Fushi no Kami (NL)

Volumen 5

Capítulo 1: Flores En Ciernes

Parte 4

Sentí que el futuro tomaba forma frente a mis ojos. Gracias a los denodados esfuerzos de nuestro confiable equipo de investigación, el primer experimento de prueba de ácido sulfúrico había sido un éxito. Logramos obtener ácido sulfúrico.

“Disculpe, estoy buscando a Ash. Escuché que está aquí”.

Al mismo tiempo que miraba con gran satisfacción el ácido sulfúrico extraído dentro de una botella de vidrio, una joven entró en nuestro cobertizo de experimentación. Era Lady Suiren, que parecía bastante inocente con su atuendo sacerdotal. No parecía acostumbrada a llevar ese tipo de ropa.

“Si estoy aquí. ¿Cómo puedo ayudarte?”

“Oh, ahí estás. Escuché que has vuelto de la cacería de treant, así que quería pasar y darte las gracias”. Siguiendo todas las reglas de etiqueta que había aprendido, la actual jefa de la aldea de Ajole inclinó la cabeza lo más cortésmente posible. “Realmente aprecio toda la amabilidad que ha mostrado desde el ataque de treant en invierno hasta ahora”.

“Escucharte decir eso hace que todos nuestros esfuerzos valgan la pena. Me aseguraré de informar a las tropas también”.

El grupo de búsqueda entrante y las tropas de asalto seguramente se regocijarían con las palabras de gratitud del joven jefe de la aldea. Y dado que habíamos terminado nuestra exploración de treant, probablemente debería organizar una fiesta de celebración para recompensarlos por todo su arduo trabajo.

“Oh, pero se lo dirás a Glen tú misma, ¿verdad?” “¿Eh? Uhm, yo-yo no… “

“Por favor, dígaselo usted misma”, me decidí por ella con una sonrisa.

Leyendo entre líneas, los otros miembros del laboratorio también sonrieron a la ahora roja Lady Suiren. Entre la multitud de hombres de mediana edad con cicatrices y aspecto rudo, la adorable risa de Lady Reina sobresalió como un pulgar dolorido.

“Quiero decir, es muy obvio que ustedes dos… ¡Aun así, no deberían burlarse de Suiren así, Ash!” Lady Reina me regañó.

“No estoy haciendo nada por el estilo, simplemente estoy mostrando apoyo”.

“Hm, ¿es así?”

Sonreí torpemente cuando Lady Reina me dirigió una mirada gentil, como si dijera: “Ten cuidado con ella”. Ella se estaba volviendo cada vez más como una hermana mayor para todos.

Como tal, también tomó la iniciativa de explicar la situación actual a Lady Suiren. En cualquier caso, llegaste en el momento adecuado, Suiren. Acabamos de terminar nuestro experimento. Estoy seguro de que Madre Yae quiere saber cómo te fue, para que puedas decirle que fue un éxito cuando regreses”.

“¡S-Sí, lo haré! ¿Qué experimento?”

“Ash es el único que conoce los detalles… pero intentamos fabricar ácido sulfúrico”.

“¿Á…ci…do sul…fú…ri…co? ¿Ácido sulfúrico?” Lady Suiren repitió las palabras un par de veces antes de aplaudir y sonreír. “¡Yo conozco ese!

¡Es lo que usas para hacer fertilizante! Escuché que encontraste el material necesario para producirlo durante la expedición de búsqueda de Treant.

¿Ya lo hiciste?”

“Tienes razón. Este es ácido sulfúrico. Realmente tienes buena memoria”.

“¡Gracias! Todavía tengo mucho que aprender, pero estoy tratando de priorizar las cosas relacionadas con la agricultura”, explicó Lady Suiren mientras miraba la botella de vidrio en mi mano. Parecía feliz y sorprendida al mismo tiempo. “Vaya, parece agua normal. Esperaba algo más. Entonces, si vierte esto sobre huesos de animales, ¿producirá un fertilizante más eficaz?”

“Sí, según la literatura. Pero todavía tengo que probarlo yo mismo, así que no puedo confirmarlo ni negarlo”.

“¡Correcto! ¡Ojalá funcione! ¡Lo haré lo mejor que pueda!”

Su última frase se refería al hecho de que ella era la encargada de probar el fertilizante de ácido sulfúrico en los campos. Al contrario de nuestro primer encuentro, Lady Suiren se había vuelto muy proactiva. Actualmente, fue sacerdote en prácticas y colaborador de la Oficina de Promoción de la Reforma del Territorio. Esta formación fue el resultado de su deseo de mejorar sus conocimientos agrícolas tras el desafortunado desmantelamiento temporal de la aldea de Ajole.

Además de ella, alrededor de una docena de aldeanos se habían mudado a la ciudad, donde estaban ayudando a administrar los campos de prueba del laboratorio. Le había pedido a Lady Suiren que fuera su líder. En algún momento, la iba a poner a cargo de registrar los resultados y planificar nuevos experimentos. Al ver la forma en que le preguntaba fervientemente a Lady Reina sobre los detalles del experimento, me di cuenta de que no pasaría mucho tiempo hasta que tuviéramos un nuevo gerente para los campos de prueba.

Sin embargo, aunque Lady Suiren era ambiciosa, todavía le faltaban algunas habilidades fundamentales. Como no había ido a la academia militar, actualmente estaba estudiando como aprendiz en la iglesia, donde estaba aprendiendo lectura, escritura y matemáticas.

“Suiren, ¿cómo van tus estudios con Madre Yae?”

“Oh, sus explicaciones son realmente fáciles de seguir. ¡El método de enseñanza de Folke es asombroso! Mucho más fácil que cuando traté de aprender a leer por mí mismo en el pueblo”.

Yo conocía muy bien ese método. Aun así, ¿cuándo empezó a usarlo Madre Yae?

“Bueno, no importa el método, me alegro de que tus estudios vayan bien”.

“Venir a la ciudad como siempre he querido y estudiar… Realmente se siente como un sueño. Y todo es gracias a ti. Realmente no sé cómo devolverte el dinero”.

“¡Para nada! También estoy agradecido de que alguien nos ayude con los campos de prueba. Necesitábamos la mano de obra”.

Además, solo transmití los deseos de Lady Suiren a mis superiores, Lady Maika y Lord Itsuki, por lo que no me costó mucho esfuerzo. Mis superiores habían vuelto a demostrar su brillantez al no traspasar a un trabajador tan competente.

“Usted dice eso, pero trabajar en el campo es otra oportunidad para ampliar mis conocimientos agrícolas. Otra cosa por la que agradecerle”.

“Sí, es una relación que beneficia a ambas partes”.

Sin duda continuaría por un largo tiempo sin que nadie se quedara con el extremo más corto del palo.

Sin embargo, Lady Suiren mostró una sonrisa agridulce al escuchar mi evaluación. “Estoy muy agradecida, pero toda esta amabilidad es abrumadora”, murmuró.

“Sé lo que quieres decir”, dijo Lady Reina.

“Al principio, todos se sienten así”, afirmó Hermes.

Aparte de mí, todos parecían sentir empatía. Desconcertado, incliné la cabeza.

“No hay nada de malo en aceptar favores. Especialmente si expresas tu gratitud”.

“Eso es exactamente de lo que está hablando”, respondió rápidamente Lady Reina. “Ojalá tuviera tus problemas”.

“No estoy seguro de haberlo entendido completamente… pero parece que tienes algunas preocupaciones”.

Incluso si no entendía completamente la situación, sabía muy bien lo que se sentía al sufrir preocupaciones. Cuando se trataba de mis sueños, estaba constantemente preocupado por el camino que tenía por delante. Como tal, traté de ofrecer algo de consuelo.

“Ahora que lo pienso, pronto visitaremos la región de Sukuna, que es famosa por sus aguas termales. Esa sería una gran oportunidad para relajarse y pasar una nueva página”. Sonreí llena de emoción. La primera vez que voy a una fuente termal en este mundo.

Lady Suiren, sin embargo, parecía aún más angustiada. “¿Estás seguro de que puedo ir contigo después de haber causado tantos problemas? Siento que eso sería demasiado…” dijo con una sonrisa irónica.

“No tienes que preocuparte. Lord Itsuki lo aprobó él mismo, y aprovechar la amabilidad de su jefe es el deber de cualquier buen empleado”.

Cuando presenté por primera vez mi propuesta de ir a las aguas termales, Glen, que había contribuido mucho a nuestra operación de tratamiento, expresó abiertamente que quería llevarse a Lady Suiren. Lord Itsuki, Lady Maika y yo, naturalmente, simpatizamos con sus sentimientos. Era un niño perdidamente enamorado, por supuesto que quería llevar a la persona que le gustaba a unas agradables vacaciones.

En cuanto a Lady Suiren, de alguna manera se las había arreglado para mantener a flote la aldea de Ajole durante los últimos dos años. Al final, había demostrado un gran liderazgo como jefa de la aldea ante la completa destrucción de Ajole. Por lo tanto, no fue extraño que la administración recompensara sus esfuerzos. Además, no haría ninguna diferencia si hubiera una persona más que nos acompañara en nuestro viaje a las aguas termales. Con todo, tenía sentido invitar también a Lady Suiren. Por lo tanto, se había decidido que ella nos acompañaría. No había necesidad de que ella se preocupara por causar problemas. Si ella quería pagarme de alguna manera, debería haberse divertido. Y tal vez le lavó la espalda a Glen.

“Además, fue una invitación del vizconde Sukuna. El principal objetivo del viaje a las aguas termales será una conferencia con él y Su Excelencia el Conde Sacula”.

El vizconde Sukuna era uno de los políticos con los que habíamos compartido nuestra receta de jabón. Si bien habíamos actuado en nuestro propio interés, el vizconde había estado extremadamente feliz de obtener la receta del jabón como administrador de una región famosa por sus aguas termales. En consecuencia, había extendido esta invitación como muestra de gratitud.

Además, el Conde Sacula había programado una reunión, ya que presentaba la oportunidad de atender algunos de los asuntos administrativos que se habían acumulado recientemente. Por lo tanto, Lord Itsuki también se uniría a nosotros para entablar conversaciones diplomáticas con el vizconde y participar en una reunión familiar. No es exagerado decir que se trata de un asunto oficial de máxima prioridad.

Así es, es un viaje de negocios. Da la casualidad de que también es un relajante viaje a las aguas termales que nos ayudará a olvidarnos de nuestras preocupaciones.

Aparentemente, también era muy probable que tuviera la oportunidad de reunirme con el propietario de las aguas termales, el vizconde Sukuna, y nuestro señor, su excelencia el conde Sacula. Si jugaba mis cartas correctamente, podría establecer una red de conexiones que beneficiara mis esfuerzos futuros. ¡Qué emocionante viaje de negocios!

Mientras estaba absorto en mis planes y contaba mis pollos antes de que nacieran, los demás comenzaron a discutir entre ellos.

“Estoy asombrada de solo pensar en la invitación de una persona tan importante”, comentó Lady Suiren.

“Eso es natural si no estás acostumbrada. Quiero decir, yo todavía estoy nerviosa”, la tranquilizó Lady Reina.

“No te preocupes por eso. Ash es la única persona que puede mantener la calma e incluso esperar una situación como esta”, agregó Hermes.

“Como se esperaba de Ash”. “Es Ash después de todo.” “Sí, típico Ash”.

No me importa que saques tu propia conclusión, pero ¿por qué necesitas suspirar? Es casi como si fuera un niño problemático. Independientemente, había entendido sus preocupaciones.

“Parece que está nervioso por conocer al conde, pero puedo asegurarle que Su Excelencia es una persona muy amigable”, le dije.

Después de todo, había invitado a toda la Oficina de Promoción a pesar de ser una cumbre de los líderes regionales. Era un señor flexible y razonable. De hecho, el principal motivo de la invitación fue el hecho de que dos de las figuras más destacadas de Sacula se habían casado. Fue una luna de miel elegantemente arreglada para los recién casados. Dado que la Oficina de Promoción había expresado su deseo de un viaje a las aguas termales al mismo tiempo, logramos obtener su aprobación. Tiempo lo es todo.

¿Quiénes fueron los prominentes recién casados que preguntas? Un caballero que se había quedado soltero a pesar de su avanzada edad y una sacerdotisa más joven y hermosa que finalmente había logrado perseguirlo. Les deseo todo lo mejor para el futuro.

El vizconde Sukuna había proporcionado alojamiento en la posada de aguas termales más lujosa de la región. Si bien ese trato era natural para los invitados de honor, la familia Sacula, no esperaba que se extendiera a mí, el hijo de un campesino, también.

El bungalow de madera, que se había construido teniendo en cuenta la humedad de la zona, no parecía muy grande. Sin embargo, también ocultaba parcialmente el área de aguas termales. Detrás del edificio había una arboleda cuidadosamente arreglada, conocida como el jardín de la posada. El jardín contenía varias casas unifamiliares y fuentes termales, donde los invitados podían darse un baño a su antojo lejos de todo tumulto. Era perfecto para unas vacaciones tranquilas y reuniones privadas. Lord Itsuki nos había informado de esas reuniones secretas, de una manera tal vez inevitable para un resort de clase alta.

Oculto a la vista, también había guardias que patrullaban discretamente las instalaciones para enfrentarse a espías o asesinos. A diferencia de las tropas de Sacula que se especializaban en batallas de demonios, las tropas del vizconde eran expertas en detener las amenazas humanas. Su presencia era apenas perceptible, como ninjas. Incluso ahora, mientras me sumergía en un baño al aire libre, observando el encantador paisaje de ríos y árboles frente a mis ojos, podía ver a los guardias moviéndose con sus uniformes como pequeños puntos negros. Gracias por su arduo trabajo, expresé mi gratitud hacia las siluetas corriendo en mis pensamientos. Al mismo tiempo, sentí como si hubiera ascendido al cielo mientras me sumergía hasta los hombros dentro del baño.

“Ah, esto es genial”.

Fue como si me hubiera liberado de toda la fatiga de los últimos quince años en el momento en que el agua caliente tocó mi piel. Nada mejor que un buen baño, especialmente una fuente termal. Con una mente y un cuerpo relajados, podría planificar el futuro desde un punto de vista diferente.

Todo este tiempo, solo había estado activo dentro de la región de Sacula, pero ahora que había compartido mi receta de jabón, ese ya no era el caso. Después de todo, la familia real había monopolizado el negocio del jabón hasta ahora. A juzgar por la invitación del vizconde Sukuna, era seguro asumir que los avances tecnológicos de Sacula habían atraído la atención. Tenía que vigilar nuestra tecnología pública y secreta con la perspectiva de eventualmente entablar negociaciones con forasteros.

“Solo relájate, Ash. No hay necesidad de pensar tanto en una fuente termal”.

“Oh, hola, Sir George, quiero decir, Baleas”.

Baleas se había unido a mí en el aislado baño privado. Como era su luna de miel, había decidido dejar la dirección formal. Se enjuagó el cuerpo, que era mucho más musculoso que el mío, antes de unirse a mí dentro del agua.

En este mundo, la mayoría de las fuentes termales tenían baños mixtos, pero como la gente usaba ropa de baño, era una práctica completamente saludable. Los hombres solían llevar pantalones hasta las rodillas.

Sir George dejó escapar un suspiro de placer por el agua caliente. Continuó sonriéndome. “¿Sigues pensando en el trabajo? Intenta dejar que tu mente divague un poco. Trabajas mucho.”

“Si dices que trabajo demasiado, en realidad podría estar en territorio peligroso”.

En el pasado, había tenido experiencias con cargas de trabajo letales, como la inspección general de invierno de todo el equipo militar en el almacén.

Al escuchar mi respuesta seria, Sir George estalló en una risa alegre. “¿Ves? Estoy en lo cierto. ¡Ha ha! Lord Itsuki también dijo que sería convincente viniendo de mí. ¡No lo hagas preocuparse demasiado!”

Sir George me tocó el hombro con el codo. Parecía que su consejo era en consideración a su amigo cercano Lord Itsuki.

Estoy bien. Cuido mucho mi salud. “¿Y tú, Baleas? ¿No deberías pasar tu precioso tiempo libre con tu esposa recién casada en lugar de conmigo?”

Después de todo, era su luna de miel. Incluso les habían asignado una habitación aislada para invitados con un baño privado al aire libre.

“Pasando dos días seguidos solos, nos quedamos sin cosas que hacer, así que decidimos pasar un tiempo separados hoy”.

“¿Cómo dices eso ya? ¿Cómo recién casado? ¡Vamos, esfuérzate un poco más! “

“Es más fácil decirlo que hacerlo… No me molestes demasiado”.

El rostro sobrio y viril de Sir George adoptó una expresión miserable cuando suspiró. Hay una expresión que dice que “el amor te hace cautivo”, pero eso no parece aplicarse en absoluto a Madre Yae. O se podría decir que tal vez Sir George era demasiado torpe, a pesar de que era extremadamente meticuloso en su trabajo.

“¿Qué está haciendo Madre Yae en este momento?”

“Las otras mujeres la invitaron a hacer un recorrido por las aguas termales. Dijeron algo sobre querer su consejo como su superior”.

“¿Oh? ¿Un consejo de relación, supongo?”

Las chicas de la Oficina de Promoción debían de estar interesadas en las técnicas de una mujer como Madre Yae, que había sido capaz de ganarse a alguien tan aparentemente inexpugnable como Sir George. Todos estaban en la edad en la que mostraban interés en el amor y las relaciones. Podría ser especialmente útil para Lady Suiren; después de todo, su enamorado era un caballero igualmente serio.

En este mundo, los quince era la edad normal para contraer matrimonio. Es bastante natural teniendo en cuenta que incluso en los escalones superiores de la sociedad, donde la gente vivía en un entorno comparativamente bueno, la esperanza de vida media era de unos cuarenta años. En lo que respecta a los campesinos, cuya esperanza de vida era aún menor, tampoco era extraño que una joven de quince años tuviera hijos. En comparación con mi vida pasada, todos aquí vivieron sus vidas a toda velocidad.

“Eso tiene sentido. Me preguntaba qué podría haber sido”. Después de mostrarse impresionado por mi deducción, inusualmente comenzó a burlarse de mí con una expresión juguetona. “¿Quizás debería copiar a mi esposa y darte un consejo también?”

“¿Oh? ¿Quieres volver a investigar mi vida amorosa?”

Había pasado un tiempo desde la última vez que hizo eso. Cuando acababa de llegar a la ciudad, durante nuestra primera conversación privada, me había preguntado algo similar. En ese entonces, nos habíamos reído de que ambos éramos adictos al trabajo, pero inmediatamente después, le había concertado una cita con Madre Yae. Gran trabajo de mi parte, si se me permite decirlo.

“Has madurado bastante. Y ganó prestigio social”, dijo Sir George antes de dirigirse a mí con mi nombre completo y título, “Sir Ash George Fénix”.

¡Sí señor! A partir de esta primavera, me había convertido en un caballero. Después de la batalla de treant en la aldea de Ajole, Su Excelencia el Conde Sacula me había nombrado caballero. Mi apellido, obviamente, vino del fénix, el pájaro de fuego inmortal era ahora mi estandarte oficial.

“Formar una familia y que su nombre se transmita también es parte de sus deberes”.

“En cierto modo lo entiendo, pero carece de persuasión viniendo de ti, mi querido padre adoptivo”.

“Ah bien…”

Mi padre adoptivo Baleas, que había estado soltero durante mucho tiempo, se rascó la cabeza y trató de evadir el tema. Sí, mi padre adoptivo. Mi segundo nombre era “George” porque me había adoptado como su hijo, al menos durante un poco menos de dos años.

Después de graduarme de la academia militar, Lord Itsuki sugirió la adopción. Ser hijo de un granjero me habría puesto en desventaja al liderar las tropas y tratar con otros subordinados. Lo más probable es que también haya sido una consecuencia de que expresé mis dudas con respecto a mi estadía continua en la ciudad después de la academia. La influencia de Lady Maika estaba escrita por todas partes. Cuando consulté a la Sra. Yuika, ella me animó con entusiasmo a aceptar la oferta. Mis padres también estuvieron de acuerdo con la adopción, ya que solo afectó nuestra relación de manera superficial.

La gente a mi alrededor probablemente había estado más feliz de que yo me convirtiera en “Ash George” que yo mismo. Lord Itsuki se había sentido extremadamente aliviado, y Lady Maika se había regocijado como si la hubiera preocupado personalmente. Teniendo en cuenta todas las celebraciones, dos años realmente se sintieron demasiado cortos. Especialmente recordando el rostro de Lord Itsuki cuando le dije que había derrotado a ocho treants, un rostro como el de Sísifo rodando la piedra colina arriba.

Aunque Baleas solo me había acogido por un tiempo—aunque oficialmente todavía era mi padre adoptivo—, continuó dándome algunos consejos paternos sobre el matrimonio. “Puede que no sea el mejor ejemplo, pero siento que eso es persuasivo de otra manera. Verás, todo el mundo me decía que me casara. Eso fue bastante molesto…”

“Escuché que Lord Itsuki te estaba molestando bastante.”

“Sí, él era el peor de ellos. Siempre que llegaba una nueva sirvienta, intentaba concertar una reunión matrimonial. Fue bastante incómodo”.

La imagen de él enterrando su cabeza entre sus manos tenía ciertamente una persuasión extrañamente cómica.

“Y finalmente, fuiste acorralado por tu hijo adoptivo arreglando tu matrimonio por ti, ¿verdad?”

“¡Precisamente! Es tu culpa que me haya casado”. Llamarlo culpa mía lo hacía sonar como algo malo. “¿No estás contento con Madre Yae?”

“¡No, no, no es eso! Eso fue solo una forma de hablar… “

Madre Yae definitivamente parecía ser la pareja dominante en su matrimonio…

“Ahora que lo pienso, nunca me dijiste la razón por la que te quedaste soltera tanto tiempo”. Si lo recordaba correctamente, tenía algo que ver con un antiguo interés amoroso. Me hubiera encantado escucharlo. Por favor dime. “¿Madre Yae sabe la razón?”

“N-No, probablemente no… ¿A qué estás tratando de llegar, Ash?”

“Ya que soy tu hijo adoptivo, ¿te importaría decírmelo? Si me lo dices ahora mismo, todo esto se mantendrá en secreto entre nosotros”.

“¿Si te lo digo ahora mismo…?”

“Sí, si me lo dices ahora mismo, nadie lo sabrá”.

Si desaprovechaba esta oportunidad, existía la posibilidad de que alguien más se enterara. Madre Yae, por ejemplo. Aunque a juzgar por nuestra conversación, era probable que ella ya lo supiera, incluso si Sir George pensaba que aún no se había enterado. Ahora bien, ¿qué tan seguro está de que puede manejar el interrogatorio de Madre Yae?

Al escuchar mi amable advertencia, Baleas comenzó a sudar muchísimo. Se había dado cuenta del peligro de la situación, así que, con suerte, tenía una respuesta preparada.

“Uhm…”

En ese momento, sus ojos brillaron, como si hubiera encontrado una manera de contraatacar. Consideré mis opciones mientras esperaba su movimiento. Estaba dispuesto a aplastar cualquier excusa descuidada que pudiera traer.

“B-Bien. Después de todo, me he calmado. Podría ser una buena oportunidad para dejarlo en el pasado”.

“Ah, ¿de verdad?”

Parecía que se había resuelto él mismo. Sin embargo, la expresión de Sir George reveló que, aunque había estado acorralado, todavía no se había rendido. Era como un caballero dispuesto a sacrificarse para detener al enemigo.

“Sin embargo, no quiero ser el único que hable. Ash, ¿qué tal si hablas de ti primero?”

“¿Qué hay de mí?”

Si eso significaba escuchar la historia de amor secreta de Sir George, estaba dispuesto a compartir alguna información.

Como si estuviera a punto de jugar su carta de triunfo, Sir George proclamó su siguiente pregunta con cara de póquer. “¿Qué piensas de Lady Maika?”

“La amo.”

“Debes haberlo notado a estas alturas, ¿verdad? Incluso puedo decir que Lady Maika se siente atraída por ti”. Me ignoró y continuó exponiendo su caso con entusiasmo. Extraño. ¿No había escuchado mi respuesta? “Por supuesto, Lord Itsuki también lo notó. De hecho, me ha consultado sobre Lady Maika varias veces. Realmente ama a su sobrina. Se ha estado devanando la cabeza para ayudarla a cumplir su deseo entre bastidores”.

“Ya tenía mis sospechas…”

O más bien, yo había sido plenamente consciente de ello. Lord Itsuki había abogado abiertamente por Lady Maika cuando me convenció de que me quedara en la ciudad y cuando sugirió que sir George me adoptara. En lo que respecta a su amada sobrina, renunció a toda sutileza y a los modales que normalmente se le exigían a una persona noble. En ese sentido, Lady Maika lo superó con creces. Como se esperaba de la hija de la Diosa Yuika.

“Sé que tienes dudas debido a tus diferentes antecedentes sociales, pero como hombre, ¿cómo te sientes por ella? Como su padre adoptivo, me encantaría escuchar sus pensamientos honestos”.

Parecía que el monólogo de Sir George había llegado a su fin. Después de asegurarme de que realmente había terminado, repetí mi concisa respuesta. “La amo.”

“¿Qué?” Sir George ladeó la cabeza. ¿No me escuchó? “Como dije antes, la amo”.

“¿Quién?”

“Maika”.

“¿La amas?”

“Sí.”

“¿Románticamente?”

“Románticamente”. No había forma de aclararlo. “Eso responde a tu pregunta, ¿verdad?” Lo que significa que ahora es tu turno.

“¡Espera, espera, espera! ¡¿Lo estás diciendo tan a la ligera?!”

“Tú me preguntaste. Acabo de responder tu pregunta. Además, ¿podrías hablar un poco más tranquilo? Podríamos meternos en problemas si sigues gritando”.

Sir George se tapó la boca fácilmente. “¡P-Pero nunca mostraste ningún signo de responder a sus sentimientos! ¿Lo mantuviste en secreto?”

“No estoy seguro de si lo llamaría secreto. Hasta hace poco, no sabía que era el amor a mí mismo”.

Siempre me había gustado, pero fue solo el año pasado que comencé a verla como un interés romántico, probablemente porque mi cuerpo había madurado físicamente. Incluso mis objeciones morales relacionadas con los recuerdos de mi vida pasada no habían podido resistir el celo de mi pubertad.

Lady Maika se había convertido en una joven extremadamente encantadora. Era linda, bonita, talentosa y naturalmente se adaptaba a mi forma de hacer las cosas. Ella era mi interés amoroso ideal. Y me encantó cómo estaba dispuesta a recurrir a cualquier medio para lograr sus objetivos. Antes de darme cuenta, me había enamorado de ella. Durante el año pasado, había sentido la necesidad de abrazar a Lady Maika cada vez que me acercaba a ella. Sin embargo, como me había entrenado para convertirme en un caballero, mostré moderación. Durante mucho tiempo, había anticipado que sucedería una vez que ella hubiera madurado un poco más físicamente, y yo tenía razón. De alguna manera me las había arreglado para evitar convertirme en un lolicon.

“¿Te das cuenta de lo mucho que se preocuparon Lord Itsuki y Lady Yuika por esto?”

“No sé qué decirte…”

Estaba a bordo de un tren expreso de máxima prioridad hacia mi sueño lejano. Por supuesto, no iba a detenerme en una estación no programada. Incluso estaba preparado para atravesar las paradas programadas en mi ruta si corría el riesgo de perder tiempo. Si realmente querías detenerme, tenías que saltar de la plataforma y pararte en medio de las vías, pero incluso entonces, no podía garantizar que me detuviera. Por lo tanto, tenga cuidado de no quedar atrapado en un accidente fatal.

Realmente era un peligro. Hasta ahora, eso nunca me había molestado. Por el contrario, había seguido aumentando mi velocidad y los posibles riesgos que eso conllevaba. Sin embargo, una vez que tuvo a alguien especial en su vida, comenzó a considerar esos peligros.

“Puede sonar extraño viniendo de mí, pero soy bastante raro”. “No tienes que decírmelo. Todos saben eso.”

“Escucharte responder tan rápido duele un poco… Pero eso significa que eres consciente de que puedo ser un problema”. Sentí un extraño sabor amargo en mi boca y di una sonrisa irónica antes de continuar. “¿Un bicho raro como yo debería siquiera considerar el matrimonio?”

Esto fue diferente a involucrar a compañeros de trabajo o personas que siguieron los mismos sueños. Estaba hablando de la persona que amaba. Alguien por quien me sentí atraído. Alguien a quien quería ser feliz desde el fondo de mi corazón. Terminaría arrebatando su oportunidad en una vida social normal.

“No creo que a alguien como yo se le deba permitir casarse”.

Sir George quedó desconcertado por la expresión inusual de mi rostro. Después de examinarlo por un tiempo, pareció captar mi opinión y determinación. Finalmente, mi padre adoptivo frunció el ceño con expresión severa antes de responder: “Esa es tu opinión, pero—”

“No importa cuán valioso sea tu consejo, por favor guárdalo para ti”, lo interrumpí. Decididamente me negué a escucharlo, admitiendo que me sentía un poco culpable. “No es tu lugar el convencerme”. No te robaré la vida. Ni me arrebatarás la vida. Entonces, no te dejaré hablar. “Ella es la única a la que permitiré que me convenza”.

Al escucharme cerrar el tema con esa declaración, Sir George frunció los labios y se quedó en silencio. Al igual que cuando nuestras lanzas chocaron en la batalla, él observó de cerca cualquier abertura por la que cargar. Lo miré directamente a los ojos para hacerle saber que no iba a permitirle dar un golpe.

Finalmente, Sir George estalló en una risa silenciosa. “Ha ha, ¿pero puedes entrometerte en los asuntos de otras personas y casarlas?”

“En comparación con mi adopción, fue un empujón bastante humilde desde atrás. Realmente no hice mucho”.

A lo sumo, le dije a Madre Yae cuando Sir George estaba fuera del trabajo y qué tipo de comida le gustaba. Eso estuvo muy lejos de las maniobras políticas necesarias para que me adoptaran y me colocaran en mi trabajo actual.

“Sigo pensando que eres mucho más coercitivo”. “Eso no es cierto en absoluto”.

“Sé honesto, fuiste tú y no Lord Itsuki quien dio el golpe final, ¿verdad?”

Depende de cómo lo mires.

Sir George levantó las manos y se rindió al verme fingir ignorancia. “De cualquier manera, entiendo de dónde vienes. Incluso si te sugiriera algo, no le harías caso. “

“Sí, porque siempre estoy avanzando a toda velocidad hacia mis objetivos”.

A mi velocidad, perdería a cualquiera antes de que pudieran acercarse sigilosamente a mí. Fue un alboroto sin parar.

“Cualquiera que quiera conocer tus verdaderos sentimientos debe tener el coraje de interponerse en tu camino y enfrentarte de frente”. Mi padre adoptivo me entendió. Mientras asentía en afirmación, Sir George dejó escapar un suspiro exagerado. “Lady Maika realmente se enamoró de un tipo problemático”.

“Puede que sea una irresponsabilidad decirlo, pero estoy totalmente de acuerdo”.

Sir George sonrió agridulce ante mis comentarios egoístas antes de mirar a lo lejos, hacia la arboleda y el río. Había señalado el final de la conversación… pero no iba a dejarlo ir tan fácilmente.

Bueno, Baleas. Ahora es tu turno.” “¿Eh? ¿Qué quieres decir?”

No finjas que no lo sabes. “Desde que hablé de mí, ahora quiero escuchar tu secreto. ¿No es obvio?

Esa fue nuestra promesa. No iba a dejar que eludiera mi pregunta fingiendo que nuestra charla había terminado. Había estado esperando escuchar esta historia durante años.

“¿Está diciendo que no mantendrá su promesa, sir George?” “U-Uhm…”

¡Dígalo ya! ¡Eres un caballero adulto! ¿O tal vez preferiría que consultara con Madre Yae? Sobre su marido rompiendo su promesa de contar su historia de amor secreta.