Slayers (NL)

Volumen 6

Capítulo 4: La Batalla Del Infierno

Parte 2

Dugld y Zelgadiss empujaron cada uno en sus cuchillas bloqueadas. Zel apretó los dientes y clavó los talones en la tierra.

La espada de Dugld había pasado de negro azabache a gris en el transcurso de la batalla, ya que la espada perdía poder con cada ataque. La Espada de Oscuridad de Dugld no tenía casi el poder de la Espada de Luz de Gourry o mi Ragna Blade, cada vez que se enfrentaba a la espada de infusión mágica de Zelgadiss, perdía más energía. Desafortunadamente, la espada Astral Vine de Zelgadiss se debilitó casi al mismo ritmo; estaba claro que el que ganara la pelea sería el que tenía la espada más poderosa.

A menos que Dugld cambiara las reglas.

“¡Fin de la línea, rocoso!” Dugld escupió.

Diez guijarros más de oscuridad se materializaron a su alrededor, flotando en el aire y listos para atacar. Zelgadiss no tenía posibilidad de esquivar; Todo lo que tenía estaba centrado en el bloqueo de la espada.

“¡Aaarrggh!”

Un grito fuerte y sorprendente partió el aire. Sorprendentemente, no vino de Zelgadiss, sino de Dugld. La espada de Dugld se liberó de la cerradura cuando el Mazoku se tambaleó hacia atrás.

La daga infundida por la magia de Zel, probablemente preparada antes de la pelea con la espada, fue enterrada hasta el fondo del pecho del demonio. Dugld gritó de dolor cuando frenéticamente agarró la daga y la sacó de su cuerpo.

Zelgadiss no perdió la oportunidad. Cortando a través de unos pocos Lesser Demons que se encontraron con su camino, avanzó deliberadamente en la retirada de Dugld.

“¡N-No puedes hacer esto!” Dugld lloró.

“¡Ninguna quimera débil puede vencer a alguien como yo!”

Zelgadiss rio sombríamente.

“Eso es lo que obtienes por todas tus burlas”

“¡Eres asqueroso!” Dugld retrocedió otro paso.

“¡Esta vez te mataré!”

“He escuchado eso antes. Nadie lo ha logrado todavía”

Sus bromas finalmente terminaron, Zelgadiss comenzó a recitar un hechizo. Dugld giro la cabeza bruscamente antes de enfocarse en un demonio menor cercano.

“¡Hah!” Dugld corrió hacia ella.

“Cállate, ¡pero no he terminado todavía!”

Dugld pasó bruscamente la mano por el pecho del demonio menor. Por su aspecto, el demonio menor estaba tan sorprendido como Zelgadiss; El Mazoku chilló cuando su cuerpo se convulsionó en su agonía.

Dugld se rio locamente mientras apretaba su puño en el pecho del demonio menor, causando que la sangre negra brotara en el aire.

“Sí”, dijo arrastrando las palabras.

“¡Sí Sí! ¡El miedo es tan delicioso!”

En cuanto a por qué Dugld sintió la necesidad de hacer algo tan asqueroso: las emociones negativas producidas por los seres vivos son la fuente del poder demoníaco. Para recuperarse del daño infligido por Zelgadiss, Dugld sacrificó a un demonio menor y se alimentó de su miedo y desesperación. Era canibalismo sin el uso de una boca.

Dugld retiró su mano ensangrentada y se volvió hacia Zelgadiss.

“Ahora,” declaró el Mazoku como un nuevo conjunto de piedras oscuras formadas a su alrededor.

“Admito que antes había sido descuidado, pero esta vez—”

Dugld se congeló. Zelgadiss había estado recitando su hechizo todo el tiempo, pero fue justo en ese momento que Dugld se dio cuenta de lo que era.

“¿R-Ra Tilt?” Exclamó.

Obviamente, sabía qué tipo de cosas desagradables le pasarían si le golpeaban con eso.

Gruñendo, Dugld se hundió en el suelo y dejó atrás sus guijarros.

Como Gduza había hecho antes, Dugld dejó un fragmento astral como señuelo y movió su cuerpo principal a un lugar seguro.

Obviamente enojado, Zelgadiss exploró rápidamente el área en busca de un nuevo objetivo. Una vez que se ha recitado un hechizo, un hechicero solo puede mantenerlo durante un corto período de tiempo antes de que tenga que ser lanzado, y Dugld no regresaría hasta que la cosa estuviera despejada.

Con un gruñido de frustración, Zelgadiss lanzó el Ra Tilt en un demonio menor cercano. Era una exageración bastante seria, pero era mejor que desperdiciar un hechizo perfectamente bueno.

“¡Hah!” Mostrando con rabia el tiempo, Dugld saltó del bosque y regresó a la refriega. Se chasqueó la lengua con fingida decepción.

“¿Y cuál fue el punto de eso?” Dugld preguntó mientras unos conjuntos completos de piedras oscuras orbitaban su cuerpo.

“No eres muy eficiente, chico monstruo”

Zelgadiss apretó los dientes y retrocedió unos pasos. No estaba en gran forma, solo había lanzado un hechizo y ya había agotado la mayor parte del poder de su espada mágica. Rápidamente comenzó a recitar un nuevo hechizo en voz baja.

“¡Sí, claro!” Dugld se rio. Disparó sus piedras directamente a Zelgadiss.

* * *

La ola de energía mágica surgió para Amelia, haciendo a un lado todo a su paso. Amelia extendió los pies y levantó la palma infundida por la magia.

¡WHAM!

Las dos fuerzas chocaron violentamente. El viento giraba y aullaba, azotando el cabello de Amelia alrededor de su cara.

Cuando el viento finalmente se apagó, Amelia dejó caer su brazo.

“Ugh,” gimió ella.

Desviar la poderosa ola, obviamente, había hecho mella en Amelia: ella jadeó un poco y se tambaleó sobre sus pies, tambaleándose hacia atrás unos pasos con la esperanza de reagruparse.

“¡Detenla!” Gritó Gduza mientras cargaba contra Amelia.

En respuesta a su orden, varios Lesser Demons dispararon una salva de Flare Arrows. Las flechas cayeron en un amplio arco detrás de Amelia, bloqueando cualquier ruta de escape inmediata.

Amelia tragó. Detener la onda de choque de Gduza había agotado casi toda la magia en su palma, por lo que no tenía muchas posibilidades de bloquear nada. Un instante antes de que Gduza la alcanzara, Amelia saltó de la carga del Mazoku.

Gduza, como era de esperar, anticipó su movimiento; En el momento en que Amelia saltó, el malvado cabello de Gduza se lanzó en la misma dirección y agarró los pies de la chica.

“¡No puedes lanzar hechizos sin una tráquea!” Rio el Mazoku.

Con su horrible boca torcida en una sonrisa maliciosa, un mechón de su cabello envuelto alrededor de la garganta de Amelia.

Justo antes de que Gduza pudiera apretar el agarre de su cabello, Amelia lanzó una mirada hacia un lado. La mirada sorprendida en sus ojos hizo que Gduza mirara en la misma dirección.

Fue entonces cuando Zelgadiss terminó de recitar su hechizo Ra Tilt.

Gduza se quedó sin aliento. Detectando el hechizo que Zelgadiss estaba a punto de desatar, ella se congeló en vacilación.

Era todo lo que Amelia necesitaba. Mientras Gduza observaba a un demonio menor en llamas azules, Amelia ahogó el último fragmento de su hechizo.

“¡Visfrank!” Gritó ella.

La cabeza de Gduza se movió hacia atrás alarmada.

*¡WHAM!*

Amelia golpeó su puño infundido por la magia en el abdomen del Mazoku.

“¡Hggck!” Gduza se atragantó.

Obviamente dolida, le gruñó a Amelia.

“¡Pagarás por eso, pequeña mocosa!” Dijo bruscamente.

Ella apretó el cabello alrededor del cuello de Amelia.

Amelia jadeó, agitando su puño de imbuido en energía salvajemente a Gduza. Ella arremetió con su pierna derecha; La patada no molestó al demonio, pero algo crujió en la rodilla de Amelia.

Gduza inclinó la cabeza hacia atrás y dejó escapar una risa fuerte, larga y extremadamente malvada, disfrutando de la dolorosa destrucción de un enemigo que no podía defenderse. Amelia aprovechó la oportunidad para golpear su puño mágico en la cara sonriente de Gduza.

“¡Ack!” Gduza jadeó, tambaleándose hacia atrás mientras soltaba a Amelia.

Amelia obviamente había golpeado el punto débil.

Amelia golpeó el suelo con fuerza, jadeando cuando el aire finalmente se precipitó en sus pulmones. Después de unas cuantas respiraciones profundas, trató de pararse, pero su rodilla rota se dobló debajo de ella. Ella se estremeció y volvió a caer al suelo.

Un demonio menor cercano vio su despliegue de debilidad y decidió que un oponente herido e inmóvil era algo que él podría manejar.

*¡SLICE!*

El cuerpo del demonio menor se dividió por la mitad, dividido en dos por la cintura por una luz blanca. Su mitad superior cayó hacia adelante para revelar a Gourry parado detrás de él.

Unos segundos después, corrí para unirme a él.

“¡Gaav Flare!” Grité.

Un rayo rojo brillante salió de mis manos, cortando un Mazoku y empalando al que estaba detrás de él. Ocho demonios y ahora nueve en la lista de “asesinados por Lina” cayeron al suelo.

Hicimos una gran diferencia en el número de Lesser Demons que aún permanecen en pie, lo que también disminuyó nuestras posibilidades de incendiarnos desde atrás. Gourry aprovechó la paz relativa para cavar realmente en el Mazoku que se quedó.

Gourry, como lo mencioné antes, es un espadachín extremadamente talentoso, y definitivamente ganó el premio de muerte ese día. Incluso se las arregló para ayudar al resto de nosotros, entre la reducción de las filas enemigas.

Pero todavía estaba preocupado. Incluso con Gourry acabando con los Lesser Demons, Zelgadiss y Amelia no habían terminado sus respectivas peleas.

Y eso fue todo además del hecho de que no habíamos visto …

Una repentina sensación de hundimiento en mi estómago cortó mis pensamientos. Me di la vuelta para enfrentar el bosque; Tengo una política de investigar mis corazonadas.

Algo estaba allí. Escuché un leve ruido de crujido, luego vi unos arbustos moverse … mi corazón casi se detuvo cuando apareció una silueta familiar.

“¿Zuuma ?!” Jadeé.

¡Por supuesto que aparece cuando no tengo ningún respaldo!

Estaba asustada, ¿Por qué? oh, ¿por qué no podría enfrentarme a otros mil Lesser Demons?

Zuuma no perdió tiempo en cargarme directamente a mí. Retrocedí un paso, tratando frenéticamente de terminar un hechizo antes de que me alcanzara.

“¡Fire Ball!” Grité.

Zuuma esquivó fácilmente el hechizo mientras corría. Sin embargo, estaba preparado para eso; señalé la bola de fuego en el momento en que se le escapó.

“¡Break!” Grité.

¡BOOM!

La bola de fuego explotó, enviando llamas en todas direcciones. Zuuma desapareció en el fuego en expansión.

Sabía que Zuuma no iba a morir por una simple bola de fuego.

Intenté golpearlo con uno de vuelta en nuestra pelea en el bosque, y había fracasado de manera muy miserable: claramente, Zuuma tenía algunos hechizos defensivos de alto nivel escondidos. Solo esperaba ralentizarlo un poco.

Rápidamente comencé a recitar mi siguiente hechizo. Después de una pausa momentánea, Zuuma salió de las llamas.

Tanto para ganar tiempo.

Avanzaba demasiado rápido, ¡no pude terminar! Retrocedí un poco y le lancé mi cuchillo, esperando que la acción lo frenara un poco. Porque tirar armas al tipo había funcionado muy bien en el pasado.

En lugar de esquivar o esquivar el cuchillo, Zuuma lo atrapó. Con un movimiento suave, sacó el cuchillo del aire y lo lanzó hacia mí, ¡directamente a mi cabeza!

Salté hacia atrás en pánico. La daga atravesó el aire justo sobre mi cabeza, literalmente me extrañaba por unos pocos pelos.

Traté de recuperar mi equilibrio, pero mi último segundo esquivar me había dejado fuera de balance. Lo siguiente que supe fue que estaba aterrizando en mi trasero cuando Zuuma se acercó.

Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda

Estaba indefensa mientras recitaba mi hechizo, y aún necesitaba más tiempo. Lo único que podía pensar en hacer era patearlo en la entrepierna o algo así. Sabía que podría romperme la pierna, pero era mejor que morir.

Me preparé y eché hacia atrás una pierna.

Zuuma se detuvo de repente. Entrecerró los ojos, sus pupilas reflejaban una luz blanca resplandeciente que venía directamente detrás de mí.

La Espada de luz.

“Ha pasado un tiempo”, llamó Gourry, sosteniendo su espada baja mientras caminaba a mi alrededor.

Zuuma no respondió. Aproveché la ocasión para ponerme de pie.

“Lina”. Gourry me miró.

Encárgate de los otros demonios. Puedo mantener a este tipo fuera por ahora.

Dudé por un segundo. No me gustó la idea de dejar a Zuuma con Gourry; no era que no pudiera tomar a Zuuma, era solo que yo … no podía tomar a Zuuma.

Pero también sabía que ser terco solo haría más difícil para Gourry darle una patada en el culo a Zuuma.

“Entiendo”, murmuré mientras me dirigía hacia los Mazoku.

Al menos parecía que Gourry estaba en muy buena forma. El truco de Zuuma contra la espada fue inútil contra una espada que no podía agarrar, y sus hechizos de gran potencia no valían nada si Gourry no le daba la oportunidad de lanzar nada.

Gourry cargo. El asesino saltó hacia atrás, dándose un respiro.

“¡Flare Arrow!” Gritó Zuuma.

Cerca de veinte flechas de fuego se materializaron ante el asesino y se lanzaron contra Gourry.

“¿Nadie sabe un hechizo diferente?”, Se quejó Gourry.

Esquivó y paró las flechas, sobre todo manteniendo su línea recta hacia Zuuma.

El hechizo abrió un camino para Zuuma; corrió justo detrás de Flare Arrows y se encontró con Gourry de frente. Gourry intentó un golpe vertical desde arriba.

*¡WHAM!*

Zuuma bloqueó el ataque con la palma de su mano izquierda. Tomando una página del libro de Amelia, Zuuma había acumulado energía mágica en sus manos.

Fue … inesperado, supongo que podrías decir.

¿Cuándo había aprendido ese hechizo?

Mientras Zuuma bloqueaba la Espada de Luz con su mano izquierda, empujó su derecha hacia el estómago de Gourry. Gourry sacudió su cuerpo hacia atrás, dejando que la palma de Zuuma golpeara el aire.

Tanto Gourry como Zuuma se retiraron unos pasos. Sus ojos nunca dejaron los de Zuuma, Gourry calmó su espada.