rintarou Magami elegirá a Luna Artur, la que es como la reencarnación de Arthur. Tengo fe en que no hay otro Rey en su mente, pero… la razón más grande de todas”, se detuvo por un respiro, “es porque Dios me ama.”

Las palabras de sir Lamorak estaban llenas de tanta convicción que incluso Morgan solo podía suspirar.

“No lo entiendo. ¿No amas a Emma, tu señor, desde el fondo de tu corazón?”

“Si, la amo. Incluso renunciaría a mi cuerpo, mi alma, cualquier cosa por ella.”

“Entonces, ¿por qué la estás tratando con crueldad?”

“Porque… esta es la única forma en que puedo amar a alguien”.

En ese momento, el tono de Sir Lamorak bajó ligeramente.

“Debo haber nacido trastornado. Quiero obligar a mi amor a destruir. Quiero destruir con ellos. Quiero que caigamos lo más bajo que podamos. Pero a veces me imaginé otra situación… Si yo fuera una persona que amaba normalmente con una persona de apoyo que fuera la misma… Me preguntaba qué pasaría”, dijo, como si fuera inevitable. Sir Lamorak sonrió levemente, solo.

“Sir Lamorak, parece que no nos veremos cara a cara”.

“Sí, no esperaba que fuera tan inquebrantablemente persistente o noble”, dijo Sir Lamorak, como si tratara de obtener un aumento de Morgan.

Por un momento, las cejas de Morgan se arquearon ligeramente.

“¿Oh? ¿Toqué un nervio? Ja, ja, perdón por eso. Es una broma, Morgan”.

“… No lo hiciste. No tengo idea de lo que quieres decir.”

“Correcto. Ha-ha-ha. Como bruja, has llevado a muchos hombres a la locura como una tentadora sin igual… Bueno, dejemos las observaciones preliminares en eso… y pongámonos a trabajar pronto”.

Sir Lamorak miró a Morgan, que parecía disgustado. Ella dejó el vaso y se levantó.

“Creo que Rintarou Magami debería estar comenzando a moverse sobre Emma ahora mismo. Los detendré justo en el medio”.

“Qué broma… Bueno, está bien. Sir Lamorak, si dice que luchará contra Rintarou Magami, eso es suficiente para mí. Nuestros intereses se alinean después de todo”.

Después de esa conversación, Sir Lamorak y Morgan comenzaron a correr por la oscuridad de la noche, dirigiéndose a la iglesia donde estarían Rintarou y Emma.

Después de eso, Rintarou traicionó a Emma, y Sir Lamorak intervino antes de que pudiera llevar a cabo su plan.

Emma estaba frenética, y Sir Lamorak apenas la salvó.

“¡Qué pena verlo!”

Eso fue lo primero que Luna le dijo a Rintarou cuando se reunieron.

“…Cállate.” Rintarou la enfrentó con los brazos cruzados. Se sentó con las piernas cruzadas en el suelo y se enfurruñó.

Estaban en un sitio de construcción abandonado en el Área Tres, rodeado de otros edificios. Alrededor de ellos había escombros desmenuzados, tablones de madera cubiertos de basura, vigas de soporte y barras de refuerzo perforando el concreto.

Luna, Felicia, sir Kay y sir Gawain rodearon al malhumorado Rintarou.

“¡Bwa-ha-ha! ¡Eso es lo que sucede cuando te vas solo y tratas de resolver una pelea solo! ¿Ves lo que pasa cuando te dejas llevar?”

“¡Cállate! Silencio.”

“¡Será mejor que estés agradecido con Felicia por meterte una Guía Pixie en tu bolsillo!”

“¡Sí, tengo la idea! ¡Alto y claro! ¡Estaba equivocado! ¡Muchas gracias, Felicia! ¡¿Eso es lo suficientemente bueno para ti?! ¡Maldita sea!” Se revolvió el pelo y se rascó la cabeza. Un pequeño hada había estado volando sobre su cabeza desde antes… Finalmente, desapareció, derritiéndose en el aire.

“En serio… eres tan imprudente”, dijo Felicia con exasperación, educadamente sentada en una lona que cubría los materiales de construcción. “Señor. Magami… Nunca pensaste en ir al lado de Emma desde el principio, ¿verdad?”

“… Bueno”, confesó Rintarou, como si se le hubiera ocurrido la idea. “Emma y yo… nos unimos un poco en el pasado. Por mi culpa, Emma se quedó atrapada peleando en una batalla en la que no deseaba participar. Por eso quería darle una despedida silenciosa.

“Entendí lo que Luna estaba tratando de hacer cuando dijo que estaba tratando de ‘venderme’ y por qué aceptó el desafío de ‘decidir sus capacidades como reyes’. Esa fue tu forma de evitar que Lamorak y yo peleáramos, ¿verdad? Debido a que Luna inició esa conversación, Lamorak tuvo que seguir el juicio y las instrucciones de Emma, porque ella es una caballero leal. Es solo en su personaje. La lealtad de Lamorak hacia su Rey es profunda”.

“Sí es cierto. Tu transformación de Fomoriana… en realidad no es una buena habilidad, ¿verdad? Es el tipo de poder que devora lo irremplazable… como tu vida, alma o cordura”.

Como si tratara de escapar de los ojos sinceros de Luna, Rintarou se volvió.

“… Bueno, de todos modos, estaba pensando que podría usar esta tregua como una oportunidad para meterme en la cabeza de Emma. Por suerte, Emma estaba sobre mí. Estaba pensando que podría haber podido usar eso de alguna manera”.

“”Oh, eso solo cruza la línea.”” Sir Gawain y Sir Kay se apartaron de él.

“No voy a negar eso. Pero la terca de Emma, a pesar de su aspecto. Ella no es del tipo que escucha si tuviera que hablar con ella. Emma es diferente de Luna, Felicia, Kujou o cualquier persona que realmente tenga la capacidad de ser un Rey. Ella está vacía. Francamente, ella es el peor tipo de persona para convertirse en Rey.”

“Pero incluso si estaba en el extremo receptor de sus rencores, tenía que detenerla. De lo contrario, ella experimentaría algo peor. Emma siente que tiene una obligación con las personas que la alimentaron y la abrigaron. Ella es diferente de un imbécil como yo. No quiero que una buena chica se dirija hacia su fallecimiento… Este no es el momento de ser quisquilloso sobre cómo la detenemos”.

Rintarou suspiró de molestia. “Pero… necesitaba un poco más de tiempo antes de que pudiera haber usado el Sello de Control Tallado para lograr que Emma abandonara. Lamorak terminó interponiéndose en el camino…

Bueno, después de todo lo que sucedió, estoy seguro de que hay otra persona moviendo los hilos detrás de escena. Realmente me atraparon… Mierda.”

Rintarou de repente miró a Luna como si hubiera notado algo. “En realidad, Luna… no pensé que lo resolverías”.

“¿Averiguar qué?”

“Bueno… que no te traicioné. Me salvaste justo a tiempo porque lo hiciste, supongo.”

“Oh, de eso es de lo que estás hablando. ¿No es simple?” Luna levantó el pecho y habló con una sonrisa que cualquiera hubiera querido arrancarle de la cara. “¡Porque al final, nunca llamaste a Emma tu Rey ni una sola vez!”

“!”

“Cuando tomamos caminos separados durante nuestra situación con el Sr. Kujou, dijiste lo mismo. ‘Adiós. Que tenga una buena vida, alteza… No, Luna’. Pero… justo cuando me dejaste, ¿qué dijiste?”

“Nos vemos. Cuídate, Luna… quiero decir… Rey.”

“Así es como hizo clic conmigo de alguna manera. Realmente no entendí la razón, pero entendí que gané en la batalla contra Emma para ver cuál de nosotros era el Rey más capaz. Sabía que volverías a verme de inmediato”.

“……” Rintarou se volvió hacia el otro lado, luciendo amargado y sombrío…

Luna dio la vuelta y miró su rostro desde arriba mientras sonreía con aire de suficiencia.

“¿Qué? Supongo que esto significa que realmente te gusto. ¿Quieres servirme como vasallo? ¡Ah-ha-ha! ¡Dios mío! ¿Qué voy a hacer contigo? ¡Eres tan cauteloso!”

“¡Uuuuurg…! Cállate… ”

Habían llegado a un punto en el que terminaría avergonzado, incluso si intentaba refutarla. La cara de Rintarou se puso roja ya que solo podía quedarse en silencio.

“Aaah. ¿Podrías dejar de actuar como un par de tontos ya?” Felicia estropeó las cosas como si tratara de decir que ya había tenido suficiente. “¿Entonces, que vamos a hacer? Emma definitivamente nos va a devolver el golpe”.

“Si nos quedamos aquí, no hay forma de evitar un choque… Tenemos que atacar”, declaró Rintarou, levantándose. “Pero esta vez, todo esto es mi problema personal y mi responsabilidad… Arreglaré esto por mi cuenta, así que todos se apuren y se váyanse”

“¡Eres un Idiota! ¿Qué clase de rey abandona su vasallo?” Luna entrometió.

“L-Luna… ¿tú…?”

¡Apuesto a que quieres que vaya contigo, Rintarou! ¿Cierto? ¿No es así? Quieres ¿verdad? ¡Dios mío! ¡Supongo que no puedo negarme! Limpiar después de los errores de un vasallo es un deber del Rey de todos modos”.

Rintarou estaba en shock cuando Luna felizmente lo golpeó en la mejilla.

“Si Luna se niega a retirarse y pelea, entonces yo, por supuesto, pelearé también”. Sir Kay asintió en respuesta.

“¡Aunque nuestra tregua es temporal, es indescriptible que un Rey abandone a un aliado! ¡También entraré en la lucha! Además de eso, ¡ya estoy preparado para ello!” Felicia declaró grandiosamente. “¿B-Bien, señor Magami? Te debo por salvarme la vida… ¡pero no te hagas una idea equivocada! ¡No estoy empuñando mi espada por tu bien! ¡Estoy haciendo esto por mi amiga, Luna! ¡Esto es para Luna!”

“Hmph. Y, por supuesto, mi espada se unirá a la de mi señor. Para ser sincero, tengo algo de equipaje con Sir Lamorak, pero como un caballero sin importancia de la Mesa Redonda… le mostraré algunas agallas”. De pie, nervioso, sir Gawain les lanzó una amplia sonrisa.

“… U-Ustedes chicos”. Rintarou parecía un poco sorprendido mientras miraba a los que lo rodeaban. Se encontraron con su mirada.

Finalmente, resopló como si no le importara menos y se alejó.

“Entonces, ¿Rintarou? ¿Cuál es el plan, técnicamente? No sabemos nada sobre las habilidades de Excalibur de Emma… y Sir Lamorak es estúpidamente fuerte”, dijo Luna.

“Además de eso, Rothschild de Sir Lamorak significa problemas… ¿Dijiste que automáticamente entra en modo de defensa y tiene la misma cantidad de fuerza que Sir Lamorak? ¿Cómo terminamos jugando a este juego imposible…?” Felicia se fue apagando.

“Para ser honesto, ¡no creo que podamos vencer a Sir Lamorak, incluso si los cinco nos unimos contra ella! ¡Ah-ha-ha!” Sir Gawain se echó a reír.

En esa situación completamente desesperada, todos solo podían sonreír secamente.

“Cuando se trata de Sir Lamorak, nuestra mejor apuesta es que nuestro más fuerte en batalla la enfrente desde la línea de fuego. Ese sería Rintarou. Pero… para ser honesto, creo que los dos están en otro nivel”, agregó Sir Kay. “A pesar de que tenemos más en número, si Rintarou y Sir Lamorak comenzaran a pelear, nadie podría darle a Rintarou ninguna ayuda significativa”.

“Quiero decir, incluso esa vez peleamos con Sir Lancelot… lo mejor que pudimos manejar fue apenas detenerse…”, se lamentó Felicia.

“¿Qué tal si dejamos a Sir Lamorak a Rintarou, y todos los demás aplastarán a Emma? Sin embargo, eso también parece cobarde”, admitió Luna.

“¿Crees que sir Lamorak dejaría que eso sucediera? Ella tiene el Rothschild. Si ella fuera a darle un escudo a Emma para que la protegiera, entonces no podríamos ponerle un dedo encima”.

Ante el comentario de Sir Gawain, Luna se sorprendió. “¡¿Qué?! ¡¿E-Ella puede hacer eso?! ¡¿No es injusto?!” Luna preguntó, sorprendida.

“Ella sí que puede. Cuando Sir Lamorak muestra su verdadero valor… en realidad es mucho más asombroso de lo que piensas. Ella puede proteger a alguien más en la batalla,” respondió Sir Gawain vergonzosamente.

“L-Literalmente eso es lo único caballeroso de ella… De todos modos, tenemos que hacer algo con respecto a Rothschild de Sir Lamorak…” Luna asintió con preocupación, y todos hicieron lo mismo.

“Creo que hay una manera de romper el Rothschild”, dijo Rintarou con indiferencia.

“””… ¿Disculpa?””” Sus ojos pequeños y brillantes se reunieron en Rintarou.

“¡Oye, oye! Gawain… ¿Por qué estás actuando tan sorprendido? Has roto el Rothschild de Lamorak, ¿verdad? En el camino de regreso del torneo Surluse.” Rintarou miró a sir Gawain, cansado.

“Bueno… pero Sir Lamorak acababa de luchar contra docenas de caballeros excepcionales. Le lanzamos un ataque sorpresa mientras estaba exhausta… y también enfrentamos a sus cuatro contra uno… ”

“¡Ha-ha-ha! Eres un idiota. No hay forma de que su cuarteto de charlatanes haya podido enfrentar y vencer a Rothschild de Sir Lamorak. No importa lo cansada que esté”, señaló Rintarou, sin piedad.

“¡Rintarou Magami! ¡Me rallas todos los nervios!” La cara de sir Gawain se sonrojó mientras golpeaba los pies.

“Entonces… ¿qué, Rintarou?”

“Tengo una idea sobre cómo podemos derrotar a los Rothschild. Pero, sinceramente, es un riesgo. No tengo idea si tengo razón sobre esto. En realidad, nadie ha peleado realmente contra Lamorak y ganó. Incluso me pregunto si Sir Lancelot podría haberlo hecho.”

Sir Lamorak versus Sir Lancelot. En la era de las leyendas, la batalla nunca se había realizado. Pero fue un pensamiento escalofriante.

Rintarou continuó con precaución. “Pero si estamos tratando de ganarle a Emma, todo lo que podemos hacer es apostar por eso”.

“Estoy dentro”, dijo Luna sin dudarlo. “Porque es tu análisis, Rintarou. Un rey tiene que creer en su vasallo.”

“Bueno, no hay alternativas, supongo… yo también estoy dentro”, agregó Felicia.

“¿Y? ¿Qué estamos haciendo realmente?” Sir Gawain preguntó.

Todos creían en Rintarou. Todos asintieron.

“Felicia… Gawain… todos ustedes…” Rintarou observó todas sus miradas y parpadeó.

“Ha-ha, todos somos… ‘amigos’ en este momento, después de todo”, agregó Felicia, luciendo tímida.

Les dedicó una bonita sonrisa. “Bueno, ninguno de ustedes necesita hacer nada. Si hicieras algo, causaría problemas”.

“… ¿Eh?” Felicia dejó escapar, sin comprender totalmente la imagen.

“Me siento un poco mal por decir esto después de que te has puesto nervioso y prometiste ayudar, pero… todos ustedes estarán en el camino”.

“¡¿QUEEEEEEE?! ¡Nos guiaste! ¿Nos estás diciendo que no nos dejas en el equipo? ¡¿Q-Q-Q-Qué significa esto?!”

Felicia y Sir Gawain volvieron los ojos inoportunos hacia Rintarou.

“Va a ser uno contra uno”.

“¿Huh?”

“¿No lo entiendes? En las batallas de Lamorak… ella está extrañamente obsesionada con tener estos duelos. Ella considera sus ‘duelos’ sagrados e inviolables. Es su orgullo como caballero. Es por eso-”

Rintarou sonrió con una expresión malvada y malvada. En la reivindicación, aunque no estaba claro de qué se sentía reivindicado.

“Voy a golpearla fuerte… y destrozarla”.

Ellos estaban corriendo. Estaban corriendo por los suburbios del Área Tres de Avalonia. Emma y sir Lamorak se lanzaron a la velocidad del viento.

Volaron por los aires desde los tejados de edificios esporádicos. De vez en cuando, saltaban al camino, corriendo a toda velocidad por las calles, antes de volar de nuevo en el aire. Pasaron corriendo las paredes del edificio y bailaron en la oscuridad.

“… Están cerca”, murmuró Emma mientras seguía el aura residual dejada por la Guía Pixie.

“Si. ¿Pero estás segura de esto, Emma? ¿Estás seguro de que quieres dejarme encargarme de Merlín… quiero decir, Rintarou Magami?” Sir Lamorak preguntó descaradamente mientras corrían por los tejados.

“No me importa. El resultado es el mismo, ya sea que lo haga con mis propias manos o con las suyas”. Emma apuntó al siguiente edificio, deslizándose por el aire.

“Pero… amas a Rintarou Magami, ¿no?”

“Es específicamente porque lo amo que… no puedo perdonarlo… ¡lo detesto…!” Gritó Emma, tensa. Sus ojos estaban nublados por los efectos de la Maldición de un Corazón Cambiado.

Dios está en su cielo. Todo está bien con el mundo. Sir Lamorak se rio en secreto para sí misma.

Finalmente, los dos se dispararon a través de la noche en las sombras.

Fue entonces cuando sucedió algo.

El paisaje casi parecía estar envuelto en la oscuridad al distorsionarse en su lugar. Su visión se vio envuelta en las sombras profundas de la noche, y el área a su alrededor se transformó en un mundo bañado por la luz del sol que caía sobre ellos.

“¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!”

En el mismo momento, una fuerte aclamación llegó a sus oídos y se vieron rodeados de un entusiasmo salvaje.

“¡¿Qué es esto?!”

Ante el cambio repentino en su situación, Sir Lamorak y Emma se detuvieron automáticamente.

Ya no estaban en la ciudad internacional de Avalonia.

Hasta donde alcanzaba la vista, había una llanura que continuaba expandiéndose. El sol irradiaba y ardía en el cielo. Los caballeros a caballo los rodeaban con una magnífica armadura.

Un área de audiencia los rodeaba a ellos y a los caballeros. Nobles y mujeres se reunieron a su alrededor, y los vítores del público en general se levantaron con entusiasmo y aliento.

Heroicas pancartas ondeaban en el aire desde varios campamentos que habían sido construidos para los caballeros.

Las chispas que volaban en el aire parecían casi nunca desaparecer.

“… ¿Qué es este lugar? ¿Qué pasó en el mundo?” Emma miró con cautela sus alrededores.

“¡Ah! ¡Oooh! … ¡Ahhh! ¡Esto es…!”

Sir Lamorak estaba embelesado. Parecía nostálgica cuando miró esa escena.

“Oye, ¿Qué te parece?”

“… Emma. Lo hiciste.”

Rintarou y Luna aparecieron frente a los dos.

“… ¿Creaste este inframundo, Rintarou?” Preguntó Emma, interrogándolo.

Rintarou sonrió. “Heh. No soporto tener un grupo aterrador dirigido a nosotros. Estamos haciendo esto sin ningún truco barato… arreglemos esto sin que nadie se interponga en el camino”.

“… ¿Solo nosotros?”

“Sí es cierto. Sir Kay no hará el corte cuando se trata de poder de batalla. Felicia y Sir Gawain no están involucrados en este caso, porque esto no tiene nada que ver con ellos. Sería mejor si Luna y yo resolviéramos todo esto contigo y con Sir Lamorak. Eso también debe ser un alivio para ustedes, ¿verdad? Es por eso que configuré este inframundo”.

“Hmm… no sé si puedo creer eso”. Emma miró a Rintarou con ojos firmes. “Eres un cobarde y un traidor. Felicia, Sir Kay y Sir Gawain están probablemente en algún lugar de este inframundo… Debes estar ocultándolos para que puedan emboscarnos por sorpresa.”

“No están aquí. Esos tipos no están en ningún lugar del mundo en este momento. Deberías saber eso, ¿verdad? ¡Eres un rey! ¡Echa un vistazo a este mundo subterráneo!” él promovió.

Emma usó su sexto sentido.

La Cortina de la Conciencia que separaba el mundo real y el ilusorio se había vuelto temporalmente ambigua en ese momento. Un hechizo de transformación del Inframundo se había utilizado para crear el otro mundo.

Cuando se trataba de la creación de estas llanuras, había World Fusion Grade. Este era un indicador de si el inframundo había sido creado del mundo real o del ilusorio.

Hubo cuatro etapas: Assiah para la materia, Yetzirah para la formación, Beri’ah para la creación y Atziluth para la fundación. El inframundo podría estar más cerca del ilusorio y fortalecerse al ascender esos pasos en ese orden. Si estuviera más cerca de la realidad, dominarían las leyes físicas y la materialidad. Si se pareciera más al mundo ilusorio, los elementos psicológicos y la espiritualidad se harían más fuertes.

En cualquier caso, la única persona que podía entrar y salir libremente de un inframundo sin penalización era el creador del mundo. Si el encantador fuera derrotado, el mundo desaparecería de inmediato.

Además, los infiernos no podían mantenerse indefinidamente. El mundo no permitiría que existiera esta gran inconsistencia.

Esas eran las reglas absolutas.

“… ¡¿Qué?!”

Mientras buscaba en el inframundo, Emma estaba en estado de shock. Ella comparó las creaciones del inframundo con las bases establecidas.

“¡¿Yetzirah?! No debería haber esperado menos de ti, maestro… ¡No hubiera esperado que hicieras una Transformación del Inframundo a este nivel! ¡Solo hacer un Assiah requiere un mago de primera clase…!”

Este World Fusion Grade hizo que entrar y salir del inframundo fuera casi imposible. Realizar una invocación de caballero ya era imposible, incluso en una Assiah.

En otras palabras, los humanos dentro no podían escapar, y los de afuera no podían entrar.

Emma estaba más sorprendida por algo más.

“¿Y… no hay nadie más aquí…? ¿No hay nadie… excepto nosotros…?”

Aunque parecía que la multitud de espectadores y caballeros estaban allí, solo parecían tener sustancia.

Por eso, los cuatro, Rintarou, Luna, Emma y Sir Lamorak, eran los únicos en el inframundo.

“¿Qué piensas? Hemos quemado todos los puentes. Así de listos estamos. ¿Ahora lo entiendes?”

“¿Realmente… tienes la intención de resolver esto solo con ustedes dos…?”

“Si, exacto. Emma, lo siento, pero Luna te va a enfrentar cara a cara y…” Rintarou desenvainó su par de espadas y se volvió hacia sir Lamorak.

“¡Soy tu oponente, Lamorak! Es un duelo uno contra uno, ¡tal como quisiste! ¡Este es el tipo de lugar en el que te gustaría resolver nuestra batalla, siendo tan pretencioso como tú!”

“… Me gusta esto”. Sir Lamorak estaba vestido en un vacío oscuro, y sus ojos desquiciados y ardientes se profundizaron en el tono.

Su cuerpo entero estaba poseído por una euforia que incluso habría penetrado los cielos. Atravesó su cuerpo como un rayo.

“¡Nunca lo olvidaría! ¡Como si alguna vez lo olvidara! ¡Esto! ¡Eso es todo! ¡Estos son los motivos del torneo Surluse! Este fue el pico de mi gloria cuando fui envuelto en el amor de Dios. ¡Aquí fue donde fui asesinado por la mano de Sir Gawain y sus tres compinches cuando iba camino a casa!”

Tenía una sonrisa especial, como si se hubiera vuelto loca. Ella era salvaje, amenazante.

“¡Así es! ¡Eso es todo! ¡Este es el lugar más adecuado para recuperar todo! ¡Derrotaré a Merlín y probaré el amor de Dios por mí nuevamente! ¡Recuperaré mi gloria como la más fuerte! ¡Ah-ha-ha-ha-ha! ¡Tienes mi agradecimiento, Merlín! ¡Te quiero! ¡Te quiero! ¡Te quiero! ¡Te amo tanto que no lo soporto! ¡Te quiero tanto que quiero matarte! ¡Aaah! ¡Merlín! ¡Tu sangre, tu carne, tu cabello, tus órganos, tus huesos, hasta el último pedazo de ti es todo, todo mío! ¡Ha-ha-ha-ha-ha-ha-ha!”

Como si ya no pudiera esperar, Sir Lamorak tomó su claymore cruciforme y la clavó en el suelo como una insignia sagrada. Juntó las manos y se arrodilló devotamente como una doncella que ofrece una oración.

“Laudamus te. Benedicimus te. Adoramus te. Glorificamus te. Gratias agimus tibi propter magnam gloriam tuam. Cum Sancto spritu, en gloria dei patris… Alabamos a nuestro Señor. Honra a nuestro Señor. Reverencia a nuestro Señor. Adora a nuestro Señor. Ofrezca nuestra gratitud a la gran gloria de nuestro Señor. Al Espíritu Santo y Dios, nuestro Padre… ¡Amén!”

Sir Lamorak se puso de pie y desenvainó su arma, preparándose.

Sus ojos puros que miraban apasionadamente a Rintarou podrían haber sido de una doncella por su primer amor.

“¿Qué devoción… no eres popular?”

“Desearía que alguien intercambiara lugares conmigo… Ni siquiera estoy tratando de causar problemas”, respondió Rintarou, mirando harto de Luna, que preparó su espada.

“Bueno… ¡De todos modos, estamos haciendo esto, Luna!”

“¡Entendido! ¡Déjame a Emma a mí!”

Rintarou invocó su transformación Fomoriana. Luna volvió a preparar su Excalibur y dio un paso adelante.

“Hmph, eso es lo que esperaba. Te mostraré exactamente cuán diferentes somos realmente, Luna”, bromeó Emma.

“Bien, Merlín. A pesar de que eres el dueño de este mundo subterráneo, es mejor que no te escapes cuando las cosas se complican. Bueno, si haces eso, simplemente enviaré la cabeza de Luna después de ti”.

Emma y Sir Lamorak se enfrentaron a sus oponentes.

“¡Luna!” Rintarou alentó a la chica a su lado. “¡Emma es mejor guerrera que tú! ¡Pero definitivamente eres un mejor Rey! ¡Abrumadoramente!”

“?!” Los ojos de Luna se agitaron y Emma frunció el ceño tristemente.

“¡Sé que ganarás! ¡No hay forma de que pierdas! ¡Será mejor que ganes!”

“Heh… tú también”.

Ni siquiera se miraron durante este breve intercambio.

Y luego, patearon el suelo y corrieron hacia adelante.

Rintarou se dirigió hacia Sir Lamorak, Luna hacia Emma.

Cada uno se enfrentó a sus oponentes y se enfrentaron.

Sir Lamorak y Emma prepararon sus espadas antes del gran choque.

Después de toda la lucha, este momento encendió su batalla final.

“¡AHHHHHHHHHHHHHH!” La multitud gritó. Los vítores se levantaron. Rintarou y Sir Lamorak se enfrentaron y se pararon, cortándose el uno al otro en su batalla a muerte. Los espectadores hicieron una gran ovación para animarlos.

“¡Uuuu-rah!”

“¡Ha-ha-ha-ha-ha-ha-ha-ha!”

En su Transformación de Fomoriana, Rintarou balanceó sus espadas derecha e izquierda, golpeándolas en el claymore de Sir Lamorak, que cambió de rumbo en el aire como un torbellino.

Cuando sus cuchillas se encontraron, el impacto sopló como una tormenta y golpeó el área que los rodeaba, arrasando a medida que avanzaba.

“Uf.”

Hubo un destello extremadamente rápido. El ataque de Sir Lamorak desde arriba fue detenido por las espadas izquierda y derecha de Rintarou.

Pero esa había sido la imagen residual. Quemaron el suelo mientras lo pateaban en un ángulo agudo y se rodeaban. Rintarou dio la vuelta a la espalda de sir Lamorak.

“¡Tchhhh!”

Si no podía obtener su cabeza, la espada helada lo atacaría.

Sin embargo, esa barra horizontal que se extendió como una onda…

“Ha-ha.”

¡Gonnng! La atmósfera sonaba como si se hubiera deformado. Bits de luz volaron en el aire.

Sir Lamorak debe haber leído su próximo movimiento. Se dio la vuelta con su Claymore y lo detuvo.

“Tch”. Rintarou chasqueó la lengua. En ese momento, Sir Lamorak usó el resorte en todo su cuerpo para balancear su claymore frente a ella.

“¡¿Aaaaah?!” Su fuerza física era inimaginable.

Con esa fuerza, Rintarou voló horizontalmente hacia atrás, voló como si fuera un proyectil en un tirachinas.

Dondequiera que los pies de sir Lamorak tocan el suelo, se alzan columnas de tierra.

Sir Lamorak siguió a Rintarou mientras estaba impresionado. Ella se apresuró como una bala.

“¡Maldición!”

¡Schwoof! Schwoof-schwoof. Rintarou rodó por el suelo y apenas se enderezó.

“¡Ah-ha-ha-ha-ha-ha-ha-ha!” Sir Lamorak parecía volar por los aires para perseguirlo, derribando a Claymore sin piedad.

Rápidamente pateando el suelo, Rintarou voló hacia la derecha.

Junto a una explosión, estallaron columnas de tierra, y el Claymore atravesó un gigantesco cráter en la tierra.

Pero para entonces, Sir Lamorak ya había comenzado a perseguir a Rintarou nuevamente. Rintarou rodó instantáneamente hacia la izquierda.

Con otra explosión, se enviaron más terrones por el aire mientras su arma volvía a clavarse en el suelo.

Y luego sir Lamorak lo persiguió.

“Guh”. Incapaz de evadirla a tiempo, Rintarou cruzó sus dos espadas sobre su cabeza para ponerse a la defensiva.

“¡Ah-ha-ha-ha-ha-ha-ha-ha!”

Su poder estaba cerca de una explosión de nitrato. Su Claymore empujó a través de la defensa de sus espadas y la destruyó.

Y ella cortó a Rintarou en pedazos.

Pero cuando el tendón roció a su alrededor, su carne se derritió repentinamente y desapareció en el aire.

“No me subestimes”.

Ella solo había borrado una silueta. Usando eso como señuelo, Rintarou rápidamente bajó de arriba para golpear desesperadamente la cabeza de Sir Lamorak.

Pero algo en el aire cambió, acompañado de una explosión y chispas.

El Rothschild había sido invocado sobre la cabeza de Sir Lamorak, deteniendo su espada.

“Tch… ¡Maldita sea! ¡Hah…! ¡Hah…!”

Sir Lamorak saltó ágilmente y tomó distancia de Rintarou.

No había pasado mucho tiempo desde el comienzo de la batalla, pero el aliento de Rintarou ya se estaba agotando.

“Bien… eres bueno”, ronroneó Sir Lamorak, acariciando la espada de su espada con compostura y ocio.

“Eso fue excelente, Rintarou. Sus ataques se hacen más fuertes con cada intento… Mi cuerpo se calienta cada vez más… Diría que somos altamente compatibles”. Ella lo miró con pasión, llevando seductoramente sus labios para tocar la hoja de su claymore.

“Pero… creo que podrías ser mejor. Mucho mejor.”

“……”