Kumo Desu Ga Nani Ka?

Volumen 13

Interludio: El Pontífice y el Administrador Comparten unos Tragos

Como la noche se hace tarde, termino mis deberes y voy a mi habitación.

Como estuve sentado en mi escritorio trabajando todo el día, gran parte de mi cuerpo está rígido.

Me duelen los hombros y la espalda, y aunque puedo aliviar temporalmente el dolor con Magia Curativa, hay pocas esperanzas de curarlo por completo.

Me hago mayor.

Este dolor probablemente me acompañe por el resto de mi vida.

De repente, me encuentro pensando en todas las vidas que he repetido.

Mientras pienso en ellas, todo tipo de recuerdo emergen como si hubieran ocurrido ayer.

Momentos en los que las cosas iban bien.

Otras veces en las que las cosas iban mal.

Tal vez me estoy volviendo un poco sentimental porque esta es la más tempestuosa que he vivido hasta ahora.

El final se acerca, presiento.

Aunque todavía no sé si será el final que espero o no…

Entro en mi habitación, y recojo la botella de licor que he estado guardando.

Ha pasado mucho tiempo desde que bebí tales cosas, pero hoy estoy de humor.

“Podrías servirme un vaso también?”

Una voz habla de repente desde las sombras.

Sorprendido, me giro para encontrarme con Lord Dragón Negro sentado tranquilamente en el sofá.

“… Desearía que al menos picaras para alertarme de tu presencia. Por favor, estas sorpresas no son buenas para el corazón de un anciano.”

“Ese corazón de acero tuyo no se detendría por algo tan trivial.”

Lord Dragón Negro sonríe, sin molestarse por mis quejas.

Para alguien que normalmente tiene el ceño profundamente fruncido en una expresión sombría, es una visión realmente rara.

Le complazco sacando un segundo vaso y me siento frente a él.

Luego vierto licor en ambos vasos.

Silenciosamente, levantamos nuestras copas y las juntamos, provocando un tintineo claro que resuena en la habitación.

Tomo un pequeño sorbo de licor, y el suave aroma me impregna la nariz.

“Esto es bueno.”

“Uno de mis favoritos de mi escondite privado.”

He estado guardando esta botella durante varias generaciones, con la intención de bebérmela cuando sucediera algo bueno.

Aunque sería difícil decir que ha pasado algo bueno, supuse que no habría nada de malo en abrirla ahora.

Tenía la sensación de que si perdía esta oportunidad, probablemente estaría demasiado ocupado para abrirla más tarde.

Por un rato, nos sentamos y saboreamos el sabor.

Lord Dragón Negro y yo estamos en silencio, bebiendo poquito a poco.

Una vez que nos acabamos nuestros vasos, me levanto para traer algunos aperitivos, teniendo cuidado en elegir algo lo suficientemente suave en sabor como para que no reste valor a la bebida.

La mayoría de la gente prefiere aperitivos más sabrosos con sus bebidas, pero estoy seguir de que no será un problema.

Para un dios como Lord Dragón Negro, comer es algo así como un acto sin sentido.

De hecho, dado que mantiene una forma humana, no puedo decir con certeza si su sentido del gusto será igual.

En cuyo caso, no debería haber ninguna diferencia si simplemente elijo la comida que yo prefiera.

Especialmente teniendo en cuenta de que ni siquiera le invité aquí esta noche.

Poniéndome tales excusas, pongo un platillo de mis quesos favoritos en la mesa.

Tranquilo, Lord Dragón Negro alcanza el plato y se sirve.

“Oh-oh.”

Parece que mi elección se adapta perfectamente a sus gustos.

Tan pronto como acaba el primer trozo, inmediatamente toma otro.

“Sin duda tienes comida que se iguala a tu posición, Pontífice.”

Evidentemente, Lord Dragón Negro capta el sabor de la comida humana después de todo.

Nos conocemos desde hace muchos años y, sin embargo, solo ahora me doy cuenta de que desconocía incluso este dato tan básico sobre él.

Me viene a la mente que solo hemos hablado de negocios y nunca hemos conversado sobre nuestras vidas personales.

Nunca hubo ninguna necesidad.

Aunque no lo llamaría mi enemigo, tampoco es mi aliado.

Estoy seguro de que Lord dragón Negro siente lo mismo.

Aunque ambos estamos trabajando con el objetivo común de salvar este mundo, lo que queremos proteger en última instancia es diferente.

Yo deseo salvar a la humanidad.

Él desea salvar a la Diosa.

Cada uno de nosotros tan solo busca salvar el mundo porque es una condición necesaria para salvar aquello por lo que realmente nos preocupamos.

Salvar el mundo es tan solo una etapa en el proceso.

Así que una vez que consigamos esa etapa, Lord Dragón Negro y yo empezaremos a estudiar caminos muy diferentes.

Esa es la diferencia que nos impide convertirnos en aliados en el verdadero sentido de la palabra.

Además, Lord Dragón Negro tiene todo el derecho de despreciarme en primer lugar.

Porque elegí abandonar a la Diosa a favor de la humanidad.

Por respeto a esa circunstancia, nunca le he pedido ayuda a Lord Dragón Negro, y dudo alguna vez haya considerado la idea de unir fuerzas conmigo.

En verdad, el hecho de que sepamos tan poco el uno del otro en cuanto a preferencias personales es un reflejo perfecto de la superficialidad que nuestra relación ha mantenido siempre.

“Me gusta mucho el queso, ¿sabes?”

“¿Oh?”

Esta bien podría ser mi última oportunidad de tener una conversación pacífica con él.

Quizás por eso empiezo a hablar de manera natural sobre mí mismo.

“Tomó una gran cantidad de esfuerzo alcanzar este punto ene l proceso de elaboración del queso. Después de que el sistema fuera configurado, incluso las bacterias parecían estar afectadas, y todos mis antiguos métodos ya no funcionaban correctamente.”

“¿En serio…?”

Lord Dragón Negro parece sorprendido; puede que no estuviera al tanto de una información tan trivial.

“Sí, y por eso no pude comer queso durante varias generaciones. ¡Qué tiempos tan terribles!”

“… Ahora que lo mencionas, también se perdieron varios tipos de licor.”

“En efecto. Los que ya estaban hechos permanecieron intactos, pero se hizo imposible hacer más.”

“Es cierto, y la gente se los robaban los unos a los otros por un tiempo. Qué nostálgico.”

Realmente es nostálgico.

Imagino que no sería capaz de recordar historias de hace tanto tiempo sin mi habilidad Registros.

En aquellos tiempos, el mundo entero cambió dramáticamente debido a la introducción del sistema. Incluso yo luché por no ahogarme en el remolino que causo todo aquel caos.

Ahora que ha pasado tanto tiempo, claro que echo la vista atrás y pienso en que podría haberlo hecho mejor, pero en ese momento, fue todo lo que podía hacer para lidiar con lo que tenía directamente frente a mí. Naturalmente que no pude detenerme para contemplar el panorama general.

A causa de eso, bajé la guardia y permití que el ascenso de los elfos ocurriera, un terrible legado que es ahora uno de mis mayores pesares.

Aunque deteste admitirlo, Potimas es un genio.

En el caótico período posterior al comienzo del sistema, vio más allá que nadie y envió a sus peones elfos para que se mezclaran con los humanos, corrompiendo sus mentes.

Esto fue principalmente conseguido porque les hizo creer que los elfos eran sus aliados.

En aquel momento, incluso yo pensé que esa misteriosa raza que había aparecido de la nada estaba de nuestro lado.

Derrotaban monstruos, sofocaban disturbios y, con el tiempo, se acercaron a los humanos, a menudo ofreciéndoles ayuda.

Como ellos aparecieron de repente, al igual que los monstruos, asumí que eran una espacie de sociedad de ayuda creada por el arquitecto del sistema.

Recuerdo un secretario amante de los videojuegos que se refirió a ellos como “personajes de apoyo.”

“Le hicimos cosas tan horribles a los dioses, y sin embargo, no nos abandonan…”, sollozó el secretario.

Creía que los elfos eran mensajeros de los dioses y los veneraba.

¿Me pregunto cómo habría reaccionado si hubiera sabido que esos elfos eran en realidad peones del detestable Potimas?

Ese hombre es verdaderamente la definición de malvado y astuto.

Comete actos de crueldad sin dudar.

Mientras ese pensamiento cruza mi mente, niego con la cabeza mofándome de mí mismo.

¿No estoy yo mismo en este momento cometiendo actos atroces?

En ese sentido, Potimas y yo no somos tan diferentes.

“… Éramos tan jóvenes en ese entonces.”

Mientras me pierdo en mis pensamientos, Lord Dragón Negro me habla.

Como si estuviera reflexionando sobre el pasado con anhelo y arrepentimiento al mismo tiempo.

“Sí, en efecto. Aunque cometí un error demasiado grave como para ser desestimado como una indiscreción juvenil.”

Las palabras se me escapan antes de poder detenerlas.

Incluso yo estoy sorprendido de mi propia declaración.

Aunque mantenía esos sentimientos escondidos en mi corazón, nunca los había dicho en voz alta, y ahora se me habían escapado por impulso.

“… ¿Te arrepientes?”

Lord Dragón Negro me mira inquisitivamente.

Después de pensar por un momento, confieso el pensamiento que he mantenido enterrado todo este tiempo.

“Sí, por supuesto. Siempre lo he hecho.”

Me arrepentía.

Sabía incluso en aquel momento que estaba tomando la decisión equivocada.

Y aun así, la elegí de todos modos.

Elegí sacrificar a la Diosa por el bien de la humanidad.

Y dado que tomé esa decisión, tengo la responsabilidad de llevarla hasta el final.

Incluso aunque supe todo este tiempo que fue un terrible error, fue mi elección, y ahora es mi deber cumplirlo salvando a la humanidad.

No importa lo que deba sacrificar para hacerlo.

Desde el momento en que abandoné a la Diosa, ese fue el único camino para mí.

De lo contrario, no sería justo.

No puedo rendirme a mitad de mi objetivo después de haber sacrificado a la Diosa para lograrlo.

“Lo pienso una y otra vez. Qué hubiera pasado si hubiera tomado una decisión diferente.”

Me río sin alegría de mí.

No importa lo mucho que lo piense, no puedo cambiar el pasado.

Tan solo me estoy engañando a mí mismo.

Y sin embargo, le sigo dando vueltas.

Si trabajara junto al Lord Dragón Negro, Lady Ariel y los demás, si nos uniéramos para enfrentar esas pruebas juntos…

No puedo evitar preguntarme si alguna vez existió una opción tan absurdamente conveniente.

“Pero no tiene sentido insistir en estas cosas ahora.”

“Tal vez tengas razón.”

Intento cortar mis miserables delirios, pero para mi sorpresa, Lord Dragón Negro responde.

“Yo soy igual.”

Con eso, sonríe lánguidamente e inclina su copa.

“Pienso en eso todo el tiempo. ¿Podría haber hecho más en aquel momento? ¿No había otra manera? ¿Una mejor manera?”

Ah, ya veo.

Así que también se ha estado arrepintiendo todo este tiempo.

“Pero no importa lo mucho que pensemos en ello, jamás encontraremos una respuesta. También es así para ti, ¿verdad?”

En lugar de una respuesta, simplemente le devuelvo una sonrisa en un silencio sombrío.

Tiene razón, por supuesto.

No importa lo mucho que lo piense, jamás daré con la respuesta.

Pero al mismo tiempo a veces pienso, ¿es posible que la situación actual sea lo mejor? A veces también se me ocurre esa idea.

Aunque nunca podría decirle tal cosa a Lord Dragón Negro.

¿Cómo puedo siquiera pensar eso?
Porque si todo hubiera salido bien, dudo que hubiera podido llegar tan lejos.

Es a causa de ese arrepentimiento tan fuerte que tengo que he logrado controlarme y hacer todo lo que sea necesario todo este tiempo.

Sin él, es muy posible que ya me hubiera derrumbado.

En cuyo caso, Potimas solo habría ascendido aún más alto.

A pesar de todos mis fallos, creo que he sido un exitoso dique contra Potimas todo este tiempo.

Si me hubiera derrumbado y me hubiese vuelto inútil, Potimas podría haber hecho lo que quisiera y más.

Ese hombre es cauteloso y cobarde.

Incluso si yo no estuviera aquí, imagino que no habría hecho nada realmente imprudente por miedo a Lord Dragón Negro, pero apuesto a que las cosas serían muy diferentes sin mi presencia.

No hay duda de que habría esparcido su influencia como un lento veneno, a escondidas y lejos de la vista de Lord Dragón Negro.

Siempre ha destacado en movimientos tan astutos y encubiertos.

Todo esto lo sé muy bien porque soy yo quien ha estado enfrentándome a él en las sombras todo este tiempo.

En ese sentido, las acciones más recientes de Potimas no han sido características.

Sus movimientos han sido demasiado grandes, demasiado dramáticos.

Para bien o para mal, no hay duda de que la sustancia extraña conocida como las reencarnaciones ha causado mucho movimiento en este mundo.

Pero aun así, siento que los movimientos de Potimas son demasiado amplios.

Supuse que todo fue provocado por las reencarnaciones, pero ¿sería eso suficiente para que un hombre patológicamente paranoico actuara de un modo tan escandaloso?

Y todos esos movimientos suyos han sido obstaculizados por Lady Ariel y los suyos, lo que le ha llevado a varios fracasos manifiestos.

Es increíblemente inusual en él.

Ese hombre sin duda tiene el hábito bastante infantil de anhelar una pequeña venganza cada vez que es agraviado, pero ni siquiera eso explica sus toscas acciones estas últimas veces.

Casi parece como si algo le hubiera hecho entrar en pánico…

No sé cuál podría ser la causa, pero ahora la marea está cambiando a nuestro favor.

Debería ser feliz.

Cuando pienso que quizás podríamos finalmente poner a ese hombre en jaque mate, me lleno de alegría, un poco de tristeza y sobre todo, un hormigueo de abatimiento de que pronto todo terminará.

Tal vez esto debería ser motivo de celebración, pero supongo que soy un poco mayor.

No solo físicamente, sino mentalmente.

He estado luchando por mucho tiempo. Demasiado tiempo. La soledad y la desolación que me atormentan han superado desde hace mucho tiempo cualquier sensación de logro.

“… Así que Potimas finalmente encontrará su fin.”

“Eso parece.”

Lord Dragón Negro apura el resto de su vaso, luciendo igualmente lleno de emoción.

“Veo que tu hábito de desviar el tema no ha cambiado en absoluto.”

Mientras le sirvo otro vaso, comenta esto con bastante sequedad.

En ese momento, me doy cuenta de que he hecho otro comentario fuera de tema en medio de la conversación.

“Oh cielos. ¿Lo he vuelto a hacer?”

“Estoy seguro de que todo tenía perfecto sentido en tu mente.”

“… Hago todo lo posible por tener cuidado. Pero parece que esta mala costumbre es la única cosa que no puedo arreglar da igual las veces que renazca.”

Tengo una desafortunada tendencia a perderme en mis pensamientos y olvidar todo lo que me rodea.

Y luego comento uno de mis pensamientos en voz alta sin explicación, haciéndoles creer a los demás que de repente he cambiado de tema, o eso me dicen.

Tal y como dice Lord Dragón Negro, todo parece perfectamente lógico en el contexto de mis pensamientos. Sin embargo, si no expongo todas esas conexiones en voz alta, simplemente suena como si me hubiera desviado abruptamente hacia un nuevo tema.

“Aun así, si dijeras todos tus pensamientos en voz alta, estoy seguro de que no habría suficiente tiempo como para explicarlos en solo una vida.”

“Muy cierto. Imagino que la voz me fallaría primero. En realidad, creo que probablemente me mordería la lengua antes.”

“Me parece razonable.”

Dado que siempre estoy usando la habilidad Pensamiento Acelerado, puedo pensar en una gran cantidad de cosas incluso en un corto período de tiempo.

Si tratara de compartir todo lo que pasa por mi mente, debería hablar terriblemente rápido.

Con toda probabilidad, tendría que esforzarme por mantener el ritmo y terminaría mordiéndome la lengua.

Al imaginarme a mí mismo haciendo algo tan tonto, no puedo evitar reírme un poco.

“Eso empañaría un poco esa imagen tuya tan digna.”

“Por supuesto. Parecería que sería mejor que guardara la mayoría de mis pensamientos para mí, incluso si eso causa un poco de inconveniencias para aquellos que me rodean.”

Con eso, intercambiamos una pequeña sonrisa.

Qué sensación tan misteriosa.

Nunca pensé que tendría una charla tan amigable con Lord Dragón Negro.

Pero esta atmósfera tan pacífica no puede durar para siempre, me temo.

“Y bien. ¿Qué asuntos te traen aquí esta noche?”

Sé que estoy arruinando el ambiente, pero debo ir al grano.
“Esa criatura se ha ocupado de las cosas en el Reino de Analeit, lo que debería aliviar algunas preocupaciones.”

“Ya veo.”

Por “esa criatura”, Lord Dragón Negro probablemente se refiera a Lady Blanca.

Ella es una reencarnación que ha sido una compañera inseparable de Lady Ariel estos últimos años.

Y también es la persona responsable de cambiar la historia para siempre.

“Conociéndola, estoy seguro de que ha logrado todo a la perfección.”

“Oh-ho. Parece que tienes buena opinión de eso.”

“Por supuesto. Fue ella la que provocó un maremoto de cambios en este mundo perpetuamente estancado.”

“Un maremoto, ¿hmm? Qué expresión tan apropiada.”

Con toda honestidad, eso difícilmente le hace justicia.

Quizás ella es más como una inundación que consume todo a su paso.

Un gran diluvio que limpiará aquello que ha estado en este mundo por tanto tiempo, dejando una tierra vacía en su lugar.

“Potimas al fin encontrará su final.”

Nos traigo de vuelta al tema anterior.

Con Lady Blanca en el asunto, incluso alguien tan detestablemente astuto como Potimas está acabado.

“Yo no estaría tan seguro. Conoces a Potimas tan bien como yo. Es muy posible que se escabulla de algún modo.”

“No. Estoy seguro de ello.”

No hay duda en mi mente.

Porque he luchado contra Potimas durante tanto tiempo que conozco sus limitaciones.

Pero todavía tengo que percibir los límites de Lady Blanca.

Es obvio quién prevalecerá.

Estoy seguro de que Lord Dragón Negro también lo sabe.

“Con toda probabilidad, Lady Blanca solo ve a Potimas como nada más que otro obstáculo.”

“Eso es cierto.”

Lord Dragón Negro está de acuerdo con mi observación.

Para Lady Blanca, derrotar a Potimas es simplemente un numerito secundario en el camino a su objetivo final.

Él está en su camino para llegar a esa meta, por lo que debe ser eliminado.

Estoy seguro de que eso es todo lo que ella piensa de él.

Y su objetivo definitivo es la destrucción del propio sistema.

“… Lord Dragón Negro. Destruir el sistema y usar esa energía para revivir el mundo… ¿Algo así está realmente dentro del ámbito de la posibilidad?”

Lord Dragón Negro me ha contado sobre los objetivos de Lady Blanca y los métodos que ha propuesto.

Ya hice la misma pregunta en aquel momento, pero ahora me la vuelvo a hacer.

“debería ser posible, al menos en teoría.”

Y su respuesta es la misma que la de entonces.

Debería ser. En teoría. Es seguro poder decir que con frases tan inciertas Lord Dragón Negro tampoco está seguro.

“El destino del mundo pende de un hilo. No puedo decir que esté encantado de apostarlo todo a una respuesta tan incierta…”

“Lo sé. Y tampoco es que haya estado sentado desde la primera vez que escuché sobre esto.” Lord Dragón Negro agita su mano bastante irritado. “Investigué, pero no pude encontrar una respuesta definitiva. Desafortunadamente, no puedo entrometerme demasiado en el sistema. Ya que no lo acabo de entender, no tengo muchas más opciones aparte de confiar en conjeturas.”

Hmm. Eso es sensato.

Cuando uno trata de evaluar cualquier situación, predecir el resultado requiere una comprensión firme de todos los asuntos y eventos involucrados.

Sin un claro entendimiento del sistema, es imposible predecir qué resultados podrían producirse.

“Pero si estás dispuesto a escucharme basándote en esa conjetura, creo que revivir este mundo destruyendo el sistema tiene una tasa de éxito bastante alta.”

“¿Y en qué te basas para esa conclusión?”

“Hice un cálculo aproximado de la cantidad total de energía contenida en todo el sistema y descubrí que sobrepasaba la cantidad necesaria para restaurar el mundo. Incluso eliminando la cantidad que se consumirá durante el proceso, creo que debería acercarse a la cantidad requerida.”

“’Creo’. ‘Debería’. Me suena a que esto es más una ilusión que cualquier otra cosa.”

“Nada de esto es seguro. De cualquier manera, si el intento falla, no será por falta de energía. Al menos, estoy seguro de eso.”

Si eso se basa en los cálculos del propio Lord Dragón Negro, supongo que puedo confiar en ello…

“Pero incluso ignorando los hechos objetivos, tengo razones para creer que esa criatura ya ha encontrado pruebas concluyentes, lo que podría ser una respuesta suficiente.”

“¿Con lo que quieres decir…?”

“La cosa ya ha descubierto un método para hacer exactamente eso. Además, en realidad existe como una característica oficial del sistema.”

Ante eso, mis pensamientos se detuvieron por un momento.

¿El sistema ya tiene esa función?

¿Significa eso que la autodestrucción del propio sistema siempre fue una opción?

“Eso no debería ser tan sorprendente. El sistema tiene muchísimas funciones que ni siquiera yo conozco. ¿Quién puede decir que una característica como esa no existe?”

Supongo que eso es cierto, pero pensar que una opción como la autodestrucción estaría incluida como una función normal desde el principio…

Me hace dudar de la cordura del creador del sistema.

“Además, el sistema en sí ya es irracional en muchos sentidos. En este punto, una o dos características bizarras más apenas marcan la diferencia.”

“… Tienes razón.”

No deseo hablar mal del sistema que nos mantiene a todos vivos, pero sin duda es extraño que esté construido sobre una base que obliga a sus habitantes a matarse los unos a los otros y luego recuperar energía de los que mueren.

“Sospecho que debe tener alguna conexión con los Gobernantes.”

“¿A qué te refieres…?”

Un Gobernante es un individuo en particular que tiene una habilidad de las Siete Virtudes Capitales, como mi Templanza, o una habilidad de los Siete Pecados Capitales como la Gula de Lady Ariel. Al poseedor de cada habilidad se le otorga la habilidad de gobernante.

Simplemente adquiriendo la habilidad no es suficiente para convertir a uno en Gobernante; la autoridad para gobernar debe establecerse antes de que cualquier individuo pueda convertirse en Gobernante.

Los Gobernantes reciben varios beneficios, incluyendo el permiso para interferir en el sistema hasta cierto punto.

“Pero no hay tal cosa incluida dentro de los derechos que se otorgan a un Gobernante, ¿verdad?”

Yo mismo soy un Gobernante.

Esto significa que estoy muy familiarizado con los poderes de un Gobernante.

Que yo sepa, eso no incluye nada que tenga que ver con la destrucción del sistema.

“¿Qué pasa si solo un Gobernante no fuera suficiente? ¿Qué pasa si, por ejemplo, todos los Gobernantes tuvieran que reunirse y realizar ciertas acciones específicas en algún lugar en particular?”

No puedo decir con seguridad que algo así no pueda ser.

Los Gobernantes prácticamente no han cooperado nunca en nada.

Al fin y al cabo, tres de ellos están en una relación perpetuamente antagónica.

Lady Ariel, Potimas y yo mismo.

En cuanto al resto, muchos ni siquiera han nacido.

La única vez que los Gobernantes de las catorce Virtudes Capitales y Pecados Capitales han existido todos a la vez debe haber sido al principio, cuando el sistema se puso en marcha por primera vez.

Incluso entonces, existían diferentes facciones, no un solo frente.

En otras palabras, los Gobernantes nunca se han reunido en busca de un objetivo común.

Si hubiera alguna condición especial relacionada con un escenario tan desconocido, no tendríamos forma de saberlo.

En cuanto a la localización en particular, tengo una idea.

La parte más interna del Gran Laberinto de Elroe.

El centro del laberinto que el primer Gobernante de la Pereza pasó toda su vida creando.

Si existiera un lugar, tendría que ser allí.

“Estos últimos años, esa criatura ha estado tratando frenéticamente hacer que la gente adquiera habilidades de gobernante.”

“Qué curioso.”

No tenía ni idea.

Si ese era el caso, entonces tal vez haya algo en la predicción de Lord Dragón Negro después de todo.

“Pero si es así, ¿derrotar a Potimas no sería contraproducente?”

Potimas también es un Gobernante.

Si se necesitan a todos los Gobernantes, eso lamentablemente incluiría su participación.

“Estoy seguro de que ha tenido eso en cuenta y que probablemente ya haya formulado una estrategia en consecuencia. Aunque no sé cuál podría ser esa estrategia. De cualquier manera, incluso si dejamos vivir a Potimas, no hay manera de que vaya a cooperar con nuestros planes.”

“Ya veo. Si él solo va a entorpecer sus objetivos, entonces supongo que querrá deshacerse de él lo antes posible.”

Potimas jamás cooperaría en algo como esto.

Siendo ese el caso, entonces sería más efectivo eliminarlo y buscar otro enfoque antes que perder el tiempo intentando convencerle.

“Pero se ese realmente es el caso, entonces el siguiente objetivo a eliminar sería un servidor, ¿correcto?”

Lo digo en broma, pero sospecho que no me alejo mucho de la realidad.

Ese es un caso que he estado contemplando desde antes de hablar hoy con Lord Dragón Negro.

Después de Potimas, ¿quién es la siguiente persona a la Lady Ariel encontraría más detestable?

Ese sería yo. De eso tengo pocas dudas.

Además, la religión de la Palabra de Dios está más débil que nunca.

Perdimos muchos soldados en la batalla contra las antiguas armas mecánicas que fueron resucitadas hace una década.

Durante aquel incidente, cuando uní fuerzas temporalmente con Lady Ariel e incluso Potimas, el ejército de la Iglesia quedó por los suelos.

Me las arreglé para restaurar su fuerza un poco en los años posteriores, pero el agujero no se ha llenado por completo.

Perdimos muchos jóvenes soldados prometedores que deberían haber acumulado experiencia y haberse convertido en veteranos experimentados.

Ahora, como nos quedan pocos soldados de aquella época, he estado dependiendo de viejos soldados que deberían haberse retirado hace tiempo y algunos jóvenes demasiado inexpertos para sus puestos.

Pero también eso se vino abajo en la reciente guerra.

Sabía desde el principio que no prevaleceríamos, pero hubiera sido extraño si la religión de la Palabra de Dios no hubiera proporcionado ningún refuerzo. Tuve que enviar un número considerable de soldados para ayudar al imperio, ninguno de los cuales regresó.

Los acontecimientos han conspirado para debilitar en gran medida la fuerza militar de la iglesia de la Palabra de Dios, aunque realmente pienso que no tiene mucho sentido intentar competir con Lady Ariel en ese frente.

Y entre el anuncio del un falso héroe y la llamada del ejército imperial para una nueva expedición, ya no aguanto más.

Ninguna de las otras naciones sabe sobre el falso héroe de momento, pero cuando se descubra si es que se descubre, la Iglesia perderá una gran cantidad de influencia.

Así de importante es la existencia del héroe para la humanidad.

Y si alguien descubriera que el ejército imperial al que hemos permitido pasar a través de tierras humanas en realidad estaba formado por demonios, esta religión estaría acabada.

Todo era necesario por el bien de derrotar a Potimas, pero si Lady Ariel hizo esta proposición para poder también disminuir el poder de la Palabra de Dios al mismo tiempo, entonces su objetivo final probablemente sea mi cabeza.

Dicho esto, acepté todas las demandas de Lady Ariel, a pesar de saber exactamente hacia dónde nos conduciría.

“… ¿Y estás de acuerdo con eso?”

“Bastante. Este es el mejor uso que se le puede dar a la religión de la Palabra de Dios en este momento. No me puedo permitir perder la oportunidad de seguir las corrientes del cambio en este mundo solo porque me negué a pagar el precio.”

Ahora mismo, el mundo está cambiando de una manera importante.

La religión de la Palabra de Dios será arrasada junto con esos cambios, nos guste o no.

Esta corriente ya es demasiado fuerte como para que la Iglesia pueda resistir.

Así que no queda más que acelerar el proceso.

Incluso si eso significa que la Iglesia será arrastrada por la corriente y aplastada.

La religión de la Palabra de Dios existe únicamente para proteger a la humanidad.

Si puede lograr ese objetivo pereciendo por el bien mayor, eso también sería perfectamente aceptable.

“Por el bien de la humanidad. Por la era de conmoción que sin duda nos espera después de que Potimas encuentre su perdición. La Iglesia se convertirá en el villano contra el que se una la humanidad. Ya he hecho los preparativos.”

¿Qué se requiere para que las personas se unan?

Un villano fácilmente identificable.

Ira, pena, sentimientos de impotencia.
Y un objetivo contra el que puedan apuntar esos sentimientos.

Para las masas, la creencia de que tienen razón es el camino más rápido a la unificación.

Así que convertiré a la religión de la Palabra de Dios en un villano para unir a la humanidad.

“… Eres realmente minucioso.”

“No tengo otra opción. Ni siquiera se me permite redimirme adecuadamente, ya ves.”

¿Redención? Eso sería demasiado presuntuoso para alguien como yo.

No, yo nunca puedo redimirme.

Es por eso por lo que debo ver esto hasta el final.

Por la humanidad.

Eso es todo por lo que puedo luchar.

Es por eso por lo que abandoné a la Diosa.

Así que ahora debo ofrecer todo a esa causa, incluso si eso significa enemistarme con los dioses.

“… Debo admitir que envidio esa decisión tuya. Solo un poco.”

“……”

Desde mi perspectiva, es a ti a quien envidio.

Tú que puedes acercarte al lado de la Diosa.

Pero mientras ese pensamiento cruza mi mente, no lo digo en voz alta.

Lord Dragón Negro tiene sus propias circunstancias, sus propias cargas que soportar.

“Ninguno de nosotros puede salirse con la suya, ¿verdad?”

“No estás equivocado.”

Después de eso, nos quedamos despiertos toda la noche, hablando solo de asuntos intrascendentes.

Creo que ambos sabíamos que probablemente esa sería nuestra última oportunidad de pasar una velada tranquila bebiendo juntos.

Ya sea que lo está intentando hacer Lady Ariel fracase o tenga éxito, los tiempos están a punto de volverse muy turbulentos.

Eso no es una premonición, sino un hecho.

Cuando llegue el momento crucial, debo hacer todo lo que pueda para asegurarme de que la humanidad sobrevive.

Porque ese es el único deber que se me ha permitido cumplir.