Heavy Object (NL)

Volumen 14

Capítulo 3: Bienvenidos al Final de un Mundo Estable >> Defensa del Distrito Chesapeake

Parte 6

“Tch. Así que ha comenzado. Tu prueba empieza ahora, Reino de la Legitimidad.”

Mientras que todavía le molestaba la sensación en su trasero por su traje de baño negro de una pieza (que aparentemente era llamado traje de baño escolar en la Nación Isla), Wraith Martini Vermouthspray habló en voz baja en su crucero.

“No mueran todavía, mis queridos tontos.”

 * * *

Ellos escucharon una explosión y sintieron un temblor. Disparos de arma le siguieron.
Solo ahora fue que Quenser se dio cuenta de que su dispositivo móvil y su radio no estaban funcionando. Una poderosa interferencia debe haber comenzado al mismo tiempo que el apagón.

El enemigo no tenía intención de ocultarlo por más tiempo.

“¡Oh no! ¡Esto no suena como la fase de infiltración! ¡¡Ellos ya han configurado todo y están comenzando la fase de ataque!!”

“Aún más importante, ¿qué los hizo comenzar a disparar? Su objetivo es esa anciana llamada Katarina Martini, ¿¡cierto!? ¡¡Dudo que dispararían tanto antes de llegar a ella!!”

Las patatas del Reino de la Legitimidad se gritaban entre si mientras se ponían a trabajar rápidamente. La Princesa durmiente se despertó sin necesidad de un despertador.

Todos se dividieron en dos grupos generales.

El primero era un equipo de búsqueda para confirmar la seguridad de Katarina Martini. El segundo era un equipo de guardaespaldas para guiar a la Princesa al Baby Magnum, donde estaría más segura.

“Incluso con toda esa locura que vivimos en esa ciudad silo, la base de mantenimiento todavía funcionaba como un escudo. ¡Pero tan pronto como aparece la Martini Series, obtenemos esto!”

“Uno no se da cuenta de lo mucho que le gusta una regla solo después de que esta se rompe. El colapso de la Martini Series ha llegado. Si no lo detenemos aquí, esto se extenderá a los países seguros de todo el mundo.”

El enemigo ya estaba rompiendo las reglas, por lo que no tendrían forma de detener la violencia si perdían su Object. Entonces ellos no tendrían a nadie para evitar que el Nitrogen Mirage llegara a la Nueva Isla del Caribe.

Ellos querían saber más sobre Piranirie Martini Smoky. Ellos tenían que ver a Katarina para acercarse al núcleo de esto, pero Quenser y Heivia habían elegido proteger a la Princesa. Sin consolidar su fundamento, ellos no podrían avanzar más.

Heivia levantó su rifle de asalto mientras hablaba.

“Esto es malo… Hemos alcanzado una era de matanza liderada por asesinos racionales. Me siento mal por los soldados de la Alianza de la Información por haber sido enviados por alguien así…”

“Esos argumentos no tienen sentido si no ganamos primero.” “¡Tienes razón maldita sea!”
La sombría sala sin ventanas de la división de simulación electrónica era una cosa, pero afuera era un día soleado. Y aun así Heivia se quejó en cuanto abrió la puerta.

Ellos no podían ver.

Una cortina de humo química de color rosa oscurecía su visión. Ellos ni siquiera podían ver la crujiente roca volcánica que parecía chocolate debajo de sus pies.

“¡¡Ugh, cough!! Esto es horrible. ¡¡Cuidado con el ataque enemigo y el fuego amigo!!” “Me lloran los ojos…” murmuró la Princesa.
Todo terminaría si la perdía de vista, así que Quenser sujeto firmemente su mano. “Entonces, ¿qué se supone que hagamos?” preguntó él.
“Toma la cabeza de la Princesa y haz que se agache. ¡No dejes que la cabeza de ese VIP se eleve más que la cabeza de nuestro ya-sabes-qué!”

El enemigo no parecía estar uniformemente extendido por toda la isla. Ellos podían escuchar disparos desde una corta distancia. Y la cortina de humo no parecía haber sido disparada contra ellos en particular. Esta simplemente había sido traída aquí por el viento.

“Esta base de atún es básicamente la mansión de un noble, ¿cierto? ¿Y una nación enemiga está invadiendo seriamente y disparando armas? Si Sir Bloodrics tuviera mal genio, esto provocaría un incidente internacional…”

“¡La guerra ya ha comenzado, idiota! Y parece que lo peor está sucediendo en el cuartel de detención donde tenemos a los prisioneros de guerra. Esto no es al azar. Ellos conocen el diseño del lugar.”

Myonri condujo un camión militar desde el frente del edificio.

Incluso si la cortina de humo solo había sido traída por el viento, ellos apenas podían ver más. Quenser abrió la puerta trasera, empujo el pequeño trasero de la Princesa para ayudarla a entrar y después se subió tras ella. Heivia rodeo el camión para subirse por el lado del pasajero y entonces chasqueó su lengua.

“¡¡Maldición, si iba a operar la ametralladora pesada en el techo, debería haber subido por la parte de atrás!!”

La Princesa inclinó su cabeza ante eso. “Yo podría ser la artillera.”
“¡Quenser, puedes toquetearla por esta vez! ¡Solo detén a la Princesa! ¿¡En qué mundo asomas la cabeza de tu VIP por el techo!?”

“¡No tenemos tiempo, así que me voy con o sin ustedes!”

Con una visibilidad casi nula, Myonri apretó sus dientes y comenzó a conducir.

A menos de diez metros de distancia, lo que solo pudo haber sido una silueta humana fue enviado volando por el parachoques. Myonri gritó y comenzó a frenar, pero Heivia golpeó su cabeza desde el asiento del pasajero.

“¡Ese era un uniforme de la Alianza de la Información, así que uno menos! ¡¡Sigue adelante!!”

El viaje dependía completamente de la suerte. Todas las ventanas estaban cubiertas con paredes de color rosa, por lo que era fácil perder el sentido de la dirección. Ellos tenían que determinar la dirección por la brújula en su mano en lugar del sol en el cielo.

“Pero no confíes demasiado en eso, Myonri. Esta es una isla artificial hecha de roca volcánica, por lo que está llena de metal. Eso puede interferir con el geomagnetismo, por lo que la aguja puede cambiar de dirección.”

“¿¡Puede alguien con dos manos libres manejar la navegación!?”

“Ese soldado al que acabas de golpear llevaba un barril y cables.” Quenser tenía la habilidad de no escuchar nada que no quería oír. “Ellos trajeron ingenieros de combate especializados en explosivos como yo. Y la Nueva Isla del Caribe se creó reuniendo magma utilizando terremotos artificiales

provocados por una tonelada de explosivos, ¿cierto?”

“¿¡Estás bromeando!? ¡Si hay una erupción ahora, no tendremos a dónde correr!”

La conversación del dúo idiota parecía haber inspirado suficiente miedo en Myonri como para tener una especie de despertar negativo.

Mientras conducía a través de la gruesa cortina de humo, ella usó sus instintos para localizar siluetas y atropelló a varios soldados enemigos seguidos.

La Princesa dirigió sus ojos inexpresivos por la ventana, que parecía cubierta de algodón de azúcar, y escuchó los disparos que provenían principalmente de una sola dirección.

“No hay vacilación en sus movimientos… ¿Acaso tienen un dron volando por encima como apoyo?”

“¿En esta cortina de humo? Ellos lo configuraron, entonces, ¿cómo están diferenciando a amigo de enemigo?”

“¿Cómo debería saberlo?” dijo Heivia. “Tal vez tengan marcadores infrarrojos en todos sus aliados. Sin embargo, no tenemos tiempo para revisar uno de sus cadáveres. ¡Lograr que la Princesa aborde su Object es lo primero!”

Algunas explosiones fuertes resonaron. Estas venían de su destino.
“El hangar del Object está bajo ataque,” dijo la Princesa.

“El reactor permanece activo incluso cuando está en modo de espera, ¿cierto? Si entran y se meten con el reactor, toda esta isla podría ser borrada del mapa…”

“Eso sería terrible, pero ni siquiera una bomba nuclear puede destruir el Baby Magnum, por lo que dudo que puedan abrirlo tan fácilmente. ¡¡Entremos allí antes de que perdamos nuestro punto de apoyo!!”

La cortina de humo era realmente la peor.

Myonri estrelló el camión no a través de la entrada abierta de la puerta principal, sino a través de una pared completamente normal y sin relación alguna.

La parrilla del motor fue aplastada como una lata vacía y el trasero de Quenser se levantó de su asiento y termino dándole un beso bastante contundente al reposacabezas del asiento del conductor.

“¿¡Bwah!?”

“Quenser, idiota. Se supone que debes actuar como el cojín de carne de la Princesa en momentos como este.”

Myonri intentó cambiar a marcha atrás y retroceder, pero era inútil. “Maldición. Me están ardiendo los ojos otra vez. ¡¡Prepárense!!”
Heivia colocó una mano sobre el hombro de Myonri como señal y entonces salió por la puerta del lado del pasajero. Quenser sujeto los delgados hombros de la Princesa y ambos saltaron del asiento trasero hacia el áspero suelo negro.

El sonido de los disparos golpeó todo su cuerpo en lugar de solo sus tímpanos. “Está cerca,” dijo la Princesa. “Ese tiroteo viene de adentro.”
Quenser miró a su alrededor y se movió con tanto nerviosismo que no estaba claro quién estaba protegiendo a quién.

“Esto es malo. Esos son definitivamente los sonidos de la guerra. Realmente podría morir aquí.”

“Quenser, ¿siquiera por qué viniste a los países campo de batalla?” dijo Heivia.

Ellos se estaban ahogando con la cortina de humo, pero no tenían más opción que seguir adelante.

Quenser, Heivia y Myonri rodearon a la Princesa en un solo grupo mientras las patatas se movían a lo largo de la pared gigante del hangar. Ellos se encontraron con una entrada de tamaño humano a un lado.

“El Armagedón está en marcha allí. Quenser, toma un arma por si acaso.”

Mientras se presionaba contra la pared, Heivia arrojó su arma magnum, pero no fue su horrible amigo quien la atrapó. La Princesa extendió su mano y la agarró primero.

“Estoy preocupada por la anciana,” dijo la chica inexpresiva.

Heivia y Myonri no estaban seguros de qué hacer cuando ella inmediatamente comenzó a apuntar el arma, pero ellos tenían que perseguirla de todos modos.

La mencionada anciana debió haberse dado cuenta de que habían llegado refuerzos porque su voz familiar los alcanzó desde lo alto del andamio.

“¡Cuidado con las granadas de 25mm! ¡¡Ellos las disparan en rápida sucesión y son armas
inteligentes!!”

“¿Estás bromeando?” murmuró Heivia en estado de shock mientras los cuatro se escondían detrás de varios paneles del blindaje de cebolla de repuesto apilados hasta la altura de la cintura.

Con las armas inteligentes, se acababa el juego una vez que la mira controlada electrónicamente los localizaba. Las granadas alterarían su trayectoria en pleno vuelo para darles con precisión. Y esconderse detrás de una cubierta no sería suficiente para escapar. Si huían detrás de cualquier tipo de escudo, el enemigo solo tenía que apuntar en algún lugar más allá de la cubierta para que la metralla hiciera daño letal a todo lo que estaba detrás del escudo. Si fueran obligados a dejar su escudo por las granadas y entonces atacados con balas de rifle, ellos nunca se recuperarían.

Pero eso también les dijo algo.

“(¿Cómo están conectados el lanzagranadas y la granada? Ellos están enviando señales de interferencia por todo el lugar y la luz infrarroja no funcionaría bien con este calor. Y si esta cortina de humo química bloquea todo tipo de luz, todo, desde infrarrojo hasta ultravioleta, sería
sospechoso. En ese caso…)”

“¡Las granadas se acercan! ¡¡Agáchense y protejan su cabeza!!”

“Kh.”

Al igual que con las granadas de mano, el estándar era atacar desde dos lugares a la vez. Incluso si se encargaban de un atacante, la otra explosión los alcanzaría.
Mientras Heivia y Myonri se cubrían la cabeza con sus manos, solo Quenser hizo algo extraño. Él abrió la puerta de un hidrante para incendios cercano, sacó la gruesa manguera y apuntó la boquilla hacia los soldados de la Alianza de la Información.

Él los roció en un ángulo algo amplio al girar el anillo de metal que rodeaba la boquilla y sostuvo con fuerza la inquietante manguera en su lugar mientras salía el agua a alta presión.

Fue precisamente cuando los cilindros de 25mm volaron en arcos parabólicos, pero pronto estos giraron en la dirección equivocada. El ruido explosivo y las ondas de impacto golpearon sus tímpanos, pero el grupo de Quenser resultó ileso.

“Wow…”

“Con un roció de ángulo amplio, se parece mucho a un reflector, por lo que controlarlo no es difícil. Aún más importante, Heivia, tú hazte cargo de la manguera. No te acerques demasiado y hagas que te disparen, ¿okay?”

“¡Espera! ¿¡Qué vas a hacer!?”

“Voy a hacer algunas chispas con la sierra circular en el área de trabajo de allí, así que cúbreme.”

“¿¡Por qué!? ¿¡Estás haciendo algún tipo de arma secreta!?”

“Ellos no están usando radio o infrarrojo. Pero la voz de la anciana nos llegó fuerte y clara. Es ultrasonido. Ellos están enviando sus señales utilizando ondas de sonido más allá del rango audible.”

Heivia parecía sorprendido, así que Quenser aclaro su punto.

“Por eso también se molestaron con un apagón en el medio del día. Ellos querían apagar cualquier

tipo de altavoz. Pero las herramientas eléctricas de mano generalmente funcionan con baterías. ¡Si hago un montón de ruido raspando metal, el control inteligente de sus granadas y sus marcadores que evitan el fuego amigo ya no funcionarán!”

Ellos no tenían tiempo de dudar.