Seirei Tsukai no Blade Dance

Volumen 3

Capitulo 4: La sinceridad de una caballero

Parte 2

Para cuando hubo terminado de comer la comida de Ellis, afuera ya se había vuelto completamente oscuro.

Ya era cerca de la hora a la que tenía que hacer la cena para Claire y las demás, quienes estaban esperando en el dormitorio.

Cuando le informó a Ellis sobre ese asunto… puso una expresión ligeramente decepcionada.

Después de ayudar a Ellis a ordenar los utensilios de la mesa, él y Ellis, quien se había cambiado a su uniforme, salieron del dormitorio.

El momento en que Ellis se sacó el uniforme de sirvienta, parecía repentinamente avergonzada por sus acciones recientes, así que

mientras caminaba por el camino bañado por la luz de la luna, tuvo su cabeza caída todo el tiempo.

… Naturalmente, al igual que ella, Kamito también estaba avergonzado.

• Me disculpo por quedarme demasiado tiempo. Tu comida estaba deliciosa.
• Sí, me alegra el poder haber expresado mi gratitud hacia ti apropiadamente. Porque hoy, probablemente, era la última posibilidad para poder invitarte a mi habitación.
• ¿A qué te refieres?
• Es por la compañera de habitación de la que conversamos recién. Muy pronto acabará con su misión y regresará.
• ¿Tanto miedo da tu compañera de habitación?

Al decir eso, la expresión de Ellis se oscureció ligeramente.

• Velsaria Eva Fahrengart—es mi hermanastra, mayor por dos años. También es la antigua capitana de las Caballeros Sylphid.
• Velsaria…

Kamito estaba sorprendido. Es nombre era, si no estaba equivocado, del cual Claire estaba hablando—

• La elementalista más fuerte de la Academia… ¡¿es, de hecho, tu hermana, Ellis?!
• Sí. No es como si estuviéramos relacionadas por sangre. También, en un momento, se esperaba que ella se convirtiera en una

N u   m   b   e   r   s

candidata futura a los Doce Caballeros Comandantes, pero—después

de que fuera derrotada por Ren Ashbell en el primer encuentro en la

〈Blade Dance〉 hace tres años, esa historia también desapareció.

– ¡¿…?!

• ¿Qué ocurre? ¿Sabes sobre mi hermana?
• … N-No, no es nada –, Kamito sacudió su cabeza, nervioso. (… Ya veo, no me pregunto por qué recordaba haber oído antes

ese nombre.)

—Lo recordó. Ella fue su oponente en el primer encuentro de la

〈Blade Dance〉 hace tres años.

Era una chica con un hermoso rostro de hielo y un bello cabello

rubio.

• … Mi hermana es como la persona que personificaba la

imagen de caballero que intento idealizar –, Ellis exhaló aire como vapor mientras murmuraba. – Sin embargo, ahora esa persona—

Murmurando como en un monólogo—Ellis detuvo allí sus pasos. Habían llegado ante la puerta del dormitorio de la Clase Raven. Kamito levantó la mirada, y en la ventana de la habitación de

Claire había luz.

• Ellis, gracias por lo de hoy. Bueno, entonces, nos vemos mañana.
• A-Ahh, espera—

Kamito ondeó su mano y caminó hacia el dormitorio.

En ese momento, cuando había caminado un poco por el camino que llevaba hacia el edificio del dormitorio…

• … ¡K-Kamito! –, Ellis llamó a Kamito desde atrás para que se detuviera.

No era su habitual voz frígida. Era una voz como de un grito urgente.

• … ¿Ellis?

Kamito se dio la vuelta—

• Ah…

Ellis abrió completamente sus ojos, y estaba sorprendida.

¿Por qué mostraba esa expresión?—Ni siquiera ella entendía el por qué lo había llamado.

• ¿Qué ocurre?
• No, ehm…
• ¿Hm?

Kamito se preocupó y se acercó—

– ¡…!

Ellis—como    si    hubiera    tomado    una    decisión    de    algo importante—respiró profundamente.

• L-La verdad es que tengo un favor que pedirte, pero…
• ¿Un favor? –, Kamito frunció el ceño y devolvió la pregunta.

Lo que venía a su mente era—el incidente de antes de recibir la misión del Pueblo Minero hace dos semanas.

Ellis estuvo tratando de reclutar a Kamito en su equipo.

Kamito, quien ya se había unido al equipo de Claire, la rechazó tajantemente, pero ahora que sus dos compañeras se habían vuelto incapaces de participar en las batallas, podría intentar reclutarlo nuevamente.

Mientras Kamito se rascaba la cabeza, ya que esto le era un problema, sacudió su cabeza.

• Ellis, lo siento, pero no puedo unirme a tu…
• ¡N-No es eso!

El rostro de Ellis se ruborizó mientras gritaba… Parecía que él había saltado a una conclusión equivocada.

• Entonces…
• Kamito, ehm… ¿quisieras unirte a las Caballeros Sylphid?
• ¿A las Caballeros? –, Kamito devolvió la pregunta espontáneamente ante esas palabras inesperadas.

Las Caballeros Sylphid—Una organización estudiantil de élite que protegía el orden público y la moral de la Academia.

(Qué me una a ellas… ¿Qué rayos significa?) Ellis miraba a Kamito de manera incómoda.

• Ehm… es sólo hasta que vuelvan mis compañeras, quisiera que ayudaras a las Caballeros.

Kamito recordó las cosas que había conversado con Ellis durante la clase suplementaria de esa mañana.

Como resultado del incidente del ataque del otro día, incluyendo a las dos compañeras de equipo de Ellis, siete caballeros habían sido

forzadas a retirarse de las Caballeros Sylphid. Las Caballeros Sylphid, que habían perdido a un tercio de sus miembros, ahora estaba en un estado en el que no estaba funcionando de forma normal.

En efecto, como conocida, y además como alguien cuya habilidad ella también comprendía, Kamito podía entender la razón que ella tenía para reclutarlo.

• Por supuesto, no diré que será gratis. Como miembro de las Caballeros, se te pagará un salario apropiado.
• … ¿Por qué yo? Si realizas un reclutamiento, ¿no habrá chicas postulando?
• Estamos realizando un reclutamiento, pero prácticamente no hay postulantes. Hemos reunido personas durante el período en el que entraron las de primer año, pero—aun así, más de la mitad renunciaron inmediatamente.
• Ya veo…

Parecía que el trabajo de las Caballeros Sylphid era algo mayor a lo que habían imaginado. Además de los peligros, y además del tan llamado trabajo de proteger la moral pública de la Academia, también podría haber casos en los que eran vistas con hostilidad por las demás estudiantes de la Academia.

• Es más, debido al incidente del ataque del otro día, la confianza en las Caballeros ha estado cayendo enormemente. Aunque ya nos ocupamos de las heridas, al final, no pudimos atrapar al atacante –, Ellis se mordió los labios, aparentemente irritada. – Postulé a la misión de arrestar a Jio Inzagi con el plan de anular esas valoraciones hacia las Caballeros, pero—el resultado fue ese penoso aprieto. Si todos

ustedes no hubieran ayudado en ese momento, con seguridad habríamos sido aniquiladas.

Sus pupilas castaño se volvieron húmedas, y estaban temblando ligeramente.

Sin duda, Ellis estaba soportando todo el tiempo las voces de críticas dirigidas hacia las Caballeros.

Seguramente las estaba soportando por su cuenta sin nadie a quien pudiera pedirle consejo.

Dado que ese era el deber de la capitana, y ella se estaba condenando a sí misma.

(… Ya veo. Está insegura. De seguro no puede evitar estar asustada debido a eso.)

Era la responsabilidad y la fuerte presión que venían con la posición de capitana.

Debería haber voces de duda elevadas hacia ella, una estudiante de primer año, sirviendo como la capitana.

Ella era estricta consigo misma por el bien de proteger el orden de la Academia, e incluso podría haber hecho enemigos.

También había estado conteniendo esas voces al mostrar su habilidad hasta ahora.

Sin embargo, ahora esa confianza estaba vacilando.

Además, sus compañeras de equipo y camaradas quienes siempre la habían estado apoyando. Rakka y Reishia tampoco estaban presentes ahora.

(… También es una chica, que todavía no cumple los dieciséis.)

Cubiertos por su pechera de las caballeros que llevaba puesta, estaban los delgados hombros de la chica.

¿Cuánta de aquella pesada presión llevaba sobre esos hombros suyos—

• … La verdad es que tengo miedo –, Ellis bajó la mirada mientras decía eso. – ¿He sido capaz de hacer lo correcto como caballero? ¿Estoy usando mal mi autoridad de las Caballeros y sólo estoy reprimiendo con poder a los que debería proteger?

Su cabello azul de su cola de caballo estaba ondeando en la suave brisa.

Era casi como si estuviera revelando el corazón de Ellis. “Quiero ayudar”—No dijo eso.

Con seguridad, ese era su última hebra de orgullo. Kamito—

• … Entiendo. Sólo es hasta que esas dos regresen, ¿cierto?
• ¿E-Eso está bien? … ¿En serio? –, Ellis abrió sus ojos castaño.
• Ahh –, Kamito asintió firmemente una vez más. Honestamente, él no creía que estaba hecho para cosas como las

Caballeros que protegían la moral pública. Además, si tomaba en cuenta la 〈Blade Dance〉 que tendría lugar en unas cuantas semanas, no debería tener espacio para estar utilizando su tiempo para tales cosas.

Sin embargo, al ver a Ellis reducida a un estado en el que iba ser aplastada en cualquier momento—

Quiso ayudar a esta sincera pero torpe chica caballero, aunque fuera un poco.

• … T-Tienes mi agradecimiento, Kazehaya Kamito.

Ellis se inclinó con una expresión como si fuera a llorar en cualquier momento.

Kamito puso una expresión amarga ante Ellis, quien era meticulosa incluso en un momento así.

• Ahh, es cierto. Tengo un favor que pedirte.
• ¿Qué cosa?
• Ehm, respecto a la remuneración que mencionaste recién, ¿es posible algo como un adelanto?

***

Separándose de Ellis, Kamito regresó a la habitación—

Claire estaba usando un lindo delantal, y estaba de pie en la cocina, al igual que en la mañana.

Había un aroma dulce pero ligeramente quemado. Oyó el sonido de algo hirviendo a fuego lento.

Ocultando sus pasos, Kamito se acercó a la espalda de Claire.

• Hn, ¿estás haciendo chocolate otra vez?
• ¡Fuaa, ¿K-Kamito?!

*Pyon* Sus cabello en coletas gemelas se elevó.

• ¡I-Idiota, no me asustes! ¡Te convertiré en cenizas!

El rostro de Claire se volvió de un rojo intenso, y *Pishi Pishi* blandió su látigo. Kamito lo esquivó, nervioso.

• … Cielos, ¿a dónde fuiste? Tus clases suplementarias deberían haber acabado hace mucho, ¿cierto?
• ¿Qué? ¿Ya tienes hambre?
• E-Ese no es el problema, eres mi espíritu esclavo, ¡así que no puedes andar por ahí como te plazca sin permiso de tu ama!
• … ¿Soy un perro? –, Kamito dio un suspiro de decepción.
• Fui a donde Ellis, y acabó en que fui invitado a una pequeña comida.

*Pishi*—Claire estaba petrificada.

• … ¿Qué… dijiste?
• Ahh, parece ser una expresión de gratitud por ayudarla el otro día. Qué persona más meticulosa.

Como se esperaba, ocultó el asunto sobre el uniforme de sirvienta por el bien del honor de Ellis—

• Y-Ya veo, te invitó… ¿en serio? –, el rostro de Claire se crispó.

• Yo también ayudé y aun así… ella sólo invitó a Kamito.
  • ¿No recibiste una caja de pasteles de las Caballeros? Una caja de macarrones surtidos. Si no me equivoco, te los comiste todos tú sola.
  • E-Eso ciertamente fue delicioso… Eh, ese no es el problema,

¿a qué te refieres con “donde Ellis”? N-No me digas que, ¿subiste a su habitación?

• Sí, la habitación de Ellis está ordenada apropiadamente. También deberías seguir su ejemplo—
• ¡N-No puedo creerte…!

Los hombros de Claire temblaban.

Mordió fuertemente sus labios del color de las flores de cerezo, y lágrimas aparecían ligeramente en sus pupilas rubí.

• … ¿Claire?
• H-Has sido seducido exitosamente por cosas como los senos de Ellis y fuiste degradado a ser el perro de las Caballeros, ¿cierto?
• No, ¿cuáles senos…? Bueno, aunque, sí fui invitado a unirme a las Caballeros.

– —¿Eh?

Esta vez—Claire quedó completamente tiesa.

• ¿Q-Qué fue eso…? ¿A qué te refieres?
• Hn, actualmente, las Caballeros parecen estar cortas de personal. Me pidieron que las ayudara.
• P-Por supuesto, la rechazaste, ¿cierto? La rechazaste…

¿cierto?

Claire agarró firmemente el brazo de Kamito, y lo estaba mirando con una expresión seria.

Mientras Kamito se rascaba la cabeza—

• No, decidí ayudarlas. También, tengo varias obligaciones con

Ellis.

– ¡¿…?!

Mientras Claire sostenía el brazo de Kamito, fue tomada por sorpresa, y abrió sus ojos ampliamente.

La verdad era que él tenía otra razón para aceptar, pero— Era vergonzoso decirle eso ahora a Claire.

• Me disculpo por decidirlo sin tu permiso, pero no es un problema en particular, ¿cierto?
• ¡No hay forma de que no lo sea, sabes que me llevo mal con las Caballeros, ¿cierto?!
• Eso es porque causas problemas— Entonces, Kamito se dio cuenta.

Las puntas de los dedos de Claire, que estaban agarrando su brazo, estaban temblando poco a poco.

• … Ya veo, estás del lado de Ellis otra vez –, murmuró Claire calmadamente.
• No, no se trata de si estoy de su lado o no—
• … Lo dijiste, y aun así…
• ¿Eh?
• A pesar de que dijiste—“Seré tu espíritu contratado”.

Claire levantó su rostro, y lágrimas se desbordaban de sus pupilas.

• T-Tú…
• Es suficiente, sal—odio!

*Don*—Claire alejó a Kamito de un empujón.

• Oye, Claire…
• ¡Sal, de prisa! ¡O-Odio a las personas como tú, realmente te

Una caliente esfera de fuego fue liberada desde la palma de

Claire.

• ¡Owa!

Una llamativa explosión resonó, y un amplio agujero fue abierto en la pared detrás de Kamito.

• O-Oye, espera, ¿por qué estás tan enojada?
• ¡Cállate, idiota, sal——!

Esta vez comenzó a recitar magia espiritual de la clase más fuerte, así que Kamito salió, nervioso.

Si Claire hiciera un esfuerzo en serio, sería bastante capaz de hacer estallar todo el dormitorio.

Después de salir corriendo del dormitorio y refugiarse, Kamito suspiró.

• ¿Q-Qué rayos fue eso…?

¿Por qué Claire estaba tan enojada?… Era incomprensible. (… ¿Tanto le desagrada el que me una a las Caballeros?)

Miró hacia arriba, hacia la ventana de la habitación en el segundo piso, pero—no vio a Claire allí.

Poco después, las cortinas de la ventana fueron cerradas.

(… Ahh, si se ha puesto así, no escuchará.)

Claire Rouge. Ella era una chica casi como una llama abrasadora. (Bueno, como sea, esa es la parte que mejor le queda…)

Kamito dio un profundo suspiro una vez más—

Abandonó el dormitorio de la Clase Raven con pasos pesados.

***

Después de echar a Kamito—

• Odio a ese sujeto, odio a ese sujeto… ¡lo odio tanto! Claire cayó sobre la cama.

Presionando su suave almohada contra sus mejillas, agarró firmemente sus sábanas.

Scarlet apareció, aparentemente preocupada, pero Claire la corrió sin palabra alguna. No quería que ni siquiera su espíritu contratada, quien había estado con ella durante todo este tiempo desde que era joven, viera ahora su rostro llorando.

• Vaya… parezco una tonta.

Todo este tiempo, durante varios días, había estado practicando cómo hacer chocolate.

(P-Por supuesto que es por obligación. El chocolate que le daré es por obligación.)

La práctica tuvo efecto, y gradualmente había sido capaz de hacerlos bien.

Aunque había dejado de hacer una gran cantidad de cenizas, debería ser suficiente para que la felicitaran.

En aquel día, mañana en la mañana, había planeado darle a Kamito el chocolate que mejor había hecho.

“Lo hiciste bien”… Quería ser felicitada. (Y aun así, él…)

Claire gimió, y golpeó a su almohada. *Posu Posu*

(… La comida que Ellis hizo, con seguridad es mejor que tales cosas como mi chocolate.)

Era irritante. Definitivamente no tenía malos sentimientos hacia Kamito. Realmente, no había duda de que él sólo había pensado en ser de ayuda para Ellis y decidió unirse a las Caballeros.

Él era esa clase de persona.

Incluso Claire no odiaba a Ellis en particular. Por supuesto, no se llevaban bien, pero reconocía que ella era una elementalista orgullosa.

Sin embargo, por alguna razón la hizo enojar. (¿Por qué…?)

Entendía la razón.

Había estado pensando que ella era el ser más especial para Kamito.

(Después de todo, él había dicho que sería mi espíritu contratado.)

Al presionar suavemente sobre sus labios con la punta de su dedo, sus mejillas se volvieron calientes rápidamente.

(Además, h-hasta nos… besamos.)

Se volvió una sensación dolorosa, como si su pecho estuviera siendo oprimido.

(… Pero, eso está mal.)

No significaba que sólo Claire era especial en particular.

Mientras hubiera chicas con problemas, extendería su mano hacia cualquiera, sin importar quién fuera.

(Es porque soy la hermana menor de esa Reina de la Calamidad—)

Él podría, simplemente, pensar que sus circunstancias eran lamentables, y sólo estaba compadeciéndose de ella.

Al pensar eso, Claire se volvió excesivamente solitaria.

Con seguridad, Kamito no entendía por qué Claire estaba enojada.

Claire tampoco entendía claramente por qué tenía esos sentimientos.

Sus sentimientos actuales eran casi como el ardiente fuego de un corazón.

… Estas no eran las llamas de Claire Rouge.

En ese momento, hubo el sonido de la puerta de la habitación abriéndose.

• ¡¿Kamito?!

Claire levantó enérgicamente su rostro de la almohada, pero— Quien estaba allí, era Fianna con una expresión perpleja.

Parecía que había regresado de su tarea de compras para la cena.

Claire cubrió su rostro con su almohada, nerviosa. No quería que ella viera su rostro manchado con lágrimas.

Fianna echó un vistazo al estado actual de Claire—y parecía, de alguna forma, haber adivinado la situación.

• Ehh, ¿te peleaste con Kamito-kun?
• … Vete –, dijo Claire, manteniendo su rostro cubierto con la almohada.

Fianna suspiró, se sentó en la cama y colocó una mano sobre la cabeza de Claire.

• Dije que me dejaras sola, ¿no?
• Realmente eres una niña. Enormemente diferente a Rubia-sama.

• De cualquier forma, soy diferente de Nee-sama –, Claire

replicó malhumoradamente.

• Oye, Claire, ¿por qué no eres un poco más honesta?
• M-Me disculpo por no ser honesta… Después de todo, mis senos son pequeños.
• ¿Eh? Nadie dijo nada sobre senos, ¿sabes? –, mientras Fianna peinaba suavemente la cabeza de Claire, como a un gatito, suspiró. –

¿Qué hacemos respecto a la cena?

***

En ese mismo momento—Ellis estaba rodando en su cama en agonía.

• … E-Estaba usando un atuendo tan vergonzoso.

Extendió el uniforme de sirvienta que acababa de usar, y se ruborizó tímidamente. Aunque fuera por el bien de recompensarlo por su deuda de gratitud, esto era, como esperaba, una exageración, ¿no?

• P-Pero… –, Ellis agarró firmemente el uniforme de sirvienta—.

• Kamito dijo que me quedaba bien.

Recordándolo, sus mejillas se relajaron reflexivamente.

Ellis abrió sus ojos, como su hubiera sido tomada por sorpresa, y golpeó sus mejillas con ambas manos.

• ¡S-Soy la Capitana! ¡Si no soy firme, no puedo ser un ejemplo para todas!

Una caballero de la familia Fahrengart nunca debe mostrar sus debilidades.

Ellis Fahrengart siempre había hecho así. Sin embargo—

(Se lo he mostrado a él…)

Nunca antes había mostrado ese lado de ella, que estaba atemorizado por la inseguridad, en frente de las camaradas en las que confiaba.

A decir verdad, no tenía intención de invitar a Kamito a las Caballeros—hasta ese momento.

Sin embargo, cuando vio su espalda mientras estaba a punto de irse, lo llamó subconscientemente.

(… Me pregunto por qué. Yo misma tampoco lo entiendo bien.)

Al comienzo, había estado pensando que cosas como los hombres elementalistas eran un enemigo, que perturbarían la moral pública de la Academia.

¿Desde cuándo ella, de forma tan extraña, comenzó a preocuparse por él?

Cuando pensaba en Kazehaya Kamito, su pecho se oprimía y dolía, por alguna razón.

Tal sentimiento era una primera vez para Ellis, quien había sido criada como caballero.

Casualmente, miró la superficie de la mesa.

Un chocolate envuelto apropiadamente estaba allí. Mañana era el 〈Festival Sagrado de Valentia〉.

Dar chocolate al sexo opuesto que ocupaba un lugar en la mente

de uno—

(…    E-Es    un    regalo    por    enlistarse    en    las    Caballeros.

Naturalmente, no hay otro significado más que ese.)

Ellis gimió espontáneamente.

Si ese era el caso, no debería estar tan nerviosa, pero, por alguna razón, los latidos en su corazón no se detenían.

(… ¿C-Cuando sería bueno entregarlo?)

Después de todo, era la primera vez que hacía tal cosa, así que no sabía qué hacer.

• … N-No pensaría que soy una chica extraña, ¿cierto?
• —¿Qué es extraño, Ellis?

Repentinamente, se oyó una voz como aire congelado.

– ¡¿…?!

Antes de que lo supiera, la puerta de la habitación estaba abierta—

Y, allí—ella estaba de pie.

Tenía un brillante cabello rubio y pupilas imperturbables de un azul pálido.

• ¡Ah, Aneue…!
• ¿Qué clase de rostro cobarde estás poniendo? ¿Y aun así te llamas a ti misma una caballero de la familia Fahrengart?

Era la elementalista más fuerte de la Academia—Velsaria Eva Fahrengart.