Kami Tachi ni Hirowareta (NL)

Volumen 6

Capitulo 4: Regresar A Gimul

Episodio 20: La Decisión Del Maestro Del Gremio

Treinta minutos después de nuestra partida, nuestros carruajes bajaron por la carretera de la montaña rodeados de árboles. La sombra de los árboles significaba que estaba oscuro a pesar de ser de día, y aunque tenía un poco de frío, el viento era refrescante.

“Hey, Ryoma”, dijo Roche mientras disfrutaba del aire. “¿Algún interés en obtener familiares que no sean limos?” Miró el limo curativo sentado en mi cabeza. Ayudaba a vigilar las amenazas.

“Yo también tengo pájaros limour, en realidad”.

“¿En serio? Siempre pensé que solo coleccionabas limos”.

“Es sobre todo limos, es cierto”.

“¿No tienes interés en probar otros tipos de familiares?”

“Bueno, no es que me niegue a aceptar nada más que limos, pero hay muchos tipos de limos que son tan fascinantes. Centrarme en los limos tampoco me ha causado ningún problema, así que no he pensado mucho en obtener otro tipo de familiares”.

“Ya veo. Si no quieres trabajar con la gente, pensé que quizás utilizar más familiares también funcionaría”. Parecía que estaba sugiriendo eso en lugar de un grupo.

“Roche, sé que estás preocupado por Ryoma, pero no necesitas apresurarlo”, dijo Lucy.

“Supongo que sí. Me estaba preguntando”.

“Sí, no creo que el Maestro del Gremio te necesite para obsesionarse con esto. Lo siento, Ryoma, estoy seguro de que te está molestando”.

“No, sé que solo me está cuidando”.

“Eres una buen niño”, dijo Lucy con una sonrisa. “Hay mucha gente entrometida por ahí, pero no tienes que escucharlos. No creo que debas hacer nada demasiado peligroso o imprudente tampoco, pero cuando se trata de eso, no debes dejar de hacer lo que quieres hacer”.

“Gracias.”

“No es nada. Oh, pero al menos diré que quedarse solo con limos sería un poco desafortunado. Está bien si eso es lo que quieres hacer, pero has sido bendecido con la habilidad de usar magia de domesticación, por lo que puede que valga la pena echarle un vistazo a otros monstruos también. Si tuvieras un monstruo tipo caballo como un caballo rojo o un caballo de batalla, podrías montarlos, por ejemplo. Creo que domesticar a un animal en el que puedas viajar sería útil”.

“Tú tienes un punto.”

En este momento, mi viaje se realizó a pie o mediante magia espacial. De todos modos, nunca tuve problemas para viajar, pero un familiar en el que pudiera montar me ayudaría a conservar mi energía mágica y mi resistencia. No había forma de que los limos o los pájaros limour pudieran llevarme, e incluso si pudieran, probablemente sería más lento que simplemente moverme. Entonces, si quisiera poner esta idea en acción, tendría que capturar un nuevo monstruo.

“Si no está seguro de qué buscar, ¿por qué no preguntar al gremio de domadores?” Roche dijo. “Estoy bastante seguro de que tienen un mostrador de recepción donde puedes hacer preguntas como esa. En realidad, ¿no te han dado ya alguna sugerencia?”

“En realidad, bueno, técnicamente estoy registrado allí, pero al principio no podía aceptar ningún trabajo porque todo lo que tenía eran limos. Ahora no he estado en el gremio de domadores desde que entregué a algunos miembros a los guardias de la ciudad después de que acosaron mi tienda. No por ninguna razón en particular, pero me resulta un poco difícil visitarlo cuando no lo necesito”. “Entonces tal vez este sea un buen momento para que los visite”, dijo Lucy. “Parece que tampoco has tomado el familiar examen de aptitud”.

“No lo he hecho. Ni siquiera he oído hablar de eso”.

“El gremio de domadores hace que intentes formar contratos con un montón de monstruos diferentes y luego combinar esa información con tus resultados pasados para delimitar tus especialidades, por lo que escuché”.

“¿No es tu primera vez gratis?” Preguntó Roche.

“Lo es, si mal no recuerdo. Así que no estaría de más intentarlo”.

Ella tenía razón en eso. No me sentí incómodo de ninguna manera en este momento, pero parecía que podría valer la pena. Decidí hacerles una visita antes de que se me olvidara.

“¿Qué monstruos sería útil tener como aventurero?” Yo pregunté.

“Tendría que ir con algo que puedas montar”, dijo Roche. “Siempre he querido un wyvern o algo en lo que puedas volar”.

“Puede que me guste algún tipo de hada”, dijo Lucy. “Pueden usar magia, y se supone que hacer un contrato con uno también mejora los efectos de tu propia magia. Sin embargo, incluso encontrar uno y convertirlo en familiar es bastante difícil”.

Ambos tenían una amplia experiencia, por lo que hablar con ellos fue fascinante. Pero finalmente se nos acabaron los temas para discutir y llegó el momento del silencio. El aire en el carruaje se sentía pesado.

Cuando miré a los estudiantes, se congelaron. Desde mi encuentro del otro día, sentí que algunos de los estudiantes me estaban evitando, pero los de aquí me admiraban. Sin embargo, parecían verme tan asombroso que sentían cierta distancia entre nosotros. Podían hablar con Roche y Lucy muy bien, pero la conversación terminó cuando traté de unirme. Al final, me encontré en esta situación. Me miraron con una especie de envidia, pero incluso eso me puso las cosas difíciles. Por otra parte, supongo que era mejor que viajar con un jefe que todos odian en un viaje de empresa.

***

Estaba tranquilo, aparte del viento fresco y el balanceo del carruaje. Entre eso y lo tarde que me quedé despierto anoche, sentí una somnolencia agradable.

“Déjame renunciar, por favor.” “Tengo PTSD gracias a ti”.

“¡Dale un maldito descanso!”

“Deja de esperar que sea como tú. El hecho de que seas fuerte física y mentalmente no significa que todos los demás vayan a ser iguales”. “Takebayashi, vamos. Usted es quien se supone que debe enseñarles, y tiene que cubrirlos mejor. ¡Contratar sangre nueva no es pan comido! ¡Y no estamos ansiosos por tener que volver a capacitar a estas personas nuevamente! Lo sabes, ¿no? ¡¿Bien?!”

“¿Has oído? Takebayashi se llevó a otro novato”.

“¡¿Cristo, otra vez?! ¿Cuántos años lleva aquí ahora? ¿Tiene alguna idea de cómo enseñar a la gente?”

Traté de guiarlos a través de todo, pero solo hizo que me odiaran. Al final, la mayoría abandonó. Nunca los amenacé. Incluso tuve cuidado de no gritarles nunca. Siempre estaba tranquilo con ellos, y si no sabían algo o hacían algo mal, les enseñaba tantas veces como fuera necesario. Evité darles más trabajo del que podían manejar. Los ayudé a todos durante las horas de trabajo, solo tomándome un descanso durante el tiempo de descanso. Probé muchos enfoques diferentes, pero el resultado final fue siempre el mismo. No sabía qué estaba haciendo mal en ese entonces, y tampoco sabía qué estaba haciendo mal en mi nueva vida.

***

“¡Ya lo veo!”

“¿Hm?”

Debo haberme quedado dormido un poco; Había soñado cuando aún era joven y me recordó las preocupaciones que tenía en ese entonces. Tener un sueño similar nuevamente me hizo sentir décadas más joven. Por supuesto, ahora era más joven, así que tenía razón.

En cualquier caso, todavía me sentía somnoliento. Pensé que debía haber estado durmiendo durante un tiempo, pero el sol no había cambiado demasiado de posición. Independientemente, la puerta de Gimul era visible en la distancia. “Finalmente aquí…”

“¡Estamos de vuelta!”

“Gracias a dios.”

Los estudiantes también se sintieron aliviados y el ambiente en el carruaje se calmó un poco.

“¿Oh? Veo a mucha gente fuera de la ciudad”, dijo Lucy. “Sin embargo, no parece que sean aventureros”.

“Sí, parece que están inspeccionando algo”, supuse.

“Estaban hablando de expandir la ciudad, así que estoy seguro de que tiene algo que ver con eso”, dijo Roche.

Todavía estaba en las etapas de planificación, pero el desarrollo urbano avanzaba decentemente. Pasamos junto a los trabajadores y nos dirigimos directamente al gremio por la puerta sur.

“¡Bienvenido de nuevo!” El Maestro del Gremio nos saludó como si hubiera estado esperando nuestra llegada. “¡Estudiantes, reuníos aquí! Parece que todos regresaron a salvo. Entonces, ¿aprendiste algo en este viaje?” Los estudiantes se reunieron en un rincón del gremio y respondieron a su pregunta. “Ya veo. En ese caso, Roche, puede darnos el discurso final ahora”.

“¡Entendido! ¡Escuchen todos!”

Roche felicitó a los estudiantes por superar la lección de cinco días y expresó su esperanza de que esta experiencia les resulte útil en el futuro. Una vez que terminó de hablar, les dijo a los estudiantes que informaran el estado de finalización de los trabajos que habían tomado, luego declaró que la reunión de capacitación había terminado y despidió a todos.

“Bienvenido de nuevo, Ryoma.”

“Hola, Maestro del Gremio”.

“¿Cómo fue tu primera reunión de entrenamiento?” “Bueno, aprendí mucho de los profesores”.

“Eso es más lo que esperaría que dijera un estudiante”.

“Aun así, hubo muchas cosas que logré aprender”.

“Bueno, supongo que nunca dejas de aprender, incluso en la vejez. ¿Podrías venir conmigo un rato?” El Maestro del Gremio me hizo señas con voz solemne.

“¿Te importa si te acompaño?”

“¿Roche? No veo ningún problema. Después de todo, tendrás que dar tu propio informe”.

Nos llevaron a la oficina del Maestro del Gremio. En primer lugar, Roche hizo un resumen de lo que sucedió en el viaje, luego comenzamos a hablar de mí. Como esperaba, se trataba de lo que sucedió después de mi encuentro.

“Siempre pensé que había algo con Ryoma, pero ¿es eso lo que era?” El

Maestro del Gremio apoyó los codos en su escritorio y la cabeza entre las manos luciendo angustiado. Roche, cuéntame un poco más. ¿Cómo estaban actuando las personas que evitaron a Ryoma?

“Al principio tenían miedo, pero algunos de ellos ya han ajustado sus actitudes. La mayoría de los estudiantes evitaban a Ryoma, mientras que los profesores mayores que aún no lo habían aceptado desde el principio llegaron a un entendimiento con él esa mañana. La mayoría de los que siguieron evitándolo son del lado más joven, incluido Bosco y algunos otros en lo que respecta a los maestros”.

“Bosco tiene algo que crecer. Supongo que los demás se habrían asustado al ver la fuerza de Ryoma también. ” “Lo siento”, dije.

“No necesitas disculparte. Solo estabas mostrando tus habilidades para ayudar a los estudiantes. No hay nada condenable en eso, incluso si el resultado fue algo desafortunado. Entonces, Roche, ¿qué opinas de la fuerza de Ryoma? Se honesto.”

“Incluso si todavía estuviera en mi mejor momento, no querría enfrentarme a él. Si yo tuviera la edad de Bosco y no me hubiera retirado ya, me habría sentido igual que él”.

“Escuché que venció a Howard. Howard también puede usar la meditación energética, ¿no es así?”

“Sí, y puedo asegurarles que no hizo ningún esfuerzo”.

“Ya veo, interesante. Ryoma”.

“¿Sí?”

El Maestro del Gremio tomó un trozo de pergamino de su escritorio y escribió algo. “Los Maestros del Gremio tienen la autoridad para imponer limitaciones a las actividades de un aventurero, así como eliminar ciertas limitaciones. Una de esas limitaciones se refiere a los trabajos que involucran a bandidos. Tendría que luchar contra seres humanos en estos trabajos, por lo que generalmente solo están disponibles para aventureros de rango C y superiores. Eso significa que las restricciones en esos trabajos se eliminan automáticamente cuando alcanzas el rango C, pero si cumples con algunas condiciones y obtienes la aprobación del Maestro del Gremio, puedes aceptar estos trabajos en un rango inferior”.

“¡¿Maestro del Gremio?! ¿En serio?” Roche argumentó, pero una mirada del Maestro del Gremio lo hizo callar.

“Roche, entiendo cómo te sientes. Estoy de acuerdo con todo lo que le has dicho a Ryoma. Estaba un poco inseguro sobre qué hacer con él, pero él sabe cómo cuidar de sí mismo. Me temo que si lo dejan solo, eventualmente pueda cruzar una línea. Pero eso solo sería parte de la vida de Ryoma. Lo sabes, ¿no? Mientras los padres hagan todo lo necesario para preparar el escenario, sus hijos pueden crecer con seguridad. Por el contrario, crecer sin padres a veces puede llevar a un niño a convertirse en un adulto incompetente. Pero como Maestro del Gremio, no tengo ninguna intención de asumir ese papel. Desde el momento en que se registró, Ryoma nunca necesitó protección. Fue capaz de caminar por sus propios medios antes de llegar aquí, y quería que lo confirmase de una vez por todas. Quería que alguien más en quien confiara me diera su opinión sobre Ryoma. El hecho de que nuestra opinión sea mutua me hace sentir aún más seguro”.

“¿Esa era la idea?”

“Sí, y quiero ayudar a Ryoma, pero no quiero interponerme en su camino”, declaró el maestro del gremio, entregándome solemnemente un trozo de papel. “Ryoma, por mi autoridad como Maestro del Gremio de aventureros de Gimul, te permito aceptar solicitudes para cazar bandidos. Al salir, muestre esto y su tarjeta de gremio a la recepcionista. Marcarán en tu tarjeta del gremio que tienes mi permiso. Si usa eso, debería poder subir al rango C mucho más rápido. Pero recuerda que si bien esto le permite luchar contra bandidos, no le estoy dando carta blanca para hacer todo por su cuenta. Así que busca miembros del grupo si puedes. Y si necesitas algo, no dudes en preguntarme. Quiero estar seguro de que aquí no hay malentendidos”.

“¡Okay! ¡Comprendido!” Yo dije.

“Muy bien, buena respuesta”, dijo el Maestro del Gremio, soltó el papel y bajó la mano. “Oh, y en cuanto a cómo te tratan los demás, eso es inevitable en cierto modo. Cuanto más fuerte te vuelvas, más de eso verás incluso de las personas más comunes. No me preocuparía demasiado por eso; solo haz lo que quieras hacer. Siempre y cuando no infrinjas la ley, por supuesto”.

Ya sabía lo que quería hacer. “Está bien, nada cambiará conmigo. Seguiré aceptando trabajos aquí como siempre”, dije. Si la gente me iba a evitar después de esto o no, no planeaba esconderme en el bosque de nuevo. De todos modos, sería imposible que le agradara a cada persona que conocí. Tuve la suerte de conocer gente estupenda durante mi estadía en este mundo, pero ahora que tenía más oportunidades de relacionarme con un mayor número de personas, esto iba a suceder eventualmente. No era como si ninguna relación existente hubiera terminado, por lo que podía seguir viviendo mi vida habitual sin preocupaciones.

“Nada cambiará, ¿eh? Para bien o para mal, imagino que se demostrará que tienes razón”.

“Oh, cierto, pero pensaré en encontrar miembros del grupo”. Roche y el maestro del gremio estaban tratando de cuidarme, después de todo. Sin embargo, no podría decir con certeza que encontraría a nadie, desafortunadamente.

“No te esfuerces demasiado”, dijo el Maestro del Gremio, luego me dio permiso para irme. Parecía algo agotado.