Kami Tachi ni Hirowareta (NL)

Volumen 3

Capitulo 2: Personalidad Completamente Opuesta

Episodio 45: El Día Antes De Que Nos Separemos

El día siguiente.

Cuando visité a la familia del duque por la mañana, su habitación estaba llena de adultos que gemían.

“Uhn, Ryoma, lo siento, pero necesito más medicamentos”.

“Yo también, por favor. Soy demasiado viejo para beber tanto como lo hice”.

“También me gustaría un poco, gracias”.

Todos estaban tan contentos que bebieron una tonelada anoche. Incluso Araune y Lilian parecían un poco enfermas. Solo bebieron un poco para celebrar, pero tal vez no fueron buenos con el alcohol. Sebas era el único de los adultos que parecía estar bien. Pensé que bebía un poco, pero se veía igual que siempre. Eliaria también tenía la edad suficiente para beber legalmente, pero se limitó a un vaso. En cualquier caso, me dirigí a la farmacia y la verdulería como lo había hecho antes, compré los ingredientes para un medicamento, regresé a la posada y los mezclé. Después de tomar la medicina, tenían una sugerencia que hacer.

“Lo siento, Ryoma, pero ¿puedes cuidar a Elia por el día?” “No estamos en condiciones de hacerlo en este estado”.

“¿Por favor?”

No nos íbamos a ver por un tiempo, así que tal vez querían darnos la oportunidad de hacer algunos recuerdos juntos. Si es así, no podría negarme.

“Por supuesto”, respondí. Me dieron las gracias y luego fueron a la habitación. Sus resacas parecían brutales.

“Ahora, ¿qué debemos hacer hoy?” Le pregunté a Eliaria.

“Tienes trabajo, ¿no? ¿No estás ocupado?”

“Tengo otras personas que manejan la tienda para mí, así que solo necesito revisarlas en la mañana y en la noche”.

“Entonces, ¿puedes mostrarme qué harías normalmente con tu día?” “Creo que podría hacer eso”.

“¡Entonces por favor hazlo!”

No sabía lo valioso que sería, pero Eliaria vino conmigo y Sebas nos atendió como guardián. Nos detuvimos en la tienda, luego nos dirigimos a la mina abandonada.

***

Cuando llegamos a la mina, comencé a trabajar en las telas como siempre lo hacía. Hubo ciertas diferencias esta vez; Antes de comenzar a trabajar, liberé a las aves de limour de mi Dimension Home para dejarlas jugar libremente. También tuve la ayuda de Eliaria. Sentí que deberíamos hacer más que esto, pero no sabía qué.

“¿Qué debemos hacer a continuación?” Eliaria me preguntó antes de que decidiera.

“No estoy seguro. Le ordené a los limos pegajosos que cubrieran las telas con su fluido, así que ahora solo esperamos hasta que se sequen. Lleva un tiempo, por lo que nos da algo de tiempo libre. He aprovechado esta oportunidad para entrenar o hacer figuras antes”.

“¿Es eso así? Pensé que pasabas todo tu tiempo trabajando.”

“Desde que tuve a mis empleados dirigiendo la tienda en mi lugar, en realidad he tenido mucho tiempo libre. ¿Me veo tan ocupado?”

“Trabajas todos los días desde el amanecer hasta el anochecer, claramente”.

“Parte de ese tiempo lo paso parado sin hacer nada, y tengo que encontrar maneras de matar el tiempo. A veces solo hago piedras para construir una casa. Cosas así son bastante relajantes”. “Ya veo. ¿Eso significa que planeas vivir aquí?”

“Haría que patrullar fuera más fácil si lo hiciera. También es un buen lugar para practicar magia, ya que no hay nadie cerca”.

“Entonces, ¿cuándo vas a comenzar a construir la casa? No tienes intención de vivir en esta mina, ¿verdad?”

“Iba a construir una cabaña muy simple o cavaría un túnel en algún lugar de la mina para quedarme. Viviría en uno u otro por un tiempo mientras construía la casa completa”.

“Bueno, si no hay nada mejor que hacer, ¿podemos chatear un poco?”

“Por supuesto.”

Dejamos el espacio de trabajo y salimos a un área soleada, donde usé la magia de la tierra para crear algunas sillas para que nos sentáramos.

“¿No vas a comenzar la escuela este año?” Yo pregunté.

“Sí, todas las chicas nobles asisten a la escuela en la capital cuando alcanzan los doce años. No es obligatorio, pero a menos que tenga una buena razón para no ir, otros nobles lo verán mal”.

“Ya veo.”

“No quiero ir especialmente, pero así es la vida”.

“Oh, ¿no?”

“Padre, madre e incluso el abuelo dicen que no sería necesario ir si no fuera habitual, y no quieren obligarme a ir”.

“¿Por qué no?”

“La escuela en la capital también está abierta a los plebeyos, y muchas personas se inscriben allí cada año. La escuela trata a todos por igual, independientemente de su estado, pero hay algunos alborotadores allí. Tampoco enseñan nada que no puedas aprender de un tutor, por lo que es poco probable que encuentre algo que valga la pena aprender”.

“Entonces, ¿qué sentido tiene ir a la escuela?”

“No lo sé. Mis padres dicen que debería hacer amigos allí, pero también dicen que debo tener cuidado de no mezclarme demasiado. No les importa si no puedo hacer lo que la escuela me enseña o si mis calificaciones son malas, solo quieren que practique lo que me enseñaron en casa”.

Me sorprendió escuchar que su familia dijo todo eso. Le pregunté a Sebas al respecto.

“Para los nobles y otras familias con cierto grado de riqueza, la joven señorita tiene razón en que podrían obtener tutores especiales según sea necesario. Si nada más, ayudará desde una perspectiva de socialización. Dicho esto, brinda la oportunidad de aprender una amplia variedad de conocimientos para todos, independientemente de su estado, para estar seguros. Sin embargo, no creo que tenga ninguna necesidad de ir allí, Maestro Ryoma”.

“Por eso mis padres nunca te preguntaron si estabas interesado en ir a la escuela”, señaló Eliaria.

“Oh, eso es verdad. ¿No necesito hacerlo?”

“Si fueras a la escuela, seguramente tendrías calificaciones tan excelentes que llamarías la atención de los nobles. En clases de esgrima y magia, al menos.”

“Te daría más trabajo que hacer, para bien o para mal”.

“Ya veo.”

“De todos modos, es por eso que no estoy entusiasmado con la escuela. Si no fuera habitual, preferiría entrenar con usted”.

Nunca pensé que la escuela fuera divertida, así que no podía discutir con ella. Teniendo en cuenta que era de una familia rica y poderosa, no podía imaginar que fuera intimidada, pero no estaba seguro, así que le pregunté.

“Nunca he pasado por algo así, pero tampoco he estado lo suficientemente cerca de alguien como para llamarlo amigo. Todos tienen demasiado miedo de mi estado y mi energía mágica para acercarse a mí”, dijo. Eso me recordó que ella mencionó esto cuando hice un panel de estado. Su estado era una cosa, pero no sabía que su energía mágica fuera algo temible. No lo creo, al menos. Cuando le pregunté por curiosidad, me dio una mirada un poco triste.

“Hace mucho tiempo, arruiné algo”, dijo. Mencionó que tenía tanta energía mágica que le resultaba difícil de controlar, así que tal vez eso fue lo que la causó. “Ocurrió cuando tenía cinco años, creo, cuando comencé a aprender los fundamentos de la magia. Mis mejores elementos eran fuego y hielo, así que recuerdo haber practicado con magia de hielo relativamente segura para congelar una taza de agua. Pero luego congelé la mesa donde también estaba la taza. Siempre fue así; No podría controlar mi magia tan bien.

“Un día, un niño un poco mayor vino a nuestra casa y sus padres querían que fuéramos amigos”, dijo, con un humor diferente al de antes. Escuché su historia en silencio y aprendí que este niño era hijo de nobles que conocían a la familia Jamil. Estaban interesados en casar a su hijo con Eliaria por razones políticas. El día que se conocieron, sus padres tenían asuntos importantes que discutir y les dijeron que jugaran entre ellos, pero tuvieron problemas para encontrar algo para discutir. Finalmente se toparon con el tema de la magia.

“Era bueno en magia y me mostró su hechizo Bola de Fuego en nuestro campo de entrenamiento. Su hechizo parecía genial, y mucho más estable que el mío, así que se lo dije. Pareció dejar que se le subiera a la cabeza y se ofreció a ayudarme a enseñarme, así que entrenamos juntos, pero no importa cuánto lo intenté, los resultados nunca cambiaron. Muy pronto, se sintió frustrado”.

“Estoy seguro de que solo quería presumir frente a una chica”, le dije. Era bastante típico de los hombres, pero esto era un niño, y uno alrededor de la edad escolar primaria por lo que parecía. Ella dijo que él era mayor que ella, pero no podría haber estado por encima de la edad de la escuela secundaria. Cualquier tutor que contratara su familia tendría que saber lo que están haciendo, por lo que este niño no podría haberla enseñado mejor que ellos. Ella nunca lanzó la magia con éxito, y el niño se molestó con ella, lo que eventualmente condujo a un incidente. Desesperado por hacerlo bien, Eliaria usó demasiada energía y desató un poderoso hechizo de hielo. Ella perdió el control sobre la magia y causó una explosión de energía. “Mi magia hizo lo contrario de lo que quería. Terminé congelando al niño. Varias partes de su cuerpo estaban encerradas en hielo. Estaba tan sorprendido que se cayó al suelo helado y se lastimó. Lo que sucedió después, por supuesto, fue mucha conmoción. Su vida no estaba en peligro, y nuestros padres nos advirtieron que fuéramos más cuidadosos. Nadie culpó a nadie más, y todos hicimos las paces. Pero algunos días después, los rumores sobre mí se extendieron entre los nobles, diciendo que ataqué a alguien que no me gustaba con magia ofensiva, o que cuando estoy enojado, mi magia se dispara contra mi voluntad, cosas por el estilo”.

“Ya veo. Eso debe haber sido horrible.”

“No seguí las instrucciones y estropeé mi magia, eso es cierto”.

Sentí que abordé un tema que no debería tener. Quería cambiar de tema, pero no de una manera que fuera demasiado evidente, así que discutí una experiencia similar de mi pasado. “¿Has pasado por algo así, Ryoma?”

“Sí, cuando aún vivía en mi pueblo, en la escuela. Bueno, apenas era lo suficientemente grande como para ser llamado una escuela, pero participé en un grupo donde los adultos les enseñaron a los niños del pueblo algo de esgrima”, le expliqué como Prefacio, luego conté una historia basada en mi clase de gimnasia en la escuela secundaria. En mi escuela, aprendimos kendo como parte de la clase de gimnasia. En nuestra primera clase, cometí un gran error.

Ese día, la lección se centró principalmente en demostrar lo que aprenderíamos en el transcurso de la clase. Aprendimos ejercicios de preparación, cómo ponerse la armadura y los fundamentos del entrenamiento. Al final, la maestra preguntó si alguien con experiencia en kendo quería entrenar como demostración. A todos los que conocían un poco de kendo se les pidió que levantaran la mano, y resultaron ser algunos de nosotros, pero el primer niño al que llamó el maestro fue una mala elección. Aparentemente era famoso en el mundo del kendo en ese momento por ganar varios torneos. Incluso si no logró el primer lugar, siempre obtuvo un alto puntaje. Hablar de esto incluso había llegado al aula y llegó a nuestro maestro, por lo que presumiblemente fue por eso que eligió a este chico. Subió como si fuera natural, luego la maestra pidió voluntarios para luchar contra él, pero nadie quería hacerlo. Fue un partido que no pudieron ganar, y no quisieron fallar con todos mirando. Finalmente, fui el único cuya mano todavía estaba arriba.

Luego tuvimos nuestro partido, y para resumir, gané fácilmente. Parecía ansioso por hacer una pelea rápida, así que comenzó con ataques agresivos. Contrarresté balanceándome en sus brazos, y eso fue suficiente. Dos segundos después de su partida, dejó caer su espada y se agachó.

“Golpeé su armadura, pero aún le destrocé la muñeca. Ese fue el final del partido y el final de la clase. A partir de entonces, ninguno de los estudiantes quería entrenar conmigo. Incluso difundieron rumores de que lo lastimé a propósito”.

Eso fue lo que el niño comenzó a reclamar al día siguiente. Dijo que me reí de su dolor, pero no lo hice. En todo caso, me quedé estupefacto. Pero estábamos frente a frente, por lo que ninguno de nuestros compañeros de clase podía ver nuestras caras. Cuando la verdad es vaga, se trata de en quién confías.

“Era mucho más popular que yo. Pero la gente ya me evitó antes por alguna razón, por lo que no cambió mucho para mí. Sabes, hablar de esto me pone un poco triste”.

“No dejes que te deprima”.

En algún momento, terminó siendo ella quien estaba tratando de hacerme sentir mejor. Conté esa historia de una manera absolutamente incorrecta.

“¡De todos modos, eso es más o menos por qué otros niños me evitan!” Dijo Eliaria, tratando de poner fin a mi historia. Lo seguí.

“Ya veo, así que los rumores dañaron tu reputación”.

“Algunas personas simplemente toman historias exageradas al pie de la letra”.

Si sus padres actuaban de esa manera en casa, los niños probablemente adoptaron ese hábito sin pensarlo demasiado. Los niños siempre están mirando a los adultos, incluso cuando no se dan cuenta.

“Por cierto…”

“¿Si?”

“¿Estás bien conmigo?”

“¿Por qué preguntas?”

“Después de lo que dije sobre mí, tenía un poco de curiosidad”, explicó. Ella debe haber estado preocupada de que la tratara de manera diferente. “No me preocuparía por eso”.

“Sin embargo, es cierto que perdí el control de mi magia y lastimé a alguien”, dijo, pero no fue como si lo hubiera hecho a propósito. Era cierto que también rompí la muñeca de alguien. En los últimos años, también maté a ladrones que entraron al bosque por docenas, y eso fue algo que hice deliberadamente. Eliaria pareció lamentar lo que hizo, y no vi ningún problema con la forma en que veía el incidente desde una perspectiva moral. También había visto su magia varias veces, y no era nada que no pudiera evitar. Podría derribar las Flechas de Hielo con mi espada, e incluso si una me golpeara, no tendría mucho efecto mientras me defendiera. Siendo ese el caso, su magia no fue un problema para mí. Cuando le conté todo esto, ella se rio.

“¿Está bien? En ese caso, Ryoma, no olvides que prometiste volver a verme en tres años”.

“No lo haré”.

“Luego te veré dentro de tres años. Si estás ocupado obsesionado con el trabajo para recordar, te golpearé con algo de mi magia nueva y mejorada para recordarte”.

“Bueno, eso es aterrador, así que por favor no lo hagas. ¿De dónde sacaste esta idea, de todos modos? No es muy femenino”.

“Hace mucho tiempo, cuando papá olvidó una promesa, mamá se lo recordó de la misma manera”.

“Yo, eh, ya veo”.

“Además, mi magia no funciona contigo de todos modos, ¿verdad?” dijo ella, y tenía razón en eso, pero tal vez esto era diferente. Mientras pensaba en eso, ella comenzó a reír como si acabara de hacer una broma.

“¡Tengo una gran idea, Sebas!”

“Sí, ¿señorita? ¿Qué es?” Sebas preguntó. Ella le susurró al oído, luego él asintió y sacó una pequeña caja de su caja de objetos. Eliaria lo tomó y me lo entregó.

“Ryoma, me gustaría que tuvieras esto”.

“¿Qué es?”

“Un collar que mi madre me regaló para mi décimo cumpleaños”, dijo y abrió la caja. Había un hermoso collar con una cadena de oro y un colgante de oro adornado con un rubí del tamaño de la uña de un dedo meñique. Era simple, pero sin duda valioso.

“¿Hay energía mágica en este rubí?” Pregunté después de sentir algo.

“Ah, te diste cuenta. Sabía que lo harías. Esta es una gema mágica.”

“¿Te gusta lo que usan en lámparas y tal?”

“No, esas son piedras mágicas, un simple objeto mágico. ¿Conoces las piedras de maná?”

“Creo que se encuentran en lugares densos con energía mágica, donde absorben gran parte de ella, si estoy pensando en lo correcto”.

“Correcto. La energía contenida dentro generalmente se extrae cuando se usa magia, o se usa para ayudar a controlar los hechizos. Pero no todas las piedras de maná son rocas simples; Algunas son piedras preciosas. Estas se llaman gemas mágicas. Y si es mineral, lo llamas mineral mágico”.

Las piedras de maná se usaron para ayudar con el lanzamiento de hechizos, mientras que el mineral mágico se convirtió en objetos mágicos o armas.

“Ahora, cuando se trata de gemas mágicas, puedes usarlas para cualquier cosa. Ayudan a lanzar hechizos, mejoran el rendimiento de los objetos mágicos y, por supuesto, sirven como joyas. No solo son extremadamente útiles, sino que se supone que son más efectivos que las piedras de maná ordinarias, sino que son bastante raros”, dijo Eliaria en un suspiro.

“¿Entonces esto no es algo fácil de encontrar?”

“Así es.”

“Bueno, entonces no puedo aceptar esto”.

“¡Pero quiero que lo hagas!”

“Mira, es demasiado valioso como para regalar”.

Me negué obstinadamente, pero Eliaria era igualmente obstinada. Sebas se interpuso entre nosotros.

“Cálmense, los dos. Maestro Ryoma, ella dijo que quiere que te la lleves, pero eso no significa que la esté regalando. Quiere que te aferres a ella hasta que te vea de nuevo.”

“¿Por qué?”

“Supongo que no sabes sobre esto, pero dicen que cuando los amigos se separan, siempre y cuando les prestes una pertenencia preciosa y desees reunirte algún día, hay una alta probabilidad de que tu deseo se haga realidad. No sé cuándo esta idea se apoderó de la conciencia pública y quién la popularizó, pero ha existido durante siglos y la gente lo cree hasta el día de hoy”.

“Entonces, ¿por eso quieres que tenga ese collar?” “Así es”, declaró Eliaria.

“¿Pero no es valioso para ti? ¿Estás segura?”

“Si no fuera así, nunca lo habría mencionado. Confío en ti, así que devuélvelo en tres años, por favor.”

Era difícil decir que no ahora. Especialmente si esto era habitual.

Significaba que sinceramente deseaba volver a verme.

“Está bien, lo tomaré”.

“¡¿De verdad?!”

“Pero te lo devolveré algún día”.

“Naturalmente.”

Acepté la caja y la puse en mi caja de artículos. Mientras lo dejara allí, no tenía que preocuparme por perderlo. Sin embargo, si quería seguir esta costumbre, también tenía que darle algo a Eliaria, pero no sabía lo que era valioso para mí. El dinero o las pieles de animales serían difíciles de almacenar, y no lo valoré tanto. También tenía piedras, lingotes y telas impermeables, pero nada de eso estaba bien. Después de vivir una vida de caza y autosuficiencia, comencé a ver todo lo valioso en términos de los componentes necesarios para crearlo. Ninguno de estos materiales podría considerarse precioso. Al final, llamé a mi Dimension Home, saqué un limo curativo y un limo carroñero, y se los entregué a Eliaria.

“Ryoma, ¿qué son estos limos?”

“Estaba tratando de pensar en algo precioso para darte, pero no tengo mucho que funcione. Mis limos son al menos algo que valoro, y creo que te serán útiles, así que debes tomarlas”.

Eliaria se confundió por un momento, luego se tapó la boca para reprimir una carcajada. Supongo que fue una elección extraña. Solo elegí limos porque no había nada mejor, y tuve que preguntarme si eran apropiados como regalo. Tal vez podría haberlo pensado un poco más. “Lo siento, Ryoma, esto es tan típico de ti. Estoy feliz de tomarlos”.

“¿De verdad? Gracias.”

“No, gracias por prestarme a tus preciosos familiares”.

Puse los limos en el suelo y cancelé sus contratos. Luego vi como Eliaria formó contratos con ellos.

“Los contratos son un éxito. Los cuidaré bien”.

“Por favor, hazlo.”

Hablamos de limos y magia, luego entrenamos juntos.

“Este es un hechizo de hielo que uso mucho”.

“También puedo usar Ice Cube, pero todavía no puedo usar Cooler”.

Ice Cube fue un hechizo para hacer cubitos de hielo para poner en bebidas, mientras que Cooler mezcló elementos de hielo y viento para producir una brisa fresca. Ambos fueron valiosos en el verano.

“Mist Wash”.

“Oh, funcionó”.

Discutí la magia del agua con Sebas también. Le enseñé cómo usar Mist Wash y, por supuesto, lo recogió después de solo unos pocos intentos.

“Interesante. Esto usa bastante energía mágica, pero puede ser útil para lavar las manchas”, dijo. Probablemente también podría usar un hechizo más complicado, así que le enseñé a usar Water Cutter, el hechizo para el que ideé Mist Wash. Pero todo lo que dije fue que implica condensar agua y lanzarla, luego se demostró en una roca cercana. Lo miró con fascinación.

“¿Cómo esto?” preguntó y lanzó el hechizo. “Quizás eso no usó suficiente energía”. Lo intentó cinco veces. Su primera vez ya era mucho mejor que cuando comencé a practicar, pero en el cuarto intento su hechizo fue más poderoso que el mío, y en el quinto, la roca que usé para la demostración se partió por la mitad. Si alguien más experimentado en la magia del agua usara esto, me preguntaba qué tan fuerte sería.

***

Cuando se puso el sol, usamos magia espacial para regresar a la ciudad. En el camino desde la puerta hasta la posada, revisé la tienda y descubrí que estaba llena de aventureros que iban al pantano, junto con médicos con bolsas que apestaban. Fue bueno ver que estábamos ocupados.

“Bienvenido de nuevo, Ryoma”.

“Gracias por cuidar a Elia hoy”.

“No hay problema, lo disfruté”.

“Ryoma me enseñó mucha magia. ¡No puedo usarlo tan bien todavía, pero seguiré intentándolo! ” “Bien por ti, Elia”.

“¡Además, me prestó un limo curativo y un limo carroñero!”

“Oh, ¿verdad? Cuídalos bien.”

“Por supuesto.”

De vuelta en la posada, todos ya se habían recuperado. Hablamos todo sobre lo que hicimos ese día. Era nuestro último día juntos, así que conversamos hasta bien entrada la noche.

***

A la mañana siguiente, era hora de decir adiós. En la estación de transporte detrás de la posada, la familia del duque y sus guardias ya habían abordado los carruajes. Me gritaron desde las ventanas.

“Mantente sano.”

“No trabajes demasiado duro”.

“Recuerde descansar cuando sea necesario”.

“Si algo sucede, contáctenos de inmediato”.

“Si alguna vez tienes tiempo, ven a visitarnos”.

“Buena suerte, Maestro Ryoma”.

“Cuídate.”

“Sigue así.”

“Rezo para que encuentres un éxito continuo”.

Incluso los sirvientes tenían palabras para mí. “Les deseo a todos lo mejor también. Gracias por todo”, dije y me incliné. Nunca supe qué decir en momentos como estos. Deseaba poder expresar mejor mis sentimientos.

“Ryoma”.

“¿Sí, mi señora?”

“Eso.”

“¿Qué?”

“Cuando me diste tus limos ayer, me preguntaba, ¿podemos considerarnos amigos?”

“Sí, por supuesto.”

“Entonces llámame Elia. Todas las personas con las que estoy cerca me llaman así, y no es que sirvas a mi familia. Parece extraño que un amigo me llame su señora.”

“Oh ya veo. Eso tiene sentido. Puedo llamarte Elia, siempre que eso esté bien contigo”.

“¡Si! Ryoma, mejoraré mucho en magia la próxima vez que te vea, ¿de acuerdo?”

“Yo lo haré.”

Finalmente, nos deseamos buena suerte y nos reímos. Era hora de que los carruajes partieran, por lo que el carruaje de los guardias se mudó primero. Elia y su familia me saludaron desde las ventanas. Le devolví el saludo mientras los veía irse. Los carruajes se alejaron en la distancia hasta que se perdieron de vista.

Pasé por mi tienda, luego me dirigí a la mina. A partir de hoy, la mina era mi hogar. Elia dijo que haría lo mejor que pudiera, así que quería hacer lo mismo.

Necesitaba asegurarme un nuevo hogar para mí. No había tiempo que perder, así que me puse a caminar. Las cosas iban a ser un poco diferentes ahora, y era hora de comenzar mi nueva vida.